Gavi sale del túnel, 11 meses después, para asombro de Flick

Gavi sale del túnel, 11 meses después, para asombro de Flick

Actualizado Viernes, 18 octubre 2024 - 22:40

cuando se cumplen once meses de la grave lesión de rodilla que sufrió defendiendo los colores de 'La Roja', Gavi puede salir al fin del túnel. Si todo va según lo previsto, el joven centrocampista, a quien el Barça de Xavi, seguro, echó muchísimo de menos el curso pasado, recibirá el alta médica y entrará en la lista de convocados para el duelo frente al Sevilla.

El retorno de Gavi no será la única buena noticia para el conjunto que ahora dirige el alemán Hansi Flick. Fermín y Dani Olmo, que ya se ejercitan con normalidad con el grupo tras superar sus últimas dolencias, y el meta polaco Wojciech Szczesny, relevo del lesionado Ter Stegen y que ya ha completado su pretemporada particular, también podrían formar parte de la convocatoria para el encuentro de mañana, el primero de una cuesta más que empinada para los azulgrana. El duelo ante el Bayern, el próximo miércoles, será la antesala del primer gran clásico contra el Real Madrid, que se jugará dentro de siete días en el Bernabéu.

El diagnóstico que se hizo oficial el 20 de noviembre de 2023, un día después de que Gavi cayera lesionado en el partido entre España y Georgia correspondiente a la fase de clasificación para la última Eurocopa, fue del todo demoledor: rotura completa del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha con una lesión asociada en el menisco lateral. Tocaba pasar por el quirófano. Y armarse de paciencia. Para que el joven centrocampista pudiera volver al máximo de sus posibilidades, se optó por darle todo el tiempo del mundo.

«Es increíble verlo trabajar»

La misma actitud que se ha aplicado también, por ejemplo, en la lesión de Marc Bernal, quien deberá esperar prácticamente un año para volver a jugar un partido oficial. Los paralelismos, desde luego, son inevitables. No en vano, este canterano azulgrana, de 17 años, sufrió el mismo tipo de lesión, aunque en su caso, en la pierna izquierda.

A Gavi le ha tocado vivir el lado más amargo del fútbol. Primero, estuvo unos ocho meses ejercitándose en solitario, combinando el trabajo en el gimnasio con algunas sesiones en la playa, un entorno ideal para reforzar la musculatura de las piernas. Hasta que, en julio, pudo volver al césped de la Ciudad Deportiva Joan Gamper. Flick, desde luego, no dudó en elogiar su garra, su empuje durante el periodo de recuperación. Al fin y al cabo, esas son sus señas más claras de identidad. «Es increíble verlo trabajar», aseguró el germano en las horas previas al estreno en la Liga ante el Valencia.

«No quiero ponerle presión»

Pero, a la vez, también quiso pedirle paciencia. Lo fundamental era no correr riesgos para evitar que todo el trabajo realizado se fuera al traste por una recaída. «No quiero ponerle presión. Es muy joven, le quedan muchos años y tenemos que cuidarlo», recalcó entonces.

Con su más que presumible regreso a una convocatoria del Barça, si no hay ningún imprevisto de última hora, unido a los retornos de Fermín y Dani Olmo, el técnico podrá contar con un centro del campo absolutamente de gala. Y eso que otro joven futbolista, Marc Casadó, quien se ha afianzado en la medular, también ha dejado muy claro que es una apuesta con mucho presente. Para el entrenador alemán, tener que escoger a partir de ahora qué jugadores estarán en la medular, desde luego, será un bendito problema.

Hansi Flick y la paradoja de las rotaciones: "Es mi responsabilidad proteger a los jugadores"

Hansi Flick y la paradoja de las rotaciones: “Es mi responsabilidad proteger a los jugadores”

Actualizado Lunes, 30 septiembre 2024 - 22:01

Hansi Flick lo tiene muy claro: las rotaciones van a seguir formando parte de sus planes. Por lo menos, en este arranque de la temporada. El alemán es muy consciente de que, con tantos lesionados entre sus efectivos, es mejor dosificar los minutos en lugar de arriesgarse a aumentar la lista de la enfermería. Ahora mismo, contando también a un Ter Stegen que estará varios meses de baja, y que, muy seguramente habría rotado lo mínimo, hay seis jugadores en el dique seco: Ronald Araujo, Andreas Christensen, Marc Bernal (quien no volverá a jugar en principio hasta el curso que viene), Gavi (apura su recuperación), y Dani Olmo, que debería estar a punto tras el parón por las selecciones. Frenkie de Jong, mientras, según confirmó el propio técnico, podría tener ya sus primeros minutos este martes ante el Young Boys (21:00 horas), en un partido en el que buscará tanto la primera victoria en la Champions, tras la derrota frente al Mónaco, como reencontrarse con sus mejores sensaciones después del varapalo encajado frente a Osasuna.

Para saber más

«Creo que es mi responsabilidad proteger a los jugadores, porque acumulan muchos minutos, pero no esperaba que jugáramos así. A pesar de todo, le he dicho al equipo que hay que seguir adelante. Jugamos dos partidos por semana y estamos en el camino correcto», analizó Flick tras la derrota en Pamplona. El entrenador azulgrana, de hecho, si no contamos al veteranísimo Robert Lewandowski, alineó un equipo tremendamente joven en El Sadar, con una media de casi 22 años. Sabe muy bien que, a estas edades, no hay que cargar demasiado los futbolistas, para evitar problemas que puedan hacerse crónicos.

Por eso prefirió dejar en el banquillo a un Lamine Yamal determinante en este arranque de temporada, así como a Alejandro Balde, que padeció una grave lesión muscular la temporada pasada. Los más veteranos, desde luego, tampoco son inmunes a las sobrecargas. De ahí, seguramente, que también estuvieran de inicio en el banco el incansable Raphinha y el imprescindible Íñigo Martínez. Y, también, apostó por cambiar al polaco, por mucho que eso supusiera renunciar a mucha pólvora.

«Sin razón» para estar «deprimidos»

La tecnología, omnipresente ya en el mundo del fútbol, es una gran ayuda para saber qué nivel de desgaste acumulan los jugadores. Y, por supuesto, para obrar también consecuencia, por mucho que algunos percances, como la mala caída de Ter Stegen, sean del todo impredecibles. Por eso, no descarta seguir aplicando rotaciones este martes en la Champions.

«Jugaremos con el equipo que creamos que puede ser el mejor. Tenemos confianza suficiente como para decir que siempre queremos ganar. El primero se perdió, pero no es razón para estar deprimidos, porque hubo razones que explican lo que pasó. Ahora mismo, no sabemos cómo será este nuevo modelo de Champions y por eso hay que sumar los máximos puntos posibles», aseveró el técnico, a quien le tocó también, cómo no, hablar de la llegada del polaco Wojciech Szczesny, por mucho que tratara de ahorrarse el trago.

«No hablo de jugadores que no están en el equipo, y él no lo es, de momento. Lo que está claro es que ningún jugador tiene la garantía de ser titular y ser el número uno», aseveró el alemán, dejando así más que entreabierta la opción de que el ex portero de la Juventus pase en breve por delante de un Iñaki Peña a quien hasta ahora le habían asegurado que sería la primera opción hasta el final de la temporada.

Los plazos con Szczesny

Por lo pronto, Szczesny aterrizó este lunes en Barcelona para pasar las pruebas físicas. Y, dado que lleva sin jugar desde la pasada Eurocopa, todo invita a pensar que su hipotética presencia bajo los palos se retrasará por lo menos hasta después del parón por las selecciones, justo en puertas de los partidos contra el Sevilla y el Real Madrid en la Liga y el duelo frente al Bayern en la Champions. O, quizás, puede que no tarde tanto.

«He hablado con él, pero no diré nada más. En los próximos días firmará. El sábado ya hablaremos de eso. Ahora, no», dejó caer el entrenador barcelonista, quien recalcó el gran ambiente que reina en la plantilla azulgrana. «Veo a los jugadores concentrados, se divierten, disfrutan entrenándose, lo veo cada día. Y yo disfruto trabajando con ellos», sentenció el alemán.

Szczesny, muy cerca del Barça: de la multa de Wenger por fumar a un retiro interrumpido en Marbella

Szczesny, muy cerca del Barça: de la multa de Wenger por fumar a un retiro interrumpido en Marbella

Actualizado Viernes, 27 septiembre 2024 - 19:43

Wojciech Szczesny (Varsovia, 1990) es uno de esos casos en los que jugar de espaldas a la portería representa una cuestión de sangre. Su padre, Maciej, tuvo una carrera, siempre en Polonia, en la que sumó 10 títulos y disputó siete partidos con su selección. Su hermano mayor, Jan, siguió también la estela de su progenitor, aunque se retiró pronto para convertirse en entrenador de porteros. De los tres, el ahora máximo candidato para convertirse en el relevo de Ter Stegen en el Barça es quien tiene un palmarés más brillante. Aunque suma sólo un título más que su padre, tres los consiguió con el Arsenal, en Inglaterra, y los ocho restantes, en Italia, en las filas de una Juventus donde compartió vestuario con todo un mito como Gianluigi Buffon.

Szczesny inició su carrera como guardameta en Polonia, pero, tras pasar por los juveniles del Legia, llamó la atención de un Arsenal que lo fichó en enero de 2006. En noviembre de 2008, cuando había logrado meterse en el equipo reserva, la mala suerte quiso que se rompiera ambos antebrazos mientras levantaba unas pesas y tuvo que pasar cinco meses de baja.

Aun así, en mayo de 2009 estuvo por primera vez en el banquillo del primer equipo gunner frente al Stoke City y, con vistas a la campaña 2009-10, se unió a la primera plantilla con la bendición de un Arsène Wenger que aseguró que reunía todas las cualidades que buscaba. En noviembre de 2009, con todo, salió como cedido inicialmente por un mes con el Brentford, para jugar en la segunda división inglesa. Un préstamo que se prolongó al final por toda la temporada y que aprovechó para acumular experiencia.

"nadie podía verme, así que encendí uno"

En 2014, después de que aparentemente lograra consolidarse como primera opción, la llegada de David Ospina puso en duda su condición de titular. Sus problemas se agudizaron tras la tradicional jornada de Año Nuevo en la Premier, con una derrota ante el Southampton (2-0) tras la que fue sorprendido fumando en el vestuario. "Me fui a la esquina de las duchas, en el otro extremo del vestuario. Creí que nadie podía verme, así que me encendí un cigarrillo", explicó unos años después. "Alguien me vio y se lo comunicó al entrenador. Un par de días después me preguntó si aquello era cierto y le dije que sí", añadió. Aquel incidente se saldó con una multa de 30.000 euros -dos semanas de su sueldo- y con su suplencia en el torneo liguero hasta final de curso.

El desencanto de Wenger, ilustre fumador durante sus primeros años en los banquillos, no debió de influir en los hábitos de Szczesny, que volvió a ser sorprendido con un pitillo en la mano en las horas previas al partido de la Eurocopa 2020 ante España. Por aquel entonces, Paulo Sousa, seleccionador polaco, salió en defensa de su futbolista. "Hay muchos jugadores que fuman, es algo natural. Él no lo hizo delante del público. Los paparazzi son mucho peores que un jugador fumando, porque él no lo hizo delante de nosotros", argumentó el técnico portugués.

A su condición de fumador, con la que siempre ha debido lidiar, también se ha sumado su fama de jugador frágil, ya que en su historial clínico figuran 13 lesiones. Dos de ellas, en los dedos, sufridas curiosamente contra el Barça en la Champions. Una, como gunner. La otra, como jugador de la Roma. Sus buenas prestaciones llamaron la atención de una Juventus que lo fichó en 2017 a cambio de 12 millones como competencia y relevo de Buffon, con un rendimiento sobresaliente.

El abrazo con su hijo

Este mismo verano anunció que colgaba los guantes para dedicarse a su familia. Muchos, quizás recordaron entonces el tierno abrazo con el que consoló a su hijo tras la eliminación de Polonia en el Mundial de Qatar. La llamada de su amigo Robert Lewandowski para jugar en el Barça (podría hacerlo desde ya mismo, tanto en la Liga como en la Champions, porque los azulgrana sólo inscribieron dos porteros en su selección A para Europa), le ha llevado a aparcar sus días de relax en Marbella para ponerse otra vez manos a la obra.

Su llegada, por mucho que Hansi Flick asegure que confía en Iñaki Peña, parece más que hecha. Tanto, que incluso la firma alemana que le proporciona sus guantes ya lo ha vestido virtualmente con la equipación azulgrana y ha compartido un vídeo en el que le manda un par de ellos, nuevos a estrenar, a una ciudad de Barcelona que, si no se tuercen mucho las cosas, será su nuevo hogar.