El Valencia se queda sin aire: se deja la victoria en el Pizjuán por un error de Mamardashvili en el minuto 93

Actualizado Sábado, 11 enero 2025 - 23:13

No consigue el Valencia ganar. No hay manera. Sufrió en el Pizjuán, marcó Luis Rioja y, cuando acariciaba los tres puntos, quien tantas veces le ha salvado, le condenó. Un error de Mamardashvili en un disparo sin aparente peligro de Pedrosa se convirtió en el empate que les condena. [Narración y estadísticas: 0-0]

Sevilla y Valencia querían superar sus traumas, pero le pesaron como cemento en la primera parte. Los locales sangran por la herida de la eliminación copera y los valencianistas saltaron al campo colistas, así que hubo batalla, brega, disputa y hasta sangre en el pie de Gayà por un pisotón de Carmona en el arranque, pero poco juego y menos ocasiones.

El partido se embarraba en el centro del campo por la presión alta que imponían García Pimienta y Corberán. Si se superaba, era a trompicones y para lanzarse a la carrera desde tan lejos de la portería que no había ventaja posible.

El Sevilla probó con un tiro lejano de Saúl que hizo desperezarse a Mamardashvili. El georgiano, de regreso de su lesión, atajó la mejor ocasión de los hispalenses en un latigazo de 25 metros de Isaac Romero en el minuto 24. En ese momento, eran más dueños de un duelo al que el Valencia le había perdido el pie. Por eso fue un alivio llegar con el empate al descanso después de que Lukebakio sirviera un balón de profundidad a Saúl, que de un derechazo lo estrelló en el lateral de la red.

El paso por el vestuario activó un poco más al Sevilla, que se lanzó a embestir la portería valencianista, aunque con poco colmillo. Cambió el dibujo García Pimienta para apuntalar la medular y lejos de rentabilizarlo, se vio con un gol en contra en tres toques. Saque en largo de Mamardashvili peinado por Hugo Duro a la banda izquierda donde corrió Luis Rioja para encarar y batir a Nyland. Incluso tuvo el sevillano el segundo en el despiste de Badé y Carmona.

Pedrosa celebra su gol ante la desesperación de Foulquier.

Pedrosa celebra su gol ante la desesperación de Foulquier.EFE

Apareció la desgracia para cebarse con Gayà, que salió del campo por la herida del pisotón, y obligó a Corberán a cambiar el sistema. El Valencia dio un paso atrás y volvieron a crecer los locales, con Lukebakio al frente, que marcó de falta anulada por fuera de juego, y la chispa del debutante Ruben Vargas, que se estrelló en el palo.

Buscó el técnico valencianista desahogarse con Sadiq y aguantar un resultado que daba vida. No fue imposible. Llegó de nuevo un error en el tiempo añadido que dejó al Valencia sin aire y convertido en el equipo de las grandes ligas al que más han remontado. 21 puntos se ha dejado por el camino tras ir ganando. Una condena de la que nadie sabe si será capaz de librarse.

El método Premier de Corberán en el Valencia: charlas individuales y restricción de móvil

El método Premier de Corberán en el Valencia: charlas individuales y restricción de móvil

Carlos Corberán aterrizó en Valencia el 27 de diciembre y apenas ha pasado por su casa de Cheste. El entrenador, acostumbrado a la vida 'Premier' que convierte las ciudades deportivas casi en los hogares de los técnicos, se instaló en un hotel junto a Paterna. No tenía tiempo que perder porque cogía a un equipo hundido en la tabla y en el ánimo. Con la terapia clara, no tardó en aplicarla.

Corberán está reelaborando el estilo del Valencia a fuerza de hacer crecer a los jugadores, o quizá sea a la inversa. Lo cierto es que en sólo dos partidos ha dibujado un equipo que elabora más el juego, sin perder verticalidad y siendo más atrevido. Buscar la portería es una obsesión. Conceptos claros y sencillos en lo colectivo, compartidos en el vestuario o en el campo de entrenamiento en dobles sesiones, y mucho trabajo individual a través de charlas que él mismo o sus ayudantes -tiene un nutrido cuerpo técnico- están manteniendo con los jugadores. Los arropa con instrumentos de mejora, que muchas veces pasan por conversaciones y otras por el vídeo. Es intenso porque necesita que asimilen conceptos de pretemporada en plena competición y con el agua al cuello.

Por eso también les exige en detalles que van desde el cuidado del peso -fue lo primero que hizo al aterrizar, pasar al equipo por la báscula tras las vacaciones de Navidad- a la restricción del uso del móvil tanto en la Ciudad Deportiva como en las concentraciones y desplazamientos.

El lateral Aarons, cerca

Corberán, criado en los banquillos en Inglaterra, vive una vida 'Premier': por y para el fútbol, con largas jornadas en Paterna y convivencia con sus jugadores, una de las plantillas más jóvenes de Primera, a los que intenta llevar por ese camino. Sabe que el «crecimiento» que pretende tiene que reflejarse en resultados a contrarreloj, porque el Valencia tiene que sumar si quiere agarrarse a Primera.

Convencido de que el grueso de su plantilla tiene calidad para no estar en el fondo de la tabla, y en su margen de mejora confía, su llegada ha tenido impacto más allá del vestuario. Al refuerzo con la cesión de Sadiq, ya hilvanada con la Real Sociedad, se suma ahora la de un lateral derecho que vendrá... de la Premier. El club había trabajado con Iván Fresneda pero, ante las dudas del Benfica y del propio futbolista, ha escuchado al técnico, que ha mirado hacia lo que más conoce y le parece oportuno que Max Aarons, lateral derecho inglés de 25 años del Bournemouth, llegue cedido en las próximas horas.

No estará en Sevilla, como sí podrían estarlo ya Mamardashvili y Gayà para el segundo de los duelos de la cuesta de enero, un mes en cuyo horizonte aparecen también Real Sociedad y Barcelona. Todo un reto para Corberán.

El Valencia despierta ante el Eldense para colarse con dos zarpazos en los octavos de la Copa

Actualizado Martes, 7 enero 2025 - 22:54

El Valencia resolvió con dos zarpazos un duelo copero ante el Eldense que se presentaba como un examen trampa. Corberán está en periodo de prueba y genera expectación comprobar si puede levantar al equipo. No es la Copa de Rey sea una prioridad yendo penúltimo en la tabla, pero sirvió para seguir creciendo, la respuesta que, a modo de letanía, da el entrenador a cada pregunta ansiosa. Para eso y para algo más. [Narración y estadísticas: 0-2]

Ante el Eldense, con sus propias necesidades en la cola de la clasificación en Segunda, el técnico sometió a una prueba a futbolistas de temporada mediocre que pueden tener una nueva oportunidad. Alineó un once de titulares para engrasar automatismos en el que Sergi Canós, Hugo Guillamón y Jesús Vázquez tenían deberes extra. Los tres tienen que dar un paso adelante. Dos dio Sergi Canós. En el minuto 9 le encontró en la frontal Diego López y, con un zurdazo a la media vuelta y por la escuadra, puso el partido de cara a los valencianistas.

Crecía el Valencia, pero el Eldense encontró su talón de Aquiles: la banda izquierda que Jesús Vázquez era incapaz de sostener. De allí nació un centro que remató Collado a bote pronto para que el balón rozara el poste y de nuevo Gámez, a la media hora de juego y con los alicantinos crecidos, cruzó al área otra pelota que Juanto remató, se le escapó a Dimitrievski y no llegó a cazarla Jorquera.

Justo en ese momento de zozobra volvió a aparecer Canós para cruzar un balón de banda izquierda a la lateral derecho del área donde esperaba Diego López para convertirlo en el segundo tanto valencianista e irse al vestuario con ventaja.

Ajustó Corberán al equipo para afrontar una segunda mitad que debía ser cómoda. Taponó la vía de agua en la banda derecha y movió el banquillo para repartir minutos y ver a Sadiq con la camiseta del Valencia por primera vez. Lejos de que se viera que el Valencia aceleraba en ataque, le costó acomodarse y el Eldense, que también se refrescó, comenzó a verse con opciones de apretar el resultado. Fue más la sensación de peligro que llegaba desde los costados que las ocasiones y los valencianistas se rehicieron para controlar de nuevo el duelo. Hasta tuvieron la más clara.

Una falta de Gámez a Jesús Vázquez en el lateral del área la centró Pepelu, el rechace de la defensa del Eldense lo enganchó en la frontal Almeida y batió a Dani Martín, pero con Sadiq en fuera de juego. Se sacudían así los nervios y Canós tuvo ocasión de marcar su segundo tanto con un disparo que marchó rozando el palo. Con la misma intensidad lo buscó el nigeriano, que dio muestras de su potencia que, con mayor control, puede dar mucho al ataque valencianista.

Vinicius podrá jugar la Supercopa: Disciplina le impone dos partidos por su expulsión en Valencia

Vinicius podrá jugar la Supercopa: Disciplina le impone dos partidos por su expulsión en Valencia

Han sido varios días de análisis semántico por unos y otros de lo que César Soto Grado había indicado en el acta del Valencia - Real Madrid del pasado viernes respecto a la expulsión de Vinicius por empujar en el cuello a Stole Dimitrievski. La clave en la redacción del documento estaba en las expresiones: "fuerza no insignificante" y "sin estar el balón en disputa".

El Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol ha interpretado la más leve para los intereses del Real Madrid y el delantero brasileño. Así, ha calificado la acción como una conducta violenta incluida en el artículo 130 del Código Disciplinario de la RFEF por la que le impone, al ser una roja directa, dos partidos de sanción que se cumplirán en la competición en la que se produjo la misma.

Además, esta sanción lleva adscrita una multa pecuniaria para el club de 700 euros y de 600 euros al jugador infractor, en este caso el propio Vinicius, en aplicación del artículo 52 del citado código.

El futbolista brasileño, cuya sanción se movía en un arco de dos a tres partidos, se perderá los duelos de liga ante Las Palmas el próximo 19 de enero en el Santiago Bernabéu y ante el Valladolid el día 25 del mismo mes en Zorrilla.

El Comité considera que la acción ante el portero valencianista se ha producido sin haber posibilidad de disputar el balón o el juego detenido, como refleja Soto Grado, y también que la fuerza empleada por el brasileño no era excesiva. Por eso la han encuadrado bajo el amparo del 130 y no del 103, que es el que habla de una "agresión" con la "circunstancia de que la acción tenga lugar estando el juego detenido" a la que se le aplica una sanción de cuatro a 12 partidos.

Esta última circunstancia, hubiera elevado el cumplimiento de la sanción a todas las competiciones organizadas por la Federación Española por lo que Vinicius no hubiera podido disputar la Supercopa en Arabia, torneo al que el Real Madrid ha viajado esta misma mañana tras su victoria copera del lunes ante la Unión Deportiva Minera.

Alegaciones del Real Madrid

No obstante, el Real Madrid ha querido recurrir la expulsión de su jugador y que se deje sin efecto la expulsión porque considera que concurre "un error manifiesto en el acta arbitral" ya que se basó "en una valoración incompleta y sesgada de los acontecimientos".

Explica el club que, antes del lance con Dimitrievski, se produjeron insultos racistas no recogidos en el acta así como una "provocación previa mediante agresión del jugador del Valencia". Mencionan también, como atenuante, el arrepentimiento del jugador al terminar el encuentro.

El Comité responde al Real Madrid que el propio club no niega la acción que realiza Vinicius, que es la que se debe juzgar en el caso que ocupa, y que el colegiado pudo visionar toda la acción, incluido el gesto inicial del guardameta valencianista, que también se ha tenido en cuenta en la resolución.

Por último, Disciplina informa de la recepción por parte de LaLiga de un informe en el que se recogen cánticos vejatorios producidos en Mestalla y que "incoará el oportuno expediente extraordinario para que pueda dilucidarse en el mismo, con todas las garantías, los hechos que puedan acreditarse y la imposición, en su caso, de las sanciones que correspondan".

La aficionada del Valencia ovacionada por los seguidores del Real Madrid

La aficionada del Valencia ovacionada por los seguidores del Real Madrid

Actualizado Sábado, 4 enero 2025 - 12:34

"Doy las gracias al Real Madrid por la ayuda a los pueblos de Valencia". Seria, en pie, con ese mensaje escrito a mano en un cartel, la imagen de una aficionada del Valencia se ha convertido en viral en las redes sociales desde el partido que el viernes por la noche disputaron ambos equipos en Mestalla.

La aficionada, cuyo nombre no ha trascendido, captó la atención de las cámaras y de los periodistas que cubrían el encuentro. "Por todo lo que ha pasado en Valencia, que ha sido una catástrofe horrible, y el detalle que tuvo el primer club de España, un club señor", manifestó cuando le preguntó un periodista de Real Madrid Televisión.

Se refería esta aficionada a la donación de un millón de euros que el Real Madrid anunció rápidamente al conocerse el alcance de la catástrofe causada por las riadas de noviembre. "Yo el otro día estuve en Catarroja y en varios pueblos y no os podéis imaginar... No es lo mismo estar aquí que allí... La gente destrozada, las plantas bajas, los garajes, están luchando" contaba, antes de mencionar de nuevo "estos gestos tan bonitos, humanitarios".

Pero su agradecimiento iba más allá de la ayuda monetaria. Tanto en el cartel que mostraba como en sus palabras ante el micrófono de Real Madrid TV citaba "el emblema del Valencia, la senyera, el gesto que tuvieron que fue de verdad emotivo". Aludía en esta ocasión a la senyera gigante que el club blanco desplegó en la grada antes de los encuentros contra Osasuna, en Liga, y Milan, en la Champions. Dos partidos que se disputaron en los días posteriores a la DANA.

Posteriormente, esa bandera fue donada por el Real Madrid al Valencia, que la mostró sobre el césped en su primer encuentro después de la tragedia. Precisamente este viernes el capitán valencianista Gayá, devolvió el detalle regalando al del Real Madrid, Lucas Vázquez, una foto enmarcada de la enseña en el estadio del club valencianista.

"Yo soy del Valencia y quiero que gane mi equipo pero agradezco mucho esos detalles y hay que reconocerlo y decir, cuando es verdad, que ha pasado ¿no?" insistía este viernes la aficionada con el cartel. Su gesto se hizo en viral al ser difundido y comentado por numerosas cuentas de aficionados del Real Madrid. Su deseo deportivo, sin embargo, no pudo cumplirse: el partido acabó con remontada y victoria (1-2) del equipo de Ancelotti.

El Real Madrid resucita tras la expulsión de Vinicius a costa de un Valencia al que no le basta con ser valiente

El Real Madrid resucita tras la expulsión de Vinicius a costa de un Valencia al que no le basta con ser valiente

Mestalla un campo inhóspito para el Real Madrid, que se rebeló contra su destino justo cuando más complicada era la hazaña. Perdiendo desde el minuto 27, con Vinicius expulsado por roja directa, tras un penalti fallado, un gol anulado y la necesidad de sumar para ser líder. Sin embargo, le bastó un arreón de 20 minutos de fútbol para acabar con la euforia de un Valencia valiente que no parecía penúltimo y que estrelló en el empate en la madera en el último suspiro. [Narración y estadísticas (1-2)]

Por mucho que la grada aplaudiera su honroso gesto con las víctimas de la dana, el Real Madrid sufrió mucho. Un aplauso y a jugar, pero el equipo de Ancelotti pareció quedarse recostado en las extrañas sensaciones que tomaron el campo, con una protesta de hora y media de griterío contra Peter Lim, el goteo de aficionados entrando a las gradas, un fichaje en el palco, Umar Sadiq, y el estreno de un entrenador, Carlos Corberán, al que todos rezan para que logre la salvación sin saber muy bien cómo podrá lograrlo. Sin embargo, la nueva identidad no tardó en revelarse ante un Real Madrid perezoso, quizá por la vuelta al trabajo o por el exceso de confianza, como si al trantrán pudiera ganarse a este Valencia doliente y bailar sobre su tumba.

El Valencia fue un equipo muy serio que exigió desde inicio un esfuerzo que el conjunto blanco se resistió a hacer. Soltó pronto su arreón en el carril izquierdo Vinicius, con cambio de look y silbado, para dejarle a Valverde que lanzara un obús al pecho de Dimitrievski. Lejos de asustarse, los valencianistas respondieron con un centro de Luis Rioja, martirio de Lucas Vázquez, que cazó a la media vuelta Hugo Duro e hizo aparecer a Courtois para dejar la pelota muerta a Almeida y volver a salvar el gol.

Con alas nuevas

Con una presión alta y exigente, el Real Madrid se partía, muy lento en el repliegue. Ni Mbappé, ni Vinicius, ni Rodrygo estaban por la labor de correr hacia su portería, con Valverde multiplicado ante la pasividad de Ceballos. Por las orillas, el Valencia, con ímpetu y valiente, encontraba el camino. Era un equipo desconocido, como si Corberán hubiera aterrizado en el vestuario de Paterna con la marmita de poción mágica que les hubiera dado alas.

Foulquier, escoltado por Diego López para sujetar a Vinicius, cabalgó varias veces hacia el área sin que el brasileño ni siquiera pensara en seguirle. En el minuto 12 ya se coló entre Mendy y Tchouameni y obligó de nuevo al guardameta belga. Se acomodaban bien los valencianistas a un partido mucho más abierto de lo que hubieran soñado. De hecho, Tárrega se echó a tierra para enterrar la única jugada en la que conectaron Mbappé, Bellingham y Vinicius en toda la primera parte.

No le gustaba a Ancelotti lo que veía, con un equipo partido y a merced del acierto a la contra de rivales que, en este partido sí, parecían dignos de privarles del liderato. Y así empezaron a lograrlo cuando de nuevo se escapó Foulquier para dejarle un remate en el área a Javi Guerra que Courtois sólo pudo despejar para dejarlo a los pies de Hugo Duro, que abría el marcador. La única reacción temperamental fue la del técnico italiano, que agitó el banquillo y, arqueando la ceja, mandó un mensaje a sus jugadores. Sólo Vinicius respondió en un mano a mano que salvó el portero.

Necesitaba reaccionar el Real Madrid y lo hizo encerrando poco a poco al Valencia, que empezó a cometer errores habituales. El primero fue de Barrenechea, que no protegió con contundencia una pelota disputada con Vini. De ahí nació un discutido penalti con el que Tárrega frenó a Mbappé. No dudó Soto Grado ni tampoco el VAR, pero el lanzamiento lo estampó Bellingham en la cepa del poste. Es el tercer penalti fallado por los jugadores blancos.

Ocho minutos después, el inglés le filtró un pase tan ajustado al francés que cayó en fuera de juego y su gol fue anulado. No le salía nada a los blancos.

Expulsión y reacción

Aún estaba por llegar la traca que encendería Mestalla cuando, en el minuto 79, un rifirrafe entre Vinicius y Dimitrievski provocó que el brasileño se rebelara y, VAR mediante, el colegiado le enseñó una roja que la grada festejó gritando "Balón de playa, Vinicius, balón de playa". Tan consciente fue de su error que no tardó en pedir perdón en redes sociales.

La luz del Real Madrid la tuvieron que encender entre Brahim y Modric. Ambos se asociaron en el minuto 85 para el croata, burlando a Foulquier, apareciera para rescatar un punto que ya les servía en su escalada hacia el liderato. Pero vieron al Valencia temblar y se lanzaron a condenarlo.

De nuevo un error convertía en estéril todo el esfuerzo. Esta vez fue Hugo Guillamón en un pase atrás que comprometió a Dimitrievski y que cazó Bellingham para amarrar una victoria que resucita al Madrid y demuestra que, aunque sin punto, el Valencia puede tener pulso.

Nervios, milagro y boicot: así recibe el Valencia, con nuevo entrenador, al Madrid

Nervios, milagro y boicot: así recibe el Valencia, con nuevo entrenador, al Madrid

Once entrenadores del Valencia han debutado ante el Real Madrid. Lo hicieron los recordados Di Stéfano, Ranieri, Benítez o Emery, como también Valdano o Pellegrino, con trayectorias más breves y grises. Esta noche Mestalla, en llamas contra Peter Lim, recibirá a Carlos Corberán. A este técnico valenciano sin experiencia en LaLiga se ha encomendado el club para lograr lo que parece ya un milagro.

La agonía a la que sometieron el adiós de Baraja condena al equipo, tembloroso, a un rendimiento extraordinario que nadie ha conseguido. Y lo hace con un calendario que empieza por recuperar el partido aplazado por el azote de la dana ante Real Madrid, que llega con el colmillo afilado en busca del liderato, y sigue con Sevilla, Real Sociedad y Barcelona. Una cuesta de enero pasmosa para un Valencia que camina en el alambre.

Penúltimo, con 12 puntos en 17 partidos, necesita sumar para no enfrentarse a una estadística que asusta. Desde 1995, cuando cada victoria en el campeonato de Liga comenzó a premiarse con tres puntos, sólo un equipo que acabó la primera vuelta con una docena de puntos logró esquivar el descenso. Fue el Zaragoza en 2012, cuando después de lograr sólo dos victorias y seis empates con Javier Aguirre en el primer tramo de la temporada -justo los mismos números que tiene el Valencia- cuajó una segunda vuelta brillante con 12 victorias con Manolo Jiménez al frente.

Pendientes de Sadiq

A eso se agarra Corberán y, tras él, todo el valencianismo con más fe que certezas. Y es que, a día de hoy, la materia prima con la que trabajará el ex técnico del West Bromwich Albion es la misma que no ha rendido desde el pasado abril.

El club, con la autorización de Lim, que parece haberse dado cuenta ahora del riesgo de descenso, busca un lateral derecho y ultima la cesión del delantero de la Real Umar Sadiq si pasa el reconocimiento médico. Pero en el debut no los tendrá, ni tampoco al sancionado Pepelu y los lesionados Mamardashvili, Gayà o Rafa Mir.

Es una incógnita saber cómo será el nuevo Valencia con sólo cinco días de trabajo, en sesión doble, eso sí. «Lo primordial es saber qué queremos ser, a qué queremos jugar y cómo queremos conseguirlo. Esto es un proceso. Quiero un equipo entregado, valiente, resiliente. Esas son las señas que quiero ver en el Valencia», confesó el técnico. Pero tiene el reloj corriendo en contra. Por eso ha llegado con un nutrido grupo de ayudantes y con dos años de contrato bajo el brazo, pase lo que pase, dicen, tras el pago de una cláusula de rescisión de casi tres millones, condiciones aceptadas por la angustia. Eso sí, el proceso de crecimiento debe ser rápido o el destino se volverá irreversible.

Corberán, durante un partido de la Europa League, en 2022.

Corberán, durante un partido de la Europa League, en 2022.AP

¿Cómo ha encontrado a una plantilla que sólo ha sido capaz de ganar en Mestalla al Betis y al Girona? «Si mantienen la actitud, el compromiso y el esfuerzo de estos cinco días, vamos a crecer mucho», advirtió, aunque enfrente esté un equipo que, si bien ha titubeado en el primer tramo de temporada, llega con la inyección moral de tener en su mano el liderato.

«Es una oportunidad para crecer, para plasmar ideas y para demostrar el compromiso y la energía con la que han entrenado. Una oportunidad para acercarnos a ser el Valencia que queremos», insistió el técnico sin más detalles, serio y esquivando respuestas como atajaba balones como canterano. Por si acaso, Ancelotti se ha estudiado a su West Bromwich y cómo puede adaptarlo, lo que no hará fácil el debut, y no sólo por el rival.

Sin público hasta el 19 y con agradecimiento

La parroquia de Mestalla está harta de Lim, de ver cómo hunde a su equipo cada temporada un poco más mientras ahora insiste en acabar un estadio que no quieren y que pone en riesgo la viabilidad económica. Sólo sueñan con su salida y, mientras, hay colectivos como Libertad VCF que llaman al boicot y convocan el vaciado de Mestalla para este partido. Ante las dudas entre los aficionados, que ven compatible oponerse a quien consideran un tirano con darle calor a un equipo ahora que aún lucha por seguir vivo, el vaciado será hasta el minuto 19. Eso esperaba Corberán: «Yo acabo de llegar y respeto todo debate. Pero siento que la afición del Valencia no nos va a abandonar».

Será un duelo clásico, pero raro. Con Florentino Pérez en el palco, sin Vinicius en el disparadero de la grada y con agradecimiento al Real Madrid por su generosa donación y gestos de apoyo tras la dana.

Ancelotti, sobre el 'caso Olmo': "Hay que respetar las instituciones y las reglas"

Ancelotti, sobre el ‘caso Olmo’: “Hay que respetar las instituciones y las reglas”

Actualizado Jueves, 2 enero 2025 - 18:12

Carlo Ancelotti pidió «respeto a las reglas» en el caso Olmo, aunque evitó pronunciarse sobre los detalles, al desconocerlos. «Lo que puedo decir es que hay que respetar a todos los clubes, las instituciones y las reglas», manifestó el entrenador del Real Madrid, antes de enfrentarse al Valencia, en el partido de Liga aplazado por la DANA. Una victoria otorgaría el liderato al equipo blanco.

«Empezamos un nuevo reto con mucha ilusión, queremos empezar bien el año en un partido exigente. El Valencia ha cambiado de entrenador y siempre nos ha costado jugar contra ellos. Es un partido muy importante, podemos recortar posiciones en la tabla. El equipo está bien, los días de descanso han venido bien, veo a todos motivados y en buena forma», dijo Ancelotti.

Elogió Carletto la labor realizada por Rubén Baraja, anterior técnico, en el Valencia y desveló la forma en la que han preparado el partido, estudiando la táctica de Carlos Corberán y viendo la forma en la que la aplicará a su nuevo equipo. «Pensamos en lo que nos vamos a encontrar dentro del campo con un rival que ha cambiado de entrenador y tendrá una motivación extra por parte de los jugadores. Para mí, Baraja ha hecho un trabajo fantástico. Ahora llega un entrenador nuevo con ideas nuevas y esperamos un partido exigente. El ambiente no sé cómo será, pero tenemos que estar focalizados en el partido y nada más», explicó.

«El equipo, mucho más motivado»

El técnico madridista se marcó el objetivo de iniciar el año ganando y destacó el ambiente que ha visto en el vestuario al regreso de las vacaciones navideñas: «Tras un momento negativo en noviembre, el equipo ha reaccionado muy bien y ahora está mucho más motivado, ilusionado y en mejor forma. Hemos recuperado a jugadores. Alaba ya ha empezado a entrenar con nosotros. El ambiente es bueno y tenemos que ser capaces de mantenerlo ganando partidos». Sobre el austríaco, dijo que espera que regrese el 19 de enero, descartando al defensa para Mestalla, la Copa y la Supercopa de España.

«Cuando tengamos una plantilla más completa habrá más rotaciones. Sobre todo atrás, Alaba nos da rá la oportunidad de rotar en la posición en la que hemos sufrido más», añadió el técnico, que recupera a Vinicius para Mestalla, donde sufrió los pitos racistas.

El Valencia destituye a Rubén Baraja y estrenará entrenador ante el Real Madrid

Actualizado Lunes, 23 diciembre 2024 - 15:24

Rubén Baraja ya no es entrenador del Valencia CF. El club ha comunicado este lunes, tras el empate ante el Alavés (2-2), que ha decidido poner fin a su etapa al frente del equipo. "La dinámica de resultados durante esta temporada ha requerido de una decisión que ha sido muy difícil de tomar, pero que tiene como objetivo revertir la situación y conseguir mejores resultados".

En un comunicado, el Valencia recoge al ex centrocampista como "una de las principales leyendas de la historia" del club y admite que con su llegada al banquillo en febrero de 2023, "ayudó a estabilizar al equipo, salvando una situación complicada y, el curso pasado contribuyó a implantar unos valores competitivos que aproximaron al Valencia CF a la lucha por las posiciones europeas prácticamente hasta las últimas jornadas del campeonato".

Esa doble tarea, completada con éxito, es lo que ha mantenido al vallisoletano en el banquillo a pesar de sólo haber ganado dos partidos de los últimos 24 disputados. Con el Valencia penúltimo con 12 puntos, el club comenzó a perder la confianza tras la derrota en Valladolid, pero se resistió a tomar decisiones por la carga económica que suponía el despido.

Baraja renovó su contrato el pasado verano hasta junio de 2026 y su finiquito ronda los seis millones de euros, por lo que Peter Lim no dio luz verde a su destitución hasta esta mañana. De hecho, la presidenta Layhoon Chan aseguró el pasado jueves tras la junta de accionistas que no había "instrucciones de Peter Lim ni comentarios para cambiar al entrenador". "Aunque está preocupado, me dice que trabajemos y encontremos modos de mejorar los resultados", aseguró la presidenta.

El modo ha sido poner fin a la etapa de Baraja, que no ha encontrado la solución para activar al equipo. Suyo fue el acierto y la valentía de atreverse a alinear la canteranos como Mosquera, Javi Guerra, Diego López o Yarek en la difícil situación en la que cogió la riendas del equipo, como también cuajar dos tercios de temporada excelentes la pasada campaña que llevaron a pensar que podría alcanzar Europa.

Todo aquello se desvaneció. Aceptó un plantilla con los únicos refuerzos de Rafa Mir, con controversia, Luis Rioja o jugadores de Segunda como Dani Gómez o Germán Valera a cambio de que no hubiera salidas de los jugadores que debían ser importantes y cuyo rendimiento ha estado, por el momento, por debajo de la versión conocida. Un mal arranque de campeonato, problemas extradeportivos como la detención de Mir y decisiones como la suplencia de Pepelu o arriesgadas apuestas tácticas buscando soluciones que no daban resultado.

Estreno ante el Real Madrid

Hasta Mestalla, que coreaba su nombre en cada partido, acabó el domingo ante el Alavés pidiendo su cabeza ante la desesperación de ver al Valencia hundirse hacia la Segunda División.

Meriton, que tritura a su undécimo entrenador sin contar las interinidades de Voro González, y hace días que busca relevo. El primero en la lista fue Quique Sánchez Flores. Con él conversó el director deportivo, Miguel Ángel Corona, pero el caché de su cuerpo técnico y, sobre todo, la exigencia de incorporar refuerzos en el mercado de enero enfriaron los contactos. Ni Quique ni su entorno quieren coger a un Valencia condenado al descenso.

Una vez confirmada la salida de Baraja, con el visto bueno de Singapur, las conversaciones podrían retomarse porque la intención es tener nuevo entrenador en el banquillo de Mestalla el 3 de enero ante el Real Madrid.

Otras alternativas nacionales son Álvaro Cervera o Pacheta, pero con el empresario de Singapur al frente, puede aparecer cualquier entrenador de la órbita de los agentes de cabecera.

No será un ambiente fácil. La plataforma de oposición Libertad VCF ha hecho un llamamiento para dejar Mestalla vacío en el duelo ante el conjunto blanco.

El Valencia rescata ante el Alavés un punto de supervivencia que no apaga la ira de Mestalla

Actualizado Domingo, 22 diciembre 2024 - 16:42

Rebelión o resignación. No hay más alternativa cuando se vive en un estado terminal, enganchado a Primera sólo por las matemáticas porque las sensaciones son de una caída infinita. Dos victorias en los últimos 24 partidos. Penúltimo con 12 puntos después de remontar dos veces al Alavés en un esfuerzo que pareció titánico y que sólo alcanzó para empatar. Se quiere agarrar el Valencia a Primera pero la cuerda va perdiendo cabos jornada a jornada. O se escala de manera inmediata o será imposible. [Narración y estadísticas]

El gol de Dani Gómez a la desesperada en el minuto siete del añadido sólo maquilló la desastrosa imagen del equipo de Rubén Baraja, a quien Mestalla le pidió que se fuera y deje tan solo la lona que parece en la fachada. Es la primera vez que Pipo escucha el 'vete ya', una losa que pesará en su ánimo. El técnico y su plantilla han vivido agarrados a la poder que ejercía Mestalla, amparándoles y rescatándolos de un destino que hace años que se vislumbra pero ahora se roza. Esa protección ha desaparecido porque cómo se salva a un equipo jibarizado y estrangulado al que Peter Lim está empujando de bruces a Segunda División. Sólo había que acertar la temporada en que pasaría y esta, a pesar de que quede la mitad en juego, huele a incienso y a funeral.

El valencianismo puede resignarse y convertir el estadio en un coro de plañideras, algo que no va en el carácter, o alzarse contra el tirano que ha desvencijado su escudo. Los gritos de Mestalla antes de que arrancara el duelo contra el Alavés demostraron la vía elegida. Por primera vez en años, clamó contra el palco como hace tres días cuando, simbólicamente, expulsaron al consejo de administración de la junta de accionistas que se convirtió en clandestina.

La presidenta Layhoon Chan junto a uno de los consejeros del Valencia.

La presidenta Layhoon Chan junto a uno de los consejeros del Valencia.EFE

No hay perdón para Lim ni sus directivos, aunque tampoco lo hay ni para Baraja ni para los jugadores. La caldera se encendió no porque la activaran los blanquinegros sino porque en el minuto 6 Carlos Vicente, ese futbolista que vive la camiseta del Glorioso porque el Valencia no quiso pagar 600.000 euros al Ferrol, encontró la espalda del improvisado lateral Luis Rioja y puso cómodamente un centro que Kike García prolongó para que apareciera Carlos Martín y adelantara al Alavés en el marcador y hacer temblar al Valencia.

Ni una jugada en ataque, ni un pase de seguridad, ni un despeje a tiempo. El Valencia se descomponía sin remedio y Baraja, en un inesperado tiempo muerto por la lesión de Guridi, no logró enmendarlo. Ni un destello queda de aquel equipo punzante que asfixiaba rivales y corría hacia la portería rival. Hoy horizontal, plano, sin riesgo y sin pólvora. Del segundo gol le salvó Dimitrievski atajando un cómodo remate en el punto de penalti de de Stoichkov. Le había encontrado Carlos Martín tras romper, una vez más, a Foulquier. A Coudet le estaba saliendo el plan y veía posible sumar la primera victoria tras dos empates. A Baraja se le acaba el tiempo y sólo le ancla al banquillo un finiquito que Peter Lim no quiere pagar.

Quiso reaccionar el Valencia tras el descanso con dos destellos de Almeida y Hugo Duro, que buscando un remate chocó con Sivera y obligó al guardameta a retirarse. La entrada de Owono bajo palos acabaría siendo una ventaja porque el ecuatoguineano trabó a Diego López en el área y el VAR avisó a Alberola Rojas de un penalti que marcó Luis Rioja.

Se había esquivado una bala, la grada se enchufaba, pero el Valencia seguía sin dañar a los vitorianos y cometiendo errores. Fue otra vez Mosquera, derribando a Diarra y provocando un penalti, esta vez sin VAR, que Jordán mandó imperialmente a la escuadra cobrándose el regalo que le metía los tres puntos en el bolsillo en el minuto 85.

Cuando el Valencia deambulaba a la desesperada echando arrestos, llegó un centro de Diego López que cazó Dani Gómez para salvar un punto que no despejó la tormenta que se desató al final del partido contra la directiva en la Avenida de Suecia. No se escapa de ella el entrenador, que arrastra un porcentaje de derrotas del 43,38%, el mayor de la historia.