El Barça avanza con susto ante Unionistas y sin pasar página

El Barça avanza con susto ante Unionistas y sin pasar página

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La enésima historia del mundo al revés tuvo final feliz para el Barça. Tras volver a firmar una primera parte poco acertada en ataque y ver de nuevo como el rival lograba ponerse por delante en el marcador, acabó por llevarse un triunfo que le valió el pase a los cuartos de final de la Copa del Rey, pero que no acaba de despejar todas las dudas que rodean al conjunto que entrena Xavi Hernández. [3-1: Narración y estadísticas]

Ferran, al filo del descanso, igualó el tanto inicial de Álvaro Gómez, pero tuvieron que ser dos defensas, Jules Koundé y Alejandro Balde, quienes acabaran por sellar la remontada barcelonista en la segunda mitad del encuentro. La sensación, a pesar de todo, es que los azulgrana todavía necesitan una buena sacudida en sus cimientos para pasar página de una vez por todas del varapalo vivido ante el Real Madrid y reencontrarse con su versión menos proclive al sufrimiento.

Fue sintomático que la primera acción de peligro llevara la firma de Unionistas. De nuevo, antes de que se cumpliera el primer minuto de juego. Losada se plantó ante Iñaki Peña con todo a favor, pero su disparo no encontró portería. La apuesta de los locales parecía muy clara: estar bien arropados atrás y buscar hacerle daño al Barça a la contra. Un plan que, a decir verdad, les ha dado ya grandes resultados a los rivales de los azulgrana en lo que llevamos de curso. De muy poco, además, les sirvió a los de Xavi desperezarse al menos un poco. Por mucho que llegaran cada vez con más frecuencia al área rival, sus acciones no lograban encontrar serias opciones para el remate.

Espectacular volea

Por lo menos, hasta que un buen pase de Joao Félix encontró una tan acrobática como forzada respuesta de Marc Guiu. Su remate, muy picado, le salió a pesar de todo muy centrado y no acabó de incomodar a un meta local, Iván Martínez, que no tuvo que moverse del sitio para enviarlo a saque de esquina. Poco a poco, los azulgrana parecieron ir encontrándose más cómodos. Pero, justo entonces, llegaría el gol de los locales. Álvaro Gómez, con una espectacular volea, puso el 1-0 en el marcador cuando iban a cumplirse los primeros 30 minutos de juego. Un tanto que, además, catapultó las buenas sensaciones de un Unionistas dispuesto a firmar otra hazaña en la Copa. Tanto, que llegaron a rozar el segundo tanto de su cuenta, con una contra rápida de Rastrojo que Iñaki Peña acabaría por mandar a córner.

Y a la salida de ese córner, precisamente y casi contra todo pronóstico, llegaría el gol del empate para los azulgrana. Casi, usando contra su rival las mismas armas con las que amenazaba con hurgar en su herida. Joao Félix, tras el oportuno despeje de la zaga barcelonista, habilitó a un Ferran Torres que tuvo que cruzar algo más de medio campo a la carrera con el balón en los pies para colocar el 1-1 en el marcador del Reina Sofía. Casi, al filo del tiempo reglamentario de la primera parte y con recadito innecesario a la afición salmantina. La igualada en el marcador fue quizás el motivo de que la segunda mitad empezara con un ritmo diametralmente opuesto al del inicio. Mientras el esfuerzo parecía pasarle algo de factura a Unionistas, el Barça arrancaba con la sensación de tener otra vez la oportunidad de resarcirse tras otros primeros 45 minutos realmente muy mejorables en su conjunto.

Los jugadores del Barça celebran el tercer gol del partido.CESAR MANSOAFP

Los azulgrana, tras el debut oficial en la zaga de un jovencísimo Pau Cubarsí por las molestias físicas de Christensen, buscaron obtener un mayor protagonismo en la fase ofensiva con las entradas en el terreno de juego de Lewandowski, Gündogan y Pedri. Los locales, por su parte, aprovecharon el ritmo lento con el que parecían conformarse los visitantes en los instantes iniciales del segundo tiempo para cargar pilas, mientras sus seguidores iban envalentonándose cada vez más por la igualada que seguía presente en el luminoso. Los de Xavi tenían casi la exclusiva de la posesión, pero no encontraban la manera de hacer daño. Hasta que Koundé, con un tremendo disparo desde fuera del área, algo en lo que no suele prodigarse el Barça, decantó la balanza en favor de los suyos con el 1-2 cuando iba a arrancar la recta final del encuentro. Balde, apenas tres minutos después, firmaría una acción personal que culminaría con el 1-3 y, que, pese a sentenciar aparentemente la eliminatoria, aún daría paso a dos grandes paradas de Iñaki Peña en el ocaso que evitaron repetir el sufrimiento vivido frente al Barbastro.

kpd