Alcaraz se luce ante Carballés en un cómodo debut en Miami

Alcaraz se luce ante Carballés en un cómodo debut en Miami

Son ya 11 las victorias consecutivas de Alcaraz ante jugadores españoles. El número dos del mundo no pierde contra ninguno de sus compatriotas desde las semifinales de Indian Wells de 2022, cuando Rafael Nadal hubo de comprometer su físico para desembarazarse de él en un durísimo partido a tres sets. Han transcurrido tan sólo dos años, un tiempo que el murciano ha rentabilizado hasta convertirse en el jugador que hoy es, un doble campeón del Grand Slam que busca en Miami su sexto Masters 1000 y, de paso, ingresar como el primer tenista español capaz de redondear en una misma temporada victorias en Indian Wells y en el torneo que ahora nos ocupa.

En el día de su trigésimoprimer cumpleaños, Roberto Carballés no pudo detener esa secuencia triunfal. Fue en Miami, poco después de aquella derrota ante Nadal, donde Alcaraz consiguió su primer gran título, el despegue de una carrera que vuelve a repuntar tras algunos meses menos brillantes, condicionados por los problemas físicos y por la evolución lógica de un tenista de 20 años. Alcaraz venció por 6-2 y 6-1, en una hora y 25 minutos, clasificándose para la tercera ronda.

Ritmo insoportable

Desde las tres bolas de que dispuso para igualar a uno tras perder su saque en el juego de inicio, Carballés no volvió a contar con opciones de equilibrar un partido dominado con autoridad por su rival, que impuso un ritmo insoportable para el canario, 64º del mundo. Alcaraz desplegó todos sus recursos y, a partir de la holgura con la que dominó, experimentó con distintas variantes de su juego, siempre con acierto y alegría a la hora de aproximarse a la red.

Ausente Novak Djokovic, el jugador de El Palmar es el principal favorito para un triunfo que tratarán de discutirle Jannik Sinner, a quien venció en semifinales de Indian Wells, y Daniil Medvedev, defensor del título, al que superó en la final. Carballés trató de ir con todo a medida que avanzaba el duelo, sin escatimar riesgos, pero volvió a ceder su saque de entrada en el segundo parcial, deslizándose ya de manera irremediable por la pendiente, aunque sin bajar nunca los brazos. Se dio el gusto, al menos, de llevarse un punto con dejada, contradejada y réplica, en el juego que vino a continuación. Leve paréntesis en el festival de su adversario, que reanudó su afinada tarea y espera rival del partido entre Gael Monfils y Jordan Thompson.

kpd