Una tragedia llamada Araújo

Una tragedia llamada Araújo

Actualizado Martes, 16 abril 2024 - 23:54

Una equivocación tremenda de Araújo, a muchos minutos del final, provocó una típica tragedia mediterránea. De otra manera, el soberbio Luis Enrique hubiera perdido incluso el partido. Hay que reconocer que Xavi se tiene muy estudiado al PSG. Y allá en París y aquí en Barcelona comenzó a darle un repaso táctico que es fácil de enfatizar.

El Barça se rio en los primeros minutos, porque sabe que la prepotencia del asturiano quiere arrollar en los par

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La autodestrucción de Xavi: el PSG elimina al Barça con una goleada

La autodestrucción de Xavi: el PSG elimina al Barça con una goleada

La autodestrucción de Xavi, a patadas con la publicidad en la banda, fue la autodestrucción del Barça, como un Saturno que devora a sus hijos, a una obra inconclusa. Esta eliminación tras un 1-4 en su casa no augura que pueda acabarla, que reconsidere su decisión de marcharse. Cuando lo hizo del banquillo de Montjuïc, expulsado, era como si lo hiciera del Barcelona. [Narración y estadísticas (1-4)]

Lamine Yamal mostró un camino que el propio entrenador cercenó cuando sintió el miedo de una expulsión, la de Araújo, pese a los dos goles de ventaja en ese instante. El pavor llevó entonces al campo a los fantasmas de Liverpool, Roma o Lisboa, como sombras chinescas frente a un PSG que no necesitó a un gran Mbappé, pese a sus dos tantos. Bastó con su versión más terrenal para citarse con el Borussia Dortmund y cerrar las puertas de las semifinales de Champions a un club que vuelve a la casilla de salida, con su ADN, su deuda y sus miedos.

LA DECISIÓN DE YAMAL

Ese Yamal había sido Mbappé un solo instante fugaz, como la carrera de un guepardo, fugaz pero mortal. Hay algo felino en este futbolista que corre sin pisar la hierba. Se desliza. Hay algo también de depredador que aguarda su momento, ausente de lo que sucede durante muchos minutos, porque su minuto es el minuto de oro, el que justifica su presencia en el campo. Al recibir de Araújo, orientó con la cabeza y dejó atrás a Nuno Gomes como se dejan las puertas de esquí en un slalom. El centro del gol fue para Raphinha, que sumaba su hat trick en la eliminatoria después de sus dos goles en París.

Si había un jugador diferencial sobre el campo, acabábamos de verlo en Montjuïc. Si hubo un futbolista al que Xavi eligió para dejar el campo cuando Araújo fue expulsado, fue precisamente Yamal. La mirada baja del futbolista al retirarse era la de la resignación de un joven que todavía no siente como propia la jerarquía que ya tiene en el campo. Había dado al Barcelona la cobertura con la que protegerse, un gol más de ventaja, añadido al que ya trajo en el equipaje de regreso de París. Xavi pensaba en la muralla y por eso llamó a una torre, Íñigo Martínez. En su decisión había cálculo y poco ADN Barça. En su decisión perdía al futbolista que mejor podía correr a la espalda de un PSG desesperado y volcado. Lo lamentaría.

Araujo ve la tarjeta roja.

Araujo ve la tarjeta roja.FRANCK FIFEAFP

Había todavía partidos por jugar dentro del mismo partido, pero Luis Enrique era quien más claro tenía el suyo. Lo había empezado con el mando en el juego y los cambios que más le habían dado en el Parque de los Príncipes, como Barcola y Vitinha. El primero se situó en la izquierda, con Dembélé en la derecha, por lo que el lugar del 9 era para Mbappé. Centrado, buscaba saltar de la línea del vértigo, mientras Araújo iba en su busca a todas partes. Era el central del riesgo y era el central por el que empezaron los problemas para el Barcelona cuando había hecho lo más difícil y podía jugar realmente el partido que quisiera. En la ida lo consiguió; en la vuelta, no.

EXPULSIÓN FATAL

Barcola ganó en la carrera un balón al espacio y Araújo lo derribó al borde del área. La falta fue fuera del rectángulo, pero el colegiado le mostró la roja por tratarse Barcola del último hombre. El VAR no corrigió su decisión pese a las protestas azulgrana y al no estar el francés exactamente en perpendicular a Ter Stegen. Restaba una hora de partido, la hora de la autodestrucción.

El gol del PSG no llegó en la jugada inmediata, una falta mal lanzada por Nuno Gomes, pero el gol estaba ya en la dinámica del partido. Un centro de Barcola, en otra de sus llegadas por la izquierda, no fue interceptado por Cubarsí ni por Cancelo y Dembélé marcó a placer. Lo mejor para el Barça fue el descanso; lo peor, el regreso.

Lo hizo el equipo azulgrana con las mismas dudas con las que se había ido a la caseta, con el mismo miedo. El acoso metió en su área a un equipo que no está para levantar murallas, y menos un Íñigo Martínez fuera de la dinámica del equipo. En pocos minutos, había visto una amarilla en una disputa con Mbappé. También el francés, pero las amonestaciones pesan menos en un delantero.

UN TÉCNICO HISTÉRICO

Fabián pudo adelantar al PSG a los pocos minutos, pero lo hizo a continuación Vitinha en un paseo por la frontal en el que nadie salió a su encuentro, blando De Jong y en un papel que no es el suyo Lewandowski. El hábitat del polaco es el área contraria, no la suya. Mal asunto. La igualada en inferioridad enmudeció a un Montjuïc convencido de lo contrario y sacó de sus casillas a Xavi. Por una falta sin trascendencia, le dijo de todo al árbitro y pateó una valla de publicidad. Su expulsión era su fracaso, que no pudo corregir su hermano Óscar con las entradas de Ferran Torres, Fermín o Joao Félix, al que siguió el de un Barça desnortado y desamparado.

Cancelo cometió un penalti sin sentido sobre Dembélé cuando el francés iba hacia fuera del área. Ter Stegen se movió como un muñeco de feria y entonces Mbappé, un Mbappé de blanco, no falló para firmar con otro gol más una sentencia en la que poco tuvo que ver. Casi todo, lo bueno y lo malo, fue cosa de Xavi.

Las dos Champions de Mbappé en Montjuïc bajo las miradas del presente y del futuro

Las dos Champions de Mbappé en Montjuïc bajo las miradas del presente y del futuro

Kylian Mbappé es cantidad, pero lo que se espera de Mbappé es que sea calidad. Los números del delantero del PSG esta temporada son incontestables, con 39 goles en 41 partidos en todas las competiciones. Sólo Harry Kane puede mejorarlos, aunque de forma prácticamente centesimal, ya que ha marcado los mismos tantos con el Bayern, pero en dos partidos menos: 39 en 39. Vinicius ha conseguido la mitad (18), lo mismo que Lewandowski (20), mientras que Haaland se queda a casi a una decena de distancia (31). Pero a Mbappé no le sirve el granero, sólo el mejor grano, el de las ocasiones especiales. Es un jugador elegido y pagado para decantar las grandes noches. Lo es para quienes se sienten despechados en el Parque de los Príncipes por su anunciada marcha, como para quienes le aguardan ilusionados en el futurista Bernabéu. La última noche de París, en cambio, fue una noche cualquiera, gris, mediocre. La de Montjuïc le aguarda, hoy, entre la deuda de su pasado y el crédito de su futuro. Son sus dos Champions.

El nulo protagonismo de Mbappé ante el Barcelona en la ida de los cuartos ha hecho que las críticas arreciaran de forma exacerbada en su país en la última semana, amplificadas por el dolor que produce su partida entre los franceses. La única esperanza es esta Champions y su participación en los Juegos de París, algo que, como dijo el propio Mbappé, ya no está en su mano ni en la de Emmanuel Macron. Si es la mano de Florentino Pérez, es una mano dura. Sin embargo, no es únicamente dolor. Es la impresión de que siempre han estado por delante sus intereses personales, económicos, y los de su clan. En los días malos, eso pasa factura. También hay madridistas que lo piensan.

"Su actitud fue escandalosa"

De «falta de respeto» llegó a calificar su actuación en la ida el ex campeón del mundo Christophe Dugarry. «Se pueden fallar pases, regates, tener un mal día, pero la actitud de este muchacho fue escandalosa», prosiguió en una intervención en 'RMC Sport'. «Has escupido a la cara de la Champions, que al parecer quieres ganar. Tenías la oportunidad de jugar en un estadio tan hermoso, contra todo un Barcelona, y la actitud fue una vergüenza absoluta», añadió el ex campeón del 98 y ex azulgrana, que apeló a la dignidad y orgullo de la estrella ante el partido de vuelta.

Las duras, incluso insultantes, palabras de Dugarry no se reprodujeron en su textualidad entre el resto de los medios y creadores de opinión franceses, pero todos coincidieron en las críticas, también los que habían sido más próximos al jugador y su entorno. El PSG se ha liberado del divismo que representaban Neymar y Messi, y busca un nuevo camino con Luis Enrique, con el que Francia fue mucho más condescendiente que con Mbappé, pese a que su planteamiento fue ampliamente superado por el de Xavi. El propio Dugarry excusó de responsabilidades al asturiano por el adverso 2-3.

¿UN PSG SIN EGOS?

Luis Enrique, ayer en Montjuïc, dijo que tiene un «equipo unido, sin egos». Tuvo algo de interpretación la declaración del asturiano, que tuvo sus desencuentros iniciales con la estrella gala como también le pasó con Messi en el Barcelona. No mencionó a Mbappé ni una sola vez, pero quizás pensaba en él cuando dijo que «un gran jugador debe saber levantarse después de caer, como nos pasó a nosotros».

«Estoy seguro de que veremos a un gran Mbappé en la vuelta. Conociéndolo un poco, asumirá la responsabilidad y hará un gran partido. Es el jugador que más querrá clasificarse». La voz no es de Luis Enrique, sino de Javier Pastore, ex futbolista del PSG. Ha sido de las pocas contemporizadoras con Mbappé extramuros del Parque de los Príncipes. De hecho, el argentino puso por delante el acierto de Xavi al encontrar el antídoto contra el delantero: «Fue muy inteligente, al colocar a dos hombres para cerrarle los espacios. Pero al atraer defensas, Mbappé liberó espacio para otros, lo que explica que viéramos más uno contra uno de Dembélé en la banda opuesta».

Dada la ventaja de un gol con la que parte el Barcelona tras el 2-3 de la ida, Luis Enrique no espera un partido muy distinto. Tampoco debería hacerlo, pues, Mbappé, que necesitará del mejor desborde y hasta duplicidades ofensivas frente a un mejorado Koundé, un Araujo firme y el creciente Cubarsí.

Todas las cábalas colocan a Mbappé en el Madrid la próxima temporada. José Mourinho se ganó buena parte de su fichaje después de apear, como técnico del Inter, al Barça de Guardiola en unas semifinales de Champions en el Camp Nou. El francés no necesita ese refrendo, pero sabe que en este partido se juega más de una Champions, la de su pasado y presente como francés y jugador del PSG, y la del futuro.

Luis Enrique: "No tengo ninguna duda de que Xavi es 'top', pero mantengo lo que dije, mi reivindicación"

Luis Enrique: “No tengo ninguna duda de que Xavi es ‘top’, pero mantengo lo que dije, mi reivindicación”

Luis Enrique era esperado en Montjuïc, mucho, después de sus palabras en París, del debate del ADN Barça y de al derrota (2-3) sufrida ante el Barcelona. Estuvo conciliador, no desafiante, dijo que la especulación está prohibida en la vuelta de estos cuartos de Champions, devolvió los elogios a Xavi y celebró el récord de goles global de la ida de los cuartos, en el que implicó a los ocho entrenadores, no únicamente a los que tienen pasado azulgrana. "Esto no es sólo ADN Barça, es ADN fútbol", zanjó y se levantó, raudo, directo al entrenamiento de los suyos.

Después de unas respuestas en las que no era el Luis Enrique habitual, nada provocador, entró de nuevo en la polémica para hacer aclaraciones: "Xavi me parece un entrenador 'top' y me gustaría que alguna vez me hubiera entrenado, pero no podrá ser. Como Guardiola, como Luis Aragonés. Pero como no lo ha hecho, no puedo decir que conozca al Xavi entrenador. No obstante, mantengo lo que dije, mi reivindicación, porque una derrota no cambia nada". Lo que dijo antes de la ida es que representaba mejor el ADN Barça que su oponente en esta eliminatoria.

En cuanto a la derrota sufrida en París hace una semana, manifestó: "El resultado no refleja lo que merecimos, al menos el empate. Hemos de dar una mejor versión mañana. No existe la palabra especulación. Estamos plenamente convencidos de que le vamos a dar la vuelta".

"Un jugador profesional se cae y se levanta, hay que saber adaptarse a eso", explicó, sin mencionar directamente a Mbappé, que ha sido foco de las críticas la última semana. "Tengo un equipo unido, sin egos", apostilló.

Vaticinó el asturiano un partido con goles, similar al de la vuelta, en el que, reseñó, "Ter Stegen jugó 24 balones largos, todo un récord". Algo con poco ADN Barça, aunque no lo dijera.

Guardiola, Xavi, Arteta y Luis Enrique, el ADN Barça en la Champions: juego, cantera y cainismo

Guardiola, Xavi, Arteta y Luis Enrique, el ADN Barça en la Champions: juego, cantera y cainismo

Las siglas ADN corresponden al ácido desoxirribonucleico, el contenedor de la carga genética que se transmite en el desarrollo de los seres vivos. El elemento fundamental de este ácido son los nucleótidos, las moléculas del interior de las células. En el caso del ADN se trata de la adenina, la guanina, la timina y la citosina. La ciencia no considera a un equipo como a un ser vivo, pero la realidad es que pueden establecerse paralelismos en su de

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Su ADN se rio de Luis Enrique

Su ADN se rio de Luis Enrique

Actualizado Jueves, 11 abril 2024 - 00:01

Gran partido del Barça. El mejor de hace muchos años. Siempre jugó mejor al fútbol que el lánguido PSG, que demostró que una cosa es jugar en la Ligue 1 y otra competir en Europa. Tanto ADN barcelonista de Luis Enrique, que tuvo que bailar al ritmo de una sardana.

Una vergüenza escandalosa para el entrenador del PSG, que tiene un equipo lento, incluso agotado física y mentalmente al final, para un estrepitoso fracaso. Hasta Mbappé paseó como una

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Xavi da una lección de ADN a Luis Enrique

Xavi da una lección de ADN a Luis Enrique

Después de colocarse por delante de Xavi en la absurda discusión del ADN, Luis Enrique, genio y figura, recibió una cura de humildad que en el campo fue toda una lección de ADN. El Barça se reencontró con la pelota como si lo hiciera con un gen para decirle a Luis Enrique la verdad. El asturiano es un personaje, jugador o entrenador, de pasado y amores azulgrana, pero lo suyo en el campo, diga lo que diga, es más la carrera que el toque. Con las

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El Barça minimiza a Mbappé y conquista el Parque de los Príncipes

Actualizado Miércoles, 10 abril 2024 - 23:22

Que París no se acabe nunca, debió de pensar el Barça porque allí, en el Parque de los Príncipes, se agigantó, superó sus demonios ante un PSG tan letal como inconsistente. Fue más resistente y también más valiente para salir vivo de una eliminatoria que se antojaba una trampa mortal y que, sin embargo, le da ligera ventaja en el camino hacia las semifinales. [Narración y estadísticas (2-3)]

Creyó el Barça que se podía vivir cómodamente ante Mbappé y su tropa en unos cuartos de la Champions. Incluso que se le podía hacer daño. Lo sintió después de 20 minutos en los que se hormigonó y fue viendo cómo no tenía enfrente un rival imbatible. Lo detectó Raphinha cuando aprovechó un pase larguísimo de Ter Stegen para provocar el error de un tembloroso Donnarumma y obligar a Lucas Beraldo a rebañar lo que ya parecía el primer gol.

Son mortales y en las transiciones tenían los azulgranas un arma que iban a explorar mientras el PSG probaba con disparos lejanos de Lee o Asensio, dos apuestas de Luis Enrique, y Mbappé no sacaba ventaja de sus endiabladas carreras hacia el área. Le aguantó el primer mano a mano Araújo con la ayuda de Koundé y entre todos consiguieron que la movilidad que generaba en el ataque junto al mallorquín y a Dembélé fuera estéril. No presentó el astro francés sus credenciales a ser decisivo en los próximos Clásicos de LaLiga.

Cubarsí, frente a Mbappé

Desde esa solidez, el Barça creció. No será con el purista ADN culé, pero sí con una eficacia que le hace sostenerse en los partidos. Nuno Mendes salvó bajo palos el remate de Lewandowski en un saque de córner y Raphinha, ante las dudas del guardameta, probó desde la frontal. Le habían cogido la medida a los parisinos con una presión y una aceleración precisa desde los costados que emborronar el plan de Luis Enrique.

El polaco desquiciaba a los centrales y Lamine Yamal encontraba los espacios en la orilla para desequilibrar, lo mismo que Raphinha. Si el peligro del PSG podía llegar casi desde cualquier parte, el del Barça, también. Hasta emergió la figura del púber Pau Cubarsí para graduarse en un gran escenario europeo plagado de estrellas. Primero viendo solo a Lewandowski, que se revolvió en el centro del campo y encontró a Yamal, otro cuyo descaro le llevó a probar con un centro que Donnarumma interpretó como un disparo y su salida en falso dejó a Raphinha la portería vacía para adelantar al Barça. Si en Cubarsí nació ese gol, en el jovencísimo central tuteó a Mbappé primero en estático y después en carrera.

Con ese chute de confianza se fue el Barça al descanso. El marcador era corto y justo, tanto que se nubló en los cinco primeros minutos de la segunda parte. Sin casi colocarse sobre el césped, apareció Dembélé, se apoyó en la carrera hasta línea de fondo de Mbappé y el remate del ídolo francés lo escupió Araújo a los pies de su ex compañero. Recortó a De Jong y cruzó un disparo incontestable.

Los futbolistas del Barça celebran un gol ante Mbappé.

Los futbolistas del Barça celebran un gol ante Mbappé.AFP

No se había recompuesto el Barça y en esa descomposición encontró hueco Vitinha en el área para marcar el segundo tanto y Barcola para estrellar el tercero en palo. Necesitaba el Barça salir de las cuerdas y Xavi no lo dudó. Para sobrevivir en París había que ser valiente y generar en el rival las mismas dudas de por dónde llegaría el peligro que sus jugadores estaban acusando. El mejor para este ejercicio de prestidigitación era Pedri.

Ni las semanas de lesiones hacen que pierda su diálogo con la pelota. La primera que tocó acabó convertida en un globo que sorteó la defensa parisina y Raphinha cazó en un remate acrobático. El Barça se levantaba con la magia del canario y el duelo se enloquecía. Barcola probó con un mano a mano del que salió ganador Araújo y, otra vez Dembélé, rey del caos, se estrelló en el poste. La respuesta la dio Joao Félix con un centro raso que iba a embocar Ferran Torres cuando apareció Nuno Mendes. Nadie tenía miedo, como si no hubiera un partido de vuelta, como si nada pudiera perderse. Entonces Gündogan telegrafió un saque de esquina a la cabeza de Christensen al segundo palo para agigantar al Barça en una eliminatoria muy viva.

Luis Enrique ataca a Xavi sobre el ADN Barça: "Yo lo represento mejor... No es opinable, son los datos "

Luis Enrique ataca a Xavi sobre el ADN Barça: “Yo lo represento mejor… No es opinable, son los datos “

Actualizado Martes, 9 abril 2024 - 16:54

Luis Enrique no es de los que se queda con medias tintas. Por eso, no fue ninguna sorpresa que su respuesta ante la pregunta de quién representa mejor el estilo del Barça, si él o Xavi, fuera tremendamente contundente. "Sin ninguna duda, yo. Mirad los datos y los títulos, la posesión, la presión alta... Sin ninguna duda yo, aunque habrá gente que piense lo contrario. No es opinable, son los datos", aseguró el actual técnico del PSG quien, a lo largo de sus tres temporadas como técnico barcelonista, ganó una Champions, dos Ligas, tres Copas del Rey, una Supercopa de España, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubs.

El ex entrenador azulgrana y ex técnico español, por otro lado, quiso dejar claro que su paso por la entidad barcelonista no significa ventaja o desventaja alguna. "No conozco al Xavi entrenador, conozco al compañero y al jugador, pero como entrenador, tan sólo a nivel de aficionado. Si es cierto que conozco muy bien al club y a sus jugadores, pero esto no tiene que ser una ventaja o un inconveniente", esgrimió un Luis Enrique que, además, trató de esquivar el cartel de favorito, por mucho que el PSG se haya construido en los últimos años poco menos que a golpe de talonario.

"La política del club ha cambiado este año, vamos en una línea diferente. Yo pongo sobre el papel que no es positivo cargar de presión a un equipo que no ha ganado ninguna Champions. ¿Podemos ganarla? Sí, pero primero hay que ganarle al Barça. Como club desconocemos, este trofeo" aseveró el asturiano, quien evitó también personalizar el duelo de este miércoles en Kylian Mbappé. "Aunque me preguntáis por un caso individual, yo prefiero hablar a nivel colectivo: creo que estamos en el mejor momento de la temporada. Estamos en un gran momento físico y mental y la eliminatoria llega en la ocasión más oportuna para nosotros", señaló Luis Enrique.

Para saber más

En su opinión, el hecho de jugar la ida en casa, lejos de perjudicarlo, es un aliciente más para su equipo. "Yo prefiero jugar primero en casa, porque tendremos un ambiente único y una afición que nos apoyará cuando estemos fastidiados. Además, los goles a domicilio ya no valen más que los marcados en casa. Aunque, a decir verdad, si me hubiera tocado el primero fuera te hubiese dicho lo contrario. No hay que quejarse. No sirve de nada", sentenció el técnico del PSG, para quien el choque, sin duda, tendrá será toda una amalgama de emociones. "Es un partido diferente para mí, pero ya me enfrenté al Sporting y le marqué goles. Soy un profesional. Con el Barça tengo una relación de amor total y estoy orgulloso, pero soy un profesional y me debo al club que confió en mí", zanjó.

El entrenador del FC Barcelona, Xavi Hernández, aprovechó la comparecencia previa al duelo ante el PSG para responder al asturiano. "Es Luis Enrique, ya lo conocéis. Yo también lo conozco bien, tengo muy buena relación personal con él y para mí se merece todo el respeto. Es uno de los mejores entrenadores del mundo y tiene un equipo hecho para ganar la Champions, que ya sé cómo son los qataríes. Los dos buscamos lo mismo. Podemos presumir de que Luis Enrique, Pep y Arteta también son ADN Barça. Somos cuatro entrenadores con ADN Barça que están en cuartos de Champions. Los dos buscamos lo mismo, este ADN Barça que nos identifica y que nos enorgullece", aseguró por su parte Xavi en su rueda de prensa previa al partido.

"No me lo tomo como un duelo entre Luis Enrique y yo, es un partido entre el Barça y el PSG y siempre he pensado que los futbolistas son los protagonistas de la película. Sin duda", recalcó el técnico azulgrana, quien insistió en quitar hierro a las palabras del asturiano. "Los dos buscamos lo mismo. Eso de las estadísticas... Igual lo superó yo en robos y él a mí en goles... No busquéis polémica, porque no la hay", abundó. Cómo no, sabe muy bien cómo se las gasta el asturiano como entrenador, y de primera mano.

"Fue un año difícil al principio, y acabó de película. Sabía que sería mi último año, y, al final, ganamos un triplete y levanté la Champions como capitán. Tuvimos una muy buena relación de capitán a entrenador y creo que le ayudé muchísimo. Lo recuerdo con orgullo", aseguró un Xavi que descartó aplicarle un marcaje especial a Mbappé.

"Nunca me ha gustado, ni como futbolista ni como entrenador. No lo he usado nunca. Otra cosa es estar más atento, crear superioridades y cosas así", aseguró el técnico, quien, eso sí, no dudó en elogiar una y otra vez la figura de Ousmane Dembélé. "Nos quitaron un gran jugador y se reforzaron. Ellos son los favoritos", sentenció.

Luis Enrique anuncia su regreso a Twitch tras la experiencia del Mundial

Luis Enrique anuncia su regreso a Twitch tras la experiencia del Mundial

Actualizado Lunes, 18 marzo 2024 - 23:16

Luis Enrique, entrenador del PSG, anunció su "regreso" este jueves a la plataforma de streaming Twitch para una sesión de preguntas-respuestas con los internautas. El asturiano ya tuvo una primera experiencia, muy comentada, cuando era seleccionador de España y durante el Mundial de Qatar se conectaba diariamente para hablar con sus abonados.

"El regreso, Twitch 2", dice Luis Enrique, que llegó al banquillo del PSG a mediados del año pasado, en un vídeo publicado en Twitter. "Os informo que el jueves 21 de marzo a las 20:00 horas vuelvo a Twitch, como siempre en mi canal", declaró.

Según detalló él mismo, para esta cita quiere hablar de un "proyecto familiar", antes de "un contacto espontáneo" con los internautas, "sin filtros, de manera directa".

Durante el Mundial 2022, cuando era seleccionador de España, tenía una cita diaria con sus centenares de miles de abonados [actualmente su canal cuenta con casi 800.000] para hablar en directo y responder a las preguntas sobre temas que no solo se limitaban al fútbol.

España fue eliminada por Marruecos en octavos de final y dos días después Luis Enrique fue despedido. Su primera aventura en Twitch también terminó entonces.

Donación

El ex seleccionador publicó este viernes un documento en redes sociales en el que certifica la donación de los beneficios cosechados en su canal de Twitch durante el Mundial de Qatar 2022 a la Fundación Oncológica infantil Enriqueta Villavecchia.

"Cuando inicias un canal de stream en Twitch firmas un contrato standard con la plataforma (en nuestro caso 50% para ellos y 50% para mí). Os dejo el certificado que corresponde a ese 50%. Muchas gracias por vuestra generosidad y apoyo", aseguró en su perfil de Twitter.

La donación se realizó el 23 de febrero, según el certificado mostrado en Twitter. En 2019, el ex técnico del Barça perdió a su hija Xana, de nueve años, a causa de un cáncer.