La encrucijada de Xabi Alonso en el Madrid: el círculo de confianza, la cohabitación con Florentino y las claves de un equipo de autor

La encrucijada de Xabi Alonso en el Madrid: el círculo de confianza, la cohabitación con Florentino y las claves de un equipo de autor

La vuelta de Xabi Alonso al Madrid no es como la del hijo pródigo en los Evangelios, porque no hubo pecado en su marcha al Bayern, pese a escoger el lado del anticristoGuardiola, sólo la voluntad de determinar su propio destino y buscar la ciencia hasta en el sacrilegio, pero sin avaricia. No necesita, pues, el perdón de Dios ni la misericordia de ser superior alguno. Estamos ante el regreso de un conquistador que siempre ha obedecido a su instinto, especialmente para decir «no». Dijo «no» a Rafa Benítez por quedarse junto a su pareja antes del parto, hecho que marcó el principio del fin de su balada en Liverpool, y dijo «no» a Hacienda, frente a la que temblaban e imploraban sus compañeros, los grandes héroes de Sudáfrica, bajo la amenaza de acabar en la cárcel. El Madrid sabe bien que ha sentado a todo un carácter en un banquillo donde se acostumbra a decir «sí», y el nuevo entrenador conoce el principio de autoridad que rige el lugar del mismo modo que el hijo que vuelve a la casa del padre. Hay cosas que no cambian ni la fama ni el dinero. Esa cohabitación es tan o más importante en esta nueva era que el encaje de piezas en el campo, porque entrenar al Madrid no es entrenar únicamente a un equipo. Es entrenar a un ecosistema compuesto de fútbol, poder y vanidades.

El primer «no» del entrenador acabó por ser un «sí», aunque sin llegar a la tensión de los extremos, porque la voluntad del tolosarra era empezar de cero, en la pretemporada. Es decir, después del Mundial de Clubes. A cambio, se acelera la llegada de jugadores, aunque no haya tiempo para el mercadeo llevado al límite, como gusta a Florentino Pérez. Ahí tenemos ya a Huijsen. Sin embargo, el «sí» que Xabi Alonso le habría dado a Modric, o eso dice el entorno del croata, condicionado a la última voluntad del club, fue un «no» cuando llegó a los despachos principales de la T4 del Bernabéu. El interés estratégico del Madrid, pues, ha prevalecido en el tanteo anterior y posterior a la firma del técnico, cuyo fuerte carácter no está reñido con su pragmatismo.

Xabi Alonso, durante un partido en Leverkusen.

Xabi Alonso, durante un partido en Leverkusen.OSCAR DEL POZOAFP

Xabi Alonso es un tipo de decisiones firmes, no de estallidos, y de personas de confianza, pero sutil con las equidistancias. Se mantuvo fiel a su asesor fiscal, Iván Zaldúa, cuestionado por algunos de sus colegas en el sector, en el largo proceso del litigio con Hacienda que lo llevó a la tanda de penaltis, la sala del Tribunal Supremo. Mantiene a su agente de siempre, Iñaki Ibáñez, de sólida reputación y referencial para todos los futbolistas y entrenadores en Euskadi, pero deja cuestiones relativas a su imagen en manos de Best of You, agencia bien relacionada con la cúpula madridista. Xabi Alonso, simismo, llega con el staff técnico que tenía en el Bayer Leverkusen, pero su conexión y sintonía personal con Álvaro Arbeloa, consolidada especialmente en la era Mourinho, debería lubricar mejor la transición entre el filial y el primer equipo, al ser elegido el segundo como sustituto de Raúl.

Su segundo será el argentino Sebas Parrilla, al que conoció ya en Valdebebas, en su paso como técnico por las categorías inferiores. También estuvo vinculado a la cantera blanca Beñat Labaien, junto a Fernando Morientes en el Juvenil B, aunque Xabi Alonso lo conoció en la Real Sociedad, donde era analista. Alberto Encinas, por su parte, llegó al Bayer Leverkusen desde las categorías inferiores del Barcelona, crianza que también tuvo el nuevo preparador físico, Ismael Camenforte, vinculado al fútbol sala azulgrana, y que es considerado pieza clave en la reconstrucción, tanto para el entrenador como para el club. Si Antonio Pintus, al que siempre se apoyó desde la cúpula, sigue o no por Valdebebas, será sin molestar, únicamente como observador.

Pintus, al que trajo al Madrid Zinedine Zidane, regresó por petición expresa del club, pero su conexión con Carlo Ancelotti y su hijo Davide no era, precisamente, la ideal, pese a tratarse de compatriotas. En el entorno del staff se le observaba algo «anticuado». Camenforte es partidario de una preparación más individualizada en función de los puestos y las demarcaciones, y suya es una frase definitoria: «No trato a los futbolistas como a atletas». Atletas fue la palabra que utilizó Guardiola para definir al Madrid de Mourinho en el que jugaba Xabi Alonso, y con el que se sintió en muchas cosas identificado.

"Mou era el técnico que necesitábamos"

«Era el entrenador que el Madrid necesitaba en un momento determinado», confesaba el Xabi Alonso jugador en conversación con este periodista. Era el momento de mayor esplendor del Barça de Messi, lo que llevó al madridismo a una crisis de autoestima. No estamos en un momento semejante, no al menos todavía, pese a la optimista proyección del nuevo Barça de Lamine Yamal y del 4-0 sufrido esta temporada en los clásicos. En los 10 años transcurridos desde que el Barcelona levantó la última Champions, en 2015, el Madrid ha conquistado cinco, la última hace un año, con el entrenador saliente. El Madrid no está ante una urgencia histórica, pero sí ante la urgente necesidad de cambiar una tendencia.

El fútbol del Bayer Leverkusen, campeón de la Bundesliga y la Copa la pasada temporada, ha dejado claro qué quiere Xabi Alonso de sus jugadores: alto ritmo de juego, presión y adaptabilidad para cambiar de sistema, a partir de un inicio con tres centrales. Eso no quiere decir que vaya a repetir los dibujos tácticos en el Bernabéu, pero lo que sí va a exigir son las mismas constantes vitales. El Madrid que viene va a ser un equipo de autor, para lo bueno y para lo malo, hecho que confiere a su entrenador, de 43 años, un liderazgo mayor en un momento en el que el líder supremo se desgasta en muchos frentes a campo abierto, la Superliga, Tebas y los árbitros, sin aliados ni relevo ante un futuro no ajeno a las incógnitas.

El Real Madrid anuncia a Xabi Alonso como nuevo entrenador

El Real Madrid anuncia a Xabi Alonso como nuevo entrenador

Después de decir adiós a Carlo Ancelotti en la tarde del sábado, el Real Madrid no ha esperado más de 24 horas para anunciar, por fin, a su nuevo entrenador. Era un secreto a voces, deslizado por el propio Ancelotti, por Dani Carvajal y por varios miembros de la primera plantilla y del club durante las últimas semanas, pero ahora es oficial. Xabi Alonso es el nuevo entrenador del conjunto blanco. El tolosarra firma por las próximas tres temporadas, hasta junio de 2028, será presentado este lunes y comenzará su etapa en el banquillo madridista dirigiendo al equipo en el Mundial de Clubes, que comienza el 14 de junio en Estados Unidos.

Después de tres cursos en el Bayer Leverkusen, con una Bundesliga, una Copa y una Supercopa de Alemania que le han convertido en el mejor entrenador de la historia del conjunto alemán, el técnico vasco anunció su adiós a Leverkusen hace apenas unos días, consciente ya de su futuro como técnico del Madrid.

El conjunto blanco se ha mantenido en silencio oficial durante estas últimas semanas a pesar de que de puertas para dentro ya trabajaba con Alonso en los planes a corto y medio plazo de la plantilla. El Madrid ni siquiera acompañó con un comunicado el anuncio de Ancelotti en el que confirmaba que iba a ser seleccionador de Brasil. Siguió en silencio hasta el viernes, cuando publicó que el duelo ante la Real sería el último del italiano. Ni rastro todavía de Alonso hasta el día de hoy, cuando por fin, con la Liga finalizada, el club decidió hacerlo oficial.

Alonso llega después de seis cursos como entrenador, tres en la Real Sociedad, a la que ascendió a Segunda, y otros tres en Leverkusen, donde ha peleado dos Bundesligas al Bayern y ha ganado una.

El vasco volverá al Bernabéu, que fue su casa durante cinco campañas, entre 2009 y 2014, y con la camiseta con la que disputó 236 encuentros. En sus vitrinas, la Décima Copa de Europa, dos Copas, una Liga, una Supercopa de España y otra de Europa.

Xabi aterrizará en una plantilla tocada tras una temporada irregular, que ha terminado levantando sólo la Supercopa de Europa y la Intercontinental. Para el Mundial de Clubes tendrá todavía a Luka Modric y a Lucas Vázquez, pero ambos abandonarán el club tras el torneo. En Estados Unidos, además, el vasco planea contar con Dean Huijsen, primer fichaje del verano, y Trent Alexander-Arnold, este último todavía a la espera de comunicado oficial.

En sus manos, recomponer moral y físicamente a un equipo exhausto y hacer jugar y disfrutar a un ataque que, a pesar de la Bota de Oro de Mbappé, no ha carburado al nivel de años anteriores, con versiones de Vinicius y Bellingham lejos de su mejor nivel. Deberá trabajar en la evolución de piezas jóvenes como Camavinga, Güler y Endrick y le tocará reconstruir la defensa, lastrada por las lesiones este curso.

Casting para ser el arquitecto del nuevo Madrid de Xabi Alonso: el deseo de Florian Wirtz, la oportunidad de Nico Paz, el futuro de Mastantuono...

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El Real Madrid está en modo desconexión y reflexión. Sin ánimo competitivo desde la derrota en el clásico de Montjuic, la mayor parte del vestuario piensa ya en el descanso que tendrá entre el 26 de mayo y los partidos internacionales de la primera semana de junio, y en los días libres disponibles entre esos duelos y el viaje a Estados Unidos para disputar el Mundial de Clubes. La expedición del conjunto blanco cruzará el charco el 14 de junio y en ella la directiva quiere incluir a varios fichajes que refuercen las opciones de levantar el título y conseguir los más de 100 millones del suculento premio. Xabi Alonso asumirá el banquillo en unos días y el club confía en contar con Dean Huijsen, ya anunciado, Alexander-Arnold, a la espera de ver si el Liverpool permite que dispute el torneo, y Álvaro Carreras, en plena negociación con el Benfica, en tierras americanas, peinando el mercado y realizando un casting para la posición de mediocentro. Quiere fútbol y busca al arquitecto de este nuevo Madrid.

Después de los problemas de esta temporada en la creación de juego, el club ha asumido que necesita un cerebro futbolístico. Un jugador que sea capaz de construir el juego del equipo. En el Leverkusen, Xabi, en un esquema con tres centrales y dos carrileros, le dejó el centro del campo a Xhaka y Palacios, futbolistas con buen pie pero nada extraordinarios en el manejo en comparación con Kroos o Modric, jugadores históricos en su posición. Y más allá de ellos, el hombre clave para Alonso no fue un mediocentro, sino un mediapunta de talento técnico capaz de fluir por todo el eje del equipo: Florian Wirtz.

Por ese ejemplo, y a la espera de más reuniones pertinentes, en las oficinas del Bernabéu no se trabaja con Xabi en la llegada de un mediocentro puro, sino en un centrocampista que pueda enlazar en diferentes zonas del campo. Al técnico le encantaría firmar a Wirtz, al que convirtió en mejor jugador de la Bundesliga hace unos meses, y gusta en las oficinas del Bernabéu. El Bayer está pidiendo más de 100 millones y el Madrid parece no querer abordar una operación de ese calado salvo que salga Rodrygo, pero la presión de Alonso, una vez analizada la plantilla durante el mes del Mundial, puede terminar siendo clave.

De momento, el Leverkusen ha recibido el interés del Bayern, del Manchester City y del Liverpool, pero no ha concretado negociaciones con ninguno. Y el futbolista, a sus 22 años y con contrato hasta 2027, espera acontecimientos consciente de que tras la salida de Alonso es el momento de un cambio.

El Madrid sigue confiando en Tchouaméni, Valverde y, especialmente, Camavinga para la base, y también lo hace Alonso, con Bellingham navegando entre ellos y Vinicius y Mbappé. Pero falta fútbol y se entiende la necesidad de tener un perfil así en la plantilla. Modric quiere renovar pero está pendiente de una charla con Alonso y lo que tienen claro en el Bernabéu es que el croata no puede asumir tantos partidos. Ha estado presente en 55 encuentros, sólo superado por Fede Valverde (57).

Ceballos, por su parte, fue importante en un momento del curso hasta su lesión, pero luego, con molestias, no ha vuelto a su nivel. El croata y el andaluz estarán en el Mundial, pero sin Camavinga, lesionado, y a la espera de ver si Bellingham se opera el hombro, a Xabi, más allá de cazas mayores, le gustaría contar con alguna pieza extra.

Nico Paz y Mastantuono, opciones jóvenes

En dicho papel de rotación, el Madrid analiza el momento de Nico Paz. El internacional argentino ha explotado en el Como con seis goles y ocho asistencias actuando de mediapunta y los blancos lo pueden repescar por nueve millones. A sus 20 años sería asequible, pero se estudia su compatibilidad con Güler. No quieren cortar la progresión de ninguno y Xabi decidirá.

Otra opción de futuro es la de Franco Mastantuono, la última perla del fútbol argentino. Mediapunta zurdo de 17 años con buen golpeo y calidad. Gusta mucho en el Bernabéu, siempre atento a las promesas de Sudamérica, pero parece que se ha abierto una puja por él. No llegaría, eso sí, hasta después del Mundial de Clubes, porque no cumple 18 años hasta agosto. Momento de casting.

Todos los deberes de Xabi Alonso en el Real Madrid: los lesionados y el Mundial de clubes, el caso Rodrygo y refuerzos para la defensa

Todos los deberes de Xabi Alonso en el Real Madrid: los lesionados y el Mundial de clubes, el caso Rodrygo y refuerzos para la defensa

A Rey muerto, Rey puesto. Xabi Alonso asumirá el mando del banquillo del Real Madrid el 1 de junio, después de la última jornada de Liga y del merecido homenaje a Carlo Ancelotti, el entrenador más laureado en la historia del club. El italiano, tras anunciar este lunes Brasil que será su nuevo seleccionador, recibirá el cariño del Santiago Bernabéu en el duelo ante la Real Sociedad (o en el de mañana ante el Mallorca) y se centrará entonces en su nuevo destino: la selección de Brasil, a la que, si nada cambia, dirigirá ya en los partidos de junio. En su lugar llegará el tolosarra, que hizo campeón de Alemania al Bayer Leverkusen y que aterriza con muchos deberes sobre la mesa, con algún problema contractual, con lesiones y con un Mundial de clubes que será la primera piedra en su camino como técnico en Chamartín, donde firmará por tres temporadas.

Para saber más

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La Bundesliga termina este mismo fin de semana, unos días antes que la Liga, así que Alonso estará en Madrid a comienzos de la semana que viene para ir planificando y gestionando su nueva etapa en Valdebebas y en la capital de España. Junto a él, su agente, Iñaki Ibáñez, que también lleva a Mikel Arteta, Ernesto Valverde o Andoni Iraola, entre otros, y el grupo de trabajo que ha tenido en Alemania.

Sebas Parrilla, con el que lleva desde que empezara a entrenar en la cantera del Madrid, será su segundo, y Alberto Encinas, con pasado en el Barcelona, su preparador físico de confianza. A la espera de conocer a más miembros de su nuevo equipo, esto deja la duda de la situación de Antonio Pintus, sargento de la preparación física del Real Madrid y fichaje estrella de Florentino Pérez en 2021, antes incluso de la llegada de Ancelotti. Luis Llopis, entrenador de porteros, mantendrá su puesto.

Una vez resuelto el banquillo, toca el vestuario, con muchos frentes abiertos. Por un lado, Alonso llegará en un momento atípico y lejos de lo ideal. La temporada todavía está en marcha, con un parón de selecciones que enviará a casi toda la plantilla a sus respectivos países. En los primeros días, Valdebebas estará vacía. Por ahí estarán los lesionados, Carvajal, Militao, Rüdiger, Alaba, Mendy, Camavinga y compañía, y los no internacionales como Lucas Vázquez.

La Final Four de la Liga de Naciones, por ejemplo, que disputan Alemania, Portugal, España y Francia, se celebra el 4, 5 y 8 de junio, y la Croacia de Modric juega el 6 y el 9 del mismo mes. Los internacionales regresarán para viajar directamente a Estados Unidos, con un vuelo planeado el día 14. Es decir, Alonso tendrá poco tiempo desde su llegada hasta el viaje a Estados Unidos, así que el Mundial se convierte por obligación en la pretemporada del conjunto blanco. Un mes entero (si llegan a la final) entre Miami y Nueva York. Los primeros 15 días serán claves para la convivencia inicial y para que el vasco siente las bases de su liderazgo.

Todo ante un vestuario cansado tras una temporada agotadora, que comenzó el pasado agosto en la Supercopa de Europa en Varsovia y puede terminar el 13 de julio en Nueva York. Once meses en los que han ganado dos títulos pero han perdido tres, cada uno de forma más dura y con el Barça, su gran rival, anotando 16 goles en los cuatro clásicos. Recuperar la moral será casi más importante que el físico en las primeras semanas del nuevo técnico, que mirará primero a los lesionados. Rüdiger debería volver para el torneo, pero Mendy y Camavinga están descartados. Con Carvajal, por su parte, no hay prisa. Y Bellingham, pendiente de su operación de hombro, no ha decidido cuándo pasar por quirófano.

Xabi Alonso.

Xabi Alonso.CHRISTOPHER NEUNDORFEFE

Después, Xabi entrará en los temas contractuales. Vallejo, Lucas y Modric terminan contrato el 30 de junio. Los dos españoles tienen difícil seguir, mientras que el croata quiere continuar y, si asume su rol como en las últimas temporadas, tiene opciones. Debería, como Lucas, ampliar su contrato 15 días para estar en Estados Unidos, así que el entrenador podría encontrarse con varios futbolistas que saben que no seguirán.

En cuanto a fichajes, Alonso quiere reforzar la defensa, algo que comparte el club. El anuncio oficial de Alexander-Arnold es cuestión de días y el Madrid trabaja para que esté en el Mundial. Será el primer refuerzo. Los blancos peinan el mercado para contratar un central y un lateral izquierdo, claves para Xabi, que le dará un giro de 180 grados al esquema y al estilo del equipo. En eso puede haber un perjudicado: Rodrygo Goes. No parece Alonso muy fan de situar a los tres delanteros junto a Bellingham, algo que repitió Ancelotti durante este curso, y sí le gustaría afianzar piezas en la defensa y en el centro del campo para dejar más espacio arriba para su gran objetivo: potenciar la relación Mbappé-Vinicius.

El nombre de Rodrygo es el gran protagonista del umbral de salida. Con cartel en Inglaterra, su venta podría ayudar a asumir los fichajes en la zaga, pero todavía queda pendiente una charla entre el técnico y el brasileño. En el capítulo de llegadas también hay que situar a Nico Paz, al que el club quiere recuperar para la primera plantilla tras su gran año en el Como de Cesc Fàbregas.

Xabi Alonso entrenará al Real Madrid desde el Mundial de Clubes

Xabi Alonso entrenará al Real Madrid desde el Mundial de Clubes

Xabi Alonso será el entrenador del Real Madrid en el Mundial de Clubes. Después de varias semanas de dudas en el conjunto blanco, pendientes de la salida definitiva de Carlo Ancelotti y de cómo podían encajar el contrato del tolosarra en el nuevo torneo intercontinental, que se celebra entre el 14 de junio y el 14 de julio, el técnico español se hará cargo del equipo en cuanto acabe la competición española y no esperará a que finalice la temporada internacional con el Mundial.

Tal y como adelantó El Chiringuito y puede confirmar este periódico, el Madrid y el vasco se han puesto de acuerdo en los términos del contrato para el nuevo Mundial, una situación especial porque se celebra entre dos temporadas teóricamente diferentes a nivel contractual, y finalmente asumirá el mando desde la primera semana de junio.

Después de la final de la Copa del Rey, las dudas del Real Madrid se fueron despejando. La derrota dejó muy tocado a Ancelotti, más todavía después del fracaso continental contra el Arsenal, y sólo una remontada en Liga podía mantenerle en el puesto hasta después del Mundial de Clubes. Peor el futuro en Valdebebas estaba claro: Xabi Alonso.

Y el italiano, mientras, abrió su mente hacia la selección de Brasil y con el paso de los días todas las piezas comenzaron a encajar. La 'canarinha' disputa dos encuentros en el parón internacional de junio y la Federación del país quiere que Ancelotti asuma esa lista de convocados. Y en el otro lado, el Madrid, con la Liga ya perdida, prefería que Xabi Alonso se tomara el Mundial como una pretemporada de cara a conocer al vestuario y comenzar a aplicar su estilo.

Sólo faltaba la parte contractual con el tolosarra, algo que se ha solucionado en los últimos días. Esta temporada es atípica porque el Mundial cuadra entre el final de una y el inicio de la siguiente, así que no era tan sencillo fiscalmente ni para el entrenador ni para el club, por lo que se barajó la posibilidad de que Solari dirigiera al equipo en Estados Unidos. Pero finalmente, Alonso y el Madrid acordaron sus partes y reinó la lógica: el Mundial, donde hay 120 millones en premios, será la primera piedra del nuevo Madrid de Xabi.

Alonso finaliza el curso con el Bayer Leverkusen este fin de semana, por lo que a principios de la que viene viajará a Madrid para gestionar su llegada a Valdebebas. Mientras, Ancelotti se sentará en el banquillo de los blancos en los tres últimos encuentros ligueros, con la ya Liga virtualmente perdida, a siete puntos del Barça con nueve por disputarse. El Madrid trabaja en los tiempos del comunicado oficial del adiós de Ancelotti. Quieren hacerle un homenaje en el Bernabéu, en la última jornada ante la Real Sociedad, pero el anuncio como tal podría llegar antes.

Ancelotti y su "luna de miel para siempre" con el Madrid: "Xabi Alonso tiene todas las puertas abiertas"

Ancelotti y su “luna de miel para siempre” con el Madrid: “Xabi Alonso tiene todas las puertas abiertas”

Carlo Ancelotti mantiene la elegancia en la sala de prensa de Valdebebas. El técnico italiano, que camina hacia sus últimos días como entrenador del Real Madrid, compareció en la previa del clásico de Montjuic, decisivo en la pelea por la Liga entre el Barcelona y el Real Madrid. No anunció nada sobre su futuro, pero deslizó algunas reflexiones hacia su final en el banquillo del conjunto blanco.

"La luna de miel con el Real Madrid no se acaba, sigue y seguirá para siempre hasta el último día de mi vida. Es como en las relaciones, al principio hay mucha pasión, y luego otras cosas. Y nada más que añadir. El Real Madrid, como el Milán, son equipos que se quedan en el corazón más que otros", declaró el entrenador, cuestionado sobre las últimas semanas. "El Madrid es un club especial que merece una actitud especial, no sólo por el entrenador, por jugadores, asistentes... Es lo que siempre he intentado hacer cada día".

En esas frases se explican los pasos del club y del técnico estos días, anunciada la salida de Xabi Alonso del Bayer Leverkusen y a la espera del clásico contra el Barça para anunciar de forma oficial su adiós al banquillo del Madrid. Ambos, club y entrenador, querían esperar al partido decisivo de Montjuic para hacerlo público, mientras Alonso espera ya su oportunidad. "He leído que Xabi se va del Bayer Leverkusen, ha hecho un trabajo fantástico. Tiene todas las puertas abiertas, ha demostrado ser uno de los mejores entrenadores del mundo", elogió el transalpino.

Sobre el encuentro, al que el Madrid llega con cuatro puntos de desventaja sobre el Barcelona, Ancelotti declaró que "Rodrygo y Güler tienen opciones" de ser titulares en Montjuic y que "lo que pasa alrededor no nos ha afectado".

"No es tan complicado preparar este tipo de partidos, no hay necesidad de motivar. Hay que darles la idea más clara posible de cómo jugar y lo que pasa alrededor esta semana no nos ha afectado para nada, cero problemas. Estamos bien y con mucha confianza", explicó sobre el partido, que recordó que es "el último clásico de la temporada porque el Barcelona no estará en el Mundial de Clubes".

Xabi Alonso confirma que se va del Leverkusen: "Es el momento"

Xabi Alonso confirma que se va del Leverkusen: “Es el momento”

Actualizado Viernes, 9 mayo 2025 - 14:30

Era un secreto a voces, pero escucharlo de boca del propio protagonista confirma que la hoja de ruta está clara. "El club [el Bayern Leverkusen]y yo hemos decidido que estos dos sean nuestros últimos partidos juntos. Creemos que es el momento de salir y que hoy era el momento indicado para anunciarlo", ha dicho este viernes Xabi Alonso en la rueda de prensa que ha ofrecido antes del partido de la Bundesliga del próximo domingo ante el Borussia Dortmund, el penúltimo de la temporada.

Lo que no ha confirmado Xabi es que su destino es el Real Madrid. "No es el momento de hablar del futuro", ha dicho, aunque nadie duda de que será el sustituto de Carlo Ancelotti a falta de saber si, como quiere el club, dirigirá al equipo ya en el Mundialito de Clubes que comienza el 15 de junio. Otra opción sería que un técnico interino, y se habla de Santiago Solari, fuese quien realizase esa transición y Xabi se incorporara ya el 15 de julio.

"No es el momento de hablar sobre el futuro dado que queremos tener un adiós bonito el domingo aquí", ha insistido el vasco, que ha hablado de una "mezcla de emociones, porque hemos llevado el rumbo correcto en este tiempo juntos y todavía me quedan dos partidos muy emocionantes".

"El fútbol y la vida son de encontrar el mejor momento. Esa fue mi intención. Y así quisimos que fuera el adiós, sobre todo teniendo en cuenta el tiempo tan largo, bonito e importante que estuvimos aquí. Quiero disfrutarlo hasta el último momento", ha expresado el entrenador, que a sus 43 afrontará el mayor reto de su carrera después de llevar las riendas de la Real Sociedad B (2019-2022) y del Leverkusen (2022-2025), al que el año pasado hizo campeón de la Bundesliga, además de conseguir una Copa y una Supercopa.

Pese a que los periodistas le insistieron sobre dónde entrenará el año que viene, Xabi no quiso entrar: "Repito que no es el momento, quedan dos partidos por jugar y una temporada por finalizar. Cuando eso suceda, hablaremos", dijo. La temporada acaba en Alemania un fin de semana antes que en España, el domingo 18.

El plan previsto es que el Real Madrid y Ancelotti oficialicen que separan sus caminos la semana que viene, pase lo que pase en el clásico del próximo domingo. Para posteriores fechas quedarían el anuncio de Xabi como nuevo inquilino del banquillo blanco y esa decisión de ir o no al Mundial de Clubes.

El mal necesario del banquillo para Florentino ante el dilema del relevo: Xabi Alonso, equidistante entre Ancelotti y Mourinho

El mal necesario del banquillo para Florentino ante el dilema del relevo: Xabi Alonso, equidistante entre Ancelotti y Mourinho

El buen patrón que interpreta Javier Bardem, un empresario de provincias, en la comedia de Fernando León de Aranoa, tiene una dimensión incomparable a la de los grandes patrones del fútbol con los que ha cohabitado Carlo Ancelotti. De los Agnelli y Silvio Berlusconi a Roman Abramovich, Nasser Al-Khelaifi y Florentino Pérez. Si embargo, con el buen patrón, grande o pequeño, encaja siempre el buen y fiel empleado, el buen entrenador. El italiano tiene un Máster en patrones que le ha permitido desarrollar el arte de la flotabilidad, con un instinto clave para encontrar el punto de equidistancia exacto entre la jerarquía y la independencia.

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El resultado ha sido una cosecha escasa en Ligas (seis en 22 años al frente de Juventus, Milan, Chelsea, PSG, Bayern y Madrid), pero casi tantas Champions (cinco, tres en el club blanco). Es, pues, una pieza única, hecha a la medida del complejo ecosistema madridista, donde no se buscan equipos de autor porque es un club de autor. Florentino lo sabe, y ello genera inquietud cuando el ciclo da síntomas de agotamiento, pese a la heroica reacción en la final de Copa frente al Barcelona en La Cartuja. La heroica es para los días festivos y el Madrid actual necesita manos de entrenador, ambas, la izquierda y la derecha, de lunes a domingo.

Florentino Pérez.

Florentino Pérez.Jose BretonMUNDO

Las siete Champions conquistadas por el presidente, en sus dos etapas, han sido con Vicente del Bosque, Zinedine Zidane y Ancelotti. Buenos entrenadores en el sentido amplio, aunque las salidas de los dos primeros dejaron aristas que esta vez no se producirían con el italiano, más dolido en el final de su primera etapa. Del salmantino prescindió Florentino tras ganar una Liga, en mitad del motín del Chistu, para subir al Madrid a un tiovivo de entrenadores que lo llevó a la viñeta del Atlético de Jesús Gil. Con el tiempo, el dirigente reconocía, a regañadientes, que fue una de las decisiones equivocadas de su primera etapa, más allá de la falta de sintonía con Del Bosque. Era mutua. Lo es.

La deriva del equipo esta temporada hizo que la cúpula pensara en un plan alternativo que los hechos no han cambiado. Con la Liga todavía pendiente, aunque sea observada como un Everest, y un clásico en Montjuïc, Ancelotti levanta la ceja y se agarra al flotador, aunque resignado a un desenlace que no desea cruento. Tampoco el club.

Xabi Alonso, en el banquillo del Bayer Leverkusen.

Xabi Alonso, en el banquillo del Bayer Leverkusen.Christopher NeundorfEFE

Xabi Alonso, en la cabeza del presidente, quiere construir equipos de autor, y por eso intentó descubrir lo mejor de José Mourinho, lejos de los prejuicios y el ruido, y fue en busca de la ciencia de Pep Guardiola. El Bayer Leverkusen lo es. Tiene la ventaja de conocer el club, a Florentino y la Liga. Como el hijo que vuelve a casa de los padres, no tiene que preguntar dónde están las galletas y el café. Pero no busca equidistancias, exige, decide y actúa. El pulso que mantuvo frente a Hacienda, «con muchos riesgos», según los habituales del Tribunal Supremo, es una prueba de su carácter. Si no lo cree, no hay pacto posible.

El presente del Leverkusen no es como el de la temporada pasada, fuera ya de las semifinales de Champions y sin opción al título en la Bundesliga. Al frente del club de la Bayer, el CEO español Fernando Carro tiene claro que, si llama Florentino, la salida de Xabi Alonso no será un problema. Carro es un negociador hábil y pragmático, y habla el mismo lenguaje que José Ángel Sánchez, primer ejecutivo del Madrid. Dejó el poderoso grupo Bertelsman para hacer carrera en el deporte y sabe bien con quién hay que estar a buenas.

A falta de tres jornadas para concluir la Bundesliga, el Bayern aventaja en ocho puntos al Leverkusen. Es ya virtual campeón. Cuando el Madrid juegue el clásico en Montjuïc, el 11 de mayo, más que probablemente ya estará todo decidido. Tanto Ancelotti como Xabi Alonso esperan decisiones con un año de contrato por delante. No hay, pues, ni urgencias ni malas relaciones, al contrario, lo que permite escoger el momento o no hacerlo. Si llega, el dilema será quién dirigirá al equipo blanco en el Mundial de clubes, un objetivo estratégico del Madrid, y más tras los fracasos del curso, además de convertirse en parte de la pretemporada. Tiene sentido que sea el elegido para el nuevo curso.

Carlo Ancelotti.

Carlo Ancelotti.Manu FernandezAP

Florentino es de los que cree que el entrenador es un mal necesario del fútbol y la realidad es que sólo se ha sentido identificado con un técnico-autor. Fue Mourinho. Un entrenador para una circunstancia, competir frente al Barça de Guardiola, uno de los mejores equipos de la historia, y elevar la deteriorada autoestima del madridismo. Lo consiguió, aunque con devastadores efectos colaterales para la imagen del Madrid. No estamos ante lo mismo, pero sí frente a un Barcelona creciente, que ha ganado tres de tres clásicos y dos títulos directos al Madrid esta temporada. «Sólo hay un entrenador que puede soportar eso con Florentino, y es Ancelotti», afirmaba alguien que trabajó muy cerca del presidente antes de la final de Sevilla. El castigo ha aumentado.

La historia dice que ninguna de las veces que Madrid y Barcelona se han enfrentado en cuatro o más ocasiones en una misma temporada, alguno de los dos ha hecho el pleno de victorias. Si seguimos, pues, la estadística, ello llevaría a una victoria blanca o un empate en Montjuïc, aunque siempre hay una primera vez para todo, incluso para hundirse con el salvavidas puesto.

La Real Sociedad nombra a Sergio Francisco entrenador por dos temporadas tras la decisión de Imanol Alguacil de no renovar

La Real Sociedad nombra a Sergio Francisco entrenador por dos temporadas tras la decisión de Imanol Alguacil de no renovar

La Real Sociedad ha cerrado en apenas 24 horas el relevo en el banquillo de su primer equipo y ya ha anunciado que Sergio Francisco será el relevo de Imanol Alguacil durante las dos próximas temporadas. Sergio Francisco Ramos (Irun, 1979) es el actual entrenador del Sanse desde la temporada 2022-23 donde sustituyó a Xabi Alonso. El entrenador dirigirá mañana al equipo filial en su partido contra el Unionistas de Salamanca pero a partir del lunes se incorporará a la planificación de la campaña 2025-2026 junto al nuevo director deportivo Erik Bretos.

Sergio Francisco, ex jugador de la Real y técnico de sus categorías inferiores, da el salto al primer equipo después de los casi 7 años en los que ha sido dirigido por Imanol Alguacil. El aún entrenador realista anunció ayer jueves su decisión de no continuar en San Sebastián, cumpliendo con el calendario que él mismo había anunciado para concretar su futuro. La despedida de Alguacil se producirá el final de la presente temporada por lo que el técnico de Orio, en principio, continuará en el banquillo mientras su sucesor inicia la planificación de un proyecto deportivo remozado.

El ascenso de Sergio Francisco al primer equipo se produce cuando también se lleva a cabo el relevo en la dirección deportiva ya que Roberto Olabe cederá el testigo a Erik Bretos. Bretos ha formado parte del equipo de Olabe desde 2018 después de dar el salto a la Real desde el Eibar. Periodista de profesión, Erik Bretos de 35 años de edad no contaba con experiencia previa ni como jugador ni como técnico.

Sergio Fernández, sin embargo, sí se formó en las categorías inferiores de la Real y llegó a jugar cinco encuentros con el equipo en el año 2000. Desde 2024, ejercer como técnico en los equipos inferiores realistas. Su mayor éxito en los banquillos fue el ascenso del tercer equipo de la Real a la Segunda RFEF. Ha dirigido el 'Sanse' durante las últimas tres temporadas realizando un "trabajo brillante", según la nota de la Real en la que se confirma su nombramiento como entrenador del primer equipo.

Un gurú a balón parado y "juegos mentales", cómo Arteta resucitó al Arsenal: exprimir limones, bombillas "para conectar", carteristas en cenas...

Un gurú a balón parado y “juegos mentales”, cómo Arteta resucitó al Arsenal: exprimir limones, bombillas “para conectar”, carteristas en cenas…

Mikel Arteta ha cambiado la realidad del Arsenal. El conjunto gunner no gana la Premier League desde 2004, pero con el técnico donostiarra en el banquillo ha conseguido volver a pelear por ella: segundo en 2023 y 2024 y segundo este año, a 11 puntos de un Liverpool casi inalcanzable. El Emirates disfruta también de la Champions y busca este curso superar la barrera de los cuartos de final por primera vez desde 2009. Enfrente está el Real Madrid, pero en el norte de Londres se confía más que nunca en el liderazgo de Arteta, en sus «juegos mentales», a cada cual más loco que el anterior, en su influencia de la NFL, en lo aprendido con Pep Guardiola y en cómo ha convertido a su equipo en el mejor a balón parado en Europa.

A los 15 años, Arteta dejó el Antiguoko de San Sebastián, donde jugaba con Xabi Alonso, para fichar por el Barcelona. Llegó al filial, coincidiendo con Puyol, Xavi o Iniesta, pero su carrera cogió un camino diferente al de los héroes de Sudáfrica: PSG, Rangers, Everton y Arsenal. Siempre en el filo de las convocatorias de la selección y siempre en suelo británico. Era el raro de su generación y la puerta a la gloria se le cerró constantemente. En los banquillos la tarea no era más fácil: aceptó el reto del Arsenal y si antes tenía a Xavi, Iniesta, Alonso o Fábregas por delante, ahora el destino le ponía al City de Guardiola y al Liverpool de Klopp como dominadores de la Premier.

Quizás por lo aprendido en su carrera como jugador y en las puertas que se le cerraron en su momento, lo que define ahora al Arteta entrenador es la «exigencia». «Es muy exigente en todo lo que hace, con el cuerpo técnico, con el club y consigo mismo. Es la persona que más horas trabaja en la ciudad deportiva, su pasión es constante y te la transmite», admite a EL MUNDO el español Miguel Molina, uno de sus asistentes en el cuerpo técnico del Arsenal, donde ha mezclado al núcleo local con varios españoles que actúan como su mano derecha en el club: el propio Molina, Carlos Cuesta, otro de sus asistentes principales, e Iñaki Caña, entrenador de porteros. Los dos primeros, con pasado en las categorías inferiores del Atlético.

El no a Pochettino

En 2016, justo después de retirarse, esa exigencia le llevó a tomar una decisión clave en su carrera como entrenador. Había colgado las botas como uno de los capitanes del Arsenal, así que el club londinense le ofreció un puesto como uno de los jefes de la cantera, pero lo rechazó. También dijo «no» a Mauricio Pochettino, su «hermano mayor» en sus dos años de cesión en el PSG a comienzos de los 2000. El argentino le quería como parte de su staff en el Tottenham, enemigo íntimo del Arsenal, pero Arteta lo rechazó, convencido del tipo de máster que quería.

El entrenador español se convirtió en asistente de Guardiola en el Manchester City. Máxima exigencia y un curso acelerado en la elite para su gran objetivo: ser uno de los mejores entrenadores del mundo. Estuvo varios años a la sombra del catalán y en cuanto surgió la oportunidad del Arsenal no lo dudó. Los gunners despidieron a Unai Emery en diciembre de 2019 y Arteta lo tenía todo claro. Casi diez años después de esa decisión entre Pochettino, el Arsenal y Guardiola, Arteta está ante su sexta temporada como técnico de un club donde ha conseguido tres títulos (una FA Cup y dos Community Shield), pero lo más importante: compite de tú a tú con City y Liverpool.

De Guardiola mascó la obsesión por la perfección y la innovación táctica, pero lo que ha convertido a Arteta en un entrenador diferente son los «juegos mentales». «Es muy creativo, muy innovador, y te hace estar alerta, mejorando y creciendo constantemente. Entiende muy bien el proceso de los entrenamientos, el análisis de datos... Está capacitado a todos los niveles. Y con el trato con el jugador es muy empático y cercano, sabe gestionar muy bien el vestuario y la relación con los jugadores», asegura Molina.

Arteta y Saka, el sábado, durante el partido ante el Everton.

Arteta y Saka, el sábado, durante el partido ante el Everton.EFE

Esa parte creativa en la gestión del vestuario tiene que ver con poner a sus futbolistas ante el Pictionary (un juego de mesa en el que hay adivinar una palabra haciendo un dibujo), con contratar carteristas para robar a sus jugadores en plena cena «para que estuvieran atentos a los detalles», con realizar presentaciones utilizando colores o dibujos concretos para que los jugadores aprendieran bien la lección (un carril liberado en la defensa rival era un Fórmula 1), con dibujar frases en las paredes de la ciudad deportiva, con pedir a sus jugadores que expriman la mayor cantidad de jugo de limón que puedan en un bote común, con contratar a un freestyler profesional para que hiciera de camarero y les humillara cuando intentaran dar toques al balón durante una cena...

«Todo eso pasa muy a menudo. Cada reunión de Mikel con el vestuario es especial. Está en un nivel similar a Pep y veremos si algún día le pasa. Te das cuenta de la cantidad de cosas que hace más allá de los focos. Siempre nos repite que tenemos que hacer todo a tope. El fútbol, la fiesta e incluso en la habitación con nuestras mujeres», explicaba en su momento Oleksandr Zinchenko, jugador del Arsenal y ex del City. La prensa inglesa los denomina «juegos mentales».

La parte psicológica es clave para Arteta, que no deja de usar símbolos para tratar de mantener a su vestuario alerta. Uno de sus momentos más famosos es un discurso a la plantilla comparándoles con la luz, bombilla en mano y mencionando a Thomas Edison, para que fueran capaces de «compartir la energía y conectar». Incluso contrató a un artista para que creara la canción North London Forever, que el donostiarra quiere que se convierta en el nuevo himno del club.

El mejor equipo a balón parado

La obsesión de Arteta es ganar un gran título y no deja nada al azar para conseguirlo, tratando de extrapolar las virtudes de otros deportes al fútbol. Por ejemplo, de la NFL ha sacado la idea de tener diferentes entrenadores tácticos para diferentes situaciones, como la presión alta o la transición defensiva, pero sin duda algo diferencial y que tiene mucho que ver con el rugby y el fútbol americano y la revolución que ha logrado a través del balón parado.

Uno de sus grandes fichajes es Nicolas Jover, el gurú del balón parado gunner. El asistente francés trabajaba para Guardiola, pero Arteta coincidió con él unos meses en el Etihad y se lo llevó a Londres. Con 10 goles este curso, es el equipo que más tantos anota a balón parado en las cinco grandes ligas europeas.

Es su gran fuerte y aunque no puede contar con Gabriel, uno de sus centrales titulares junto a Saliba, el poderío aéreo del Arsenal es de lo que más preocupa a Carlo Ancelotti. El Madrid, débil en ese aspecto, ha encajado cinco goles a balón parado este curso, el segundo peor dato de la Liga tras el Leganés. El Emirates le espera esta misma noche.