Ganador del Mundial de 2014 con Alemania, el centrocampista del Real Madrid Toni Kroos anunció este jueves su regreso con su selección a pocos meses del inicio de la Eurocopa 2024 en su país.
“Hola chicos, por decirlo rápido y claro, jugaré de nuevo con la selección nacional alemana a partir de marzo. ¿Por qué? Porque el seleccionador me lo ha pedido y porque estoy de humor“, escribió en su Instagram el jugador, que había puesto fin a su carrera internacional en 2021 tras 106 internacionalidades.
“Estoy seguro de que podemos hacer mucho más con este equipo en la Eurocopa de lo que piensa la mayor parte de la gente”, añadió.
El seleccionador alemán Julian Nagelsmann dejó abierta la posibilidad en diciembre pasado de volver a llamar a Kroos, de 34 años, después de que el propio jugador admitiera que era algo sobre lo que había meditado.
Su regreso aportaría experiencia a un grupo en reconstrucción tras el fin de su generación dorada campeona del mundo en 2014.
Alemania se enfrentará a Francia y a Países Bajos en sendos amistosos en marzo, antes de disputar ‘su’ Eurocopa en casa.
Joan Laporta en estado puro. El presidente del Barça tenía previsto dar una rueda de prensa este martes para explicar todo lo sucedido con las inscripciones de Dani Olmo y Pau Víctor y, a decir verdad, no dejó títere con cabeza. Según aseguró, todo lo ocurrido ha sido un ataque al club, y también acusó a la oposición de no haber sabido estar a la altura de las circunstancias con el conato de moción de censura. Lamentö las manifestaciones en contra de la cautelarísima concedida por el CSD que han llegado tanto desde LaLiga como por parte de otros equipos, pero también agradeció el silencio de otros, entre los que estarían tanto el Real Madrid como Florentino Pérez. De hecho, según desveló, la relación con el eterno rival en Arabia Saudí ha sido muy cordial.
Para saber más
«No voy a desvelar conversaciones privadas con otros presidentes. Sí puedo decir que estoy agradecido a los clubes que no se han posicionado en contra, porque han visto que no era el camino por el que había que ir. Como patronal, debemos defender los intereses de todos. Los que no se han posicionado, seguramente deben saber que la defensa que ha hecho el Barça está dentro de la legalidad, no quiero prejuzgar nada para no perjudicar a ninguna de las partes en el proceso», aseguró el presidente azulgrana. «Con Florentino hablamos de la Supercopa en Arabia, de que hay que mejorar algunos aspectos, reconociendo que la organización fue muy buena. Por todo lo que supone el desplazamiento, estar una semana ahí, quizás tendríamos que estar mejor remunerados y sacar quizás más provecho del tema, siempre en un ambiente de concordia, sabían que el tema estaba muy latente», agregó un Laporta que, según explicó, ya se esperaba tener que luchar conta viento y marea para seguir contando con sus fichajes del verano pasado.
Lo que no hizo el presidente del Barcelona es explicar algunas de sus afirmaciones. Por ejemplo, dice que el contrato del club con Nike es "el mejor contrato de ropa deportiva del mundo del fútbol", pero acogiéndose a las cláusulas de confidencialidad, no consideró oportuno ofrecer las cifras que sujetasen semejante afirmación. Tampoco, y eso que recibió dos preguntas directas en la hora y tres cuartos de comparecencia, tuvo a bien dar el nombre de las empresas (una de Qatar y una de Emiratos Árabes) que, con la compra de los derechos sobre los futuros asientos VIP del Camp Nou, han permitido al Barça volver a la relga del 1:1 (poder gastar en fichajes lo mismo que ingresa o ahorra). También en este caso aludió a cláusulas de confidencialidad en los contratos.
Joan Laporta.Enric FontcubertaEFE
«Nada de lo sucedido con la inscripción de Dani y Pau nos ha sorprendido. Si repasas la historia, ves que ya ha pasado. Cuando el Barça vuelve a emerger en el mundo del fútbol, diversos actores, con sus correspondientes refuerzos mediáticos, unen fuerzas para imponer un relato ignominioso que no tiene nada que ver con la realidad. Este modus operandi se repite cíclicamente, y es que nos conocemos todos. Una vez más, celebro decir que no lo han conseguido», arengó. «Estoy muy acostumbrado a recibir críticas, lo he normalizado, y a sufrir acciones que sobrepasan todos los códigos deontológicos. Lo que no puedo aceptar es cuando esta fiscalización de mi cargo va acompañada de mentiras. No puedo permitir que se aprovechen de las críticas al presidente para atacar al club o para desestabilizar al equipo», reiteró un Laporta que lamentó que lo que considera como un nuevo ataque ha sido mediatizado tanto desde fuera como desde dentro del club.
NO VA A DIMITIR
«Creo que han tenido oportunidad de oro para demostrar que quieren al Barça, y no la han aprovechado. Se han posicionado al lado de quienes nos querían perjudicar y de medios de comunicación que han sido muy hostiles. ¿Alguien cree que el presidente del Barça habría dimitido por una decisión de LaLiga o la Federación? Me gusta pensar que venderemos cara nuestra piel. Estoy muy decepcionado por cómo han actuado quienes tienen aspiraciones de dirigir al club. No era estar al lado de Laporta, era estar al lado del Barça, y han desestabilIzado al equipo», argumentó. «Pobre Barça si acaba en sus manos», sentenció. Toda la tensión vivida, según explicó, fue lo que provocó su sonada salida de tono al conocer la decisión del CSD.
«Tenía una euforia contenida, porque habíamos conseguido algo muy difícil, contra todo y contra todos, como de costumbre, de ahí vino mi reacción. En el palco no insulté a nadie, no agarré a nadie por el cuello ni di patadas al mobiliario Había parte de indignación, porque el presidente de la Federación me decía que veía claro que había que otorgar las licencias, y le dije de manera directa lo que pensaba. Un par de días después, lo aclaramos. Soy como soy, no me gusta hacer paripés, tuve la reacción que es la que es y ya está. No quiero señalar a nadie, cada uno tiene el derecho de hacer lo que crea conveniente. En un estado de derecho no habría que linchar a alguien antes de juzgarlo, o disparar y después preguntar», abundó. «La 'butifarra' me gusta con judías. Las mentiras, que se las coman con patatas», señalaría más tarde, cuando un medio buscó preguntarle de manera más distendida por su sonado corte de mangas.
«Presentamos la documentación a LaLiga el 27 de diciembre. La entregamos en término antes de que terminara el año. Nos iban pidiendo que la completáramos, el 31 entendíamos que habíamos cumplido y que teníamos el 1-1. LaLiga nos pidió requisitos adicionales. En paralelo, pedimos a la RFEF la extensión de las licencias, pero nos dijo que faltaba 1-1, pero que en principio no había problema. La aplicación del articulo que nos decían LaLiga y la RFEF estaba obsoleto, eso hizo que la comisión decidiera no dar licencias. Desde nuestro punto de vista no era correcto, la razón del articulo es dar estabilidad de la competición y no entrábamos en el supuesto para evitar que jugadores y club se inscribieran en diferentes clubs en función de la coyuntura. No era el caso. Tenian contrato laboral en vigor, era sólo una extensión de licencia. El día 3 acabamos de cumplimentar la documentación que nos pedian, LaLiga nos dio OK, la RFEF invocó el artículo desde nuestro punto de vista de manera incorrecta y tuvimos que recurrir al CSD», explicó Laporta como cronología de los hechos.
«Están en su derecho de pedir documentación adicional, aunque opino que han actuado en contra de sus propios actos, porque no la habían pedido en otros casos. Ha sido una tensión superlativa, pero hemos ido superando los obstáculos. Por la premura, quizás era exagerado pedirlas, hubo una serie de requisitos a nivel formal que fuimos cumplimentando. Toda esta documentación el 31 de diciembre estaba presentada, en tiempo y forma, sólo faltaba acreditar el desembolso. No es lo común, no lo han hecho en otras ocasiones, pero para suplir informes de solvencia pidieron un 40% de los ingresos, uno de los inversores por la explotación de los palcos VIP puso el 100% y el otro, el 40%», recalcó. «Desde el CSD incluso consideran la nulidad del acto administrativo, el órgano no era competente para no dar las licencias. Soy optimista en cuanto a que todo se desarrollará de acuerdo con la legalidad establecida y ojalá se estimen nuestras pretensiones para no perjudicar los intereses de nuestros jugadores. No han incurrido en el supuesto que contempla el artículo, empezaron jugando con el Barça y continúan con el Barça, porque tienen contrato laboral en vigor», sentenció.
Eli John Ndiaye tiene 20 años, ha jugado dos Final Four como titular y dentro de no mucho podrá estar a las órdenes de Sergio Scariolo en la selección española. Lo que era una promesa, otra más de la cantera blanca, es ya toda una realidad. Uno de los jugadores más en forma de este Real Madrid que olvida su mal arranque en el WiZink, donde el Estrella Roja no fue capaz de competir en toda la noche. [95-72: Narración y estadísticas]
Pudo parecer una victoria de trámite más dentro del infatigable calendario del baloncesto continental, un triunfo abultado y cómodo en el Palacio, seis de seis en casa que no es poco con los apuros de hace unos días (a domicilio aún no sabe lo que es ganar el Madrid). Pero enfrente, aunque no lo pareciera, estaba el equipo revelación de la Euroliga en su arranque, un Estrella Roja que hace unos días llevó al Barça al límite de la prórroga en lo que era su única derrota hasta anoche. No hubo nada de eso porque los de Chus Mateo mostraron las versión más parecida a lo que quieren llegar a ser.
Más allá de que la pelota acabara entrando o no, la circulación blanca pretendía la alegría, siempre que había posibilidad un pase más, todos implicados en el ataque estático que viene siendo el principal problema. Encontró rápido al rey Tavares, poderoso ante Plavsic (no estaba por lesión Bolomboy, tampoco jugó Nedovic), especialmente por alguien que no se prodiga demasiado en eso de proveer al compañero. Porque Hezonja suele ser más un finalizador: cuando se fue al banquillo al comienzo del segundo acto acumulaba cinco pases de canasta y el Madrid volaba 13 arriba (23-10).
Campazzo anota ante el Estrella Roja, en el WiZink.JUANJO MARTINEFE
Cuando el croata se tomó un respiro, a la vez que Campazzo y Tavares, lo notó el ritmo del Madrid. Reaccionó el Estrella Roja galopando a lomos del infinito talento de Teodosic (no pierde la magia camino de los 38), pero fue apenas un espejismo. No tardó en regresar el dominio, la intensidad defensiva, las canastas tras asistencias. Y el protagonismo de Eli Ndiaye, un chico que hace tiempo perdió la timidez, que se siente importante y que está aprovechando la ausencia de Garuba para hacerse importantísimo. Los blancos dejaron al Estrella Roja en menos de 30 puntos al descanso y llegaron a dominar por 18 (38-20).
A la vuelta siguió la tónica y la ventaja en aumento. Ndiaye, crecidísimo, alcanzando sus topes con el Madrid, era capaz de dedicarle un triple al banquillo serbio, de implicarse totalmente en ataque (algo que le costaba) y de, como siempre, se factor en defensa con su envergadura y su intensidad. Cuando Vinicius y Camavinga aparecieron por el WiZink, mediado el tercer acto, estaba ya todo visto para sentencia.
Hubo una pequeña reacción de los de Sfairopuolos, liderada por el pequeño Dos Santos, pero era demasiado el lastre que tenían encima. Mateo insistió con Ibaka. Al pívot, con sus luces y sus sombras, le sigue costando adaptarse y sentirse cómodo en el engranaje blanco. Y su papel de suplente de único suplente de Tavares (al menos hasta el retorno de Garuba) se antoja fundamental en el futuro. Esfuerzo y empeño no le faltan a Serge, pero es como si echara de menos la frescura y el dominio de sus mejores días en la NBA.
En la calma de la paliza, en la fiesta de las 26 asistencias, hubo descansos, espacio para Hugo González y para el debut en Europa de Sidi Gueye, el espigado talento de 16 años, el enésimo chico con porvenir de la cantera blanca.