Norris da un golpe al Mundial y Verstappen se queda a medias en Interlagos

Norris da un golpe al Mundial y Verstappen se queda a medias en Interlagos

Lo hizo como si nada, como si no exorcizase tantos demonios de un plumazo. Lando Norris abrochó en Interlagos su séptima victoria del año, segunda consecutiva, que le afianza en el liderato del Mundial, donde ahora cuenta con 24 puntos sobre Oscar Piastri, quinto en la meta. Tan sustancial como esa ventaja son los 49 frente a Max Verstappen, tercero en el podio. El holandés, que había partido desde el pit-lane, bastante hizo durante 70 vueltas, aunque en la última no pudiese quitarse de encima a Andrea Kimi Antonelli.

Fue otro domingo fabuloso para Norris y nefasto para Piastri, el yin y el yang en McLaren. Mientras el británico navegaba en cabeza sin que las turbulencias entorpeciesen su camino, el australiano penaba por detrás, arrastrando una penalización de 10 segundos por una fea maniobra frente a Antonelli. Ajeno a cualquier trifulca, obcecado en su misión, Verstappen hizo todo lo que estaba en su mano, forzando maniobras que sólo él borda con esa suavidad. No obstante, se marcha de Sao Paulo sabedor de que el sueño del quinto título se esfuma.

Red Bull quiso romper el régimen de parque cerrado en el RB21 de Mad Max, introduciendo con cambios en el motor y en la configuración aerodinámica. Sin margen para el error, en una situación desesperada, el heptacampeón se vio impelido otra gesta como la de 2024, desde la decimoséptima plaza en la parrilla hasta la victoria en la meta. No pudo repetirla, pero bien mereció la pena el espectáculo.

Gran maniobra ante Russell

La superioridad de Norris quedó de manifiesto en un momento crítico. Fue en la vuelta 33, cuando tras su primer pit-stop, una traviesa secuencia de carrera le había colocado por detrás del holandés, su ogro de cabecera. En ese instante crucial, Lando ejecutó un impecable adelantamiento con DRS en la recta de meta. Antes había rodado 20 vueltas con los blandos, sin mayor novedad. Su ritmo se antojaba imposible para los Mercedes.

En su febril cabalgada, Verstappen llegó a liderar provisionalmente la prueba, poco después de que en la vuelta 51, Norris apurase su segunda y última parada. También obsequió al respetable con un soberbio adelantamiento sobre George Russell, una de sus víctimas predilectas, a ocho giros para la bandera a cuadros. Su conmovedora entrega, su descomunal talento, contrastaban con lo sucedido en el otro garaje de Red Bull. Después de un toque con Lance Stroll en el tramo inicial, Yuki Tsunoda recibió 10 segundos. Y como el japonés no supo cumplir correctamente el castigo, los comisarios debieron doblárselo.

Los incidentes se sucedieron desde el arranque, para tormento de Ferrari. Lewis Hamilton se rozó con Tsunoda antes de destrozar su alerón trasero contra el Alpine de Franco Colapinto. El único alivio para el heptacampeón fue que antes de cerrarse esa primera vuelta, Gabriel Bortoleto tampoco midió ante Stroll, forzando el primer safety car de la tarde. Al pisar la grava, el ídolo local había perdido el control de su Sauber en la curva 10.

La reanudación no arredró los ánimos, más bien a la inversa. Desde la cuarta plaza, obligado por las circunstancias, Piastri se jugó un cara o cruz ante el rookie de Mercedes. Por el interior de la curva 1, en una vertiginosa bajada, el australiano forzó en exceso, desplazando al Mercedes, que se llevaría por delante a Charles Leclerc. Abandono forzoso para Il Predestinato, el segundo de la temporada. El doble cero deja a la Scuderia en cuarta posición del Mundial, ya por detrás de Red Bull.

Entre tantas calamidades, antes de que se decretara el virtual safety car, Verstappen iba a toparse con restos de fibra de carbono. Tras arreglar el pinchazo en la rueda delantera izquierda, el líder de Red Bull se reincorporaba decimoctavo. Al menos así pudo deshacerse de unos neumáticos duros muy lejos de su rendimiento óptimo.

Decimotercero y decimocuarto

De ello daban fe en Aston Martin, el único equipo que seguía apostando por entonces por las gomas blancas. En la segunda relanzada, Fernando Alonso perdió el sitio frente a Alex Albon, muestra de que no se encontraba cómodo. Cuando le dijeron por radio que deslizaba en la curva 12, el asturiano replicó con un grito: "¡Sí, sí. Podéis cambiar algo más!".

Ese primer tercio de carrera no resultó tampoco propicio para Carlos Sainz. Enzarzado con Hamilton, con el alerón trasero tocado, el madrileño entró en boxes en la vuelta 18, pero un fallo en la rueda delantera derecha hizo que el pit-stop se eternizase durante 5,2 segundos. La pelea por los puntos debía resolverse frente a los Racing Bulls y Pierre Gasly, más competitivo que de costumbre. Sin embargo, Carlos no pudo reponerse a tantas adversidades y finalizó decimotercero.

Mucho antes de lo esperado, en la vuelta 29, debió entrar Alonso para prescindir de los duros, aunque consciente de las penurias de lo que por radio le habían definido como Plan B. No había material suficiente para competir dignamente contra Liam Lawson. La degradación en las gomas era mayor de la esperada. El AMR-25 se diluyó tanto que incluso parecía un Alpine. Así que Alonso acabó decimocuarto y Stroll decimosexto, sólo por delante de Tsunoda.

El gran día de Lando Norris en el GP de Sao Paulo: victoria en la carrera corta y 'pole', con Verstappen contra las cuerdas

El gran día de Lando Norris en el GP de Sao Paulo: victoria en la carrera corta y ‘pole’, con Verstappen contra las cuerdas

Actualizado Sábado, 8 noviembre 2025 - 21:10

El piloto inglés Lando Norris (McLaren) dio ayer en el circuito de Interlagos un golpe en la mesa del Mundial de Fórmula 1. En el circuito de Interlagos, se llevó primero el sprint del Gran Premio de Sao Paulo y después fue de nuevo el más rápido en la clasificación, por lo que saldrá en la pole este domingo. La cara negativa la mostraron Fernando Alonso y Carlos Sáinz, además del neerlandés Max Verstappen, que se dejó en la pista brasileña buena parte de sus opciones de pelear el campeonato del Mundo.

El asturiano fue sexto y el madrileño decimoséptimo en la carrera corta y quedaron eliminados en la segunda ronda de la calificación. El piloto de Red Bull salvó el sprint con un cuarto puesto, lejos de la cabeza, pero los cambios que hicieron en el coche le hicieron no pasar de la primera ronda de la calificación. Un desastre que le condena a salir en la decimosexta posición.

Norris se afianza en el liderato al sumar los ocho puntos, ampliar a nueve la diferencia con su compañero Oscar Piastri en la clasificación del Mundial —que tuvo que retirarse por un accidente en la sexta vuelta— y casi deja eliminado Verstappen. El ritmo del inglés solo lo pudieron seguir Andrea Kimi Antonelli, debutante en Mercedes, y su compañero de equipo George Russell.

Verstappen, tras ser eliminado en la primera ronda de la calificación

Verstappen, tras ser eliminado en la primera ronda de la calificaciónEttore ChiereguiniAP

El piloto inglés marcó el mejor tiempo de la ronda, al cubrir, con el neumático blando, los 4.309 metros de la pista paulista en un minuto, nueve segundos y 616 milésimas y sus buenas sensaciones se volvieron a repetir en la lucha por la pole.

Saldrá al frente de la parrilla por sexta vez esta temporada después de dominar la calificación e imponerse en la tercera ronda, con el neumático de compuesto blando, en un minuto, nueve segundos y 511 milésimas, 174 menos que el debutante italiano Andrea Kimi Antonelli (Mercedes) y con 294 sobre Charles Leclerc (Ferrari).

Piastri, segundo en el Mundial, se quedó a 375 milésimas del inglés y saldrá cuarto. Verstappen, ya ve el liderazgo del Mundial a 39 puntos. Algo mejor, aunque no demasiado, les fue a Alonso y a Sáinz. El piloto de Aston Martin acabó undécimo y el madrileño saldrá desde la decimoquinta plaza en una tarde no demasiado positiva. «La carrera fue difícil, pero la usamos para buscar informaciones», se consoló.

Norris, más líder del Mundial tras ganar el sprint de Interlagos, que no acabó Piastri

Norris, más líder del Mundial tras ganar el sprint de Interlagos, que no acabó Piastri

Lando Norris reforzó su liderato en el Mundial de Fórmula Uno al ganar el sprint del Gran Premio de Sao Paulo, el vigésimo primero del año, que se disputó este sábado en el circuito de Interlagos, donde su compañero y rival Oscar Piastri -segundo en el campeonato- se tuvo que retirar, al accidentarse -sin lamentar daños- en la sexta de las 24 vueltas.

Norris, de 25 años, que había salido primero, capturó los ocho puntos que otorga la victoria en la prueba corta al anotarse, por delante de los Mercedes del debutante Andrea Kimi Antonelli y George Russell -que fueron segundo y tercero, respectivamente-, el penúltimo sprint del año, que Fernando Alonso acabó sexto y Carlos Sainz, decimoséptimo.

Max Verstappen y Charles Leclerc, que fueron cuarto y quinto, cruzaron la meta justo por delante del doble campeón mundial asturiano, en una prueba en la que, antes de llegar a la primera curva de la última vuelta, Gabriel Bortoleto sufrió un espectacular y aparatoso accidente, del que, por fortuna, salió completamente ileso.

Lewis Hamilton acabó séptimo y Pierre Gasly cruzó la meta octavo, arañando el último punto en liza en una prueba que su compañero, Franco Colapinto, recién renovado por la escudería gala, tampoco acabó, ya que abandonó al mismo tiempo que lo hizo Piastri, tras accidentarse -asimismo sin lamentar daños- en la misma zona que el australiano: la tercera de las quince curvas de la pista paulista. Provocando en esos momentos, la interrupción, con bandera roja, de una prueba que se reanudó veinte minutos después, por detrás del coche de seguridad.

La clasificación del Mundial

En espera de la carrera de este domingo -la que reparte el botín principal-, Norris lidera el Mundial con 365 puntos, nueve más que Piastri y con 39 sobre 'Mad Max', protagonista de una gran progresión en las pasadas cinco pruebas que lo coloca con opciones aún de lograr un (hace dos meses casi descartado) quinto título seguido.

Norris, que le había arrebatado el liderato en México -por un solo punto- a su principal rival y que también había liderado el único libre del Gran Premio, salía desde la 'pole', acompañado por Antonelli en la primera fila; con Piastri tercero; al lado de Russell, en la segunda.

Alonso, tras un excelente viernes, salía quinto, en la tercera fila y junto a Verstappen -sexto-. Sainz, eliminado en la SQ1 con el vigésimo crono, lo hacía desde el 'pit lane', al igual que Yuki Tsunoda, que también había roto el parque cerrado. Y Colapinto, decimosexto.

A pesar de que algunas zonas de la pista aún estaban húmedas, todos salieron con slicks. Los McLaren, con neumáticos de compuesto medio; los Mercedes , con gomas blandas, al igual que 'Mad Max'. Alonso optó por los medios, lo mismo, al igual que Sainz y Colapinto

Verstappen dio cuenta de Alonso -perjudicado al estar mojadas algunas de las casillas de salida impares- en la primera de las 24 vueltas. Colapinto ganaba dos puestos en los primeros compases, en los que el que más avanzó fue Hamilton, que pasó de la undécima a la octava plaza.

En la sexta vuelta se acabó la prueba para Piastri, que perdió el control del McLaren en la tercera de las 15 curvas de la pista paulista, después de bajar las 'S de Senna', en idéntica zona en la que le sucedió lo mismo a Colapinto con el Alpine.

Nico Hülkenberg también golpeó las barreras en ese sitio con el Kick Sauber; pero, a diferencia de los anteriores, que tuvieron que abandonar en ese instante, logró llegar a boxes.

El regreso tras el 'safety'

La prueba estuvo interrumpida durante casi veinte minutos y se reanudó desde el 'pit lane' y por detrás del 'safety', con Norris por delante de los Mercedes de Antonelli y Russell; y 'Mad Max', oliendo una sangre que no pudo finalmente catar, en la cuarta posición.

Fernando reanudaba la marcha desde la quinta plaza; y Carlos, desde la decimoséptima.

Todos ellos, salvo Sainz, que usó de nuevo los medios, habían cambiado de compuesto: Lando pasó a blandos y los Mercedes a medios, al igual que Verstappen. El genial piloto asturiano -que tenía detrás a los Ferrari de Leclerc y Hamilton, que había avanzado cuatro plazas y ya era séptimo- instaló gomas medias.

Norris ejecutó muy bien la re-salida y Antonelli resistió la embestida inicial de Russell, por lo que, superado el ecuador de la prueba, tras el decimotercer giro, se mantenían las plazas cabeceras, con el canadiense Lance Stroll -el compañero de Alonso- rodando octavo, completando la zona de puntos. Un puesto que el de Montreal acabaría perdiendo en favor de Gasly.

El español -en la pista en la que festejó sus dos títulos (2005 y 2006)- se protegía magistralmente de Leclerc, que, no obstante, lo acabó rebasando a falta de dos giros y le arrebató la quinta plaza.

"Están bien estos tres puntos, el sexto puesto lo hubiera firmado ayer", comentó Alonso tras la prueba corta. "Pero esos tres puntos fueron muy duros de conseguir, mucho más de lo que me hubiera imaginado", añadió el doble campeón del mundo asturiano después de un sprint que concluyó con el brutal accidente de Bortoleto; que puso le corazón en un puño a la afición local, pero que, por fortuna, no le provocó lesión alguna al joven debutante paulista.

Los pasos firmes de Bortoleto, el discípulo de Fernando Alonso: su vínculo con Verstappen, su futuro en Audi y su ingeniero español

Los pasos firmes de Bortoleto, el discípulo de Fernando Alonso: su vínculo con Verstappen, su futuro en Audi y su ingeniero español

Gabriel Bortoleto (Sao Paulo, 2004) se mueve por el paddock con un empaque y una suficiencia impropios para un rookie de 21 años. No alardea de amigos, ni se llena la boca con promesas vanas. Tampoco regala sonrisas hipócritas. Quizá porque se sabe muy cercano a Max Verstappen y Fernando Alonso, los dos pilotos más carismáticos de la parrilla. Cada cierto tiempo, el tetracampeón sigue desafiándole en el simracing, las carreras con el simulador que le ayudaron a perfeccionar su pilotaje. Mientras, el líder de Aston Martin compagina las batallas sobre el asfalto con su rol de representante. Desde 2022, Bortoleto figura en la nómina de A14 Management, la agencia del asturiano. Hoy, con apenas 20 carreras en la F1, ya es su buque insignia.

La irrupción de Bibi, como le llaman en casa, supone la mejor noticia para Alonso en este Mundial salpicado por los errores de Aston Martin. Un suplicio para el español, que hace ahora dos décadas se proclamó, por primera vez, campeón del mundo en Interlagos. Precisamente el circuito donde estos días Bortoleto acapara los focos. Es el primer brasileño que corre en casa desde Felipe Massa en 2017. Eso sí, el novato de Sauber comparte protagonismo con Lewis Hamilton, a quien la torcida decidió hace tiempo abrazar como uno de los suyos. El enemigo histórico de Alonso ejerce también ahora como la némesis de su ahijado.

El 14 de octubre de 2004, fecha de nacimiento de Bortoleto, Fernando ya contaba con una victoria, ocho podios, tres poles y 49 carreras en la F1. Era un proyecto de campeón. Hoy, su discípulo deja indudables muestras de velocidad al volante del C45, compitiendo de igual a igual con un veterano como Nico Hulkenberg. Aunque el alemán, con 14 temporadas completas en la F1, casi le dobla en puntos (41-19), Bortoleto domina el cara a cara en la qualy (11-9) tras enlazar un 7-0 entre el GP de Austria y el GP de Azerbaiyán. Desde Daniel Ricciardo en 2019, nadie había establecido una racha tan rotunda frente a Hulk, reputado especialista a una vuelta.

"Extremadamente metódico"

Sauber, el peor equipo del Mundial 2024, ha cambiado la dinámica. Ahora establece bases sólidas para la llegada de Audi en 2026. Bortoleto es su piloto de futuro. No sólo por proclamarse campeón de la F3 y la F2 en su primer año en ambas categorías, sino porque ahora demuestra gran madurez en la pista. "Es extremadamente profesional y metódico. Eso nos da mucha confianza para el futuro", admite el team principal Jonathan Wheatley, ex de Red Bull.

De momento ya ha acabado cinco veces en los puntos y suma cuatro presencias en la Q3. Un balance equiparable al de Isack Hadjar y Oliver Bearman, los otros dos novatos con los que se pueden establecer comparaciones, aunque sea con monoplazas de mayor rendimiento. El francés (Racing Bulls) logró un podio en Zandvoort, mientras el británico (Haas), vecino de Bortoleto en Mónaco, viene de firmar un cuarto puesto en México.

Tras un flojo arranque de temporada, Gabriel hubo de esperar su momento hasta Hungría. Allí finalizó sexto, por detrás de Alonso. Nada más bajarse del coche, el bicampeón acudió a abrazarle. Y en la zona mixta dejó una frase lapidaria: "Si Gabi fuese inglés o algo, mañana sería portada en todos los periódicos". No sólo se trataba del obligado elogio a su cliente, sino de una pulla contra el establishment y contra la doble moral del Gran Circo. Si observaban con recelo su vínculo con Bortoleto, ¿por qué no hacían lo mismo con Toto Wolff, que alterna la labor de team principal en Mercedes con la de agente de Andrea Kimi Antonelli o Valtteri Bottas?

Bortoleto, al volante del C45, durante el GP de México.

Bortoleto, al volante del C45, durante el GP de México.AFP

Apenas un mes más tarde, el brasileño recibió su segundo galardón de mejor piloto del día tras su octava posición en Austria, otra vez a la estela de su mentor, con medio segundo de ventaja en la meta.

Hace dos semanas, poco antes de tomar la salida en el Autódromo Hermanos Rodríguez, Alonso jugó una partida de pádel con su alumno, en compañía de Edoardo Bendinelli, su fisioterapeuta y Alberto Fernández, Galle, su mánager personal. Síntoma inequívoco del estrecho vínculo que les une. Este mismo jueves, Bortoleto ha compartido espacio con Verstappen en el podcast Pelas Pistas, presentado por Nelsinho Piquet, su cuñado, donde quiso reverdecer viejas anécdotas juntos.

El pequeño Gabriel llegó a Europa a los 12 años, por imperativo de Lincoln, su padre, que le dejaría en Italia bajo la tutela de Francesco Di Mauro. Tanto tiempo fuera de casa, volcado en los karts, curtió al niño, convertido hoy en esperanza nacional. Especialmente tras el abrupto adiós de Felipe Drugovich en AstonMartin, donde Jak Crawford ejerce ahora como tercer piloto. Brasil es un país con tres campeones del mundo: Emerson Fittipaldi (1972, 1974), Nelson Piquet (1981, 1983, 1987) y Ayrton Senna (1988, 1990, 1991). Sin embargo, han transcurrido 16 años ya desde la última victoria, con Rubens Barrichello en el GP de Italia 2009 y una década desde el último podio de Massa, también en Monza.

Alonso y Bortoleto, tras el GP de Austria 2025.

Alonso y Bortoleto, tras el GP de Austria 2025.SAUBER

El pasado septiembre Bortoleto y Alonso se dieron un pequeño homenaje en el Templo de la Velocidad. "Me dijo que sólo necesitaba mi rebufo, que no tenía la velocidad punta, por lo que no me iba a adelantar", confesó el chico. Quien lo tenía también claro fue José Manuel López, el ingeniero de pista de Gabriel. Un albaceteño de dilatada experiencia en la F1, con quien ya trabajó el año pasado. Bortoleto era la punta de lanza de la academia de jóvenes pilotos del equipo de Woking. López, por su parte, fue ingeniero de rendimiento de Lando Norris y trabajó ocasionalmente como su ingeniero de carrera, sustituyendo al titular Will Joseph. Antes de alcanzar la élite, se había fogueado en la cantera de la escudería Carlin, colaborando con Carlos Sainz.

Muere el ex piloto italiano de Fórmula 1 Andrea De Adamich

Muere el ex piloto italiano de Fórmula 1 Andrea De Adamich

Actualizado Jueves, 6 noviembre 2025 - 09:29

El italiano Andrea De Adamich, ex piloto de Fórmula 1 durante cinco años en los que militó en Ferrari y McLaren, entre otras escuderías, falleció este miércoles a los 84 años.

De Adamich (Trieste, 1941) debutó en 1962 en competiciones automovilísticas y solo tres años después, en 1965, ganó el campeonato de Fórmula 3.

En 1968, dio el salto al categoría reina del motor, donde pilotó monoplazas durante cinco temporadas consecutivas. Militó en grandes escuderías como Ferrari y McLaren, así como en March, Surtees y Brabham.

En 1973 sufrió un accidente durante una carrera en Silverstone que acabó con su trayectoria profesional en la categoría reina. Quedó atrapado durante una hora en su Brabham tras una colisión que involucró otros diez monoplazas y se fracturó ambas piernas, en las que además sufrió cortes en los músculos.

Terminada su carrera deportiva, comenzó la de comentarista televisivo que le brindó fama a nivel nacional.

El largo viaje de Mike Gascoyne: de crear del primer coche ganador de Fernando Alonso a diseñar drones para la guerra de Ucrania

El largo viaje de Mike Gascoyne: de crear del primer coche ganador de Fernando Alonso a diseñar drones para la guerra de Ucrania

Mike Gascoyne nunca presumió de una vocación muy marcada por la Fórmula 1, pero los azares de la vida le terminaron encauzando hacia el Gran Circo. En 1989, cuando aún redactaba su tesis doctoral en la Universidad de Cambridge, se topó con una revista donde McLaren había publicado un anuncio para contratar personal. Ese ejemplar de Flight llevaba ya tres meses en la calle, pero aun así Gascoyne quiso probar suerte. Apenas unas semanas después obtubo un puesto como aerodinamicista en el MP4/5 de Alain Prost y Ayrton Senna. De allí pasó a Tyrrell, Sauber y Jordan, antes de ser reclutado en 2001 por Flavio Briatore, el propietario de Benetton. Un año más tarde se convirtió en director deportivo en Renault, para quien diseñó el coche con que Fernando Alonso firmó su primera victoria (GP de Hungría 2003). "En realidad nunca quise ser un personaje mediático o un ingeniero muy valorado. Me interesa mucho más lo que hago ahora, construir mi empresa y, con algunos de los proyectos de defensa que estamos llevando a cabo, ver si puedo ayudar a Ucrania y a su gente a defenderse y cuidarse. Y ayudar a Europa a defenderse", cuenta Gascoyne.

Entre esos planes, ninguno tan osado como el SkyShark, un dron concebido para misiones de inteligencia y ataque, en escenarios de batalla complejos, con ausencia de señal GPS. Es la nueva joya de la corona de MGI Engineering, la empresa fundada por Gascoyne hace más de dos décadas. El pasado 11 de julio, el SkyShark fue probado en el Aerodrómo de Enstone, precisamente junto a la fábrica de Renault donde Gascoyne diseñó el R23, el monoplaza con el que Alonso conquistó su primer triunfo el 24 de agosto de 2003. "Cuando me incorporé a Benetton en 2001 empezamos a formar un equipo y ese grupo, aunque yo me marchase a Toyota en 2003, fue el que se proclamó campeón en 2005 y 2006 con Fernando. De modo que 2003 fue sólo un paso en el camino", rememora.

En compañía de Tim Densham, responsable del diseño, y Bob Iley, jefe de aerodinámica, Gascoyne puso la primera piedra sobre la que se sustentaría el imperio de Briatore. Por tanto, no es de extrañar que en aquella época, el playboy italiano compartiese confidencias con su director técnico. De hecho, durante la primera visita de Alonso a las instalaciones de Enstone, el asturiano sólo se reunió a solas con ambos. "Lo que hizo especial a Renault fue el equipo que habíamos formado", reitera Gascoyne. "El coche era simplemente una parte del todo. Fue un buen desarrollo del B201 de Benetton, que empezó siendo un desastre durante la primera mitad de temporada, y del R202 de Renault, con el que ya conseguimos podios de forma regular".

"no iría a la guerra con Flavio"

Hoy, 22 años después de aquel domingo de gloria en Hungaroring, el rostro del británico aún se ilumina al recordar a los viejos camaradas. "Probablemente no iría a la guerra con Flavio, porque no creo que esté realmente dispuesto a luchar en Ucrania. Fernando, por su parte, es un tipo muy guay, pero muy duro en lo que respecta a las carreras, así que no me importaría tenerle a mi lado en cualquier situación", concluye, con una media sonrisa. En cualquier caso, las misiones suicidas del SkyShark cerca de Pokrovsk no han de tomarse a la ligera en MGI. «No voy a dar nombres, pero tenemos dos o tres expertos en defensa. Uno militó 10 años en la unidad de Fuerzas Especiales (SAS) e hizo muchas cosas de las que no habla. El otro trabajó tanto en el SAS como en el Servicio Secreto», desliza.

El SkyShark, que puede alcanzar velocidades de 450 km/h y destruir blancos situados a 250 km, entrará en combate los próximos días en el frente de Ucrania. Según Gascoyne, el gobierno de Volodimir Zelenski ya ha mostrado interés en su producción, con un precio por unidad que rondaría los 67.000 euros. El otro modelo de MGI Engineering es el TigerShark, un dron más pesado, de largo alcance, que supondría una alternativa a los grandes misiles, con un precio en torno a los 500.000 euros. "Diseñamos vehículos ligeros de alto rendimiento para nichos de mercado, ya sea para uso militar, para drones o para deportes de motor. Y eso es precisamente la F1: diseño de vehículos de alto rendimiento para nichos de mercado", recalca Gascoyne.

El SkyShark, durante una de sus pruebas.

El SkyShark, durante una de sus pruebas.MGI

Por supuesto, la Fórmula 1 y la industria de guerra cuentan con numerosos vasos comunicantes. No sólo por la incesante búsqueda de las mejoras, las optimizaciones aerodinámicas, la distribución del peso o la eficiencia de los motores. Se trata, en definitiva, de traspasar los límites, en velocidad, precisión o innovación. Sin embargo, lejos de adoptar la tradicional perspectiva del paddock como un río plagado de pirañas, Gascoyne prefiere ampliar el foco. "No creo que la F1 sea especialmente difícil. En cualquier negocio hay personas con las que no resulta fácil tratar. También situaciones legales y contractuales complicadas, así que no creo que la F1 sea especialmente delicada. Simplemente es un mundo muy mediático, sometido a infinidad de comentarios, pero no lo veo diferente al resto de industrias", subraya.

En realidad, MGI se ha resistido a cualquier cambio radical. De hecho, como empresa consultora sigue trabajando en el motorsport, con deportivos eléctricos de alta gama y un modelo que bate récords de velocidad. Sólo en los dos o tres últimos años ha apostado por los productos aeroespaciales ligeros y con materiales compuestos, entrando en la tecnología de los drones y los vehículos autónomos. "Tomamos esta decisión por la situación política mundial y la guerra en Ucrania. Muchos de los proyectos de drones están impulsados por requisitos de defensa", añade.

El TigerShark, junto a uno de los F1 de Gascoyne.

El TigerShark, junto a uno de los F1 de Gascoyne.MGI

La mentalidad de un ingeniero de F1, que resuelve problemas complejos con rapidez y creatividad, se adapta perfectamente a la tecnología militar. De modo que las sinergias fluyen con armoniosamente. Al igual que un monoplaza, los drones requieren materiales ligeros, propulsores potentes y navegación precisa. En cuanto a las dificultades, los test con estos artefactos resultan tan arduos como los que presenta cualquier circuito. "Hay que garantizar la seguridad y asegurarse de que no se produzcan accidentes, pero en este momento la normativa es prohibitiva. Hasta hace unos meses, en España resultaba todo mucho más fácil. Probarlo allí fue realmente productivo para nosotros"; admite Gascoyne, en referencia a las pruebas del pasado mayo en el BCN Drone Centre, situado en la localidad barcelonesa de Moià.

"Toda Europa tiene un problema de exceso de regulación en lo que respecta a las pruebas de prototipos de drones, así que si queremos ser competitivos en el mercado mundial debemos tener mucha menos regulación o una carga administrativa mucho menor en materia de regulación», finaliza el ingeniero británico.

Como si volviéramos a empezar

Como si volviéramos a empezar

Actualizado Lunes, 27 octubre 2025 - 14:37

Después de 20 Grandes Premios, 1.175 vueltas de competición, 5.789 kilómetros de batalla, afrontamos las últimas cuatro carreras casi como si volviésemos a empezar. Con 132 puntos todavía disponibles, los dos primeros del mundial están separados por tan sólo uno. La buena y la mala noticia para McLaren es que los dos pilotos son suyos. Buena noticia porque tienen un elevado porcentaje de opciones que llevarse el campeonato y malas noticias porque gestionar la batalla va a ser francamente complicado. Las "papaya rules", las reglas internas, los castigos por incumplir el primer mandamiento de no tocarse, creo que ya están en la papelera. Demasiado complejo todo, demasiado difícil de gestionar o de compensar. Sólo hay una cosa clara, los dos disponen del mismo material, los dos quieren ganar y los dos deberían estar juntos en pista en las cuatro carreras que nos quedan. Volverán a luchar y, probablemente, volverán a tocarse.

Para saber más

Para saber más

No hay vuelta atrás. Están diseñados para luchar, para ganar. Lo han hecho durante toda su vida, desde que eran niños, y ahora están ante la mayor oportunidad de su vida que ninguno quiere desperdiciar. Sin embargo, en este continuo trasiego de carreras hemos visto momentos de fortaleza y de debilidad. A veces no muy fáciles de explicar. Oscar Piastri, el nuevo Iceman, ha demostrado en las últimas carreras que no es tan frío. Su bajón de rendimiento, especialmente en las dos últimas, le ha hecho perder el liderato a favor de un Lando Norris que en los dos últimos años nos había decepcionado por su falta de agresividad. Ahora lleva dos grandes premios mostrando su mejor versión.

Los dos han brillado y los dos han fallado. Sólo hay alguien que se mantiene inalterable: Max Verstappen. En México su dominio de los últimos cinco grandes premios se contuvo, pero él siguió brillando. Es posible que el aire fino de México le quitase prestaciones al Red Bull, pero no a Max. Minimizó daños, subió al podio al ser tercero, le recortó puntos a Piastri y sigue siendo una amenaza real en el campeonato. 36 puntos le separan del quinto título consecutivo, pero con la ventaja de que él es el único que se está divirtiendo y que es el único al que no le van a juzgar por el resultado final. Haga lo que haga todo el mundo utilizará su mejor repertorio de elogios para describir su temporada.

México fue una excepción a la tendencia, pero no sé si es un cambio de tendencia. Max sigue siendo mi piloto favorito para el título. Sigue estando cerca, matemáticamente sigue siendo posible, sus rivales están aún más agobiados y él no tiene nada que perder. El buen estado de forma de Ferrari sólo agrava esta situación. Están y estarán en el medio de este campo de batalla y pueden contribuir a que, si uno falla, sus heridas tengan peores consecuencias.

Lo mejor de todo es que tiene pinta de que nos vamos a divertir y que con un poco de suerte, podamos llegar a la última carrera, quién sabe si a la última curva, con el mundial en juego.

Fernando Alonso saca el dedo a Aston Martin y señala a la FIA por "mirar para otro lado"

Fernando Alonso saca el dedo a Aston Martin y señala a la FIA por “mirar para otro lado”

El cuarto abandono consecutivo de Fernando Alonso en México llegó tras un misterioso silencio en la radio de Aston Martin. El bicampeón había desconectado el canal de las comunicaciones con sus ingenieros tras un pésimo pit-stop de 7,1 segundos, saludado con un irónico gesto con el pulgar hacia uno de los mecánicos. Tras ceder la posición frente a Lance Stroll, el asturiano optó en la vuelta 34 por la retirada. La quinta de otro Mundial para el olvido.

Mike Krack, jefe de operaciones en pista, habló de un "posible problema con los frenos" del AMR-25. Esa tesis fue validada por el propio Fernando, sin opciones ya de ampliar su paupérrimo bagaje en el Autódromo Hermanos Rodríguez, donde sólo ha sumado tres puntos en nueve participaciones. "Llevábamos manejando la temperatura de los frenos unas 15 vueltas, intentando cambiar el reparto de frenada. Pero sí, había mucho tráfico y no teníamos bastante refrigeración", admitió el español.

Dudas aparte, lo indiscutible es que pese a la imposibilidad de escuchar las conversaciones, nadie de Aston Martin aguardaba en el pit lane cuando Alonso llegó con su monoplaza. Un triste colofón para este fin de semana que se suma a otras cuatro decepciones repartidas a lo largo del Mundial. En Albert Park fue un accidente tras pisar la grava; en Shanghai, un problema con los frenos; en Mónaco, una avería en el motor y en Monza, un contratiempo con las suspensiones.

Amenaza de Haas

A este revés hay que añadir el difícil domingo de Stroll, decimocuarto en la meta, sólo por delante de los Alpine de Pierre Gasly y Franco Colapinto. El canadiense no sólo fue ralentizado por un pit-stop de 4,1 segundos, sino que también sufrió diversos achaques en su motor Mercedes. El remate a otra paupérrima actuación de Aston Martin, que jamás ha puntuado con sus coches tras cuatro carreras en México.

Por si fuera poco, este doble cero coincide con la fantástica actuación de Oliver Bearman, cuarto bajo la bandera a cuadros. El rookie británico igualó de este modo el mejor resultado del equipo estadounidense, igualando lo conseguido por Romain Grosjean en el GP de Austria 2018. Con 14 puntos de una tacada, Haas reduce distancias frente a Aston Martin en el Mundial de Constructores, donde se encuentra ahora a siete puntos.

El séptimo puesto en la tabla también peligra, por mucho que los jefes de Silverstone intenten mantener la compostura. Según los datos del ritmo de carrera, el AMR25 volvió a perder en México la batalla ante Sauber y sólo fue más rápido que los Racing Bulls y los Alpine. En las cuatro citas restantes de 2025, los ingenieros ya han depositado sus esperanzas en Brasil (9 de noviembre) y Qatar (30 de noviembre).

En cualquier caso, Alonso no se muestra precisamente optimista con lo que resta de campeonato. Especialmente tras lo que considera errores de la Federación Internacional (FIA), a quien acusa directamente de "mirar hacia otro lado" a la hora de imponer ciertos castigos.

Esa suponía la principal frustración del español tras la salida en México. "La gente no hace el circuito, se va por fuera, gana tres o cuatro posiciones y la FIA mira para otro lado", subrayó Alonso, en referencia a lo sucedido en la primera vuelta. A pesar de que llegó a rodar duodécimo, en sólo unos metros había sido rebasado por cuatro coches, que no recibieron penalización alguna por parte de los comisarios.

El esfuerzo del doble ganador en Le Mans no sirvió "de nada" porque "la gente se saltó las tres primeras curvas". A partir de ese caos, el único destello que pudo permitirse fue un doble adelantamiento ante Liam Lawson y Gasly.

Lando Norris resurge con un colosal triunfo en México y asume el mando del Mundial

Lando Norris resurge con un colosal triunfo en México y asume el mando del Mundial

Fue un triunfo para que nadie olvide lo rápido que sigue siendo McLaren. Una advertencia de Lando Norris, nuevo líder del Mundial, por si alguien en Red Bull se da por aludido. Porque ni siquiera Max Verstappen pudo objetar una palabra en el Autódromo Hermanos Rodríguez. Más bien hubo de sentirse feliz por ocupar la última plaza del podio tras Charles Leclerc. Nadie discutió la sexta victoria de Norris en 2025, la primera tras las vacaciones, que le catapulta en las casas de apuestas para proclamarse campeón.

De nada le sirvió a Mad Max el esfuerzo postrero frente al Ferrari en las dos zonas de DRS. El virtual safety car provocado por el abandono de Carlos Sainz en la penúltima vuelta supuso el mejor salvavidas para Il Predestinato. De igual modo, Oscar Piastri tampoco encontró un triste resquicio frente a Oliver Bearman. Con esa quinta plaza en la meta, el australiano cerraba otro deplorable fin de semana, impropio de un aspirante a campeón. Por mucho que se haya ganado fama en el paddock por su cerebral estilo, aún debe revisar muchas carreras de Alain Prost para cumplir con la Historia.

Tras tantos sinsabores, Norris se ve ahora en cabeza, con un mísero punto de ventaja, pero con la moral por las nubes. En un domingo donde no se admitían titubeos, se comportó como un true racer. Y es que hubo tiempo de sobra en los 900 metros hasta la primera curva para que Ferrari organizase un buen barullo. No se aclararon Leclerc y Hamilton para ver quién tenía prioridad en el ataque a Norris, así que terminaron arrastrando a Verstappen hacia el bordillo. Fuera de sitio, bastante hizo el holandés regresando a pista con los huesos en su sitio. Había rebasado pícaramente a George Russell, pero aunque los comisarios anotaron el incidente ya no devolvería la posición al británico.

Sustos por el 'graining'

En la sexta vuelta, el tetracampeón empezó a reeditar sus viejas disputas con Hamilton. Tras una primera maniobra no pudo respetar la chicane, así que tuvo que ceder otra vez la plaza. También ante Bearman, que había arrancado como una flecha, recuperando cinco posiciones con el Haas. Dos giros más tarde, Verstappen y Hamilton llevaron la agresividad al límite en esa misma curva 4. Rueda con rueda, con mucho que perder para el holandés, desesperado por recuperar terreno frente a Norris y Leclerc.

La investigación de los comisarios, sin embargo, se tradujo en 10 segundos de penalización para Hamilton por ganar ventaja fuera de los límites de pista. Un alivio para Piastri, enfrascado con Yuki Tsunoda, que cumplía algo parecido a un rol de escudero. No le salían sin embargo las cuentas al australiano. El liderato del Mundial había pasado ya a manos de Norris, que se deslizaba sobre un asfalto a 52ºC, con aire limpio para su alerón delantero, construyendo una confortable ventaja frente a Leclerc.

El graining, tan habitual en este trazado, empezó a hacerse notar en los neumáticos antes de lo previsto. Ese desgaste podía dar lugar a engaño, porque una semana más, la mejor estrategia posible para los Pirelli era a una sola parada. En la vuelta 21, Aston Martin mostró por enésima vez su desesperante torpeza en el pit-stop, con una parada de 7,1 segundos para Alonso. Algo se atascó en la rueda delantera izquierda y el asturiano, más que harto, elevó el pulgar a su mecánico. No se podía ser más cáustico.

Una muesca más para su aciaga historia con el Autódromo Hermanos Rodríguez. De salida había superado incluso a Carlos Sainz, desde la decimocuarta a la decimosegunda plaza, justo antes de que se formase un monumental lío en la curva 2. "Es muy injusto que esté en esta posición por haber hecho las curvas. Haced algo", reclamó a los responsables de su equipo. No encontraba consuelo Fernando, que incluso se llevó un buen zarandeo con la rueda trasera derecha de Esteban Ocon. Justo antes de que se alcanzase el ecuador, cuando le pidieron ceder el sitio a Lance Stroll, el asturiano optó por arrojar la toalla. Su cuarto abandono consecutivo en tierras mexicanas se precipitó, al parecer, por un contratiempo en los frenos.

"Nada funciona"

El espectacular ambiente del Foro Sol, que convierte esta carreras en una de las más especiales del Mundial, no debe servir como excusa para esconder lo sucedido con Liam Lawson. Antes de su abandono en la cuarta vuelta, el piloto de Racing Bulls se vio sorprendido por dos operarios que atravesaban el asfalto presos del pánico. Por otros motivos aún más evidentes se escuchaba a Verstappen por la radio. "Nada funciona", lamentaba el líder de Red Bull, sin agarre en las curvas.

El paso por boxes tampoco resultó propicio para Sainz, que había cambiado los medios por un juego de blandos. Se notaba en el Williams un infernal traqueteo y Carlos superó el límite de velocidad por el pit-lane. Cinco segundos de sanción con una estrategia a dos paradas para salvar el honor de la escudería de Grove. Poco podía arañar el madrileño, aunque pudo dejar un bonito adelantamiento ante el Sauber de Gabriel Bortoleto.

Como no habían solventado el problema, durante su segundo paso por boxes volvió a fallar el limitador del FW47, por lo que Sainz tuvo que cumplir un drive through. El preludio de su ya citado adiós, que tanto debieron agradecer Leclerc y Bearman, sus ex compañeros en Ferrari.

Norris minimiza a Verstappen con una gran 'pole' en México

Norris minimiza a Verstappen con una gran ‘pole’ en México

Desde la sesión matinal, la última de entrenamientos libres, los márgenes entre los favoritos se cifraban en milésimas, pero a la hora de la verdad Lando Norris hizo trizas a sus rivales en México. El británico tiñó de púrpura los tres sectores del Autódromo Hermanos Rodríguez (1:15.586), con 26 centésimas sobre Charles Leclerc y 35 sobre Lewis Hamilton. Su quinta pole del año, la primera desde finales de julio en Spa, supone una bombona de oxígeno frente a Max Verstappen, que partirá quinto, y evidencia su actual superioridad frente a Oscar Piastri. El líder del Mundial, con el octavo tiempo, partirá séptimo por la sanción a Carlos Sainz.

"No sé ni cómo lo hice", admitió Norris a través de la radio, con la euforia del momento. No quería conocer más detalles por parte de su ingeniero, consciente de que ya había hecho lo más difícil. El fin de semana se presenta más que propicio para Lando. En las cinco últimas citas, el más rápido de la qualy convirtió su pole en victoria el domingo. Una constante en este Mundial, donde este orden sólo se quebró en siete de las 19 carreras previas.

Dejando a un lado las sensaciones, atendiendo al puro rendimiento, la gran amenaza para Norris debería llegar desde Ferrari. Justo un año después de la victoria de Sainz, con pole incluida sobre este asfalto, Leclerc y Hamilton apurarán sus bazas desde la salida. No sólo se trata de aprovechar el rebufo en la recta interminable, sino de mantener un ritmo de crucero en busca de un triunfo con el que maquillar tantos desastres acumulados.

32-0 a Stroll

Quien quiera riesgos deberá subir por los arcenes, atacar los vértices o desafiar el sobreviraje como le sucedió bien pronto a Verstappen. Un latigazo en la curva 9 para no bajar la guardia. Incluso en los virajes de alta velocidad, donde mejor debía sentir su coche, el tetracampeón debía mantenerse alerta. En la Q3 ni siquiera pudo acercarse a Norris, 48 centésimas más rápido.

Tampoco pudo permitirse un respiro Fernando Alonso, obligado por lo sucedido durante la sesión matinal, cuando sólo pudo rodar 12 vueltas por la mañana, víctima de un contratiempo en la suspensión delantera. De modo que el bicampeón tuvo que estrenar una especificación en la Q1, donde la competencia ya se intuía feroz para un monoplaza tan endeble como el suyo.

Pudo solventar Fernando ese trance, con un intento postrero dos milésimas más rápido que Yuki Tsunoda y 19 mejor que Nico Hulkenberg. Si por arriba sorprendía la velocidad de Isack Hadjar, por los bajos fondos volvían a perderse los Alpine y Lance Stroll, cuyo balance los sábados frente a Alonso se amplía a 0-32.

Albon, fuera en la Q1

No quedaba más fuelle dentro del AMR25, así que el asturiano nada pudo inventar en esta ocasión. Alguna energía fluye por esta pista, donde acumula cinco abandononos tras ocho participaciones, que no sienta bien a Fernando, decimocuarto en la parrilla.

El temprano adiós de Alex Albon perfiló también las últimas tendencias dentro de Williams, donde el británico ha perdido fuelle frente a Sainz, que saldrá decimosegundo. Aun arrastrando una leonina penalización de cinco plazas en la parrilla, el madrileño dio la cara, cerrando la Q2 a sólo dos milésimas del crono de Verstappen. Un pestañeo más rápido que Leclerc y Piastri, obligado a apurar sus balas para salvarse de la quema.

Sin embargo, el líder del Mundial nunca lograba acercarse a los cronos de Norris. Noveno, tercero y sexto en las tres últimas sesiones de los sábados, Piastri volvió a parecer superado por las circunstancias.