Ansu Fati inicia su enésimo retorno

Ansu Fati inicia su enésimo retorno

Actualizado Miércoles, 11 septiembre 2024 - 19:15

El 7 de noviembre se cumplirán ya cuatro años de una lesión que cortó de raíz la progresión de un jugador que se atrevió a heredar el 10 de Leo Messi. Desde entonces, el camino de Ansu Fati, llamado hasta entonces a convertirse en el nuevo gran ídolo de la afición azulgrana, mucho antes de que Lamine Yamal irrumpiera en escena, ha estado plagado de baches. En el arranque de la pretemporada, sus ganas e ilusión por hacerse con un puesto en el nuevo Barça de Hansi Flick provocaron que el técnico valorara muy positivamente sus opciones.

No obstante, una lesión en la planta del pie derecho, cuando mejor parecían irle otra vez las cosas, le recordó el lado más amargo del fútbol. Esta misma semana, por fin, ya ha podido entrenarse con el grupo y, si todo va bien, incluso podría tener minutos contra el Girona este domingo en Montilivi.

En sus comienzos con el primer equipo, de la mano de Ernesto Valverde, parecía estar tocado por una varita mágica. Fue todo un soplo de aire fresco y, además, también logró marcar goles decisivos para los suyos. Por eso, no es nada raro que el actual técnico del Athletic propiciara su estreno con el primer equipo cuando aún tenía 16 años.

7 de noviembre de 2020

El 26 de septiembre de 2021, en su primer regreso desde los infiernos, ya con Ronald Koeman como entrenador azulgrana, volvió a evidenciar esa suerte de toque especial. Después de haber pasado por hasta cuatro operaciones de rodilla para olvidar de una vez por todas ese 7 de noviembre de 2020, vivió un retorno al césped de ensueño.

Saltó al terreno de juego como relevo de Luuk de Jong a falta de nueve minutos para que se cumpliera el tiempo reglamentario y, tras firmar varias acciones de mérito, culminó su reestreno con un gol que sellaba el definitivo 3-0 ante el Levante. A su padre, Boti Fati, incluso se le escaparon algunas lágrimas de emoción cuando el joven atacante subió a la grada para fundirse en un abrazo con el doctor Lluís Til, a quien consideraba como el gran artífice de su retorno.

La alegría, a pesar de todo, volvió a serle esquiva. Un mes después, se resintió otra vez de molestias en la rodilla. Y, posteriormente, encadenaría una serie de problemas musculares que, unidos a otros condicionantes físicos, le llevarían a permanecer en el dique seco 162 días más.

Cláusula de 1.000 millones

En la temporada 2022-23, con Xavi Hernández como máximo responsable del banquillo, las lesiones parecieron darle tregua: únicamente se perdió dos partidos por este motivo, con un total de seis días de baja por una contusión en la rodilla. Su papel en el equipo, pese a ello, no fue aquel que parecía llamado a tener en sus primeros días. El de Terrassa contó mucho con él y llegó a alinearlo en 51 partidos de una campaña en la que los azulgrana se hicieron con la Liga y con la Supercopa de España, pero partiendo casi siempre desde el banquillo. Únicamente formó parte del once titular en 13 ocasiones. Y su rendimiento, cómo no, también se resintió. En total, marcó 10 goles, siete de ellos en la Liga, dos en la Copa del Rey y uno en la Supercopa de España, y repartió cuatro asistencias, todas en el torneo de la regularidad.

El curso pasado, el club decidió buscarle una salida en forma de cesión a un jugador que, en octubre de 2021, el día en que se hizo oficial la última ampliación de su contrato como azulgrana y su decisión por lucir el 10 de Messi, había visto cómo su cláusula de rescisión se catapultaba hasta los 1.000 millones de euros. Entonces, parecía llamado a ser el relevo del gran ídolo, quien había vivido una traumática salida de la entidad ese mismo verano. Su paso por el Brighton no fue todo lo bien que habría desado. Con el equipo inglés jugó 27 partidos, 19 de ellos en la Premier, seis en la Europa League, uno en la Copa y uno en la Copa de la Liga, casi siempre saliendo desde el banquillo, y anotó un total de cuatro goles.

Una lesión en el gemelo derecho, en este caso, provocó que se perdiera un total de 14 encuentros y removió viejos fantasmas que, ahora, quiere exorcizar de una vez por todas en el Barça.

La caótica política de fichajes de Laporta en su segunda etapa: sólo continúan ocho de los 25 contratados

La caótica política de fichajes de Laporta en su segunda etapa: sólo continúan ocho de los 25 contratados

Actualizado Martes, 27 agosto 2024 - 04:04

El Barcelona vive una realidad aún muy complicada. Los problemas económicos que acumuló la entidad en la última etapa del mandato de Josep Maria Bartomeu siguen, a día de hoy, condicionando la configuración de la plantilla barcelonista. Fichar se ha convertido en algo mucho más complicado. Y, además, bien por el hecho de que el rendimiento de algunas incorporaciones no ha sido el esperado, bien porque la caja obliga a ello o bien por otras circunstancias del todo inesperadas, muchas de las contrataciones que se han cerrado a lo largo de esta segunda era de Joan Laporta han pasado de manera fugaz.

De los 25 jugadores que se incorporaron al primer equipo desde el curso 2021/22, el primero completo con el actual máximo dirigente azulgrana al frente de la entidad tras su triunfo en las elecciones de marzo de 2021, sólo ocho siguen formando parte de la plantilla que ahora tiene a su disposición el alemán Hansi Flick. Sólo sobreviven el 32% de los fichados.

En el verano de 2021 se incorporaron a la entidad barcelonista Eric García, Memphis Depay, Sergio Agüero, Yusuf Demir y Luuk de Jong. El argentino tuvo que retirarse de manera abrupta, después de que se le detectaran problemas cardíacos, y Yusuf Demir, pese a firmar un arranque de pretemporada prometedor, se fue diluyendo en los planes del entonces técnico, Ronald Koeman, condicionado por los 10 millones de euros que debía pagar el club si el austríaco jugaba más de 10 partidos. En enero de 2022, ya con Xavi Hernández en el banquillo, llegaron Ferran Torres, Adama Traoré, Dani Alves, incorporado meses antes, pero inscrito entonces, y un Pierre-Emerick Aubameyang, que le dio otro aire al ataque azulgrana. De todas estas incorporaciones, sólo Ferran Torres y Eric García se mantuvieron en la plantilla con vistas a un curso 2022/23 precedido por un verano tremendamente movido en los despachos por la llegada de nuevas incorporaciones.

Entonces, el Barcelona fichó a Raphinha, Jules Koundé, Andreas Christensen, Franck Kessié, Héctor Bellerín, Marcos Alonso, Pablo Torre y Robert Lewandowski, y refichó a Ousmane Dembélé, que había finalizado su compromiso con el club y estaba sin equipo.

Muchos de esos jugadores llegaron a coste cero o a precio muy asequible, pero el club tuvo que rascarse el bolsillo para contratar al extremo brasileño, al central francés y al delantero polaco, activando, para ello, una serie de palancas económicas.

Ese curso, en cambio, no habría ninguna incorporación en la ventana invernal para un conjunto que lograría hacerse con la Supercopa de España y con la Liga. De toda esa retahíla de incorporaciones, Kessié, Bellerín, Marcos Alonso y Dembélé (se marchó al PSG a cambio de 50 millones de euros, de los cuales unos 35 fueron para el club y el resto para el bolsillo del jugador) hicieron las maletas en un verano en el que el Barça tuvo que devanarse los sesos para que llegaran nuevos jugadores a la plantilla.

Para la campaña 2023/24, la que sería la última de Xavi Hernández al frente del banquillo, se cerraron los fichajes de Íñigo Martínez, Oriol Romeu, Ilkay Gündogan y Vítor Roque, quien debía llegar al club el pasado mes de julio, pero cuyo aterrizaje se adelantó al mercado de invierno, y se pactaron además las cesiones de Joao Cancelo, por parte del Manchester City, y de Joao Félix, procedente del Atlético de Madrid. También se recuperó a Fermín. Este verano, Gündogan, que poseía una de las fichas más altas, ha optado por volver al Manchester City, liberando así masa salarial, Oriol Romeu ha sido cedido al Girona, Vítor Roque, al Betis, tal y como oficializó este lunes el club. También se cerró la cesión de Lenglet al Atlético. El Barça ha optado por no buscar fórmulas que permitieran mantener a Cancelo o Joao Félix y, además, ha sellado la venta de Mika Faye al Rennes francés por 10,3 millones de euros. Faye pertenecía al filial pero su venta se ha computado en el global de la primera plantilla.

De todos los fichajes del verano de 2023, sólo Íñigo Martínez, imprescindible para el técnico alemán, sigue en el club. A última hora de la tarde de este lunes, el Barcelona encontró una fórmula para inscribir a Dani Olmo, ausente en los dos primeros partidos de campeonato. LaLiga permitirá la operación por la baja de larga duración de Andreas Christensen, tal y como ya hizo con Iñigo Martínez aprovechando la lesión de Ronald Araujo. «Si un futbolista no juega, no está contento. Pero si está en la lista estará al 100%», había comentado Flick sobre Olmo antes de conocerse la noticia de que podría ser finalmente inscrito.

El ex polivalente jugador del Leipzig y uno de los hombres destacados de la selección española que ganó la Eurocopa no disimuló su malestar el pasado sábado en Montjuïc, cuando vio el partido desde la grada después de tener que ser excluido a última hora de la lista de convocados.

Este martes, el Barça se enfrenta al Rayo Vallecano (21.30 horas) en el feudo de un equipo madrileño que se ha reforzado con la contratación del colombiano James Rodríguez, ex del Real Madrid.

Hansi Flick: el último extranjero novato en el potro de tortura

Hansi Flick: el último extranjero novato en el potro de tortura

Actualizado Miércoles, 14 agosto 2024 - 23:58

Hansi Flick se convertirá este sábado en el último técnico extranjero que se estrena en el fútbol español. Lo hará desde el banquillo de un Barcelona que en los últimos años ha sido una montaña rusa de emociones. Y, también, un potro de tortura. Dos leyendas de la entidad azulgrana, Ronald Koeman y Xavi Hernández, acabaron triturados por la exigencia de un puesto para el que no se tiene memoria. Ni paciencia. El primero, dejó la entidad por la puerta de atrás tras ganar una Copa del Rey. El segundo fue despedido tras sumar una Liga y una Supercopa de España y poco después de ser ratificado en su cargo.

El banquillo azulgrana supone un desgaste tremendo. Incluso a nivel físico. Basta con ver fotografías de Pep Guardiola, Luis Enrique o Ernesto Valverde, al inicio y al final de sus respectivas etapas, para comprobarlo de manera tremendamente esclarecedora. Para esta entidad que el primer equipo cierre una temporada en blanco es imperdonable. A sus seguidores no les importa lo más mínimo que la caja del club esté atravesando por un largo proceso de recuperación. Algo que condiciona las operaciones que pueden llevarse a cabo para conseguir los refuerzos adecuados para pelear por todo. Por lo pronto, el club ha cerrado este verano, hasta ahora, únicamente dos llegadas: Pau Víctor y Dani Olmo. Y, al menos hasta ayer, ninguno de los dos estaba convenientemente inscrito para jugar el sábado ante el Valencia en el estadio de Mestalla.

Cambios en el estilo

Las lesiones de Pedri o Frenkie de Jong, la Eurocopa y los Juegos Olímpicos han provocado que Flick se viera obligado a afrontar los primeros amistosos sin muchos jugadores clave. Y, cuando por fin pudo contar con algunos de ellos, sobre todo con uno que ha tomado tanta trascendencia como Lamine Yamal, llegó la derrota más dura y clara. Con el 0-3 encajado ante el Mónaco, el alemán escuchó los primeros pitos de una grada que va a ser muy exigente. Desde el primer minuto. Los seguidores barcelonistas quieren victorias y buen juego, y les trae sin cuidado que el libro de estilo del ex entrenador del Bayern (bajo su dirección derrotó 2-8 al Barcelona en la Champions de 2020) y de la selección germana (estuvo desde 2021 a 2023) tenga en principio poco que ver con aquello a lo que se han acostumbrado en las últimas décadas.

La preparación física es vital para un entrenador que exige a los suyos que desplieguen una presión asfixiante por todo el terreno de juego. Por eso, las cargas de trabajo están siendo muy fuertes. Ante el Mónaco, los azulgrana parecieron no tener fuelle suficiente durante muchos minutos. Puede que su equipo vaya a ir de menos a más. Pero, aun así, ganar ante el Valencia es vital. Si no, descubrirá muy pronto la peor cara de ser técnico azulgrana.

Flick, de verdugo en el doloroso 2-8 de Lisboa a nuevo entrenador del Barça

Flick, de verdugo en el doloroso 2-8 de Lisboa a nuevo entrenador del Barça

Actualizado Miércoles, 29 mayo 2024 - 13:50

En 2020, en aquellos singulares cuartos de final de la Champions que nacieron fruto de la pandemia de Covid 19, Hansi Flick (Heidelberg, Alemania, 1965), fue el estratega que condujo al Bayern a infligirle un aún doloroso 2-8 al Barça que borró, de un plumazo cruel, todas sus esperanzas de volver a alcanzar el máximo cetro europeo.

Ahora, cerca de cuatro años después, llega precisamente al banquillo del club azulgrana como relevo de Xavi Hernández con la vitola de nuevo salvador, después de que el equipo cerrara la temporada en blanco. Su misión: relanzar a un club en el que la exigencia no entiende de números, por muy maltrechas que sigan las arcas de la entidad que preside Joan Laporta, y cuya afición, en su mayoría, exige siempre que los buenos resultados vengan acompañados también de buen juego. Para la que el cómo, al fin y al cabo, importa tanto cómo el qué. Ahí es nada.

Si miramos únicamente el rendimiento deportivo, muchos no dudan en señalar que Flick es el mejor entrenador de la historia del Bayern, por mucho que aterrizara en el banquillo del conjunto bávaro como asistente de Niko Kovac en verano de 2019. Tras la marcha de Kovac, el 3 de noviembre de ese mismo año, fue promovido como técnico interino, pero su rendimiento le llevó a ganarse una ampliación de contrato hasta 2023 que se hizo efectiva en abril de 2020.

Ese año, el club alemán ganó el primer sextete de su historia, tras hacerse primero con la Champions y la liga y la Copa alemanas en la campaña 2019-20 y sumarles acto seguido la Supercopa de Europa, la germana y el Mundial de Clubes.

En abril de 2021, con su equipo lanzado otra vez a por el título liguero, anunció que dejaría la entidad para ponerse a los mandos de la selección alemana una vez disputada la Eurocopa, dado que le había quedado una suerte de espinita clavada, tras haber ejercido como asistente de Joachim Löw entre 2006 y 2014.

En su breve pero intensa etapa como técnico del Bayern conquistó un total de siete trofeos, únicamente perdió siete encuentros y consiguió que el equipo muniqués fuera el primero en la historia en hacerse con la máxima competición europea ganando todos los partidos que disputó. Y, además, estableció todo un récord en el fútbol germano, con una racha victoriosa de 23 partidos seguidos en todas las competiciones entre el 16 de febrero de 2020 y el 18 de septiembre de ese mismo año.

A nivel ofensivo, finalmente, su equipo, que contó con los servicios de un Robert Lewandowski que defiende desde verano de 2022 la elástica azulgrana, fue capaz de firmar una media de unos tres goles a favor por partido, con un porcentaje de victorias del 83%.

Su paso por la Mannschaft, como relevo a todas luces del propio Löw, no obstante, no fue tan exitoso como parecía prometer su currículum, por mucho que lograra mantenerse invicto en sus diez primeros partidos al mando de la selección. La actuación alemana en el Mundial de Qatar le puso en el disparadero y tras encadenar tres derrotas, Flick terminó por ser despedido el 10 de septiembre del año pasado.

Futbolista

Como futbolista, mientras, tras iniciarse en serio con en el SV Sandhausen, el club profesional más pequeño de Alemania, pasó la mayor parte de su carrera precisamente en un Bayern con el que ganó cuatro ligas, una Copa y una Supercopa alemanas. Si bien vivió la decepción de caer ante el Oporto en la final de la Copa de Europa de la campaña 1986-87.

Posteriormente, estuvo tres temporadas en el Colonia y acabó por poner fin a su carrera en el modesto Victoria Bammental, donde, en la recta final de su carrera, llegó a ejercer como entrenador-jugador. En su caso, el banquillo empezó a seducirlo antes incluso de colgar las botas. Ahora, el Barça espera que su mejor perfil como técnico le ayude a recuperar sensaciones que, pese a todo, tampoco son tan lejanas.

Flick se prepara para entrar mientras Xavi ultima su salida del Barça

Flick se prepara para entrar mientras Xavi ultima su salida del Barça

Actualizado Martes, 28 mayo 2024 - 15:50

El Barça vive este martes una jornada de entradas y salidas. Por un lado, Hansi Flick ya está en Barcelona para acelerar su contratación como nuevo técnico azulgrana. Y por el otro, mientras tanto, su predecesor en el cargo, Xavi Hernández, está ya negociando los términos de su marcha de la entidad. El egarense volvió a recalcar el pasado sábado, después de que el presidente, Joan Laporta, le comunicara que no iba a seguir en la entidad más allá del próximo 30 de junio, que su desvinculación no iba a ser precisamente traumática.

Sin mencionarlo, pidiendo que se tirara de hemeroteca, recordó que estaba dispuesto a perdonar su último año de contrato para que esas cantidades se invirtieran en la contratación de su relevo. Y ese, según se señala desde el entorno barcelonista, será su gesto a nivel personal. La liquidación de sus ayudantes, en cambio, sí rondará aproximadamente la cantidad pactada para el próximo curso.

En total, Xavi estaría dispuesto a perdonar al club una cantidad que rondaría los diez millones de euros. Los miembros de su staff, con una situación menos acomodada desde el punto de vista económico, sí percibirían unas cantidades más cercanas a las que el club iba a pagarles por sus servicios la temporada que viene. El golpe a las maltrechas arcas barcelonistas, con todo, será muchísimo menor en comparación a lo que habría supuesto que el egarense se enrocara en lo establecido en su contrato. Según insistió el propio ex capitán en su rueda de prensa del pasado sábado, siempre se ha considerado un hombre de club. Y por tanto, está más que dispuesto a obrar en consecuencia. Incluso, según señaló, mostrándose a regresar al banquillo en el futuro si la entidad cree necesario volver a contar con sus servicios.

Flick, a la espera de ser oficial

Mientras las negociaciones para la desvinculación de Xavi y su staff se llevaban a cabo en la ciudad deportiva del Barça, Flick esperaba pacientemente el momento para que la entidad pudiera hacer oficial su fichaje. El alemán, establecido en un céntrico hotel de la capital catalana, firmará en principio un contrato por dos temporadas y llegará al club junto con dos ayudantes, Toni Tapalovic y Marcus Sorg. El objetivo es poder trabajar en serio en la configuración de la plantilla para la temporada que viene lo antes posible, si bien el actual director deportivo, Deco, ya tendría hechos gran parte de los deberes. La propia entidad, mientras, se encargaría de asignarle también un técnico que pueda hacer de enlace con el resto de la plantilla, a pesar de que varios de los pesos pesados, como Ter Stegen, Gündogan o Lewandowski, lo conocen bien por haber estado bajo su mando o bien en la selección germana o bien en el Bayern de Múnich.

La entidad que preside Joan Laporta, mientras, ya ha hecho oficial la renovación de un joven jugador del filial que tuvo varias opciones en el primer equipo de la mano de Xavi: Héctor Fort. El joven lateral, quien suele moverse por la banda derecha por mucho que el egarense apostara en la mayor parte de partidos en los que lo alineó por resituarlo en la izquierda, ya ha rubricado un nuevo compromiso con el club que se prolongará hasta el 30 de junio de 2026. En total, el defensa disputó a lo largo de la temporada 2023-24 ocho partidos con el primer equipo azulgrana: el de su estreno, ante el Amberes en la Champions, siete más de Liga y dos de Copa.

El Barça se despide de Xavi con victoria

El Barça se despide de Xavi con victoria

Actualizado Domingo, 26 mayo 2024 - 23:15

El Barça se despidió de Xavi con una victoria en la que mostró gran parte de todo lo malo y lo bueno que ha tenido el equipo esta temporada. Por un lado, logró ponerse dos veces por delante en el marcador, gracias a los goles de Lewandowski y Fermín, pero también dejó demasiado vivo a un Sevilla que igualó en primera instancia el marcador con el solitario tanto de En-Nesyri y a punto estuvo de lograrlo por segunda vez volcándose en el área barcelonista en la recta final del partido. En esta ocasión, por lo menos, la zaga azulgrana mantuvo una cierta solidez y Ter Stegen firmó también varias intervenciones de mérito para asegurar finalmente el triunfo de los suyos.

Barça y Sevilla firmaron una primera parte entretenida, como si unos y otros quisieran dejar un buen sabor de boca en las despedidas de sus respectivos técnicos. Porque, además del último partido de Xavi al frente de los suyos, era también el último de Quique Sánchez Flores en el banquillo sevillista. Los azulgrana golpearon primero, con un remate de Lewandowski casi con los tacos a centro de Cancelo que se coló en la portería de Nyland cuando aún no se habían completado los primeros 15 minutos del duelo. Los locales, lejos de dejarse intimidar, respondieron con contundencia y acabaron encontrando el gol del empate con un pase a la espalda de la zaga barcelonista de Soumaré que En-Nesyri se encargó de enviar al fondo de las mallas.

Poco antes de la igualada de los sevillistas Ter Stegen tuvo que emplearse a fondo para evitar un buen remate de Lukébakio. Y lo mismo haría en su área Nyland para frustrar sendos remates de Pedri y Cancelo. Tanto el canario como el portugués, además, enviarían sendos disparos al marco de la portería local, convenientemente contestados a su vez por un potente remate de cabeza del propio Lukébakio que se estrelló contra el poste derecho de la portería azulgrana. Y, entre toda esta retahíla de ocasiones, también tuvo tiempo En-Nesyri para pedir penalti por una acción de Cubarsí que ni el árbitro ni el VAR consideraron como tal.

Dedicatoria

Tras el descanso, el duelo mantuvo el ritmo trepidante de los primeros 45 minutos, con unos y otros amenazando con romper la igualada. Los que lo lograron, en este caso, fueron de nuevo los azulgrana, con una acción personal tras pase de Gündogan de Fermín que el onubense culminó desde lejos con un duro disparo ante el que nada pudo hacer Nyland con poco más de media hora por delante para que se cumpliera el tiempo reglamentario. El canterano, además, corrió para dedicarle el tanto a un Xavi que ha apostado seriamente por él en esta temporada que ya ha llegado a su fin. Hasta tal punto, que no sería extraño verlo en la lista definitiva de la Roja para la Eurocopa.

Con el 1-2 en el zurrón, el Barça se estiró un poco más en busca de la sentencia definitiva. La mejor ocasión, con todo, la tendría el Sevilla, por medio de un disparo de Pedrosa que obligó a Ter Stegen a lucirse. Una acción que, unida a la falta de contundencia de los azulgrana a la hora de matar el partido, acabó por permitir que el Sevilla volviera a creer en el empate. Una fe recobrada que, pese a su insistencia en la recta final del encuentro, no tuvo recompensa.

Xavi deja la puerta abierta a un posible regreso en el futuro

Xavi deja la puerta abierta a un posible regreso en el futuro

Actualizado Sábado, 25 mayo 2024 - 13:59

Con la conciencia muy tranquila y orgulloso de la labor que ha llevado a cabo en el Barça. Así es como Xavi quiere despedirse, otra vez, del club de su vida. Dejando, eso sí, la puerta abierta para un posible regreso y deslizando también que no acaba de estar de acuerdo con la decisión que ha tomado el presidente, Joan Laporta, por mucho que tenga que respetarla. "El presidente me transmitió por qué cree que el club necesita un cambio de rumbo, en este caso de entrenador, y no me queda otra que aceptarlo. Soy un hombre de club y siempre estaré a disposición de lo que necesite el Barça. Deseo lo mejor a todos, sobre todo a los jugadores, que deben ser los protagonistas para que esto siga rodando", señaló.

"Hasta el día de hoy, seguía motivado, ilusionado y con la ambición intacta. Creía en la plantilla, en que podíamos hacer cosas interesantes, cambiando pequeñas cosas, pero no ha podido ser", recalcó un Xavi al que, a pesar de todo, le gustaría poder volver al banquillo azulgrana en un futuro. "¿Por qué no? Me gustaría, claro. Es el club de mi vida. Lo he disfrutado y también lo he sufrido, hemos pasado una montaña rusa de emociones, pero no me cierro la puerta, ni mucho menos. Ojalá se dé la posibilidad de volver", apuntó el técnico, quien apostilló que sigue dispuesto a renunciar a cobrar su último año de contrato. "Lo que dije en su momento, así será. Sois periodistas, buscadlo, no lo voy a repetir", aseguró. Hace prácticamente un mes, en una rueda de prensa muy diferente, en la que se confirmaba su continuidad, dejó claro que, si se iba, no iba a cobrar ni un euro y que ese dinero podía destinarse al nuevo entrenador.

En su discurso, dejó entrever que está algo dolido por las formas, por mucho que respete la decisión del presidente. "Soy un hombre de consenso ,y ,sobre todo, un hombre de club. Me he adaptado a las circunstancias que, por desgracia, tenemos ahora. El presidente me dio sus razones y no me queda otra que aceptarlas. Laporta es el que toma las decisiones", insistió, para recalcar poco después que es el máximo dirigente quien debe exponer sus motivos. "Las razones son suyas, no mías, y, a partir de aquí, sólo me queda aceptarlas. Creo que debería explicarlas él mismo", apuntó. "No he de valorar si es justa o no esta decisión, saben mi opinión, he sido muy claro siempre. No es bueno que opine de si es bueno o malo, quiero marcharme en paz, agradecido. La palabra es agradecimiento por haber podido servir al club que quiero", zanjó.

Laporta despide a Xavi antes del último partido ante el Sevilla

Laporta despide a Xavi antes del último partido ante el Sevilla

Actualizado Viernes, 24 mayo 2024 - 15:07

La última temporada de Xavi al frente del Barça pasará a la historia como todo un esperpento. Finalmente, después de que el técnico anunciara en enero que dejaría el club al término de la presente temporada para dar marcha atrás hace un mes, ha sido el presidente, Joan Laporta, quien ha optado por romper la baraja. Al mediodía de este mismo viernes, el máximo dirigente barcelonista acudió a la ciudad deportiva Joan Gamper, donde se encontró con el vicepresidente primero, Rafael Yuste, y el director deportivo, Deco, y, en una reunión en la que participaron tanto el propio técnico como sus asistentes, su hermano Òscar Hernández y Sergio Alegre, le comunicó que no dirigirá al equipo el curso que viene. El duelo ante el Sevilla del próximo domingo en el Sánchez-Pizjuán será así el último al frente del banquillo azulgrana del egarense, quien llegó como el gran salvador tras el despido de Ronald Koeman y que, la temporada pasada, logró hacerse tanto con la Liga como con la Supercopa de España.

El rendimiento del equipo en esta campaña que está ya a punto de terminar, no obstante, cayó en picado en comparación con el curso anterior. Sobre todo, en la faceta defensiva. Un hecho que se tradujo en múltiples tropiezos, muy especialmente en Montjuïc, que llevaron a Xavi a anunciar el pasado mes de enero que dejaría de ser el entrenador del Barça el 30 de junio. Su decisión, según explicó el propio técnico, iba destinada a destensar el ambiente, que consideraba tremendamente enrarecido, y liberar a sus jugadores. Los resultados, a pesar de todo, no acabaron de ser totalmente satisfactorios. Y, después de que el siempre variable entorno barcelonista se llenara de ilusión con la posibilidad de alcanzar las semifinales de la Champions eliminando al PSG, tras vencer por 2-3 en la ida, y recortar distancias con el Real Madrid en la Liga ganándole en el clásico del Bernabéu, el desenlace fue durísimo.

Para saber más

Los franceses, a la postre, se impusieron en Montjuïc por 1-4, en un duelo en el que Xavi se quejó mucho de la actuación arbitral y acabó siendo expulsado, y el Real Madrid prácticamente sentenció el título de Liga con un 3-2 que al técnico barcelonista le pareció claramente injusto. Con ese panorama, todo invitaba a pensar que su salida de la entidad iba a precipitarse. Pero, al final, después de que trascendiera que estaba dispuesto a dar marcha atrás y continuar, el presidente, Joan Laporta, según se ha señalado en el entorno azulgrana incluso desoyendo a una parte de su junta, acabó por sentarse a su lado ante los medios para congratularse por su cambio de idea. Es más. El presidente incluso aseguró que se apostaba por un proyecto ganador y lanzó una arenga claramente favorable al egarense. «Para el club es un orgullo tener un entrenador de la calidad humana, los conocimientos y el barcelonismo incontestable que tiene Xavi», apostilló.

Cambios

Un mes después, no obstante, sus sensaciones son muy diferentes. Según se filtró la semana pasada, al presidente no le gustaron ni un ápice unas manifestaciones de Xavi en rueda de prensa en las que el entrenador señalaba las dificultades que iba a tener el club para reforzarse el verano que viene y dejaba caer que haría falta tiempo para competir de tú a tú con el Real Madrid y otros grandes de Europa. El runrún de que el máximo dirigente barcelonista iba a cortar por lo sano empezó a sonar con mucha fuerza, mientras el técnico aseguraba que a él no le habían dicho nada al respecto. Tras la victoria ante el Rayo, se produjo una breve reunión entre el egarense y el propio Laporta, en la que se emplazaron para hablar más adelante. En los últimos días, se apuntaba que la comunicación definitiva de si iba a seguir o no en el banquillo no tendría lugar hasta principios de la próxima semana. Los hechos, no obstante, han acabado por precipitarse.

Xavi, hace un mes, aseguró que no iba a protagonizar una nueva espantada y que cumpliría su contrato. Apostillando, eso sí, que así sería si el club no optaba por destituirlo. Un hecho que, entonces, parecía poco probable y que se ha transformado en realidad. Su relevo, en este caso, será un Hansi Flick con el que ya habría un principio de acuerdo en que su actitud habría sido también definitiva, comunicando incluso estaba dispuesto a esperar a que todo se aclarara, pese a tener sobre la mesa otras ofertas. En los próximos días, según ha apuntado la entidad, se dará a conocer la estructura técnica del primer equipo para la temporada que viene.

Después de Xavi, Laporta será el siguiente

Después de Xavi, Laporta será el siguiente

Xavi Hernández no había podido estabilizar al Barça en el terreno de juego, y el propio entrenador lo sabía, superado, además, emocionalmente por el puesto. La dimisión en diferido fue una explosión en busca de una salida después de meses de implosión. El error fue reconsiderarla. Por parte del entrenador y, sobre todo, por parte del presidente. Joan Laporta lloró después de la 'paz del sushi', donde sellaron su continuidad, y días después estall

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La Liga deja un duro dilema para Xavi y Simeone: ¿Qué hacer frente al Madrid que viene?

La Liga deja un duro dilema para Xavi y Simeone: ¿Qué hacer frente al Madrid que viene?

Desde que el Madrid se proclamó campeón de Liga, cinco jornadas antes del final, ha marcado 16 goles en cuatro partidos, con tres victorias y un empate, y únicamente cuatro tantos encajados. No se jugaba nada, por lo que Ancelotti ha alternado titulares y suplentes, ya en la vigilia de la finalísima de Wembley. Suplentes como Brahim, nueva estrella de Marruecos; Joselu, internacional con España, o Güler, con maniobras y goles que indican que nos encontramos ante algo tan misterioso como grande. A ellos hay que añadir al suplente Modric, que no necesita definición.

La nueva condición del croata es una prueba de la creciente competitividad interna del equipo. Tan cierto es que tiene 38 años como que su fútbol sigue vigente, hecho que le acerca a una renovación más en el Bernabéu, especialmente ante el vértigo de un «no» de Kroos. El peso que han tenido ambos futbolistas en el mando del gran Madrid europeo del último decenio es lo más difícil de sustituir en el futuro, porque no hay réplicas en el mercado. Son al Madrid lo que fueron Xavi e Iniesta al Barça. Con más o menos fútbol, sin embargo, el Madrid ha reforzado su centro del campo con un perfil más físico y jugadores jóvenes, como Valverde, Camavinga, Tochuaméni o Bellingham. Piezas muy polivalentes, como se ha demostrado ante la plaga de lesiones que afectó a la defensa, sin que el club decidiera buscar alternativas.

La portería soportó la baja de Courtois con la aparición de Lunin, mientras que futbolistas como Carvajal o Vinicius encontraron su mejor versión para liderar a un Madrid capaz de resistir como de atacar. Hace años que no se recuerda una versión del equipo con menos puntos débiles. Puede ser que más brillantes, pero no tan sólidas.

Vinicius y el Balón de Oro

A ese equipo es al que llegará Mbappé, considerado el mejor jugador del momento, pese a su mediocre Champions. Vinicius está, hoy, un paso por delante en la carrera por el Balón de Oro. Haberse convertido en un icono contra el racismo también ayuda, aunque la Copa América que va a disputar pesa menos que la Eurocopa.

La llegada del francés convertirá a este Madrid en un equipo de otra dimensión, si se compara con sus grandes rivales en la Liga, puesto que tiene capacidad económica para realizar más operaciones, quizá la llegada de Davis. Es como si Florentino Pérez diseñará ya un Madrid de Superliga, en paralelo al nuevo Bernabéu, con una plantilla larga en la que hay estrellas y hay equipo. Pocos como Ancelotti para manejar el ecosistema. Eso no lo pone a salvo de las crisis ni garantiza títulos, pero dispara sus capacidades frente al resto.

El Madrid siempre ha estado a mucha distancia de la clase media de la Liga, pero el próximo año lo estará todavía más de Barcelona y Atlético, oponentes con los que habitualmente se juega los títulos. Los azulgrana no están únicamente en una crisis económica, también deportiva y de credibilidad. Hay formas y formas de ser segundo, importan el cómo y el cuándo. Xavi tiene jugadores para haber ofrecido más. No ha logrado estabilizar un equipo fiable, un año después de ganar la Liga, y se ha mostrado débil emocionalmente. Laporta, por su parte, parece un presidente de cómic.

LA CANTERA, PRUEBA DE VIDA

La prueba de vida es su cantera, con Cubarsí, Lamine Yamal y Fort como últimas apariciones. Ese mérito sí es atribuible a Xavi y puede justifiar su continuidad, ya que la tesorería del club no está en condiciones de competir en el mercado. Desde el ascenso de la 'Quinta del Buitre', está demostrado que las crisis son la mejor oportunidad para las canteras. En el Madrid, hoy, no hay necesidad de mirar hacia abajo, y también algo de pereza y falta de sensibilidad.

Pero además de los canteranos, el Barça necesita un plan estratégico claro a medio plazo, firme y sin dudas, aunque para ello hace falta un liderazgo del que carece. Laporta y Xavi han acabado el curso metidos en el camarote de los hermanos Marx.

ACOMODADOS EN EL ATLÉTICO

El liderazgo del Atlético no está en cuestión, porque es mesiánico. Simeone no puede justificarlo todo con la clasificación para la Champions, sobre todo en un año en que su capacidad para comprimir la competitividad del equipo se ha visto en cuestión en varios partidos.

El Simeone de otros tiempos no se reiría tras un 1-4, como el encajado frente a Osasuna, aunque no haya nada en juego. En el Madrid es al revés, porque cada minuto de alternativa es una oportunidad. Alguien tiene que hacer sentir lo mismo a los futbolistas del Atlético, que han pasado del potro al sofá.

El Simeone del pasado tampoco se resignaría. Ni el Xavi de otros tiempos, cuyas palabras de que el Barça no estaba para competir con el Madrid irritaron a Laporta. El punto de partida es difícil, pero ambos deben exigir más y exigirse más a sí mismos. Míchel no dejó de hacerlo tras ser goleado en el Bernabéu y la clasificación del Girona para la Champions es su título.