Álex Baena, el futbolista que se separó de su familia a los 11 años: “He sufrido mucho pero lo volvería a hacer”

Álex Baena, el futbolista que se separó de su familia a los 11 años: "He sufrido mucho pero lo volvería a hacer"

Copa del Rey

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El almeriense es el máximo goleador de un Villarreal al que llegó de niño. El interés de la Premier y su progresión hacen que el club trate de blindar al centrocampista, que estuvo en la prelista para el Mundial. Este jueves, contra el Real Madrid

Baena, contra el Real Madrid, este año.MUNDO

A Álex Baena (Roquetas de Mar 2001) ya le vieron venir de pequeño. “Si no llegaba Álex no llegaba ninguno. Siempre vi que tenía todo para llegar. Tenía talento, ganas, ilusión. Siempre pensé que iba a ser futbolista”, cuenta Pedro López, quien fuera entrenador del futbolista del Villarreal en el equipo de su localidad natal. Ese talento no pasó desapercibido y a los 11 años hizo las maletas para mudarse a la residencia del club castellonense, que se adelantó a un Real Madrid que también le había echado el ojo. Este jueves revivirá ese duelo en los octavos de la Copa del Rey (21.00 horas).

No fue fácil la mudanza, nada fácil, tal y como recuerda su madre en una entrevista para el canal de LaLiga. “En el viaje se puso a llorar y me dijo: ‘Mami, no quiero ir, ¿qué voy a hacer allí solo? Me dio mucha pena. Siempre estaré agradecida al club porque se han portado muy bien conmigo y con él. No solo han visto a un futbolista, sino a un niño que lo pasaba mal”, explica Sara Rodríguez. Y lo corrobora Pablo Godoy, su primer entrenador en las categorías inferiores del Villareal. “Teníamos que estar un poco pendientes porque su situación, estando fuera de casa, no era nada sencilla. Como soy padre, yo alguna vez le decía si quería venirse el fin de semana con mi familia y mis hijos para que estuvieran un rato juntos”.

“He sufrido mucho pero lo volvería a hacer. Ha valido mucho la pena”, reconoce la madre de Baena, que conserva en casa la camiseta con la que su hijo debutó en Primera División, con dedicatoria incluida del futbolista: “No hay mejor persona para guardar esta camiseta que tú. Por estos 9 años tan difíciles pero tan bonitos a la vez. Me fui con 11 años, lejos de todo, pero tú siempre has estado a mi lado, muchos años después me has podido ver cumplir mi sueño. Gracias a ti soy quien soy. Te quiero”. Añade Sara que su hijo “siempre tiene presente lo mal que lo pasé”.

El debut, también solo

Ni siquiera en su estreno en la máxima categoría pudo estar el centrocampista arropado por su familia. Fue en julio de 2020, en aquella liga que se reanudó con los estadios vacíos tras el parón por la pandemia, con una derrota en La Cerámica frente a la Real Sociedad. Su madre lloró al recibir la llamada de su hijo al terminar el partido. “Le dije: ‘Álex lo has conseguido, estás ahí'”.

Unai Emery le convirtió en un asiduo de las convocatorias del primer equipo y aprovechó la Liga Europa (aquella que acabaría conquistando el Villarreal) y la Copa para ir dándole minutos. Sin embargo, tras la resaca de las celebraciones por el título en Gdansk, Baena tuvo que hacer las maletas de nuevo para dejar de nuevo la que ya era su casa tras decidir el club que saliera cedido al Girona, en Segunda División. Pero en esta ocasión no lo haría solo.

“Sabía que ese año iba a ser un poco duro para él porque estaba acostumbrado a estar en el Villarreal desde los 11 años. Hablamos y le pregunté si quería que me fuera con él. Me dijo que sí”, cuenta su hermano Miquel, cuya trayectoria va ligada a la del centrocampista. “Elegí ser fisioterapeuta por ayudar a Álex, para que pudiera conseguir su sueño de ser futbolista. Ese año en Girona pudimos recuperar la niñez, hacía un poco de fisio personal suyo. Lo machacaba mucho en que siguiera la dieta, los suplementos…”.

El paso por Girona

Hasta Montilivi se marchó Baena con una idea entre ceja y ceja. “Vamos a subir a Primera pero luego volveré a Villarreal y me ganaré mi puesto”, le dijo a su madre. Dicho y hecho. El jugador almeriense fue pieza clave en el regreso de los catalanes a la máxima categoría. Tanto que el Girona trató el pasado verano de contar con él una temporada más pero el club castellonense ya tenía otros planes para Baena, a quien inscribió en agosto como miembro del primer equipo.

Esta temporada, que arrancó con un doblete en la primera jornada en Valladolid, está siendo la de la confirmación de otra joya surgida de la cantera amarilla que ya ha despertado el interés de algunos clubes de la Premier como Liverpool o Arsenal. Por ese motivo tiene el Villarreal entre sus prioridades ampliar un contrato que expira en 2025 y su cláusula de rescisión. Con diez goles, es el máximo goleador del equipo contabilizando todos los torneos y Luis Enrique le incluyó en la prelista para el Mundial de Qatar, aunque finalmente no pudo acompañar a su gran amigo Yeremy Pino, con el que tiene muy buena relación.

Puede que no tarde en aparecer por la Roja ahora que está a los mandos Luis de la Fuente, quien le hizo debutar con la sub’21 y conoce bien a un jugador del que destacan en el Villarreal la timidez con la que se maneja en su día a día, sobre por el contraste con la imagen que transmite sobre el césped, donde el propio Baena dice tener un carácter fuerte. Pese a ello, su única expulsión en Primera fue por levantarse la camiseta algo más arriba de lo permitido para dedicarle un gol a José Manuel Llaneza, fallecido días antes.

kpd