La sexta visita de Pep Guardiola al Santiago Bernabéu en Liga de Campeones desplegó tanta tensión como las anteriores. O más. El de Santpedor es uno de los grandes enemigos futbolísticos de la afición de Chamartín, que le dedicó cánticos tanto en la llegada del autobús del Manchester City como durante el encuentro, plagado de intensidad y goles. El mejor partido de la temporada en el fútbol europeo resultó en un empate extraordinario para el espectador neutral y sufrido para el madridista, que remontó y se vio remontado.
El Madrid tenía en su mano infligirle a Guardiola su tercera derrota en el feudo blanco en competición continental, la primera del City desde el 6 de diciembre, pero los goles de Foden y Gvardiol mantuvieron el idilio del de Santpedor con la casa blanca.
"Es el Bernabéu, 'my friend'", le respondió el entrenador a un periodista inglés que le preguntó si se sentía mal con el resultado. "Eres inglés y no lo conoces como yo. Créeme que este estadio es especial, piensas que el partido está terminado y no, nunca está terminado", admitió en sala de prensa.
Un 50% de éxito en la Castellana para Guardiola, que venció con el Barça en las semis de 2011 y con el City en los octavos de 2020. El año pasado, en su última pisada al césped del Bernabéu, se llevó un empate que impulsó la goleada del Etihad. Precisamente el césped fue protagonista de una de las peticiones de Guardiola a Florentino. "Se lo he pedido, sí. Me han dicho mis jugadores que estaba mal, pero que no se lo tomen mal. El campo es espectacular, los vestuarios, todo... Es una obra espectacular. Pero el Madrid siempre ha tenido un césped increíble, hoy no estaba así, pero seguro que lo arreglarán".
El nuevo «clásico» del fútbol europeo, como así lo definió el propio entrenador en la previa, dejó el desenlace de la batalla de esta temporada para la vuelta en Manchester, pero reflejó la igualdad reinante entre ambos equipos y lo mucho que se conocen. «Son cuatro eliminatorias desde 2020. Ya nos conocemos muy bien», admitió Rodri el lunes.
El tempranero gol de Bernardo Silva metió el miedo en el cuerpo al Bernabéu, con casi todos los aficionados de blanco a petición de los jugadores, que enviaron mensajes en sus redes sociales durante los días previos. Pero los tantos de Camavinga y Rodrygo alentaron al público y desquiciaron a Guardiola, enfadado por las pérdidas de balón de su equipo.
El de Santpedor no pudo contar con Walker ni Aké, ambos lesionados, y a última hora vio cómo De Bruyne se encontró indispuesto para disputar el duelo. «Hemos tenido una reunión y no se encontraba bien. Creo que ha vomitado en el vestuario», explicó antes del partido. La baja del belga se unió a la de Ederson, portero titular que estaba listo para el choque pero al que Guardiola decidió dejar en el banquillo por Ortega.
Las bajas le dejaron sin opciones. Escoró al lateral a Akanji y organizó su defensa con Stones, Ruben Dias y Gvardiol. En el medio, sin De Bruyne, apostó por Kovacic para acompañar a Rodri, Grealish, Silva y Foden, con Haaland arriba.
La remontada del Madrid le hizo cambiar de idea y elevó a Stones al centro del campo para ganar superioridad, dejando sólo tres centrales. Tuvo la posesión, y aunque el Madrid le hizo daño a la contra, el talento de los suyos le puso por delante antes de que Valverde igualara el duelo.
La tensión del partido, con el Madrid protestando varias faltas no pitadas, no le encontró como protagonista, aunque en algunas ocasiones levantó las manos en señal de indiferencia. El nuevo «clásico» no es como los que vivía de azulgrana, pero son clásicos.
El nombre de Harry Kane se manejaba desde hace tiempo en el horizonte de los mejores clubs de Europa. Goleador incombustible, el delantero de la selección inglesa hubo de esperar hasta el pasado curso para salir del Tottenham Hotspur, un equipo que se le había quedado pequeño. Deseoso de ganar títulos vedados en Londres, al carecer los spurs del músculo deportivo y financiero para hacer frente a los grandes de la Premier y del continente, fue traspasado al Bayern Munich hasta 2027, a cambio de más de cien millones de euros. Se marchaba a un equipo que había ganado las diez últimas Bundesligas y que se presentaba como uno de los candidatos a pelear un curso más por la Liga de Campeones.
Kane viene haciendo bien su trabajo desde que llegó a Alemania. Ha marcado 38 goles, seis de ellos en la competición continental. A sus 30 años mantiene clase e instinto. Muy del gusto de Pep Guardiola y en su momento también en la órbita del Real Madrid, terminó en un Bayern que pretende pujar por su sexta Copa de Europa, seis años después de hacerse con el título por última vez.
Antes del encuentro de ida de cuartos de final ante el Arsenal, sus opciones están intactas, pero con lo que seguramente no contaban Kane ni los seguidores del conjunto bávaro era con depender exclusivamente de la Liga de Campeones para no quedarse sin títulos por primera vez desde el curso 2011/12. Con la derrota por 3-2 ante el Heidenheim. el Bayern está a 16 puntos del Bayer Leverkusen de Xabi Alonso.
En busca de entrenador
La caída por 3-0 ante el Leipzig en la final de la Supercopa alemana y la eliminación frente al Saarbrücken, de tercera división, en la segunda ronda de la Copa, han dejado al Bayern suspirando casi de manera desesperada por una redención en Europa.
Thomas Tuchel de momento no ha cumplido las expectativas como relevo de Julian Nagelsmann y dejará el banquillo en junio, al margen de lo que suceda de aquí a entonces. Xabi Alonso, que era la prioridad como relevo, ya ha anunciado que seguirá en Leverkusen al menos una semana más. La búsqueda de un entrenador para la próxima temporada es un asunto que eleva la inquietud. Ante la pregunta de los periodistas tras el partido ante el Heidenheim, el director técnico, Max Eberl reaccionó así: «Me importa una mierda la búsqueda de un entrenador. Ahora todo se centra en el partido contra el Arsenal».
Líder de la Premier League, con un punto más que el Liverpool y el Manchester City, el conjunto que entrena Mikel Arteta será un adversario de cuidado. En la última jornada del torneo doméstico venció 0-3 al Brighton para reafirmar sus opciones para volver a gana la liga por primera vez en dos décadas.
14 goles a los 'gunners'
Muchas de las opciones alemanas volverán a pasar por el acierto de Kane, extramotivado ante un rival al que ha hecho daño como a pocos. A lo largo de su trayectoria en Inglaterra, suma 14 goles ante el Arsenal, feracidad sólo superada por los 20 que logró frente al Leicester y los 16 contra el Everton.
El Bayern se desenvolvió con holgura en la fase de grupos y sólo ha perdido un encuentro a lo largo de la presente edición de la Liga de Campeones, en la ida de octavos, 1-0 frente al Lazio, revertida con el 3-0 del Allianz Arena. El Arsenal también dominó en la primera fase, antes de verse abocado a los penaltis para dejar atrás al Oporto, gracias a la actuación del guardameta español David Raya.
La sala de prensa del Santiago Bernabéu estaba abarrotada para recibir a uno de los hombres que más veces la había visitado. Pep Guardiola, que decidió que el entrenamiento del Manchester City previo a la ida de Champions contra el Madrid se iba a realizar en tierras inglesas y no en el césped de Chamartín, lideró la expedición 'citizen' que aterrizó en España a las siete menos cuarto de la tarde.
La rueda de prensa estaba marcada en el horario de la UEFA para las 19:15 de la tarde, pero no fue hasta las 19:45, con media hora de retraso, cuando Rodri y Guardiola aparecieron por la puerta de la sala. Era demasiado optimista pensar que el autobús podría cruzar la ciudad en hora punta en apenas unos minutos.
Hablaron el entrenador y un futbolista español. Suena lógico. Y lo es, pero tiene su parte de superstición. El año pasado, el City decidió cambiar el hotel que utilizó el equipo en la visita al Bernabéu en la temporada 21-22, con aquella remontada histórica en el descuento y en la prórroga. Antes de la ida de semifinales, durmieron en el Hotel Villamagna y Rodri fue el elegido para hablar ante la prensa. Salió bien y este año han querido repetir. Mismo hotel, mismo portavoz.
"Conocemos a Jude"
"No pensamos mucho en el año pasado, sabemos que es un Madrid diferente, juegan diferente y son los favoritos siempre", aseguró el centrocampista español, que no quiso darle mucha importancia a la hipotética ventaja que puede tener el Madrid por llevar ocho días sin jugar ningún partido. "Estamos en la pelea por la Premier y no descansamos. Ellos tenían el parón por la final de Copa y han podido descansar, quizás es algo de ventaja. Pero no nos preocupa".
El ex del Villarreal y el Atlético elogió a Bellingham y Kroos. "Conocemos a Jude porque nos cruzamos con el Dortmund un par de veces. No me gusta centrarme solo en un jugador. Ahora con él tienen más control del juego, han cambiado la manera de jugar, llegan más desde segunda línea... Kroos es el metrónomo".
"Lo liberador es ganar la Champions"
Minutos después apareció Guardiola, con gesto serio y argumentario relajado. "Es casi imposible ganar al Madrid dos veces seguidas", admitió, en referencia al 4-0 del año pasado en Manchester. "Hace dos temporadas perdimos, el año pasado ganamos. Es un clásico. Tenemos una ventaja con la vuelta en casa, pero tenemos que jugar mañana. Veremos diferentes partidos en el mismo partido, ellos tienen la potencia que tienen en transiciones, con Bellingham, Vinicius, Rodrygo...".
Cuestionado sobre ese 4-0, el técnico catalán aseguró que su equipo fue "mucho mejor" que el Madrid. "Dicen que el Madrid lo hizo muy mal, pero no lo creo, nosotros lo hicimos muy bien. Es fútbol. Creo que somos equipos de un nivel muy parecido", añadió, y reconoció que "lo liberador es ganar la Champions, no ganar al Madrid".
El técnico quiso elogiar a Ancelotti: "Usted no sabe lo difícil que es ser un 'buen gestor', como dicen de él. Ser estable, gestionar jugadores, no solo la táctica, millones de factores. Jamás consideraré que Carlo no es un gran entrenador táctico. Puso a Pirlo de mediocentro, a Kroos en un perfil más bajo, encontró la posición ideal de Bellingham... Que le quede claro que en Manchester tenemos una opinión muy buena sobre él", y ya adelantó que el italiano habrá buscado "alternativas" al 4-0. "Será diferente, seguro. Carlo habrá buscado alternativas y nosotros hemos de cambiar algo, porque nos faltan piezas en defensa. El partido será distinto. Intentaremos especular lo menos posible".
Sobre su futuro, admitió que es "especial" llegar al Bernabéu pero que cada año es más "rutina" al repetir tantas veces. "Me gusta este negocio, me lo paso bien. Me pagan bien y me lo paso bien. Me gusta la competición, me gusta venir aquí, intentar seguir adelante... El día que no, me iré a casa".
El Arsenal arañó en el Etihad Stadium un punto que puede resultar decisivo en su pelea por el título de la Premier, pero que de momento favorece al Liverpool, nuevo líder en solitario tras su triunfo ante el Brighton. El 72% de la posesión del City se tradujo en un raquítico disparo a portería, estadística muy poco habitual en el equipo de Pep Guardiola. Frustrado por el orden defensivo visitante, el vigente campeón nunca encontró los caminos hacia la portería de David Raya. [Narración y estadísticas (0-0)]
El recuerdo del amargo 4-1 encajado hace un año, que frustró sus opciones de ser campeón, pareció guiar a los gunners. Casi en las antípodas de su habitual fútbol ofensivo, el equipo de Mikel Arteta se centró desde el pitido inicial en neutralizar a su rival. Como el City tampoco supo desplegar su mejor juego, lo que se preveía como un formidable espectáculo devino en aburrimiento.
El City perdió además en el minuto 27 a Nathan Ake, uno de los pilares de su defensa, víctima de un problema en el gemelo. Otro revés para Guardiola, que tampoco había podido derriba el muro del Arsenal en la primera vuelta. En la última década, sólo Borussia Monchengladbach (2015) Manchester United (2021) y Crystal Palace (2022) habían conseguido cerrar sus dos cruces ligueros sin encajar ante el técnico de Santpedor.
Posible penalti sobre Haaland
"Fue una prueba realmente dura para nosotros. Queríamos ganar, pero cuando no puedes hacerlo, al menos debes no perder", analizó Arteta. A juicio del donostiarra, el Arsenal había gozado de las mejores ocasiones de gol, aunque ninguna de serio compromiso para Stefan Ortega, sustituto del lesionado Ederson. La más peligrosa, tras el descanso, la sirvió Gabriel Jesus hacia Bukayo Saka, que no alcanzó a rematar por centímetros.
En el tramo final, la hinchada del City reclamó un penalti de William Saliba sobre Erling Haaland por una pugna en el área que Anthony Taylor pasó por alto. Únicamente durante esos últimos minutos, incluidos los cinco del añadido, pareció el City soltarse la rienda. Pero el pitido final terminó llenando de gozo a la afición del Liverpool, que un par de horas antes había cerrado su victoria en Anfield.
El conjunto de Jurgen Klopp supo sobreponerse al madrugador 0-1 de Danny Welbeck para prolongar su magnífica racha en la Premier, donde sólo ha dejado escapar un empate (ante el City) en las seis últimas jornadas. Los goles de Luis Díaz y Mo Salah, tras una maravillosa asistencia de Alexis Mac Allister, evidenciaron la superioridad local (2-1). Con 10 partidos por delante, los reds cuentan cib dos puntos de magen sobre el Arsenal y tres ante el City.
Ya conocemos las eliminatorias de cuartos de final de la Champions League. Real Madrid - Manchester City, PSG - Barcelona, Atlético - Dortmund y Arsenal - Bayern. Aquí desgranamos las virtudes y defectos de los rivales de los españoles.
Madrid-City: un ogro casi inmejorable
El pasado verano, feliz tras el éxtasis de su primera Liga de Campeones, el Manchester City salió al mercado y se gastó 241 millones. Así, como si necesitara darle la vuelta a un equipo en reconstrucción, como si no tuviera ya la mejor, o una de las dos mejores, plantillas de toda Europa. Llegaron el defensa croata Josko Gvardiol por 90 millones, el delantero portugués Matheus Nunes por 62, el centrocampista belga Jeremy Doku por 60 y el centrocampista croata Mateo Kovacic por 29. Y ahora, ya en marzo, ninguno de ellos está entre los diez futbolistas con más minutos de la plantilla de Pep Guardiola esta temporada.
Ese resumen de los fichajes, su coste y su utilización habla a la perfección sobre los escasos ajustes que ha necesitado hacer el técnico de Santpedor en los últimos meses. Su Manchester City, el mismo Manchester City que le metió cuatro goles al Real Madrid en la vuelta de las semifinales del año pasado, sigue siendo una máquina de jugar al fútbol con las mismas piezas.
Ahí está Erling Haaland, con 29 goles en 33 partidos, en un curso lejos de números históricos pero cerca de la voracidad anotadora que ha mostrado siempre. Ahí está Kevin De Bruyne, de vuelta de una lesión que sólo le ha permitido disputar 700 minutos, pero que le hace llegar fresco al cruce con el Madrid, al que ya marcó en el Bernabéu el año pasado. Y ahí está Rodri, eje del campeón, con más de 3.000 minutos, y 7 goles, esta campaña.
Todo pasa por las botas del español, quizás más que nunca, en un equipo que sufrió un pequeño bache en la Premier al inicio de curso y ahora se jugará la liga en primavera contra el Arsenal y el Liverpool, de los que les separa un sólo punto. Puede ser que ahí, en la necesidad de seguir compitiendo el torneo doméstico, surja una pequeña ventaja para el Madrid, líder de la Liga con siete puntos de ventaja sobre el Girona.
Pero la realidad es que este City tiene argumentos de sobra para competir en todas las competiciones. Prueba de ello es el triplete del curso pasado: Champions, Premier y FA Cup. De momento, y a pesar de las dificultades, este año sigue vivo en las tres. Y lo hace, en parte, gracias a un fondo de armario que asusta. El portero Ederson se lesionó ante el Liverpool y es duda para la eliminatoria, siendo el único lunar de cara a la lista contra el Madrid. Mientras, en defensa Walker, Dias, Aké, Akanji, Gvardiol y Stones se reparten los tres puestos defensivos que está usando Guardiola en sus alineaciones. Sí, sólo tres. El técnico está metiendo ahora a Stones como segundo mediocentro, al lado de Rodri, pero sus laterales ya son centrocampistas, no defensas.
Foden, Julián Álvarez y Doku, además de Grealish, ahora lesionado, comparten rol en las bandas, dejando dos puestos en la mediapunta que siempre, salvo lesión o rotaciones, son para De Bruyne y Bernardo Silva. El belga marcó en la ida contra el Madrid y el portugués anotó el primero de la vuelta, iniciando la goleada. Son los creadores del miedo: las arrancadas y remates de Haaland, que viene de marcar 5 goles en un partido de FA Cup ante el Luton y acumula 7 en los últimos cuatro encuentros. Estuvo un mes fuera por una lesión en el pie, pero ya está de nuevo en forma.
Así es el club que suma mayor valor de mercado en su plantilla: 1.270 millones. Un ogro casi inmejorable que volverá a medir el nivel del Real Madrid.
PSG-Barça: los jóvenes y Luis Enrique
YOAN VALATEFE
Hablar del PSG, hasta el próximo 30 de junio, es hablar, cómo no, de Kylian Mbappé. Pero el conjunto que entrena Luis Enrique es también mucho más que el talentoso delantero francés. El ex seleccionador y ex técnico del Barça ha sabido apostar por la incorporación de talentos jóvenes y ha encontrado también en otro ex azulgrana, Ousmane Dembélé, al mejor escudero para su gran estrella. El Mosquito parece haberse librado por fin de la plaga de lesiones que minaron su etapa barcelonista y acumula 12 asistencias en los 32 partidos que ha jugado esta temporada.
Menos presencia, en cambio, ha tenido un Marco Asensio que no acaba de convencer al asturiano y que, tras estar dos meses y medio de baja por una lesión en el pie, ha vuelto ahora al dique seco por unos problemas musculares.
En la zaga, el brasileño Lucas Beraldo, quien llegó al club en el pasado mercado de invierno, se ha convertido en una pieza fundamental a pesar de que sólo tiene 20 años. Su progresión ha sido fulgurante desde que debutó en 2022 con el Sao Paulo. En la banda derecha, mientras, cuenta con la presencia de un Achraf Hakimi que combina sus cualidades defensivas con una nada desdeñable aportación en ataque. Bajo los palos, cómo no, el titular indiscutible es el italiano Gianluigi Donnarumma, a pesar de que su juego con los pies no es en absoluto todo lo bueno que desearía su técnico.
De ahí, precisamente, que apostara por incorporar al ex azulgrana Arnau Tenas el verano pasado, pero el arquero, formado en las categorías inferiores del Barça, sólo ha jugado tres partidos este curso. Está en periodo de aprendizaje.
En el centro del campo, mientras, el equipo parisino cuenta también con otro talento joven que ha firmado un rápido ascenso hacia la élite: Warren Zaïre-Emery. Este futbolista, que prácticamente acaba de cumplir los 18 años, fue el debutante más joven en la historia de la entidad al estrenarse con el PSG con tan sólo 16 años y cinco meses y ya ha jugado también con la selección francesa. En cuanto a otro centrocampista bien conocido por la afición española, Fabián Ruiz, su presencia en la medular ha sido un tanto intermitente y, en los dos últimos duelos del equipo francés en la Ligue1, ni siquiera ha tenido minutos.
Un Dortmund a la deriva
INA FASSBENDERAFP
Desde 2015, durante la última temporada de Jürgen Klopp, el Borussia Dortmund no vivía una situación tan convulsa. No sólo sobre la hierba, donde el equipo muestra una irregularidad desesperante, sino también en los despachos. Con el entrenador y el director ejecutivo en la puerta de salida, aquel Dortmund modélico de hace una década navega hoy a la deriva. A 20 puntos del liderato en la Bundesliga, el único objetivo plausible hasta fin de curso será conseguir un billete para la próxima Champions. Y asegurar así la supervivencia económica. Si no cumple con esta premisa, el peligro de convertirse en un equipo de la zona media parece más que real en la cuenca del Ruhr.
Ayer, tras definir al Atlético como "un pequeño monstruo de las eliminatorias", Edin Terzic tuvo que hacer frente a alguna pregunta maliciosa en torno a la ausencia de sus mejores futbolistas en la selección alemana. Julian Brandt, Mats Hummels, Niklas Süle, Emre Can y Nico Schlotterbeck no cuentan para Julian Nagelsmann, que sólo ha convocado a Niclas Füllkrug de cara a los amistosos ante Francia y Países Bajos. En realidad, los periodistas no sólo pretendían analizar la decadencia de este Borussia, sino abordar otra cuestión de fondo. ¿Cómo es posible que el Dortmund quiera contratar a Nagelsmann como relevo de Terzic si ni él mismo confía en estos jugadores para la Eurocopa?
A esa cuestión debería responder Hans-Joachim Watzke, uno de los CEO más longevos del fútbol europeo, con 23 temporadas en el cargo. Sin embargo, el ejecutivo que hizo explotar a Erling Haaland o Jude Bellingham ya ha anunciado su marcha en 2025. Lo más probable, que a su baja se sume la de Matthias Sammer -histórico capitán del equipo campeón en 1997- que venía ejerciendo como consejero durante desde 2018. Sin ellos, la reconstrucción se antoja aún más incierta.
Casi 10 meses después de aquel 2-2 ante el Mainz, que le apartó del título de la Bundesliga en la última jornada, las críticas contra Terzic siguen marcando el día a día del Dortmund. Al mal juego del equipo ha habido que sumar dos notorias decepciones. Gio Reyna, llamado a liderar el proyecto, tuvo que salir cedido hace un mes al Nottingham Forest. Y el goleador Sebastian Haller sólo disputó cuatro partidos como titular en verano antes de perderse los dos últimos meses por una lesión de tobillo.
Las derrotas ligueras ante Bayern, Stuttgart o Leipzig y la eliminación copera frente al conjunto de Sebastian Hoeness mermaron la ilusión de la ruidosa Südtribüne. La llegada en enero de Jadon Sancho, sumado a las pinceladas de calidad de Hummels y Brandt, bastaron ante el PSV. Pero este Dortmund, donde el único futbolista que ha brillado por encima de la media es Gregor Kobel, su portero, tiene aún demasiadas cosas que mejorar para sorprender al Atlético.
Antonio AgredanoActualizado Sábado,
20
enero
2024
-
21:28El fútbol también puede explicarse con ausencias. Sergi Altimira Clavell (Cardedeu, Barcelona; 2001)...