La intrahistoria de la decisión de Brahim: el "punto de inflexión" de los Juegos, el malestar con la RFEF y una "cuestión de Estado" en Marruecos

La intrahistoria de la decisión de Brahim: el “punto de inflexión” de los Juegos, el malestar con la RFEF y una “cuestión de Estado” en Marruecos

Brahim Díaz (Málaga, 1999) jugará con la selección absoluta de Marruecos y no con España. Esa es la noticia que saltó el domingo por la noche en los pasillos del Santiago Bernabéu y que opacó la victoria del Real Madrid sobre el Celta de Vigo, con el andaluz en el once titular. El centrocampista se ha visto obligado a tomar la decisión ahora al estar en la prelista de ambos combinados nacionales: el país de su abuela paterna, Marruecos, y el país que le vio nacer a él, a sus hermanos y a sus padres, España. Una elección que, según pudo confirmar este periódico, acordó definitivamente el pasado jueves 7 de marzo y que fuerza a viajar al pasado para entender la intrahistoria de una situación llena de contradicciones y esperas.

Vayamos primero a la adolescencia de Brahim. Criado en el Málaga, con 14 años decidió irse al Manchester City, donde fue superando diferentes categorías hasta debutar como profesional a los 17. Con 19, abandonó Inglaterra y firmó con el Madrid, que le cedió al Milán durante tres temporadas seguidas, hasta este pasado verano. Y mientras todo eso sucedía, Brahim se convirtió en un fijo de las selecciones inferiores de España. Disputó el Europeo sub'17 de 2016, fue internacional sub'19 y jugó el Europeo sub'21 de 2021, justo antes de debutar con la absoluta en un amistoso ante Lituania. Ahí, en el verano de ese año, llegaría lo que los que mejor conocen la situación llaman "el punto de inflexión" para Brahim.

Su ausencia en Tokio, clave

Después de caer en semifinales del Europeo sub'21, con Brahim en el equipo titular, a Luis de la Fuente le tocó hacer también la lista de convocados para los Juegos Olímpicos de Tokio. De los 11 titulares y los 4 suplentes que habían disputado las semis del torneo continental ante Portugal, el seleccionador olímpico llamó a 8, más de la mitad. El portero Álvaro Fernández, los defensas Mingueza, Miranda, Óscar Gil y Cucurella; los centrocampistas Zubimendi y Bryan Gil y el delantero Javi Puado. Ni rastro de Brahim, titular en tres de los cinco partidos del torneo y por aquel entonces futbolista del Milán. Nunca más le volvió a convocar.

Semis de Champions y Scudetto, sin llamada

Después de 124 partidos en el conjunto rossonero, con 18 goles, 15 asistencias, un Scudetto y unas semifinales de Champions, Brahim volvió este verano al Madrid. No le habían llamado por teléfono ni le habían convocado por España, pero seguía esperando a la selección mientras Marruecos no dejaba de insistir. El combinado africano le llamó por primera vez en 2017, cuando todavía estaba en la sub'19 española, y no dejó de marcar su teléfono cada año. La respuesta de Brahim era siempre la misma: "Quiero jugar con España".

Todo hasta los últimos seis meses. Brahim volvió al Madrid para triunfar en el Bernabéu y con la idea de que los minutos de blanco le abrieran las puertas de la selección española absoluta, que tampoco había pensado en él para el Mundial de Qatar ni para la Nations League, el primero con Luis Enrique y la segunda con De la Fuente, el mismo que no le convocó para los Juegos. Decidió pelear y esperar. No disputó demasiados minutos al inicio de la temporada y no le llamaron para los parones de septiembre y octubre, pero ha aprovechado las lesiones del Madrid y a partir de diciembre sí ha sido importante. 8 goles y 4 asistencias que muestran su evolución. ¿El resultado? Estaba en la prelista de De la Fuente para este parón de marzo, el primero desde el año pasado.

¿El problema? Teniendo a Marruecos detrás, convertido, cuentan fuentes cercanas a la situación, en "cuestión de Estado" en el país africano durante los últimos meses, el futbolista considera que no ha recibido la atención y el cariño que sí ha dado la Federación Española a otros futbolistas que estaban en una situación parecida, como Le Normand, Laporte, Lamine Yamal o Stefan Bajcetic. Jugadores nacionalizados o que tenían que decidir entre España y otro país.

De hecho, según pudo saber este periódico, la RFEF cenó con varios de ellos para convencerles, como con Yamal. En el caso de Brahim, el futbolista argumenta que no ha recibido ningún mensaje, llamada ni interés de nadie de la Federación. Que directamente no han existido los contactos. En Las Rozas, sin embargo, la reflexión sobre los hechos es diferente. Este lunes el seleccionador Luis de la Fuente aseguró que no había hablado con Brahim, pero que "lo importante es querer, sin exigencias ni condiciones".

¿Qué exigencias había puesto Brahim sobre la mesa? ¿Cómo las sabe el seleccionador si, como dan a entender ambos, no hubo contactos? De un lado se desliza que había pedido ser un habitual en las listas e incluso asegurarse la Euro, algo que desde el entorno del futbolista se niega con contundencia.

El discurso interno de Brahim se centra de nuevo en la diferencia en el trato de la RFEF con otros futbolistas. "Cuando me llamó el seleccionador, la cosa fue muy rápida", dijo Le Normand en su primera rueda de prensa. Eso, insisten a este periódico, pedía el andaluz, una llamada que no se ha producido y que lo podría haber cambiado todo. De ahí el silencio del futbolista durante los últimos meses en cada zona mixta en la que le tocaba participar. "Estoy centrado en el Madrid", repetía. Estaba esperando un gesto que, según él, nunca llegó. Ahora ya es tarde y el jugador, que ya durante las últimas semanas había asumido que daría el "sí" a Marruecos, decidió el jueves que jugaría con ellos. Ahí será capitán general.

Brahim Díaz elige jugar con Marruecos y dice "no" a la selección española

Brahim Díaz elige jugar con Marruecos y dice “no” a la selección española

Brahim Díaz Abdelkader, nacido en Málaga, como su madre, hijo de un padre de Melilla, jugará con la selección absoluta de Marruecos. El centrocampista andaluz, que jugó con España en categorías inferiores, ha tomado una decisión «personal», según adelantó Marca y pudo confirmar este periódico, y vestirá la camiseta del país de su abuela paterna.

El andaluz ha estado meses deshojando una margarita que ahora se ha quedado sin pétalos. Según fuentes cercanas a la situación, Brahim estaba en la prelista de España y de Marruecos para el próximo parón internacional, algo que no había sucedido en anteriores momentos, y ahora, sí o sí, tenía que elegir. Y se ha ido con la tierra de sus ancestros por el mayor ímpetu mostrado desde la Federación marroquí, que le llamó por primera vez hace seis años para calibrar su interés y en los últimos seis meses no ha dejado de insistirle, con llamadas diarias desde hace semanas, tanto del seleccionador Walid Regragui como del presidente de la Federación.

En el otro lado de la balanza está la Federación española, con más opciones para el puesto de centrocampista ofensivo y con menos argumentos para asegurar al 100% la continuidad del futbolista en futuras convocatorias, incluida la Eurocopa. De hecho, una de las razones que más ha pesado en la decisión de Brahim es que no ha recibido una llamada personal desde el cuerpo técnico de la selección española, ni de Luis de la Fuente ni de sus ayudantes. Recordemos que el jugador del Madrid tampoco fue a los últimos Juegos Olímpicos.

De esta manera, España pierde al futbolista de 24 años, que sólo ha disputado un partido con la absoluta española. Fue en junio de 2021, en un amistoso ante Lituania. Dado el carácter no oficial de ese encuentro, ahora podrá vestir la camiseta de Marruecos. Brahim deja atrás 26 partidos con España entre todas las categorías, 9 con la sub'17, 8 con la sub'19 (donde tenía como entrenador a De la Fuente) y 8 con la sub'21. Disputará el primer partido de su carrera con el combinado africano en el próximo parón.

Ancelotti: "Lo de Vinicius es frustración, es normal"

La noticia de Brahim opacó la zona mixta del Santiago Bernabéu tras el encuentro ante el Celta, donde Carlo Ancelotti sabía muy bien a qué jugadores tenía que dar una pequeña charla sobre el césped: Vinicius, Rüdiger y Arda Güler. El italiano se acercó primero al brasileño. «Le he dicho que es el mejor», contestó, cuestionado sobre las palabras que le había dicho a Vinicius. Preguntado por el empujón a Mingueza, el italiano pensó también en la camiseta de Vinicius: «He creído que no se ha roto. Ha sido una jugada muy fea y creo que la decisión del árbitro ha sido correcta. Lo de Vini es frustración, es normal», terminó Carletto.

A unos metros, Lucas Vázquez valoraba la acción del brasileño. «Sabemos que eso no lo debe hacer, pero está siendo un poco perseguido por todo, se le está dando mucho bombo a cosas que no tienen que ver con el fútbol. Vini, centrándose en jugar cada semana es determinante, completo y decisivo», elogió el gallego, que admitió que le intentan dar consejos y que el brasileño los acepta. «Él intenta mejorar siempre en todo. Es humilde para aceptar críticas y consejos, pero a veces es difícil y le cuesta quizás tener ese temple que tendrá con los años», dijo.

Pero volvamos a las charlas de Ancelotti. Después de decirle a Vinicius que «es el mejor», el italiano se acercó a Rüdiger, el otro protagonista del duelo al imponerse en los dos córneres que provocaron sendos goles del Madrid. «Después de hablar con Vini he hablado con Rüdiger... Y le he dicho 'tú eres el mejor'», contó el italiano, causandos las risas en la sala de prensa. «Y luego a Nacho también le he dicho 'eres el mejor'. Tengo que darles confianza», añadía, empujado por las risas de la sala. Sobre el alemán, destacó su profesionalidad: «Tiene el tempo perfecto sobre cuándo ser serio o irónico, es un gran jugador», destacó.

Por último, el italiano se acercó a Güler, que metió su primer gol con el Madrid. «Ha jugado muy poco, pero estaba seguro de que algo podía hacer. Es un gran talento. Nadie duda que tiene futuro aquí», dijo,antes de reflexionar sobre la crisis de dos empates consecutivos (Valencia y Leipzig) antes del Celta. «Aquí en el Madrid el empate es la antesala de la crisis», finalizó con elegancia.

Rüdiger salta y el Madrid vuela ante el Celta

Rüdiger salta y el Madrid vuela ante el Celta

Las Ligas se ganan por tierra, mar y aire. Así de constante hay que ser para levantar el título. Y el Real Madrid consiguió este domingo mantener su ventaja de siete puntos con el Girona y de ocho con el Barça a base de saltos y vuelos. Especialmente los de Rüdiger, que provocó el primero, anotado por Vinicius tras la parada de Guaita al cabezazo del alemán, y el segundo, que se metió en propia el portero tras otro remate del central. El tercero, de Carlos Domínguez en propia, y el cuarto, del joven Güler, sentenciaron a un Celta con muchos problemas.

Después de cuajar uno de los peores partidos de la temporada en el agónico empate contra el Leipzig, Carlo Ancelotti metió aire fresco en su once inicial ante un Celta necesitado. El italiano sentó a Carvajal, Kroos y Tchouaméni, además de asumir la ausencia por sanción de Bellingham, e introdujo a Lucas, Modric, Brahim y Rodrygo, suplentes todos en Champions.

Las sensaciones fueron muy diferentes, aunque el rival también lo era. Los gallegos aterrizaron en el Bernabéu con el aliento del Cádiz y de los puestos de descenso sobre su espalda, a dos puntos, y mucho tendrán que mejorar para no pasar apuros en lo que queda de curso. En la primera parte, el Madrid quiso responder a los pitos continentales de su afición. Al descanso, 70% de posesión, 12 remates, 8 a puerta, 9 córners... Y un tanto, el de Vinicius, que se quedó corto para lo visto sobre el césped.

Los blancos se encontraron un partido conocido en Chamartín. Un rival con cinco atrás en defensa, que intentaba achicar todos los espacios y que quería correr a la contra. Ante eso, la entrada de Brahim y Modric, hábiles en el uno contra uno e inteligentes al espacio, alivió los problemas que el Madrid se podría encontrar contra una clásica defensa de balonmano. Ancelotti cargó más el ataque hacia la zona derecha, con Lucas, Valverde y Rodrygo apoyando al croata y al andaluz, y encontró ocasiones y resultados.

Tras varias arrancadas del lateral gallego y de Rodrygo, saldadas con despejes de la defensa, el primer tanto llegó en el minuto 21, en un córner, consecuencia de los ataques por esa banda. Modric colgó el balón, Rüdiger cabeceó a placer, Guaita rechazó la pelota y Vinicius, después de un primer remate que sacó el portero, anotó el 1-0.

El Madrid se adelantó merecidamente ante un Celta incapaz de aguantar el balón en sus pies y peligroso sólo cuando Aspas conseguía conectar con Larsen. En el medio, Camavinga fue el mejor de la primera parte, incombustible en la presión tras pérdida y atrevido en ataque. El francés decía en la previa de Champions que tenía que mejorar en la faceta goleadora y ser más valiente en los disparos. Y contra el Celta lo fue. Lideró la tabla de remates a puerta al descanso (5, 3 de ellos a puerta) y sólo Guaita evitó su gol.

Tras el descanso, el Madrid bajó unas cuantas marchas, cómodo en sensaciones a pesar de lo corto del resultado. Entregó algo más de balón al Celta, aunque sin permitir acercamientos peligrosos. El duelo entró en un terreno aburrido, de siesta, como esperando minutos más determinantes. Y llegaron.

El paso del tiempo dio oxígeno a un Celta que se siguió viendo en el partido quizás más de lo que esperaba en la previa. La conexión entre Valverde y Lucas en la derecha, menos constante que en la primera parte pero efectiva para su equipo, levantó el ánimo del Madrid con balón hacia el tramo final. Rodrygo pudo sentenciar después de una combinación con el uruguayo, pero sigue con la pólvora mojada.

En el 79, Rüdiger impuso de nuevo su ley aérea y cabeceó, imperial, para que Guaita se metiera su remate en la portería tras tocar el larguero. 2-0 y tranquilidad en el Bernabéu, que sigue viendo a sus rivales muy lejos. En el 88, Carlos Domínguez anotó en propia el 3-0 de los blancos y en el descuento bGüler marcó su primer gol con la camiseta del Madrid. 4-0 y a pensar en cotas mayores.

"Xurxo" Strand Larsen, el otro gigante noruego: de una adolescencia con Haaland al pulpo y los goles en el Celta

“Xurxo” Strand Larsen, el otro gigante noruego: de una adolescencia con Haaland al pulpo y los goles en el Celta

Un delantero nórdico con cierta virtud para el gol siempre será El Thor de (inserte aquí el equipo). El tópico está claro. Por eso en el fútbol actual no hay un Thor del balón como Erling Braut Haaland. Así, con el nombre completo, que suena con más poderío. Un delantero gigante, de 194 centímetros de altura, melena larga y rubia, que bebe dos litros de leche diarios y mete más goles que nadie en el planeta. Y quizás por eso, porque lo de Thor ya estaba adjudicado, al protagonista de estas líneas no le ha quedado más remedio que abrazar un nombre más común, más campechano, más natural, más gallego: Xurxo.

Jørgen Strand Larsen, así, con el nombre completo, con poderío, también es noruego, como Haaland. También nació en el año 2000, en febrero, cinco meses antes que el atacante del Manchester City. También es un gigante, aunque en su caso de 193 centímetros, uno menos. No tiene el pelo largo, liso y rubio, sino oscuro, rizado y corto. Y no bebe leche, come pulpo. Lo dicho: más campechano, menos Dios.

Larsen no es Thor, es Xurxo, apadrinado así por la afición y el vestuario de un Celta de Vigo del que es ahora bandera y máximo goleador antes de aterrizar esta tarde en el Santiago Bernabéu para jugar contra el Real Madrid. Xurxo, se lo imaginarán, es la traducción al gallego de Jorge y Jørgen, consecuencia de la rápida adaptación del futbolista a Galicia y a la Liga, de la que es también uno de sus grandes anotadores. Acumula 9 dianas, empatado con Vinicius, En-Nesyri o Iñaki Williams, a 7 goles de Bellingham, sancionado los próximos dos partidos, a 6 de Mayoral, lesionado para lo que resta de temporada, y a 5 de Morata. Es decir, el noruego todavía puede estar en la pelea por los primeros puestos del Pichichi.

Más allá de las comparaciones, siempre odiosas, la realidad es que los apellidos Larsen y Haaland han ido bastante unidos durante los 24 años de vida de los dos futbolistas. El del Celta sería el delantero centro noruego con mayor valor de mercado (15 millones) si no existiera el citizen (180), comparten convocatoria en la absoluta de Noruega y jugaron juntos en las categorías inferiores de su país. En la Eurocopa sub'17 de 2017, por ejemplo, cayeron en fase de grupos y se enfrentaron, entre otros, a la Inglaterra de Phil Foden y Jadon Sancho. Larsen con el número 10 y como delantero centro y Haaland con el 14 jugando como extremo izquierdo.

Carácter mediterráneo

El paso del tiempo les alejó, uno hacia la cima del fútbol mundial y el otro hacia el trabajo constante para labrarse un futuro. Larsen pasó por el equipo juvenil del Milán, donde le entrenó Gattuso y se empezó a contagiar del carácter mediterráneo que ahora le ha hecho más fácil la vida en España.

«Tiene mucho sentido del humor. No es el típico tío escandinavo que te puedes imaginar de primeras», cuentan desde Vigo, a donde llegó en el verano de 2022 procedente del Groningen neerlandés a cambio de 12 millones de euros. En una temporada y media en Galicia ya habla español «casi a la perfección» y se ha aficionado, quién no, al pulpo y al marisco. Al principio le costó un poco asentarse deportivamente, presionado también por la cifra que se había pagado por él. No era indiscutible y no se estrenó en Liga hasta la jornada 13 del pasado curso. Pero este curso todo ha cambiado. Ha sido titular en todas y cada una de las 27 jornadas de Liga y ha entendido mejor cómo se ataca y se defiende en el fútbol español. Físico nunca le ha faltado, trabajado desde la infancia, cuando compaginaba el fútbol con el tenis, el hockey sobre hielo y el golf, y ha ganado en resistencia.

En el horizonte, un sueño que no esconde: jugar en la Premier League y, si puede ser, en el equipo del que es fan desde pequeño, el Liverpool. Sus características de juego aéreo, físico, potencia y gol cuadran con el estilo británico y el Celta ya recibió el interés de clubes ingleses el pasado verano. En Vigo se remiten a la cláusula, que ronda los 40 millones. Hoy, en Chamartín, nueva oportunidad para Xurxo.

Los árbitros, Bellingham... Ancelotti a la defensiva: "Nunca he visto un futbolista tan perseguido como Vinicius"

Los árbitros, Bellingham… Ancelotti a la defensiva: “Nunca he visto un futbolista tan perseguido como Vinicius”

Pasado el susto de Leipzig, el Real Madrid recibe al Celta de Vigo con un Carlo Ancelotti que ha aprovechado la rueda de prensa previa al encuentro para defender, sobre todo, la actitud de sus dos futbolistas estrella.

Jude Bellingham y Vinicius Jr han sido los principales protagonistas de las palabras del técnico italiano. Siendo, el brasileño, uno de los jugadores a los que el propio entrenador tanto en público como en privado, le ha pedido que modere sus actitudes.

No obstante, Ancelotti ha decicido tirar de archivo para defender a su pupilo. "He mirado un poco atrás en la historia y en la estadística... y nunca he visto un futbolista tan perseguido como Vinicius", comenzaba el italiano que aseguraba que al brasileño "le dicen y hacen de todo".

En esta ocasión ha pedido que sea "todo el mundo" el que cambie su actitud para con el brasileño. "Nunca ha pasado que un jugador de tanto talento esté sufriendo tanto", declaraba Ancelotti y recordaba las acciones de Vallecas, en la que le dieron en la cabeza y Leipzig, jugada por la que se llegó a pedir la expulsión del siete del Real Madrid.

También ha merecido su defensa la nueva estrella blanca, JudeBellingham. A su juicio cree que la sanción al inglés de dos partidos por desconsideración a Gil Manzano en el partido ante el Valencia es "exagerada" porque no ha sido "un insulto". Y espera el italiano que "no le hayan tomado la matrícula".

La defensa del italiano se ha extendido también a Rodrygo, cuyo momento de juego hace que sea uno de los futbolistas más cuestionados en las alineaciones del italiano. Para Ancelotti la historia del brasileño en el Real Madrid es de "éxito". "Este año no ha tenido continuidad para marcar, pero sí en el rendimiento. Cuando necesitemos gol, Rodrygo estará ahí", mantenía.

El Real Madrid recibe a un Celta que se juega mucho, "como nosotros", aclaraba el técnico, en un momento de juego en el que "puede que hayan bajado un poco el nivel", según sus palabras. Pero espera recuperar la tensión que, opinaba, perdieron ante el Leipzig. "El equipo jugó poco preocupado. No arriesgamos en la presión, no creo que fuese cansancio psicológico, pero salimos un poco más pensando en que teníamos la ventaja", apuntaba.

Para afrontar este partido ante los vigueses, Ancelotti se planteó la "filosofía Toshack", pero con matices. "Puede ser que el miércoles quiera cambiar a todos, el jueves algo menos y el domingo... tengo que meter un poco de frescura", admitía el italiano.

La conexión al piano de Tchouaméni y Camavinga: "Aprendimos en los ratos libres del Mundial"

La conexión al piano de Tchouaméni y Camavinga: “Aprendimos en los ratos libres del Mundial”

Aurélien Tchouaméni y Eduardo Camavinga son uña y carne dentro y fuera del campo. Los centrocampistas franceses del Real Madrid son los protagonistas de la última 'jam session' de Mahou. En ella, se sientan al piano para versionar la canción '7 years' de Lukas Graham y mostrar sus dotes artísticas. Un talento que empezaron a crear en común durante los ratos libres del Mundial de Qatar.

"Aprendimos en la Copa del Mundo, teníamos mucho tiempo libre y queríamos buscar algo que hacer durante la competición. Ahora estamos mejorando", explica Tchouaméni durante el vídeo compartido por la marca de cerveza. "'Nuestro grupo se llamaría Tchouameninga", responden entre risas preguntados por el 'mote' de su grupo, un nombre que les puso en sala de prensa, y sin quererlo, Carlo Ancelotti. Una mañana en Valdebebas, el técnico italiano se confundió al hablar de los dos futbolistas y creó un nombre que ahora no para de salir en el vestuario, donde vacilan a los franceses.

Además del fútbol, la música también une a los centrocampistas. "Aurélien escucha buena música, a veces le robo", confiesa Camavinga, que es "el DJ del equipo", asegura Tchouaméni. El ex del Rennes está muy influenciado por los brasileños Vinicius y Rodrygo, con los que ha estado de vacaciones en alguna ocasión.

"Escucha música de Brasil con Vini y Rodrygo", cuenta Tchouaméni. "Y afrobeat, que es música que no podemos hacer aquí en el piano", insiste Camavinga, que también admite escuchar al argentino Duki y mucho reggaeton. "Yo soy de J Balvin y Bad Bunny", confiesa Aurélien.

La unión entre los dos es tan lógica como natural. Llegaron con un año de diferencia, uno como apuesta de futuro (Camavinga) y otro como sustituto de Casemiro (Tchouaméni), y han ido creciendo juntos, compartiendo momentos por la facilidad del idioma y siendo parte de la pandilla que han creado con Vinicius, Rodrygo o Bellingham. Y claro, aparecen los hobbies: "¡Yo también toco el piano!", sonreía y recordaba Camavinga el pasado martes, en la rueda de prensa previa a la vuelta de octavos de Champions contra el Leipzig. Cuestionado sobre los talentos de Tchouaméni, Eduardo también sacaba pecho: «Yo puedo tocar el piano, puedo cantar, puedo hacer muchas cosas», admitía. «Y voy a aprender a tocar la guitarra», añadía, en referencia al hobby de Rodrygo Goes.

Xavi, ante la plaga de lesiones que mina al Barcelona ante el Mallorca: "El trabajo de prevención es impecable"

Xavi, ante la plaga de lesiones que mina al Barcelona ante el Mallorca: “El trabajo de prevención es impecable”

Actualizado Jueves, 7 marzo 2024 - 22:41

El centro del campo del Barcelona parece estar poco menos que gafado. Ante el Athletic, Xavi perdió de golpe dos de sus argumentos preferidos para la creación de juego: Pedri y Frenkie de Jong. El primero sufrió el enésimo percance muscular de su llegada a la entidad barcelonista, mientras que el segundo padeció un esguince de tobillo por una mala caída. Con este panorama, y con Gavi como baja de larga duración por la grave lesión de rodilla sufrida en noviembre del año pasado, al técnico no le quedará otra que buscar la mejor forma de reinventar la medular. Así lo confesaba en la rueda de prensa previa al partido de este viernes (21.00 h., Dazn) frente a un Mallorca que jugará el día 6 de abril ante el Athletic la cuarta final de Copa de su historia.

«No hay mucho donde elegir en el medio del campo. Medios naturales tenemos a Fermín, a Gündogan y poco más. Hay que reinventar, como sucedió con Christensen, que lo está haciendo bien como mediocentro. Podemos readaptar a Joao Félix, a Raphinha, a Ferran o alguno más», aseveró el entrenador azulgrana, quien no dudó en confesar que las de Pedri y De Jong son bajas «muy sensibles». En el caso del canario, quiso apuntar que se está haciendo todo lo posible para poner fin a esta mala racha de problemas musculares, a la que también quiso quitarle hierro. Sobre todo, apelando a que es algo que también les ha pasado a otros futbolistas en los inicios de su carrera deportiva.

«Hemos hecho un trabajo impecable, sobre todo Pedri. Le he dicho que ésta será la última lesión. Es menos grave de lo que parece y ojalá pueda volver pronto. Tenemos que hacer todo lo posible, y él quien más, para que no vuelva a pasar, ponerle los cinco sentidos. No es el primer jugador que tiene lesiones en el primer tramo de su carrera y está viviendo mucha presión con muy poca edad», argumentó un Xavi que está convencido de que la clave, ante todo, es la paciencia. «Tiene que ser positivo y convencerse de que se recuperará. No le veo problema alguno. Lo importante es que se recupere bien, al 100%, y que no piense ni en el clásico, ni en la Eurocopa», sentenció.

Fermín, un "perfeccionista"

El entrenador azulgrana, por otro lado, no escatimó elogios para un jugador que ahora tendrá más minutos y que acabó el partido frente al Athletic con muy malas sensaciones por el empate: Fermín. «Tiene una personalidad muy grande. Es muy perfeccionista y se autoimpone muchas cosas. El otro día no acabaría contento en San Mamés, como el resto del equipo. Te enfadas si no estás al nivel y él ya ha demostrado que tiene el nivel necesario para jugar en el Barça».

Las circunstancias, además, pueden obligarle a variar un poco su esquema. La filosofía, con todo, es innegociable. «El sistema se puede cambiar, pero el modelo, no. Tenemos que ser ofensivos, tener el balón. Eso no lo cambiaremos. La verdad es que no hemos tenido nunca juntos a los centrocampistas y eso nos ha pesado», recalcó un Xavi que, pese a la distancia de ocho puntos con Real Madrid, se resiste a tirar la toalla en la Liga.

«Lo vamos a intentar hasta el final, hasta que los números digan que no», aseguró un Xavi que, pese a la trascendencia del partido del martes frente al Nápoles, quiere que sus jugadores estén centrados al máximo en el campeonato de la regularidad. «Yo no creo que la Liga esté perdida», ése es el mensaje.

Ancelotti, Guardiola, Xabi Alonso... ¿Por qué los entrenadores de los grandes equipos fueron mediocentros?

Ancelotti, Guardiola, Xabi Alonso… ¿Por qué los entrenadores de los grandes equipos fueron mediocentros?

"Aquí manda usted", le dijo en una ocasión Luis Aragonés a Xavi Hernández. Tras esas palabras, llegó la mejor selección española de la Historia, la única que ha logrado de manera consecutiva Eurocopa, Mundial, Eurocopa. El Sabio de Hortaleza sabía que en el pequeño mediocentro de Terrassa estaba la clave del juego del equipo y así se lo hizo saber. El fútbol, a día de hoy, debe mucho a una posición desde la que hay un especial conocimiento del juego.

"Yo a mis mediocentros, sólo tenía que mirarlos y ya me colocaban al equipo". Es Juan Antonio Anquela, 'Anquelotti', el entrenador de aquel maravilloso Alcorcón que sorprendió al Real Madrid en una Copa del Rey con un juego vistoso el que alaba esa posición y lanza la tesis del razonamiento: "Normalmente, son la conexión con el entrenador".

Carlo Ancelotti, Pep Guardiola, Xabi Alonso, Arteta, Simeone o el citado Xavi, entre otros muchos, fueron "conexiones con el entrenador" en sus carreras como jugadores. Ahora, ocupan los principales banquillos de Europa, unos con más éxito que otros. Estamos en la época de los entrenadores mediocentros.

Ancelotti en el encuentro ante el Leipzig.

Ancelotti en el encuentro ante el Leipzig.EFE

"Quizás la posición sí te permite entender mejor las fases del juego", comienza el gran organizador y hoy entrenador, Rubén de la Red. El que fuera futbolista del Real Madrid, Getafe y de la Selección Española tuvo que dejar el fútbol muy pronto. Tenía 25 años cuando anunció su retirada por problemas de salud, era 2010 y desde ese momento ya se puso con los carnets de entrenador. Probó un poco de comentarista de televisión, pero en seguida se dio cuenta que lo suyo eran los banquillos.

"Estar en el medio te obliga a entender mejor la situación de cada uno de tus compañeros, ahí sí creo que tenemos un plus a la hora de ser entrenadores", apunta De la Red, aunque no cree que el hecho de haber sido mediocentro te convierta en un buen entrenador per se sino que hace falta mucho "trabajo y capacidad de adaptarte a nuevas situaciones".

Esas características son las que ensalzan en la Escuela de Entrenadores de la Real Federación Española de Fútbol de la que Pep Sansó fue director. "Ser capaz de entender el juego es un punto diferencial", destaca Sansó porque es lo que te permitirá posteriormente "crear tu propia idea de juego". Los mediocentros no juegan solo por intuición sino que añaden conocimiento de juego y eso, "sin ser un requisito imprescindible, ayuda mucho a ser luego entrenador", aprecia el formador.

Simeone observa el partido ante el Sevilla.

Simeone observa el partido ante el Sevilla.EFE

Por la escuela en el tiempo en que Sansó era director han pasado los Raúl, Xavi o Xabi Alonso, entre otros muchos. "Alumnos especiales", les califica el formador por las vivencias que han tenido en su carrera, pero les divide en dos tipos: los que llegan con una idea fija como Xavi o Guardiola y los que se adaptan al equipo o a la idiosincrasia del club en el que recalan. "Xabi Alonso ha bebido de muchísimas fuentes y esa influencia se nota en su potencial como entrenador", destaca Sansó. El donostiarra ha pasado por las manos de Mourinho, Benítez, Guardiola o Ancelotti. Casi nada a la hora de ampliar su riqueza táctica en los banquillos.

Porque eso, el estilo o la idea, es lo que define a los técnicos más allá de lo que hayan sido en sus carreras como futbolistas. No obstante, como dice el refranero español, la cabra tira al monte, así que muchos entrenadores tienen un modo de juego, normalmente, parecido al que desarrollaron en el campo. "Mira al Cholo o Xavi. Es un rasgo que aportas al equipo. Inconscientemente tiras hacia lo que más te llena y son tus condiciones como futbolista", cuenta De La Red.

Xavi en el duelo ante Granada.

Xavi en el duelo ante Granada.AP

Otra de las cosas que beneficia a los mediocentros a la hora de convertirse en entrenadores es su capacidad de "hablar, mandar y corregir", como destacaba De La Red de su época de jugador. Esa personalidad ayuda a llevar plantillas, que no es una parte pequeña del trabajo de técnico. "Lo más difícil de un entrenador es manejar el vestuario y que los futbolistas crean en lo que les dices", expresa Anquela.

No se puede decir, precisamente, que José Mourinho sea un mal entrenador. Sin embargo, el mensaje dejó de calar en el vestuario de la Roma. Llegó Daniele De Rossi y el equipo romanista obtuvo 4 victorias en sus primeros cinco partidos. La derrota se la infligió el Inter de Milan, líder destacado de la Serie A italiana. "Soy hijo futbolístico de Spalleti, él dice: 'si juegas bien y pierdes, significa que algo has hecho mal", valoró el que fuera mediocentro y capitán del equipo de la capital italiana.

Mayoría en LaLiga

Xavi, Xabi Alonso, Guardiola, Arteta, Ancelotti, Simeone, cada uno en su estilo, pero todos observando el campo desde los 360º, como le gusta decir a De la Red. Otro jugador que militó en esa posición acaba de ocupar un puesto de entrenador en LaLiga EA Sports. Íñigo Pérez, ex mediocentro de Athletic Club y Numancia entre otros clubes, es el sustituto de Francisco en el banquillo del Rayo Vallecano.

Los mediocentros están de moda en los banquillos. Nueve entrenadores de LaLiga EA Sports han desempeñado su carrera de jugadores en esa posición. Hay una anécdota que cuenta Sansó en unas jornadas de evaluación a los nuevos técnicos en 2018, en las que Luis Enrique bromeó diciendo que no se podían hacer más cursos de entrenadores porque allí había 800 aspirantes a sólo 40 banquillos profesionales.

Afortunadamente, como dice el ex director de la escuela, "el entrenador español es muy valorado en todo el mundo" porque entiende muy bien el juego, lo que le abre la puerta a otros lugares del globo. Si además ha sido mediocentro, en los tiempos que corren, parece que las posibilidades se multiplican.

Ancelotti hace mucho peor al Madrid

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Vergonzoso y horroroso cumpleaños madridista. Todo el viejo continente vio como el Rey de Europa era zarandeado y ridiculizado por un Leipzig que sólo tiene quince años de edad. Y, desde luego, nunca mereció el Madrid siquiera empatar el partido.

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Cumpleaños angustioso y los fantasmas del 'Centenariazo' en una sufrida clasificación del Madrid

Cumpleaños angustioso y los fantasmas del ‘Centenariazo’ en una sufrida clasificación del Madrid

La bóveda del Bernabéu se estrenó en la Champions para alimentar un ambiente que se aventuraba de baja intensidad por el resultado favorable cosechado en la ida, en el Red Bull Arena de Leipzig. El objetivo era multiplicar los decibelios para recrear la coreografía de las grandes noches en un día especial: el 122 aniversario de club dominador de Europa. El recibimiento al autobús de los jugadores fue atronador, como en las jornadas de las épicas remontadas. Todo preparado para una fiesta que resultó menos lustrosa de lo esperado debido a la incómoda visita de un Leipzig que no se acomplejó en un escenario diseñado para intimidar. Los fantasmas del Centenariazo del Deportivo y de la exhibición de Ajax en 2019 se pasearon por el coliseo blanco en otro 6 de marzo.

Jude Bellingham acudió a la cita con rabia porque por la mañana el Comité de Competición le sancionó con dos partidos por menosprecio o desconsideración a Gil Manzano por el «Its a fucking goal» de Mestalla. El Real Madrid recurrirá a Apelación para reducir a anular el castigo del inglés. En principio se perderá los encuentros contra el Celta del próximo domingo en el Bernabéu y el del día 16 contra Osasuna, en Pamplona. Si se mantiene la sanción, Bellingham no volverá a jugar con el equipo de Carlo Ancelotti hasta el 31 de marzo, el domingo de Semana Santa, debido al parón de las selecciones.

El polivalente centrocampista volvió a ser el faro del juego ofensivo de un equipo que presentó una fisonomía distinta a la habitual, con un 4-4-2, con el inglés y Vinicius en la punta y con Valverde escorado a la derecha. Banquillo para Rodrygo y Brahim.

Un cambio de planteamiento que proporcionó más presencia numérica en la medular, para reducir las consecuencias de las pérdidas y para frenar los contragolpes de Dani Olmo y Xavi Simons. Nacho retornó a su posición de central y Tchouameni, a la de pivote. Más cemento en el pasillo de seguridad. Mucho respeto para la escuadra que en la ida convirtió a héroe a Lunin, con aquellas salvadoras paradas.

En la primera parte, el Madrid no se sintió cómodo ante un adversario muy abierto en las bandas. El Leipzig metió el miedo en el cuerpo con cuatro peligrosas llegadas en el área blanca. Silbidos en la grada.

En la reanudación, Ancelotti apeló a Rodrygo y al factor talismán del delantero brasileño en la Champions. Camavinga fue el sacrificado. El relevo apenas alteró la dinámica, con un juego descontrolado del Madrid y con presión constante del cuadro germano. Otra vez las manos milagrosas de Lunin.

Los agobios disminuyeron momentáneamente con el tanto de Vinicuis. Liberación para Ancelotti que celebró el tanto y se olvidó de sus problemas fiscales. Pero la respuesta de Orbán fue inmediata y las pulsaciones volvieron a dispararse y no se calmaron hasta el angustioso final. Sí, hubo otras clasificaciones para cuartos y otros cumpleaños más placidos.