Joao Félix o el regreso del morbo al Metropolitano: "La gente tiene sentimientos"

Joao Félix o el regreso del morbo al Metropolitano: “La gente tiene sentimientos”

Joao Félix (Viseu, 1999) resolvió las dudas del Barcelona y Atlético de Madrid en Montjuic a la media hora de juego. No sólo celebró el gol ante su ex equipo, se subió a una valla para reivindicarse ante él. Era su momento álgido en el club culé, "el sueño" que tuvo desde niño. Sus defensores aseguraban que, esta vez sí, había encontrado su sitio. Desde el club rojiblanco respondían que su última preocupación era cómo celebraba Joao.

Solo tres meses y medio después, la situación del luso en el FC Barcelona es completamente diferente. Joao Félix había comenzado siendo fundamental en el once de Xavi con 10 de 11 presencias en el equipo titular hasta la exhibición en Montjuic frente a los rojiblancos y jugando los 90 minutos en tres de ellos. Tras ese 3 de diciembre de 2023, sin contar con los cuatro encuentros que se perdió por una lesión de tobillo, Félix no ha vuelto a jugar un partido completo. Ha jugado de inicio en seis de nueve duelos, pero apenas lo ha hecho una hora en tres de ellos.

El portugués mantiene la media goleadora en el Barcelona que ha tenido en España. Desde su explosión en el Benfica en la temporada 2018/19, año que le valió el fichaje por el Atlético de Madrid por unos 127 millones de euros, nunca ha anotado más de 10 goles, 15 hizo aquel año. Joao ha marcado una decena dos años seguidos con los colchoneros (2020/21, 2021/22) y lleva ocho tantos este año con el Barça. El último en la goleada del equipo culé ante el Getafe el pasado 24 de febrero.

"Hago mi trabajo e intento hacer lo mejor para ayudar al equipo, he vuelto de lesión antes", comentó tras ese partido en el que afirmó que siempre intenta "disfrutar" sobre el campo. No es una afirmación accidental, fue lo primero que recordó en una entrevista cuando llegó al Barça. Decía que Xavi le pedía que disfrutase mientras que en el Atlético argumentaba sentirse "mal" porque no se adaptaba a las "ideas del entrenador".

El portugués tras marcar al Atlético.

El portugués tras marcar al Atlético.EFE

Lo cierto es que el rendimiento de Joao Félix siempre ha sido a modo de bengala: brillante al inicio y perdiendo fulgor hasta terminar por apagarse, bien porque la relación con el entrenador no era la idónea, bien porque su encaje en el grupo tampoco acababa de ser el correcto o, directamente, porque compañeros suyos, con más hambre y ganas que el portugués, le relegaban a un segundo plano. Lugar en el que nunca se sintió cómodo como ha mostrado en multitud de ocasiones en el Atlético de Madrid.

Así, el portugués no ha podido triunfar en sus tres años y medio como rojiblanco, tampoco en sus seis meses cedido en el Chelsea, donde aseguró sentirse "feliz" y "libre" porque al equipo le gustaba "atacar" y ahora ha vuelto a exhibir una progresión parecida en el Barcelona, aunque aún tiene algunos meses para cambiarlo.

Restan 10 partidos de LaLiga más, mínimo, dos de Champions League. El Barça y el portugués se necesitan. Al club no le sobra presupuesto, cuanto mejor acabe en Liga y más avance en la máxima competición continental, mayor límite salarial podrá obtener. Y al portugués se le terminan las oportunidades para brillar y los clubes que quieran apostar por él.

Futuro

Si en los inicios de esta temporada, ante el buen hacer del 14 blaugrana, se exploraban diversas fórmulas, incluso la venta, para quedarse en la disciplina culé. Su descenso de rendimiento y las dificultades económicas del Barça hacen que incluso un segundo año de cesión entre ambos conjuntos sea una operación ya no tan sencilla como se ha especulado pese a la gran relación que tiene su agente, Jorge Mendes, con ambos clubes.

Desde la cúpula rojiblanca siguen apreciando al futbolista portugués y creen que aún tiene mercado. Saben que su encaje en el vestuario donde solo hay un líder y se llama Diego Simeone es complicado, pero no consideran las manifestaciones o las acciones del portugués como irreconciliables con el club y recuerdan lo ocurrido con Griezmann y su marcha al Barça, documental incluido, como errores que se pueden superar.

Tras la ostentosa celebración de Montjuic, Joao Félix vuelve a un Metropolitano donde dice le espera un ambiente "complicado para todos" pero especialmente para él. "Me motiva más, me gustan estos partidos importantes y picantes, hay una motivación extra", comentó en la previa del partido.

Morata, uno de los pesos pesados del vestuario, reconoce que el recibimiento será muy pasional. "La gente tiene sentimientos y solo espero que no tenga un buen día futbolístico. Seguro que lo tratan con respeto, todavía pertenece al club y en el futuro no se sabe lo que va a pasar", apuntó en las dos direcciones del affaire Joao Félix, la sentimental y la económica.

Simeone, por su parte, ya le ha sacado de su club de manera educada. "Soy muy respetuoso para los futbolistas de otros equipos, no opino de ninguno y este no será excepción", expresó. Xavi, en cambio, le animó a "mostrar personalidad" y le desveló que a él le gustaban los "ambientes hostiles". Mañana lo será para el Menino de Oro o, si hablamos de los últimos tiempos, de Hojalata.

Xavi, ante la plaga de lesiones que mina al Barcelona ante el Mallorca: "El trabajo de prevención es impecable"

Xavi, ante la plaga de lesiones que mina al Barcelona ante el Mallorca: “El trabajo de prevención es impecable”

Actualizado Jueves, 7 marzo 2024 - 22:41

El centro del campo del Barcelona parece estar poco menos que gafado. Ante el Athletic, Xavi perdió de golpe dos de sus argumentos preferidos para la creación de juego: Pedri y Frenkie de Jong. El primero sufrió el enésimo percance muscular de su llegada a la entidad barcelonista, mientras que el segundo padeció un esguince de tobillo por una mala caída. Con este panorama, y con Gavi como baja de larga duración por la grave lesión de rodilla sufrida en noviembre del año pasado, al técnico no le quedará otra que buscar la mejor forma de reinventar la medular. Así lo confesaba en la rueda de prensa previa al partido de este viernes (21.00 h., Dazn) frente a un Mallorca que jugará el día 6 de abril ante el Athletic la cuarta final de Copa de su historia.

«No hay mucho donde elegir en el medio del campo. Medios naturales tenemos a Fermín, a Gündogan y poco más. Hay que reinventar, como sucedió con Christensen, que lo está haciendo bien como mediocentro. Podemos readaptar a Joao Félix, a Raphinha, a Ferran o alguno más», aseveró el entrenador azulgrana, quien no dudó en confesar que las de Pedri y De Jong son bajas «muy sensibles». En el caso del canario, quiso apuntar que se está haciendo todo lo posible para poner fin a esta mala racha de problemas musculares, a la que también quiso quitarle hierro. Sobre todo, apelando a que es algo que también les ha pasado a otros futbolistas en los inicios de su carrera deportiva.

«Hemos hecho un trabajo impecable, sobre todo Pedri. Le he dicho que ésta será la última lesión. Es menos grave de lo que parece y ojalá pueda volver pronto. Tenemos que hacer todo lo posible, y él quien más, para que no vuelva a pasar, ponerle los cinco sentidos. No es el primer jugador que tiene lesiones en el primer tramo de su carrera y está viviendo mucha presión con muy poca edad», argumentó un Xavi que está convencido de que la clave, ante todo, es la paciencia. «Tiene que ser positivo y convencerse de que se recuperará. No le veo problema alguno. Lo importante es que se recupere bien, al 100%, y que no piense ni en el clásico, ni en la Eurocopa», sentenció.

Fermín, un "perfeccionista"

El entrenador azulgrana, por otro lado, no escatimó elogios para un jugador que ahora tendrá más minutos y que acabó el partido frente al Athletic con muy malas sensaciones por el empate: Fermín. «Tiene una personalidad muy grande. Es muy perfeccionista y se autoimpone muchas cosas. El otro día no acabaría contento en San Mamés, como el resto del equipo. Te enfadas si no estás al nivel y él ya ha demostrado que tiene el nivel necesario para jugar en el Barça».

Las circunstancias, además, pueden obligarle a variar un poco su esquema. La filosofía, con todo, es innegociable. «El sistema se puede cambiar, pero el modelo, no. Tenemos que ser ofensivos, tener el balón. Eso no lo cambiaremos. La verdad es que no hemos tenido nunca juntos a los centrocampistas y eso nos ha pesado», recalcó un Xavi que, pese a la distancia de ocho puntos con Real Madrid, se resiste a tirar la toalla en la Liga.

«Lo vamos a intentar hasta el final, hasta que los números digan que no», aseguró un Xavi que, pese a la trascendencia del partido del martes frente al Nápoles, quiere que sus jugadores estén centrados al máximo en el campeonato de la regularidad. «Yo no creo que la Liga esté perdida», ése es el mensaje.