Federer se despide de Nadal en las redes sociales: "Juntabas tus botellas como soldaditos de plomo"

Federer se despide de Nadal en las redes sociales: “Juntabas tus botellas como soldaditos de plomo”

Al igual que sucediera hace algo más de dos años, cuando fue el suizo quien recibió los parabienes de Nadal en una carta a través de las redes sociales, Roger Federer ha querido responder, con la misma elegancia que le distinguió en la cancha y un punto algo edulcorado, en el adiós de quien fue su máximo rival.

"Empecemos por lo obvio: me ganaste. Mucho. Más de lo que yo pude ganarte a ti. Me desafiaste de maneras que nadie más podría. En tierra batida, sentí que estaba entrando en el patio trasero de tu casa y me hiciste trabajar más duro de lo que jamás pensé que podría hacerlo solo para mantenerme firme. Me hiciste reimaginar mi juego, llegando incluso al punto de cambiar el tamaño de cabeza de mi raqueta, esperando obtener alguna ventaja", escribe el ganado de 20 títulos del Grand Slam.

Sabido es que ambos se retroalimentaron durante su hermosa y prolongada rivalidad, que alumbró 40 partidos, 24 con victoria del español, aunque el último, en las semifinales de Wimbledon de 2019, cayese del lado de Federer. Nadal hizo mejor al ocho veces campeón de Wimbledon y Federer también hizo crecer al zurdo que le venció por primera vez en Miami, en 2004, y le llevó a los cinco sets en la final del mismo torneo un año más tarde.

"Y sabes qué, Rafa, me has hecho disfrutar del juego todavía más. Vale, quizá no al principio. Después del Abierto de Australia de 2004, llegué al número uno del ranking por primera vez. Pensé que estaba en la cima del mundo. Y lo estaba, hasta dos meses después, cuando entraste en la cancha de Miami con tu camiseta roja sin mangas, mostrando esos bíceps, y me ganaste de manera convincente. Todo ese rumor que había estado escuchando sobre ti, sobre este increíble jugador joven de Mallorca, un talento generacional, que probablemente ganaría un Grand Slam algún día, no era solo publicidad".

Nadal irrumpió en un momento en el que no se adivinaba oposición a Federer, que dominaba el circuito con absoluta autoridad. Las semifinales de Roland Garros, en 2005, fueron un punto de inflexión. Aunque el español llegaba ya avalado por su formidable paso por los torneos de arcilla, quedaba por ver si sería capaz de derribar a Federer. Y lo hizo.

"Ambos estábamos al principio de nuestro viaje y lo acabamos haciendo juntos. Veinte años después, Rafa, tengo que decirte: ¡Qué carrera tan increíble has tenido! Incluyendo 14 Roland Garros. ¡Histórico! Has hecho sentir orgullosa a España... Has hecho sentir orgulloso a todo el mundo del tenis", agrega Federer.

Un espectáculo inigualable

La serie se prolongó durante tres lustros y cada uno de sus enfrentamientos era celebrado como uno de los mejores espectáculos del deporte, por su contraste de personalidades y estilos, por el juego limpio que siempre acompañó a sus duelos, que tuvieron en la final de Wimbledon de 2008 su más categórica manifestación.

"Todavía te agradezco que me hayas invitado a Mallorca para ayudar a lanzar la Rafa Nadal Academy en 2016. En realidad, me invité yo mismo. Sabía que eras demasiado educado como para insistir en que estuviera allí, pero no quería perdérmelo. Siempre has sido un modelo a seguir para los niños de todo el mundo y Mirka y yo estamos muy contentos de que nuestros hijos haya entrenado en tus academias", agrega el ex número 1 del mundo, que muestra su gratitud por la presencia de Nadal en la Laver Cup donde él dejó el tenis y evoca las lágrimas compartidas.

"No soy una persona muy supersticiosa, pero tú lo llevaste al siguiente nivel. Todos su proceso. Todos esos rituales. Juntar tus botellas de agua como si fueran soldados de juguete en formación, arreglarte el pelo, ajustar tu ropa interior... Todo eso con la máxima intensidad. En secreto, me encantaba todo el asunto. Porque era tan único, tan tú", detalla, entrando en el terreno de lo más anecdótico.

Málaga espera su presencia en el Martín Carpena para participar presencialmente en la despedida de Nadal.

Ni Alcaraz ni Sinner: la Davis es patrimonio de Nadal

Ni Alcaraz ni Sinner: la Davis es patrimonio de Nadal

Poco importa que al equipo italiano, defensor del título, vaya a liderarlo Jannik Sinner, el número 1 del mundo, brillante ganador de las ATP Finals, campeón también en el Abierto de Australia y en el US Open. En segundo plano queda también Carlos Alcaraz, poseedor de cuatro grandes, entre ellos Roland Garros y Wimbledon esta misma temporada, y que hace tiempo conquistó el corazón de los aficionados. Igualmente tangencial parece, con todo el respeto para los ocho países que hasta el domingo pelearán por la Copa Davis, el puro desarrollo de una competición que, todo sea dicho, no ha acabado de afinar el tiro desde que adoptó el nuevo formato, que no logra evitar cada año sonoras renuncias, como en esta ocasión la de Alexander Zverev, segundo en el ránking.

La Davis es Nadal.

Desde que el ganador de 22 títulos del Grand Slam decidió que éste sería el último torneo de su dilatada carrera profesional buena parte del interés reside, como es lógico, en su magno protagonista. Ni siquiera importa que su presencia en la cancha no esté garantizada, pues disputó su último partido individual frente a Novak Djokovic el pasado 29 de julio, en los Juegos Olímpicos de París y dos días más tarde se despidió en dobles junto a Alcaraz, con quien comparte equipo por primera vez en esta competición, su Copa Davis, gane quien gane, tenga o no mayor cuota de influencia en el desenlace.

La despedida de Nadal ha otorgado un punto de extraordinario simbolismo a esta edición del torneo, una carga de emotividad que trasciende cualquier otra perspectiva. Roger Federer precipitó su marcha, casi sin previo aviso, en la Laver Cup el 24 de septiembre de 2022, después de 14 meses sin poder jugar por sus recurrentes problemas en la rodilla derecha. Lo hizo recién cumplidos los 41 años. Su némesis, su cordial e implacable adversario, lo hace con 38, con sólo 19 partidos disputados en el curso que fenece, siete de ellos derrotas.

A diferencia del suizo, Nadal ha podido elegir un torneo oficial, también por equipos. No anda lejos Djokovic, quien quedará como el último integrante en activo de la santísima trinidad de este deporte, de sucumbir a las garras del tiempo. A sus 37 años, el balcánico, el más laureado de las tres mayúsculas figuras que han liderado el tenis desde hace más de tres lustros, aún quiere concederse un último recorrido, medir sus fuerzas frente al azote de la nueva generación. Ausente por decisión propia en el reciente torneo de maestros, buscará prolongar su suerte en el Abierto de Australia, donde cuenta con 10 títulos.

Empujado por el destino

Hay algo de destino irremediable en el momento y el lugar elegidos por Nadal. Como reconocía su tío Toni, quien le entrenó desde la infancia hasta 2017, quien aquilató su juego y su carácter, en una entrevista con este periódico, el zurdo confiaba en que una vez más podría darse una nueva oportunidad, como había hecho a lo largo de una trayectoria sembrada de espinas, con momentos que hicieron pensar en que ya no habría vuelta atrás. Su paciencia, su coraje y su determinación le empujaron a seguir intentándolo, con éxitos tan cercanos como el título del Abierto de Australia de 2022, tras levantar dos sets adversos ante Daniil Medvedev, y el de Roland Garros meses después, imponiéndose a Casper Ruud. Pero el tiempo y el desgaste de tantas batallas libradas le acabaron conduciendo a tomar la dolorosa decisión de dejar de ejercer el oficio que ha desempeñado con una pasión inquebrantable.

Ya en 2023 tan sólo pudo disputar cuatro partidos. Fue entonces cuando, consciente de las perennes dificultades, anunció que esta temporada podría ser la última. Seguramente quiso imaginarla de otro modo, aún con combustible para desenvolverse en los grandes escenarios, con Roland Garros, donde sentó cátedra durante 14 años, como la tierra prometida para dejar su aliento postrero. Llegó a París, tras poder rodarse a duras penas en el Conde de Godó y el Masters de Madrid, pero el azar se le tornó esquivo con una primera ronda frente a Zverev. La Caja Mágica le había dispensado la única despedida oficial hasta esa fecha, una vez que anunció que ya no volvería a jugar en la capital. París le dijo adiós en un improvisado homenaje, en el que llegó a dejar la puerta abierta a un eventual regreso.

Nadal y Alcaraz, en la rueda de prensa del lunes.

Nadal y Alcaraz, en la rueda de prensa del lunes.EFE

Volvió a Francia para darse el gusto de disputar sus últimos Juegos Olímpicos. Oro individual en Pekín 2008 y en dobles, en Río 2016, al lado de Marc López, hoy miembro de su equipo, se quedó lejos de optar a las medallas. Se marcha en el torneo que le vio nacer, donde empezó a plasmar todo el catálogo de virtudes que le distinguen. Ningún jugador en activo puede presumir de los registros de Nadal en la Copa Davis. Cinco Ensaladeras, la primera en 2004, con 18 años, la última hasta la fecha en 2019, aún en plena ebullición. 29 victorias en los 30 individuales disputados. Ocho en sus 12 presencias en dobles.

Mientras algunos grandes jugadores se vieron sepultados por la presión de un torneo que entraña un plus de responsabilidad colectiva, él fue de los que supo rentabilizar ese compromiso para alcanzar su máxima expresión, sean cuales fueren las circunstancias. Quién sabe si el destino, a menudo caprichoso, no le habrá reservado un final competitivo acorde a los méritos contraídos.

De Brno a Sevilla, la explosión de Nadal en la Davis de 2004: "Feli, tu gana tu partido, que yo voy a ganar el mío"

De Brno a Sevilla, la explosión de Nadal en la Davis de 2004: “Feli, tu gana tu partido, que yo voy a ganar el mío”

En el principio fue la Copa Davis. En el final será la Copa Davis. El futuro, incluso en el caso de Rafael Nadal, que con 38 años, a más tardar este domingo, en la hipótesis más optimista, con España en busca de su séptima Ensaladera, dará un definitivo paso al costado con su raqueta, aún está por escribir. El pasado, esplendoroso, no sólo desde aquella final de Sevilla ante Estados Unidos, en diciembre de 2004, sino sugerente incluso antes, en s

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Toni Nadal: "Rafael siempre se dejó aconsejar y supo obedecer"

Toni Nadal: “Rafael siempre se dejó aconsejar y supo obedecer”

Guió a su sobrino desde la infancia hasta 2017 y forjó el tenis y el carácter del extraordinario jugador que disputará en la Copa Davis, la semana próxima, el último torneo de su vida. Toni resta méritos a su influencia y continúa fiel a un ideario próximo al estoicismo.

Badosa cae ante Swiatek y España se despide de entrada de la Billie Jean King Cup

Badosa cae ante Swiatek y España se despide de entrada de la Billie Jean King Cup

Con la derrota de Paula Badosa frente a Iga Swiatek España se despidió de entrada de la Billie Jean King Cup. Antes, Magda Linette había superado a Sara Sorribes, dejando al equipo que dirige Anabel Medina en una situación muy comprometida. Cinco veces campeona de la Copa Federación, antigua denominación de este torneo, España, que vio aplazada la serie este jueves debido a la DANA acaecida en Málaga, presentó oposición en ambos partidos, pero sin poder sumar un punto que le condujese al menos a pelear su suerte en el partido de dobles. Las jugadoras españolas lucieron en su equipación el lema "Fuerza Valencia" y un crespón negro en su camiseta. Se guardó un minuto del silencio antes del inicio del cruce.

Sin disfrutar de su mejor temporada, Swiatek, ahora número dos del mundo tras ser superada por Aryna Sabalenka, marcó distancias en el tercer parcial para certificar el pase de Polonia a cuartos de final, donde se enfrentará este sábado a la República Checa. Venció por 6-3, 6-7 (5) y 6-1, en dos horas y 38 minutos, mucho más entera que su adversaria físicamente.

En el día de su 27º cumpleaños, la española neutralizó las tres primeras pelotas de partido al resto, pero se fue con una doble falta. Swiatek agradeció el apoyo de los seguidores de su país, bulliciosos en las gradas no colmadas del Martín Carpena, y elogió el trabajo de Linette: "Es mucho más fácil saltar a la cancha con una victoria", dijo.

Su compatriota venció a Sara Sorribes por 7-6 (6), 2-6 y 6-4, en tres horas y 51 minutos. La número dos española volvió a hacer gala de la combatividad que la distingue, valor insuficiente esta vez después de dejar escapar una clara ventaja de 3-0 en el tercer parcial.

Anabel Medina recibió un homenaje en su despedida como capitana, tras siete años al frente del equipo.

Alcaraz cede ante un inspirado Humbert y prolonga su mala racha 'indoor'

Alcaraz cede ante un inspirado Humbert y prolonga su mala racha ‘indoor’

Tampoco este año será el de Carlos Alcaraz en el Masters 1000 de Paris-Bercy, un torneo esquivo no sólo para él, sino para los tenistas españoles. Únicamente David Ferrer, hoy capitán del equipo de Copa Davis, fue capaz de ganarlo, en 2014. Ugo Humbert se impuso al murciano en los octavos de final, después de dos horas y 17 minutos, en la última competición previa a las ATP Finals, que se disputarán en Turín del 10 al 18 de noviembre. Alcaraz cerrará el curso una semana después, en las Finales de la Copa Davis, donde unirá fuerzas con Rafael Nadal y con el resto del equipo español. [Narración y estadísticas (6-1, 3-6, 7-5)]

Decimoquinto del mundo, Humbert es un zurdo con buena mano, peligroso en superficies rápidas, más aún cuando cuenta con el apoyo de la grada, que no cesó de empujarle hacia una victoria particularmente grata ante el número dos del mundo. Alcaraz se enganchó tarde al partido (cuando se quiso dar cuenta, estaba 5-0 abajo en tan sólo 18 minutos) , y aunque pudo igualar a un set, cedió su servicio cuando todo parecía indicar que la resolución llegaría en el desempate del tercer parcial. Salvó la primera pelota de partido con un saque ganador, pero en el siguiente punto su revés se iría largo.

Campeón esta temporada en Marsella y Dubai, Humbert obtuvo premio a su tenis valiente, además de sacar provecho del juego irregular de su adversario, que cometió demasiados errores. Después de los triunfos en Roland Garros y Wimbledon, que ya le permiten cerrar una temporada de ensueño, y de la plata olímpica en los Juegos de París, Alcaraz no ha logrado mantener el excelente tono ofrecido entonces.

Problemas bajo techo

Su victoria en Pekín, donde se impuso a Jannik Sinner en una final acorde a la secuencia de los enfrentamientos entre ambos, ha sido lo más relevante en esta parte del calendario. Después, se inclinó ante Tomas Machac, en cuartos de Shanghai. Con anterioridad, el tropiezo en segunda ronda del Abierto de Estados Unidos, frente a Botic van de Zandschulp, fue uno de los momentos más sorprendentes de la temporada que se va.

Humbert festeja su triunfo ante Alcaraz.

Humbert festeja su triunfo ante Alcaraz.AFP

El pasado año fue de entrada Roman Safiulin, en 2022 se retiró por lesión cuando perdía en cuartos con Holger Rune, contratiempo que puso fin a su temporada, y en su estreno en el torneo, en 2021, cayó contra el francés Hugo Gaston en octavos, en un duelo de ingrato recuerdo para él por los excesos del público local, que acabaron por desquiciarle. Paris-Bercy está lejos de ser un torneo propicio para Alcaraz, como tampoco lo es la pista cubierta, donde presenta sus peores resultados.

Tras vencer cómodamente al chileno Nicolás Jarry en su debut, tampoco en esta ocasión ha logrado resarcirse de las malas experiencias en la pista cubierta de la capital francesa.

Rafael Nadal, el hombre que trascendió al deporte

Rafael Nadal, el hombre que trascendió al deporte

A la hora de glosar la carrera de Rafel Nadal, que este jueves anunció su retirada del tenis el mes próximo en las Finales de Copa Davis, me resulta inevitable evocar nuestra primera conversación. Fue el 15 de agosto de 2004, tras dejar sobre la tierra de Sopot la huella prístina de una carrera difícilmente homologable, que registró, con el decimocuarto Roland Garros, el último de sus 92 títulos 18 años más tarde. En aquella charla, a través del teléfono, surgía la voz tenue de un muchacho que, como explicó en el vídeo testamentario de su adiós, estaba lejos de imaginar el viaje que iba a trazar en la historia del deporte.

No por esperada, desde que su cuerpo se negó a obedecer su apetito de insaciable competidor, deja de estremecer una noticia capaz de imponerse en las cabeceras de todos los diarios e informativos, de arrinconar por unas horas el impacto del fragor de las guerras y la tormenta política de su país. Se marcha uno de los más grandes deportistas de siempre, cuyos logros, entre los que se encuentran nada menos que 22 títulos de Grand Slam, cinco Copas Davis, 209 semanas como número 1, un oro olímpico individual y otro en dobles, trascienden el puro valor del éxito y estarán siempre unidos a la forma de lograrlos.

Para saber más

Porque la figura de Nadal está asociada a un espíritu incombustible, a ese never say die que le acompañó también en la vocación de un cierto espíritu nietzschiano por su afán de reescribir un eteno retorno. Fueron muchas las ocasiones con motivos suficientes para firmar la rendición, y desde muy pronto, con la temprana aparición, a los 19 años, de los problemas endémicos en el escafoides del pie izquierdo que amenazaron con cortar el seco el majestuoso vuelo de su raqueta.

Pero el jugador al que ya hace tiempo echamos de menos, resignados al azote contumaz de los percances físicos que sólo le han permitido disputar 19 partidos esta temporada y únicamente tres el pasado año, se reveló capaz de abrirse paso una y otra vez, de reivindicar su nombre frente al empuje de las nuevas generaciones y de mantenerlo vivo en esa pugna irrepetible con Roger Federer, que le precedió a la hora de dejar caer la hoja roja, hace ya dos cursos, y con Novak Djokovic, aún en danza, agotando las últimas reservas de su combustible.

Nunca el tenis disfrutó de tres protagonistas tan ilustres conviviendo en un mismo y largo período, prolongado durante casi cuatro lustros, algo que proyecta aún más lejos su legado. Nadal fue el primero en cuestionar la rapsodia de Federer, de discutir con sus propias armas su reinado. Lo hizo ya derrotándole por sorpresa en el Masters 1000 de Miami, en 2003, y llevándole al límite en la final de ese mismo torneo un año después, y proclamó en voz muy alta, meses más tarde, superándole en las semifinales de Roland Garros, en la antesala de la primera de sus copas de los mosqueteros, que este juego entraba en una nueva era.

Lin Cheon, una foto del Big Three, Djokovic, Federer y Nadal.

Lin Cheon, una foto del Big Three, Djokovic, Federer y Nadal.Lin CheongAP

Nadal y Federer caminaron de la mano, separados por la red pero juntos a la hora de enviar un mensaje de profundo calado en su exclusiva narrativa, que incorporaba, al lado del hermoso contraste de personalidades y estilos, los principios de una sana disputa puramente deportiva que alcanzó los 40 partidos. En ella se detuvieron escritores como David Foster Wallace, autor de El tenis como experiencia religiosa (Ramdom House), donde, sin disimular su fascinación por Federer, a quien dedicó el libro, recoge la capacidad de retroalimentación que siempre hubo entre ambos.

Resulta difícil contar la historia de Nadal sin la figura del estilista suizo, como fue inevitable acudir a su némesis a la hora de enfrentarse al también delicado ejercicio de despedir al ocho veces campeón de Wimbledon. También allí, precisamente allí, aconteció uno de los episodios medulares en la historia del zurdo, que es simultáneamente parte de la mejor historia del tenis. En una final, la de 2008, con la impronta de Alfred Hitchcock, sacudida por los azares de la climatología británica, interrumpida y dilatada hasta que la noche insinuó seriamente su aplazamiento, Nadal puso fin a la autocracia de Federer en su territorio sagrado y se convirtió en el primer español capaz de ganar el torneo en el cuadro masculino desde que lo hiciera Manolo Santana. Aquel partido fue considerado entonces como el mejor de siempre. Y diría que tal catalogación mantiene aún toda su vigencia.

Si Santana, a quien tampoco nunca terminaremos de decir adiós, puso al tenis español en el mapa, Nadal trascendió todas las categorías fronterizas. El chico que se inició bajo la estoica tutela de su tío Toni, cuyo nombre aparece en lustrosas versales en la construcción de todos sus logros, como un aparente especialista sobre tierra batida, devino en un profesional capaz de reinventarse para imponer su discurso en todas las superficies.

No sólo ganaría en dos ocasiones sobre el pasto del All England Club, sino que su constante deseo de aprendizaje y superación le llevarían también a tomar el poder en cuatro ocasiones en el Abierto de Estados Unidos y otras dos en el Abierto de Australia, la última de ellas, en 2022, en una plasmación catedralicia de su ardor y resiliencia, levantando un partido imposible a Daniil Medvedev cuando acababa de regresar de otro de sus largos períodos recluido en el arcén. Forma, junto a Donald Budge, Roy Emerson, Fred Perry, Rod Laver, Andre Agassi, Roger Federer y Novak Djokovic, la ilustre nómina de quienes han logrado inscribir su nombre como campeones de los cuatro grandes.

Amor por la Davis

Ese permanente viaje de ida y vuelta sólo ha sido posible gracias al amor y la pasión por aquello que aún seguirá haciendo hasta que ponga el definitivo cierre en Málaga, precisamente en la Copa Davis, en la competición que le alumbró como un entonces insospechado líder. Hace dos décadas, en Sevilla, frente al Estados Unidos liderado por Andy Roddick, con la valentía y complicidad del equipo de capitanes formado por José Perlas, Jordi Arrese y Juan Avendaño, Nadal transgredió el guion para llevar a España a la conquista de su segunda Ensaladera, aunando voluntades junto a Carlos Moyà, el hombre que tomó el relevo de Toni en su rincón.

Su carácter inspirador tuvo un efecto inmediato en nuestro tenis, al frente de jugadores tan importantes como David Ferrer, que será su último capitán, Feliciano López, Roberto Bautista, Fernando Verdasco o Pablo Carreño, todos ellos nutridos por cualidades de las que no sólo adolecía el tenis sino el deporte español en su globalidad. Sin Nadal sería difícil entender un fenómeno como el de Carlos Alcaraz, tan distinto en su manera de desenvolverse en la pista, tan parecido a la hora de interpretar la esencia del juego. Pronto vio en él a alguien armado para tomar su relevo, incluso antes de someterle en su primer enfrentamiento, en Madrid, el día que el murciano ingresó en la mayoría de edad.

Nadal tocó de lleno el corazón de los aficionados de todo el mundo como ahora, con su propia singularidad, lo hace Carlos Alcaraz. Pudimos disfrutarles juntos en los Juegos de París, después de que el mallorquín recibiese el emocionante homenaje de la ciudad y el recinto donde luce su efigie como uno de los portadores de la antorcha olímpica. Aún nos queda un postrero disfrute a partir del 19 de noviembre, con su hasta ahora negada alianza en la Copa Davis, escenario elegido por Nadal para su último baile, quien sabe si para clausurar el formidable relato con un desenlace tan brillante como aquel que le dio comienzo.

Los candidatos marcan terreno: goleadas del Manchester City, el Dortmund y el Inter

Los candidatos marcan terreno: goleadas del Manchester City, el Dortmund y el Inter

Casi simultáneamente al primer gol de Robert Lewandowski ante el Young Boys llegó el tanto de Gündogan en Bratislava. El Manchester City instaló el campamento cerca del área del Slovan y apenas se movió de allí. Circulaba bien la pelota con el alemán al mando de las operaciones y Doku percutiendo por la banda derecha. Al cuarto de hora los de Pep Guardiola ya ganaban por 0-2, gracias al tanto de Phil Foden. Pudieron ser tres antes del descanso si el palo no se hubiera entrometido en un fino disparo de Doku.

Después del empate en casa ante el Inter de Milan y tras las dudas generadas por la igualada frente al Newcastle, el equipo británico necesitaba demostrar que puede ofrecer garantías tras perder a Rodri para el resto del curso. Refrendó su autoridad con un nuevo tanto de Haaland y otro del debutante McAtee, tras una entrega mimosa de Foden: 0-4. También rotó el campeón de la Premier: Ederson, Ruben Dias, Bernardo Silva y Walker empezaron desde el banquillo. Sólo Dias y Walker tuvieron algunos minutos.

Derrota del PSG ante el Arsenal

El Paris Saint Germain pasó más que un mal rato en su visita al Arsenal. Havertz adelantó a los gunners con un cabezazo que dejó bajo sospecha a Donnarumma. Aún con el runrún de la ausencia de Dembélé por motivos disciplinarios, el equipo francés, que pudo empatar con un remate de Nuno Mendes rechazado por el poste, vio cómo una falta botada por Saka desde la derecha se deslizaba por un bosque de piernas hasta convertirse en el segundo tanto local.

En el minuto 63 entró Mikel Merino, en su debut con la camiseta del Arsenal. Casi de inmediato Joao Neves se topó con el travesaño. Los de Arteta habían dado un paso atrás y lograron administrar su ventaja. Al Borussia Dortmund se le cayeron los goles ante la debilidad de un Celtic que se fue al descanso con un 5-1 y acabó recibiendo siete. Adeyemi hizo tres. El Bayer Leverkusen de Xabi Alonso derrotó por 1-0 al Milan (Boniface, minuto 51), que sale de la segunda jornada sin un solo punto.

Juan Antonio Samaranch Jr.: "Pese a las guerras, el Movimiento Olímpico quiere demostrar que otro mundo es posible"

Juan Antonio Samaranch Jr.: “Pese a las guerras, el Movimiento Olímpico quiere demostrar que otro mundo es posible”

Ingeniero industrial y asesor financiero, Juan Antonio Samaranch Salisachs (Barcelona, 1959) es uno de los siete candidatos a presidir el Comité Olímpico Internacional (COI). El relevo de Thomas Bach, de quien es vicepresidente, se conocerá en la asamblea que va a celebrarse en Grecia del 18 al 21 de marzo de 2025. Competirá con: Sebastian Coe, Kirsty Coventry, Johan Eliasch, Feisal Al Hussein, David Lappartient y Morinori Watanabe. Samaranch atiende a este periódico en conversación telefónica.

¿Cuáles son los ejes de su candidatura?
Estamos en un mundo polarizado, que acepta poco la diferencia. El movimiento olímpico vive de poder demostrar que hay otro mundo posible, otra manera de hacer las cosas. Las líneas de trabajo deben basarse en construir un nuevo paradigma de desarrollo empresarial dentro del mundo del olimpismo para poder mantener la financiación del deporte mundial. Tenemos que potenciar el mundo olímpico en un momento en el que la tecnología y la transformación digital están abriendo grandes oportunidades, pero también grandes riesgos. Tenemos que estar muy atentos en todos esos frentes, en el de los valores, en la generación de recursos y, lo más importante, mantener la relevancia de los Juegos Olímpicos, acercándolos a las demandas de la juventud.
Tras una década en el comité ejecutivo del COI y siendo vicepresidente con Thomas Bach, ¿qué ha aprendido de él y qué cambiará si se convierte en su relevo?
Hemos estado juntos en situaciones de tremenda crisis, como la del dopaje o el covid, hasta tener que aplazar un año los Juegos de Tokio. He aprendido mucho de él. Ha conseguido grandes avances. Lo que viene ahora es distinto. Las recetas utilizadas hasta ahora probablemente no funcionen en el futuro inmediato. El ritmo de cambio es extremadamente acelerado y las soluciones están todavía por definirse. Cada época tiene sus retos y sus oportunidades.
Su padre fue dirigente del COI durante una época bien distinta
Estamos hablando de un mundo que dejó de existir hace mucho tiempo. Las recetas de entonces no valen para ahora y cualquier cosa que se pudiera aprender entonces no es aplicable a mi proyecto. Para esto hace falta experiencia, perspectiva, buen juicio y colaboración.
¿Por qué Rusia no pudo participar en los Juegos de París e Israel sí?
Nosotros no podemos tomar parte en conflictos. En ninguno. No suspendimos a Rusia por invadir, sino por saltarse la tregua olímpica que se había aprobado en Naciones Unidas y de la que fue signataria. Tuvimos que suspender al Comité Olímpico Ruso por no respetar la Carta Olímpica y usurpar responsabilidades al Comité Olímpico Ucraniano en ciertos territorios. Aún así invitamos como atletas neutrales a atletas rusos que no formaran parte del esfuerzo militar. El COI es la única institución que ha cumplido con la resolución de la ONU de hace más de 40 años de un territorio con dos estados. Reconocemos al Comité Olímpico de Israel y al de Palestina. Los dos aceptaron participar con sus atletas en los Juegos donde convivieron bajo el mismo techo en la Villa Olímpica. No podemos cambiar el mundo ni modificar decisiones de países soberanos, pero sí intentar que otro mundo sea posible.
. ¿Qué se pondera a la hora de elegir un presidente del CO
Cada miembro actúa individualmente, tiene mucha experiencia, una historia y muchos conocimientos sobre el mundo olímpico a partir de los cuales formulará su voto. Hay miembros que vienen de las federaciones internacionales, otros del mundo de los atletas, otros de los comités olímpicos nacionales. Cada uno dará un nivel de importancia a unas cosas más que a otras.
¿Puede favorecerle no estar al frente de ninguna federación?
Le garantizo que no va a haber ningún conflicto de intereses aunque el presidente electo esté al frente de una federación internacional. Esos temas están reglados y podemos estar todos tranquilos porque el presidente electo tendrá las manos libres.
¿Cómo se estimula en estos tiempos convulsos el interés por organizar unos Juegos?
La agenda 2020 del COI que permite a las ciudades adaptar los Juegos a sí mismas y no al contrario ha hecho más sencillo dejar un legado que sea óptimo para las poblaciones. Hay un interés muy alto para los primeros Juegos que no están otorgados. Ya hay un buen número de ciudades que están presentando sus precandidaturas. En estos momentos organizar unos Juegos es una muy buena idea para una ciudad que tenga la capacidad de hacerlo.
Madrid se ha presentado sin éxito en tres ocasiones...
Presentó tres proyectos estupendos, pero sólo hay un ganador. Competimos con los mejores. Espero algún día poder ver unos Juegos Olímpicos otra vez en mi país.