LaLiga Santander
El árbitro, señalado porque dirigió la final de la Copa entre el Barcelona y el Alavés, explicó hace 10 años que era complejo pitar a los dos clubes más grandes
El primer árbitro salpicado por la explosión de caso Negreira es un diplomado en Ciencias Empresariales nacido hace 50 años en Zaragoza. Carlos Clos Gómez, colegiado retirado en 2017, ha ocupado espacios estelares en periódicos y programas de televisión después de que El Confidencial publicara que Javier Enríquez Romero envió un mensaje, en febrero de 2017, a un directivo del Barcelona para adelantarle que Clos Gómez iba a pitar la final de Copa del Rey de ese año, que el Barcelona disputaría tres meses después contra el Alavés, y que ganó 3-1. De pronto, todas las sospechas se centraron en este colegiado. Ayer, desde el club barcelonista intentaron rebajar el calado del asunto, al asegurar que es tradicional que el árbitro que se retira en una temporada sea premiado con la final de la Copa. «No fue ninguna sorpresa ni ninguna información privilegiada», señalaron.
El enredo sobre Clos Gómez se alimentó por el hecho de que él ha ejercido como instructor de los árbitros profesionales en el VAR. Enríquez Negreira, tras finalizar su relación contractual con el Barcelona, a finales de la temporada de 2019-20, se puso en contacto con la directiva del club para decirles: «Conmigo os habría ido mejor con el VAR».
Clos Gómez, que comenzó dirigiendo partidos de fútbol sala, se estrenó como árbitro de primer nivel en 2001 y desde enero de 2009 a 2017 ostentó la categoría de internacional. Antes de decantarse por el arbitraje, estuvo trabajando como responsables de recursos humanos de una empresa. Tiene dos hijas y en su perfil profesional figura una diplomatura en Relaciones Laborales, un máster en gestión deportiva y un curso de inteligencia emocional impartido por el Centro de Promoción de Estudios del Deporte.
Para los aficionados del Real Madrid, Clos Gómez fue un azote. En su estadística figura que dirigió a los blancos en 34 partidos, con 20 victorias del equipo del Bernabéu, siete empates y siete derrotas. Una cifras que contrastan con las del Barcelona. Al club catalán le pitó en 33 encuentros, con 26 triunfos, cinco empates y sólo una derrota.
En sus 17 años como árbitro, sólo fue elegido para dirigir tres finales. La ya mencionada de la Copa del Rey de 2017: Barcelona 3 Alavés 1; la final de la Copa de 2013: Atlético 2 Real Madrid 1, y la final de la Supercopa de España de 2013: Barcelona 3 Real Madrid 2.
Clos Gómez no es muy partidario de conceder entrevistas. Sus intervenciones en la prensa son escasas. La más extensa fue la concedida hace 10 años a El Rincón del Árbitro, donde hablaba del Real Madrid y del Barcelona. ¿Es cierto que al Madrid y al Barça son los equipos a los que más se beneficia? Le preguntaban. «Totalmente al revés. Siempre defiendo que esos equipos son a los que más se les perjudica. El árbitro siempre se equivoca de menos. Madrid y Barcelona te generan muchas situaciones de penalti-no penalti a su favor y en caso de duda tú siempre vas a abstenerte. Por tanto, siempre serán perjudicados», exponía.
