El golfista español reventó Riviera Country Club en la tercera jornada del Genesis para tomar el liderato del torneo a falta de los últimos 18 hoyos
Rahm sacó su instinto ganador desde el hoyo 1, donde arrancó con birdie y la clave de su día fue no cometer ni un solo error para firmar una tarjeta limpia con seis birdies. El único momento donde llegó a peligrar el par fue el hoyo 13, donde tuvo que embocar un putt de unos cuatro metros para evitar el tropiezo. Y eso que desde el tee de salida, la tercera jornada del español, siguió la tónica errática de toda la semana y solo acertó cinco calles, en total lleva 15 de 42 posibles, sin embargo es el cuarto mejor jugador del torneo con más greenes en regulación (alcanzó 37 de 54 en estos tres días). Aunque la diferencia de la tercera jornada fueron los golpes de approach, y es que el salto de calidad de Rahm en golpes de 120 metros hacia el hoyo ha sido clave esta temporada para lograr sus espectaculares resultados. A eso hay que unir la solidez de su putter. El juego de Rahm fue como un rodillo que terminó por destrozar a sus rivales, Max Homa, el campeón defensor, mantuvo el pulso hasta el hoyo 15, donde acumuló dos errores consecutivos que le hicieron terminar la jornada a tres golpes del ‘León de Barrika’. Tampoco Keith Mitchell planteó batalla al líder de la FedEx Cup y terminó tercero a cuatro golpes.
Rahm cerró el día con el putt más largo de toda la jornada, unos ocho metros para birdie que terminaron de minar la moral de sus rivales.
Solo 18 hoyos le separan de un nuevo triunfo, que sería el tercero del año, la consecuencia de ganar sería recuperar el número uno del mundo. Además se convertiría en el jugador que más rápido logaría la tercera victoria en una temporada desde Johnnie Miller en 1975 y el cuarto golfista no americano que logra alcanzar la cifra de 10 triunfos en el PGA Tour antes de los 30 años. Algo que antes solo lograron Gary Player, Rory McIlroy y Jason Day). Además Rahm acumula 171 golpes bajo el par en sus últimos 10 torneos.
Los enormes 65 golpes de Rahm solo fueron mejorados en este tercer día por Denny McCarthy (64 golpes) y la tercera mejor vuelta del día fueron, entre otros, los 67 de Tiger Woods. El californiano, que pasó el corte ‘in extremis’, demostró solidez desde tee de salida y estuvo mucho más acertado en los greenes, solo cometió un bogey en el hoyo 7 y dejó un eagle en el hoyo 1 (su décimo del día) para el recuerdo. Tras una salida monumental, Woods pegó un hierro antológico desde 175 metros, la bola pasó por encima del hoyo para dejarse un putt de eagle de un metro.
La anécdota del día sucedió tras el hoyo 17, en la grada una niña de 9 años llamada Madelyn Quinn exhibía un poster donde había descrito su ‘lista de deseos’, Madelyn nació con un problema coronario severo que le hizo someterse a un transplante de corazón en su primer año de vida para sobrevivir, precisamente el primer deseo de su lista estaba tachado decía textualmente “tener un corazón transplantado”, el segundo en la lista era ‘conocer a Tiger’ y el tercero, ‘jugar Augusta’. Tiger se percató de la pancarta y fue directo a saludar a la niña y regalarle uno de sus guantes y de paso poner el segundo ‘stick’ en su lista de deseos. A Madalyn, una consumada golfista para su edad, ya solo le queda jugar Augusta National.
