Muere a los 47 años Jorge Bolaño, ex mediocampista del Parma italiano e integrante de la selección colombiana durante el Mundial de Francia en 1998

Muere a los 47 años Jorge Bolaño, ex mediocampista del Parma italiano e integrante de la selección colombiana durante el Mundial de Francia en 1998

Actualizado Lunes, 7 abril 2025 - 07:52

Jorge Bolaño, ex futbolista colombiano de gran renombre en su país tras jugar el Mundial de Francia en 1998 con los 'cafeteros' y recordado en Italia tras su paso por el Parma, ha fallecido a los 47 años en la ciudad de Cúcuta, informa Efe.

Bolaño, ídolo del Junior de Barranquilla, murió de un infarto durante una fiesta a la que asistía en Cúcuta, capital del departamento de Norte de Santander y ciudad que tiene el principal paso fronterizo de Colombia con Venezuela, según el diario bogotano 'El Tiempo'.

"Con profundo dolor expresamos nuestras más sinceras condolencias a la familia y seres queridos de Jorge Eladio Bolaño Correa, ex jugador de la Selección Colombia Masculina, futbolista profesional y entrenador, quien falleció este domingo", lamentó la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) en un comunicado.

Ese organismo agregó que "la partida de Jorge Bolaño deja un vacío en el corazón de quienes lo conocieron y admiraron" y manifestó que "su legado como futbolista y formador perdurará en la memoria del deporte colombiano".

Durante su carrera, Bolaño, nacido el 28 de abril de 1977 en la ciudad caribeña de Santa Marta, se desempeñó como centrocampista y es recordado por su paso por el Junior, club en el que jugó entre 1993 y 1999.

En el conjunto barranquillero, el ex futbolista, que era hijo del fallecido ex jugador Óscar Bolaño, disputó 161 partidos en los que anotó 10 diez goles y ganó los títulos de la liga colombiana en 1993 y 1995, la época dorada de ese club.

Su buen desempeñó en el Junior le abrió las puertas de la selección colombiana, con la que debutó en un amistoso en 1995 y participó en el Mundial de Francia 1998.

También disputó la Copa América de 1999, en la que anotó un gol a Chile en los cuartos de final, y participó en las Eliminatorias Suramericanas a los mundiales de 1998, 2002 y 2006.

En 1999, Bolaño fue fichado por el Parma, equipo con el que ganó en 2002 la Copa Italia. También pasó por los clubes italianos Sampdoria, Lecce y Modena, donde terminó su periplo europeo en 2009.

En 2010 regresó a Colombia para jugar en el Cúcuta Deportivo, club en el que se retiró en 2012 para seguir vinculado al mundo del fútbol.

Bolaño se desempeñó como asistente técnico de Willy Rodríguez en el extinto Uniautónoma de Colombia en 2014 y de Juan Carlos Ramírez en la selección sub-17 de su país entre 2022 y 2024.

También fue entrenador del Real Frontera, de la segunda división venezolana, en 2017 y trabajó como comentarista deportivo en canales de televisión locales.

La última advertencia al Madrid: la voz de Carvajal, el lateral derecho, el timón del centro del campo, el balón parado...

La última advertencia al Madrid: la voz de Carvajal, el lateral derecho, el timón del centro del campo, el balón parado…

Lille, Milán, Liverpool, Athletic, Barcelona dos veces, Espanyol, Betis... Y ahora b. No son sólo nueve derrotas, cinco en Liga, tres en Champions y una en la Supercopa de España en Arabia, son una lista de avisos sobre el nivel del Real Madrid. Vivo en el torneo continental, con los cuartos contra el Arsenal empezando mañana en el Emirates, vivo en la Copa del Rey, cuya final disputa el próximo día 26 ante el Barça, y vivo, aunque menos que el sábado por la mañana, en la Liga, a cuatro puntos de un cuadro azulgrana que el sábado le perdonó la vida empatando contra el Betis.

En números, se podría que decir que el conjunto de Carlo Ancelotti no está mal. Mantiene sus constantes en las tres competiciones cuando encaramos el mes de abril, algo que es una novedad en la historia reciente del Madrid, que por el camino del triplete siendo había dejado alguna batalla de lado. Suma una Supercopa de Europa y una Intercontinental este curso y aguarda el inicio del primer gran Mundial de Clubes una vez se terminen los trofeos tradicionales. Pues eso, «no estamos tan mal», como diría el culé Joan Laporta.

Pero la realidad también es otra: ha estado a un suspiro de llegar a estas alturas de año sin nada en juego. Las moneda de las prórrogas contra Celta y Real Sociedad en Copa y los penaltis contra el Atlético le salieron cara, por lotería y por el talento de una plantilla galáctica que no ha conseguido carburar y encajar todas sus piezas a la perfección desde el inicio de curso.

La lesión de Carvajal fue un palo mental y futbolístico, con la duda de en qué apartado ha influido más. Ancelotti ya le ha pedido que se sume a las concentraciones, como en la última eliminatoria de Champions contra el Atlético, porque necesita su voz, su empuje y sus gritos de vez en cuando. Porque no todo es fútbol.

En el césped, Lucas Vázquez sufre en el lateral derecho. El gallego ha sido titular en ocho de esas nueve derrotas y aunque el desastre ha sido grupal, con errores en diferentes posiciones, se le ha visto más superado que nunca. Una realidad que obligará al italiano a colocar a Valverde en el lateral derecho y a perder al uruguayo en el centro del campo. Y ahí, en ese movimiento, reside ahora la gran duda del once: el centro del campo. ¿Quién manda en el juego del Madrid?

A la ida contra el Arsenal no llegará Dani Ceballos, que se había hecho con el timón del juego en invierno, y Valverde pasará al lateral, por lo que Tchouaméni, Camavinga y Modric se disputarán dos puestos. El croata asume la varita, deseando renovar una temporada más, pero su edad no es sólo un número y se nota en algunos momentos de los encuentros. Y entre Tchouaméni y Camavinga, con virtudes extraordinarias ambos, ninguno ha dado el paso en la creación de juego.

El tercer hombre en esa construcción de la casa blanca podría ser Bellingham, pero en muchos encuentros de la temporada, como ante el Valencia, el inglés ha sido más delantero que centrocampista. Y Ancelotti, amante del 4-3-3 o el 4-4-2, observa ahora que el esquema se convierte en un 4-2-4, roto muchas veces entre atacantes y defensores. Volvemos a algunas palabras del inicio de curso: «Compromiso» o «actitud». Después de caer ante el Valencia, el italiano no recurrió a ellas, insistiendo en que habían merecido ganar, pero la primera parte y el tramo final fueron de suspenso.

Ahí hacen daño sus rivales, especialmente a balón parado, donde la actitud es primordial: el Madrid ya ha concedido cinco goles en saques de esquina en La Liga, récord en los últimos siete años. Y en ataque, se espera la mejor versión de Vinicius, esa que se ha visto a chispazos durante el curso. Los focos de la Champions y de Londres le aguardan para dar un golpe en la mesa.

Intento de agresión de Luis Pérez a Latasa en el banquillo del Valladolid durante el duelo contra el Getafe

Intento de agresión de Luis Pérez a Latasa en el banquillo del Valladolid durante el duelo contra el Getafe

Actualizado Domingo, 6 abril 2025 - 20:32

En medio del partido que enfrentaba al Real Valladolid y al Getafe, en el que los madrileños dominaban por 0-3 en el marcador, el defensa pucelano Luis Pérez ha intentado agredir a Juanmi Latasa en el banquillo justo cuando el delantero acababa de ser sustituido.

Sin saber qué es lo que provocó la reacción del futbolista, Pérez se lanzó a intentar dar un puñetado a Latasa, que ni se inmutó. Cömert, sentado entre ambos, tuvo que mediar y parar al defensa para que el capítulo no pasara a mayores.

Tras el encontronazo, el agresor ha decidido abandonar el banquillo y ha puesto rumbo a los vestuarios. Antes había manifestado sus quejas a otros compañeros que estaban en el lugar de los suplentes en el estadio de Pucela. Ambos momentos han sido recogidos por las cámaras de DAZN, cadena que retransmitía el encuentro.

El partido ha terminado con derrota de los vallisoletanos por 0-4 después de que un jugador, Mario Martín, fuera expulsado al filo del descanso. Este resultado perjudica aún más los intereses de un equipo que ocupa el farolillo rojo de la tabla y tiene pie y medio en el descenso a la segunda categoría.

Los pucelanos tienen la salvación a 16 puntos cuando quedan 24 en juego. De los últimos cinco encuentros, el equipo blanquivioleta ha perdido cuatro y sólo ha podido empatar uno.

El Atlético no deja de creer y aprovecha el tropezón de los titanes

El Atlético no deja de creer y aprovecha el tropezón de los titanes

Vienes de un marzo negro, de una depresión de resultados preocupante y atisbas el domingo con los periódicos informando de un tropiezo de los colosos. Estás lejos, pero quién sabe... Es imposible, pero y si... Tienes que ganar todo y ellos perder bastante, pero quizás...

Toda época oscura tiene final. Tras semanas de lluvia, siempre sale el sol. La luz es Barrios. Hay que sentir para seguir creyendo. Y el canterano lo hizo, y con él, el Atlético, que remontó el gol de Agoumé con un tanto de penalti del de siempre y la fe del número 8. [Narración y estadísticas, 1-2]

Quiere creer y soñar el Sevilla. Poco importan las dos últimas y dolorosas derrotas, que su temporada en casa sea floja, por decirlo educadamente, y que la planificación deportiva sea cuestionada día sí, día también, por la grada del Pizjuán. De hecho, uno de sus fichajes más cuestionados, Lucien Agoumé, quiso transmutarse en Toni Kroos, ahora que estamos en cuaresma, y cuando despertaba el partido metió un putt con el interior desde el borde del área para batir a Oblak. Quedaba un mundo, pero la declaración de intenciones no era mala.

El Atlético, por su parte, empezó vago, con una presión desordenada y un bloque medio, como sin saber si morder o esperar. Un sueño para un Sevilla que tiene una identidad extraña este año, más largo que compacto y con querencia por el juego directo. Jugadas de cuatro pases y gracias. En una de esas, Ejuke desbordó a Molina para ponerla en el corazón del área pequeña, Oblak y Le Normand salvaron el segundo antes de los primeros 20 minutos.

Entonces llegó uno de los errores, habituales este curso, que impiden que el Sevilla aspire a mayores hazañas. Un balón que no iba a ningún lado en el área, Badé decidió perseguirlo como un búfalo hasta que arrolló a Gallagher. Penalti incuestionable y esta vez, pese a la historia interminable del doble toque, lo pateó Julián y lo introdujo en la portería de Nyland. El partido empezaba de nuevo con media hora menos.

Julián celebra su tanto.

Julián celebra su tanto.Jose Manuel VidalEFE

Sevilla y Atlético son espejos en esta fase de la temporada. Jugando a destellos, acodados en sus mejores jugadores y con poco control del juego. Uno de esos destellos lo protagonizó Lukebakio, la estrella sevillista, la única esta temporada, puso un pase medido a Akor que lo estrelló ante un atento Oblak. Lo dicho, poco fútbol y muchas oportunidades. Las defensas, especialmente la rojiblanca, apáticas. Aunque Badé, a veces, no sabía qué portería guardaba.

Simeone apremió a sus pupilos que terminaron apretando al final de la primera parte. Tras 45 minutos en tercera, decidieron jugar en sexta los cinco del descuento. A estas alturas de liga ya no te puedes permitir tirar una parte a la basura y menos tras la mala experiencia ante el Espanyol. Aún así, si Gallagher hubiera resuelto mejor una contra tres para uno, el Atlético se habría ido uno arriba en el marcador. Inmerecido, sí, pero a falta de ocho jornadas hay que ganar por lo civil o por lo criminal.

Sacó Simeone a Molina en el descanso, cuya primera parte no iba a pasar a la historia, y la segunda comenzó parecida al inicio del encuentro, intensidad sevillista y ocasión de Akor, bien resuelta por Lenglet y luego otra de Kike Salas. Ambas provocadas por errores de Griezmann en salida. Cada vez se explican menos los minutos que el Cholo concede al francés. Una cosa es respetar la historia, que la tiene e inmejorable, y otra que sea intocable en un maratón de partidos ya complicado para un veinteañero, imposible para un veterano.

Oblak recoge objetos del césped.

Oblak recoge objetos del césped.Jose Manuel VidalEFE

Lo retiró en el minuto 55 por Sorloth y también saltó al terreno de juego Koke, ausente el último mes. El equipo creció en intensidad, pero el partido se interrumpió por una protesta contra la directiva por parte de la grada Gol Norte. Soto Grado detuvo la contienda cinco minutos tras la caída de decenas de objetos.

Lanzamiento de objetos

Tardó un tiempo el Atlético en recalentarse tras el parón y aprovechó la electricidad de Riquelme, que salió por un invisible Giuliano, para volver a empujar hacia la portería de Nyland. Precisamente, podría haber desnivelado el marcador el canterano rojiblanco si Gallagher hubiera puesto bien el pase atrás. Estaba solo en el punto de penalti. El Cholo vio el momento y quiso prolongarlo con Lemar, más toque y profundidad que el inglés al que sustituyó, pero casi lo lamenta después de que Badé, tras un córner, por poco adelantara a un Sevilla que ya se centraba más en aguantar que en atacar.

El Atlético, pese al cansancio, pese a la depresión, nunca dejó de creer y tuvo que ser un canterano, el que tiene marcado el escudo en el pecho, el que aprovechó el tropiezo de los titanes en el descuento. Barrios puso la izquierda tras un gran eslalon y Nyland solo pudo mejorar la foto. A tres del Real Madrid y a siete del Barça, Imposible... o casi.

'Santa Bárbara Bendita': el emotivo homenaje en El Molinón a los mineros muertos

‘Santa Bárbara Bendita’: el emotivo homenaje en El Molinón a los mineros muertos

Actualizado Domingo, 6 abril 2025 - 15:57

"En el Pozo María Luisa murieron cuatro mineros, mira, mira Maruxina, mira cómo vengo yo". Es el arranque del considerado himno popular de los mineros y que sonó el sábado en El Molinón antes del partido entre el Sporting y el Tenerife.

El Coro Minero de Turón lo interpretó con los espectadores puestos en pie y emocionados por el recuerdo de los cinco mineros fallecidos unos días antes en Cerredo (León), en un accidente que se está investigando.

Esta canción, con versiones en castellano y en bable, se conoce indistintamente como 'En el Pozo María Luisa' o 'Santa Bárbara Bendita', porque con esa invocación comienza otra de sus estrofas. "Santa Bárbara bendita, patrona de los mineros, mira, mira Maruxina, mira cómo vengo yo".

Santa Bárbara es precisamente la patrona de los mineros y la canción hace referencia a un gravísimo accidentes ocurrido en el Pozo María Luisa, situado en Langreo, en 1949, cuando 17 trabajadores perdieron la vida debido a una explosión de gas grisú.

Ancelotti sólo come chicles

Ancelotti sólo come chicles

Actualizado Sábado, 5 abril 2025 - 18:53

Adiós a la Liga. El Madrid no puede ni con un rival que lucha por la salvación. Pero es que el equipo de Ancelotti - aunque eso sea una entelequia- no es capaz de ganar a nadie. Tenía el agua que casi le llegaba a la nariz y ahora se ha ahogado definitivamente.

La tragedia es que hace más de una temporada el Madrid ni tiene juego, ni sistema, ni sentido futbolístico. A muchos les extraña, pero todo el que me lee sabe que llevo denunciándolo ya más de dos años. Es un vetusto entrenador, apagado por su estilo decimonónico y muy engreído en su estilo.

Ahora, los corifeos madridistas dirán que Mamardashvili fue un gigante en la portería y que impidió en más de media docena de ocasiones claras, la mayoría de ellas de Mbappé. Pero el francés solo no puede con unos compañeros que se creen dioses del Olimpo del fútbol, con la nefasta propaganda de la Casa Blanca.

Es cierto que el Valencia metió tres fallas ignífugas para defender. Que sólo hubo tres oportunidades y que dos de ellas terminaron en gol. El último de ellos en el ocaso de un partido que pasará a la historia como cuando el Madrid cayó al infierno.

Es posible incluso que el Madrid logre un gol con esa clase delanteros egocéntricos, que jamás juegan con el compañero, sino que van en busca de la jugada perfecta, la genial.

Lo cierto es que Brahim sólo regatea para él y no se va de nadie. Bellingham arranca desde atrás y también quiere meter su gol maravilloso. Y Vinicius es un desastre. Sólo piensa en sus regates.

Y sale hasta Endrick y también quiere ser un dios en el Olimpo madridista por egocentrismo. Un disparate. Como todos los desperdician todo, castigan a su equipo a perder minutos y minutos en el juego colectivo.

Y, curiosamente, el menos individualista sea el mejor: Mbappé. El único que tiene gol. Lo que no entiendo es que cediera ejecutar el penalti al inútil de Vinicius, que ya ha recibido una sinfonía de pitos. No es para menos. Fue decisivo. Ese minuto que marcará una Liga. Jamás entenderé el compañerismo de Mbappé

Hay muchos misterios de Ancelotti en el partido. Una vez más se cargó a Asencio, para que ya nadie dude de su odio cerval, porque se tragó su calidad. Nadie entendió a Tchouaméni en la defensa, cuando por delante sólo estaba Modric para ser mediocentro y un tocado Valverde. Todo es sospechoso.

Nadie defiende ya a Ancelotti. Y no quiero hablar más de él. Estoy cansado y en el club no hacen nada, sólo el tancredo. Ni lo echan ni fichan a nadie, pero, eso sí, tiene un estadio espectacular. Absurdo.

Y no quiero pensar lo que podrá ocurrir en Londres el martes, porque lo mismo se llevan una manita o quizás cuatro. Con Saka y Merino de verdugos. Mientras tanto, Ancelotti come chicles. Quizá demasiados.

El Madrid es una calamidad: se traiciona a sí mismo, cae ante el Valencia en el Bernabéu y deja la Liga a merced del Barça

El Madrid es una calamidad: se traiciona a sí mismo, cae ante el Valencia en el Bernabéu y deja la Liga a merced del Barça

El Madrid es una calamidad extraordinaria. Sin fútbol, sin sangre, sin defensa y sin estrellas cayó ante el Valencia en el Santiago Bernabéu y puso la Liga a merced de los deseos (y los triunfos) del Barcelona. Vinicius falló un penalti y empató después el tanto inicial de Diakhaby, pero los blancos nunca se pusieron al ritmo de las necesidades del partido, permitiendo el gol decisivo de Hugo Duro en el descuento.

Y esa que la alineación de Ancelotti era casi de gala. Al italiano le dio un poco igual el duelo del martes contra el Arsenal, ida de los cuartos de final de la Champions, y congregó en su ataque a sus tres máximos exponentes: Mbappé, Vinicius y Bellingham, secundados por Valverde, Brahim y Modric. La novedad fue el debut del joven Fran González en la portería, lesionados Lunin y Courtois, al que se espera en el Emirates, y la de Díaz en el lugar de Rodrygo, rotación tímida para lo que lleva acumulado la plantilla esta temporada y lo que se le viene encima en este mes de abril, con la eliminatoria ante los ingleses y la final de la Copa el próximo día 26 como fechas marcadas en rojo.

Y así, en un abril de tantos focos, el Madrid se olvidó de esta tarde de sábado. Se dio 'mus'. La mente es así de traicionera. Su cabeza quizás estaba ya en Londres, en territorios más carismáticos, y su fútbol, que apenas ha aparecido a lo largo del curso, tampoco se dio cita contra los de Corberán. Un primer tiempo surrealista y un partido terrible.

Después de un inicio calmado, en el minuto nueve un pase largo de Valverde lo cazó Mbappé camino del área, donde fue derribado por Tárrega. Cuadra Fernández señaló penalti por el agarrón del central y aunque el VAR le llamó para revisar la jugada, mantuvo su decisión. Podría haber sido el comienzo de un día plácido para los blancos, pero Vinicius, que ya había fallado en el Metropolitano, erró ante Mamardashvili. El georgiano adivinó su lanzamiento, débil al lado izquierdo.

El error del brasileño dejó en 'stand by' al equipo, que encajó el 0-1 del Valencia en la siguiente jugada. Córner sacado por Almeida y cabezazo en carrera de Diakhaby, que le ganó el salto a Rüdiger y batió a Fran, impotente.

Así de frágil parece este Madrid, en una contradicción constante entre la garra que saca en la locura y la desidia cuando no hay temporales a su alrededor.

Y eso que la suerte pudo acompañarle a los cinco minutos, cuando Diakhaby pasó de héroe a villano de su club al meter en su propia portería un derechazo mientras intentaba despejar. El VAR, sin embargo, vio el fuera de juego previo de Mbappé y Cuadra Fernández anuló el empate.

En ese momento, y lejos de reaccionar, el Madrid se puso en pausa, incapaz de tener el balón, presionando mal a su rival y ausente de cualquier actitud necesaria para remontar, provocando los pitos de su afición. El Valencia amasó la pelota en posesiones largas y tuvo un primer tiempo cómodo hasta que Mbappé, ya al filo del descanso, probó suerte varias veces ante Mamardashvili. No acertó y el intermedio llegó con silbidos de viento en Chamartín, algo que empieza a ser costumbre.

Reacción momentánea

El Madrid, y especialmente Vinicius, necesitó el enfado de su grada para despertar por un instante. Activo en defensa y generoso en el esfuerzo, el brasileño y sus compañeros mostraron otra cara tras pasar por el vestuario. Mamardashvili tapó a Mbappé en la primera acción y Vinicius anotó el empate tras un córner sacado por Modric. Nadie remató en el primer palo y el delantero esperó en el segundo para empujar la pelota a la red.

La reacción local se notó en el marcador y en el juego, con más velocidad de balón y más guerra en los duelos individuales. Pero duró eso: un instante. Bellingham casi pone el 2-1 tras una buena carrera de Vinicius hasta la línea de fondo y el campo se empezó a inclinar hacia la portería del Valencia.

Mbappé definió desviado tras una pared con Fran García, Mamardashvili salvó un remate de Valverde en el área pequeña a pase de Mbappé, el galo disparó alto desde la frontal... El Madrid acumuló ocasiones, más por inercia que por fútbol, y terminó hincando la rodilla en un contraataque vertical del Valencia, que en tres toques puso el balón en las redes de Fran González. Un desmarque de Mir, un centro a Duro, un remate de cabeza y gol. Sin defensa posible, con Rüdiger situado en el centro de la delantera madridista.

Un desastre esplendoroso que supone una piedra gigante en el camino liguero del Madrid y una brecha en sus sensaciones hacia la Champions y la Copa.

Carlos Corberán, el devoto de la Virgen que resucita al Valencia con precisión de cirujano: “Está muy responsabilizado”

Actualizado Viernes, 4 abril 2025 - 23:08

La tarde del 29 de mayo de 2022 se jugaba en Wembley la final de los playoffs de ascenso a la Premier League entre el Nottingham Forest y el modesto Huddersfield Town, que entrenaba un técnico valenciano de 39 años: Carlos Corberán. En la grada se sentaba Miguel Ángel Corona, director deportivo del Valencia, que quería ver con sus propios ojos cómo se comportaba un entrenador del que ya se hablaba mucho en Inglaterra. Por entonces, el Valencia tenía hilvanada la llegada de Gennaro Gattuso y a Corberán se le escapó aquel ascenso con un gol en propia puerta, pero entró en la lista de candidatos al banquillo de Mestalla. Una nómina que siempre debe ser amplia, porque desde la llegada de Peter Lim, el puesto es una trituradora.

No fue hasta mitad del pasado mes de diciembre cuando las puertas del Valencia se le abrieron de par en par. No era fácil tomar las riendas de un Valencia hundido y en una dinámica que le conducía a Segunda. Corberán, que jugó de portero en la cantera y al que su abuelo llevaba a Mestalla, no huyó. Tenía experiencia suficiente y fe, tanta como en la Virgen de los Desamparados, de la que es devoto. 101 días han pasado desde la madrugada del 25 de diciembre, cuando el club anunció su fichaje, con el equipo colista, con sólo 12 puntos. En los siguientes 12 partidos de Liga ha sumado 19, repartidos en cinco victorias -todas en un Mestalla a rebosar- cuatro empates y sólo tres derrotas ante Real Madrid, Atlético y el humillante 7-1 frente al Barça, casi repetido después en Copa (0-5).

Para salvarse, el Valencia necesitaba una segunda vuelta impecable, para remontar los siete puntos que se habían abierto con la salvación. Y lleva camino de ello. Con los resultados del segundo tramo de la competición, el equipo sería cuarto y estaría en puestos Champions, sólo por detrás de Barça, Betis y Madrid.

El 51% de los puntos

El dato más significativo lo aporta su rendimiento frente a los rivales directos. En estas 12 jornadas, ha sumado 15 puntos más que el Valladolid y Las Palmas, 10 más que el Leganés, nueve más que el Alavés y cinco más que el Espanyol.

El valenciano, además, es el técnico que más ha mejorado a su equipo de los que llegaron con el campeonato empezado. Ha sumado el 51% de los puntos, cifra que no alcanzan Diego Martínez, Eduardo Coudet, Diego Cocca ni Álvaro Rubio. Por eso es uno de los técnicos revelación.

Metódico, reflexivo y siempre dispuesto a mejorar, supo hace un año que era el momento de dar el salto a LaLiga. Como hace con los jugadores, detectó sus puntos débiles y los trabajó. Desde la comunicación, porque nunca había dado una rueda de prensa en castellano, a la necesidad de hacer sonar su nombre en España, algo que años en la Championship no le habían garantizado pese a su buen trabajo.

«¿Cuánto cuesta un descenso?»

El pasado verano fue Las Palmas quien tuvo su nombre sobre la mesa y el Valencia lo supo, pero la opción era darle a Rubén Baraja la renovación que se había ganado. El mal arranque de curso lo cambió todo. En noviembre, el club ya pensaba en buscar un relevo o la permanencia sería imposible. Negoció con Quique Sánchez Flores, pero viró hacia Corberán. De hecho, su nombre fue el único que se transmitió a Singapur con una coletilla que nadie sabía si se aceptaría: había que pagar casi tres millones de cláusula para liberarle. «¿Cuánto cuesta un descenso?» fue la respuesta que se recibió, casi retórica, porque se dio luz verde a la operación.

De Corberán convencieron dos frases que escucharon los dirigentes del Valencia en la primera conversación. «Vengo a trabajar con lo que tenga», les dijo. Eso suponía un alivio para un club que nunca sabe si puede acudir o no al mercado. Se movían entonces, pero sin garantías de acceder a cesiones como la de Umar Sadiq.

La segunda frase se ha demostrado aún más cargada de sentido: «La mejora en el campo siempre viene de la mejora individual». Es un mantra que repite y que ha traducido en charlas individuales para potenciar a Javi Guerra, Barrenechea o Diego López, a quien mandó al banquillo una tarde y marcó las cuatro siguientes. «Va tieso y lleva a todo el mundo tieso», aseguran. Para rescatar al Valencia ha actuado con precisión de cirujano y quienes le rodean lo definen como «minucioso» y «exageradamente responsabilizado», tanto que pasó la noche tras las derrota ante el Barça en su despacho en Paterna. Pese a las bajas y los 17 años que lleva el Valencia sin ganar en el Bernabéu, no quiere humillaciones. Para los creyentes como Corberán, las virtudes cardinales son prudencia, justicia, fortaleza y templanza. Él las exhibe todas.

Kevin de Bruyne anuncia que se va del Manchester City

Kevin de Bruyne anuncia que se va del Manchester City

Actualizado Viernes, 4 abril 2025 - 19:35

Kevin de Bruyne, leyenda del Manchester City, abandonará el club a final de temporada poniendo fin a una de las carreras más importantes en la historia del conjunto inglés, informa Efe.

Fichado procedente del Wolfsburgo en 2015 a cambio de 60 millones de euros, el belga ha salido barato al City, convirtiéndose en una auténtica leyenda en el Etihad Stadium, disputando 413 partidos, marcando 106 goles y repartiendo 174 asistencias.

En su palmarés figuran seis Premier League, cuatro de ellas consecutivas, una Champions League, la primera en la historia del club, dos FA Cup, cinco Copas de la Liga, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubes.

El centrocampista tendrá dos opciones más para redondear esta vitrina, en la FA Cup, donde juegan las semifinales contra el Nottingham Forest, y en el Mundial de Clubes de la FIFA, que comienza en junio en Estados Unidos.

De Bruyne ha sido una pieza instrumental para entender los éxitos del equipo de Pep Guardiola en las últimas temporadas, con su punto álgido en la 2022-2023, cuando los 'Sky Blues' se convirtieron en el segundo equipo inglés en la historia en conquistar el triplete (Liga, Copa y Liga de Campeones), tras eManchester United de Alex Ferguson (1999).

"Si veis esto os podéis imaginar qué voy a decir, así que iré directo y os haré saber que van a ser mis últimos meses como jugador del Manchester City. Nada de esto es fácil de decir, pero como futbolista sabes que este día llega. El día es hoy y os merecéis escucharlo de mí", dijo De Bruyne en una carta publicada en sus redes sociales.

"El fútbol me ha traído a todos vosotros y a esta ciudad. Seguir mi sueño, sin saber que este tiempo me cambiaría la vida. Esta ciudad, este club y esta gente me lo ha dado todo. No he tenido otra opción que dar lo mejor de mí, y sabés qué, lo hemos ganado todo. Nos guste o no, es momento de decir adiós. Mánchester siempre estará en el pasaporte de mis hijos y, sobre todo, en nuestros corazones. Esta siempre será nuestra casa. Toda historia llega a un final, pero este ha sido definitivamente el mejor capítulo", añadió.

A nivel individual, De Bruyne ha sido elegido mejor jugador del City en cuatro temporadas, mejor jugador de la Premier League en dos ocasiones, incluido en el mejor once de la competición en seis ocasiones, además de ser una vez elegido el mejor centrocampista de la Champions.

El belga acaba contrato en junio y es libre de negociar con quién quiera, siendo una salida fuera de Europa la opción más probable a sus 33 años. En los últimos días ha estado relacionado con un movimiento hacia Estados Unidos o Arabia Saudí.

Dos miembros del Comité del Mundial responsabilizan a Tato del cambio de sedes y exigen a la RFEF "llegar al fondo del asunto"

Dos miembros del Comité del Mundial responsabilizan a Tato del cambio de sedes y exigen a la RFEF “llegar al fondo del asunto”

Los ex integrantes del Comité del Mundial 2030 Fernando Sanz y Jorge Mowinckel pasan al contraataque tras ser señalados por la ex responsable María Tato de estar involucrados en la manipulación de las puntuaciones de las sedes.

Quien fuera futbolista del Real Madrid y el antiguo responsable de Estrategia de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) han presentado un escrito ante el organismo federativo y el Consejo Superior de Deportes (CSD) en el que arremeten contra Tato, a la que acusan de inventarse una reunión el 26 de junio para intentar involucrarles en el cambio de puntuación de los estadios que llevó a dejar fuera in extremis a Vigo.

"Todo parece indicar que se ha intentado solventar una crisis sin entrar en el fondo de la misma y tratando de involucrar al resto de miembros del Comité de Candidatura", exponen Sanz y Mowinckel.

'Informe Tato'

Ambos resaltan que "resulta especialmente revelador" que la única novedad del informe presentado por la ex directora del Mundial ante la RFEF para explicar su actuación, al que se refieren como Informe Tato, se centre en la supuesta reunión para modificar la primera clasificación de 11 sedes del torneo.

Según los dos ex compañeros de Tato, "no se ha documentado" por parte de esta última "la existencia de una reunión, ni los participantes, ni sus conclusiones". Y añaden que, a pesar de ello, "la RFEF ha aceptado esta explicación sin exigir pruebas mínimas, lo que demuestra un preocupante falta de exigencia y rigor".

"En este contexto corresponde a la RFEF aclarar si hubo irregularidades en la valoración de las sedes y hacerlo en función de las personas que en ese momento tenían atribuciones ejecutivas: la directora de la Candidatura y la Secretaría General".

Un trabajo "extraordinario"

"Finalmente queremos destacar que, más allá de este episodio, el trabajo técnico y estratégico realizado durante la candidatura, entre octubre de 2023 y diciembre de 2024, ha sido extraordinario". "A pesar de la inestabilidad institucional de la RFEF durante ese periodo (varios presidentes, secretarios generales, comisiones gestoras, intentos fallidos de elecciones, suspensiones, registros judiciales) se logró consolidar una candidatura conjunta con Marruecos y Portugal que obtuvo la mayor puntuación de la historia por parte de la FIFA y el respaldo unánime del resto de federaciones".

"Haber conseguido que España vuelva a albergar el mayor evento deportivo masculino del mundo, 60 años después de que se designara el Mundial de 1982 es un éxito colectivo que no debe empañarse por actuaciones individuales que deben ser aclaradas", concluye el informe de Sanz y Mowinckel.