Explotan los cuartos más goleadores de la historia sin el valor doble fuera de casa: “Se especula menos”
Hay que irse a la temporada 2003/04 de la Champions League para buscar unos cuartos tan goleadores como los de este curso, con 32 tantos. Entonces se marcaron 30 goles y era el récord de la competición desde que mutó de Copa de Europa al formato actual, hace ya 21 años, y casi un tercio de ellos se hicieron en la eliminatoria entre el Milan y el Deportivo: 4-1 en el enfrentamiento de ida y 4-0 en el de vuelta.
"A mis jugadores les traté de convencer de que el Milan no era tan grande como equipo y que fue un accidente en la ida. Y en el segundo partido salieron como locos". Habla Javier Irureta, el que fuera el entrenador del Deportivo, protagonista de una de las mayores gestas en la competición continental. "Tuvimos suerte de hacer los goles pronto y de no encajar", añade Irureta.
Entonces estaba vigente la norma del valor doble de los goles en caso de empate y lejos de casa. Una norma que permitía al Depor pasar con un 3-0, pero el equipo gallego decidió asegurar el pase con el cuarto gol, obra de Fran. Esa regla fue instaurada por la UEFA en 1965 y ha sido fruto de acalorados debates durante los últimos años hasta que fue retirarla hace tres temporadas.
"El impacto de la regla va ahora en contra de su propósito original, ya que ahora disuade a los equipos locales, especialmente en los partidos de ida, de atacar, porque temen encajar un gol que daría a sus rivales una ventaja crucial para el partido de vuelta", explicaba el presidente del máximo organismo del fútbol europeo, Alexander Ceferin, para justificar la retirada.
La UEFA venía observando que las estadísticas desde mediados de la década de los 70 hasta la época actual mostraban una reducción de victorias en casa (se pasó del 61% al 47%) y de un aumento a domicilio (del 19% al 30%). También se alteró la media de goles por partido marcados en campo propio (del 2,02 se pasó al 1,58) y en ajeno (del 0,95 al 1,15).
"Ahora, cada partido empieza de cero, se especula menos con el resultado», opina Antonio Núñez, campeón de la Champions con el Liverpool en la temporada 2004/05. El ex futbolista cree que aquella regla «condicionaba bastante» y que se tendía más a "guardar lo que tenías".
A su juicio, "el fútbol es más justo", como también expresó el propio Ceferin respecto a la desventaja que suponía recibir un gol en la prórroga y verse obligado a marcar dos. "A veces la eliminatoria se rompía y ya sabías que la prórroga era imposible, por lo que eso resta toda la emoción", explica el madrileño.
Retirada y cambio
Se ha tardado casi tres años, ya que la norma se retiró en la 2021/22, en apreciar los primeros resultados de este cambio, ya que aquel año se hicieron 23 goles y el pasado, 20. Con estos 32 se establece la mejor marca histórica, dejando los 30 de la 2003/04 en segundo puesto y en el tercero, empatados, los cursos 1999/2000 y la 2008/09, con 28. "El 3-3 del Bernabéu era un marcador malo, pero es difícil elegir el estilo de juego para obtener el resultado que tú quieres", apunta Irureta.
Es cierto que un buen año de laboratorio fue la Champions de la pandemia. Aquella que tuvo su fase final en Lisboa en el 2020 y se jugaba a partido único. Se marcaron 20 goles en cuatro partidos, con una media de cinco por encuentro. En actual campaña han sido cuatro. Esos cuatro tantos por encuentro en la fase de cuartos sólo se habían superado en cinco ocasiones, todas en el antiguo formato de Copa de Europa y siempre antes del valor doble de los goles en campo contrario.
Podemos hablar de un fútbol más ofensivo. En los ocho equipos que llegaron a esta fase estaban los tres mejores jugadores del mundo y técnico con estilo ofensivo. Pero ese cambio de normativa, sin duda, influye y mejora la competición.