El proceso de Arda Güler en el foco del Madrid, entre la timidez y los idiomas: “Ahora… I don’t know, sólo quiero jugar”

Actualizado Lunes, 23 junio 2025 - 22:11

"Hablad despacio, está un poco nervioso". Y ahí sale Arda Güler, con la sonrisa tímida de quien se estrena en una zona mixta, rodeado de preguntas y cámaras. Lleva dos temporadas en el Real Madrid, pero para el turco de 20 años este Mundial de clubes está siendo una pequeña revelación dentro y fuera del campo. La llegada de Xabi Alonso parece haberle convertido en el nuevo centro de gravedad del conjunto blanco, sumando una segunda parte consistente ante el Al Hilal, y el club, consciente de la pasión turca que se genera en redes sociales, le abrió en la previa del Pachuca las puertas del foco mediático por primera vez desde la rueda de prensa de su presentación y repitió presencia tras su gol a los mexicanos.

"In english", pide a los periodistas. Sus respuestas son concretas, cortas y en un acento fácil de entender, manteniendo las manos detrás de la espalda. Posición recta para calmar la tensión. "¿Qué quieres?", bromea en castellano cuando le piden alguna palabra en el idioma. "Con míster todo bien ahora. Vamos a ver", se ríe por su español. "Mejor centro que banda", analiza, y cuando el periodista insiste por su puesto, mezcla idiomas por el nerviosismo lógico del momento: "Ahora... I don't know. No sabe, no sabe. Yo quiero sólo jugar. Buen feeling". Y se va, agradeciendo a los medios el trato en su debut como portavoz del Madrid.

Unas horas después, Alonso le dio la titularidad en el segundo duelo del Mundial, Güler brilló, marcó su primer gol en el torneo, fue el eje del Madrid y volvió a zona mixta más relajado, haciendo un gesto y riéndose al ver de nuevo a los periodistas. "¿In spanish?", bromeó de primeras. "Muy bien pase de Trent, muy bien pase Gonzalo, muy bien entrado... Y muy bien", respondió sobre su gol, también entre risas. "Más contento porque yo en el medio", vuelve a analizar en tímido castellano.

Alaba y Rüdiger, claves

Con estas dos zonas mixtas de Arda Güler se entienden algunas cosas de los dos años que ha vivido en el Madrid. Meses de no jugar, de aguantar, de mejorar físicamente y de momentos en los que parecía no entenderse con Ancelotti: "Veo a un jugador que trabaja, aprende y quiere jugar. Esto es una pequeña parte del tiempo que yo paso con él y él pasa mucho tiempo con otras personas. Esto es una falta de comunicación", declaró el italiano en febrero de este año, cuando el caso Güler estaba en las portadas.

Esa falta de comunicación se plasmó en el inicio del día a día de Arda, que llegó al club con 18 años, hablando poco inglés y sin idea de español. Se pegó a David Alaba y a Antonio Rüdiger, que hablaban algo de turco al crecer con inmigrantes en Viena y Berlín, y a Thibaut Courtois, que jugó con Arda Turan en el Atlético y sabía algunas palabras, pero le costó.

El remate de Güler que valió el 2-0 ante el Pachuca en Charlotte.

El remate de Güler que valió el 2-0 ante el Pachuca en Charlotte.AP

En el vestuario le llaman "Arda Abi" también por otro problema de comunicación. El turco, "un chico muy muy educado", cuentan en Valdebebas, empezó llamando 'Abi' a veteranos como Luka Modric, una palabra que en turco significa "hermano mayor", y algunos en el vestuario creían que se usaba para todo el mundo. "Buenos días, Arda Abi", le dicen ahora.

Así que después de dos años, 'Arda Abi' ha saltado del banquillo al campo y del vestuario a las zonas mixtas. Asume el foco del Madrid y Xabi Alonso lo agradece: "Es de esos jugadores que debe estar cerca del balón. Cuantos más toques dé, mejor va a jugar. El otro día firmó un gran partido", aseguró el técnico.

"Queda mucho Arda", respondió Güler en sus últimas palabras ante los medios. Un fin de semana que le empuja hacia los focos.

La venenosa herencia de Xabi Alonso

La venenosa herencia de Xabi Alonso

Un Madrid desamparado, sin estilo ni perspectivas, casi pierde un partido con un equipo de Arabia Saudí que este año ni ganó su liga. Y tuvieron que fichar a Simone Inzaghi para ajustar cuentas. Pero en tan sólo cuatro días de entrenamientos, casi tantos como los de Xabi Alonso, poco podían cambiar en sus envenenadas herencias.

Supongo que la decisión de tirar un penalti la tomó el propio Fede Valverde. No creo que se le ocurriera a Alonso. No es un especialista y nunca lo será. Con esa victoria pírrica hubiera podido dibujar un cuadro madridista menos mediocre. Pero ni por esas.

Quiero contar que ni loco Alonso quería iniciarse con este maldito Mundial. Pero le dijeron que o lo aceptaba o no le fichaban. A Xabi le faltó personalidad para rebelarse. Esa es la verdad.

Prefería iniciarse con una herencia envenenada. Sí, porque el síndrome Ancelotti en el Madrid todavía es impactante y poderoso. Acabar el partido con Lucas Vázquez y Modric era aceptar la pobredumbe del viejo estigma.

Pero Xabi no sabía lo que hacer. Ficharon a Alexander-Arnold sin preguntárselo. El Trent de ahora ni me gusta ni me me gustará nunca. Lo quitó por Lucas Vázquez, algo inaudito.

Xabi se volvía loco en la primera parte, porque el Madrid jugaba con centrocampistas que no crean y encima con un Bellingham que ya nadie conoce. Una idiotez de Asencio incluso le costó el empate y, otra vez, el fuerte estigma de Ancelotti hacía que Tchouaméni fuera central, que al final es su puesto en el Madrid.

Lo primero que tiene que fichar el Madrid, si no quiere ahogar a su nuevo entrenador es dejarle richar un Xabi. Y al menos tres creadores de juego en el centro del campo. De otra forma, ¿para qué han fichado a Aloso? Es absurdo.

Pero hasta la fecha no le han dejado ni siquiera elegir un jugador como si el oráculo de Florentino fuera eterno. El Madrid debe cambiar la estructura defensiva y creativa en intensidad o será un desastre y Xabi no durará ni lo que Rafa Benítez.

El equipo actual es un engendro y sin Mbappé el retrato es aún más deprimente. Y todo eso lo veremos para más desgracias blancas, porque con Gonzalo y Arda Güler, los malditos de Ancelotti, no se puede arreglar todo.

Un empate del pasado en el debut del futuro

Un empate del pasado en el debut del futuro

Lo mejor del debut es olvidarlo y volver a empezar, aunque la impresión es que para los buenos comienzos habrá que esperar a que pase este Mundial de clubes. Por algo Xabi Alonso quería llegar después. Todo lo que quiere hacer necesita tiempo, entrenamientos y, si es posible, no realizados en una caldera como la de Miami. Pedir tiempo en el Madrid, sin embargo, es como pedir el cielo. Imposible.

El tono inicial del equipo fue el tono del tardomadrid de Carlo Ancelotti, hasta que en la segunda parte lo acaleró la entrada de Arda Güler y es de suponer que unas palabritas del entrenador. Incluso el gol había llegado del mismo modo que siempre, en una contra que en este equipo no necesita entrenarse, porque forma parte de su instinto. El Madrid corre sin pensar. Lo que hay que valorar es qué hace a partir de lo que piensa su nuevo entrenador. La respuesta está pendiente.

La presión está en su cabeza y la prueba es la intención que partía de la posición inicial ante la salida de balón del Al Hilal. Cuando el rival la superaba, el desconcierto. Como antes. Dice Xabi Alonso que quiere que Jude Bellingham sea más centrocampista, es decir que juegue más atrás. En Miami no vimos exactamente dónde.

Más centrocampista fue Dean Huijsen, el jugador de los mejores pases interiores en la salida de la pelota. El suyo fue un debut emergente en el bajo tono general. Sin embargo, hablamos de un central, un defensa, y la línea de la que formó parte estuvo mal, y no sólo por el penalti de Raúl Asencio, a merced de las combinaciones ofensivas en el arranque del Al Hilal, mejor equipo de lo que piensan quienes miran con desdén lo que se cuece en Arabia. Simone Inzaghi lleva en su banquillo tan poco tiempo como Xabi Alonso. Al contrario que Huijsen, la première de Trent Alexander-Arnold fue inocua. Su profundidad ha de llegar. En la banda opuesta, cada día está más claro la necesidad de un fichaje, sea Álvaro Carreras u otro.

La entrada de Güler llevó a Tchouaméni al central, otra maniobra conocida, aunque es la prueba de que el entrenador, un ex mediocentro, sabe por dónde hay que dinamizar el juego del Madrid. A ese tramo le faltó gol, no únicamente el que falló Fede Valverde en el penalti. Nadie sabe si lo habría encontrado Mbappé, resfriado. Gonzalo marcó el suyo en una aparición que sí marca diferencias con el pasado.

Esteve Calzada, CEO del Al Hilal: “¿La oferta de Arabia a Vinicius? A veces hay cosas ciertas y otras nos utilizan para negociar mejor una renovación”

Actualizado Martes, 17 junio 2025 - 22:42

El fútbol saudí confía cada vez más en el talento español, dentro y fuera del campo. Un claro ejemplo es Esteve Calzada, que hace un par de años dejó el Manchester City para convertirse en CEO del Al Hilal, uno de los clubes más grandes del país y del continente. Su equipo se mide esta noche al Real Madrid y el directivo se sienta con EL MUNDO en Miami para discutir sobre el partido, el mercado, las ofertas, Cristiano Ronaldo o Vinicius.

Vienen de tres semanas complicadas, de intentar varios fichajes y no conseguirlos. ¿Cómo lo han vivido?
Sí, ha sido atípico. Teníamos una serie de objetivos, pero no los vas a comprometer con contratos de dos o tres años pensando sólo en el Mundial, que va a durar unas semanas. Por eso no hemos fichado a nadie, sólo a un par de jugadores locales. Pero ningún internacional, porque no se ha dado, porque ya estaban con la mente en las vacaciones o porque nos pedían demasiado dinero. El equipo tiene una base sólida que ha dado rendimiento y luego ya vendrá el mercado de verano, que seguimos con ambición de traer buenos jugadores.
Pero al Mundial, siendo importante para ustedes, llegan sin fichajes.
Sí, pero el problema lo hubiéramos tenido si se hubieran ido jugadores, porque el equipo se habría debilitado. Tú fichas porque quieres mejorar lo que tienes. Nos han ofrecido infinidad de jugadores y muchos querían venir, pero si tu primera y segunda opción no se han dado, no vas a ir a la quinta porque ya tienes buen equipo.
Debutan contra el Madrid.
El objetivo es competirle y tenemos mucha ansiedad por jugar estos partidos para ver realmente cuál es nuestro nivel. Porque somos de un continente diferente y no podemos jugar muy a menudo con grandes equipos. Ya dimos guerra hace un par de años cuando nos enfrentamos al Madrid en el Mundialito y tenemos ilusión.
Se decía que Vinicius tenía una oferta de Arabia Saudí.
Eso se dice, yo creo que es una leyenda urbana. Al final es una cosa que nos está pasando mucho. A veces hay cosas que son ciertas y a veces nos utilizan, a mi equipo y a la liga en general, para negociar mejor una renovación o para buscar un mejor contrato generando competencia con el equipo que te quiere. Nos ponen en todas las quinielas. Yo sí te puedo decir que en el caso del Al Hilal nunca ha habido nada con Vinicius, y menos con las cifras que han salido en los medios.

"Buscamos jugadores en su prime, de menos de 30 años y con familia estable"

El gran cambio ha sido el entrenador, con la llegada de Simone Inzaghi, finalista de la Champions con el Inter de Milán.
El presidente ha peleado para convencerle y estamos encantados. No ganó la final, pero es uno de los mejores del mundo. Cuando nos interesamos por él nos pidió que volviéramos a hablar después de la final porque estaba centrado en eso y al final se dio la firma. Muestra la ambición del proyecto.
Surgieron muchos rumores con el posible fichaje de Cristiano Ronaldo por el Al Hilal sólo para el Mundial de clubes. ¿Eran ciertos?
No tenían sentido. Para que la gente lo entienda, el Al Hilal y el Al-Nassr, los dos equipos de Riad, son el Madrid y el Atlético, y el Al Ittihad (donde está Benzema, en Yeda) sería el Barcelona. El Al-Nassr es nuestro eterno rival, no se podía coger por ningún lado. Nunca nos lo vamos a plantear.
¿El siguiente paso es seguir adquiriendo jugadores de talla mundial?
Seguro. Existe esa ambición de traer futbolistas del perfil que trajimos. A veces nos ocurre que se interesan en venir jugadores que están pensando en retirarse, pero esto ya no funciona así. Buscamos jugadores en su prime, de menos de 30 años y con familia estable.
Con Neymar hubo mala suerte por la lesión, pero a nivel comercial fue un éxito.
Sí, ha tenido ese impacto a nivel de seguidores, pero tú lo traes para que rinda en el campo. Si luego tienes tirón en marketing genial, pero la lesión fue una lástima.
En cuanto a los ofrecimientos de jugadores, ¿ha habido un cambio en Arabia? Al principio un gasto desorbitado y ahora más sentido, y a la vez más interés de jugadores y equipos en negociar con los equipos del país que una intención vuestra.
Por supuesto. Hay mucha gente que todavía no lo entiende. Te dicen 'oye, que X jugador estaría dispuesto a ir, que va a hacer un esfuerzo'. No, esto ya no funciona así. Nosotros escogemos a los futbolistas que queremos. Eso está cambiando. En nuestro caso siempre hubo una política muy clara de qué tipo de jugadores queríamos. No era traer talento por traer. Son jugadores bien escogidos y no a cualquier precio. Y el resultado funcionó. Mitrovic, Rubén Neves, Milinkovic-Savic, Bono, Cancelo... Es un equipo potente construido con cabeza.

"No vamos a ser el Madrid o el Barça, pero queremos conectar con audiencias jóvenes a través de los jugadores"

Sin sobrepagar.
Hasta ahora la carrera de un jugador bueno era Europa, jugar Champions e intentar ganarla. Esto lo desvía un poco de lo tradicional, y no podemos olvidar que el dinero juega un papel importante, en este caso por el sistema fiscal del país, que no tiene los impuestos que hay en otros sitios y nos permite ser más competitivos. Negociamos en cantidades netas, es la ventaja.
¿Cómo termina usted en el Al Hilal?
Yo llevaba 12 años en el Manchester City, la última etapa como jefe comercial, y me vinieron a buscar del club más importante de Arabia y de Asia. Una aventura apasionante. Me ha llamado la atención la pasión de la gente, llegando a límites insospechados. Para que te hagas una idea, la gente me para y me pide fotos por la calle. Eso en España y Europa no es habitual. Pides fotos a los jugadores o al entrenador, pero no al CEO. El Al Hilal es como el Real Madrid de Arabia, hay que luchar por todos los títulos y queremos ser conocidos a nivel internacional. No vamos a ser el Madrid o el Barça, pero queremos conectar con audiencias jóvenes a través de los jugadores. La prueba es la llegada de Neymar, cuando tuvimos un crecimiento gigante.
Y el país tiene un plan detrás.
Uno que culminará con el Mundial 2034, así que continuará de esta forma. El traer a estos jugadores era un programa del Gobierno, pero no todos los que vienen vienen pagados por ese programa. Tenemos nuestra propia capacidad.
¿Cómo funciona a nivel presupuestario la liga?
El programa del Gobierno se vehiculiza a través de la liga y te da para unos jugadores por un importe total. No hay un importe exacto. Cada equipo presenta sus ideas, sus jugadores, y la liga tiene su departamento deportivo que ayuda a los equipos más pequeños. Nos viene bien el apoyo del Gobierno y lo complementamos con nuestra propia capacidad de generar ingresos y con donaciones importantes. En nuestro caso tenemos al Príncipe Al-Waleed que es uno de los benefactores del club y que influye decisivamente en fichajes y contribuciones financieras.
La margarita millonaria de Cristiano Ronaldo en Arabia Saudí, entre el caos del Al-Nassr y la tentación del Al Hilal: "¿Dónde va a ganar tanto dinero?"

La margarita millonaria de Cristiano Ronaldo en Arabia Saudí, entre el caos del Al-Nassr y la tentación del Al Hilal: “¿Dónde va a ganar tanto dinero?”

Cumplió 40 años el pasado mes de febrero, pero Cristiano Ronaldo sigue siendo el futbolista mejor pagado del mundo. Su trascendencia mediática va más allá de los goles y supera a cualquier otro deportista en términos de publicidad. Nadie genera tanto. Por eso Arabia Saudí, en ese millonario plan de apertura internacional, no dudó en poner sobre su mesa 250 millones anuales en diciembre de 2022. Le convenció con un contrato de dos temporadas y media con el Al-Nassr que terminará este 30 de junio. «Este capítulo ha terminado», anunció el portugués a modo de presión hace unos días. Ahora, desde la concentración de Portugal y a punto de disputar las semifinales de la Liga de Naciones contra Alemania (hoy, 21:00), el luso deshoja la margarita saudí.

Arabia le insiste para renovar y Cristiano, consciente de que en ningún otro sitio verá tanto dinero a estas alturas de su carrera, gritó a los cuatro vientos ese final de capítulo pero de puertas para adentro sigue negociando su futuro en Riad. El portugués, más allá del salario, quiere jugar en un equipo competitivo, y el Al-Nassr ahora mismo está muy lejos del Al Ittihad de Benzema, campeón de liga, y el Al Hilal, que en su momento firmó a Neymar (ahora en el Santos), negocia estos días la llegada de Simone Inzaghi, finalista de la Champions con el Inter, como nuevo técnico y disputará este mes el Mundial de Clubes. El Al-Nassr, mientras, quedó tercero en la competición doméstica y cayó en semifinales de la Champions asiática. La desesperación de Cristiano, eternamente competitivo, es total.

El Al-Nassr es un club en llamas ahora mismo. Los aficionados claman en redes sociales por la necesidad de cambios en la directiva, mientras la plana mayor ha confirmado la continuidad de Fernando Hierro como director deportivo. Pero todo parece listo para cambiar. Se busca destino a Sadio Mané y Laporte y la obsesión del club es convencer a Cristiano, que mira con ojos de recelo al otro vecino de Riad, el Al Hilal, y su presencia en el Mundial, donde debutará ante el Madrid. Según ha podido confirmar este periódico, la posibilidad de que el portugués termine en el Al Hilal no está descartada.

El interés de México y Estados Unidos

El gobierno de Mohammed bin Salman, príncipe heredero saudí, tiene en el deporte, y en concreto en el fútbol, uno de los pilares de la tan cacareada Vision 2030, una estrategia de mejora de diferentes sectores para atraer al turismo internacional y cambiar la imagen del país. Y Cristiano Ronaldo es parte fundamental de ese plan. A medio camino entre esa Vision 2030 y el Mundial que organizarán en 2034, no pueden permitirse, ni se van a permitir, prescindir del portugués y a la vez son conscientes, como el luso, que ninguna oferta económica igualará la suya.

Nos encontramos, entonces, en una margarita saudí. Cristiano Ronaldo sabe que a pesar del interés de equipos de México o de la MLS de Estados Unidos, nadie pondrá tanto dinero en su mesa como los saudíes, y éstos son conscientes de que aunque convenzan a algunas estrellas para jugar en la liga, ninguna será como el delantero luso. «¿Dónde va a ganar tanto dinero?», comenta a este periódico una fuente cercana a la negociación.

"Nadie tiene un plan"

El Fondo de Inversión Pública, que es de donde sale gran parte del poder económico de los clubes saudíes, planea situar a un nuevo presidente en el Al-Nassr a partir de junio y el propio Hierro ha declarado que «el club está trabajando en la renovación de Cristiano y espero que las dos partes se entiendan». «La presencia de Cristiano es parte del proyecto de Arabia Saudí», dijo, y matizó: «Eligió representar al Al-Nassr cuando firmó».

Mientras, el portugués liderará esta noche a Portugal ante Alemania, en un nuevo juicio a la selección que lidera Roberto Martínez. El español, cuestionado después de la última Eurocopa, ha tenido unos meses inmaculados en lo deportivo, siempre apostando por Cristiano, pero su futuro no parece del todo confirmado. «El futuro de Cristiano Ronaldo con la selección es como hablar del tiempo, todo el mundo opina, nadie tiene un plan, ni siquiera el propio Cristiano», explicó el entrenador, cuyo objetivo sigue siendo «ganar un Mundial» con Portugal... Y con Cristiano.