Morales, Karanka, Mista… Los primeros españoles en la MLS: “Me ficharon por un ‘highlight’ con el Madrid”

Actualizado Domingo, 15 junio 2025 - 00:28

Hoy se cumplen 50 años del debut de Pelé con el New York Cosmos, momento inspirador para el soccer en Estados Unidos. El partido se televisó a nivel nacional y dio inicio a una época dorada para la antigua NASL (North America Soccer League), con nombres como Beckenbauer, Cruyff, Best o Eusebio firmando por algunos de sus equipos. Otro día 15, pero de julio de 2000, debutaba con los New England RevolutionJosé Luis Morales, canterano del Real Madrid y primer español en jugar en la Major League Soccer (MLS), creada en 1993 al amparo de la FIFA tras la concesión del Mundial de 1994.

Morales venía de pasar por varios equipos en España tras salir del Madrid y buscaba relanzar su carrera. «Debuté contra el New York MetroStar de Lothar Matthaus y en esa liga también estaban Stoichkov o el pibe Valderrama. Sé que soy el primer español y el primero que metió un gol. Ya no andaba como antes, mi cabeza me decía una cosa pero mi rodilla otra, pero de vez en cuando levantamos el estadio», recuerda en una conversación con EL MUNDO.

Ese estadio era Foxboro, hogar de los New England Patriots de la NFL y de Tom Brady, que curiosamente llegó a la histórica franquicia ese mismo verano de 2000. «Nuestro preparador físico era un quarterback de los Patriots. Todo era correr y pesas, todo físico, no había visto nada igual en mi vida. Eran unas máquinas de correr y yo decía '¿Cuándo tocamos balón?'», bromea Morales. La diferencia de calidad era evidente: «Físicamente estaban preparados y tenían algo de calidad individual, pero les faltaba calidad colectiva. Cuando competían eran más individualistas. Tenía que venir alguien de fuera a enseñarles».

A pesar de las estrellas de la liga y de que el equipo de vez en cuando metía a 20.000 personas en Foxboro, seguía lejos del interés de los ciudadanos de Boston por otros deportes: «Allí estaban los Patriots, los Celtics de la NBA y los Red Sox de béisbol. El fútbol masculino no tenía tirón, se llenaban más los estadios con la selección femenina. Y seguirá así hasta que el equipo masculino tenga un gran resultado en un Mundial».

De Salamanca a Nueva Inglaterra

Pero, ¿cómo pasa Morales de jugar en el Salamanca a hacerlo en Nueva Inglaterra?. «Me firmaron porque les envié un vídeo de un par de jugadas que tenía en el Madrid. Puse los highlights y ya sirvió, no tuve que hacer ni prueba. Me firmaron por un highlight (risas). Los que sabían de fútbol preguntaban mucho por el Madrid, pero en general nada, el fútbol no tenía la potencia que tiene ahora», explica. Ni siquiera Stoichkov, Balón de Oro en el año del Mundial de Estados Unidos, tenía que firmar autógrafos por la calle. «Una noche salí con Hristo por Chicago, que coincidimos cuando fui a jugar allí, y nadie le conocía. Comenzaba el boom del fútbol para ellos, pero aún no conocían a nadie».

El primer y único gol de Morales llegó el 30 de agosto de 2000 contra el DC United, pero después de disputar diez partidos con New England decidió volver a España: «Tenía un año más de contrato, pero me volví a España porque pensaba que todavía podría rendir. Me arrepiento de irme del Madrid en su momento y de no haberme quedado más años en Estados Unidos. Hubiera abierto algo más de mundo». Los viajes, eso sí, eran «una paliza».

25 años después, Estados Unidos sigue siendo uno de los destinos preferidos de los veteranos que buscan una experiencia diferente tras terminar su carrera en Europa, aunque el dinero de Qatar, Arabia o Emiratos ahora le hace competencia. «Yo entiendo a los que se van a Qatar o Arabia, es lógico, pero el nivel de vida y la cultura no tiene nada que ver con vivir en Estados Unidos. Yo lo recomiendo mucho y me arrepiento».

"Casi se entrenaba en parques"

Morales abrió la puerta y más tarde llegaron otros como Aitor Karanka, que en 2006 firmó por los Colorado Rapids, o Mista, que llegó a Toronto en 2010. «Casi ninguna franquicia tenía estadio propio ni instalaciones y se entrenaba casi en un parque. Ahora tienen estadios espectaculares», rememora Karanka en conversación con este periódico. «Antes íbamos a jugar los últimos años de nuestras carreras y económicamente tampoco estaba como está ahora. Dos años después de que estuviera yo llegó Beckham y cambió todo. Empezaron a hacer muchas academias de niños, que yo hice un campus allí, y el jugador americano lo tiene desde pequeño como un deporte a seguir. Los niños quieren jugar al soccer», explica.

Mista, que llegó en 2010, coincidió en la liga con Henry: «Estuve un año y el nivel era mucho más alto de lo que yo pensaba. Ya estaban Henry o Rafa Márquez. Era un fútbol que estaba despegando, tenían interés en aprender y estaban invirtiendo mucho para ser lo que son ahora. Será una liga referente en el mundo en los próximos años».

El Valencia Basket sentencia en Tenerife y jugará la tercera final de su historia

El Valencia Basket sentencia en Tenerife y jugará la tercera final de su historia

Actualizado Domingo, 15 junio 2025 - 00:14

El Valencia Basket se convirtió en el primer finalista de la Liga Endesa tras sumar su tercer triunfo ante La Laguna Tenerife en una gran actuación de Brancou Badio, autor de 28 puntos, bien secundado por Jaime Pradilla (19 y cinco rebotes) y Josep Puerto (13+8). [Narración y estadísticas (87-94)]

El equipo valenciano, que jugará la tercera final de su historia, supo esperar su momento y dar la vuelta al marcador en los instantes más importantes. Un parcial de 15-33 en el tercer cuarto acabó con las posibilidades del equipo de Txus Vidorreta, que había controlado la situación hasta el descanso.

Hubo muchas rotaciones por parte de ambas escuadras, pero la segunda unidad del Tenerife fue más efectiva. En los dos primeros cuartos el partido tenía un tono diferente al de los dos disputados en Valencia. Vidorreta, a base de cambios, no permitía ningún tipo de relajación defensiva, aunque en ataque el nivel de aciertos no era el mismo.

Malas decisiones

Lo cierto es que el Tenerife supo mantener su ventaja ante un rival que con un 1 de 9 en triples, no encontraba la fórmula de poder darle la vuelta al partido.

Tras el descanso, todo cambió todo en unas malas decisiones en ataque que permitieron al Valencia Basket ganar confianza. Los triples de Pradilla y Badio apretaron el choque (52-51) y el conjunto taronja empezó a acorralar a los locales, que ya no encontraban con facilidad el camino hacia canasta.

Poco a poco las diferencias fueron a más hasta y aunque en el último cuarto los tinerfeños tuvieron rachas buenas y opciones de volver a dominar el choque, el Valencia estaba mejor posicionado en la cancha y se lanzó a por la victoria. Un triple de Badio (78-87) y otro de Josep Puerto (84-92) pusieron punto final a la temporada del Tenerife y dispararon al Valencia a la tercera final de su historia.

Russell frustra a Verstappen en una 'qualy' loca en Montreal, donde Alonso saldrá sexto

Russell frustra a Verstappen en una ‘qualy’ loca en Montreal, donde Alonso saldrá sexto

George Russell se saltó el guion en Montreal y dejó con un palmo de narices a Max Verstappen, con quien hace sólo dos semanas protagonizó una agria polémica en Barcelona. El piloto de Mercedes se apuntó la pole (1:10.899) con 16 centésimas sobre el tetracampeón y 22 ante Oscar Piastri. Un logro tan inesperado como la sexta plaza de Fernando Alonso (1:11.586), por delante de Lando Norris y Charles Leclerc.

En el circuito Gilles Villeneuve, sobre un asfalto pulimentado y unos bordillos juguetones, Russell escribió otro capítulo en su rivalidad con Verstappen. Saltan chispas entre ellos, dentro y fuera de la pista, así que el pulso de hoy, antes de abordar la primera frenada, será fabuloso. Nadie contaba con ellos en Montreal, donde se preveía lo mismo de casi siempre con McLaren.

Desde el viernes, Piastri no se sentía cómodo con la nueva geometría de su suspensión delantera. El líder del Mundial ni siquiera se acercaba a la velocidad de Norris, encantado con su papel de buque insignia en la escudería de Woking. Sin embargo, el británico tropezó por enésima vez con la misma piedra. Cuando quiso cerrar su intento inicial en la Q3 perdió la referencia de la frenada y se marcó un recto en la última chicane. Así dejaba vía libre a Piastri y Verstappen, que se apuntaba la pole provisional por 25 milésimas (1:11.248). Mad Max pulió aún algo su crono, sin percatarse de esa Flecha de Plata que asomaba por detrás. Russell no encabezaba la parrilla desde el GP de Qatar 2024.

Ferrari, tampoco

Si Norris claudicó con esa séptima plaza, qué decir de Leclerc, octavo tras un latigazo a su llegada a la curva 7. El monegasco echó la culpa al aire sucio dejado por Isack Hadjar, aunque esas excusas ya no cuelan en Ferrari. Si los discursos en la Scuderia siguen instalados en el conformismo deberían festejar la quinta posición de Lewis Hamilton.

A la estela del heptacampeón surgió Alonso, que venía de reservar los blandos en la Q1, aunque sin saber con exactitud si eso suponía una ventaja relevante. Su batalla en la Q2 debía librarse ante Yuki Tsunoda, sancionado con 10 puestos en la parrilla por no respetar las banderas roja en los Libres 3, Franco Colapinto, que venía de mostrar su rango ante Pierre Gasly y Nico Hulkenberg, un veterano espoleado por su gran papel en Barcelona. Entre esa clase media, el bicampeón cumplió con el rigor de siempre.

En la citada Q1 nadie debía despistarse con el tráfico, especialmente molesto en Montreal, una de las pistas más cortas del Mundial (4,36 km). Para evitar esas molestias, Verstappen se demoró nueve minutos para saltar al asfalto. Una tregua aprovechada por Alonso, que se dio el pequeño placer de liderar la tabla, justo por delante del tetracampeón.

Nada más marcar ese crono con un juego de medios (1:12.239), Alex Albon se llevó un susto terrible, cuando la cubierta de su motor explotó en mil pedazos en una zona rapidísima, a la entrada de la curva 13. Para retirar los escombros y limpiar la pista se ordenó una breve bandera roja. Con 5:30 en el reloj, Carlos Sainz sólo disponía de una bala para librarse de la quema. Una situación crítica que acabó de la peor manera para el madrileño, bloqueado por Hadjar en la curva 6. Por segunda carrera consecutiva, Carlos se desplomaba en la primera criba y partirá decimosexto. Aún peor resultó el balance de Lance Stroll, eliminado por sexta vez en la Q1.

España evita un sofoco en un arreón final ante Rumanía

España evita un sofoco en un arreón final ante Rumanía

Tendemos a subestimar ciertas selecciones que nunca suelen ocupar altos peldaños ni en categoría absoluta ni sub21. Son equipos que dependen de la coincidencia de una buena hornada para sacar un poco la cabeza. Aunque luego un error y la calidad española consiguieran hundírsela a punto de llegar a meta. Los de Denia remontaron en el último suspiro tras la expulsión de Blanuta.

Es esta Rumanía de Munteanu un conjunto más peligroso de lo que dice su historia, aunque la tricolor alcanzó las semifinales en 2019. El punta del Cluj, que ha anotado 19 goles en 25 partidos, tiene clase para anotar el tanto que le hizo a Iturbe en el minuto 4 y para dar otros sustos a una selección española que comenzó menos enchufada que en su debut ante Eslovaquia.

El delantero realizó un control y un disparo desde el vértice izquierdo del área española que cuesta mucho dilucidar cuál de los toques tuvo más mérito. La selección de los Cárpatos necesitaba la victoria tras caer derrotada por la mínima ante Italia y a por ello fueron desde el inicio con varios acercamientos con mucho peligro sobre la meta española. De hecho, Ilie perdonó el segundo poco después del gran tanto de su compañero.

Correspondió a la clemencia España poco después tras un robo de Pubill con Rumanía descolocada. Cedió a Joseph que dejó a Diego López sin portero en el punto de penalti, pero el asturiano golpeó contra un defensa que estaba sobre la línea. Y continuó con ella, con la clemencia, poco después el propio cántabro tras marrar un penaltito por agarrón a Tárrega. Esos sustos, como el larguero que pegó Pubill tras un córner, encerraron a la selección amarilla en su campo a la espera de una contra mientras que los 10 españoles jugaban en campo contrario.

Sólo quedaban tres supervivientes de la Rumanía que perdió 0-3 en el último Europeo, Munteanu, Popescu y Borza, los tres titulares en el conjunto de Daniel Pancu, dinamita y contención. En aquel duelo los tres tantos españoles llegarían en la segunda parte. A ello se puso el equipo de Santi Denia puesto que en la primera, la maraña tricolor por delante de Sava costó un mundo deshacerla.

Salió con todo el manchego en la segunda mitad cambiando a Pubill por Moro y a Torre por Roberto Fernández. Ambos a punto estuvieron de empatar el encuentro en la primera jugada que tuvieron, pero lo cierto es que el campo se fue inclinando con los minutos y el nombre de Sava sonó mucho en la boca de los españoles. Especialmente meritoria fue su mano a un remate a bocajarro de Tárrega.

Quiso responder Iturbe a su homólogo ante una doble ocasión rumana clarísima a media hora para el final, que hubiera obligado a España a jugarse la clasificación a cara de perro ante Italia. Un oasis en el desierto, aunque el partido se fue enmarañando será por los nervios será por falta de juego entre líneas hasta tal punto que la más clara la tuvo Grameni para duplicar la distancia rumana en el 80.

Entonces llegó la acción temeraria de Blanuta, que le costó la roja por una acción con Mosquera, y el obus de Jauregizar para empatar el encuentro. Todo en un minuto. No hubo ni tiempo para disfrutar la superioridad numérica. No lo quiso el bilbaíno con un disparo monumental y muy necesario para evitar un sofoco en la última jornada.

Apenas dos minutos después, fue Roberto Fernández el que ejerció de nueve para dar la vuelta al marcador y evitar un partido a cara de perro ante Italia. Notaron los rumanos el shock de la expulsión y salieron los españoles de una situación complicada. Notaron los rumanos el shock de la expulsión y salieron los españoles de una situación complicada. La clasificación está hecha y el sueño del sexto europeo sigue vivo.

Lance Stroll, entre los rumores y la "intimidad médica": una lesión crónica que complica el futuro de Aston Martin

Lance Stroll, entre los rumores y la “intimidad médica”: una lesión crónica que complica el futuro de Aston Martin

La segunda sesión libre del viernes en Montreal resultó demasiado movida para Aston Martin. Fernando Alonso se dio un susto con una pequeña excursión por la hierba y Lance Stroll sufrió un impacto contra las protecciones de la curva 7. El canadiense quiso llevar el AMR25 de regreso a boxes, pero sus ingenieros le obligaron a detenerse porque su rueda delantera izquierda amenazaba ruina. Así que Stroll no tuvo más remedio que salir del coche. De inmediato, al desencanto de la afición se sumaron los rumores que han venido rodeando al ídolo local, mermado por una misteriosa lesión en la muñeca derecha desde el pasado GP de España.

«No quiero entrar en detalles sobre lo que he tenido que hacer, porque se trata de mi intimidad médica», dijo Stroll el jueves durante la conferencia de prensa de la FIA. Con su habitual tono, desafiante ante los periodistas, echaba tierra a numerosos comentarios que venían sobrevolando por el paddock. El más insistente había sido propagado por la BBC, que describió escenas de ira del piloto en su garaje, golpeando las paredes con sus manos. Stroll, ajeno a casi todo, quiso insistir en que se veía preparado para afrontar este fin de semana: «Me siento bien y confío en que no será un problema en el futuro». Sin embargo, tras dos operaciones en la misma articulación a lo largo de los dos últimos años, las incógnitas siguen sin despejarse en la escudería de Silverstone.

El origen de la dolencia de Stroll se remonta a febrero de 2023, cuando sufrió un accidente mientras practicaba ciclismo en España. Entonces, los primeros exámenes médicos detectaron una fractura desplazada en la muñeca derecha, varias fracturas en la mano y la muñeca izquierda y otros traumatismos en los dedos de los pies. En Barcelona, dos días después, fue operado por el doctor Xavier Mir, que le colocó varios tornillos metálicos en la mano derecha. El prestigioso traumatólogo, con más de tres décadas de experiencia en el Mundial de MotoGP, optó por un tratamiento conservador para la mano izquierda, confiando en un largo periodo de rehabilitación.

Un solo coche en Barcelona

Como muestra la evidencia científica, especialmente en pilotos de MotoGP, aquella operación a Stroll ya debió considerarse bastante delicada. En primer lugar porque ese tipo de cirugía provoca, en algunos casos, daños en el cartílago. A largo plazo, incluso, deviene en artritis postraumática. De modo que los pacientes han de convivir con el dolor y la rigidez en la articulación, por lo que su rendimiento en la pista queda lejos del 100%.

Stroll no se perdió ni una sola carrera en 2023 y 2024, aunque a comienzos del presente Mundial empezó a sentir otra vez molestias. La situación se agravó durante el triplete europeo (Imola, Mónaco, Barcelona) hasta que en Montmeló él mismo optó por parar. Los síntomas habían empeorado tanto durante la última sesión libre que el domingo ni siquiera tomó la salida. Aston Martin sólo pudo alinear un coche, porque Felipe Drugovich, su piloto reserva, no había tomado el volante en ninguna de las sesiones previas, lo que le impedía participar en la carrera.

El mismo equipo médico, con Mir al frente, volvió a intervenir a Stroll en una cirugía que Aston Martin describió como preventiva y menor. No obstante, los precedentes sugieren ahora un problema crónico. A este factor se suman las citadas complicaciones tras la última operación. Parece complicado que Stroll pueda restablecerse totalmente sin dejar de competir.

Pogacar apabulla otra vez con su segunda victoria consecutiva en el Critérium Dauphiné

Pogacar apabulla otra vez con su segunda victoria consecutiva en el Critérium Dauphiné

Se repitió la historia. Bueno, no. Fue la misma historia, fue su continuación, no su repetición. Tadej Pogacar aceleró y se acabó, repetida o no, continuada o no, la misma u otra, la historia. Jonas Vingegaard, admirable en su esfuerzo, agachó la cabeza y punto final.

Trepaban ambos, en compañía de una treintena de ilustres, por la última dificultad de la etapa, la Montée de Valmeinier 1.800. Perseguían a un Romain Bardet que está dando las últimas pedaladas de su vida deportiva. Se retirará en este Dauphiné, en el que, orgulloso, profesional, ha asomado varias veces la testa antes de humillarla por la fuerza de los hechos. Ya en el Tour ejercerá de comentarista. Formó con Thibaut Pinot y Warren Barguil el trío de aspirantes a devolver a Francia el trono de la Grande Boucle. Estuvieron bastante cerca, pero no remataron, y todavía, ¿hásta cuándo?, y desde 1985, Bernard Hinault se mantiene como último francés en reinar en la Corte gala (y mundial) del ciclismo.

Merecía Bardet esta digresión a modo de homenaje. El grupo de notables lo atrapó a falta de 13 kms. para la llegada, situada en la mismísima cima del puerto, un obstáculo hors catégorie de 16,5 kms. de longitud, con una pendiente media de 6,7% y una máxima de ocho, en el ese macizo en el que, según tires por una carretera u otra, acabas en el Galibier o en el Télégraphe. No era tan duro como la Madeleine o la Croix de Fer, que se habían subido previamente, pero seguía siendo muy exigente y, además, las piernas de todos venían acusando esos esfuerzos anteriores. Puro desgaste.

La etapa había comenzado como se descorcha una botella de espumoso. Un estampido, un surtidor de espuma y el líquido que se derrama hacia las copas. La gente salió de estampida. El primero... ¡Campenaerts! Una excentricidad. Una broma. Atacaban, respondían, se juntaban, se separaban Kuss, Johannessen, Lutsenko, Buchmann, Armirail, Paret-Peintre, Jorgenson, Traeen, Higuita, Healy, Buitrago, Romeo...

Estábamos en la Madeleine, 246 kms. al 6,2% de media y con una pendiente máxima del 10%. Bajaron todos la Madeleine y luego ascendieron la Croix de Fer (22,4 kms. al 6,9% de media y al 10% de máxima. Bajaron la Croix de Fer y muy poco después, luego de un ancho valle con subiditas precursoras del envite final, afrontaron Valmeinier. Ya habíamos visto al honrado y esforzado Bardet, muy cerca, además, de su terruño, despidiéndose del ciclismo antes del definitivo adiós del domingo.

El grupo fue adelgazando y quedándose como un silbido. Cuando atacó Sepp Kuss, compañero de Vingegaard en el Visma, pensamos que podría establecer una cabeza de puente para el danés. Detrás tiraba Sivakov, el único amigo que le quedaba a Pogacar. Pero el esloveno, que hizo de aguador para su compañero, no necesita a nadie. Es autosuficiente. Kuss duró un suspiro. Y entonces, a 11 kms. de la meta, saltó Tadej.

En realidad, él no salta. Ni demarra. Sólo acelera. Y basta. Vingegaard, de nuevo, no pudo seguirle. Y menos Evenepoel. El pelotón ya no merecía en absoluto tal nombre. Estaba completamente diseminado. Pogacar mantenía las distancias y Vingegaard, pese a todo el tipo. No perdía mucho, aunque sí lo suficiente. Al final, Tadej aflojó un poco, seguramente no por falta de fuerzas, y Jonas, exhausto, eso sí, terminó a 14 segundos. Lipowitz, a 1:21. Johannessen, a 2:26. Evenepoel, a 2:39. Enric Mas fue séptimo a 3:48. Y Carlos Rodríguez, noveno a 3:51, como Paul Seixas, undécimo. En la general manda Pogacar con 1:01 sobre Vingegaard. Lipowitz está a 2:21. Evenepoel, a 4:11. Noveno es Carlos Rodríguez a 7:41. Décimo, Enric Mas a 7:43. No se les ha visto mucho. Pero ahí están. Confiemos en que, en la última etapa, lucen algo más.

Décima victoria de la temporada para Pogacar. Y 98 de su carrera. Si redondea el Dauphiné con la última etapa y la general, alcanzará las 100. Una cifra redonda en sí misma y más aún por la categoría de los triunfos. Tadej sigue incrementando su leyenda en vida. Una vida deportiva aún corta que afronta el reto de ser en el futuro aún más radiante que en el pasado y el presente.

Un explosivo final de Shai propicia la remontada de los Thunder, que empatan la final de la NBA ante Indiana

Un explosivo final de Shai propicia la remontada de los Thunder, que empatan la final de la NBA ante Indiana

Actualizado Sábado, 14 junio 2025 - 09:11

Rescatados por su estrella Shai Gilgeous-Alexander, los Oklahoma City Thunder derrotaron este viernes 111-104 a los Indiana Pacers y colocaron un empate 2-2 en el global de las Finales de la NBA.

Gilgeous-Alexander, el Jugador Más Valioso (MVP) de la temporada, anotó 15 de sus 35 puntos en los últimos cinco minutos de partido para remontar ante unos Pacers que llegaron a dominar por 10 puntos en el tercer cuarto.

Para frustración de sus aficionados, el equipo de Tyrese Haliburton (18 puntos y 7 asistencias) y Pascal Siakam (20 puntos y 8 rebotes) no culminó un triunfo que los hubiera colocado a sólo un paso del primer título de su historia.

Si se hubieran visto 3-1 abajo, los Thunder hubieran necesitado de una remontada que sólo un equipo logró en la historia de las Finales, los Cleveland Cavaliers de LeBron James en 2016.

Gilgeous-Alexander evitó este fatídico escenario a Oklahoma City, el mejor equipo de la fase regular, en un extraño partido en el que sólo se sobrepuso a la feroz defensa de Indiana en la recta final y que terminó sin repartir una sola asistencia.

"Cuando nos levantamos esta mañana sabíamos que un 3-1 en contra es muy diferente a volver a casa con 2-2", subrayó el base. "Jugamos con desesperación al final del partido y por eso ganamos. Tenemos que mantener esa misma desesperación en los siguientes partidos".

El quinto asalto de estas Finales, al mejor de siete partidos, se disputará el lunes en la cancha de los Thunder, que habían arrancado la serie como favoritos indiscutibles al anillo.

El putter complica la pelea a Jon Rahm en el infierno de Oakmont

El putter complica la pelea a Jon Rahm en el infierno de Oakmont

Actualizado Sábado, 14 junio 2025 - 02:27

Esta noche, Jon Rahm soñará con la poa de los cristalinos greenes de Oakmont. El de Barrika ha dado un paso atrás en la segunda jornada del US Open tras un aciago día donde el español sufría cada vez que empuñaba el putter.

Rahm terminó con una ronda de 75 golpes (+5), concluyendo con un acumulado de cuatro sobre el par tras los primeros 36 hoyos y un puesto entre los 25 primeros del tercer major del año. Hasta seis opciones claras de birdie se escaparon durante la jornada, a las que hay que unir el bogey en el 9 con un putt fallado de tres metros o el doble bogey del 11 con tres putts, el último de ellos corto. Lo peor es que muchos de los putts estuvieron bien tirados, pero la bola o se paseaba por el hoyo o no terminaba de caer. Resultó frustrante ver los segundos nueve hoyos plagados de oportunidades bien encaminadas, donde la bola se escapaba en el último momento del agujero ante la desesperación del dos veces ganador de major. "Quien haya visto la vuelta, la diferencia está en meter putts, no he metido ni uno y así es imposible", afirmaba el español. "Es un campo que te frustra, es duro... Si meto tres putts igual hubiera cambiado el panorama", concluía.

Ha sido una dura prueba para la paciencia de Rahm, que, en un análisis frío, mirando la parte alta de la clasificación, todavía se ve con opciones de victoria. Solo tres jugadores terminaron bajo el par y la desventaja con el líder se cifra en 7 golpes.

Incluso con la llegada tímida de la lluvia a última hora de la tarde, el US Open y Oakmont se asociaron en una perfecta carnicería, donde el corte se situó en +7. Siete jugadores acumularon tras dos rondas un resultado de +20 o peor, más de la mitad de los que lo hicieron bajo el par.

Rory McIlroy (+6) entró sobre la bocina gracias a un birdie en el último hoyo. Peor suerte tuvieron Bryson DeChambeau (+10), Joaquín Niemann (+10) o Justin Thomas (+12).

Con un +12 final tras dos rondas de 76 golpes, Josele Ballester tampoco logró estrenar su palmarés profesional con un corte superado. De nuevo, el de Castellón fue penalizado por unos deficientes números desde el tee de salida. Por segundo día consecutivo, Josele solo pudo coger 4 de las 14 calles. "He dado todo lo que tenía, sabía que no venía con buenas sensaciones... Son enseñanzas que me llevo para el futuro", concluía el español, que se mostraba crítico con su juego: "Tengo que reflexionar, porque hay varios aspectos de mi juego que me separan de competir al máximo nivel con esta gente. Adaptarse al golf profesional es más difícil de lo que pensaba y me va a llevar mi tiempo".

En medio de toda la masacre, Sam Burns pareció haber jugado un torneo diferente a la batalla librada hoy en Oakmont. Sus 65 golpes en estas condiciones seguramente serán la mejor ronda que vayamos a ver en esta temporada. Estadísticamente, Burns mejoró en golpes ganados a la media del torneo en casi 10 golpes, una auténtica brutalidad que refleja un resultado histórico que debería estar a la altura del récord de 63 golpes de Johnnie Miller en 1973. Burns es líder en solitario con -3, flanqueado en el podio de supervivientes por JJ Spaun (-2) y el noruego Viktor Hovland (-1). Quien tampoco ha dicho su última palabra esta semana es el número uno del mundo, Scottie Scheffler, que con 71 golpes se sitúa con +4, compartiendo el puesto 23 con Jon Rahm. "Si no llueve, se ganará en torno al par", vaticinaba 'Rahmbo', enfocado en un resultado de -4 de cara al fin de semana. "Por supuesto que se puede", afirmaba para la esperanza.

El Mundial de los 1.000 millones: Madrid y City gastando 126 millones para el bote de 157, avances tecnológicos…

Actualizado Sábado, 14 junio 2025 - 00:48

Inter Miami y Al Ahly inician esta próxima madrugada (02.00 hora española) el Mundial de Clubes, el torneo de los 1.000 millones en premios, dinero salvador para los bolsillos y las sensaciones de la temporada de algunos grandes de Europa como el Real Madrid, el Atlético o el Manchester City, obligados a realizar fichajes para aspirar al trofeo final, 150 millones por levantar el título. Pero es también el torneo de los ligeros avances tecnológicos en la realización de los partidos, de la penúltima trinchera de la guerra del fútbol entre la FIFA, la UEFA y las distintas organizaciones del balón y que aterriza en un país convulso por las leyes de inmigración, con 14 millones de ciudadanos no documentados, la mayoría repartidos entre Miami, Los Ángeles y Nueva York, sedes principales del torneo, amantes muchos del fútbol y con entradas para los partidos, atemorizados por la policía fronteriza de Trump.

El dinero, no nos vamos a engañar, es el motor de este Mundial de clubes. El motor de Gianni Infantino, presidente de la FIFA en la búsqueda de rascar protagonismo a la Champions League de su antagónico Aleksander Ceferin, máximo mandatario de la UEFA. Y para ello ha encontrado el último hueco disponible en el exprimido calendario del fútbol y así arañar 1.000 millones en los derechos de televisión del torneo. Infantino ha cambiado la poco interesante Copa Confederaciones para cuadrar dos años consecutivos de show veraniego con cartel FIFA: Mundial de clubes ahora y de selecciones el próximo. En 2029 y 2030 repetirá doblete de millones y emociones. El de 2030, seguro, en España. El otro, se verá.

Los huecos restantes son del COI, con los Juegos de 2028, y de la UEFA y la Conmebol con la Eurocopa y la Copa América de 2028. Si antes los futbolistas de los grandes clubes tenían dos veranos libres cada cuatro años, ahora sólo tienen uno. Y de momento. Alguien se inventará algo para el vacío junio de 2027.

Dos millones por victoria

Al otro lado de la trinchera, los clubes, que clamaron durante meses por la existencia de un torneo nuevo en el verano entre la Eurocopa y el Mundial de selecciones y ahora observan este evento como un bálsamo económico y de salud mental. Ahí está el Real Madrid, con entrenador nuevo, tres inversiones por las que ha pagado mucho más de 100 millones de euros y el deseo de empezar ya el torneo para aliviar las sensaciones de una temporada en la que no ha logrado ni la Liga, ni la Champions ni la Copa del Rey. El Mundial le llega, además, sin la presencia del Barcelona, equipo que le ha martirizado durante este curso en Arabia, La Cartuja, el Bernabéu y Montjuic.

Los 58 millones de Dean Huijsen y los 5 de Trent Alexander-Arnold suman 63, a los que añadir los 63 de Franco Mastantuono, que no llegará hasta agosto pero es una inversión de este verano pensando también en los ingresos del Mundial. 126 millones que igualan la cifra que se ha dejado el City de Guardiola, que arrastra la misma losa que el Madrid tras un curso sin títulos. Cherki, Reijnders, Ait-Nouri y Bettinelli acumulan cantidades de más de tres cifras en gasto veraniego. Si se suma el invernal, con 75 millones por Marmoush, 60 por Nico, 40 por Khusanov y 37 por Reis son 338 millones.

La apuesta, desorbitada en el caso 'citizen' (80 se ha dejado el Chelsea, 46 el Inter, 30 el Dortmund y 28 el Porto) merece la pena viendo lo que la FIFA ha estipulado que pueden ganar los clubes que lleguen lejos en el Mundial. Los europeos recibirán entre 20 y 35 millones, dependiendo del ranking de los últimos años, sólo por presentarse, a lo que añadirán dos millones por victoria y uno por empate en la fase de grupos, siete por alcanzar los octavos, 13 por cuartos, 21 por las semifinales, 30 por caer en la final y 40 por levantar el título. Es decir, si el Madrid gana los tres partidos de su grupo y se lleva el trofeo, aspira a embolsarse 157 millones y un empujón anímico. Eso busca también el Atlético de Madrid, sin fichajes pero con la ilusión de darle la vuelta a una temporada muy irregular.

Cámaras corporales

El Mundial estrena también varios avances tecnológicos, unos importantes y otros más anecdóticos. La sala VAR dispondrá de una versión más automatizada de la detección semiautomática del fuera de juego gracias al sensor que habrá en el balón y que avisará del momento en el que el futbolista deja de golpearlo. Además, los árbitros tendrán unas cámaras corporales situadas en el pecho que saldrán en la retransmisión para «mejorar la experiencia de los espectadores» y el público del estadio podrá ver las revisiones del VAR en las pantallas, algo que en las competiciones FIFA todavía no estaba disponible hasta este torneo.

Por último, y más anecdótico, las sustituciones se comunicarán a través de una tablet y no a viva voz o con un papelito como hasta ahora. Todo por 1.000 millones en este nuevo, y súper, Mundial de clubes.

Miedo en Miami, con un millón de ilegales en Florida, por la presencia de la policía fronteriza de Trump en los partidos del Mundial: “Yo estaría preocupado”

Actualizado Sábado, 14 junio 2025 - 00:45

En Florida hay más de un millón de ciudadanos ilegales, no documentados. Una cifra que según el Instituto de Política Migratoria se eleva hasta los 14 millones si tenemos en cuenta todo Estados Unidos. Y serán más, seguro. Y muchos son latinos. Y les encanta el fútbol. Y este Mundial de clubes con Leo Messi y el Inter Miami, Boca Juniors, River Plate, Palmeiras o Monterrey es un paraísos del balón para ellos. Muchos, con trabajos estables pero sin papeles, planeaban acudir a los estadios, especialmente al Hard Rock de Miami donde este sábado el Inter Miami y el Al Ahly inician el torneo, pero la presencia de la policía fronteriza de Donald Trump en los alrededores del evento les ha ahuyentado.

"Todos los ciudadanos deberán llevar consigo la confirmación de su estatus legal en el país", anunció en un comunicado el ICE (Servicio de Control de Inmigración y Aduanas), desplegado por el Gobierno en las sedes del Mundial.

Los disturbios de la última final de la Copa América, disputada en el Hard Rock de Miami el año pasado, han elevado la atención de las autoridades. El partido entre Argentina y Colombia se tuvo que retrasar más de una hora porque se produjo una avalancha de aficionados en la entrada, se saltaron los puntos de seguridad y se enfrentaron a la policía, con 27 arrestos. Una imagen que Miami no quiere repetir justo cuando queda un año para el Mundial de selecciones, la cita más importante para el país a nivel deportivo junto a los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.

plan de seguridad

De hecho, la seguridad del Hard Rock Stadium ha emitido un comunicado en el que detalla su plan de seguridad: los aficionados que no tengan entradas "no podrán acercarse al estadio, "los que tengan tickets tendrán que pasar "multitud de puntos de seguridad" antes de entrar, "la policía patrullará la zona para asegurarse de que todo el mundo tiene entradas".

"Mi mujer es abogada y está recibiendo muchas consultas de ciudadanos no documentados sobre lo que deben hacer. Tienen trabajo y entrada pero la presencia del ICE les da miedo", asegura un taxista camino del Hard Rock.

"CBP está lista para controlar la seguridad en los partidos", escribió en redes sociales la policía fronteriza (CBP). Una publicación que después fue borrada por la reacción que tuvo entre los ciudadanos en relación a las duras políticas de Donald Trump en cuanto a inmigración. Muchos creen que la presencia de esos departamentos del gobierno en los partidos va más allá de la propia seguridad de los encuentros.

"podrían sentirse intimidados"

Thomas Kennedy, defensor de los derechos de los inmigrantes de la Coalición de Inmigrantes de Florida, aseguró que "las detenciones han aumentado claramente y, en este momento, el ambiente para la aplicación de las leyes de inmigración es muy hostil", dijo Kennedy, que añadió: "Los aficionados extranjeros con visados válidos podrían sentirse intimidados. Yo estaría preocupado y perturbado si fuera a los partidos", aseguró, en declaraciones que recoge el Miami Herald.

Por su parte, Gianni Infantino, presidente de la FIFA, se centró en la seguridad del torneo: "Lo más importante para nosotros es garantizar la seguridad de los aficionados que acuden a los partidos. Nadie debe pensar que puede venir a un partido y crear problemas. Queremos que todo el mundo se lo pase bien", declaró en un encuentro con medios en Miami.

"Que vengan los aficionados. Queremos que celebren, queremos que vean los partidos, pero cuando se acabe el torneo, se tendrán que volver a su casa", aseguró el vicepresidente JD Vance, en una conferencia al lado de Trump e Infantino hace unas semanas.