Alberola Rojas y Muñiz Ruiz, árbitros de las dos semifinales, serán los primeros protagonistas de un cambio que tendrá continuidad en la Liga. Movistar+, que tiene los derechos del torneo, se encargará de distribuirlos.
La Federación Española y LaLiga llegaron hace tres semanas a un acuerdo que cambiará la realidad del arbitraje en el fútbol español. La Supercopa de España, que se disputará estos días en Riad, capital de Arabia Saudí, será el primer evento en el que se puedan escuchar las conversaciones entre el árbitro de campo y el VAR durante la revisión de una jugada.
Se trata de una medida que pretende compensar las críticas a la gestión del VAR durante los últimos meses, especialmente en el primer tramo de la temporada liguera, y que llega tras eternas conversaciones entre LaLiga y la RFEF, necesitadas de “transparencia” en la cuestión arbitral.
La publicación de los audios podría comenzar en la primera semifinal de la Supercopa, el derbi madrileño entre el Real Madrid y el Atlético de Madrid. Si hay una revisión de VAR durante el encuentro, quedará registrada y será Movistar+, dueña de los derechos del torneo, quien la emita después del partido, en diferido. Esto es lo que menos ha gustado en los clubes, que preferían su emisión en directo, pero de momento tendrán que conformarse con escuchar a los árbitros unos minutos después del pitido inicial. La IFAB, asociación que gestiona las normas del fútbol a nivel internacional, todavía no permite realizar esta operación en vivo.
Movistar+ sólo emitirá el audio de la conversación desde que la sala VOR avisa al colegiado hasta que éste toma su decisión final. El resto del partido seguirá siendo privado. Después de la televisión, será la propia RFEF quien ponga los sonidos a disposición de todo el mundo a través de sus redes sociales. Alberola Rojas, árbitro del derbi, y Muñiz Ruiz, que dirigirá el Barcelona-Osasuna, serán los primeros protagonistas.
Según el Comité Técnico de Árbitros, el objetivo es “seguir avanzando en el camino de la transparencia y el entendimiento del trabajo arbitral por parte de todos los estamentos del fútbol y de los propios aficionados”.
El Madrid volvió a salir vivo del precipicio de la Copa de Europa. Con talento, con pegada, con agonía... Con todo lo que es la historia del conjunto blanco. Mbappé, Vinicius y Bellingham levantaron al cuadro de Chamartín para sacarlo del asedio de Bérgamo, donde se jugaba su futuro continental. De Ketelaere y Lookman les metieron el miedo en el cuerpo, pero aguantaron. [Narración y estadísticas (2-3)]
Ante lo "jodido" de la situación, como reconoció Valverde en la previa, Ancelotti no titubeó en su alineación. Dio entrada a Vinicius, que llevaba cuatro partidos de baja por lesión, y situó a Tchouaméni como central en lugar de Asencio. Nadie había ganado en Bérgamo, castigado todo el mundo por ese extenuante marcaje al hombre del cuadro de Gasperini, así que la tarea era de nota.
Y el Madrid no decepcionó en el inicio. La entrada de Vinicius y Brahim dotó al equipo de mordiente y regate, clave a la hora de superar la presión rival, y el plan de buscar la espalda de los centrales con Mbappé dio lugar a los mejores 15 primeros minutos del curso madridista.
El sufrimiento de Lucas
Tras una combinación entre Brahim y Lucas, el andaluz buscó a Mbappé la frontal del área, éste superó a De Roon con un solo control y batió a Carnesecchi con un disparo seco. El gol fue el premio al buen hacer madridista y metió el miedo el cuerpo a la grada durante unos instantes. Pero fueron eso, instantes.
Unas jugadas después del tanto, Rodrygo comenzó a calentar por la banda y levantó las sospechas. Mbappé dejó de buscar la espalda de los defensas italianos, al Madrid le duró poquísimo el balón en cada posesión y el Atalanta comenzó a asediar la portería de Courtois. Sufrió especialmente Lucas, impotente ante Lookman, MVP de la última final de la Europa League.
Los bergamascos acumularon oportunidades y sólo la aparición de Rüdiger y Tchouaméni para cortar disparos evitó el empate. Lookman en el 13, De Ketelaere en el 17 y el 19, Bellanova en el 20...
Rival incansable
En el banquillo, Ancelotti pedía calma a sus jugadores, insistentes en el plan del inicio pero incapaces de llevarlo a cabo por los problemas físicos de Mbappé, que terminó pidiendo el cambio en el 34. El Madrid, precipitado, perdía el balón demasiado rápido y Brahim y Bellingham ya no podían darse la vuelta con tanta facilidad. El Atalanta, sin embargo, no bajaba marchas, incansable.
Mbappé, tras su lesión en Bérgamo.EFE
Rüdiger tuvo una buena opción en el 39, tras un centro de Ceballos y una continuación de Bellingham, pero su disparo se marchó fuera. Y antes del descanso, los italianos encontraron oro en un error de Tchouaméni. El galo no fue contundente en una arrancada de Kolasinac hacia el área y rozó al defensa en la carrera. Una zancadilla que Marciniak castigó con penalti.
De Ketelaere envió la pena máxima a la escuadra de Courtois y los locales se llevaron un gol psicológico al bolsillo camino de vestuarios. El Madrid, 24º en la Champions, se enfrentaba a una segunda parte clave por su supervivencia continental. Y ya se sabe lo que suele suceder cuando el Madrid se enfrenta al precipicio de la Copa de Europa. Que sale victorioso. Sin Mbappé y con Rodrygo y Vinicius recién salidos de lesiones musculares, el conjunto blanco se hizo gigante en Bérgamo. Aguantó la batalla física y de ritmo que propuso el Atalanta y castigó el atrevimiento defensivo de los italianos.
A la espalda de los centrales
Vinicius cogió el testigo de Mbappé y comenzó a desafiar la espalda de los centrales, y en una de ellas apareció el gol. Brahim intentó un pase al hueco al brasileño, Hien lo desvió, pero el rechace dio en Ederson y volvió al delantero del Madrid, que cruzó de zurda ante Carnesecchi. El conjunto blanco siguió creciendo y en la siguiente jugada silenció Bérgamo. Vinicius bajó a recibir en el carril central, levantó la mirada y vio el desmarque de Bellingham a la espalda de De Roon. De nuevo, el mismo plan. El inglés recibió, sentó al neerlandés con una finta y batió al portero con la zurda.
Pero Gasperini vive y muere con su plan durante los 90 minutos, y el Atalanta no tiró la toalla. En el 65, Lookman retó a Lucas en el pico del área y sorprendió a Courtois con un disparo al palo derecho del belga.
El tanto y la fatiga madridista, donde sólo Rodrygo, reemplazo de Mbappé, saltó desde el banquillo, convirtieron los últimos minutos en un asedio italiano. En el 83, Ancelotti movió el árbol. Entraron Modric y Asencio por Ceballos y Brahim y el campo se inclinó hacia Courtois, pero nadie le venció. Ni siquiera Retegui, a portería vacía en el 94. El Madrid sale vivo de Bérgamo y sigue en pie en la Champions. Así es su historia.
La NFL ganó 23.000 millones de dólares el año pasado, cuatro veces más que la Liga y la Premier Aunque muchos de ustedes no la sigan, se trata de la competición con mayores ingresos del mundo. Más que la NBA o la MLB de béisbol (11.000). Nadie se le acerca. Y la NFL, ocupando el trono millonario del deporte desde Estados Unidos, quiere crecer y expandirse. Ha celebrado partidos en cinco países extranjeros (Reino Unido, Irlanda, Brasil, Alemania y México) y llega ahora a España, al Santiago Bernabéu, donde se dejará dos millones, cifra irrisoria viendo su bolsillo, para transformar el coliseo del Real Madrid en el gran show del deporte americano.
Este domingo, los Miami Dolphins y los Washington Commanders disputarán uno de los partidos de la jornada 11 de la temporada regular. Allí utilizan el término 'semana', pero mantengamos la tradición. Este curso, la liga ya ha tenido encuentros en Sao Paulo, Dublín, Londres (dos en el estadio del Tottenham y uno en Wembley) y Berlín, y el modus operandi de la organización norteamericana es siempre el mismo: la NFL no se adapta al entorno, sino que convierte el entorno en su propia casa. Eso hará con el Bernabéu.
Para saber más
La transformación será total en el campo, en la grada, donde desaparecerán los escudos del Madrid, y en el interior. El césped del coliseo blanco mide 105 metros de largo, mientras que los de la NFL se van hasta los 109 (120 yardas). 100 yardas de 'juego' y 10 en cada extremo, donde se sitúan las zonas de touchdown. Ahí, la organización ha ganado metros a las gradas del Fondo Norte y Sur quitando filas de asientos.
En los laterales también se están realizando modificaciones. Olvídense de los banquillos que suelen ver en el fútbol. En la NFL, los equipos se sitúan cada uno en una banda del terreno de juego, en todo lo ancho. Son 53 jugadores y decenas de asistentes, el triple que una plantilla de 'soccer'. La ventaja en este sentido es que el ancho en la NFL es más corto que en el fútbol y no serán necesarias obras en las primeras filas de los laterales, aunque sí se han realizado modificaciones en los túneles que van al vestuario.
Vestuarios y salas de prensa
De nuevo, olvídense de la imagen futbolera. Las plantillas no saldrán por las escaleras que suelen utilizar el Madrid y sus rivales, sino que se han creado dos zonas en ambas esquinas de los banquillos para que los jugadores y los entrenadores salgan desde los vestuarios con más espacio y comodidad. Además, algunos de los miembros del cuerpo técnico se colocarán en las cabinas de televisión para seguir el partido desde lo alto. Unas obras que han obligado a cerrar el Tour del Bernabéu de jueves a domingo.
Para que esos 53 jugadores se cambien y se duchen, se han ampliado los vestuarios y se ha colocado una nueva sala de prensa en la sala donde se realiza la zona mixta, ya que cada equipo usa una sala de prensa diferente. Hasta eso ha transformado la NFL, que no quiere que el día a día de las franquicias lejos de sus fronteras sea diferente al de 'casa'.
La 'fan zone' de los Dolphins, el jueves en Madrid.EFE
En el interior, el Museo Bernabéu ha dejado espacio al Museo de la NFL, una serie de rincones por todo el estadio en los que los aficionados podrán conocer equipaciones históricas y reliquias de la liga.
El Madrid, a través del departamento que se encarga del estadio, denominado ya 'Bernabéu', también ha cedido gran parte del espacio de la tienda oficial para que la NFL venda ahí todo su merchandising, no sólo de Miami y Washington, sino de todas las franquicias de la liga.
Una 'mini Super Bowl'
En lo alto del estadio ya no estará el escudo del conjunto blanco, sino que gobernará el techo del Bernabéu la bandera de España, la de la NFL y la de Estados Unidos, cuyo himno sonará en la previa. En el descanso habrá una actuación estelar de Daddy Yankee y Bizarrap, intentando imitar el show de una Super Bowl. No en vano, los responsables de la liga ya dejaron claro en este periódico que querían «hacer una mini Super Bowl en el Bernabéu». Ese espectáculo deportivo y cultural es lo más conocido de la NFL fuera de sus fronteras, y no podía faltar en el partido de Madrid.
Al hilo de la actuación, los operarios han trabajado esta semana instalando diferentes paneles para tapar algunas zonas de lo alto del estadio para tratar de reducir el ruido exterior para evitar problemas con los vecinos, que denunciaron al Madrid por pasar los niveles de decibelios permitidos en la zona. La hora del partido (15:30) ayudará, pero el club no quiere correr riesgos.
Un casco gigante de la NFL, el jueves en el Palacio de Cibeles.AP
Más allá del Bernabéu, la ciudad se ha engalanado para la ocasión. La Comunidad de Madrid y el ayuntamiento han invertido 3,3 millones de euros (1,5 el gobierno de Ayuso y 1,8 el de Almeida) para promocionar el partido, que aparece en todas las calles del centro de la ciudad gracias a unos carteles colocados en lo alto de las farolas. Las instituciones esperan un impacto económico de 70 millones de euros, fruto de todas las acciones publicitarias que se generarán a lo largo y ancho de la capital. Habrá actividades en Cibeles, Plaza Mayor, Sol o Vallehermoso, y presencia de otras franquicias que no juegan el partido, como los Kansas City Chiefs o los Chicago Bears.
El Bernabéu actuará como «punto de inflexión», así lo admite la organización, para la expansión definitiva de la NFL en España.