Un doblete de Javi Puado devuelve al Espanyol a Primera

Un doblete de Javi Puado devuelve al Espanyol a Primera

Actualizado

El Espanyol logró firmar otro ascenso relámpago por sexta vez en su historia. Al igual que ya sucedió tras verse condenado a pelear en Segunda División en el final de las temporadas 1961-62, 1968-69, 1988-89, 1992-93, y 2019-20, el descenso vivido el curso pasado se ha visto contrarrestado por un nuevo regreso a la élite un año después de enfrentarse de nuevo al abismo.

En esta ocasión, con un arreón final en el que se han entremezclado el tormento y el éxtasis. Igual que ocurrió en 1963, con una promoción ante el Mallorca resuelta a la postre con un tercer partido de desempate en el Bernabéu o en 1970, un año en el que el retorno se materializó en la penúltima jornada. Y por último en 1990 en el que el regreso tuvo que forjarse en una tanda de penaltis ante el Málaga en La Rosaleda.

Esta vez, tras caer en el Tartiere por 1-0, consiguió un 2-0 con doblete de su capitán, Javi Puado, que materializó el nuevo retorno por la vía rápida. Al Oviedo, mientras, cuando todo parecía alinearse para firmar el final de una travesía por el desierto que suma ya 23 años, le tocará esperar por lo menos un año más para firmar su tan deseado retorno a la élite. De nada le sirvió tratar de apretar las cosas en un segundo tiempo en el que Santi Cazorla, fiel a su palabra, puso también su particular granito de arena..

Al Espanyol no le quedaba otra que buscar el máximo protagonismo en el partido para lograr un triunfo que era, al fin y al cabo, su única posibilidad de materializar el ascenso. El 1-0 logrado por el Oviedo en la ida le permitía al conjunto visitante gestionar el juego sin prisas ni ansiedad.

Mientras, los locales pisaban una y otra vez las inmediaciones del área oviedista, a lo largo de la mayor parte de los primeros 45 minutos, con más ganas que claridad. A los de Luis Carrión, además, les avalaba el buen bagaje defensivo cosechado en los tres primeros partidos del playoff de ascenso, que había logrado cerrar con su portería imbatida.

El devenir del primer tiempo amenazaba con permitirles mantener su racha. Hasta que emergió la figura de Javi Puado. El capitán blanquiazul aprovechó un servicio de córner cuando faltaba poco más de un minuto para el final de la primera mitad para inaugurar el marcador con el 1-0. Tres minutos después, aprovechó una asistencia de un Pere Milla perfectamente habilitado por Cabrera para poner un 2-0 que era ya una losa pesadísima sobre las espaldas de los visitantes. El marcador, cómo no, desató la euforia de una grada periquita entregada sin cortapisas a sus futbolistas, deseosa de vivir una nueva jornada para el recuerdo, pero para la que tuvo que apretar los dientes en defensa en el segundo tiempo.

La temporada del Espanyol ha sido una auténtica montaña rusa de emociones, con un arranque de la temporada en la que Martin Braithwaite, finalmente su máximo anotador, pareció más que dispuesto a forzar su salida del club y en la que han pasado por el banquillo blanquiazul hasta tres técnicos diferentes.

Tres entrenadores

En la jornada 14 la entidad optó por destituir a Luis García y apostar por Luis Miguel Ramis dado que el equipo estaba a siete puntos del liderato. Con el ex jugador del Real Madrid, mientras, las cosas no fueron mucho mejor y se optó finalmente por poner los destinos del primer equipo en manos de un Manolo González que se había incorporado a la entidad en verano pera dirigir al filial.

Las cosas mejoraron, pero no hasta el punto de lograr el ascenso sin pasar por los playoffs. El hecho de terminar cuarto pareció complicarle además un poco más sus opciones, restituidas a la postre por el triunfo del Oviedo frente a un Eibar que acabo el campeonato en la tercera posición.

La derrota en el Tartiere, en la ida de la final, fue un duro golpe finalmente sanado con un triunfo sin paliativos en casa, con una afición entregada y que llenó las gradas hasta la bandera para festejar el sexto regreso a Primera. Otra vez, como marca su tradición, por la vía rápida.

kpd