Xabi Alonso y los flecos por cerrar en la pretemporada exprés más atípica: Rodrygo, Asencio y el compromiso de Vinicius y Mbappé

Xabi Alonso y los flecos por cerrar en la pretemporada exprés más atípica: Rodrygo, Asencio y el compromiso de Vinicius y Mbappé

Reconocimiento médico en el Hospital Blua Sanitas de Valdebebas. Saludos rápidos a los compañeros. Breve conversación para comentar las fugaces vacaciones. Comida, descanso y primer entrenamiento a media tarde del lunes, cuando comienza a aflojar la calorina en Madrid. A toda velocidad, sin margen para el respiro, arrancó ayer la pretemporada más atípica del Real Madrid.

Preparación exprés para Xabi Alonso y su staff, que sólo dispondrán de 15 días para trabajar hasta el arranque de la Liga. Javier Tebas no permitió el retraso del inicio del curso para el último representante español en el Mundial de clubes y el equipo blanco se estrenará el 19 de agosto, frente a Osasuna, en el Santiago Bernabéu (21.00 horas).

Un comienzo de temporada que llegará sólo 40 días después de la derrota ante el PSG. En las próximas dos semanas, la plantilla trabajará en las instalaciones de Valdebebas y sólo disputará un partido amistoso, el día 12, a las 19.00 horas en el Tivoli Stadion de Innsbruck (Austria) frente al WSG Tirol. Urgencias para el técnico vasco, que tiene escaso margen para la planificación y varios flecos. Muchos deberes pendientes. Salvo imprevistos, la plantilla está cerrada, con 25 jugadores.

LA INCERTIDUMBRE DE RODRYGO

Las sombras se adueñaron del brasileño tras su escasa participación en el Mundial de clubes. El delantero aún tiene buen cartel en el mercado y algunos apuntan que su venta podría proporcionar pingües ingresos para afrontar un fichaje de primer nivel. Una opción que en estos momentos parece descartada. El Madrid hasta la fecha no ha recibido una oferta interesante, y no se desprendería del jugador por menos de 80 millones de euros. Su contrato finaliza dentro de tres años. Además, Rodrygo tiene la intención de continuar en el club y de ganarse la confianza de Xabi Alonso. El internacional brasileño sabe que el nuevo técnico le va pedir más sacrificio defensivo y que no le garantiza la titularidad. La competencia en la línea de ataque es tremenda.

EL PAPEL DE ENDRICK

La lesión más inoportuna ha frenado la trayectoria del delantero brasileño. Tras perderse el final de la temporada pasada con un problema en el tendón conjunto de los isquiotibiales de su pierna derecha, su recuperación se ha complicado en las últimas semanas y aún no hay fecha fijada para su regreso. Su ausencia ha coincidido con la irrupción del canterano Gonzalo, cuyo rendimiento en el Mundial de clubes ha entusiasmado a Xabi y a sus colaboradores más directos. Ahora, Endrick, en la posición de delantero más avanzado, tiene por delante a Mbappé y al ex goleador del Castilla.

AYUDAS DE VINICIUS Y MBAPPÉ

Xabi Alonso exige compromiso y solidaridad a todos los jugadores. En su sistema, versátil y con la posible presencia de tres centrales y dos carrileros ofensivos, las ayudas, relevos e intercambios de posiciones son esenciales, y para ello se necesita la colaboración de Vinicius y Mbappé. El preparador vasco no quiere que ambos se descuelguen del grupo. «Todos juntos y solidarios», ese es el principio que mueve todas las piezas. Por eso, una de sus prioridades es inculcar a las dos estrellas la necesidad de sacrificarse en beneficio del colectivo. Carlo Ancelotti intentó inculcarles este objetivo, pero fracasó en el intento.

LA AUSENCIA DE MASTANTUONO

El nuevo talento del fútbol argentino, junto a Trent Alexander-Arnold, Huijsen y Carreras, se incorpora al Bernabéu como gran valor de futuro. No hay prisas con el mediapunta. Llegó a Madrid el pasado fin de semana, trabaja de forma individual en Valdebebas y no se sumará al grupo hasta que cumpla 18 años, el próximo día 14, cuando podría ser presentado oficialmente. Xabi deberá decir qué función desempañará. El ex de River juega con soltura como segundo delantero y escorado a la banda derecha. Su entrada en el equipo dependerá de su capacidad de adaptación. En el club confían mucho en su calidad y visión de juego.

LA LESIÓN DE BELLINGHAM

La baja del británico, que se ha operado de una luxación en el hombro izquierdo, abre las puertas a Mastantuono y a otros necesitados de confianza y minutos, como Arda Güler,Camavinga o Brahim. La ausencia de Bellingham es de larga duración, unos tres meses. Su regreso está previsto para el mes de octubre. El internacional inglés se lastimó el hombro el pasado 5 de noviembre y desde entonces ha disputado 100 partidos con molestias. «Quiero sentirme libre», exclamó antes de pasar por el quirófano.

LAS DUDAS DE CEBALLOS

Otro que podría beneficiarse por la ausencia de Bellingham es Dani Ceballos. El andaluz apenas tuvo participación en el Mundial de clubes y busca más protagonismo. Hasta finales de septiembre está abierto el mercado de fichajes y su nombre figura en la lista de varios equipos. Otro que cuenta con buen cartel es Brahim.

LOS PROBLEMAS DE ASENCIO

El canterano, tras firmar un notable final de temporada, emborronó sus hoja de servicios en dos partidos en el Mundial de clubes. El defensa canario se mostró nervioso e impreciso, como si la llegada de Huijsen le hubiera incomodado. Es inevitable que sus asuntos judiciales le afecten anímicamente. La pasada semana la fiscalía solicitó dos años y medio de prisión por su presunta implicación en la difusión de un vídeo de contenido sexual de unas menores.

EL FUTURO DE ALABA Y MENDY

Los dos defensas continúan lastrados por sus respectivas lesiones. En el club existe el convencimiento de que lo mejor de ambos ya ha pasado. Las llegadas de Huijsen y Carreras frenan sus opciones y a ellos les interesa estar activos para optar al próximo Mundial. Sus salidas del club no están descartadas. Xabi Alonso tiene la última palabra.

Mbappé apuesta por el '10' y deja vacante el '9' en el Real Madrid

Mbappé apuesta por el ’10’ y deja vacante el ‘9’ en el Real Madrid

Actualizado Martes, 29 julio 2025 - 21:56

El mensaje transmitido hace seis días en tono algo enigmático por Kylian Mbappé terminó haciéndolo oficial el Real Madrid. El delantero francés lucirá la próxima temporada el dorsal 10, hasta hace unas semanas propiedad de Luka Modric, por lo que el 9 queda vacante.

Mbappé opta por el dorsal que ha lucido desde 2017 con Francia y con el conquistó la Copa del Mundo 2018. Su etapa con el PSG la inició, a las órdenes de Unai Emery, con el 29, aunque terminó optando por el 7, ya que el 10 quedaba en propiedad de Neymar.

Ahora, su cambio trae a la memoria lo sucedido con Cristiano Ronaldo, que lució el 9 durante su primera temporada en el Bernabéu antes de volver al 7, con el que había saltado a la fama en el Manchester United. La estrategia de marketing del Madrid pretende aprovechar el tirón del 10, el dorsal por excelencia de los cracks.

Durante su primer curso en Chamartín, Mbappé se ha coronado Bota de Oro con el 9, gracias a 44 goles en 48 partidos, a los que sumó 10 asistencias. Sin embargo, estos formidables números no colmaron las expectativas de su fichaje, ya que el astro francés no terminó de asumir su papel de líder y el equipo cerró el curso con dos de menor rango: la Supercopa de Europa y la Copa Intercontinental.

Esta decisión deja por el momento propietario a la camiseta número 9 en el Madrid. Todo un emblema en el club blanco, dado que además de Cristiano, también la lucieron Alfredo di Stéfano, Carlos Alonso Santillana, Hugo Sánchez o Karim Benzema.

Mbappé-Luis Enrique, una pareja futbolística incompatible: "¿Te gusta Michael Jordan? Jordan defendía como un hijo de puta"

Mbappé-Luis Enrique, una pareja futbolística incompatible: “¿Te gusta Michael Jordan? Jordan defendía como un hijo de puta”

En una sala de la ciudad deportiva del Paris Saint-Germain, Luis Enrique, de pie, recibe a Kylian Mbappé, que se sienta en la primera de siete filas. Están los dos solos. A los cinco minutos, el entrenador pregunta «¿Te queda claro?», el francés dice «sí» y su míster responde «gracias». No se dan la mano y la gran estrella del equipo se va por la puerta. Esos cinco minutos resumen la relación entre Luis Enrique y Mbappé: la pasión y la intensidad del español y la falta de feeling entre ambos. Hoy se reencuentran, PSG y Real Madrid mediante, en las semifinales del Mundial de clubes.

Aquella reunión entre ambos ha sido una de las más comentadas porque se emitió en el documental Luis Enrique: No tenéis ni puta idea. Una charla de varios minutos en la que el técnico intentaba convencer a Mbappé de la necesidad de involucrarse en la presión y en la parcela defensiva. Una escena elegida a propósito. Se produjo durante los cuartos de final de la Champions 23-24 contra el Barcelona, el PSG ganaría aquella eliminatoria pero unos días más tarde perdería en las semifinales contra el Borussia Dortmund, que sería el rival del Madrid en la final de Wembley.

El discurso de Luis Enrique a Mbappé lo dice todo sobre el tipo de futbolista que el técnico quería en el ataque y explica muy bien porqué Ousmane Dembélé puede alzar su primer Balón de Oro el próximo mes de octubre. «He leído que te gusta Michael Jordan, Jordan cogía de los huevos a todos sus compañeros y se ponía a defender como un hijo de puta. Tú tienes que dar ese ejemplo, primero como persona y luego como jugador», le dice Luis Enrique, de pie y gesticulando, a Mbappé, sentado, impasible, sin hablar.

«eso no me vale»

«Tú piensas que sólo tienes que marcar goles, eres un fenómeno, un top mundial, pero eso no me vale. Un líder de verdad es el que cuando no nos puede ayudar con los goles nos ayuda en todo lo defensivo», insiste. «Si coges a Ousmane, a Barcola, a Ramos o a quien sea y te pones tú como ejemplo a presionar, ¿sabes lo que tenemos? Una puta máquina de equipo», sigue Luis Enrique, picando a Mbappé con el posible final que tendrá en París.

«Quiero que te vayas de aquí por la puerta grande, Kyky, ninguna duda. Pero te lo tienes que ganar. El día que no ataques tienes que ser el mejor jugador de la historia defendiendo. Eso es un líder, ese es Michael Jordan. ¿Te queda claro?», terminó el técnico.

Unas semanas después, Mbappé anunciaría su fichaje por el Madrid y Luis Enrique lo celebraría a su manera con esta frase: «Vamos a mejorar los resultados, sin ninguna duda. El tener a un jugador (Mbappé) que se movía por donde él quería implica que hay situaciones de juego que yo no controlo. El año que viene las voy a controlar todas. Todas».

Mbappé anota el 3-1 al Dortmund ante Yan Couto.

Mbappé anota el 3-1 al Dortmund ante Yan Couto.AFP

Una premonición de lo que sería la temporada en París, con la conquista de la Champions League, ganando 5-0 al Inter de Milán en la final, como guinda del pastel. Mientras, Mbappé terminó el curso como máximo goleador del continente pero eliminado, junto al Madrid, en cuartos de final de la Copa de Europa por el Arsenal. El francés cuajó algunas buenas eliminatorias, como ante el Manchester City, pero contra el cuadro londinense no estuvo a la altura. Un síntoma general.

Entre medias, Mbappé ha vivido un enfrentamiento en los juzgados con el PSG y con Nasser Al Khelaifi, que siempre que ha podido le ha dejado algún recado en los medios de comunicación. «Ahora la estrella es el equipo», aseguró el qatarí durante el curso, en un mensaje directo al futbolista. En su momento, el presidente del PSG quiso apartar a Mbappé por no renovar su contrato con el equipo y Luis Enrique medió para solucionar el conflicto, pero la pelea ha llegado hasta los tribunales por el pago de la última parte del salario del futbolista.

Una guerra por 55 millones

Mbappé le reclama al PSG 55 millones en sueldos y primas y ha llegado a acusar a Al Khelaifi de «acoso moral» y «extorsión» por las presiones recibidas durante las negociaciones por su renovación en 2023, una demanda que finalmente ha retirado esta semana, justo antes de verse en el MetLife Stadium de Nueva Jersey, «por una voluntad de calmar la situación sobre el terreno jurídico y el deseo de concentrarse exclusivamente en el terreno deportivo», según L'Equipe.

La intensidad y la presión, eso en lo que insistía Luis Enrique a Mbappé, están siendo dos de las palabras más repetidas por Xabi Alonso en el mes que lleva al mando del Real Madrid. El delantero, que sufrió una fuerte gastroenteritis en los primeros días del Mundial, todavía no ha sido titular en el torneo y espera que ese momento le llegue esta tarde contra el que fuera su equipo.

Luis Enrique, durante una rueda de prensa en Atlanta.

Luis Enrique, durante una rueda de prensa en Atlanta.FCWC

Sobre la mesa, el gran papel de Gonzalo, tanto en ataque (cuatro goles) como en la parcela defensiva, donde no deja de presionar la salida del rival. Mbappé es indiscutible para Alonso, pero éste le pedirá aquello que le pedía Luis Enrique: ser Michael Jordan en todas sus facetas.

Del homenaje de Mbappé a Diogo Jota a la sinceridad de Alexander-Arnold: “Estoy roto, devastado y en ‘shock’, era más que un amigo”

Actualizado Domingo, 6 julio 2025 - 08:15

Trent Alexander-Arnold apenas podía cuadrar las palabras en la zona mixta del Metlife Stadium. "Todavía estoy en estado de shock", admitía. El futbolista inglés quiso hablar después de la victoria del Real Madrid ante el Borussia Dortmund para honrar a su "amigo" Diogo Jota y al hermano de éste, Andre Silva, fallecidos la madrugada del jueves en un accidente de coche en Zamora. "Cada triunfo ahora será para él", insistió el lateral, que compartió cinco años con el portugués en el Liverpool.

Trent vivió el partido con emoción desde el silencioso minuto de silencio que dejó callado a todo el Metlife de Nueva Jersey. Un minuto que encogió el corazón en un estadio con gradas para más de 80.000 personas. La imagen de Diogo Jota y André Silva apareció en los videomarcadores y tras el homenaje, Trent se apartó de sus compañeros para dedicarles una oración íntima.

"Sólo tengo pensamientos de amor y oración para su familia. No puedo describir cómo se sentirá su familia ni cómo me siento yo ahora mismo", explicó en zona mixta. "Es difícil poner las palabras cuando le pasa algo así a alguien a quien llamas amigo, con quien te has reído tanto y al que has querido mucho dentro y fuera del campo. Es devastador para muchos de nosotros, realmente devastador. No puedo creer que haya pasado", continuó.

"me desperté con muchos mensajes"

El lateral inglés fue titular y dio una asistencia de gol a Fran García en el 2-0 del Madrid, momento en el que la mayoría de compañeros se acercaron a abrazarle. Él, mientras, sonreía tímidamente, pero era evidente, y lógico, que su cabeza estaba en otra parte.

"Estoy roto, si soy honesto. Roto. Él era increíble dentro y fuera del campo. Un verdadero caballero en cada sentido de la palabra. Mi corazón está con su familia y esta victoria fue para él. Cada victoria será para él y para su familia", aseguró.

Por la diferencia horaria con Europa, la noticia del accidente le pilló a primera hora de la mañana estadounidense, así que vio todos los mensajes al despertarse. "Sólo recuerdo que me desperté con muchos mensajes diciendo 'que descanse en paz' y estaba súper confundido. Tuve que revisar las redes sociales y me decía 'no puede ser', 'no puede ser'. Todavía estoy en estado de shock. Era más que un amigo. Era de la familia", admitió.

DAVID RAMOSGetty Images via AFP

Trent fue sustituido en la segunda parte de un encuentro que se le terminó complicando al Madrid, aunque gracias al gol de Kylian Mbappé y a la parada final de Thibaut Courtois se medirá al PSG en las semifinales del Mundial de clubes. "Creemos que podemos vencer a cualquiera", dijo Trent, al que Alonso elogió en la sala de prensa. "Lleva tres semanas con nosotros después de estar 15 años en Liverpool... Eso requiere tiempo. Está creciendo en la integración, en coger las nuevas ideas, hay que estar día a día con él, pero estamos contentos"

El de Mbappé fue su primer tanto en el torneo y también quiso homenajear a Diogo Jota, haciendo un 2 y un 0 con sus manos recordando el número 20 del futbolista portugués. "Veo bien a Kylian, no está perfecto, aún no al cien por cien, hay días para que tenga mejores sensaciones para las semis", explicó.

Huijsen: "Pido perdón"

Otro de los protagonistas del duelo fue Dean Huijsen, que fue expulsado y se perderá las semifinales ante el PSG. "Pido perdón por haber sido expulsado y por no poder ayudar al equipo en el próximo partido", escribió en sus redes sociales. El central agarró a Serhou Guirassy cuando era el último hombre y provocó el 3-2 del Dortmund y el agobio final sobre la portería de Courtois, resuelto por el belga con una parada sensacional.

"No quería la prórroga y me tiré con toda mi alma", admitió Courtois, que aseguró que la roja a Huijsen era "innecesaria". "Dean estaba jodido porque creo que es una roja un poco innecesaria, pero los delanteros son muy listos. Le tocan un poco con la mano y se dejan caer. Si intentas jugar la pelota no es roja porque dicen que has disputado el balón, pero como es tocar el brazo es roja. Pero vamos a intentar ganar por él", reflexionó el guardameta.

Ponga un Gonzalo en su área

Ponga un Gonzalo en su área

Ponga un Gonzalo en su área y espere... El gol llegará como dictan las leyes de la naturaleza, como el verano sucede a la primavera. Si esa área es la del Madrid, lo hará con truenos, porque el Madrid no riega el área, la inunda, la anega como hacen las tormentas.

Sea con el entrenador que sea, también con Xabi Alonso, el Madrid es un equipo de vértigo, que vuelca el caudal ofensivo como ocurre en una inundación. Ya lo decía el tolosarra en su etapa como jugador: "Lanzamos hacia arriba y ¡pum!". Ese ¡pum! ya no es el de Cristiano. Tampoco el de Mbappé, que está pero no está, convaleciente, o nadie sabe si está. Contra el PSG, el día de la verdad, lo sabremos. El que está es Gonzalo, solución y problema de este primer Madrid de Xabi.

Con cuatro goles y el Madrid en semifinales, Gonzalo se encuentra en la ruta de acabar el Mundial como máximo goleador. No es cualquier cosa. La maniobra en el primer gol ante el Dortmund es propia de un 9 clásico, como la de su gol frente a la Juventus, un escorzo en el aire a lo Santillana.

Sea cual sea su progresión, este Mundial de clubes constata lo bien que al Madrid le sienta un rematador puro en el área. Los ha tenido de la máxima jerarquía, por supuesto, pero hasta subalternos como Joselu han encontrado el fruto. Grosso, Santillana, Butragueño, Hugo Sánchez, Raúl, Zamorano, Van Nistelrooy... Bajos, altos, corpulentos o livianos, habitar el área es una garantía de gol en este equipo que no coquetea con la alquimia del 9 falso. Le sienta bien lo de toda la vida, lo de siempre.

Ese lugar en el área está destinado a Mbappé, un delantero prodigioso, aunque el francés es un futbolista que explota y se pone en valor en velocidad, no detenido. Su altísima calidad y la precisión en el remate le permiten adaptarse, claro, en el Madrid o en la selección francesa, como demostró en el gran renmate del tercer gol ante el Dortmund, pero su naturaleza pide otra cosa, pide la pradera. La de Gonzalo pide la cueva.

El canterano también es un futbolista reconvertido, ya que en el pasado jugaba en la banda. Raúl trabajó en el filial con Gonzalo, porque quería un delantero contundente, potente, en el área. Xabi Alonso lo eligió en el debut, gris, pero en el que el delantero fue MVP.

Hasta ahora, el entrenador ha sido fiel a la meritocracia, facilitada por la gastroenteritis de Mbappé. Si el francés estaba para ser titular ante el Dortmund, sólo el futbolista y Xabi lo saben. Tuvo sus minutos en el desenlace, nada más, aunque con Gonzalo también sobre el terreno de juego. Ante el PSG, la titularidad de Mbappé, en el primer duelo contra su ex equipo, parece asegurada. Veremos desde dónde lo observa Gonzalo, solución, problema y certeza del Madrid.

Gonzalo monta la mundial, noquea a la Juventus y mete al Madrid en cuartos

Actualizado Martes, 1 julio 2025 - 23:05

El avión del Real Madrid volará esta semana a Nueva York y no a la capital de España. El conjunto blanco abrasó a la Juventus en la segunda parte de los octavos de final del Mundial y se plantó en los cuartos del torneo gracias a un cabezazo soberano de Gonzalo García, que ya no es canterano, es una realidad del primer equipo de Xabi Alonso. [Narración y estadísticas (1-0)]

El técnico asentó sobre el césped de Miami su idea de los tres centrales. Por segundo partido en este torneo, apostó por una defensa con Trent, Rüdiger, Tchouaméni, Huijsen y Fran García, repitiendo la defensa que probó en la tercera jornada contra el Salzburgo. A la espera de ver cómo evolucionan las puesta a punto de Militao y Carvajal, que ya entraron en la convocatoria contra la Juventus, parece que el tolosarra ha decidido su estilo, el mismo con el que triunfó en Leverkusen.

Y eso que en el Hard Rock al Madrid le costó. La Juventus de Igor Tudor, superior en nivel al Salzburgo, tenía muy claro su objetivo en el encuentro: la espalda de Alexander-Arnold y el espacio entre los centrales y los dos mediocentros blancos, Valverde y Güler. Ahí sufrieron los de Alonso, que tardaron un rato en ajustar posiciones.

Ajustar el plan

El turco Yildiz sorprendió durante los primeros minutos, apareciendo entre líneas y provocando los mayores sustos para el Madrid. El compatriota de Güler definió mal en una ocasión y filtró un pase al espacio para Kolo Muani en la oportunidad más clara de los primeros 45 minutos. El francés ganó la espalda de Rüdiger y se plantó ante Courtois, pero su vaselina se fue alta.

No fue la única de la Juve, que siguió aprovechando las dudas del Madrid en la presión. Vinicius, Gonzalo y Bellingham fueron la primera línea de intensidad, pero los italianos encontraron bien los huecos a su espalda para construir. Yildiz, otra vez, pudo marcar en el minuto 10, pero Tchouaméni desvió su disparo.

Una pausa por una lesión italiana sirvió a Xabi para ajustar su plan. Los blancos asumieron más balón y apareció Güler, que sufrió en defensa pero fue el timón en ataque liberando a Valverde. En el 29, el uruguayo encontró a Bellingham dentro del área y el inglés remató al cuerpo de Di Gregorio, pero el conjunto español reaccionó a partir de ahí.

Mbappé, ante Rugani, el martes en Miami.

Mbappé, ante Rugani, el martes en Miami.EFE

Otra pausa, en ese caso para la hidratación por la humedad de Miami, dio otro empujón al Madrid aprovechando el bajón físico de la Juve. Tchouaméni no llegó a un centro de Güler, Valverde hizo volar al portero desde lejos y Gonzalo no llegó a un centro de Trent. Rozó el gol el Madrid, pero el descanso aterrizó con ciertas dudas.

Debut de Mbappé

Eso sí, tras el intermedio el Madrid cambió. Evolucionó. La charla de Xabi sirvió y los blancos metieron una marcha más a su juego, presionaron con más intensidad y fueron más verticales en su ataque, llegando una y otra vez al área de una Juventus que acusó el esfuerzo.

Lo probaron Valverde, Arnold, Bellingham y Huijsen, encontrándose con Di Gregorio, hasta que Gonzalo, gigante, se elevó en el área para rematar de cabeza un centro perfecto de Trent. Recordó a Santillana, salvando las distancias con Cristiano Ronaldo, y se elevó sobre Miami para poner por delante al Madrid. Su tercer tanto en el torneo.

El encuentro se rompió y los de Alonso pudieron sentenciar, pero Di Gregorio volvió a volar para salvar una chilena de Valverde y una volea de Güler. El Madrid abrasaba a la Juve, en la lona tras la salida de vestuarios. Lo vio Xabi, que metió a Mbappé por Gonzalo, fundido, y quiso amasar el duelo con balón para buscar el segundo. No lo hizo, pero volvió a brilar, confirmó su evolución y está en cuartos del Mundial.

El primer taconazo de Xabi Alonso

El primer taconazo de Xabi Alonso

Cuando a Xabi Alonso le preguntaron por el taconazo de Vinicius a Valverde, dijo que la jugada le pareció «muy buena», pero que, «con todo el cariño», como suele decir su presidente, se quedaba con el de Guti en Riazor, que presenció en directo. Aquella jugada de la que se benefició Benzema ha pasado a la videoteca de las excelencias en el área, por lo que no debe extrañar la preferencia del tolosarra. Pero la declaración de alguien que mide muy bien todo lo que dice, carga otra intención: la equidistancia con el elogio excesivo que alimenta los egos. El de Vini es proporcional a su calidad. Inmenso.

Fue, pues, una declaración de tacón, sutil, pero que marca el terreno. A Laporta lo despejó con otro taconzano, a propósito de la libertad y la democracia, aunque cuando ha querido lanzar un libre directo, Xabi no ha dudado: «Defendemos todos». No es cualquier declaración en un Madrid donde, al menos dos, Vinicius y Mbappé, estaban liberados de servicio con Ancelotti. El Madrid está ya en otra pantalla, en la que se corre la bomba.

Aunque es pronto, empiezan a observarse algunos esbozos tácticos del nuevo entrenador. Güler asumió dotes de mando en tierra del mediocentro ante el Pachuca y Tochuaméni contribuyó a la formación de tres centrales ante el Salzburgo. Una fórmula que ha sido anatema en el Madrid, pero preferida por el técnico como demostró en Leverkusen. Si tus laterales son Alexander-Arnold y Fran García o el esperado Carreras, con más razón, puesto que atacan mejor que defienden. Busca con ello más control, más preción, pero necesita más coordinación. Eso es tiempo.

El debut ante el Al Hilal dejó un aroma decepcionante por continuista, aunque con una novedad: la alineación de Gonzalo por la baja de Mbappé. Una circunstancias adversa que abrió una puerta a la cantera, en lugar de a otro futbolista adaptado al puesto, y constató una certeza, y es lo bien que le sienta siempre al Madrid un delantero puro de área, porque en su idiosincrasia está el vértigo, el torbellino ofensivo y, si se puede, el tacón.

Un empate del pasado en el debut del futuro

Un empate del pasado en el debut del futuro

Lo mejor del debut es olvidarlo y volver a empezar, aunque la impresión es que para los buenos comienzos habrá que esperar a que pase este Mundial de clubes. Por algo Xabi Alonso quería llegar después. Todo lo que quiere hacer necesita tiempo, entrenamientos y, si es posible, no realizados en una caldera como la de Miami. Pedir tiempo en el Madrid, sin embargo, es como pedir el cielo. Imposible.

El tono inicial del equipo fue el tono del tardomadrid de Carlo Ancelotti, hasta que en la segunda parte lo acaleró la entrada de Arda Güler y es de suponer que unas palabritas del entrenador. Incluso el gol había llegado del mismo modo que siempre, en una contra que en este equipo no necesita entrenarse, porque forma parte de su instinto. El Madrid corre sin pensar. Lo que hay que valorar es qué hace a partir de lo que piensa su nuevo entrenador. La respuesta está pendiente.

La presión está en su cabeza y la prueba es la intención que partía de la posición inicial ante la salida de balón del Al Hilal. Cuando el rival la superaba, el desconcierto. Como antes. Dice Xabi Alonso que quiere que Jude Bellingham sea más centrocampista, es decir que juegue más atrás. En Miami no vimos exactamente dónde.

Más centrocampista fue Dean Huijsen, el jugador de los mejores pases interiores en la salida de la pelota. El suyo fue un debut emergente en el bajo tono general. Sin embargo, hablamos de un central, un defensa, y la línea de la que formó parte estuvo mal, y no sólo por el penalti de Raúl Asencio, a merced de las combinaciones ofensivas en el arranque del Al Hilal, mejor equipo de lo que piensan quienes miran con desdén lo que se cuece en Arabia. Simone Inzaghi lleva en su banquillo tan poco tiempo como Xabi Alonso. Al contrario que Huijsen, la première de Trent Alexander-Arnold fue inocua. Su profundidad ha de llegar. En la banda opuesta, cada día está más claro la necesidad de un fichaje, sea Álvaro Carreras u otro.

La entrada de Güler llevó a Tchouaméni al central, otra maniobra conocida, aunque es la prueba de que el entrenador, un ex mediocentro, sabe por dónde hay que dinamizar el juego del Madrid. A ese tramo le faltó gol, no únicamente el que falló Fede Valverde en el penalti. Nadie sabe si lo habría encontrado Mbappé, resfriado. Gonzalo marcó el suyo en una aparición que sí marca diferencias con el pasado.

Xabi Alonso arranca con madrugón, 'tablet', ordenadores y hoja de ruta para el Mundial de Clubes

Xabi Alonso arranca con madrugón, ‘tablet’, ordenadores y hoja de ruta para el Mundial de Clubes

La adrenalina le hizo saltar de la cama con los primeros rayos del sol. Ducha rápida y listo para dirigirse a Valdebebas y estrenar oficina. Xabi Alonso tiene prisa por enseñar su libreto. A las 7.30 horas de este lunes accedió a las instalaciones del centro deportivo del Real Madrid y poco después ya tenía todo preparado para la primera reunión con su staff técnico: Sebas Parrilla (segundo entrenador), Ismael Camenforte (preparador físico), Alberto Encinas (ayudante técnico) y Beñat Labaien (analista de sistemas y estrategias). Luis Llopis, preparador de porteros en la etapa de Carlo Ancelotti, también se ha unido al grupo de trabajo del tolosarra.

El Real Madrid difundió una imagen en la que aparecían los seis técnicos sentados alrededor de una mesa blanca, cuatro ordenadores. Xabi Alonso trabaja con una tablet. También aparecen papeles y gráficos de campos de fútbol.

En nuevo entrenador llegó a su despacho casi tres horas del primer entrenamiento con sus jugadores, marcado para las 11.00. Durante ese tiempo, el ex preparador del Leverkusen también saludó y se reunió con diferentes empleados de Valdebebas. A muchos ya los conocía de su anterior etapa como entrenador en las categorías inferiores.

Sólo cinco en plenitud

Alonso enseñó a sus colaborares una hoja de ruta en la que figura como apartado más inminente la planificación del Mundial de Clubes, que arranca el próximo domingo y en que el Real Madrid no debutará en la fase de grupos hasta el miércoles 18, contra el Al Hilal (21.00 horas). El domingo 22 se medirá al Pachuca (21.00 horas) y el viernes 27 al Salzburgo (3.00 horas). Al club blanco le interesa este torneo por el prestigio que otorga ser su primer ganador y por los suculentos ingresos económicos que puede conseguir el vencedor, unos 125 millones de euros.

El equipo viajará el próximo sábado a Estados Unidos y se alojará en una selecta zona de Palm Beach, al norte de Miami.

Xabi Alonso diseña un campeonato sin saber exactamente con qué efectivos dispondrá. En el primer entrenamiento del lunes sólo contó con cinco integrantes de la plantilla en plenitud de condiciones: Lucas Vázquez, Raúl Asencio, Fran García, Dani Ceballos y Rodrygo. También citó a 10 canteranos: Fran González, Jacobo Ramón, Mestre, Fortea, Aguado, Yusi, Chema, Marío Martín, Víctor Muñoz y Gonzalo.

A la espera de los lesionados

El vasco espera recuperar en las próximas jornadas a los lesionados Courtois, Carvajal, Militao, Alaba, Brahim y Valverde. Este lunes, el polivalente centrocampista uruguayo sólo se ejercitó en el gimnasio. En las próximas horas se reincorporarán los internacionales Modric, Mbappé, Tchouaméni y Bellingham. En principio, no podrá contar con los lesionados de larga duración: Rüdiger, Mendy, Camavinga y Endrick.

Una de las grandes novedades será la presencia de Dean Huijsen (20 años), el central de la selección española que será presentado en el mediodía del martes. El lateral británico Trent Alexander-Arnold (26) podría ser presentado el jueves, poco antes de hacer las maletas con dirección a Miami. Allí llegarán directamente Lunin, Vinicius y Güler.

El ciclo de Xabi comienza a andar.

Lamine Yamal reivindica el Balón de Oro y reta a Cristiano: "Es una leyenda, pero haré mi trabajo, que es ganar"

Lamine Yamal reivindica el Balón de Oro y reta a Cristiano: “Es una leyenda, pero haré mi trabajo, que es ganar”

Lamine Yamal salió del Stuttgart Arena asombrando tanto como en la Eurocopa. Si el duelo ante Francia media su altura para pelear el Balón de Oro con Dembélé y quien sabe si también con Mbappé, la conclusión la dicta que salió del partido como mejor jugador. Ahora le espera Portugal con Cristiano Ronaldo. "Es una leyenda, pero haré mi trabajo que es ganar", advierte.

Mientras, cosecha elogios. "Lamine ha dado un golpe en la mesa. Es el mejor del mundo y merece el Balón de Oro", sentenció Luis de la Fuente. "Cada cosa que hace, sorprende", resumía el presidente de la RFEF, Rafael Louzán. Su compadre Nico Williams, que bailaba con Samu y Gavi, antes del duelo, como si fuera un torneo de juveniles y no una semifinal, lo que quiere es que siga concentrado: "Dejadle tranquilo, que tiene que ganar la final". Bien sabe que nada le despista.

"Lo importante es hablar en el campo. Como le digo a mi madre, para estos partidos juego al fútbol, son los que me motivan", avisó la joven estrella que, como todos, hubiera preferido sufrir un poco menos. "El resultado en el minuto 60 era muy grande, pero sabemos que tienen jugadores de clase mundial", recordaba. Para cuando Francia quiso apretar en el minuto 80, España ya les había avergonzado en dominio y acierto goleador. Dieron el susto, sí, pero esta selección irreverente olvida los "desajustes", como los calificó Merino, y mira ya cómo vencer a Portugal. "Firmo terminar todos los partidos así", decía el seleccionador. "Estoy feliz porque era un partido dificilísimo con dos de los mejores equipos del mundo. Hemos aprovechado nuestro momento, no es fácil meter a un rival cinco goles, y ellos también", sintetizó.

Quizá fuera Stuttgart la clave. Si España juega en su Arena, Mikel Merino aparece como protagonista y si el rival es Francia, Lamine Yamal aparece para destriparla y, aunque apretando los dientes, encadenar 24 partidos oficiales sin perder, 20 victorias y cuatro empates. Ya ha agarrado al equipo de Javier Clemente y amenaza al exitoso de Vicente Del Bosque. Ante Portugal podrá revalidar su condición de campeón de la Liga de Naciones y sumar tres títulos en tres años. Alemania convertida en Tierra Santa.

Los recuerdos de Merino y Pedri

La selección creó en el estadio alemán los recuerdos del pase a las semifinales de la Eurocopa con un gol de Merino a los anfitriones. "Me está dando grandes alegrías", reconoció el jugador del Arsenal. En septiembre de 2020 este mismo estadio vio su debut como internacional, con su padre en la grada. No podía imaginar el histórico futbolista de Osasuna que, cuatro años después, su hijo celebraría un gol que llevaba a España a semifinales de la Eurocopa dando la vuelta al banderín de córner como él hizo en 1991 en un duelo de la entonces Copa de la UEFA. Mucho menos se le pasaba por la cabeza que exactamente once meses después, volviera a hacerlo para encaminar a la selección de nuevo a una final, esta vez de la Nations League. Dos homenajes, además, ante Alemania y Francia que convierten esos goles en inmortales.

Su tanto fue 'conexión Real', con Zubimendi en el inicio de la jugada y el entendimiento con Oyarzabal, que lo dejó solo ante Maignan. Ya había asistido el capitán txuriurdin a Nico Williams, quien abrió el marcador tras una asistencia en pelea con el gigante Konaté. Por algo De la Fuente le tiene fe ciega y es el máximo goleador con nueve tantos y pudieron ser diez si no llega a ser por su generosidad.

Cuando a Lamine lo cazó Rabiot en penalti, se acercó a la estrella culé y le animó a lanzar. No falló pese a ser el primero que pateaba como profesional y dejó sentenciada una eliminatoria que, es justo decirlo, también sostuvo Unai Simón con sus paradas durante algunos minutos. Así lo hizo De la Fuente: "Me alegro mucho por él porque ha sido cuestionado y maltratado durante mucho tiempo".

No parecía que España tuviera miedo al despertar francés, pero por si acaso Pedri marcó un gol magistral, advirtiendo al portugués Vitinha de que está listo para mirarle a los ojos y disputarle la pelota el próximo domingo. De aquellas lágrimas por caer lesionado en la Eurocopa a celebrar su acierto. También durante todo el partido hubo recuerdos en forma de pitada para Marc Cucurella, como si hubiera sido culpable de aquella mano que nadie olvida en Alemania.

Sin defensa que pare a Lamine

Pero aún tenía que aparecer otra vez Lamine Yamal para burlar a toda la defensa gala y, aunque fuera de punterón, marcar su segundo tanto. Tenía razón Deschamps: no ha habido aún una defensa capaz de parar al talento de Rocafonda. España se estaba divirtiendo y hasta pudo haber sumado a la fiesta a Dean Huijsen en su segundo partido como titular. Su gol, el tercero para España tras una jugada ensayada de libre indirecto, fue anulado por un justísimo fuera de juego.

El camino de rosas que dibujó España con el 5-1, porque había aparecido Mbappé, se fue complicando en parte por la relajación de haberse visto tan superiores pero también a causa del ataque de rabia de Francia, que no quería salir tan humillada de la Nations League. Echó mano Deschamps del debut de Cherki, que se estrenó con golazo, y Kolo Muani tanto para intentar remontar como para maquillar el varapalo que pone en la picota la cabeza del seleccionador.