El Dortmund se rehace en Lille para citarse con el Barça en cuartos de final

El Dortmund se rehace en Lille para citarse con el Barça en cuartos de final

La eliminatoria se puso brava en el Stade Pierre Mauroy, pero el Borussia Dortmund ofreció una respuesta a la altura. Ajeno al ruido y al clamoroso error inicial de su portero, el equipo de Nuri Sahin culminó en la segunda parte una remontada ante el Lille que le sitúa en cuartos, donde se medirá al Barcelona. [Narración y estadísticas (1-2)]

El vigente finalista de la Champions no hubiese necesitado siquiera el favor de Sandro Schärer, que estimó como penalti un leve forcejeo en el área entre Thomas Meunier y Serhou Guirassy. Corría el minuto 51 y la hinchada local aún se permitía ciertas euforias, a tenor del 1-0. Sin embargo, el ambiente iba a enfriarse súbitamente cuando el árbitro suizo obsequió al delantero guineano, que celebraba su 29º cumpleaños, con una pena máxima.

No habría opción para Guirassy, porque Emre Can quiso asumir los galones de capitán desde los 11 metros. Tampoco más adelante para aumentar su cuenta anotadora, con 10 goles en 12 partidos, un registro sólo superado por Raphinha. En el primer minuto del añadido, su fantástica volea, tras un control con el pecho, pasó silbando junto al palo derecho de Lucas Chevalier.

El entusiasmo de los jóvenes

En cualquier caso, en poco debe lamentarse el Dortmund, salvo por su atroz primera parte, marcada por la pereza y los despistes. El más grotesco protagonizado por Gregor Kobel, que en el minuto 5 dejó escapar entre sus piernas un tierno remate de Jonathan David. El canadiense, autor del gol de la victoria ante el Real Madrid, parecía cargar de razones al Lille, un grupo muy entusiasta y joven, con cuatro titulares por debajo de los 24 años.

Además, Benjamin André, el capitán de 34 años, empleó su veteranía para neutralizar el acercamiento más peligroso de los alemanes. Una cuádruple ocasión a la salida de un córner en el minuto 19. Aún debió emplear un rato más el Dortmund para afianzarse, bajo la batuta de Pascal Gross, uno de los seis nominados a mejor jugador del mes de febrero en la Bundesliga.

Tras el descanso, el empuje visitante terminó por desestabilizar el esquema de Bruno Génésio. En especial por la izquierda, donde Maximilian Beier hacía olvidar a Jamie Gittens, la joven promesa británica. A poco del 1-1, Kobel se redimió de su pifia con una buena mano ante el remate de Hakon Haraldsson, pero a partir de ahí el vendaval amarillo redujo al Lille a cenizas. Karim Adeyemi, con la zurda, se topó con el travesaño, Beier no supo cabecear un preciso envío de Guirassy, pero en la siguiente acción sí precisó con un remate al ángulo. Ese tipo de oleadas, llenas de vértigo, donde el Barça deberá extremar las precauciones.

El Liverpool amplía su pleno y trunca la racha invicta del Lille

El Liverpool amplía su pleno y trunca la racha invicta del Lille

Actualizado Martes, 21 enero 2025 - 23:20

El Liverpool amplió ante el Lille su racha de victorias en la Champions, con el que certificó su pase matemático para octavos de final. El equipo de Arne Slot dio buena cuenta de un rival que enlazaba 21 partidos sin conocer la derrota. [Narración y estadísticas (2-1)]

Sobrepasada la media hora, un buen pase de Curtis Jones desbarató el muro francés. Demasiado fácil para Mo Salah, con 50 tantos ya en competición europea para el grupo de Anfield. El egipcio, no obstante, desperdiciaría otra ocasión aún más clara antes del descanso.

A partir de entonces, el equipo de Bruno Genesio quiso dar un paso adelante, pero sin inquietar a Alisson Becker. A la hora de juego, Aissa Mandi vio la segunda amarilla por una falta sobre Luis Díaz.

Quinto gol de David

Un momento crítico para los visitantes, aunque Jonathan David aprovechó un rechace en el área para anotar su quinto gol del torneo. De este modo, el canadiense igualaba el récord de Tomasz Radzinski, un delantero de origen polaco y pasaporte canadiense que también anotó cinco dianas para el Anderlecht en la temporada 2000-01.

El primer tanto concedido en esta edición no desalentó a los reds. Un disparo de Harvey Elliott, desviado por Ngal'ayel Mukau, terminó por truncar la asombrosa tacada del Lille.

El Atlético de Madrid presenta una queja formal a la UEFA por el inexplicable penalti ante el Lille

El Atlético de Madrid presenta una queja formal a la UEFA por el inexplicable penalti ante el Lille

"Ojalá encontremos algo para decir que fue penal. Porque primero dijo el árbitro que fue mano y luego que hubo algo de Koke". Esas eran las palabras de Diego Simeone tras la conclusión del encuentro en el que su equipo cayó derrotado ante el Lille en el Metropolitano por 1-3. Pero, 12 horas después, nadie la ha encontrado.

Así, el club rojibanco ha decidido presentar una queja formal a la UEFA por la resolución de una jugada que marcó el devenir del partido en el feudo colchonero. El tercer gol francés ya llegó en el último minuto de partido con los de Simeone volcados en el área de Chevalier.

Al volver al minuto 74, nadie del mundo del fútbol encuentra una explicación no sólo a lo que sucedió, tampoco a lo que se interpretó. En la salida de un córner, un balón llovido cae entre Koke y los jugadores franceses, Alexsandro y André. El esférico golpea en la mano de André y queda muerto entra las piernas de los tres hasta que el capitán rojiblanco consigue sacarlo con la puntera tras varias patadas al aire.

Un momento después, Marco Guida, señala el punto de penalti y se desata la locura dentro y fuera del campo. En un inicio el italiano parece indicar que fue un toque con la mano el que le inclina a pitar penalti, algo inverosímil ya que el responsable es un jugador francés. Entonces, y tras unos minutos de deliberación con la sala VAR y sin acudir a la pantalla del videoarbitraje, el colegiado reitera su decisión.

"No sé, él ha dicho que la mano, pero al final no sé qué ha pitado. Nadie entiende, espero lo entienda él", afirmó Jan Oblak a los medios depués del encuentro. Y Julián Álvarez añadía el factor de la mano en ataque como un elemento que excluye todo lo que ocurre posteriormente. "Fue decisiva en el partido", afirmó el argentino. Y Simeone sentenciaba poco después: "No fue nada, muchacho".

En el club rojiblanco están indignados con una jugada que no tiene explicación. Consideran que es una acción sin zonas grises ni interpretaciones limítrofes. A su juicio es claro que "nadie ve nada punible" y reiteran, como afirmaba Julián, que esa mano previa anularía cualquier circunstancia posterior.

Desde la entidad colchonera no comprenden por qué la tecnología no sirvió en la señalización de este penalti, que les deja fuera de los puestos de clasificación de la Champions League. Una competición en la que no deberían ocurrir situaciones como esta.

Un fondo sur 'sin' el Frente, un tridente sin fortuna y un penalti escandaloso: "Ojalá encontremos algo para poder decir que fue penal"

Un fondo sur ‘sin’ el Frente, un tridente sin fortuna y un penalti escandaloso: “Ojalá encontremos algo para poder decir que fue penal”

Le resultó raro a estadio, jugadores y técnico. Faltaban casi 5.000 almas, y las más ruidosas, animando ante el Leganés. Volvieron frente al Lille en Champions. Cumplida la sanción impuesta por Disciplina, el Metropolitano ya no debía nada a nadie, pero el Frente Atlético sí.

"En vista de los constantes ataques sufridos desde todo el Nacionalmadridismo, aceptados y comprados por una parte del mundo Atlético", comenzaba el comunicado que el grupo ultra lanzó en redes sociales criticando a los que no piensan como ellos. Para, posteriormente, solidarizarse con "esos Atléticos que sin ser ultras, comparten y entienden esta forma de vida igual que nosotros, y que han sido perjudicados sin motivo". Y anunciar, finalmente que "para poder reflexionar detenidamente, y tener tiempo para pulsar a esas peñas, colectivos y aficionados que buscan como nosotros una unión inquebrantable, esta noche no animaremos".

En el resto del comunicado, el grupo pedía unión y ofrecía asesoramiento legal para todos aquellos perjudicados por la prohibición autoimpuesta de cinco partidos sin poder comprar entradas para duelos visitantes.

"¿Cómo lo han visto todos?"

Así, aunque sus bufandas sí ondearon en el himno rojiblanco, su actitud fue "pasiva" durante todo el encuentro como explicaron en el mismo texto. No animaron cuando salieron los jugadores al campo, dejando el protagonismo al resto del estadio que brindó una sonora pitada al himno de la Champions. Aunque sí aplaudieron cuando se desplegaron los rojiblancos antes de comenzar el encuentro. "¿Cómo se ha vivido? ¿Cómo lo han visto todos?", contestó lapidario el entrenador cuando le preguntaron por el ambiente del Metropolitano.

Era el resto de la grada la que entonaba las clásicas arengas en el estadio rojiblanco mientras desde el Frente asistían impasibles al espectáculo que estaba brindando el Atlético en el verde aupado a su tridente más esperado. Apenas habían jugado 118 minutos juntos de los 990 que había disputado el Atlético de Madrid esta temporada. A juzgar por lo visto ante el Lille, tanto en ataque como en defensa, una ventaja para los rivales. Funcionó de maravilla y podrían haber matado al Lille si Sorloth hubiera estado más entonado.

Vista del Metropolitano en el gol del Atlético.

Vista del Metropolitano en el gol del Atlético.JUANJO MARTINEFE

Tuvo tres ocasiones clarísimas que marró por dos cucharitas mal ejecutadas y un remate alto. Julián, la que consiguió la enchufó, mientras que Griezmann estuvo en la sala de máquinas para generar dos de las tres de Sorloth y un remate forzado que no pudo concretar. "No es un chico y sabe convivir con estas situaciones", comentaba Simeone tras los fallos del noruego.

Momento paranormal

Ocasiones aparte, el partido lo inclinó Marco Guida, el colegiado de la contienda, con un penalti que nadie se explicó ni en el campo ni fuera de él. Nadie supo si fue mano, si hubo contacto de Koke... Y la losa de fallar oportunidades y ese penalti en contra.

"Vi el vídeo y me parece mano del jugador del Lille, no sé si lo roza Koke, pero primero es mano y me parece que debería haberla ido a ver", comentaba Julián Álvarez en el postpartido. Tanto es así que el propio Cholo tuvo que decir: "Ojalá encontremos algo para poder decir que fue penal". Hasta que luego, ya cansado, admitió: "No fue nada, muchacho".

Bruno Genesio, entrenador del Lille, aseguraba de manera muy política y correcta que no había visto la jugada y no podía valorarla. "No he hablado con mis jugadores del penalti y aún no he podido ver las imágenes", explicó.

El Atlético se queda con tres puntos de nueve posibles y, además, ala diferencia de goles le coloca en el puesto 26 de 24, con lo que estaría fuera de los equipos que se clasifican para los dieciseisavos de final. "Estamos en un momento complicadísimo de la Champions", admitió el Cholo. Toca ganar ante el PSG en París para volver a los puestos de privilegio.

Un penalti inexplicable condena al Atlético ante el Lille

Un penalti inexplicable condena al Atlético ante el Lille

Salió el tridente deseado. Ese que lleva reclamando la parroquia casi desde que se anunciaron los fichajes de Sorloth y Julián Álvarez. Apenas habían coincidido 118 minutos sobre el campo de los 990. Y lo cierto es que podrían haber hecho dos goles en menos de 10 minutos si Sorloth se hubiera conectado antes al partido. Y fue una pena, porque los terminaron necesitando. Cayó el Atlético ante el Lille, que se le dan bien los equipos madrileños. Seis de seis puntos. [Narración y estadísticas, 1-3]

La primera la tuvo el noruego que intentó una cucharita inverosímil cuando estaba mano a mano con Chevalier. Luego un mal control frustró una buena ofensiva del Atlético. Sin embargo, al tener tres espadas y no dos o una, tus opciones de que algo bueno salga son mayores como demostró Julián en el minuto 7. Aceptó el argentino el regalo de Touré para pisar área y colocar la pelota lejos del portero galo. Poco después, al 9 le llegó la oportunidad de aprender de sus errores. No quiso y volvió a la picadita tras un pase maravilloso de Griezmann. El portero francés se mantuvo en pie y la detuvo. El tridente funcionaba, pero no mataba.

Era casi a una por cada 10 minutos, y lo peor es que le caían todas a Sorloth, que no tenía el día. El noruego volvió a marrar otra asistencia de Griezmann. Un minuto después, Giménez obligó a Chevalier a hacer una de las paradas de la Champions tras la salida de un córner. El campo parecía inclinado hacia la portería francesa. El Atlético no especulaba y los franceses pagaban las numerosas bajas en su escuadra, hasta ocho, y ciertos debuts arriesgados como el del joven Touré. 19 años, apenas 4 más de los minutos que había disputado con el primer equipo esta temporada. Aunque pudieron los franceses irse con elempate al descanso si el recién ingresado Zhegrova por la lesión de Cabella acierta un balón suelto que dejó Nahuel Molina en uno de sus habituales despistes defensivos.

No quería más despistes el Cholo en Champions después de la debacle en Lisboa donde el equipo ni compitió. Una cosa es que este nuevo formato dé más holgura ante los fallos y otra es llevar sólo tres puntos de nueve posibles uno de los equipos habituales en las rondas finales de esta competición desde la llegada del argentino. Y el drama sigue.

Quiso el Lille, ya sin el bisoño Touré, morder tras la salida de los vestuarios. Había poco que perder y el resultado era lo suficientemente corto como para poder asustar al Atlético a poco que se estirase el conjunto francés. Bueno para los rojiblancos que en las transiciones se siente también cómodos y Sorloth, pese a su gran tamaño, es bastante más rápido de lo que parece.

Y lo cierto es que el lo escueto del resultado empezó a impacientar un poco a la parroquia, este miércoles sin el aliento del Frente Atlético en huelga por «los ataques del Nacionalmadridismo». Podía llegar el error en cualquier momento y casi llega tras la salida de un córner, pero apareció Oblak y la mano levantada del árbitro. Pareció por poco y, si no es por el esloveno, quizás habría intervenido el VAR por lo ajustado de la jugada.

Debacle

Y no fue un error, sino un acierto lo que condenó al Atlético. Un balón perdido de Gallagher llegó a las botas de Zhegrova, uno de los titulares que Genesio había dejado fuera del once y que entró por lesión de Cabella, y demostró en un disparo a la escuadra porqué debía de estar en el verde. Los peores presagios de la parroquia se cumplían. El equipo había perdonado demasiadas ocasiones y aún perdonó otra Griezmann un minuto después, pero más por lo forzado del remate que por fallo del francés.

Hubo un susto posterior porque el árbitro del encuentro Marco Guida señaló un penalti en contra del Atlético en una jugada donde fue el jugador del Lille el que tocó el balón con la mano en el área rojiblanca. Pero, contra todo pronóstico, el VAR confirmó la pena máxima que transformó el recién ingresado Jonathan David. Al parecer Koke rozó a un francés, al parecer. Luego llegó el asedio rojiblancon una ocasión manifiesta de Giuliano, salvada por Alexsandro en la línea. Pero quien golpeó en el último minuto fue el Lille, con un nuevo gol de su nueve titular, Jonathan David, que dejaba a los rojiblancos fuera de los 24 primeros puestos de la Champions League. Habrá que jugársela en París ante el PSG con tridente o sin él.

Simeone: "Puedo no estar de acuerdo con Courtois en la forma de ver las cosas"

Simeone: “Puedo no estar de acuerdo con Courtois en la forma de ver las cosas”

Casi se cumple un mes desde los incidentes del derbi, pero las ruedas de prensa en una y otra acera siguen visitando los incidentes que obligaron a suspender provisionalmente el encuentro entre Atlético y Real Madrid. No ayuda que los protagonistas se sigan lanzando dardos en las comparecencias previas a su partido de Champions League como en la de este mediodía antes del partido ante el Lille.

"Courtois merece el lugar que tiene. Es de los mejores porteros del mundo. Podemos no estar de acuerdo en las formas de ver situaciones, pero estoy agradecido por el trabajo que hizo aqui. Jugamos una final de Champions y ganamos una liga con él", respondió Diego Simeone a las palabras del belga en la aseguraba que sus ideas de provocación no coinciden.

Unos incidentes que también se vio obligado a recordar José María Giménez. El central uruguayo fue uno de los que acudió al fondo sur para intentar apaciguar los ánimos tras los lanzamientos de mecheros al portero del Real Madrid y también de los que, al término del encuentro, fue a agradecer el apoyo al mismo sector. "Fui a transmitir tranquilidad, que era lo que necesitábamos en ese momento porque teniamos confianza de empatar. Era una situación incómoda", apuntó el jugador rojiblanco.

El uruguayo también se alegró de que el miércoles, ante el Lille, puedan contar de nuevo con el Metropolitano al completo. "Significa mucho que esté el estadio con nosotros en un partido como el de mañana, los necesitamos a todos", comentó el futbolista que, probablemente, ocupe el centro de la zaga, lugar en el que se acumulan las bajas para el Atlético de Madrid. Le Normand, Azpilicueta y Lenglet serán baja en la línea defensiva rojiblanca.

El conjunto francés viene de subidón en esta competición después de la victoria ante el Real Madrid en su estadio. Y eso que se coló en la fase de grupos después de ganar por la mínima al débil Slavia de Praga. Simeone alabó al rival por su "fútbol vistoso y atractivo" y por su capacidad de competir los encuentros.

Para los rojiblancos no hay dudas respecto a su juego y Giménez ha querido destacar que el análisis dependerá de lo que ponga el electrónico. "Cuando termine el partido y tengamos un gol mas que el rival dirá si hemos jugado bien o mal. Lo importante es ganar. Sumar de a tres para afianzarse y seguir confiando en nosotros", declaró el jugador.

Es cierto que este nuevo formato de la Champions es, quizás, más benévolo con los tropiezos como el de Lisboa. Una derrota dolorosa en el que "no juegas bien" y se cometieron muchos errores desde el "trabajo colectivo", según detalló Simeone.

Dos de los jugadores que mañana espera la afición colchonera son Julián Álvarez y Antoine Griezmann. Del primero su entrenador reveló que está cada vez más cómodo tanto con sus compañeros como en la ciudad y del segundo se alegró de no tener que dividir el talento con Francia y que le vendrá muy bien esa descarga de minutos de no jugar con su selección.

Ancelotti cada vez avergüenza más al Madrid

Ancelotti cada vez avergüenza más al Madrid

Actualizado Jueves, 3 octubre 2024 - 00:04

Un Real Madrid ahorcado por un Ancelotti vergonzoso hizo bueno al modesto Lille, que ni en sus mejores sueños podía pensar en ganar y dejar en ridículo al campeón de la Champions. El equipo blanco equipo está hundido y abocado a la falta de credibilidad. Porque no juega al fútbol. La soberbia del club no ha querido fichar dos centrales imprescindibles y dos medios que puedan genera calidad en el centro del campo.

A Ancelotti ya le pueden fichar a

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Los cruces del Madrid con el presidente del Lille: hombre en la sombra del jeque en el PSG, aviso sobre Mbappé, negociaciones con Camavinga y Yoro…

Actualizado Martes, 1 octubre 2024 - 23:37

Los representantes del Real Madrid se encontrarán en Lille con un viejo conocido. Un hombre más académico que futbolístico, más de números que de pasión. Su cara se ha ido cruzando con los directivos del conjunto blanco durante la última década, primero en las constantes conversaciones con el PSG, luego en los primeros acercamientos al Stade Rennes para conocer más sobre Camavinga, y durante los últimos meses en las negociaciones con el cuadro galo por Leny Yoro. Olivier Létang es el presidente del Lille, posición a la que ha llegado después de ser máximo mandatario del Stade Rennes y hombre en la sombra de Leonardo y del jeque en el PSG.

Un currículum más de empresa que de fútbol, dejando a un lado aquello que le decían a Darín en El secreto de sus ojos, eso de que «un hombre puede cambiar de casa o de familia, pero nunca de equipo, de pasión». Létang jugó en los noventa en el Le Mans y el Reims y después curso una licenciatura en la Escuela de Negocios ESSEC y un MBA para terminar pasando por los despachos de tres de los grandes clubes de Francia como quien oye llover. Trabajando y dejando a un lado la camiseta.

Entre 2012 y 2017 fue mano derecha de Leonardo, director deportivo del PSG. Fue, básicamente, el hombre en la sombra de Al-Khelaifi. La mente detrás de la imagen porque fue él el primero que en París alzó la voz por un adolescente que empezaba a despuntar en la cantera del Mónaco. «Yo quise a Mbappé en 2015, dos años antes de que el PSG le fichara», dijo antes de dejar la capital, obligado por la llegada de Kluivert como nueva mano derecha del jeque. «El PSG no me hizo caso en ese momento y luego tuvo que pagar 180 millones», confesó a L'Equipe.

Sin bufandas ni colores

En 2017 se convirtió en presidente del Stade Rennes y fue el culpable de la renovación de Camavinga hasta 2022. Un contrato que provocaría su llegada al Madrid en 2021. Modernizó la ciudad deportiva y dio espacio a la cantera, entre ellos al joven centrocampista, que debutó bajo su mandato. Dejó el equipo a principios de 2020 y en Francia se rumoreó con el enfado del Rennes por unas supuestas negociaciones de Létang con el Madrid por el futbolista.

Le llegó entonces la oferta del Lille, en 2020, como si de un fichaje se tratara. Alguien puso sobre su mesa más dinero y mejores condiciones y Létang se cambió de empresa. La compañía Merlyn Partners compró el conjunto galo y le seleccionó como director general. Sin bufandas ni colores. A Létang no le dio tiempo a renovar de nuevo a Camavinga y el francés terminó en el Bernabéu.

El empeño de Mendes

Pero no sería su último cruce de caminos con el Madrid, al que hoy recibe en el Estadio Pierre-Mauroy. Primero intentó el fichaje de Hazard cuando el belga, ex del Lille, pasaba por sus peores momentos en Chamartín.

Durante los últimos meses, Létang ha lidiado con el interés de media Europa en Leny Yoro, joven central galo criado en la cantera del Lille. A sus 18 años, el Madrid, el PSG y el Manchester United fueron los que más insistieron en él, y finalmente el futbolista, con el empeño de Jorge Mendes, terminaría eligiendo a los ingleses. Sin embargo, Létang deslizó en varias ocasiones que la mejor opción para el defensa hubiera sido vestir de blanco.

La fe del Madrid en Tchouaméni: “no” a los millones de la Premier, virtudes como central y madurez personal

Actualizado Martes, 1 octubre 2024 - 23:33

El pasado mes de julio, mientras Francia avanzaba rondas en la Eurocopa y él era vital para Didier Deschamps, una llamada llegó a los despachos del Santiago Bernabéu. «¿Podríamos negociar por Aurelien Tchouaméni?», preguntaron directivos de un club muy importante de la Premier League. La respuesta del Real Madrid fue simple: «No está en venta». La cifra que ponían en la mesa del conjunto blanco desde las islas británicas rondaba los 150 millones de euros. Ni así.

El centrocampista galo parece estar bajo sospecha entre el entorno madridista, juzgado por un estilo de juego más pausado que el de Valverde o Camavinga, más encajonado en la posición de cinco, de eje, menos suelto, menos bravo para presionar o para llegar a la portería rival. Menos vistoso, pero necesario, a fin de cuentas, para cualquier entrenador. Por eso para la dirección técnica de Chamartín y para el cuerpo técnico liderado por Carlo Ancelotti, Tchouaméni es absolutamente insustituible.

Cuentan desde Valdebebas que el salto personal ha llegado antes incluso que el salto futbolístico. Que la madurez que ha mostrado durante estas dos temporadas en el día a día del equipo, uniendo al grupo de franceses y españoles gracias a su perfecto castellano y siendo ahora anfitrión de Mbappé cuenta casi tanto como lo que hace sobre el campo. «Es insustituible», ha contestado varias veces esta temporada Ancelotti. «Es intransferible», contestan en los despachos.

«no podemos hacer todos todo»

A sus 24 años, todos tienen claro que le queda otro escalón por elevar en su juego. Lo sabe el club, lo saben los entrenadores y lo sabe el propio futbolista, que ayer fue el protagonista en la rueda de prensa previa al duelo contra el Lille. «Tenemos que entender que en un equipo no podemos hacer todos todo, hay un plan del entrenador, hay jugadores con mucha calidad y a veces tenemos que entender nuestra responsabilidad y hacer lo mejor para el equipo, que puede no ser lo mejor para mí», reflexionó, honesto, en castellano

«Para mí lo máximo es ayudar al equipo delante de la defensa, recuperar balones, conseguir intercepciones... Si juegas es un equipo como el Madrid es porque tienes calidad, no hay regalos aquí. Es la única cosa que puedo decir», terminó, con personalidad y contundencia.

Si vamos a los números, Tchouaméni es el segundo futbolista de las cinco grandes ligas que más intercepciones realiza por partido, 2,6, por las 2,8 de Lisandro Martínez, central del Manchester United, y es el sexto centrocampista que más pases da por encuentro (72). En el Madrid todo pasa por él, aunque el adiós de Toni Kroos ha cambiado la salida de balón del conjunto blanco y ha llenado al galo, a Valverde y a Bellingham de más responsabilidades en la construcción. Sin el alemán, todos sufren un poco más.

«hablamos todo el rato»

«Toni fue muy importante y tenemos más responsabilidades en salida de balón, pero vamos a mejorar y a hacerlo bien», admitió el centrocampista, que el curso pasado sufrió varios problemas en el pie izquierdo pero está recuperado. «Me siento mejor poco a poco y ya no tengo dolor», dijo.

El galo lo ha jugado casi todo en este inicio de temporada y sólo se ha perdido un partido, el duelo de San Sebastián ante la Real Sociedad, donde fue baja por un golpe en el pie. Por lo demás, 90 minutos en siete de las nueve citas en las que ha participado y la confianza total de Ancelotti, clave desde su aterrizaje y gran valedor de su juego. «Ancelotti es muy importante para mí, hablamos todo el rato. Trabajar con un entrenador como Carlo es un placer, me ayuda mucho con y sin balón», reflexionó el francés sobre la relación que le une al técnico.

Un técnico que, aunque a Tchouaméni no le guste, le ve bastante futuro como central. Una reflexión que también comparte la dirección técnica. Gusta su poderío aéreo y su salida de balón y creen que podría ser uno de los mejores del mundo. Mientras, seguirá siendo el eje sobre el que se mueva el Madrid.