Rota en Montjuïc la Línea Maginot de Hansi Flick: fe en el sistema sin plan B, interrogantes a su alrededor y tacto en el vestuario

Rota en Montjuïc la Línea Maginot de Hansi Flick: fe en el sistema sin plan B, interrogantes a su alrededor y tacto en el vestuario

La 'Línea Maginot' debe su nombre al antiguo ministro de Defensa francés André Maginot, un ex combatiente mutilado de la Primera Guerra Mundial, que después de la Gran Guerra ideó una serie de fortificaciones en la frontera con Alemania e Italia. El objetivo era que su país no fuera nunca más vulnerable a una invasión gracias a un sistema de gran complejidad tecnológica y militar, con fortines coordinados y situados a una misma distancia entre sí

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Hansi Flick: "Debemos ser más inteligentes"

Hansi Flick: “Debemos ser más inteligentes”

Actualizado Domingo, 22 diciembre 2024 - 00:50

«Jugamos frente a un equipo que tuvo sus opciones. Creo que hicimos un partidazo en la primera parte, es el estilo que quiero ver en mi equipo. Estoy orgulloso de eso, triste por el resultado final. Ellos esperaban lograr eso con su estilo, pero yo creo que nuestra forma es otra. Al final, no nos llevamos ningún punto, pero estoy contento por cómo hemos jugado, por el juego de Pedri y la pasión que le puso Gavi al partido. El año que viene volveremos, no renunciamos a nada. Ahora viene una pausa, pero volveremos con fuerza y la plantilla ya ha demostrado que puede marcar muchos más goles». Hansi Flick se presentó en la conferencia de prensa sin pesar, resaltando el buen juego del equipo pese a haber encajado la tercera derrota consecutiva como local y sumar sólo cinco de los últimos 21 puntos en juego en la Liga. A continuación, se mostró más autocrítico con las concesiones de su equipo.

«Para mí, este partido contra el Atlético fue ante un rival del mismo nivel, y fue un partido fantástico. Ante Leganés y Las Palmas son las derrotas que más deben preocuparnos. Esta vez lo hicimos bien, pero, al final, se defendieron muy bien. De haber marcado las ocasiones sería otro resultado, cometimos dos o tres errores y los aprovecharon. Estoy contento por cómo jugamos, pero creo que debemos ser más inteligentes. Tenemos que aprender de eso, pero, en cuanto a calidad, no tengo nada que decir. Es el estilo del Barça, queremos dominar, pero, al final, en fútbol, el que marca más goles es el que gana. Hemos cedido nueve puntos en casa y eso es algo que no nos podemos permitir. Cometimos un error, podíamos conservar la posesión, no perder el balón y su contraataque fue muy bueno, con poco espacio. Hay que estar pendientes de esas cosas».

«Ya dije antes que ahora viene un descanso», prosiguió. «Todo el mundo ha visto cómo podemos jugar, eso es lo positivo, y después de ese descanso, que todo el mundo necesita, veremos cuán fuertes podemos volver. Celebraremos la Navidad, volveremos a entrenar el 29 y nos centraremos en lo que tenemos que hacer». El técnico azulgrana, que cumplió su segundo partido de sanción, explicó el malestar de no poder dirigir a los suyos desde la banda. «Para mí los dos últimos partidos fueron horribles, por no poder estar en el banquillo. Creo que no es justo, es todo lo que puedo decir. Tengo que controlar mis emociones cuando vuelva al banquillo, pero no estoy preocupado por mi equipo, porque ha demostrado que puede jugar bien y Gavi, por ejemplo, ha dado un gran paso adelante. Ha vuelto. No puedo cambiar lo que pasó, la situación no es la que queremos, tenemos que esperar, pero puedo prometer que vamos a pelear por todos los partidos. Esa es nuestra meta, lo que queremos hacer, nuestro trabajo. Defendemos este club y creo que todos los jugadores están dispuestos a demostrarlo».

Demasiados puntos perdidos

El entrenador azulgrana lamentó la deriva del equipo en la competición doméstica, en la que ya ha perdido la cabeza y puede quedar a seis puntos del Atlético de Madrid, que cuenta con un partido menos. «Sé que jugamos fantásticamente en los dos o tres primeros meses, pero hemos perdido un montón de puntos, ya no somos lideres, pero creo que estamos en buena posición, no estoy preocupado por eso. Los jugadores han demostrado ante el Atlético cómo podemos jugar y ese debe ser nuestro estándar».

Pau Cubarsí se mostró desolado por cómo concluyó el partido. «Es un estado de ánimo jodido, se ha reflejado que hicimos un gran partido, con muchas ocasiones, faltó algo de finura arriba y dos detalles nos costaron la derrota», comentó el central, que no estuvo acertado a la hora de neutralizar el pase que supuso el gol de la victoria del Atlético. «No pueden ser que lleguen dos veces y marquen dos goles. Hay que estar más enfocados».

Diego Pablo Simeone, lejos del triunfalismo, hizo un análisis ponderado del encuentro. «Hasta el gol, fueron muy superiores a nosotros. Después empezamos a entrar y vimos que podíamos competir el partido. El segundo tiempo fue más competido, con situaciones claras de ellos y una nuestra, tras el gol de De Paul, de Barrios que se queda uno a uno. El equipo supo resistir y esperar lo que podía pasar. Encontramos un contragolpe exquisito de Sorloth, con un pase fantástico, que nos permite ganar un partido en el que, por situaciones, ellos merecían un poco más».

Simeone apunta y Sorloth ejecuta al Barça y le deja en la UVI

Simeone apunta y Sorloth ejecuta al Barça y le deja en la UVI

Era el plan. Trazado con maestría. Con la pericia del perro viejo. Sabiendo dónde se le podía hacer daño al Barça. Desde la desesperación. Del muro a la victoria. 18 duelos ha costado, pero lo logró Simeone y dejó al Barça en la UVI, en la que lleva ya siete partidos y colocó a su Atlético líder. Oblak construyó y Sorloth remató. A Flick, en la grada, le llevarían los demonios porque lo quiso más, pero no lo encontró. Un noruego quiso hacer historia. [Narración y estadísticas, 1-2]

Valentía. Era la palabra clave en este duelo en la cumbre. Mitad de temporada, sí; pero más que tres puntos entre dos contendientes a esta liga, le guste al Cholo o no. El argentino, sobre el que pesaba la sombra de la sospecha, salió con sus habituales: pretorianos, pero con clase. Flick, en cambio, se quiso proteger de salida con un equipo más trabajador que de costumbre, aunque el partido tuviera que verlo desde la grada por su expulsión ante el Betis.

Sin embargo, planillas y pizarras aparte, el Barça salió como un ciclón en Montjuic. No parecía que las dinámicas entre ambos, opuestas, se intercambiaran en los primeros minutos. Raphinha perdonó un gol y Gallagher tapó otro. La mala noticia para el Atlético es que fue en apenas cinco minutos en los que los jugadores rojiblancos, el sábado de celeste, parecían más aguadores que futbolistas.

Diez minutos tardó el Atlético en tener su primera posesión larga, muchas más iba a necesitar para apagar los ánimos blaugranas con un combativo Gavi y un imaginativo Pedri. Ha recuperado su mejor nivel el canario con Flick y el equipo lo nota. Si ya encima marca, pues miel sobre hojuelas. Se aprovechó el 8 de un mal control de Gavi para hacer una pared involuntaria y colocarla en la base del palo imposible para Oblak.

Pedri anota el primer tanto del partido.

Pedri anota el primer tanto del partido.Quique GarcíaEFE

En el primer cuarto de hora, la posesión era 70/30 a favor de los locales. Como si a Simeone eso le importara. En el 17 llegó el primer atisbo de peligro rojiblanco tras un gran cambio de juego de Gallagher. Se iba abriendo el Atlético, pero faltaba llegar con algún pase más. Se hacía complicado precisar a pelotazos. Se echaba en falta a De Paul, el faro rojiblanco en los últimos partidos, ahogado entre blaugranas igual que Barrios.

Ni siquiera el gol de Pedri, en el minuto 29, cambió al Atlético su plan inicial de estar agazapado y salir rápido, más que rápido, precipitado. Mientras, los azulgrana mordían más arriba y haciéndole daño desde el costado de Raphinha, un puñal. Está el brasileño en su curso, ese que esperó, paciente, cuando media parroquia blaugrana pedía su venta para hacer caja. Le faltó una zancada para hacer el segundo al filo del descanso después de que Íñigo Martínez evitara que Julián empatara en boca de gol.

El que evitó el segundo en el inicio de la segunda parte fue Oblak. Tapó bien el esloveno el disparo de Fermín tras una cesión infructuosa de Giménez, que salió unos minutos más tarde con un problema muscular. Volvió en Montjuic el calvario para el uruguayo. Y eso que el Atlético había salido con otra intención inicial, más agresivo en la presión y pisando más campo contrario, pero el Barcelona seguía amenazando no solo a la contra sino también con posesiones largas para aplacar los ánimos colchoneros.

De Paul, tras anotar el empate.

De Paul, tras anotar el empate.JOSEP LAGOAFP

De una de las primeras inventó Pedri otro precioso pase en profundidad, el enésimo, pero Raphinha estrelló su vaselina en el larguero. Y como en el duelo la cosa iba de pases a la red. Quiso De Paul imitar a Pedri para reivindicar su presencia en el partido. Culminó el argentino una contra que comenzó él mismo con un putt al segundo palo de Peña. Otro que se estiraba para la foto. Y el gol trajo de nuevo los mismos papeles con los que se inició la contienda con cambios, ambos, con esas intenciones. El Atlético pasaba a su clásico 5-3-2. Estilos, los llaman.

Desde la defensa intentó sorprender el Cholo y casi le sale si Barrios llega a embocar la que tuvo solo ante Iñaki Peña. Respondió bien el cancerbero. Oblak le respondió poco después por partida doble salvando un mano a mano ante Raphinha a pase de Pedri y otro ante el propio canario. Hasta que llegó Sorloth para cumplir el plan del Cholo. Se impusieron los estilos, triunfó la manta. Una victoria gloriosa e histórica.

Una cita con el dentista o con la historia: Simeone frente al Barça, un rival al que nunca ganó a domicilio

Una cita con el dentista o con la historia: Simeone frente al Barça, un rival al que nunca ganó a domicilio

Hay quimeras menos temibles que esta que viste de azulgrana. No tiene dos cabezas, ni vomita fuego, pero en su morada es tan invencible como la que describen los mitos griegos. No será por intentos para vencerla, 17, pues Diego Simeone aún no lo ha conseguido. Quizás en la 18 suene la flauta.

Y es que el técnico argentino nunca ha logrado vencer al Barcelona en su casa desde que ocupa el banquillo del Atlético. Son 10 derrotas y siete empates, aunque algunos hayan sabido a gloria. Que se lo pregunten si no a Diego Godín con aquel cabezazo para noquear al Barça de Leo Messi y regalar el título de Liga al Atlético en la temporada 2013/14. La primera de las dos conquistadas por el Cholo como entrenador rojiblanco.

Glorias aparte, el argentino ha conseguido ganar en el Parque de los Príncipes, en Stamford Bridge, en Anfield, en San Siro y hasta en el Bernabéu. En el feudo blanco, además, no sólo rompió la maldición de 14 años sin vencer al eterno rival, sino que le arrebató la Copa del Rey en su propia casa. Uno de los partidos que Simeone guarda con más cariño en su memoria. Pero el Camp Nou y hoy Montjuïc se le siguen resistiendo.

20 derrotas en 36 partidos

Lo cierto es que la última victoria del Atlético en Cataluña llegó en febrero de 2006, con Pepe Murcia en el banquillo y un imberbe Messi. Fernando Torres, con un doblete, y Maxi Rodríguez derrotaron al conjunto de Frank Rijkaard, en el que no sirvió el tanto de Henrik Larsson.

El balance de goles, además, también es bastante desfavorecedor. Hablamos de 27 tantos en contra (un promedio de casi 1,6) y tan sólo 12 a favor. Al menos, los culés ya no cuentan con Messi, que hizo del Atlético su rival preferido, sólo por detrás del Sevilla. 38 goles hizo a los hispalenses en 43 partidos, por 32 a los rojiblancos en los mismos duelos.

En el cómputo general, no es tampoco el Barcelona el rival preferido del Cholo. El argentino se ha enfrentado a los blaugrana en 36 ocasiones, de las que sólo ha conseguido vencer en cinco. 20 son derrotas y el resto, 11, empates.

Dinámicas opuestas

Eso es lo que dice la historia entre ambos, pero las dinámicas de rojiblancos y culés son muy diferentes en el campeonato nacional. El Barcelona de Hansi Flick, que había comenzado con 33 de 36 puntos posibles, sólo ha obtenido una victoria de los últimos seis encuentros. Mientras que el Atlético vuela con seis de seis y 11 seguidas si contamos todas las competiciones. Si Simeone ganara al Barcelona, estaría a punto de empatar su mayor racha de victorias con el Atlético, las 13 que obtuvo en la 2012/13.

Además de las dinámicas, parece que Simeone ha dado con la tecla gracias a un 4-4-2 y un juego más ofensivo, con un mediocampo muy potente y trabajador. La irrupción de su hijo Giuliano y la explosión de Pablo Barrios, futbolista con el que el Atlético no ha perdido esta temporada, además, claro, de la explosión de Julián Álvarez, conforman un equipo poderoso y con calidad arriba para hacer daño.

La opción del liderato

La baja de Lamine Yamal supone un serio contratiempo para un equipo aquejado de Laminedependencia. No obstante, la última derrota ante el Leganés fue con la estrella blaugrana en el campo. Así, quizás haya habido un bajón general en el juego de un equipo que empezó como un tiro. Curiosamente, la recuperación de algunos lesionados no ha terminado de sentar bien. Y Robert Lewandowski no encuentra su eficacia de comienzos de curso, aunque son ya 16 tantos en la cuenta del polaco.

Lo cierto es que este partido podría marcar el sorpasso del Atlético y su primer liderato del año, aunque los rojiblancos tienen un partido menos, al no haber jugado el duelo adelantado por la Supercopa. Así que tendrían una bala más en el caso de obtener el empate. El Atlético no lidera LaLiga desde el primer partido de la pasada temporada. Y además, en esta, no tendrán la posibilidad de que Joao Félix les vuelva a celebrar un gol en sus narices.

Marc Casadó, solidez y talento en un puesto clave para Flick

Marc Casadó, solidez y talento en un puesto clave para Flick

Actualizado Viernes, 20 diciembre 2024 - 19:13

Marc Casadó se ha convertido, a los 21 años, en una pieza imprescindible para Hansi Flick. El centrocampista, eclipsado en los compases iniciales del curso por la irrupción de un Marc Bernal que parecía llamado a convertirse en la gran revelación, aporta solidez y talento a la medular del Barça. La zona del campo donde, desde la adopción de los postulados del cruyffismo, el equipo ha intentado forjar su superioridad. Para lograrlo, hace falta capacidad de recuperación y visión de juego. Dos características que el canterano ya ha demostrado poder aunar en su fútbol.

Aunque, en circunstancias normales, la organización del juego recae en la figura de Pedri, Casadó también es capaz de romper líneas con su propia capacidad para desplazar el balón. En la retina de los culés, por ejemplo, sigue aún muy vivo el medido pase que le permitió a Robert Lewandowski anotar el 0-1 el pasado 26 de octubre en el Bernabéu. Su capacidad para robar balones en el centro del campo, además, está fuera de toda duda. El canterano, de hecho, ha llegado a celebrar recuperaciones casi como si fueran goles.

Si hay algo que, tal vez, debería acabar de pulir, en este caso, es un ocasional exceso de ímpetu. Algo que le costó, por ejemplo, acabar siendo expulsado ante el Celta en Balaídos en el que los azulgrana, pese a llegar a ir ganando por 0-2, acabaron cediendo una igualada que agravó el traspiés firmado una semana antes en Anoeta y que fue, a su vez, el arranque de una crisis de juego y resultados en la Liga que, pese al paréntesis ante el Mallorca (1-5) sigue lastrando al equipo. Los de Flick, ahora mismo, con el Atlético empatado a puntos en la cabeza y el Real Madrid a uno de distancia, ambos con un partido menos, ya no dependen de sí mismos para proclamarse campeones de invierno.

"Muy maduro y responsable"

La progresión de Casadó tampoco ha pasado inadvertida para Luis de la Fuente. El centrocampista, de hecho, ya ha tenido la oportunidad de disputar sus primeros partidos conEspaña. Su debut, a domicilio ante Dinamarca (1-2), se produjo a instancias de unas molestias de Martín Zubimendi, pero, frente a Suiza (3-2), en Tenerife, el joven crack dejó muy claro que hará bien si lo sigue teniendo en cuenta para próximos compromisos, por mucho que estuviera a punto de empañar su actuación con el penalti que propició el momentáneo 2-2.

«Es un chico muy sensato, maduro y responsable. Hay que jugar bien al fútbol, pero lo tiene todo y está rindiendo, con esa exigencia que tiene. Es otro de esos futbolistas que no nos ha sorprendido, quizás sí su irrupción en tan poco tiempo, pero siempre reivindico que a estos jugadores hay que darles oportunidades, porque son muy buenos», le elogió el seleccionador en la previa.

El rechazo inicial de Flick

Hasta ahora, Casadó ha demostrado que sabe tener paciencia. Con Xavi Hernández, llegó a ir convocado en 24 partidos antes de que, por fin, el técnico le hiciera debutar con el primer equipo. La competencia, en su puesto, era entonces terriblemente fiera.

El ex capitán, eso sí, antes de que se precipitara su definitivo adiós al banquillo, ya dejó claro que tenía pensado llevárselo a la pretemporada, tal y como también hizo un Flick para quien, inicialmente, no era la primera opción en la medular. Por mucho que el alemán valorara su polivalencia y confianza, crucial para que no se planteara buscarse la vida lejos de Montjuïc. Ahora, este centrocampista paciente, intenso y, también, buen estudiante, por mucho que los libros vayan a quedar ahora aparcados por un tiempo, es simplemente inamovible en el Barça.

Lamine Yamal, baja entre tres y cuatro semanas por lesión

Lamine Yamal, baja entre tres y cuatro semanas por lesión

Actualizado Lunes, 16 diciembre 2024 - 16:40

El Barça se ha llevado esta mañana un nuevo golpe. El duelo ante el Leganés, además de significar una derrota que pone en serio peligro sus posibilidades de alzarse como campeón de invierno, ha tenido finalmente aún más consecuencias negativas para los intereses barcelonistas.

Lamine Yamal, ahora mismo, pese a su juventud, el gran argumento al que puede agarrarse Hansi Flick a nivel ofensivo para cambiar el errático rumbo que están tomando los suyos, estará de baja entre tres y cuatro semanas por lesión.

El canterano, según hizo oficial el propio club por medio de un comunicado, sufre un esguince de grado uno del ligamento intertibio-peroneo anterior del tobillo derecho. Una lesión que, en este caso, se produjo en el transcurso del partido frente al Leganés de este pasado domingo en Montjuïc que, a la postre, se saldó con la segunda derrota en casa de los barcelonistas esta temporada.

El jugador, de hecho, estuvo renqueante a lo largo de gran parte del encuentro. E, incluso, llegó a pedir el cambio en los instantes finales del primer tiempo. Pese a todo, aún siguió durante bastante rato en el terreno de juego y, de hecho, tuvo alguna que otra buena ocasión para convertir un tanto que podría haber supuesto salvar por lo menos un punto frente a un rival que no había conseguido hasta ahora ganar lejos de Butarque.

De acuerdo con las previsiones, Lamine Yamal se perderá tanto el partido de este próximo sábado frente al Atlético, que podría permitirles a los de Simeone alzarse con el liderato pese a contar con un partido menos que los barcelonistas, como el duelo en la Copa del Rey ante el Barbastro, un rival que, la temporada pasada, llegó a ponerles el miedo en el cuerpo a los azulgrana en esta misma competición.

El jugador, además, es como mínimo duda con vistas a la Supercopa de España, que se disputará en Arabia Saudí entre el 8 y el 12 de enero. Los azulgrana, en este caso, se estrenarán el mismo 8 de enero con un duelo en el que se enfrentarán al vigente campeón de Copa, el Athletic, mientras que el Real Madrid, por su parte, se medirá con el Mallorca al día siguiente.

El Leganés provoca otro sonrojo al Barcelona en Montjuïc

El Leganés provoca otro sonrojo al Barcelona en Montjuïc

Actualizado Domingo, 15 diciembre 2024 - 23:11

El Barça volvió a darse otro batacazo en Montjuïc. Tan grande como el que ya protagonizó un par de semanas antes frente a Las Palmas. El Leganés, que no había sido capaz de ganar a domicilio en sus anteriores salidas, supo aprovechar perfectamente un madrugador gol de Sergio González a la salida de un córner para llevarse una victoria por 0-1 y evidenciar que los azulgrana siguen aún muy lejos de su mejor versión en la Liga. [Narración y estadísticas]

Los de Flick, por ahora, conservan el liderato. Pero la inminente visita del Atlético y el partido pendiente del Real Madrid frente al Valencia les obligan a buscar la fórmula para volver al juego que firmaron en los primeros compases del campeonato. Algo que, ahora mismo, echan muchísimo de menos. Muchísimo. La caída libre que están firmando en estos momentos parece no tener fin.

Un partido sin Cubarsí

Hansi Flick sí introdujo un cambio en la defensa para dar descanso a uno de sus habituales. Cubarsí, en este caso, se quedó de inicio en el banquillo, pero no para dar entrada a un Araujo llamado a tener sus primeros minutos del curso ante el Leganés. Quien se encargó de relevar al joven central azulgrana, en este caso, fue un Eric García a quien ha estado probando como pivote a lo largo de lo que llevamos de temporada y que demostró que puede ser también una más que buena alternativa en el centro de la zaga.

El uruguayo, al final, por cómo fue el guion del partido, tuvo que quedarse finalmente con las ganas. En ataque, en cambio, el germano se mantuvo fiel a sus puntas de gala: Lamine Yamal, Robert Lewandowski y Raphinha. Ninguno de los tres, a pesar de todo, estuvo realmente acertado a lo largo de una primera parte que se envenenó tremendamente para los intereses de los azulgrana.

Entrar fríos, con escasa tensión, les costó verse por detrás en el marcador muy pronto. El córner que cedió Iñaki Peña para evitar que Munir marcara acabó por aprovecharlo Sergio González para poner un 0-1 que dejó aún más helados a los barcelonistas. Y sus intentos por meterse en el partido se estrellaron una y otra vez contra un Dmitrovic muy inspirado, capaz de firmar dos buenas intervenciones a sendos remates de Lewandowski y encontrar la oportuna ayuda del travesaño para desbaratar finalmente un duro disparo de Raphinha que amenazaba con convertirse en el 1-1.

El Leganés, por supuesto, aprovechó su ventaja en el luminoso para jugar con el reloj, buscando que los minutos se agotaran con poco juego efectivo y que el Barça no tuviera ritmo de balón para tratar de meterse de lleno en el partido.

Intentos sin éxitos del Barça

El duelo, a la postre, se iría al descanso con ventaja visitante, por mucho que Olmo, poco inspirado en los primeros 45 minutos, y Lamine Yamal tuvieran un par de ocasiones claras para evitarlo en el añadido de la primera parte. En la reanudación, unos y otros dejaron muy clara cuál iba a ser su actitud. Los azulgrana, apretando desde el primer minuto, con más ganas que puntería.

El Leganés, haciendo que uno de los asistentes tuviera que ir a buscarlos a los vestuarios para seguir jugando con el reloj incluso cuando este estaba aún parado. Es de justicia decir que los azulgrana lo intentaron una y otra vez. Por lo menos, buscando acabar las jugadas, evitando así más opciones de pérdida de tiempo. Pero no había manera. El balón se negaba una y otra vez a acabar en el fondo de la red.

El tiempo, pese a todo, corría en contra del Barça y los azulgrana llegaron a los últimos diez minutos del encuentro aún por detrás en el marcador y con la terrible sensación de que era de esos días en los que no iba a haber manera de marcar. Por mucho que lo intentaran una y otra vez. Y, a decir verdad, tampoco es que encontraran precisamente la mejor manera de lograr ese objetivo.

Lo único que les quedaba era intentarlo a la heroica, con un rival dispuesto a apretar los dientes y armarse al máximo en defensa para llevarse a la postre un partido que agudiza aún más la crisis de juego de los barcelonistas en la Liga. Quizás, en el peor momento posible. Sobre todo, con un Atlético de Madrid en pleno crecimiento y que se plantará en Montjuïc el sábado que viene.

Ronald Araujo regresa tras su baja con una compensación de 2,6 millones de euros

Ronald Araujo regresa tras su baja con una compensación de 2,6 millones de euros

Actualizado Sábado, 14 diciembre 2024 - 20:39

Hansi Flick ya tiene una nueva pieza más para sus esquemas en el Barça. Y de auténtico lujo, si tenemos en cuenta el rendimiento que ha tenido a lo largo de las últimas temporadas. Más de cinco meses después de la grave lesión que sufrió en el transcurso del duelo de cuartos de final de la pasada Copa América ante Brasil, Ronald Araujo ya está a plena disposición del técnico. El propio entrenador no dudó a la hora de asegurar, en la rueda de prensa previa al encuentro de este domingo (21.00 horas, DAZN) con el Leganés, que el central tendrá minutos. Incluso descartó que sea titular de un equipo el que Pau Cubarsí e Íñigo Martínez han sido dos prácticamente inamovibles desde el arranque del presente curso.

«Tengo pensado que juegue sus primeros minutos de la temporada, pero aún no estoy seguro de sí saldrá o no como titular. Puede ser que forme parte del once, pero, si no, jugará después. Ya está listo y este es el siguiente paso», apuntó Flick acerca del defensa. Ante Brasil, en la Copa América, sufrió una lesión en el tendón isquiotibial de la pierna derecha que le obligó a pasar por el quirófano. Desde el pasado 7 de julio ha permanecido en el dique seco.

En total, algo más de cinco meses, que supondrán para el club azulgrana una entrada de dinero nada desdeñable, en virtud del Programa de Protección de Clubes de la FIFA. Se trata de una especie de seguro, basado en el salario del jugador, por el que el máximo organismo del fútbol mundial paga a los clubes en caso de lesiones prolongadas producidas en partidos internacionales con sus selecciones.

Más opciones de descanso

Por este acuerdo, las entidades pueden llegar a percibir un máximo de 7,5 millones de euros. El primer requisito es que el futbolista esté más de 28 días consecutivos de baja. Y, en el caso de Araujo, la cuenta empezó el 3 de agosto.

En total, la FIFA tendrá que abonar al Barcelona más de 2,6 millones de euros por la prolongada ausencia del central. Esta no es la primera vez que el club es indemnizado por una larga ausencia de uno de sus jugadores producida mientras estaban con sus selecciones. El grave percance de Gavi con España, ya supuso un ingreso par las arcas de la entidad de unos 6,3 millones de euros. La baja de Pedri, sufrida en la última edición de la Eurocopa, culminada con triunfo de España, propició que el Barça recibiera alrededor de 308.000 euros.

Con Araujo ya completamente recuperado, Flick tendrá más opciones para dosificar tanto a Cubarsí como a Íñigo Martínez. En sus esquemas, Jules Koundé parece contar sólo como lateral derecho. Eric García, por su parte, se ha visto lastrado por una serie de problemas físicos. Y Christensen sigue aún de baja por lesión. Por tanto, no ha sido raro que, en alguna ocasión, haya recurrido a La Masia, como ha sucedo con Sergi Domínguez, que tuvo minutos en la Liga y en la Champions, o con Andrés Cuenca, que dispuso de una breve participación en el duelo europeo frente al Young Boys en Montjuïc.

«debo trabajar un poco mi comportamiento»

El regreso de Araujo es una gran noticia para los azulgrana. Su perfil, sólido a la hora de cerrar filas en la zaga, por mucho que eso le haya costado algún que otro disgusto, como su expulsión en la vuelta de los cuartos de la Champions ante el PSG, le vendrá muy bien a un equipo al que le espera un duro desafío antes del fin de año: la visita del Atlético a Monjtjuïc.

Este domingo, ante el Leganés, Flick no se sentará en el banquillo por su expulsión sufrida ante el Betis. «Acepto la tarjeta roja, debo trabajar un poco mi comportamiento, mejorar la gestión de mis emociones, pero sólo digo que los árbitros decidan igual en todos los partidos, en los otros banquillos, no sólo con el Barça», señalo el técnico, en lo que parecía una referencia velada a Carlo Ancelotti y al Real Madrid.

Borja Jiménez, entrenador del Leganés, dijo ayer que se ve con posibilidades de puntuar: «Que jueguen con la defensa adelantada no es un problema. Sabemos que defienden lejos de la portería, que juegan hacía adelante, que asumen riesgos. Tenemos opciones».

El Barça saltó el Muro Amarillo

El Barça saltó el Muro Amarillo

Actualizado Miércoles, 11 diciembre 2024 - 23:37

En un partido eléctrico, el Barça logró un triunfo muy peculiar, que le va a llevar al podio de los octavos. El Borussia fue un incómodo enemigo, aunque nunca aprovechó sus ocasiones y se sostuvo por dos goles en fallos del rival.

Partido tan frenético nos proporcionó la inquietante duda del resultado, mientras se vivía una pasión incontrolable entre un Dortmund que era como un avispa a punto de picarte y un Barcelona que se ha convertido en un ma

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Ferran Torres resuelve una noche trepidante en Dortmund

Actualizado Miércoles, 11 diciembre 2024 - 23:12

Hay momentos en que entender a Hansi Flick no es fácil. Encontrar explicación a por qué quita del campo de una tacada el talento de Dani Olmo, el colmillo de Raphinha y el oportunismo de Lewandowski no es fácil. Pero en Dortmund, cuando lo ganado parecía que se le escapaba como agua entre los dedos en una segunda parte desatada, al alemán le funcionó. En la locura, cuando el Borussia se aprovechaba de los pocos errores que cometieron los azulgrana, emergió Ferran Torres para amarrar tres puntos que casi certifican que el Barça estará en octavos. [Narración y estadísticas (2-3)]

No fue una cuestión tanto de suerte como de merecimiento. Mostró este Barça de doble cara la dominadora en el Signal Iduna Park, aunque a los alemanes les costara un minuto forzar el primer córner. Aún no habían engrasado los azulgrana el fuera de juego en el que atraparía una y otra vez a los alemanes. En escenarios gigantes como el dominado por el Muro Amarillo, apareció una vez más el equipo sólido que, por primera vez en la era Flick, también mostró una versión de control y paciencia para ir desajustando al rival poco a poco, sin tanto machetazo.

En esa trampa cayó el Dortmund, incapaz de arrebatarle la pelota, impreciso y salvando el pellejo por la imprecisión del Barça en el área. Dejaron conectar demasiado a Dani Olmo, Lamine Yamal y Raphinha y eso les hizo sufrir mucho durante los primeros 20 minutos.

Presión alta y efectiva

Probó Balde con un centro lateral al que no llegó Raphinha. Le dio réplica Lamine con otro que no cazó por milímetros el capitán brasileño y volvió a probar a Kobel con un disparo lejano. La presión del Barça era altísima y efectiva porque su rival apenas podía correr a su espalda y, cuando lo lograba, caía en clamorosos fueras de juego. Aún así tuvo latigazos para calentar a Iñaki Peña que, aunque la jugada estuviera invalidada, se lucía.

Se estaban gustando los azulgrana y parecía sólo cuestión de tiempo que llegara el gol. Lo falló Raphinha en una ocasión hilvanada entre Olmo y Lamine que envió rozando el palo. El Barça había dejado a un lado su verticalidad para amasar el partido ante un contrario muy ordenado en su área. Pese a la maraña de piernas amarillas, Lamine fue capaz de encontrar el espacio suficiente para armar un zurdazo que obligó a la mejor parada de Kobel. Ese susto hizo desperezarse al Borussia, que se estiraba con Duranville creando problemas a Balde y Gittens a Koundé, dos estiletes en las bandas que debían alimentar a Guirassy. Al guineano le amargó Peña al tapar un cabezazo picado bocajarro pegado al palo.

Todo el control en el que se había recostado el Barça saltó por los aires en la segunda mitad. Sahin echó mano de Yan Couto para intimidar y Guirassy consiguió batir la meta azulgrana, otra vez en fuera de juego. Aún no era aún su momento, era el de un jugador brasileño que lleva el brazalete de capitán tatuado. Raphinha siempre aparece al rescate para dar el picotazo letal. Fue una jugada casi del manual Flick: Pedri roba y protege, encuentra a Olmo que, con un control orientado, lanza al capitán a la carrera entre Can y Schlotterbeck para encarar y batir a Kobel.

Casadó y Ryerson pugnan por un balón.

Casadó y Ryerson pugnan por un balón.AP

La alegría azulgrana de ver en el marcador reflejado su dominio duró un suspiro. Lo que tardó en lanzar una contra el Dortmund y que Cubarsí, en un gesto infantil, derribara de un empujó a Guirassy en el área. No dudó el francés Letexier en pitar penalti que el propio guineano convirtió en el empate.

Fue entonces cuando Flick agitó el banquillo con Fermín y Ferran. También con De Jong, pero el holandés está opaco. Koundé se escapó hasta la línea de fondo y puso un centro en el punto de penalti que golpeó el andaluz ante Kobel. El suizo no embolsó la pelota y apareció Ferran para rebañarla. De nuevo el Barça tenía ventaja en el minuto 75. Y de nuevo no sabría protegerla. Desde el mismo saque de centro nació el empate cuando Gross esquivó la trampa del fuera de juego y le regaló el segundo gol a Guirassy.

No se cansó de remar este Barça y volvieron a asociarse los mejores para evitar que se escapara la proeza de ser el único equipo en asaltar el Signal Iduna Park en tres años, desde noviembre de 2021. Pedri, catalizador, buscó a chispa de Lamine y el joven astro, en otro partido de personalidad, dejó al valenciano franco para batir a Kobel. Bendita locura.