Vinicius Júnior no volverá a jugar con el Real Madrid hasta la ida de los cuartos de final de la Champions League ante el Manchester City, el próximo 9 de abril. Mezcla del parón internacional de la próxima semana y de la sanción al futbolista brasileño, que vio la quinta amarilla de la temporada en Liga contra Osasuna y se perderá el duelo del domingo 31 frente al Athletic Club en el Bernabéu, uno de los partidos más importantes que le restan al conjunto blanco en su objetivo de ganar el título.
Vinicius recibió la tarjeta justo antes del descanso, en el minuto 43, al protestar a Martínez Munuera que no sacara tarjeta a un jugador navarro. El delantero se acercó al árbitro, le pidió la amonestación y al ver que no se la enseñaba, se rio y se alejó de él. Esa actitud fue suficiente para que el colegiado le castigara con una amarilla que acarrea suspensión. «¡No he hecho nada! Es increíble», decía hacia el banquillo. «Todos los partidos este árbitro me saca tarjeta», añadió más tarde a la cámara mientras andaba hacia los vestuarios.
La quinta amarilla del curso liguero para Vinicius es la cuarta de manera consecutiva, enlazando con las que vio ante el Valencia, el Leipzig y el Celta. Una constante que, según Ancelotti, necesita mejorar. «La verdad es que es un jugador muy peligroso y todo el mundo se da cuenta. La afición rival que lo pita, los rivales que hoy han sido correcto, le han dado patadas pero dentro del reglamento… Él obviamente en esa faceta puede mejorar y va a mejorar. Es un chico humilde, serio e inteligente», declaró el técnico italiano.
Seis goles en cuatro partidos
Cuestionado sobre el ambiente que rodea a Vinicius en cada partido, Ancelotti también insistió en que el futbolista debe asimilar mejor ese contexto. «La presión que tiene en el ambiente tiene que controlarla un poco más, si», aseguró Carletto en sala de prensa. Antes, elogió la actuación «extraordinaria» de su futbolista: «Le he felicitado porque ha hecho un partido extraordinario. Ha elegido muy bien las situaciones, se ha movido bien sin balón, ha atacado la línea defensiva, esto es lo que ha mejorado más. Con balón siempre es eficaz pero ahora sin balón está siendo espectacular».
Y es que en el otro lado de la balanza, frente a esas amarillas, Vinicius acumula seis goles en los últimos cuatro partidos. Dos al Valencia, uno al Leipzig, otro al Celta y los dos de El Sadar, donde fue muy superior a los defensas navarros. Anotó dos, pero se pudo ir hasta los cuatro si hubiera estado todavía más acertado. En la primera parte tuvo un mano a mano con Herrera en el que intentó batirle por debajo de las piernas y en el tramo final definió demasiado desviado cuando ya olía el hattrick. «No pienso en los que he metido, sino en la que he fallado al final. En que podría haber marcado aún más», reconoció el futbolista tras el duelo. «El míster me ha dado libertad y yo la estoy aprovechando. Arriba todos tenemos la flechita para arriba, marcando mucho», añadió.