Rahm se une a la cordura y apurará sus opciones en el fin de semana del PGA Championship

Rahm se une a la cordura y apurará sus opciones en el fin de semana del PGA Championship

Actualizado Sábado, 17 mayo 2025 - 09:13

Hoy era un viernes para el espectáculo y la esperanza. Ninguno de los jugadores del top-10 del ranking mundial había comenzado bien este PGA Championship, y desde la organización cruzaban los dedos para que las benévolas condiciones de Quail Hollow ayudaran a que los pesos pesados del golf tiraran de galones y se metieran en el torneo. La PGA de América lleva años conviviendo con el lastre de ser el hermano pobre de los majors. El cambio de fecha (de agosto a mayo) ayudó a mejorar; la elección de grandes sedes como Quail Hollow también aporta lo suyo. Pero el Masters, el Open Championship y el US Open golean al PGA por personalidad e historia.

La extraña clasificación del primer día no contribuía a mejorar la imagen: era más propia del Open de Puerto Rico que de un major con 99 de los 100 mejores jugadores del mundo. Y aunque la segunda jornada nos ha hecho perder a nombres como Justin Thomas, ganador aquí en el PGA de 2017; Jordan Spieth, que se queda sin sueño de Grand Slam (solo le faltaba el PGA Championship); Shane Lowry, Hideki Matsuyama, Sepp Straka (último ganador en el PGA Tour), Ludvig Åberg, Justin Rose o Patrick Reed, el torneo parece haber dado un viraje de 180 grados.

Los grandes del golf han tomado posiciones de cara a un fin de semana de revolución. Scottie Scheffler ha protagonizado el movimiento más decidido. El norteamericano firmó un -3 que lo lleva directamente a la quinta plaza con -5, a solo tres golpes del exótico líder: Jhonattan Vegas, primer venezolano en la historia en liderar un torneo del Grand Slam. Vegas sufrió durante la jornada, sobre todo en su accidentado final, con un doble bogey en el 18 para culminar la temida "Milla Verde", como se conoce a los tres últimos hoyos de Quail Hollow. El venezolano deja el torneo en -8 y con dos golpes de ventaja sobre el francés Matthieu Pavon y el inglés Matt Fitzpatrick.

Al final, Rory McIlroy pasó el corte justo en la cifra de +1. Hoy se ha conocido que, en las horas previas al comienzo, la USGA hizo un test aleatorio y catalogó el driver del norirlandés como no conforme a las reglas, con lo que Rory tuvo que salir el jueves con un modelo diferente, lo que puede explicar el pobre bagaje de solo cuatro calles cogidas desde el tee. Sin embargo, McIlroy no ha dicho su última palabra y saldrá a nueve golpes, al igual que Xander Schauffele o los españoles Sergio García y David Puig. Todos deberán aprovechar las condiciones de la mañana en un campo que llegará al fin de semana más duro, más rápido, con rough más penalizante y una previsión de más viento. No podemos descartar a ninguno de los 74 jugadores que finalmente han pasado el corte del torneo.

Con más opciones se presenta el único español bajo par: Jon Rahm, con una ronda peleada de -1. "Me siento mejor con el swing de lo que dice el resultado, muy buenas sensaciones", avisa el de Barrika, que salvó dos monumentales pares en los hoyos 11 y 12: "El campo va a estar cada día más difícil, yo no descartaría prácticamente a nadie", sentenciaba.

Tres de los cuatro españoles siguen en competición en Quail Hollow. Solo Chacarra se quedó fuera, pero muy cerca de lograr lo que hubiera sido una heroica clasificación. Un resbalón con un mal golpe provocó un doble bogey en el hoyo 8. Llegó a colocarse con +5, pero el birdie en el hoyo 14 y el eagle en el 15, con un putt desde fuera de green de más de 20 metros, lo dejaban a tiro de birdie con los tres hoyos finales de la "Milla Verde" por jugar. Se escapó por muy poco el birdie en el 16 y, a la desesperada, cometió dos bogeys en el 17 y 18 para tener que despedirse del torneo. "Obviamente no he tenido el nivel que creo que puedo demostrar, pero está bien saber dónde tengo que mejorar. Mi nivel de mejora está en los greenes, me queda mucho que aprender y mejorar".

David Puig por fin ha podido dar bolas en el campo de prácticas. Salió a ciegas al segundo major del año: un milagro que pudiera pinchar la bola el jueves en el tee del hoyo uno. Hoy la ronda se complicó de inicio con un segundo golpe en el 10 directamente contra el tronco de un árbol. El primer milagro de la jornada llegó con un putt desde seis metros para par. Cuando todo parecía bajo control, llegaron cinco bogeys en siete hoyos. Con +3 y tres hoyos por jugar, parecía que el corte se alejaba. Otra lección de garra del golfista de La Garriga, que terminó con dos birdies en el 7 y el 8 para clasificarse al fin de semana. "He podido cerrar muy bien, seguir confiando en mi juego y he podido hacer buenos swings para acabar y jugar el fin de semana". "La parte física ha mejorado bastante, eso es el mayor éxito".

Sergio García (+1) también terminó justo en +1 para pasar el corte, pese a que el golfista de Castellón creía en un "99,9 por ciento que se iba a quedar fuera por un golpe". Nos alegramos del error de cálculo, aunque su discurso sigue siendo catastrofista. "He jugado mejor que ayer, era fácil: ayer como un hándicap 25 y hoy como un hándicap 7", concluía. Mucho por jugar aún en el segundo major del año. Veremos si está predispuesto a que la revolución continúe el fin de semana.

El fútbol maquilla el mandato de Laporta: tres títulos frente al caso Negreira, las obras del Camp Nou, la inscripción de Olmo...

El fútbol maquilla el mandato de Laporta: tres títulos frente al caso Negreira, las obras del Camp Nou, la inscripción de Olmo…

Actualizado Sábado, 17 mayo 2025 - 00:32

La exitosa temporada del primer equipo de fútbol del Barça, con un juego que ha vuelto a despertar la admiración de propios y extraños, tres títulos más en sus vitrinas (Liga, Copa del Rey y Supercopa de España) y una superioridad casi aplastante en los duelos directos con el eterno rival, el Real Madrid, ha sido deslumbrante. Hasta tal punto, que la luz arrojada desde el césped ha acabado por ocultar una serie de sombras del todo innegables en el que es ya el quinto año de este tercer mandato de Joan Laporta.

El 2020-21, con las elecciones a mitad de temporada, ya contó como el primero, por lo que le queda solo uno para convocar de nuevo los comicios. Algo que, según ha señalado el dirigente, no se producirá hasta el verano del año que viene. Nuevos vaivenes en el apartado económico, las inscripciones con polémica de Dani Olmo y Pau Víctor, los serios movimientos de la oposición para pedir su dimisión o los aún largos tentáculos del caso Negreira serían las más destacadas de esas sombras que se mantienen más allá de los estupendos éxitos deportivos.

Laporta, a pesar de todo, sale reforzado de un curso que ha sido toda una montaña rusa desde el punto de vista institucional. La remodelación del Spotify Camp Nou, la nueva gran joya de la corona que desea dejar como parte de su legado, por ejemplo, ha acabado por alargarse más de lo esperado. Por mucho que la voluntad fuera inicialmente regresar a casa a finales del año pasado o principios del presente, finalmente se ha optado por retrasar el retorno, en principio, hasta septiembre. El regreso, eso sí, de momento, y hasta el verano de 2026 al menos, se producirá con la tercera grada pendiente de terminar y con algunas incomodidades por las obras.

La venta, precisamente, de varias localidades VIP del estadio, una nueva palanca activada tanto para inscribir definitivamente a Dani Olmo y Pau Víctor tras la firma del nuevo contrato millonario con Nike como para asegurarse el 1-1 en el fair play financiero también se ha visto rodeada de suspicacias. Sobre todo, desde LaLiga, con Javier Tebas a la cabeza. El CSD tuvo que intervenir para que los dos únicos fichajes del verano pasado pudieran seguir formando parte de los planes de Hansi Flick. Ese triunfo en los despachos, conocido durante la Supercopa de España en Arabia Saudí, llegó a provocar una airadísima reacción de Laporta fuera de sí (cortes de mangas e insultos) que vio también cómo la oposición se alineaba para reclamarle que dimitiera y convocara nuevas elecciones. Ahora, con los triunfos en la mano, podría hacerlo, pero ya ha adelantado que eso no entra en sus planes.

Las elecciones, la renovación de Flick...

«Convocar las elecciones antes sería ventajista, y no lo soy, siempre he cumplido mis mandatos en la medida que me han dejado. Las convocaré cuando corresponda, según los estatutos», recalcó en declaraciones a RAC1 un Laporta que sí tiene decidido presentarse a la reelección. «El club está mejor organizado viendo de dónde venimos y hacia dónde vamos. Me da fuerza y me hace estar convencido de que hacemos bien las cosas, en gran medida, estamos acertando. Me gustaría presentarme a las próximas elecciones, creo que estamos haciendo un buen trabajo y merecemos continuidad», agregó el máximo dirigente azulgrana, quien confirmó además la ampliación de contrato de Hansi Flick por una temporada más, hasta el 30 de junio de 2027, y cargó contra lo que él considera casi como una persecución en lo extra deportivo, tanto en el caso de las inscripciones de Olmo y Víctor como por la instrucción de un caso Negreira que parece estar eternizándose.

«Con todo este tema de la corrupción deportiva no se aclaran. Se ha extendido el sumario porque han querido estirar el chicle y no tienen nada que hacer, porque la postura del Barça es la que se está imponiendo y estoy convencido que acabaremos ganando y siendo absueltos. No se saldrán con la suya porque esta campaña de desprestigio institucional como otras campañas similares hacen que aún sea mejor y tenga más mérito ganando los tres títulos», sentenció.

Carlos Sainz: “Hacen falta aptitudes para la política, pero a estas alturas no voy a cambiar”

Actualizado Sábado, 17 mayo 2025 - 00:29

Desde el jueves, las miradas en Imola han rondado en torno al hospitality de Williams. La prensa y los invitados VIP buscaban por allí a Carlos Sainz, que hace sólo ocho días confirmó su intención de presentar su candidatura a la presidencia de la FIA. Sin embargo, el tetracampeón del Dakar no va a dejarse ver este fin de semana junto a su hijo en el Autodromo Enzo e Dino Ferrari. Sainz, de 63 años, ha viajado a Sudáfrica para disputar el South African Safari Rally, cita preparatoria de cara al Dakar 2026. Desde Sun City, cerca de Pretoria, el bicampeón mundial de rallies atiende a EL MUNDO para hablar sobre sus planes como alternativa a Mohammed ben Sulayem.

¿Ha pasado una semana desde que adelantó su disposición a presentarse como candidato. ¿Qué feedback ha recibido estos días?
Ha sido bastante positivo, porque casi todo el mundo pretende ayudar, pero el único feedback necesario de cara a unas elecciones viene de quienes votan, que son las Federaciones y los Automóvil Clubs. En las últimas horas apenas he podido hablar con nadie más, debido a mis obligaciones, aquí en Sudáfrica, como piloto de Ford.
¿Cómo calificaría su relación personal con Ben Sulayem?
Es buena. Fue compañero de equipo en Toyota a comienzos de los 90 y tenemos una relación correcta, sin ningún problema.
¿Han mantenido algún contacto en los últimos días?
Le llamé para transmitirle que manejaba la opción de presentarme. Todo fue bien.
¿Tiene constancia de los cambios de normativa que Ben Sulayem va a trasladar a la Asamblea de la FIA?
He leído lo que se ha publicado, pero de momento no se ofrecen datos totalmente exactos. Hasta que no termine la Asamblea General de la FIA, el 13 de junio en Macao, no sabremos si hay algún cambio de estatutos.
En la citada información de la BBC se explica que Ben Sulayem pretende eliminar cualquier factor que ponga en duda la integridad profesional de los candidatos y establecer un mayor control previo sobre posibles conflictos de intereses. Sea por su condición de piloto del Dakar o por ser padre de un piloto de F1, ¿cree que puede darse un conflicto de intereses?
En primer lugar, si finalmente me presento, eso supondría el punto final a mi etapa como piloto. Luego, si ganase las elecciones sí podría disputar el Rally Dakar, porque apenas existiría una semana de diferencia entre los comicios y el inicio de la carrera. Respecto al conflicto de intereses con Carlos, creo que a lo largo de mi vida he sido una persona bastante estricta y jamás he tenido ningún tipo de problema. Al igual que con Ford debería cambiar mi relación personal con él, renunciando a la labor de mánager que algo ejerzo en este momento. Sería una situación que se podría manejar perfectamente. La FIA es una organización muy profesional, con los estamentos muy bien separados. En fin, en el fútbol yo no veo a la gente del VAR llamando al presidente de la Federación para decretar o no un penalti. Por todos los sondeos que he ido haciendo entre gente involucrada no creo que esto suponga ningún problema.
¿Por qué ahora es el momento idóneo para usted?
En primer lugar porque veo cerca el momento de finalizar mi etapa como piloto. De modo que perfectamente podría aportar toda la experiencia que he ido acumulando desde el otro lado. Como piloto, muchas veces me he sentido un poco frustrado, porque la FIA debería ser una organización más cercana al mundo del deporte. Me gustaría ver una FIA no tan enemiga de todo el mundo. Es un organismo que debería ayudar a los deportistas y ser más respetado. Con esto no digo que ahora mismo no lo sea, pero no es sencillo, porque siendo quien regula y quien arbitra siempre es fácil estar en la picota. Quiero presentarme porque considero que este respeto sí se puede conseguir. Tengo experiencia en la F1, los rallies y los raids, lo que me otorga un espectro importante desde diferentes ámbitos. La movilidad y la seguridad vial también han sido una de mis preocupaciones. Podría aportar bastante.

"Me gustaría una FIA no tan enemiga de todo el mundo"

En las últimas semanas, el convulso ambiente en la FIA ha quedado en evidencia con la dimisión de su vicepresidente, Robert Reid, y la carta abierta de David Richards, presidente de la Federación Británica, donde cargaba con dureza contra Ben Sulayem. ¿Ha hablado con ellos?
Conozco a ambos desde hace tiempo, porque David ya fue mi jefe unos años en Subaru y Robert ejerció como copiloto de Richard Burns, también en el Mundial de Rallies. He estado hablando con ellos. Son situaciones que la FIA no debería permitirse, porque tendría que estar por encima de estos asuntos tan incómodos. No te puedo ofrecer más detalles.
En 2021, Ben Sulayem recabó la mayoría de sus apoyos en Asia y América Latina. ¿Uno de sus objetivos pasa por recuperar el respaldo europeo, en especial de Gran Bretaña?
Quiero lograr el apoyo de todo el mundo, no sólo de los británicos. Si me presento, me gustaría que fuese algo muy consensuado. Todo ello sin olvidar que Inglaterra es la cuna del motorsport y también de su industria. Sin embargo, quiero reiterar que en las elecciones no votan pilotos, ni periodistas, ni marcas... Además, el país con más licencias pesa exactamente igual que el país con menos. En cualquier caso es indudable que Inglaterra sigue siendo la referencia en el mundo del motor, así que es vital estar bien alineado con su Federación y sus Automóviles Clubs. Pero no hay que hacer diferencias, porque los votos pesan lo mismo.

"El presunto conflicto de intereses con mi hijo se podría manejar perfectamente"

¿Se siente cómodo en estas aguas turbulentas de política y deporte?
Me siento lo suficientemente a gusto, aunque toda mi vida he sido deportista, no político. Efectivamente hacen falta determinadas aptitudes para la política. Sin embargo, a estas alturas no voy a cambiar mi manera de ser, ni mi modo de trabajar. Todos los que han colaborado conmigo saben que sólo tengo una manera de actuar: clara, concisa y recta.
Ya se habla de que Ben Sulayem pretende boicotear su candidatura y perpetuarse en el poder. Llegados a este punto, ¿mantiene las ganas de seguir con la aventura?
Primero hay que esperar si realmente cambian los estatutos. En ese momento haremos el análisis de la situación. Hasta entonces, voy a seguir midiendo, valorando las opciones, las ayudas y los apoyos que pueda encontrar. Aún queda tiempo para decidir.
Miles de aficionados acompañan al Barça en la rúa de campeones

Miles de aficionados acompañan al Barça en la rúa de campeones

Actualizado Viernes, 16 mayo 2025 - 20:32

La fiesta de los jugadores y la directiva en una conocida discoteca de la zona alta de Barcelona se alargó tras el triunfo ante el Espanyol de este pasado jueves. Para muchos, hasta el amanecer. Y algunos jugadores, como Dani Olmo, Pedri, Eric García o Íñigo Martínez, incluso aprovecharon un servicio de movilidad en bicicleta del ayuntamiento barcelonés para plantarse en el Hospital de Barcelona con ánimo de celebrarlo con el convaleciente Ferran Torres, operado el miércoles por una apendicitis. Con estas premisas, no es nada raro que la esperada rúa de celebración tuviera un arranque curioso. Los futbolistas se reunieron en la ciudad deportiva, convenientemente uniformados todos con la misma camiseta, algunos con mangas, otros sin, para ser trasladados a un Camp Nou que iba a ser el punto de arranque.

En los alrededores del coliseo azulgrana se reunía ya una cantidad ingente de aficionados, a la espera de una salida de la que los trabajadores que están ahora mismo tratando de acelerar las obras del Camp Nou fueron testigos privilegiados. Por eso, seguro, al autocar descapotado en el que iba a viajar la plantilla y el staff azulgranas, decorado con los colores del club y una foto en la que aparecían todos los protagonistas, con Hansi Flick en el centro, se movió mucho más lentamente de lo que estaba previsto. La multitud que los esperaba allí era solo una muestra de lo que se encontrarían en su recorrido por las calles de Barcelona, con miles de aficionados tomándolas para celebrar una temporada, la del 125 aniversario del club, trufada con tres títulos. La ruta a seguir estaba marcada en el particular roadmap de la rúa: Camp Nou, Travessera de Les Corts, Numancia, Berlín, un primer punto de animación oficial en la confluencia con la avenida Tarradellas, París, Balmes, Pelai, con un segundo punto de animación en la plaza Catalunya, Fontanella, Trafalgar y punto final, con el tercer y último punto de celebración, en la última estación: el Arco del Triunfo. En principio, tres horas que, según pintaba el arranque, iban a ser finalmente más tiempo.

En la parte frontal del autocar de los futbolistas destacaba el mismo lema que portaban en la espalda de sus camisetas conmemorativas del título de Liga: El nostre estil, el nostre llegat (Nuestro estilo, nuestro legado).Sobre él, con Flick siempre atento a que la cosa no se fuera demasiado de las manos, entre algunas gorras más comunes destacaban tanto el sombrero de carnaval que llevaba Raphinha como el en apariencia más elegante de Wojtech Szczesny. En apariencia, porque en la parte interna del ala, tal y como dejó ver en una fotografía compartida en sus redes sociales, lleva inscrita la palabra «Fumador». El cántico que le recuerda esa condición, habitual cuando firma una buena intervención en Montjuïc, fue uno de los primeros que corearon unos futbolistas en cuyas manos había las habituales cervezas, pero también muchos refrescos. Algo quizás previsible con tantos y tantos jóvenes talentos en sus filas. En la parte de atrás del autocar, cómo no, lucían, convenientemente escoltados durante un buen rato por Jules Koundé, Eric e Íñigo, los tres trofeos conquistados este año: Liga, Copa y Supercopa de España. Y, precisamente, dentro de esta última, había un claro homenaje a un Ferran Torres que tuvo que seguirlo desde su habitación en el hospital: un tiburón de peluche.

El hecho de que todo marchara con un cierto retraso con respecto a las previsiones no provocó, ni mucho menos, que la gente perdiera la paciencia en su espera. Había muchas ganas de celebrar una temporada cargada de emociones y la sintonía que tienen los seguidores barcelonistas con este equipo es absoluta. «Hay una conexión espectacular entre la ciudad y el club. Estoy muy contento por lo que hemos conseguido este año y creo que tiene mucho mérito», señaló el capitán, Marc-André ter Stegen, en declaraciones a Barça One, el medio audiovisual oficial del club. «Hace buen tiempo, la gente tiene muchas ganas de vernos y estoy muy contento de celebrarlo con ellos», recalcó el arquero alemán. «Este equipo tiene un futuro brillante ante él, con Flick y esta generación de futbolistas. Se ha hecho un gran trabajo, espero estar aquí aún muchos años», sentenció.

Alcaraz descifra un partido feo ante Musetti y ya espera a Sinner en la final de Roma: "No era día para jugar brillante"

Alcaraz descifra un partido feo ante Musetti y ya espera a Sinner en la final de Roma: “No era día para jugar brillante”

Hay días y días, eso está claro. Hay días dulces, muchos días dulces, que no sólo acaban en celebración, también en alegría. Hay días negros, derrota y para casa. Y hay días raros, como este viernes para Carlos Alcaraz. En 2040 o más allá, cuando se retire, su palmarés dirá que se clasificó para su primera final del Masters 1000 de Roma y que lo hizo con purpurina; derrotó por 6-3 y 7-6(4) al local Lorenzo Musetti. Pero quien viera el encuentro, fuera por televisión o en el mismo Campo Centrale del Foro Itálico, no lo recordará de esa manera.

Fue una victoria fea, de las más feas que se le recuerdan, más en tierra batida. Se puede culpar al viento, se puede culpar a la pista y sobre todo se puede culpar a su rival, aunque tampoco importa ya mucho. Este domingo Alcaraz optará a su primer título en el torneo italiano, su séptimo Masters 1000, y podría hacerlo ante su rival generacional, Jannik Sinner, que aún debe medirse en la otra semifinal a Tommy Paul.

El análisis de lo ocurrido le será útil, seguro que sí, aunque quizá lo mejor es quedarse con el triunfo y olvidar. Si se desea un resumen, sirve un dato: entre los dos protagonistas acumularon 86 errores no forzados y sólo crearon 28 golpes ganadores. Hubo poco tenis y muchos nervios y si Alcaraz venció fue porque se mantuvo sereno. Su mérito estuvo ahí. Mientras Musetti se daba bofetadas en la cara, rompía una raqueta contra el suelo y clamaba al cielo, Alcaraz seguía impertérrito, como si nada. Si en cuartos de final ante Jack Draper se contuvo en la celebración de puntos preciosos esta vez tampoco tenía que machacarse.

El contagio de Alcaraz

Hizo lo que tenía que hacer y ya está. Ante él, Musetti se presentaba amenaza con el recuerdo de la final del Masters 1000 de Montecarlo, pero desde el primer punto todo se torció. Atenazado por el apoyo de su público, el italiano completó un primer set terrible, un error detrás de otro. Puede analizarse la altura de los golpes de Alcaraz o los problemas de Musetti con su revés a una mano, pero realmente su actuación nada tuvo que ver con el juego. Psicológicamente estaba perdido. Hasta que no se superó la primera hora de juego, Musetti falló casi todo y Alcaraz acabó contagiándose de ello.

Pese a la confusión de su adversario, en el primer set el español concedió un 'break' y en el segundo set empezó cediendo dos consecutivos. Fue aquello que le complicó el triunfo. Para alcanzar el tie-break definitivo, Alcaraz tuvo que batallar. La fórmula estaba clara: tranquilidad y orden en su juego. «¡Maneja el momento!», le reclamaba su entrenador, Juan Carlos Ferrero. Pero no siempre salía. Al final, pese a la mejora de Musetti, el español descifró lo que ocurrió sobre la pista y alcanzó la final en Roma.

"Ha sido un día difícil. Las condiciones, el viento... algo complicado. No era hoy día para jugar tenis brillante, sino para jugar tenis inteligente, un tenis sólido. Ir a por el punto cuando se podía. Lo hice bien, creo. Estuve fuerte mentalmente cuando las cosas no fueron tan bien", reconoció el propio Alcaraz, que ya divisa otro duelo ante Sinner. El año pasado le venció en sus tres enfrenamientos pese a la innegable coronación del italiano como dominador del circuito; esta vez, si finalmente se vuelven a encontrar, discutirán de nuevo quién es mejor.

Juan Ayuso da un golpe sobre la mesa y reina en Tagliacozzo, primera cima del Giro de Italia

Juan Ayuso da un golpe sobre la mesa y reina en Tagliacozzo, primera cima del Giro de Italia

Actualizado Viernes, 16 mayo 2025 - 17:36

Cumplido el primer tercio de carrera, en la séptima etapa (168 kms.) y primera con llegada en alto, en el frío (hacía cinco grados) y densamente verde macizo de los Abruzzos, el Giro licenció con honores a Pedersen y se abrió a una nueva dimensión: la del enfrentamiento cara a cara, codo con codo entre los favoritos.

De ese cambio de escenario y de condiciones surgió, poderoso, Juan Ayuso para imponerse a todos con un ataque fulminante a 500 metros de la meta y, en su sexta victoria de la temporada, decirles al Giro y al mundo que estaban viendo y admirando a un campeón, a un aspirante a la gran aristocracia internacional del ciclismo. No fue un puñetazo sobre la mesa, sino un martillazo que, sin llegar aún a romperla, la ha hecho temblar y casi cuartearse.

En su golpe de mano y de efecto, Ayuso no se benefició de ningún factor sorpresa. Todos los tenores estaban en el selecto grupo que afrontó el muro de dos kilómetros y medio con rampas del 13% del Tagliacozzo después de nueve kilómetros de preámbulo al 5,5% en una etapa con tres puertos previos, dos de segunda y uno de tercera.

Antes del muro habían caído ya los últimos supervivientes de una escapada de siete con Paul Double (Jayco) y Nicolas Prodhomme (Decathlon), que llegaron a ser líderes virtuales, primero y segundo, como elementos más destacados. Nunca tuvieron ninguna oportunidad real.

En la brevedad de su fulminante ataque, en la ya mismísima cresta del puerto, Ayuso (UAE) no obtuvo en términos absolutos una gran ganancia de tiempo. Pero sí en términos relativos y, en su calidad de demostración de una superioridad incontestada, simbólicos. A su compañero Isaac del Toro, a Egan Bernal (Ineos) y a Primoz Roglic (Bora), a Giulio Ciccone, a Damiano Caruso, etc., sólo les distanció en cuatro segundos, más los 10 de bonificación. Del Toro, sobre todo él trabajando para su lider, y Bernal redivivo impidieron que Roglic, a su vez, bonificara en, siquiera, una mínima medida que minimizara daños. Roglic se vistió de rosa por esos mismos cuatro segundos por delante del español y nueve sobre Del Toro. La general está, lógicamente, apretada con los 10 primeros, un Top-10 que cierra Richard Carapaz, en 39 segundos.

El beneficio de Ayuso es, sobre todo, de índole moral, de cobrar sobre sus adversarios un avance inicial que puede darles que pensar más de lo que ya habían pensado, sospechado y temido. Juan ha constatado de sobra una evidencia, justificado una hipótesis y avanzado de un modo ya nada teórico que está en Italia para ganar y, lo consiga o no, se encuentra en disposición física y anímica, y con un gran equipo que la sustenta, de intentarlo con muchos argumentos en su cabeza y muchas cartas en su mano.

Es muy pronto para sacar conclusiones, pero no para aventurar pronósticos. Juan los autoriza, aunque aún deberá refrendarlos. Quedan muchos mundos por delante y todos están en el Giro. Pero ya se ha consumido el primero. Antes del descanso del lunes, el fin de semana mantiene el atractivo con un quebrado recorrido sabatino y, sobre todo, con el "sterrato" dominical de Siena. Y cuando, el martes, regrese, ilusionante, impaciente, la carrera al asfalto aguarda una contrarreloj de 29 kilómetros llamada a establecer ya jerarquías consistentes.

El Giro no ha hecho más que empezar. Pero ¡de qué modo!

El color de la camiseta de la selección de fútbol de Brasil se convierte en eje de una batalla política: ¿podría ser roja?

El color de la camiseta de la selección de fútbol de Brasil se convierte en eje de una batalla política: ¿podría ser roja?

Actualizado Viernes, 16 mayo 2025 - 16:23

El verdeamarillo de la camiseta de la selección brasileña de fútbol ya no tiene el poder de antaño: la creciente y polarizada disputa política en el país está llevando a que amplias franjas de la población rechacen a la selección y a que la opción de una camiseta roja aparezca en el escenario.

Brasil de rojo "sería un crimen", dijo el legendario comentarista de fútbol Galvao Bueno, pero en visión de muchos, el "crimen" podría estar en vías de concretarse.

El sitio web especializado "Footy Headlines" aseguró días atrás que la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) tiene encaminado un acuerdo con la línea de ropa deportiva de Michael Jordan, Jordan Brand, que forma parte de Nike, para que la camiseta visitante a partir de 2026 sea roja, en sustitución de la azul habitual.

La CBF lo desmintió en un comunicado, pero apelando a formalidades como que las imágenes que circulan de la nueva camiseta "no son oficiales".

El asunto es objeto de un encendido debate en Brasil, porque la "seleçao" pentacampeona del mundo pocas veces estuvo tan baja en cuanto a cariño popular.

Por un lado, la selección se ve impactada por los malos resultados de los últimos tiempos, las derrotas ante la gran rival, Argentina, y el fracaso en las Copa del Mundo, donde fue campeona por última vez en Corea/Japón 2002.

Pero el mayor problema de la selección brasileña es político. Años atrás, la identificación de Neymar y la gran mayoría de los jugadores de la "canarinha" con el entonces presidente Jair Bolsonaro generó el rechazo de aquellos que no toleran al líder de la derecha extrema brasileña.

A eso se sumó la permanente utilización de Bolsonaro y sus partidarios de la camiseta verdeamarilla de la selección. De a poco, un símbolo de unidad del país comenzó a transformarse en prenda de desunión.

La posibilidad de que la camiseta visitante sea roja no contribuye, sin embargo, a solucionar el asunto, porque el color está identificado con la izquierda gobernante, el Partido de los Trabajadores (PT) de Luiz Inacio Lula da Silva.

En 1917 y 1937, durante dos campeonatos sudamericanos, Brasil debió jugar de rojo por razones de fuerza mayor, pero ya casi nadie en el país tiene presente esa anécdota.

Los defensores del Brasil "vermelho", citados por "Footy Headlines", apelan a los mismísimos orígenes de Brasil: "El nombre del país proviene de 'Pau-Brasil', un árbol nativo famoso por su intenso tinte rojo, muy apreciado por los colonizadores portugueses. En ese sentido, 'Brasil' significa literalmente 'rojo' en el contexto histórico".

La última carrera de Roki

La última carrera de Roki

Actualizado Viernes, 16 mayo 2025 - 16:22

Rokfeller de Pleville Margot, más conocido como 'Roki', es uno de los caballos más queridos en la hípica española. Pese al buen estado físico que presenta, este fin de semana será la última vez que se le verá competir, en el Longines Global Champions Tour (LGCT) de Madrid.

El LGCT, considerado la 'Fórmula 1'de la hípica, es el circuito de salto ecuestre más prestigioso del mundo. La competición recorre 16 ciudades cada año y llega al Club de Campo Villa de Madrid del 16 al 18 de mayo. Y es precisamente éste el escenario que Eduardo Álvarez y su padre -el también jinete olímpico Luis Álvarez Cervera- han elegido para despedir al caballo más longevo de la alta competición española.

Eduardo Álvarez Aznar es el mejor jinete de salto de España. Para él Roki es "uno más de la familia" y siente "orgullo de tener un caballo así y contar con él en mi cuadra". Su despedida, pese a que también le resulta algo triste, le provoca "mucha alegría, por poder retirarlo así, estando en activo, pudiendo competir al máximo nivel".

El caballo, que cuenta con unos 600 kilos de peso y 1'64 metros de altura, tiene 20 años, lo que ya es una edad elevada para estos animales. Y es ésta la razón por la que su jinete toma la decisión de distanciarlo de las carreras: "Es por la edad que tiene, no por cómo se siente, porque ni mucho menos está pidiendo una retirada. También yo quería que fuera en un sitio importante para mí y para él, un sitio como Madrid".

La mentalidad y la técnica en los saltos son esas dos claves que, según explica Eduardo, diferencian a Rokfeller del resto de caballos: "No solo es lo físico, la mente también le acompaña. Está contento cada vez que sale de casa y va a un concurso, es ahí donde de verdad saca todo su potencial. Además, tiene una forma de saltar un poco peculiar. Tiene una técnica que es muy económica, no se desgasta. No tiene que pasar muy alto por encima de los saltos, es un caballo que puede repetir mucho en competiciones. Eso y su mentalidad es lo que le ha hecho seguir tanto tiempo en activo".

El jinete Eduardo Álvarez Aznar posa con su caballo, Roki.

El jinete Eduardo Álvarez Aznar posa con su caballo, Roki.ANTONIO HEREDIA

Eduardo y Roki llevan 12 años juntos, disputando multitud de campeonatos por el mundo entero. Al jinete la hípica es una pasión que le llega desde que era un niño, al dedicarse su padre a lo mismo -quien, por cierto, es su referente-. Empezó a montar con tan solo tres años y con 17, cuando vio que "tenía que tomar la decisión de tomármelo más en serio o ya como un hobby, elegí irme a Suiza e intentarlo. Ahí estuve en las cuadras de Thomas Fuchs y a partir de eso ya fue cuando empecé mi carrera profesional". Una carrera más que consolidada, que le ha llevado a conseguir tres veces un sueño: "Poder llegar a correr en unos Juegos Olímpicos".

De la hípica lo que menos le gusta es el hecho de tener que viajar tanto, por pasar demasiado tiempo fuera de casa, aunque Eduardo antes de ver la parte negativa recuerda que de su trabajo le "gusta todo. No me puedo quejar". Y lo que más le enseña el oficio es a "tener los pies en la tierra. En el mismo día puedes ganar una prueba y en la siguiente, con otro caballo, caerte o quedarte fuera. Aprendes mucho a perder y eso es lo que de verdad te enseña, el tener que levantarte constantemente y seguir peleando y luchando por lo que más te gusta".

Con su familia, además, es algo que disfruta porque a todos les gusta y ya están empezando a competir. El caballo favorito de sus hijos es, como no, Rokfeller: "Siempre preguntan solo por él y cada vez que vienen a la cuadra es Roki el que se lleva todos los cariños y todas las zanahorias".

Aston Martin no se aclara con sus actualizaciones y Carlos Sainz vuela por detrás de McLaren

Actualizado Viernes, 16 mayo 2025 - 15:13

Después de seis carreras para el olvido, Aston Martin afronta un momento decisivo en Imola, donde estrena siete actualizaciones aerodinámicas, más que ningún otro equipo en la parrilla. Una prueba de fuego para Andy Cowell, máximo responsable del proyecto, que no puede permitirse más fiascos como los que terminaron costando el puesto a su predecesor, Mike Krack. De momento, la primera prueba, en el coche de Lance Stroll tampoco ha levantado precisamente el entusiasmo en la escudería de Silverstone.

El canadiense fue el encargado de estrenar las novedades durante la primera sesión libre del GP de Emilia Romagna, donde acabó undécimo, a 48 centésimas de la cabeza. Su ventaja sobre Fernando Alonso se cifró en apenas nueve centésimas, un margen que no permite extraer demasiadas conclusiones positivas. El bicampeón mundial, que esperará a la tarde para probar las mejoras, fue decimocuarto, justo por detrás de Charles Leclerc (Ferrari) y Andrea Kimi Antonelli (Mercedes).

El AMR25 de Stroll se presentó en el Autodromo Enzo e Dino Ferrari con un fondo plano totalmente renovado y con actualizaciones en el halo y la viga trasera. Las órdenes eran que su piloto recopilara los suficientes datos como para establecer una correlación exacta respecto a lo medido en el túnel del viento de Silverstone. Alonso, con la configuración antigua, sí pudo exprimir su rendimiento en el primer sector, donde llegó a codearse con los mejores.

Bandera roja por Bortoleto

Las curvas de alta velocidad parecen ajustarse a las características del AMR25. Sin embargo, el pobre rendimiento en las zonas lentas, como Acque Minerali y Variante Alta, supone otra vez un obstáculo. De este modo, la prioridad inmediata en Aston Martin pasa por superar a Sauber, ante quien cedieron 20 segundos hace dos semanas en Miami. De momento, Gabriel Bortoleto y Nico Hulkenberg, noveno y décimo en la tabla, volvieron a superar a Stroll y Alonso. La mala noticia para el equipo de Mattia Binotto llegó a sólo dos minutos del final, cuando el brasileño sufrió un trompo en Rivazza. Las banderas rojas precipitaron el abrupto desenlace de la sesión.

Hasta entonces, el único susto sobre el asfalto lo había protagonizado el propio Alonso, que supo esquivar un choque con Leclerc en la Variante Alta. De forma incomprensible, el monegasco se había interpuesto en su camino, pero los comisarios, tras anotar el incidente, no decretaron ninguna sanción para el piloto de Ferrari. Por una vez, Leclerc pareció más incómodo en el SF25 que Lewis Hamilton que le aventajó en casi medio segundo hasta acabar quinto.

La otra sorpresa positiva de la mañana llevó la rúbrica de Carlos Sainz, tercero en la tabla, a tan sólo 52 milésimas de Oscar Piastri (1:16.545). El consabido doblete de McLaren fue abrochado por Lando Norris, 32 milésimas más lento que su compañero de garaje en una vuelta con neumáticos usados. El piloto madrileño concretó el gran salto adelante de Williams y superó por sólo dos milésimas a George Russell, que lideró la tabla durante buena parte de la sesión. El principal problema de Mercedes pareció residir en el brutal traqueteo a la salida de la variante de Tamburello.

Aún más lejos parece haber arrancado Max Verstappen, a 36 centésimas de Piastri y encajonado entre Pierre Gasly y Alex Albon. Inmiscuirse en esa batalla por la zona media, librada entre Alpine, Racing Bulls y Haas, se antoja de momento fuera del alcance para Aston Martin.

En cualquier caso, el objetivo a medio plazo pasa por construir unas bases sólidas, tanto para este Mundial como de cara a 2026. Porque resulta altamente improbable que el peor coche de 2025 pueda evolucionar hasta convertirse en un aspirante a las victorias el año que viene. Ni siquiera con el mejor túnel del viento de la F1, Aston Martin parece capacitado para obrar el milagro.

Miguel Mateo, el español que domina el voleibol en Islandia: "Desde mi ventana veía las focas que había en mi puerta"

Miguel Mateo, el español que domina el voleibol en Islandia: “Desde mi ventana veía las focas que había en mi puerta”

«En uno de mis primeros días en Islandia, en Neskaupstadur, un pueblo de apenas 1.500 habitantes, aparecieron renos por las calles y trabajo hubo para que se marcharan. Era un lugar increíble, los paisajes eran una salvajada. El club me dejó un apartamento que estaba en primera línea de mar y desde mi ventana veía las focas que estaban abajo. No era habitual que hubiera deportistas extranjeros y me invitaban a hacer de todo, a ir en moto de nieve, a pasear en barco...», comenta Miguel Mateo y la pregunta es: ¿Por qué Islandia?

Para responder habría que hablar de la eterna crisis del voleibol en España, de su desplome con la construcción en 2008 o de la mala gestión de su Federación, pero resume mejor un dato que aporta él mismo: «Aquí mi sueldo es muchísimo más alto».

Mateo fue el máximo anotador español de la Superliga en 2015, sólo superado en la lista por el brasileño Guilherme Pereira Maxon, pero poco después se quedó sin contrato y no le quedó más remedio que emigrar. Antes que él unos técnicos españoles se habían lanzado a la aventura allá arriba, le llamaron y las condiciones de su contrato no se podían ni comparar. Acompañado de su pareja, Paula del Olmo, de repente se encontró entre renos y focas.

Doble campeó de Liga

Hoy, casi una década después, allí continúa, convertido en emblema del Akureyri. Entrena y juega en el equipo masculino, vigente campeón de Liga, y dirige al equipo femenino, donde juega Del Olmo, también dominador nacional. «Es curioso porque aquí el voleibol es un deporte de moda entre los padres cuarentones. El fútbol y el balonmano son los reyes, no hay duda, pero hay muchos torneos y muchos equipos para veteranos. Digamos que es como el pádel en España», cuenta y expone una prueba. En un país de 300.000 habitantes, el pasado fin de semana se disputó una competición senior con más de 2.000 jugadores inscritos.

Lo peor, imagino, será el frío.
Soy de Valladolid y allí lo paso peor cuando voy en Navidad. Aquí en Islandia el frío es seco, no tiene humedad, y los sitios están muy bien aclimatados, siempre se mantienen a unos 23 grados. Akureyri está muy al norte, cerca del círculo polar ártico, pero en el fiordo está protegida de los vientos. Incluso en invierno no hay tantos días que bajemos de -5 grados. Es una ciudad pequeña [20.000 habitantes, la cuarta mayor del país], pero muy curiosa, vive mucho del mar.

Como ocurre en tantas y otras vivencias, Mateo fue a Islandia a probar durante un año y ha acabado echando raíces hasta el punto de que junto a Del Olmo han sido padres y han aprendido el idioma. Según comenta, las ayudas a la crianza son «brutales», aunque el impuesto medio sobre la renta ronda el 39%. Pese a que casi todos los productos del supermercado son importados y carísimos, la relación con su sueldo le compensa. Su adaptación ha ido tan allá que ha tenido que moldear su carácter para encajar con los jugadores y jugadoras que dirige.

«En España y muchos otros países latinos los entrenadores se dirigen a su equipo con agresividad y aquí eso no funciona. De hecho, está muy mal visto. Yo era un poco así, pero tuve que cambiar. Aquí no vale eso de gritar '¡Venga, cojones!'. Aquí hay que poner siempre una sonrisa, ser positivo, proponer una mejora en lugar de subrayar un error», analiza Mateo al que empezaron apodando «matador», por su capacidad anotadora, pero al que ahora todos dicen «cari», porque así le llama su pareja.

"Aquí entre tres y cinco años más"

De Valladolid, a los 17 años ya se trasladó a Elche para perseguir su sueño de vivir del voleibol y luego pasó por varios destinos: Soria, Cabezón de la Sal, Lugo o Castellón. Antes de marcharse a Islandia llegó a tener una oferta para jugar en el Barcelona, una sección del club de fútbol que pese a ello nunca ha ganado la Liga, pero la salida era mucho mejor opción.

«El nivel deportivo no es muy alto, pero las condiciones económicas sí lo son. De hecho, ahora hay ocho jugadores españoles en la Liga islandesa. Cuando hablo con mis amigos que siguen en la Superliga veo que es muy complicado ser profesional del voleibol en España. Algunos se marchan a Francia o Alemania, pero Islandia es un gran lugar», proclama y finaliza: «Estaremos aquí entre tres y cinco años más. Todo el mundo nos trata muy bien».