Courtois cumple ante el Alavés en una noche de retos personales del Madrid

Courtois cumple ante el Alavés en una noche de retos personales del Madrid

Queda un reto que no es un reto cualquiera. Es el reto. Es la Champions. Es el Grial que da sentido a la historia del Madrid. Ancelotti toma decisiones para afrontarlo con las mayores energías y la menor desconexión, al alternar futbolistas y alineaciones, y los jugadores aprovechan estos partidos de vigilia para alcanzar algunos retos personales. [Narración y estadísticas, 5-0]

El mayor es el de Courtois, titular por tercera vez desde la consecución del título, y con la intención de demostrar que es el de antes, el que sujetó la Decimocuarta en París como un náufrago sujeta el último cabo.

Cumple el belga, con tres porterías a cero, aunque de momento ante la tropa de la Liga. Para hacerlo con más garantías necesitaría rivales más peligrosos. Sólo la ceja de Ancelotti sabe lo que piensa el italiano ante el gran dilema de Wembley: Lunin o Courtois.

También Vinicius quiere aprovechar cada gol, dos ante el Alavés, porque siente que está en la carrera del Balón de Oro, y eso tiene su cosa si llegara a ser Mbappé quien le aplaudiera con el trofeo en el Bernabéu. Hasta Bellingham vuelve al gol, quién sabe si a tiempo de un Pichichi extraño, y también Güler, el último del pelotón. La temporada puede tener premios para todos, no sólo colectivos, pero si les dan a escoger uno, todos pedirían el mismo.

Paradas ofreció Courtois y al gol llegaron Bellingham, casi sin quererlo, y Vinicius, queriéndolo más que ninguno, frente a un Alavés al que le faltaba la tensión de jugarse la vida. Los de Luis García Plaza han hecho bien su trabajo, salvados mucho antes del final.

También el Madrid, en su caso con la consecución del título, pero cuando la calidad se libera de la presión, las diferencias son todavía mayores. Como Cádiz o Granada, sea con suplentes o titulares, el Alavés fue goleado por el talento sin cadenas. No son cadenas que ponga el entrenador, lo hacen las circunstancias.

Lo poco que el Alavés pudo enseñar ofensivamente lo hizo nada más empezar y en el desenlace. Primero en una acción de Hagi sobre la línea. Samu recibió en el área pequeña y Courtois reaccionó abajo con una doble intervención. El Bernabéu le ha cogido cariño a Lunin porque valora el sentido de la justicia, pero en ese instante la duda se movió como una ola por la grada. Volvió en sendos remates de Hagi y Samu.

Este Hagi tiene buen pie aunque no sea el gran Hagi, conocido como el Maradona de los Cárpatos, de pasado madridista y azulgrana. No es el padre, pero habría firmado la maniobra de su hijo en el segundo tiempo que provocó, esta vez sí, una intervención, mano abajo, de las sobresalientes de Courtois.

El belga está, aunque no sabemos hasta dónde está. El dilema va a perseguir a Ancelotti hasta Wembley con mucho ruido alrededor, debates, tertulias y encuestas. Quedan dos partidos de Liga, en Villarreal y ante el Betis en el Bernabéu. De sus elecciones en la portería se desprenderán más pistas.

Pruebas para Wembley

Courtois fue titular en un once que, hoy, sería el titular en Wembley, salvo por Rüdiger, que se quedó en el banco para dar minutos a Militao. El brasileño podría acompañar al alemán en la finalísima, pero jamás dejarlo fuera, después de un año colosal. Camavinga, por su parte, apunta a esa titularidad ante el Borussia Dortmund, dada la lesión de Tchouaméni. Son distintos. Menos defensivo y menos posicional, Camavinga aporta, en cambio, un dinamismo muy valioso, especialmente en clave ofensiva. La acción en la que centró para que Vinicius marcara es una prueba de dónde le gusta llegar.

El francés fue el primero en abandonar el campo para dejar su sitio a Güler, alguien que va a tener que exprimir su calidad en el futuro. La tiene. También gol, como volió a demostrar al cerrar la goleada. Hace falta tiempo para saber si tiene todo lo demás para hacerlo, porque este Madrid se va a poner muy caro.

Vinicius insistió, siempre profundo y asistente, especialmente a Rodrygo, pero también aliado de nuevo con el gol. Bellingham le asistió para batir a Owono de tiro cruzado. Era el cuarto tanto del Madrid, no tan potente, sin embargo, como el disparo con el que Valverde logró el tercero. Si no fuera por el tiempo ausente por lesión de Vinicius, quizás Bellingham, que abrió el marcador con un centro-chut, no pugnaría por un Pichichi que estaría cerca del brasileño. Con Vini los debates son otros.

El Simeone de los récords: los partidos de Koke, los goles de Griezmann y los Zamoras de Oblak

El Simeone de los récords: los partidos de Koke, los goles de Griezmann y los Zamoras de Oblak

En el momento en que Rodrigo de Paul acunaba la bola en el pecho tras el rechace de Unai Núñez, Simeone hablaba con Nelson Vivas sobre cómo meter mano al Celta. El golazo posterior del argentino no interrumpió la conversación. Con ese tanto y el pitido final, el técnico argentino sumaba 400 victorias, el entrenador de LaLiga que más ha conseguido.

Y así respondía a la pregunta sobre esa marca histórica: "No lo analizo, miro para adelante, como he buscado ser siempre. No me detengo. Sé lo que quiero, sé lo que busco, estoy convencido de por dónde es el camino y seguiré empujando hasta el último día que esté acá". Ese es Simeone y así se explica la cantidad de marcas que ha roto con el Atlético.

Es el técnico con más partidos dirigidos como rojiblanco, con 678. De los cuales ha ganado 400, empatado 151 y perdido 127. Lleva 13 años al frente del Atlético y si cumpliera su contrato, que finaliza en 2027, superaría a Miguel Muñoz como técnico con más temporadas en el banquillo de un mismo club. Muñoz cumplió 14 en el Real Madrid.

Dentro del club sus marcas son estratosféricas y llevaría un buen rato recopilar todos los registros que ha batido como la mayor racha de victorias europeas consecutivas con 16; de triunfos como local con 20, si hablamos de partidos imbatido en casa el número se elevaría a 28; el que más títulos ha levantado, ocho y así podríamos seguir si metemos porcentajes y goles. El de victorias es el mejor con un 59%. Y si hablamos de tantos, su fortaleza defensiva se demuestra en el ratio de goles encajados por encuentro con 0,8, el menor.

Pero la labor del entrenador, como no podía ser de otra manera, se ha dejado notar en una plantilla que, gracias a él, ha crecido a nivel europeo gracias a la disputa de todas las ediciones de la Champions desde su llegada (sin contar con la media temporada en la que sustituyó a Gregorio Manzano en 2011) y también en el entorno doméstico hasta situarse en el segundo escalón tras Real Madrid y FC Barcelona y le ha permitido grandes momentos como la victoria en la final de la Copa del Rey ante el eterno rival en su propia casa en 2013.

Jugadores históricos

Así, jugadores como Koke, el eterno capitán rojiblanco han conseguido situar la marca de jugador con más partidos disputados en la historia del club con 634 encuentros. Lejos quedan los 553 que llegó a competir el mítico centrocampista colchonero Adelardo Rodríguez.

En la delantera, este año se celebró otro récord. Ni más ni menos que el de mayor número de goles marcados en la historia atlética. Antoine Griezmann fue el futbolista que consiguió superar a Luis Aragonés que había hecho 173 goles con la zamarra rojiblanca. El francés lleva 178 además de 81 asistencias.

Por último, hay que acordarse de Jan Oblak, otro de los bastiones de la época de Simeone. El cancerbero esloveno es el guardameta y el extranjero con más partidos en la historia del Atlético con 441 y también el que más trofeos Zamora ha conseguido con cinco. En LaLiga empata en cabeza con Ramallets y Víctor Valdés.

De Paul libera del tedio al Atlético y le deja a un punto de asegurar la Champions

De Paul libera del tedio al Atlético y le deja a un punto de asegurar la Champions

¿Qué es el fútbol si no un precioso juego de niños grandes? Un juego que alguien, para disimular, convirtió en deporte. Y de deporte pasó a modo de vida, a profesión, a pasión... Y así más de 60.000 personas se reunían en el Día del Niño en el Metropolitano para honrar a los más pequeños y reivindicar que en la vida hay que crecer, pero no dejar nunca de jugar. [Narración y Estadísticas, 1-0]

Gratos recuerdos de la infancia le traería a Claudio Giráldez la rojiblanca. El entrenador del Celta estuvo en las categorías inferiores del Atlético, club al que hoy se enfentaba en un precioso día en Madrid. Los objetivos de ambos equipos, en cambio, no son ningún juego. Los gallegos aún no han salvado la categoría y, además, veían como el Cádiz venía de ganar el turno anterior. El Atlético debía aprovechar el pinchazo del Athletic para asegurarse ya, casi matemáticamente, la cuarta plaza. Lo hizo.

Así, como entre niños andaba el juego, en apenas 15 minutos casi lían la primera Riquelme y Lino. Una pareja llamada a alternarse, pero que la tranquilidad de la posición del Atlético les ha permitido compartir once varias veces. En esta ocasión, un pase en profundidad del brasileño encontró al canterano en una gran diagonal pero estrelló el cuero en Guaita tras un mano. En el rechace se intercambiaron los papeles, pero el portero valenciano repitió parada.

El partido amaneció tranquilo para los locales, tanto que en el Fondo Sur estaban más a los bailes tipo trenecito y al bufandeo que al propio duelo. Más de 20 minutos tardó el Celta en tener una posesión larga entre presión y amenazas rojiblancas. 'Tirito' de Correa, disparo de Koke y alguna opción más finalizada con algo menos de claridad.

Aspas lucha con Barrios un balón.

Aspas lucha con Barrios un balón.PIERRE-PHILIPPE MARCOUAFP

Los rojiblancos han agradecido en este final de temporada el 5-4-1 que ha impuesto el entrenador y al que se han agarrado tras la sangría de goles recibidos a lo largo del año, 63 en todas las competiciones. Llegan algo menos, pero Oblak está mucho más protegido. En la primera parte, ni un tiro a puerta tuvo que detener el esloveno. Guaita, varios, el más franco fue un mano a mano de Llorente que el madrileño golpeó blando a las manos del portero del Celta.

Volvió Morata al verde tras su problema del trigémino. El verdadero, no el que salió los últimos 7 minutos ante el Mallorca. El primer balón que tocó el madrileño fue un cabezazo que casi se convierte en el primer gol del partido y el de la vuelta a puerta del delantero. Han sido tres meses y un tanto. Poco para el nueve titular de un equipo que ha aspirado a todo esta temporada.

Frenó el partido en los segundos 45 minutos, como si fuera la hora de la siesta para los niños. El balón se hizo pesado, pero más para un bando que para otro. El Celta, agazapado, encontró su contra para adelantarse en el marcador. Aspas falló tras un pase atrás de Bamba, disparo muy centrado que Oblak paró sin problemas. Aviso para navegantes, no era tiempo para siestas.

Despertador argentino

Salieron Barrios y De Paul para animar el cotarro. El Celta crecía desde su solidez atrás, no era poca cosa en un equipo que ha encajado más goles, 52 de los que ha metido, 40. El partido pedía a Griezmann y a Aspas, que se abrazaron cariñosos al inicio del duelo. Al primero no le dio tiempo a aparecer, el Cholo le cambió antes. El segundo picaba, pero no mordía.

Sólo el sonido de una alarma nos despertaría de la siesta. Fue Rodrigo De Paul quien sacó la genialidad ante el tedio, la puso en la escuadra tras un córner y se encendió un estadio adormilado. Vuelve el unocerismo, gana el Atlético.

El Real Madrid recibe la 36 en Valdebebas y Cibeles espera ya a los campeones

El Real Madrid recibe la 36 en Valdebebas y Cibeles espera ya a los campeones

Actualizado Domingo, 12 mayo 2024 - 10:58

La Liga ya está en manos de Nacho Fernández. Esta mañana el capitán del Real Madrid, junto a Florentino Pérez, ha recibido el título liguero número 36 de manos del presidente de la Federación, Pedro Rocha. Un trofeo que el equipo de Ancelotti conquistó oficialmente con su victoria ante el Cádiz y la derrota del F.C. Barcelona en Montilivi.

En un acto protocolario y simple en uno de los campos de la Ciudad Deportiva de Valdebebas, jugadores y cuerpo técnico han saludado uno a uno al presidente del fútbol español antes de que Rocha entregara al capitán el trofeo. "Ganar la liga es muy difícil. Cuando algo es merecido y tan grande, es el momento de ir a Cibeles y apoyarnos para esa final tan importante que tenemos", ha declarado Nacho ante los medios oficiales del club.

Pasados pocos minutos de las 10:30 h, el autobús ha llegado a la Puerta del Sol, donde esperaba Isabel Díaz Ayuso, que ha recibido a los jugadores a la entrada del edificio. Después de entregar una réplica del trofeo y una camiseta a la presidenta, el primero en tomar la palabra ha sido Nacho Fernández quien ha agradecido la presencia de la líder popular y ha querido señalar la importancia del título conseguido.

Al finalizar, el equipo blanco se dirigirá al Ayuntamiento de la capital, situado en el antiguo Palacio de Cibeles, para realizar un acto junto al alcalde José Luis Martínez Almeida a las 11: 30 h. Posteriormente, comenzará una celebración multitudinaria en la fuente de la Cibeles, donde ya esperan miles de aficionados madridistas que desean celebrar un nuevo título liguero junto a sus ídolos.

El plan mental y físico del Madrid hacia Wembley: "Hay que desconectar, pero no son vacaciones"

El plan mental y físico del Madrid hacia Wembley: “Hay que desconectar, pero no son vacaciones”

Cuando Szymon Marciniak pitó el final del partido entre el Real Madrid y el Bayern comenzó la cuenta atrás hasta la final de la Champions, que se celebrará el próximo 1 de junio en Wembley. 23 días en los que el conjunto blanco disputará cuatro partidos de una Liga ya conquistada, celebrará con su afición el título doméstico y la presencia en Londres, descansará lo corrido y lo sufrido y se volverá a reconectar a tiempo para afrontar el gran duelo de la temporada ante el Borussia Dortmund. Pero, ¿cómo realizar todo ese proceso mental y físico? ¿Cuánto se debe desconectar? ¿Cuándo hay que empezar a centrar la mente y el cuerpo en ese sábado continental?

El Madrid tiene una extraordinaria ventaja sobre los alemanes en este sentido: los blancos van a repetir exactamente la misma situación vivida en 2022. Ese año, el cuadro de Ancelotti ganó la Liga el sábado 30 de abril, a falta de cuatro jornadas, disputó y ganó la vuelta de semis de Champions contra el City el 4 de mayo y tuvo que esperar hasta el 28 de ese mes para enfrentarse al Liverpool en París. 23 días sin un partido 'importante' en el calendario.

Este curso, lo mismo: el Madrid consumó su título nacional el 4 de mayo, venció al Bayern el día 8 y debe aguardar al 1 de junio para medirse al Dortmund. De nuevo, 23 días sin un compromiso clave.

«La ventaja que tiene el Madrid es que esa situación mental la gestiona muy bien, empezando por el entrenador y siguiendo por los jugadores. Porque hay que saber ajustar bien los tiempos», analiza a este periódico David Peris, psicólogo experto en Psicología del Deporte que detalla lo que debería ser la correcta preparación del conjunto blanco hacia la final de la Champions.

«Tiene margen y puede jugar con eso. Permites que el equipo baje revoluciones, que los futbolistas que han jugado más se recuperen física y mentalmente, le das minutos a los que menos han participado y luego les vuelves a meter», resume, insistiendo en la importancia de desconectar, pero no en exceso. «Cuando consigues un objetivo tan importante puedes bajar los brazos, especialmente si el otro objetivo que tienes es lejano. Te mata el saber que ya has conseguido lo que necesitabas, sobre todo a nivel motivacional. Habría que bajar revoluciones para desconectar, pero no demasiado porque no son unas vacaciones, bajas intensidad y enseguida te vuelves a meter mentalmente».

El plan madridista

El Madrid viaja hoy a Granada, celebrará mañana la Liga y la final de Champions en Cibeles, se enfrentará al Alavés en el Bernabéu el martes, visitará Villarreal el domingo 19 y recibirá al Betis el sábado 25. El plan de Ancelotti está claro: rotar mucho en los dos primeros duelos y comenzar a probar a su columna vertebral a partir del encuentro ante el Villarreal, dejando la cita ante el Betis como test definitivo. Así lo confirmó el técnico ayer: «Tenemos varios partidos antes de la final que nos van ayudar a preparlo bien. Habrá rotaciones. Necesitamos descansar. Daré unos días de descanso tras los partidos», explicó.

¿Las dudas? Pocas. Una, de hecho, la única posible, la portería, con el cuerpo técnico pendiente del nivel de Courtois. Más allá de eso, la lesión de Tchouaméni, que apurará sus opciones de estar en Londres, deja vía libre a una alineación con Carvajal, Nacho, Rüdiger, Mendy, Kroos, Valverde, Camavinga, Bellingham, Vinicius y Rodrygo.

A nivel físico, los expertos aconsejan jugar antes que descansar, con el lógico reposo posterior a un partido como el del Bayern. «Tener 23 días sin un partido importante sólo tiene ventajas. Puede ser difícil mantener la motivación porque si tienes malas sensaciones dudas, pero es un mes para recuperar, para hacer recordatorios de fuerza y de trabajo aeróbico. Yo no innovaría demasiado porque en un mes no te da tiempo a transformar el físico de un equipo», explica David Antona, preparador físico de deportistas de elite.

Y volvemos a lo mismo, a lo especial que es el Madrid a nivel mental. Su éxito deportivo lo contagia todo, pero la «autoconfianza» es clave. La cabeza. «El Madrid maneja como nadie las variables psicológicas del deporte. Tienen muy fortalecida la autoconfianza y eso está totalmente relacionado con la motivación, la calidad y el trabajo físico», añade Peris. Ancelotti, mientras,

Pau Cubarsí renueva con el Barça hasta 2027

Pau Cubarsí renueva con el Barça hasta 2027

Actualizado Jueves, 9 mayo 2024 - 15:08

El Barça tiene muy claro que Pau Cubarsí es un valor con un grandísimo futuro. Y, también, un presente más que esplendoroso. Por eso, no es nada raro que se haya puesto manos a la obra para asegurarse su continuidad en el club. Sobre todo, después de que haya trascendido el interés de varios clubs de la Premier, entre los que estarían el Arsenal, el Manchester United, el Chelsea o el Manchester City, por hacerse con sus servicios. Una serie de cantos de sirena a los que la entidad que preside Joan Laporta ha apostado por silenciar de una vez por todas renovando el contrato del joven central hasta el 30 de junio de 2027 y asignándole una cláusula de rescisión de 500 millones de euros, 50 veces más que la que figuraba en el que hasta ahora era su último contrato, que concluía en 2026.

La progresión del central azulgrana, hasta el momento el último talento de La Masía que se ha hecho con un puesto fijo en el equipo titular del Barça, ha sido del todo meteórica. Hasta tal punto, que no sólo se ha convertido en un fijo en los esquemas de un Xavi Hernández que asegura sin tapujos que, cuando Cubarsí tiene el balón en los pies, su tranquilidad es absoluta. También ya ha tenido la oportunidad de estrenarse con la selección española absoluta y podría tener un verano especialmente movido a nivel deportivo, con la posibilidad de formar parte de los combinados españoles que pelearán por la Eurocopa de Alemania y por hacerse con una medalla en los Juegos Olímpicos de París.

El defensa, que se incorporó al fútbol base azulgrana en 2018 para incorporarse a las filas del Alevín B, firmó su nuevo compromiso con la entidad barcelonista este mismo jueves por la mañana, en una reunión en la que tomaron parte el presidente del club, Joan Laporta, el vicepresidente primero, Rafael Yuste, el directivo responsable del fútbol formativo del Barça, Joan Soler, y el director deportivo, Deco, está llamado a ser uno de los pilares del próximo proyecto de Xavi Hernández al frente del primer equipo azulgrana.

Hasta tal punto, que, con su presencia en los esquemas del técnico, hay muchos que no verían con malos ojos la posibilidad de aceptar los insistentes intentos del Bayern para hacerse con los servicios de un jugador que ha sido hasta el momento vital en la zaga: Ronald Araujo. Sobre todo, porque la venta del defensa uruguayo, aunque dolorosa, podría ayudar en gran manera a arreglar los delicados números económicos que aún maneja el club.

El Comité de Apelación revoca el cierre del Metropolitano y le retira la multa al Atlético

El Comité de Apelación revoca el cierre del Metropolitano y le retira la multa al Atlético

El Comité de Apelación de la Real Federación Española de Fútbol ha decidido aceptar el recurso del Atlético de Madrid contra la sanción impuesta al club por los insultos racistas a Nico Williams en el Metropolitano y ha revocado el cierre parcial de dos encuentros así como la sanción pecuniaria impuesta por el Comité de Disciplina.

Así, el sector del fondo sur desde donde se lanzaron los gritos de imitación de un mono contra el jugador del Athletic de Bilbao estará abierto para los partidos ante el Celta y el Osasuna. Además, se ha retirado la sanción de 20.000 euros que se había impuesto al club por tales hechos.

El Comité de Disciplina había calificado de infracciones muy graves tipificadas en los artículos 69.1.c), 69.2.d) y 76.2, apartados b) y d), ambos del Código Disciplinario de la RFEF los insultos a Williams.

El club respondió en su recurso que existen numerosos avisos contra el racismo en todas las instalaciones del estadio, que se activó el protocolo tan pronto como se produjeron los hechos y que desde sus canales públicos emitió un mensaje de condena contra cualquier acto de intolerancia.

Además, arguyó que su colaboración con la policía en la localización del individuo fue total y que dispone de numerosas cámaras por todo el estadio para garantizar la seguridad y vigilancia del mismo.

A su juicio, no cabe sanción para un club, según el artículo 15 del Código Disciplinario de la RFEF, que acredite "el cumplimiento diligente de sus obligaciones y la adopción de las medidas de prevención exigidas por la legislación deportiva para evitar tales hechos o mitigar su gravedad". Y recuerdan que, tras el anuncio de la megafonía, no se volvieron a producir ningún tipo de cánticos ofensivos.

El club no niega los hechos ocurridos, pero reitera que las medidas que adoptaron fueron adecuadas y mantiene que, concurriendo adicionalmente las circunstancias atenuantes recogidas en el artículo 27 de la Ley 19/2007, de 11 de julio, y atendiendo al principio de proporcionalidad, considera que se les puede exonerar de la sanción adoptada.

Diligencia debida

El Comité recoge que esta colaboración activa, la identificación del responsable y el hecho de que fuera un incidente aislado, protagonizado por un único sujeto, según ha resultado acreditado y no por un colectivo indeterminado, permite afirmar, que concurre la máxima diligencia posible por parte del Club.

Así, concurren sus actuaciones dentro del artículo 15 del Código Disciplinario que permite exonerar a la entidad por actuar con la mayor de las diligencias posibles.

El mayor abismo entre Madrid y Barça: títulos, imagen, millones, valor de mercado, patrocinios...

El mayor abismo entre Madrid y Barça: títulos, imagen, millones, valor de mercado, patrocinios…

Los 14 puntos que separan a Madrid y Barça en la clasificación liguera explican la realidad que viven ambos equipos. La realidad deportiva, institucional y social de dos organizaciones que se han comparado sin parar durante las últimas décadas y que ahora se observan desde lejos, distanciadas por los títulos que acumulan en sus vitrinas en las últimas cinco temporadas, por su éxito en Europa, por los millones que valen en el mercado sus futbolistas y por las diferencias de imagen que muestran hacia el exterior.

El Barcelona, enfangado en una crisis institucional eterna, con problemas económicos y sainetes en su banquillo. El Madrid, cómodo en el acorazado blindado por Florentino y Ancelotti, empujado al éxito por jóvenes jugadores convertidos en estrellas mundiales y con Kylian Mbappé amenazando en el horizonte.

El conjunto blanco va camino de poner una distancia de puntos histórica sobre el segundo. El Barça de Vilanova ganó la Liga 2012-13 con 15 de ventaja sobre el Madrid, cifra récord, y ahora los blancos aventajan al Girona en 13 y a los azulgrana en 14. En la mente madridista, los 19 que el Barça les sacó en 2019, cuando el cuadro del Bernabéu terminó tercero. Una motivación para las últimas jornadas.

10 títulos del Madrid desde 2020

Más allá de los puntos de este curso, el resumen de la realidad deportiva de los dos equipos en las últimas cinco temporadas habla también de ese abismo. El Madrid ha ganado los últimos cuatro clásicos, pero a nivel global, desde la campaña 2019-20, los blancos han ganado tres Ligas, una Copa, tres Supercopas de España, una Champions, una Supercopa de Europa y un Mundial de Clubes. 10 títulos a la espera de esta Copa de Europa.

Enfrente, el Barça celebró una Liga, una Copa y una Supercopa de España. Tres trofeos para una entidad sumida en el caos que ve cómo desde Chamartín triplican su éxito.

Quiten ahora los títulos, si quieren, y analicen la competitividad en Europa. Mientras el Madrid acumula cuatro semifinales consecutivas y una orejona, los azulgrana cuentan con una derrota en octavos, dos en grupos y una en cuartos, ante el PSG.

Y la situación es todavía peor si se observa el éxito europeo durante la última década. Desde la 2013-14, los del Camp Nou han ganado una Champions, se han quedado una vez en semifinales, seis en cuartos, una en octavos y dos en la fase de grupos. En el Bernabéu la regularidad ha sido única: cinco Copas de Europa, tres semifinales y dos octavos.

La situación deja una superioridad competitiva pocas veces vista en las últimas décadas. Entre 2005 y 2014 el Barça ganó tres Champions y alcanzó cuatro semifinales mientras el Madrid sufría antes de José Mourinho con cinco octavos seguidos. Con Mou, tres semifinales consecutivas previas a la Décima de Ancelotti.

1.040 millones frente a 839

En el vestuario la realidad tampoco mejora para los azulgrana, que durante los últimos años han ido perdiendo talento y devaluando su plantilla hasta el punto de estar por detrás del Madrid en valor de mercado las tres últimas temporadas, dejando una diferencia histórica en este sentido: los futbolistas de Ancelotti suman un valor de 1.040 millones, según Transfermarkt, por los 839 del Barcelona. Cuatro del Madrid en el Top 15 mundial (Bellingham, Vinicius, Rodrygo y Valverde) y ninguno azulgrana. Sus esperanzas se llaman Cubarsí y Yamal, que han bajado la media de edad de la plantilla para pelear en ese sentido contra un Madrid liderado por jóvenes: 26 años de media tienen los más utilizados por Ancelotti y Xavi.

Pero el futuro avisa: Endrick aterrizará en la capital con 18 años recién cumplidos y en un vestuario del que parece saldrán Modric (38) y Nacho (34). Y Mbappé, la guinda del proyecto de Florentino, tiene 25 años, cinco más que Bellingham, que llegó con 19. La directiva madridista tiene claro su plan de fichajes. Al otro lado del puente aéreo, el Barça suspira por soltar a Lewandowski para poder inscribir a los que lleguen, pero asume que sus compras no serán adolescentes y sí jugadores de presente que eleven el nivel del equipo. El verano pasado, su único traspaso fue el de Oriol Romeu por tres millones. En invierno llegó el joven Roque por 40, pero no ha contado para Xavi. Gündogan e Iñigo, treinteañeros, Joao Félix y Joao Cancelo aterrizaron a coste cero o cedidos.

Los patrocinios

La salud económica de ambas organizaciones es causa central de la diferencia. El Madrid acaba de terminar el Bernabéu y goza del mayor Límite de Coste de Plantilla de LaLiga (727 millones). Una cantidad resultante de los ingresos presupuestados y los gastos. Mientras, el Barça busca fórmulas para compensar las pérdidas derivadas de su mudanza a Montjuic por las obras del Camp Nou, cuyo naming tuvo que vender a Spotify a cambio de 60 millones. El club intenta capear sus 400 millones de masa salarial, que le dejan un LCP de 204 millones, y mantiene el conflicto con Nike, cuyo patrocinio le aporta 85 anuales, por la preocupación de la marca por sus resultados.

Mientras, el Madrid ha llegado a los 120 por temporada con Adidas, récord en el sector, a los 80 de Fly Emirates por su frontal y a los 60 de la tecnológica HP por el logo en el lateral, haciendo que su camiseta valga más de250 millones de euros.

En el banquillo, más diferencias. La margarita de Xavi, que se iba, se quedaba, se iba y se queda ratificado por un Laporta al que le han dimitido 11 directivos, dista de la calma de Ancelotti, renovado hasta 2026 por un Florentino sin problemas institucionales.

La celebración privada del Real Madrid, dos horas de espera en el Bernabéu y muchas collejas

La celebración privada del Real Madrid, dos horas de espera en el Bernabéu y muchas collejas

A las 18:10 de la tarde del sábado, Iglesias Villanueva pitó el final del Real Madrid - Cádiz y comenzaron las 2 horas y 20 minutos de espera en el Santiago Bernabéu. El conjunto blanco había hecho los deberes venciendo al equipo andaluz (3-0) y sólo necesitaba que el Barça no ganara ante el Girona para celebrar su 36º Liga. Una celebración extraña, en diferido, sin aficionados y por televisión, como en 1967, cuando el Madrid fue campeón tras una derrota del Barça en Las Palmas.

El club dejó claro el viernes que los jugadores no acudirían a Cibeles. Querían centrar los esfuerzos en lo importante: ganar al Cádiz y ganar el miércoles al Bayern. Sin despistes. Hace dos años, el Madrid ganó al Espanyol un sábado por la tarde, levantó el título, acudió a Cibeles y el miércoles siguiente disputó la vuelta de semifinales contra el City en el Bernabéu, en la que ganó.

Este año, sin embargo, "la situación es diferente", admitía Carlo Ancelotti desde la sala de prensa. "Hace dos años estaba en nuestra mano. Ahora no merece la pena esperar, si tenemos que celebrar, celebraremos el próximo domingo. Nuestra afición lo entenderá", explicaba ayer sobre la ausencia del equipo en Cibeles.

La realidad es que el cuerpo técnico y la dirección del club preferían centrarse al 100% en el Bayern aunque hace dos años el partido del City saliera bien. Haber acudido ayer a Cibeles después del partido del Barça hubiera influido en el entrenamiento de este domingo, planeado para las 11 de la mañana. Ni cena de equipo ni celebración con la afición. El staff lo descartó, aunque muchos jugadores tenían la ilusión de acudir por primera vez a la famosa plaza.

La situación, entonces, dejó una imagen curiosa. Dentro del Bernabéu, los jugadores y el cuerpo técnico se unieron para ver el Girona-Barça en el palco junto a sus familiares y amigos más cercanos. Ni siquiera hubo zona mixta. Nadie quería hablar sin saber lo que pasaba en Montilivi. Y fuera les aguardaban unos 200 aficionados que seguían el encuentro por el móvil.

"¡Campeones! ¡Campeones!"

A las 20.30, el título. La victoria del Girona desató los gritos por toda Concha Espina y retumbó en Sagrados Corazones. Dentro del estadio, tímida fiesta. Jugadores y cuerpo técnico, con Ancelotti a la cabeza, lo festejaron entre abrazos, gritos y muchas collejas, algo que es tradición desde que llegara Rüdiger al club. Sonó el clásico "¡Campeones! ¡Campeones!" y las cabezas comenzaron a pensar en el Bayern.

A las 20:45, sólo 15 minutos después del final en Girona, Toni Kroos apareció por la puerta del estadio iniciando el camino de vuelta a casa. Los aficionados habían acudido en masa tras el final del Barça y rozaban el millar. Fue todo un poco descontrol, con la gente cruzando de un lado a otro de la plaza mientras los coches de los jugadores pasaban por ella.

Modric abandonó el recinto en taxi y los nuevos, como Brahim o Güler, se pararon durante más tiempo con los aficionados, igual que Rodrygo y Vinicius, que tenían ganas de celebrar con la gente y detuvieron su coche para sacarse fotos. "La nueva era", tuiteó Vini, compartiendo una publicación que recordaba el número de títulos de los jugadores jóvenes del Madrid. Esa misma frase es la que mencionó Araujo cuando el Barça le ganó la Supercopa de España al Madrid en 2023...

A las 21:20, 35 minutos después de Kroos, salió el último: Jude Bellingham. Sacando la cabeza y el brazo por la ventanilla mientras su madre conducía el coche, el inglés gritó a los aficionados y se paró durante unos segundos con ellos. Es su primera Liga. Será su gran recuerdo.

Sin cena oficial, los futbolistas se desperdigaron por la capital. Alguno compartió cena con otros compañeros, pero "a las 11, a entrenar" como les recordó Carletto.

Nacho, capitán, explicaba la decisión de no celebrar: "Lo primero, felicitar a todo el madridismo. Gracias por el apoyo que hemos tenido durante toda la temporada, que ha sido fundamental. Y lo segundo, un mensaje de tranquilidad, que esto se va a celebrar como se merece el fin de semana que viene. Ellos saben lo competitivos que somos y las ganas que tenemos del partido contra el Bayern. Entiendo que tienen muchas ganas de celebrarlo, pero hay que esperar una semana, que lo vamos a celebrar a lo grande". Hasta el domingo, agua.

El Atlético afianza la cuarta plaza y mantiene al Mallorca al filo del descenso

El Atlético afianza la cuarta plaza y mantiene al Mallorca al filo del descenso

Los ojos miraban la capital, pero había muchos objetivos en el archipiélago balear. Los rojiblancos querían asentarse en la cuarta plaza que, en la última jornada, habían conseguido alejar del Athletic de Bilbao. [Narración y Estadísticas, 0-1]

Mientras que los bermellones querían aprovechar los daños colaterales que había causado el Madrid en la Tacita de Plata para alejarse aún más del temido descenso. Sería muy agridulce jugar una final de Copa del Rey, perderla y bajar a Segunda todo en el mismo año.

Quedan bastantes jornadas para que ambos logren sus aspiraciones, pero no se juega igual con la ilusión de la Champions que con el aliento del descenso. Alegría atlética y malas sensaciones para un Mallorca que lleva cinco partidos seguidos sin ganar.

Los dos afrontaron el choque con onces extraños. Aguirre metió dos tanques arriba y prescindió de Samu Costa, su pulmón en medio campo. Simeone dejó a Morata en el banquillo y quiso apostar por un ataque móvil con Correa y Lino, el puñal rojiblanco en la mayoría de los choques.

Cedió el Atlético la pelota al Mallorca en los primeros minutos. Otras temporadas parecería un movimiento lógico de un conjunto de Simeone con una defensa férrea. Este año, el que más goles ha encajado el equipo rojiblanco desde la llegada del argentino, podría parecer osado, dada su mandíbula de cristal.

Pero Riquelme quiso dar la razón a su entrenador desde el minuto cinco inventándose un gol de bandera. De esos que marcados por otros y en equipos con más lustre dan la vuelta al mundo en televisiones y redes. Recogió el canterano un rechace en el balcón del área y controló con un taconazo con el que eliminó a dos defensas para luego meter un disparo ajustado a la base del palo. El plan empezaba bien.

Se tuvo que esperar 15 minutos para ver la primera posesión larga del Atlético, pero fueron casi dos minutos que, si Correa hubiera bajado mejor el último pase, podría haber generado más peligro el conjunto rojiblanco. Es cierto que había poco futbolista que robara balón en ambos conjuntos por lo que la alternancia era, casi siempre, cuando se terminaba jugada. Como la que finalizó Mario Hermoso al lateral de la red.

Partido denso

Hubo un gol, sí, pero poco más ocurrió un partido con dos equipos con poco filo y más ganas de guardar la ropa. Quizás el Mallorca fue algo más valiente al tener que buscar la remontada desde el principio del choque, pero el juego fue denso, con un Atlético esperando el fallo rival y llegó, un mal control de Raíllo, pero Llorente no pudo aprovechar un contraataque bien conducido por Correa. Así que todo siguió igual.

Poca historia en Son Moix con objetivos importantes para ambos clubes. Una plaza Champions para mantener al Atlético en la aristocracia europea y una jornada menos para el Mallorca para certificar la permanencia. Su amenaza, en principio, es únicamente el Cádiz, que también perdió. En principio.