El Barça recuerda al mundo que el fútbol debe ser divertido

El Barça recuerda al mundo que el fútbol debe ser divertido

En algún momento divertirse con el fútbol se ha convertido en un pecado, una cosa de piperos, no hemos venido a esta vida a disfrutar. Es consecuencia del postureo identitario y bastante tóxico que mueve las redes sociales y, también, una excusa cómoda cuando tu equipo es un peñazo. No importa pasarlo bien y el resultado, sólo cuando ganas. Si palmas, lo que importa es que nosotros somos diferentes, pese a que está comprobado que todas las aficiones son iguales. ¿Saben cómo lo sé? Porque absolutamente todas presumen de no ser como el resto. No falla una.

Pensaba en esto mientras era feliz viendo al Barça ganar la Liga contra el Madrid y perder la Champions frente al Inter. No por el resultado -que en el primer caso también, no les voy a mentir- sino porque fueron partidos memorables. Resulta que me gusta el fútbol y lo había olvidado. Lo hemos olvidado muchos. El equipo de autor de Hansi Flick no es el mejor que he visto, pero sí el más divertido. Y la diversión es lo que nos llevó al fútbol antes de que las miserias adultas nos hicieran mezquinos.

Como debí ser asesino en serie en otra vida y el karma me lo está devolviendo, vi el clásico con 14 niños de 11 años invadiendo mi salón. Estuvieron todo el partido gritando, celebrando los goles en la cara de los otros y riéndose. Se lo pasaron en grande. Al acabar, se felicitaron o se dieron ánimos y siguieron destrozándome la casa en amor y compañía, mientras yo hacía cortes de mangas virtuales a mis amigos madridistas. La enfermedad no viene de serie, la pillamos a base de zascas y memes.

Los apóstoles del fútbol como religión y no como juego me dirán que me divierte tanto porque no soy del Barça, que es una aberración recibir siete goles en una semifinal de Champions y que si fuera culé me pasaría los partidos al borde del ictus. Esto último es probable, pero no había visto al barcelonismo tan orgulloso de su equipo desde Pep Guardiola. Y me da envidia.

Me da envidia que vayan al campo sabiendo que todo puede suceder, que un 0-2 no es nada, que el fútbol se juega a ganar sin miedo a perder, que la risa de los malditos niños es un indicador de felicidad al que aspirar y mi hija sufre como una bellaca para llegar sin dormirse al minuto 60 cuando ve al Atleti. Ganar es de horteras, pero divertirse... Divertirse es lo único realmente importante del fútbol. O debería.

Del lío con el cambio de Vinicius a la extraña ausencia de Rodrygo: "¿Castigo? No pasa nada"

Del lío con el cambio de Vinicius a la extraña ausencia de Rodrygo: “¿Castigo? No pasa nada”

La desesperación y la falta de orden en el Real Madrid se reflejó durante la media hora de la primera parte en la que el Barça golpeó los sueños del título madridista, pero tocó techo en el minuto 73. Vinicius se hizo daño en el tobillo y levantó las manos hacia el banquillo. Pidió el cambio de forma evidente, haciendo el clásico gesto con los dedos. En ese momento, Carlo Ancelotti miró a Davide y éste llamó a Endrick, que estaba calentando en la banda.

El conjunto blanco acababa de marcar el 4-3 y tenía 20 minutos para intentar no morir en la orilla de la Liga. Vinicius, cojeando visiblemente, parecía no poder más y Endrick era la opción para hacer daño al espacio. El joven atacante brasileño se cambió y se acercó a la línea junto a Chendo mientras Ancelotti le hacía gestos a Vinicius para que se tirara al suelo. Pero al momento, el ex del Flamengo, todavía con molestias, le pidió que esperara.

Ancelotti le hizo caso, paró el cambio y Endrick se volvió a poner la sudadera y el peto mientras Vinicius trataba de seguir en juego. Recibió un balón, realizó un recorte y disparó a puerta de forma muy muy leve mientras sus compañeros, especialmente Fede Valverde, se enfadaba con él aireando los brazos.

Al momento, corriendo ya el minuto 83 y con el Madrid perdiendo la Liga, entró finalmente Endrick, pero por Lucas. Y a los tres minutos, Vinicius volvió a pedir el cambio, esta vez de forma definitiva. El banquillo no entendía nada y Valverde, de nuevo enfadado, tampoco.

Tres goles en Liga en 2025

"El cambio lo he hecho yo, no él. Lo ha intentado, le molestaba y ha pedido el cambio", resumió fríamente Ancelotti, que no tenía demasiadas ganas de analizar el partido más allá del juego y muy cortante en las respuestas importantes.

Vinicius dio dos asistencias de gol a Mbappé, pero su nivel durante los 83 minutos estuvo lejos de su mejor versión. Errático con balón, incapaz de superar a Eric García y desentendido de la parcela defensiva, volvió a cuajar un encuentro preocupante, especialmente de cara a la portería rival. Lleva sólo tres goles en Liga en 2025.

Rodrygo, sin minutos

El otro protagonista del ataque del Madrid, más allá de Mbappé, fue Rodrygo, pero por su ausencia. El ex del Santos, indiscutible para Carletto durante toda la temporada a pesar de su irregularidad, no contó con ningún minuto en el clásico. Hace una semana, contra el Celta, fue baja por una fiebre, y aunque se entrenó durante toda la semana con el resto de sus compañeros, no saltó al césped. La pregunta a Ancelotti fue directa: "¿Hay algún castigo a Rodrygo?". "No, no hay nada. No ha pasado absolutamente nada. Ha intentado recuperar estos días pero no estaba bien. Meterlo cinco minutos cuando no está bien es solo un riesgo", explicó el italiano.

Y entre ambos, Mbappé, que sumó otro hat-trick, lidera el Pichichi y se mete de lleno en la pelea por la Bota de Oro. Suma 27 goles en Liga, dos más que Lewandowski, y 54 puntos en la clasificación del galardón continental. Salah le saca un tanto y ambos están a la sombra, mínima (1 punto), de Gyokeres, atacante del Sporting de Lisboa que acumula 38 goles, aunque en su caso sólo se multiplican por 1,5 y no por 2 al ser una liga menor.

Insultos al canterano Víctor Muñoz

El último protagonista del ataque madridista en Montjuic fue el canterano Víctor Muñoz. Entró por Vinicius y tuvo una ocasión clarísima para el empate en el tramo final, pero su disparo se marchó desviado. Se fue del campo dolido y emocionado, y las redes sociales no le han ayudado. El futbolista, que pasó por las categorías inferiores del Barça y ahora lleva 10 goles y 7 asistencias con el Castilla de Raúl, ha tenido que cerrar los comentarios de sus publicaciones por los insultos de los aficionados, que la tomaron con él en su debut con el primer equipo.

El Madrid se enfrenta ahora a una semana complicada. El equipo juega el miércoles a las 21:30 en el Bernabéu contra el Mallorca, en lo que puede ser el adiós definitivo a la Liga en caso de no ganar y en lo que será, seguro, un juicio a Ancelotti y a la plantilla.

Se espera, además, que en los próximos días el conjunto blanco anuncie de forma oficial la salida del italiano a final de temporada, asumiendo la llegada de Xabi Alonso una vez termine el curso y pendiente también Ancelotti de la lista de convocados de la selección brasileña para el parón internacional de junio.

Flick, tras la victoria ante el Madrid en el clásico: "Todavía no nos sentimos campeones"

Flick, tras la victoria ante el Madrid en el clásico: “Todavía no nos sentimos campeones”

Actualizado Domingo, 11 mayo 2025 - 19:49

Hansi Flick es de los que prefiere tener los pies en el suelo. Por mucho que sus jugadores celebraran sobre el césped con su afición un triunfo ante el Real Madrid que los coloca a dos puntos de hacerse con el título de Liga, el entrenador del Barça prefirió rebajar la euforia. "No nos sentimos campeones todavía. Estaría bien conseguir tres títulos, pero aún tenemos una victoria más que sacar", señaló el alemán en declaraciones a Movistar nada más terminar el partido. Si el conjunto de Ancelotti no logra vencer al Mallorca en el Bernabéu el próximo miércoles, o si los azulgrana se imponen al Espanyol en Cornellà-El Prat el jueves, con todo, la Liga ya estará matemáticamente en manos de la entidad barcelonista.

El germano, eso sí, no dudó tampoco a la hora de celebrar el triunfo conquistado ante el eterno rival, el cuarto consecutivo esta temporada, por mucho que durante muchas fases del duelo la victoria no estuviera precisamente del todo clara. "Esto va para los aficionados y para los jugadores. Es fantástico. El Madrid tiene un gran equipo, pero hemos conseguido remontar un 0-2. Y todo, después del partido de Milán, después de más de 120 minutos. No era fácil lidiar con eso y creo que lo hemos hecho muy bien, aunque me temo que tendré que ir a que me revisen el corazón", apuntó un Flick que asumió que los suyos tienen fallos pendientes de corregir. Sobre todo, en lo que respecta a la faceta defensiva.

"Pienso que hay que mejorar mucho en defensa. Cuando presionamos, todo va bien, pero cuando cometes un error, especialmente en ese primer gol que encajamos, se complica todo, aunque también es verdad que el equipo toma buenas decisiones a nivel colectivo y que teníamos grandes jugadores enfrente. No es excusa, pero jugando cada tres días no es fácil entrenar este tipo de cosas. Lo que está claro es que hay que mejorar y ya pensamos en la pretemporada para pulir todo esto", recalcó.

El técnico admitió además que vivió el duelo con cierta tensión. "Había muchas emociones en el banquillo, muchas decisiones a tomar. Con el penalti o el último gol pienso que podríamos haber dado un paso más adelante, pero con el 4-3 logramos la victoria de todos modos y eso al fin y al cabo es lo que queríamos", señaló después en rueda de prensa dejando caer, como quien no quiere la cosa, su descontento con las últimas dos decisiones de Hernández Hernández tanto en el área madridista como en sus inmediaciones en la recta final del partido.

Lamine Yamal

Lamine Yamal, cómo no, se llevó también muchos de sus elogios. "No es solo un chico, creedme. Tiene confianza, cree en lo que puede hacer y es muy inteligente. Para mí, lo importante era que todo el mundo mirara hacia el clásico después de lo que pasó en Milán, sin olvidar tampoco ese partido. Marco un gol muy importante, nos ayudó a remontar y, con 17 años, tiene una calidad muy alta", recalcó el alemán.

El de Rocafonda, poco antes, ya había hecho suyo parte de ese discurso. "Era un partido muy importante y la distancia que tenemos ahora también lo es. Sobre todo, después del partido de Champions, que ya está olvidado. Ahora toca disfrutar, aunque tenemos que corregir esos goles que regalamos al final, porque no nos crearon ocasiones muy claras", apuntó el delantero quien, a pesar de todo, tiene la máxima competición europea muy en mente. "La Champions se juega cada año y lo intentaremos hasta que la ganemos, pero lo importante era ganar este clásico para acercarnos más al título de Liga", sentenció en Movistar.

Mbappé, solo ante el Barça

Mbappé, solo ante el Barça

Un increíble y maravilloso Mbappé no pudo solo contra el Barça. La descomposición final de Ancellotti raspó el bochorno. Fue por su desacertada alineación ante un Barça, que precisamente no llega a este final como un gran triunfador. Hasta había provocado cierta histeria general.

El equipo de Flick terminó pidiendo la hora. Casi muerto físicamente, no supo lograr un tanto en el segundo tiempo y se escurrió entre la mediocridad orquestal de su ridículo sistema defensivo, que es una hemorragia total de fallos y de un desorden grotesco.

El final incluso pudo ser madridista. Y es que, aunque resulte un disparate, pudo ganar en los últimos minutos ante un Barcelona acogotado, mezquino y con la memoria del día de San Siro para terminar el choque en manos del rival.

Pero con Ancelotti son demasiados los errores. ¿Cuántas veces hemos denunciado que Lucas Vázquez no puede jugar de nada? Se empeña trágicamente el italiano, porque quiere demostrar a la Casa Blanca que se equivocaron al no fichar a nadie en defensa.

Y eso es verdad. Nadie dirá ahora que este descuartizado equipo puede ganar el esperpento del Mundialito. Máxime cuando hizo un ridículo partido en defensa, con Vázquez, que regaló dos goles, y uno más de un torpe y acabado Ceballos.

El Madrid sólo jugó con Mbappé, contra todo el venerado Barcelona. Pudo hacer hasta cinco goles. Es asombrosa su peligrosidad, su tino ante el gol. Parecía que jugaba un sólo jugador contra todo el mundo azulgrana. Impresionante.

Él no es es defensa, no puede hacer nada con la desfachatez de retaguardia y con un Bellingham absolutamente perdido en la niebla, un Fran Garcia que no da la talla y un combinado perverso de brasileños de Ancelotti.

La salida de Ancelotti es tardía. Alguien tiene que decirle a Florentino que los jugadores reniegan cuando saben que el técnico no va a seguir. Pecado mortal que no lo hubiera despedido con aquel cuatro a cero al comienzo de la temporada, con un Barcelona que lo ridiculizó hasta ser un pelele.

Nadie puede creer ahora que Xabi Alonso, con estos jugadores, haga un milagro en Miami. Más le vale a la Casa Blanca que piense que es un equipo al que le sobran nada menos que Vinicius, Rodrygo y Bellingham, entre los famosos

Yo los podría a la venta. Tienen mercado y son un disparate más, como el actual fútbol de Brasil. Bellingham parece un fantasma que juega de espaldas. Claro que Arda Güler estuvo mal. Si es que lo hizo jugar de lateral derecho para socorrer al mediocre Lucas Váquez. Incluso no le dejó jugar en el centro del campo.

Este nuevo episodio de un Madrid burlesco, lo desacredita hasta la infamia. Hay que limpiar la plantilla y se van a necesitar cientos de millones. Para ayudar a un Mbappé desamparado por la mitad del equipo. Es absolutamente indecente lo que le han hecho al francés

Tangos del clásico

Tangos del clásico

Actualizado Domingo, 11 mayo 2025 - 19:04

Con los pies en Montjuïc y la cabeza en Maracaná, vivió Ancelotti el último clásico español de clubes de su vida. Nunca lo olvidará por último y por enloquecido. Un duelo delirante en goles, incluso los anulados, y en ocasiones frustradas que mostró las virtudes y los defectos de ambos equipos a lo largo del curso. Un impresionante caudal ofensivo y una excesiva permeabilidad defensiva. En el Barça, a resultas del sistema. En el Madrid, como consecuencia de las deficiencias causadas en gran medida por las lesiones en la línea.

El siguiente clásico de Ancelotti será americano, de selecciones y contra Argentina, que desde hace un siglo ha exportado al mundo sus dos productos estrella: el fútbol y el tango. Y, de 2013 a 2025, un Papa futbolero con apellido italiano, como el de los futbolistas. Muchísimos futbolistas argentinos tienen apellidos italianos. Sin ir más lejos, Ancelotti, nacido en Reggiolo, podría haber nacido en Tucumán. Solari, su sucesor temporal mientras llega Xabi, nació en Rosario. Podía haberlo hecho en Pescara.

"Nostalgia", cantaba en 1935 Carlitos (Carletto) Gardel. El Barça, que tuvo a Maradona y a Messi, carece de argentinos en la plantilla. Una rareza actual, pero no histórica: el club ha importado, en general, poco producto de allá. El Madrid, que tuvo a Di Stéfano, lo mismo. Una anomalía histórica en quien ha mirado mucho hacia el Río de la Plata. Ahora el Barça tiende a volverse hacia Europa y tira de La Masía. El Madrid pesca en todas partes menos en casa.

En 1935 cantaba Carlitos "Por una cabeza", uno de sus tangos más célebres. En las carreras de caballos se gana o se pierde a menudo por una cabeza. En el tango gardeliano se perdía, metáfora hípica de esas derrotas en la vida que, precisamente por ajustadas, o sea, evitables, más fruto de la mala suerte que de la mala práctica, marcan para siempre de un modo aún más indeleble.

Por la mínima

Hace unos días, en un martes de fatalismo tanguero, el Barça perdió por un gol la semifinal de la Champions. Y, por un punto, el acceso a la Final Four de baloncesto. El deporte es con frecuencia una empresa de máximos resuelta con un desenlace de mínimos. Se pierde o se gana por una cabeza, por un gol, por un punto, por un tubular, por un centímetro, por una centésima.

Ancelotti, que posee una cuadra de caballos de carreras, sabe lo que es ganar y perder por una cabeza. Entre ellas la suya, que ya había rodado antes del encuentro. Hace unas semanas entonó su propio tango: "Adiós, muchachos", aunque con algunos se reencontrará en Brasil. Y con Raphinha. El fútbol es un pañuelo.

En un trascendental partido sin, pues, argentinos (están casi todos en el Atleti cebando mate e interpretando a coro "Arrabal amargo"), el Barça amarró la Liga y dejó al Madrid fané y descangayado. La obligada sustitución de Vinicius por Víctor Muñoz resumió la imposibilidad de que el Madrid venciese. No entregó el partido (de hecho, casi lo empata el chaval), pero envió un mensaje de impotencia metafísica. Los hinchas de los dos equipos pueden cantar el mismo tango: "Esta noche me emborracho".

Los del Barça para celebrarlo. Los del Madrid para tratar de olvidar.

La locura y la polémica del clásico: dos revisiones del VAR, tres goles anulados y los "regalos" que mataron al Madrid de Ancelotti en 20 minutos

La locura y la polémica del clásico: dos revisiones del VAR, tres goles anulados y los “regalos” que mataron al Madrid de Ancelotti en 20 minutos

El Barcelona le ha metido 16 goles al Real Madrid en los cuatro clásicos oficiales de esta temporada. Cuatro en la ida liguera, cinco en Arabia, tres en la final de Copa y cuatro en el duelo decisivo de Montjuic que decidió el título. Un encuentro loco marcado por la rápida ventaja del Madrid (0-2 en el minuto 14) y por la instantánea reacción culé: 3-2 en el minuto 34. Es decir, los de Flick, en una cita vital por la Liga, remontaron a su eterno rival en 20 minutos. 20 minutos que fueron la tumba de este Madrid de Carlo Ancelotti. Su última piedra en el banquillo.

El conjunto blanco, con toda una semana libre para preparar el duelo, dio un fugaz paso adelante hacia el título con los dos tantos de Mbappé, el primero de penalti (el más tempranero en un clásico desde 1997) y el segundo tras un buen desmarque a la espalda de la defensa culé que le sirvieron para situarse líder del Pichichi con 25 (luego 26) y para superar a Zamorano como debutante con más goles en su debut en el Madrid. Pero fue un espejismo. Los de Ancelotti, con una defensa plagada de bajas, se replegaron en área propia y dejaron respirar con balón al Barça, que disfrutó dominando a su antojo a su rival.

Ancelotti pedía calma mientras sus futbolistas daban pasos hacia atrás, incapaces de presionar a sus rivales. Valverde, desesperado, arengaba a sus compañeros, pero no sirvió de nada. Y eso que el italiano había alineado a un centrocampista más, Güler en lugar de Rodrygo, para tratar de tener más balón. No funcionó.

El Barça fue una apisonadora. Marcó en el 19, en el 32 y en el 34 para ponerse la Liga en bandeja. Hubo algo de polémica con el VAR, pero los goles lo taparon todo. Los árbitros revisaron el penalti del 0-1 por posible fuera de juego de Mbappé, pero entendieron que el galo no intervino en el inicio de la jugada antes del error de Cubarsí en el control. En el 0-2, los azulgrana pidieron falta a Lamine antes del tanto, pero no hubo nada. Y al filo del descanso, ya con 3-2 y antes del error de Lucas en el 4-2 de Raphinha, Hernández Hernández anuló un penalti de De Jong sobre Mbappé por fuera de juego previo mientras la grada cantaba "Florentino, hijo de puta". Antes del partido, la afición culé había mostrado carteles en los que el presidente del Madrid y el de la Liga.

Hubo tiempo para otra revisión y también con Mbappé como protagonista, al anularle el colegiado un tanto por fuera de juego. El Madrid veía que era posible hacer daño al Barça en ataque, pero su defensa hizo aguas y el descanso llegó con el segundo mayor número de goles en la historia de estos duelos.

"En esos minutos de la primera parte hemos tenido errores evidentes que nos han costado los goles. Hemos regalado oportunidades. Se podía defender mejor, pero no hay que olvidar que estamos sin cinco defensas", recordó Ancelotti sobre las bajas de Carvajal, Rüdiger, Militao, Alaba y Mendy.

Gol y polémica

Tras el descanso, un gol y más polémica. Vinicius y Mbappé encontraron la espalda de la defensa en el 69 y el Madrid tuvo media hora para poder apretar y soñar con la Liga, pero tampoco funcionó.

Más tarde, polémica. Hernández Hernández revisó durante dos minutos en el VAR una mano de Tchouaméni en el área que finalmente no concedió como penalti, provocando el cántico de la grada: "La Liga es una mafia".

El canterano Víctor Muñoz tuvo una clarísima para empatar, pero falló. Como Mbappé, que vio cómo el colegiado le anulaba otro gol por fuera de juego. Fermín metió el quinto de los azulgrana, pero Hernández Hernández, en la segunda consulta de la tarde a la pantalla, anuló por tercera vez un gol tras los dos de Mbappé.

A siete puntos del Barça, la realidad del Madrid se traslada ahora al futuro sobre el banquillo. "Nada que reprochar de actitud y compromiso. Ha sido un partido igualado y lo hemos competido. Hay que intentar ganar los tres que quedan", dijo el técnico.

Mil maneras de ganarle al Madrid

Mil maneras de ganarle al Madrid

Una de mis escenas favoritas de Margin Call, una peli que va sobre la quiebra de Lehman Brothers y el encendido de la crisis financiera, es cuando Jeremy Irons, director general de la compañía, se asoma a la ventana desde la que se ve un Nueva York amaneciendo, y le confiesa a un subordinado que él no ha llegado tan arriba por ser el más listo, sino por saber cuándo la música deja de sonar, y que ahora no se oye nada.

Florentino Pérez, desde el despacho de un rascacielos de ACS, o algo salí, debió despedir al staff técnico de Ancelotti explicándole lo mismo. Que usted puede que no llegue a dirigir Lehman Brothers, pero sabe que la melodía ha cambiado desde hace algún tiempo, ya sea en un Clásico o en un parque infantil, donde el niño que se ponía la camiseta de Bellingham de repente ha aparecido con una de Lamine.

Nada que no haya contado antes Hegel en su dialéctica del amo y el siervo, porque no hay imperios eternos, y el del Madrid se muere mientras pasa ante sus ojos una repetición de los mejores fallos arbitrales de Real Madrid TV.

Los blancos en Barcelona no pudieron ser más fieles a su estilo, por lo menos en los primeros minutos. No había hecho nada y ya ganaba cero dos. Como tantas otras veces en las que parecía encargar las copas de Europa desde el sofá, como quien pide un Glovo.

El Barça repitió el mismo once que en Milán porque todo lo que puede salir muy bien sale muy bien, aunque se pierda. Y encajó dos goles, como siempre, o como quien se toma dos cañas antes de salir de casa, para entonarse.

Mbappé se fue al Madrid para ganar la Champions, sin que a nadie se le pasara por la cabeza que el PSG le vendía por el mismo motivo, porque nadie presta atención a las necesidades de los demás cuando se habla de las necesidades del Real Madrid. De momento, lo ha hecho para intentar ganar el Pichichi y chocar brillantemente contra Ceballos.

Pero no todo es malo para el Madrid. Ancelotti, a la cuarta, ya sabe lo que es casi empatarle al Barça, pero dicen que llega Xabi Alonso, que aún tenemos que ver si sabe ganarle al Getafe. De las cuatro victorias del Barça de Flick al Madrid de Ancelotti, quizá en esta se hizo más evidente, el Barça que se ha perdido la historia del fútbol de no haber llegado a este Clásico deprimido y exhausto.

Fermín López: "Los jóvenes del Barça venimos desde abajo, somos una familia y eso se nota en el campo"

Fermín López: “Los jóvenes del Barça venimos desde abajo, somos una familia y eso se nota en el campo”

Ha ganado una Eurocopa, unos Juegos, una Supercopa y una Copa del Rey en los últimos diez meses, pero a Fermín López no le es suficiente. Llega a la cita con este periódico mientras se termina de arreglar el pelo y se ajusta el chándal de la marca que ha decidido apostar por él, Under Armour, concentrado y convencido de dar un «golpe en la mesa» en el clásico que decidirá la pelea por la Liga entre el Barça y el Madrid.

Viene de ganar los Juegos y la Eurocopa, está siendo importante en un Barça que ha ganado la Copa, ha llegado lejos en Champions y esta tarde se juega la Liga. ¿Cómo lo ha gestionado?
La verdad que muy bien porque había conseguido muchas cosas pero también todo pasó muy rápido. Estuve casi todo el verano con partidos y viajes y luego tuve una lesión. Era la primera lesión que tenía en mi vida y luego recaí de la otra pierna. Son cosas que te hacen aprender y mejorar, porque me costó un poco entrar en la dinámica del equipo en la pretemporada. A pesar de eso mentalmente lo llevé con naturalidad, como siempre.
¿Era la primera lesión de su vida? A partir de ahí, ¿cambió algo en su alimentación o preparación?
Sí, la primera. Y bueno, al final cuando te pasan esas cosas reflexionas sobre si lo que estás haciendo es lo correcto. Yo siempre me he cuidado mucho, trabajo con un preparador físico y con un fisioterapeuta, pero contraté a un nutricionista. Y me ha ido bien, con la suplementación, la alimentación y después en el Barça también me han ayudado mucho a estar bien físicamente.
Juegos, Eurocopa, el Barça... ¿Quién le baja a la tierra?
Diría que la gente de mi entorno, mi familia y mi pareja, que son personas humildes, pero si me tengo que quedar con uno sería con mi padre. Siempre me dice que es mi mayor fan y mi mayor crítico. Intenta que tenga los pies en el suelo. Me mete un poco de caña dependiendo del momento (risas).
¿Se ha infravalorado al fútbol español en los últimos años?
Quizás sí, pero después de la Eurocopa creo que se ha puesto más en valor el talento español. Creo que se venían haciendo las cosas bien desde antes, pero al ganar estos títulos das un golpe encima de la mesa.
La entrevista de Fermín López con EL MUNDOReda Slafti

¿Qué pasa en La Masía para que no paren de salir jugadores?
Nos preparan muy bien, tanto a nivel futbolístico como personal. Y luego al llegar arriba pues es lo que nos han enseñado desde pequeños, ese ADN Barça, y creo que cuando llegamos los jóvenes damos el nivel.
Además de compañeros, son amigos. ¿Cómo de importante es eso?
Sí, al final somos como una pequeña familia porque compartimos muchos momentos y esas relaciones personales al final se notan en el campo. Hay más equipo y nos ayudamos los unos a los otros.
Van a jugar varios clásicos en poco tiempo. ¿Cree que esa relación de tantos años desde la cantera les hace diferentes al Madrid?
Bueno, quizás sí, porque al final es lo que he dicho, venimos desde abajo compartiendo muchas cosas y ahora estamos viviendo el sueño de estar en el primer equipo. Creo que somos una familia y dentro del campo se está reflejando.
Mencionaba usted antes ese golpe en la mesa» con la selección. Con el Barça, han ganado la Copa y en este clásico se puede decidir la Liga, ¿cree que darían otro puñetazo en la mesa en el fútbol español?
Bueno, la verdad es que al principio nadie creía en nosotros. Para todo el mundo éramos muy jóvenes y tal, y bueno, creo que hemos ido trabajando, hemos ido haciendo lo que el míster nos ha pedido, hemos sido una familia y hemos aspirado a todo. Todo el mundo en Europa sabe que tenemos un gran equipo.

VICTÒRIA ROVIRAAraba

¿Qué les ha dado Hansi Flick para que el equipo haya tenido un cambio tan grande este año?
Lo que se ha visto. Además de lo bien que jugamos, él da mucha importancia a que seamos una familia. Nos ha hecho creer en cada uno de nosotros y poner cada uno el talento al servicio del equipo.
El estilo ha cambiado. ¿Era importante dejar un poco ese ADN Barça y jugar un fútbol más moderno, de presión y verticalidad?
Sí, bueno, al final cada entrenador tiene sus matices y quizás con Hansi en algunas cosas arriesgamos más en algunos momentos. Pero mantenemos ese ADN Barça de tener siempre el balón. Presionar, correr, ganar duelos... Todo eso es importante en el fútbol moderno.
Un responsable de las categorías inferiores del Barça decía que Gavi era el más travieso de todos y usted el más estudioso. ¿Le gustaba?
Era Xavi Martín, el director de La Masía en ese momento. Y sí, mis padres siempre me han metido mucha caña con los estudios y no me quedaba otra, lo he llevado bien. Gustar como tal no (risas), pero no me costaba y se me daba bien.
Pasó un año en el Linares, en Primera RFEF, ¿fue importante?
Mucho, mucho. Al principio fue un palo irme cedido porque pensaba que igual no iba a seguir en el Barça ni a cumplir mi sueño, pero ese paso me ayudó a mejorar como jugador y a crecer como persona. Me hizo estar donde estoy.
Le bajó un poco a la tierra.
Sí, te choca un poco al principio no tener todos los recursos que tenemos aquí en el Barça, pero mentalmente hice un cambio de chip, vi cosas diferentes y valoré mucho lo que había estado viviendo en La Masía. Y luego al volver al Barça lo valoré más. Sabía lo que quería.
Fermín, en la nueva campaña de Under Armour.

Fermín, en la nueva campaña de Under Armour.

Dejó El Campillo por Barcelona con trece años.
En El Campillo están mi familia y mis amigos. Estuve poco, porque pasé toda mi infancia y adolescencia en La Masía, pero lo recuerdo con mucho cariño. Para un niño de 13 años... Imagínate el cambio. Fue bastante difícil al principio, y creo que aunque me costó, me adapté bastante bien. Creo que mis padres lo llevaban peor que yo, porque ellos estaban en El Campillo y no sabían lo que hacía, si me pasaba algo... Vives con ese runrún todo el rato. Personalmente al principio fue duro, pero después bien.
Usted repite que es un currante. ¿Un currante puede ser una estrella? ¿Una estrella debe ser un currante?
Nunca he querido ser una estrella y nunca me ha movido llamar la atención. Pero es verdad que al final aunque tengas talento tienes que currar, eso es lo que me han enseñado desde pequeño, creo que es lo que estoy haciendo desde siempre y creo que la gente lo valora.
Más allá del fútbol, ¿qué hobbies tiene? ¿Consola o redes sociales?
Ahora juego menos a la Play y paseo al perro. Y estoy un poco viciado a TikTok, te metes ahí a ver vídeos y no paras.
¿En el vestuario hay vicio con las redes? ¿Alguno más que los demás?
Buah... La verdad es que en las concentraciones al final cuando estamos en el hotel estamos casi siempre con el móvil. Te diría Lamine, que es más joven y le gusta mucho TikTok y esas cosas.
¿Quién ha sido su ídolo?
Messi e Iniesta.
¿Ve algo de ellos dos en Lamine y Pedri?
Salvando las distancias, porque nadie va a ser como ellos, pero es verdad que Lamine y Pedri tienen cosas de ellos.
Protagoniza la última campaña de 'Under Armour', "Comerse al rival". ¿Cómo de importante es que una marca como que tiene a estrellas como Stephen Curry, Tom Brady, Dwayne Johnson o Anthony Joshua, apueste por usted?
Es una marca que está creciendo mucho y desde el primer momento mostraron mucho interés en mí, me han dado mucha confianza y creo que transmite valores muy similares a los míos. Eso fue importante.
Míchel, entrenador del Girona, hospitalizado por un problema de salud

Míchel, entrenador del Girona, hospitalizado por un problema de salud

Actualizado Viernes, 9 mayo 2025 - 11:25

El entrenador del Girona, Míchel Sánchez, ha sido hospitalizado por un problema de salud y se encuentra en observación médica por precaución, según ha informado el club catalán este viernes.

En un comunicado publicado en la red social X, el Girona ha explicado que Míchel evoluciona "favorablemente", que está recibiendo la atención adecuada y que no podrá dirigir el equipo en el encuentro de este sábado contra el Villarreal, en Montilivi.

La entidad desea su recuperación "en los próximos días" y agradece la comprensión y el respeto por la privacidad del técnico madrileño en estos momentos.

El Girona ha informado, además, que el segundo entrenador, Salva Fúnez, comparecerá este viernes en la rueda de prensa previa al encuentro contra el Villarreal.

Míchel ha publicado un mensaje en sus redes sociales en el que explica que estará unos días ingresado en observación por un "contratiempo de salud", pero que está "bien" y que "desde ya" cuenta los días para "seguir peleando en lo que queda de temporada".

"Estoy seguro de que este grupo, pese a mi ausencia, lo dará todo, como siempre, para que nuestra gente pueda sentirse orgullosa del club y de los valores que representa", ha añadido el técnico rojiblanco.

El entrenador del Girona ha agradecido el trato y la profesionalidad de los médicos, así como las muestras de cariño y los mensajes de la "familia gironina" y de todas las personas que se han preocupado por él. Míchel ha finalizado su mensaje con un "nos vemos pronto" y un "amunt, Girona".

Cuando quedan cuatro jornadas para que finalice LaLiga EA Sports, el equipo catalán ocupa la decimoquinta posición con un margen de seis puntos con respecto a las posiciones de descenso.

Los secretos de la seguridad, la producción, las estadísticas... Lo que no se ve del Barça - Real Madrid: "Es lo que se hace en cada partido, pero mucho más"

Los secretos de la seguridad, la producción, las estadísticas… Lo que no se ve del Barça – Real Madrid: “Es lo que se hace en cada partido, pero mucho más”

"Es lo que se hace en cada partido, pero mucho más". Así definía el Área de Seguridad de la Liga lo que supone un clásico a nivel organizativo. LaLiga ha querido desvelar los secretos que rodean al mayor encuentro de fútbol a nivel de clubes del mundo y ha desgranado datos y elementos que corresponden a la seguridad, las estadísticas y la producción televisiva del choque que enfrentará a FC Barcelona y Real Madrid el próximo domingo en Montjuïc.

SEGURIDAD

El primero en la clasificación de la Liga, FC Barcelona, contra el segundo, Real Madrid, se enfrentarán este domingo en la jornada 35. Para este Clásico en Montjuïc se prevén un total de 54.000 aficionados -el estadio lleno-, lo que implica un gran despliegue que evite cualquier incidente tanto dentro como fuera del estadio.

Ante un encuentro como este, calificado de "alto riesgo", la presencia policial y la seguridad se incrementan respecto a lo común de cualquier otro partido. Normalmente, los efectivos giran en torno a los 350-400 por partido, mientras que el clásico reunirá a más de 700.

Otra diferencia es la declaración del alto riesgo, así como la activación de servicios antidrones y Mossos D'Esquadra PG-ME. Asimismo, este partido requiere una novedad más: la tramitación del NOTAM. El espacio aéreo cercano a Montjuïc estará más controlado que nunca, impidiéndose el vuelo de cualquier dron no autorizado.

El protocolo empieza mucho antes del partido como tal, lo que supone que para esta ocasión hay una compleja planificación en cuanto al servicio policial en el hotel de los equipos. Todo es importante: este acompañamiento hasta el hotel, la presencia policial en los alojamientos del árbitro, el control sobre el tipo de aficionados que viajarán hasta el estadio (especialmente ante los ultras), etc.

Pese a todo ello, la tranquilidad durante el partido no sólo depende del refuerzo en la seguridad que se vivirá este domingo, sino que influirá la evolución del marcador, la actitud de los jugadores, las polémicas que se produzcan con el árbitro...

ESTADÍSTICAS

Además de la seguridad, habrá un equipo técnico de LaLiga para controlar cada pase, cada regate y cada táctica que se produzca en el encuentro. El Barça es el equipo con la línea defensiva más alta, así como es primero en recuperaciones en ventaja y en juego en profundidad. El equipo blaugrana provocó 12 fueras de juego al Madrid en el primer clásico, cuando su segundo peor dato de la temporada es de seis y la media por partido de 1'15.

Los jugadores que se consideran como los más destacados del encuentro son: Raphinha y Lamine Yamal, por parte del FC Barcelona y Vinicius y Mbappé, por la del Madrid.

PRODUCCIÓN TELEVISIVA

El Clásico requiere de la mejor calidad en su emisión, lo que supone otro esfuerzo sobre la producción televisiva. Habitualmente los partidos cuentan con 20 cámaras, cifra que para este partido se va a doblar, 40.

Además de estas 20 extra, se dispondrán de ocho cámaras super slow y cinco high speed, cuatro de travelling, un dron y una cámara cenital que recorre el estadio a 40 metros. Habrá más de 500 profesionales para llevar a cabo todo el despliegue técnico, que tendrá también dos unidades móviles 4K, dos motos y una cobertura periférica e inmersiva.