Kroos dirige el histórico baile de Alemania a Escocia para meter miedo a Europa

Kroos dirige el histórico baile de Alemania a Escocia para meter miedo a Europa

Toni Kroos volvió a hacer suyo el Allianz Arena, este viernes Múnich Football Arena por cuestiones de patrocinio, y dirigió el baile de fin de curso de los jóvenes Wirtz y Musiala, estrellas emergentes de una Alemania que pasó por encima de Escocia (5-1) y abrió la Eurocopa metiendo miedo a sus rivales. El regreso del '8' a la Mannschaft no es un homenaje, es una declaración de intenciones. Quiere ganar.

El conjunto de Nagelsmann ha vivido una montaña rusa de sensaciones en los últimos meses, pero la vuelta de Kroos ha ordenado sus piezas. Ha liberado a Gündogan en la mediapunta y ha dado vuelo a sus dos joyas, Wirtz y Musiala, goleadores ayer en una primera parte extraordinaria, de dominio absoluto del balón pero también de verticalidad y rapidez. Detalles de campeón.

Nagelsmann situó a Andrich, vital para Xabi Alonso en el Leverkusen, al lado de Kroos e insistió en la movilidad de los cuatro de arriba, con Havertz más anclado como delantero centro pero todos en constante movimiento, haciendo daño a la espalda de la defensa británica. Demasiado para Escocia, débil en todas sus líneas y sólo capaz de superar líneas a base de balones largos. Poco fútbol.

Y eso que el fútbol a veces es demasiado fácil. Una diagonal de Kroos sirve igual en el Bernabéu que en Múnich. Con el Madrid que con Alemania. Un pase largo, un buen control de Kimmich, o de Carvajal, y un gran remate al primer toque de Wirtz, otras veces Rodrygo. Tres acciones básicas para el 1-0 que abrieron el camino a la goleada para dar un golpe sobre la mesa del torneo. Era sólo el minuto nueve.

Gunn, portero del Norwich, intentó detener el disparo, pero el palo terminó ayudando al mejor jugador de la Bundesliga esta temporada. A Wirtz lo pretende el Madrid y aunque decepcionó, como su equipo, en la final de la Europa League, ha iniciado el torneo continental con ganas de mostrarse todavía más.

El ataque alemán

Nagelsmann parece haber creado parejas en ataque a pesar de la continua movilidad de sus hombres. Wirtz más pegado a la izquierda, conectando con Kroos, Musiala combinando con Kimmich en la derecha y Gündogan entendiéndose con Havertz por el centro. Seis hombres superiores a sus rivales. Así llegó el segundo tanto.

Con la defensa británica preocupada por las carreras de Wirtz y Musiala a la espalda, Gündogan recibió entre líneas y dibujó un pase elevado a Havertz que Escocia no supo leer. El delantero del Arsenal avanzó, recortó a su rival y dejó para Musiala, que con un amago se quedó solo en el punto de penalti. Misil y 2-0 en el 18'.

Con el resultado a favor, Alemania se dedicó a jugar con su rival, siempre con Kroos como timón en la base izquierda de la jugada, como en el Madrid. El fútbol, lo decíamos, es sencillo. Tan simple como el rondo que dibujó la selección germana ante la impotencia escocesa. De izquierda a derecha hasta que el balón llegaba a Wirtz o Musiala para acelerar el ritmo.

Escocia, con uno menos

Rozando el descanso, Gündogan remató de cabeza un centro, Gunn detuvo el disparo y el rechace quedó muerto de nuevo para el futbolista del Barça, que recibió una plancha al tobillo por parte del escocés Porteous. No lo vio Turpin, pero sí el VAR, que avisó al colegiado para que acudiera a la pantalla. El videomarcador del estadio lo dejó claro por primera vez en esta Euro: «Penalti del número 15 por poner los tacos de forma peligrosa en el tobillo de su rival». Penalti y roja para el defensa escocés, que dejaba la misión imposible para los británicos.

Havertz, desde los once metros, anotó el tercero y Nagelsmann se fue a vestuarios pensando en la segunda jornada, el miércoles contra Hungría. El técnico usó el segundo tiempo para ir metiendo en ritmo a su segunda unidad, liderada por Sané y Füllkrug, y le salió bien.

El partido fue lo que quisieron Kroos y Musiala, líderes rítmicos del baile alemán. Uno pone el control, el otro la magia. En el 68 y con Escocia pidiendo la hora para descansar de cara al duelo ante Suiza, la perla del Bayern encontró a Gündogan en la frontal y el balón suelto lo recogió Füllkrug para enviarlo a la escuadra de Gunn.

Rüdiger, en propia puerta, hizo el gol del honor de Escocia tras el saque de una falta y Can marcó en el descuento para dejar el marcador en un contundente 5-1. La mayor goleada en el partido inaugural de una Eurocopa. Alemania ya está aquí.

El muro invisible que separa a Alemania: 3 de 26 futbolistas, 1 de 10 estadios, “una división política y psicológica”…

Actualizado Jueves, 13 junio 2024 - 20:04

Múnich inaugura esta noche el segundo torneo futbolístico celebrado en Alemania después de la caída del muro de Berlín. El primero, ya lo saben, fue el Mundial de 2006, punto y seguido a esa conexión constante que ha tenido la realidad política y social del país con el balón. La pelota ha servido para explicar la división y la unión del pueblo germano y esta Eurocopa, casi 35 años después de la unificación, no es una excepción. «Unidos por el fútbol», grita el lema del torneo, aunque la realidad Este-Oeste es otra.

Alemania debuta ante Escocia, rival propicio para confirmar su condición de favorita, y su lista de convocados comienza a resumir la problemática nacional. Sólo 3 de los 26 futbolistas han nacido en la zona Este de su territorio: Kroos (Greifswald), Beier (Brandemburgo) y Andrich (Postdam). Ejemplo perfecto de las profundas diferencias que hay entre las dos mitades. Un estudio que reporta Reuters dice que el 57% de los alemanes que viven en el Este se sienten «ciudadanos de segunda» y sólo el 38% cree que la reunificación ha sido «un éxito».

Para saber más

La lista de los estadios también resume esa desigualdad. Diez ciudades son sede del torneo y sólo una, Leipzig, está en el Este. Berlín acoge la final, pero en el Estadio Olímpico, situado en la antigua zona Oeste. No es que la Federación o la UEFA no hayan querido elegir otra ciudad, es que ninguna más se presentó a pesar de que algunas, como Dresden, tienen estadios de más de 30.000 espectadores. ¿Qué sucede? «La superioridad del Oeste en las elites es evidente», criticó este año Thomas Kruger, último alcalde de Berlín Este.

La respuesta de las últimas elecciones

Quizás ese sentimiento de abandono es una de las razones del triunfo de la extrema derecha en el Este de Alemania en las últimas elecciones europeas. El partido AfD se llevó el 28% de los votos en las regiones más importantes del Este, mientras que en todo el país su éxito se quedó en el 15%. «La reunificación no ha sido perfecta. Muchos ciudadanos del Este se sienten tratados con condescendencia», ha explicado Carsten Schneider, del partido socialdemócrata, que admite, en una entrevista en DW, que hay «diferencias en salarios y en la sanidad». Los datos no mienten: según un análisis del Instituto Allensbach, el 71% de los habitantes del Oeste se sienten alemanes. En el Este, el 44%.

Ese 3 de 26 futbolistas y 1 de 10 estadios tiene su versión en la política y en el mundo profesional. Un estudio de la Universidad de Leipzig en 2020 concluyó que sólo uno de cada cinco altos cargos políticos está ocupado por alemanes del Este y que sólo un 1,7% de las posiciones de liderazgo en el ámbito militar, jurídico y empresarial pertenecen a personas de esa zona. «La división Este-Oeste sigue siendo palpable: es política, económica y también psicológica. En todo caso, el fútbol ha servido para ahondar en esta división, porque los clubes del Este, cargados de tradición, siguen luchando por recuperar su antigua gloria, mientras que el equipo que se cree representante del Este, el RB Leipzig, es considerado por muchos una anomalía artificial, y en muchos sentidos muy occidental», reflexiona el historiador y escritor Ulrich Hesse.

Los eventos de los 70 para abrirse al exterior

De nuevo, el fútbol para explicarlo todo. El Mundial de 2006 y esta Eurocopa son el mismo grito de unidad que lanzaron en 1974 y 1988, cuando Alemania Federal acogió los dos torneos. Añadan a eso los Juegos de Múnich en 1972. «Los eventos del 72 y el 74 parecían dar un paso hacia la normalidad y fueron un gran éxito diplomático», explica Hesse. «Unieron a la gente, pero en un sólo sentido, hacia el Oeste. Alemania Federal ganó el Mundial del 90 en mitad de la euforia de la reunificación y reforzó el sentimiento de unidad, pero era una falsa sensación porque la realidad resultó ser mucho más dura».

La realidad después del muro

Tras la caída del muro, 150 futbolistas, y otros miles de profesionales de otros sectores, dejaron la Oberliga del Este por la Bundesliga, que era la competición del Oeste, los equipos perdieron su poder económico y cayeron en divisiones inferiores. Y algunos clubes de ambos lados, como el Hertha (Oeste) y el Unión (Este) en Berlín, pasaron de llevarse bien por estar enfrentados al Dynamo (el equipo de la Stasi) a odiarse tras la unión por el constante prejuicio Este-Oeste.

«La razón por la que el país quería organizar el Mundial 2006era unir. No sólo gente de fuera, también a alemanes del Este y del Oeste», finaliza Hesse. 18 años después Alemania, que no gana el torneo desde el 96, se enfrenta a la misma sensación. El muro invisible.

Koeman: “Cruyff cerraba el Camp Nou, se iba a casa y era un hombre de familia. No existía el fútbol”

Actualizado Jueves, 13 junio 2024 - 19:55

Ronald Koeman (Zaandam, 1963) es un hombre relajado. Recibe a EL MUNDO en la concentración de Países Bajos camino de la Eurocopa. En suelo alemán ganó la Orange su único título en 1988. Con presión, pero «diferente» a la que sufría «todos los días» en Barcelona, el técnico recuerda a su «mentor y vecino» Cruyff y se reivindica: «¿El legado? Me seguirán recordando por el gol de Wembley».

Hace tres años, cuando dejó el Barcelona, dijo que era "una liberación", y aquí estamos ahora. Es seleccionador de Países Bajos. ¿Qué siente al volver?
Lo primero y más importante es la gran diferencia entre ser un entrenador de un club y un entrenador de una selección nacional. Es fútbol, es lo mismo, pero no es todos los días. En ese sentido es totalmente diferente, tienes más tiempo libre, puedes hacer otras cosas... No estás todos los días bajo presión, que es la diferencia entre Barcelona y mi trabajo de ahora. Cuando me fui del Barça no dije "nunca más voy a entrenar". Cuando dejé de ser seleccionador para entrenar al Barça era por una buena razón, y después de Qatar he tenido la oportunidad de volver. A mi edad, con mi experiencia, es el mejor trabajo que puedo tener.
¿Más presión o menos que en Barcelona?
Es la misma presión. Jugar una Eurocopa es una presión muy grande en Países Bajos, como lo es en Alemania o en España. Para todos. Pero son cuatro semanas y después de eso la presión será para los entrenadores de los clubes, no para nosotros, esa es la gran diferencia. Y luego, ¡todo el mundo viene feliz a la selección! (risas). Cuando entrenas a un club tienes que ponerles energía... Aquí no. Allí no juegan un fin de semana y se enfadan... Aquí todo el mundo es feliz y vienen con una sonrisa en la cara. La presión estará ahí, es normal, es fútbol, nuestra gente está a unas horas en coche, llenará las gradas...
El único título de Países Bajos llegó en Alemania, en 1988.
Hace mucho tiempo... Mira, somos un país pequeño. Alemania o España son más grandes, es difícil tener éxito. Perdimos en el Mundial del 74, del 78 y del 2010, nos quedamos en semis en 2014... Siempre seremos uno de los equipos que puede ganar a cualquiera y que puede llegar lejos. Siempre producimos buenos futbolistas que juegan en grandes clubes y si no tuviéramos problemas físicos seríamos todavía más fuertes.
Se enfrenta en el grupo a la Polonia de Lewandowski. ¿Qué le ha parecido su temporada?
Todos los jugadores tienen momentos complicados, creo que todavía es un gran jugador, un líder del vestuario, según me dicen en Barcelona. Tiene 35 años, mucha experiencia, es el capitán de la selección... Es un goleador. Cuando no juegas bien te critican fácilmente, pero sigue siendo importante para el Barça y su selección.
En 2022 usted dijo que tenía dudas a la hora de pagar 50 millones, contando el salario, por un jugador de 34 años.
No era tanto sobre Robert sino sobre la filosofía del Barça. Si yo hubiera sido el entrenador del Barcelona en ese momento, me hubiera encantado tener a Lewandowski como nueve, pero creo que es mucho dinero y que si tienes problemas económicos tienes que analizar bien qué tipo de jugadores fichas. Quizás sea mejor firmar a futbolistas con más futuro. En mi opinión, es raro conseguir tu mejor salario con 35 años cuando el mejor periodo de un futbolista es entre 26 y 32. Es raro que un club gaste dinero en jugadores veteranos si no tiene dinero.
Le quería preguntar por el 'Cruyffismo'. Lo vivió tanto en Barcelona como en Países Bajos. ¿Cómo lo definiría usted y cómo ha lidiado y lidia con la presión de ese estilo en el club y en la selección?
'Cruyffismo' es una manera de atacar. Pero atacar no quiere decir un tipo de sistema concreto. En mi etapa como jugador en el Barça, con Cruyff como entrenador, a veces jugabamos sin nueve, Laudrup estaba de delantero pero bajaba al medio, teníamos dos extremos, a veces el extremo era un centrocampista como Eusebio... Es la forma de atacar. Mira al Real Madrid, ellos no se ponen nerviosos si no tienen el balón porque tienen la habilidad de castigar a sus oponentes cuando pueden. En Países Bajos hablamos demasiado sobre sistemas, quizás jugar con 5 atrás es más ofensivo que jugar con 4. Mira el Leverkusen, con 5 atrás y juegan muy ofensivo. ¿Cuál es el sistema? Hay muchas formas de llegar a Roma. A veces vamos demasiado al pasado y el fútbol ha cambiado.
¿Qué significó Cruyff para usted?
Fue la persona más importante de mi carrera futbolística. Le tuve como entrenador en el Ajax, me compró para el Barcelona, fue mi entrenador, mi mentor, mi vecino... Tuvimos tiempo como familia, pasamos juntos cumpleaños de nuestros hijos... Fue muy importante dentro y fuera del campo.
¿Qué aprendió de él?
Que iba siempre muy al detalle del juego porque tenía esa experiencia como futbolista. La manera en la que quería jugar, la confianza en lo que hacía y cómo la traía al equipo... Y luego cerraba la puerta del Camp Nou, se iba a casa y era un hombre de familia. No había fútbol nunca más.
¿Cuáles son los jugadores clave en la selección holandesa?
En mi primera época tuvimos una gran etapa. Mucha gente no tenía expectativas e hicimos las cosas bien. Teníamos a Van Dijk y De Ligt atrás, De Jong en el medio, Wijnaldum, Depay... Era una columna vertebral fuerte. Pero por diferentes razones hemos perdido esa fuerza, las lesiones, los estados de forma... Pero aún así tenemos una gran plantilla, jugadores jóvenes como Simons. Mucho talento.
Llevamos dos o tres años hablando de De Jong y su posible venta. ¿Cree que esto ha podido afectar a su nivel?
No creo que eso le afecte. He hablado regularmente con él sobre muchas cosas y creo que es feliz en el Barcelona y no quiere salir. Las lesiones han afectado a su nivel en los últimos meses, eso desde luego, creo que no estaba al 100% para jugar contra PSG y Real Madrid en los últimos partidos de la temporada, pero necesita tiempo para estar a su máximo nivel.
¿Usted vendería a Frenkie De Jong?
No, en mi opinión no, pero no soy el entrenador del Barcelona ni su presidente. Creo que todos los equipos necesitan mantener a sus mejores jugadores.
Hablando del Barcelona, ¿cree que tuvieron más paciencia con Xavi que con usted?
Sí, ya lo he dicho. No recibí el mismo apoyo por parte del presidente que el que recibió Xavi. En ese momento me despidieron y creo que estábamos a nueve puntos del Madrid. Y ahora quedaron a diez. Para tener éxito tienes que tener el apoyo del presidente.
Usted es una leyenda del Barça y de la selección neerlandesa. ¿Cómo casa eso con sus resultados deportivos como técnico de los dos equipos? ¿Cree que puede afectar a su leyenda?
Cuando paseo por Barcelona noto el cariño de la gente, no es que ahora sea menos cariño porque no han salido bien las cosas. Me recuerdan y me recordarán como el hombre que marcó el gol de la primera Copa de Europa del club. Simplemente es que no recibí el apoyo del presidente.
Mentalmente, ¿entrenar al Barça ha sido lo más duro de su carrera?
Creo que sí, pero porque el Barça es mi club. Tuve una gran etapa como futbolista ahí, tengo amigos en la ciudad, entrenar al equipo era uno de los sueños de mi vida... Eso hace todo más difícil y estresante.
¿Aquí, en Países Bajos, siente la presión del legado?
Si ganamos, mejor. Y si perdemos me criticarán, así es la vida. Pero no matará mi legado, me recordarán como un buen futbolista, entrenador del Barça, jugué para los tres grandes del país... Nadie más. Ese es mi legado.
De centrocampista a centrocampista. ¿Le ha sorprendido la vuelta de Toni Kroos con Alemania?
No, porque creo que es difícil dejar de jugar para tu país. Es un grandísimo jugador y su entrenador estará muy feliz. Alemania es muy fuerte, creo que han tenido algunas críticas pero cuando jugaron en Francia, con Kroos, mostraron un nivel extraordinario. Estoy muy impresionado con Musiala, lo que hizo en la Champions, con 20 años... Son una de las favoritas. Musiala y Bellingham, con lo que han hecho en la Champions, son los dos jóvenes que lideran esta generación.
¿Qué diferencias observa entre esta generación y la de hace años?
El fútbol es más físico, pero el fútbol sigue necesitando jugadores con talento técnico y táctico. Jugadores que han sido buenos en el pasado y siguen siendo buenos ahora, que tienen un gran primer toque, buen pase, buena visión, inteligencia... Eso es bueno, porque sino seleccionaríamos a los que corrieran los 100 metros en seis segundos y ya está, y eso no es fútbol. Jugadores como Kroos son necesarios.

De las futuras estrellas Wirtz, Doku y Güler a los viejos ‘rockeros’ Pepe, Giroud y Walker

Actualizado Jueves, 13 junio 2024 - 16:56

Mientras Europa está pendiente de las grandes estrellas, aquí dejamos una lista de jóvenes promesas que llamarán la atención en el torneo y de futbolistas, ahora en segunda línea, que han marcado época en sus selecciones. En Alemania dirán adiós a esta competición y, quién sabe, si a vestir la camiseta de su equipo nacional.

LAS FUTURAS ESTRELLAS

  • WIRTZ (Alemania). Con 21 años ya es la estrella del Leverkusen de Xabi Alonso y el Madrid le quiere para 2025, así que nada mejor que una Euro para explotar del todo.
Florian Wirtz.

Florian Wirtz.A.P.

  • MAINOO (Inglaterra). Fue la gran sorpresa del Manchester United en el último tramo de la Premier. Será suplente, pero a sus 19 años parece la próxima gran estrella.
  • DOKU (Bélgica). A sus 22 años, está llamado a heredar el equipo de Hazard. Brilla en el City, pero aún no ha tenido un gran torneo con su país.
Jérémy Doku.

Jérémy Doku.AP

  • GÜLER (Turquía). La ilusión de una selección que apunta a gran sorpresa. La perla del Madrid tiene 19 años y quiere hacerse notar.
  • SIMONS (Países Bajos). Es una de las estrellas del Leipzig y Koeman le quiere como líder de su país. 21 años.

LOS VIEJOS 'ROCKEROS'

  • PEPE (Portugal). 41 años. Su misión es aportar experiencia a una selección muy joven. De Alemania se irá con el récord de ser el jugador de más edad en jugar una Euro, desbancando al húngaro Kiraly.
Pepe.

Pepe.AP

  • GIROUD (Francia). 37 años. Pilar de Deschamps en el Mundial de Rusia, el máximo goleador de la historia de la selección francesa con 57 goles, dejará de vestir la 'bleus' tras este campeonato.
  • WALKER (Inglaterra). 34 años. Es el más veterano de los 'Three Lions'. Ha jugado dos Eurocopas (2016 y 2020) y dos Mundiales (2018 y 2022), por lo que su ciclo internacional está llegando al final.

La presión de Francia e Inglaterra sobre Mbappé y Bellingham, las estrellas que dijeron “no” a París y a la Premier

Actualizado Jueves, 13 junio 2024 - 07:46

Los dos tienen un valor de mercado de 180 millones de euros, el más alto de toda la Eurocopa. Los dos vestirán el número 10 de su selección, el dorsal más icónico del fútbol. Los dos son la viga que soporta la presión de sus países, obligados a ganar un torneo en el que parten como claros favoritos. Los dos, por si fuera poco, jugarán a partir de agosto en el mismo equipo, el Real Madrid, actual campeón de Europa y centro mediático del balón. Kyl

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Ancelotti asegura que el Madrid no irá al Mundial de Clubes: "Varios clubes rechazarán la invitación"

Ancelotti asegura que el Madrid no irá al Mundial de Clubes: “Varios clubes rechazarán la invitación”

El entrenador del Real Madrid, Carlo Ancelotti, ha asegurado en una entrevista en un medio italiano que el club blanco no acudirá al Mundial de Clubes organizado por la FIFA que se celebrará entre junio y julio de 2025 en Estados Unidos. Y no será el único.

"La FIFA puede olvidarse de eso. Futbolistas y clubes no participarán en aquel torneo. Un solo partido del Madrid vale 20 millones y la FIFA quiere darnos esa cifra para todo el torneo: negativo. Igual que nosotros, varios clubes rechazarán la invitación", expresó el técnico italiano a una pregunta en 'Il Giornale'.

Desde el club blanco mantienen que las frases de Ancelotti son una advertencia a la FIFA para que dé pasos adelante en la organización del torneo, tanto a nivel logístico como económico. Un toque de atención. El mismo aviso que han lanzado las altas esferas del conjunto blanco a la organización de Infantino durante los últimos meses.

En Valdebebas todavía no conocen las sedes ni los millones que se llevarán por derechos de televisión y deslizan que "queda mucho por hacer" y esperan reunirse con la FIFA en próximas fechas para conocer más detalles. A pesar de las palabras de Ancelotti, confían en el "gran interés" de la FIFA en el torneo y en que terminarán ejecutando todo según lo previsto.

En el trasfondo del asunto se encuentra que la ECA, la Asociación de Clubes Europeos, es la responsable de la negociación con FIFA de los derechos televisivos y de los emolumentos que recibirán los participantes en el torneo. Un organismo en el que está Miguel Ángel Gil, CEO del Atlético de Madrid, pero no el Real Madrid. Según estiman en la ECA, el 75% del dinero a repartir en el Mundial de Clubes iría a parar a los suyos.

Desde el club rojiblanco, el otro equipo español clasificado para la competición, hablan de "respeto a las instituciones". Una postura que, recalcan, mantienen "desde siempre". Y aseguran que defenderán al club "desde dentro del sistema y no atacando al sistema". "Creemos que así podemos ser más eficaces en la defensa de nuestros intereses, así como más solidarios con todos los que forman parte de la gran familia del fútbol", explican a EL MUNDO.

"Seremos respetuosos con las decisiones que FIFA, UEFA, Federación y LaLiga puedan tomar con los calendarios, por supuesto defendiendo siempre nuestros intereses", añaden.

El torneo cuatrienal planteado por el máximo organismo del fútbol mundial se encuentra con las palabras del entrenador del máximo exponente actualmente a nivel de clubes, recién conquistada su decimoquinta Champions. A pesar de todo, en el Madrid confían en el "gran interés" que tiene la FIFA en el torneo y en que todo terminará ejecutándose correctamente.

Cambio de formato

El cambio del formato actual, que se realiza entre diciembre y enero, se iba a producir en 2025 tras el intento frustrado en 2021 por la irrupción de la pandemia. Para Gianni Infantino era necesario toda vez que apenas genera interés por la gran superioridad de los clubes europeos. Hablamos de apenas un ganador fuera del viejo continente en los últimos 12 años: el brasileño Corinthians.

El organismo anunció una dotación inicial de 50 millones a cada club por participar así como un incremento de esa cantidad según el rendimiento en la competición. Algo parecido a lo que ocurre en Champions League. A día de hoy hay 29 equipos clasificados para las 32 plazas que se reparten: 12 europeas, entre los que no está el Barcelona, seis de la Concacaf, cuatro sudamericanas, cuatro asiáticas, cuatro africanas, una de Oceanía y una estadounidense (por país anfitrión).

Esta pequeña rebelión madridista también es secundada por los jugadores representados por FIFpro y PFA. Ambos sindicatos anunciaron acciones legales si no se cambiaban las fechas del torneo. Toda vez que es el único verano que los futbolistas iban a poder disfrutar de vacaciones ya que no había ningún torneo de selecciones.

El Real Madrid anuncia el fichaje de Kylian Mbappé

El Real Madrid anuncia el fichaje de Kylian Mbappé

"Comunicado oficial: Kylian Mbappé". Las cuatro palabras más deseadas por el madridismo en los últimos siete años se han hecho realidad. El Real Madrid ha anunciado hoy el fichaje de Kylian Mbappé para las próximas cinco temporadas. A sus 25 años, que serán 26 en diciembre, llega libre después de no renovar su contrato con el PSG y tras varios intentos fallidos del conjunto blanco por lograr su firma en los últimos veranos.

El francés se une a una plantilla extraordinaria, que acaba de perder a Toni Kroos pero que ha visto evolucionar estos años a Vinicius, Bellingham, Rodrygo, Valverde, Camavinga o Tchouaméni y que mantiene a veteranos como Courtois, Carvajal, Rüdiger y Modric para liderar el vestuario. La guinda para el equipo de ensueño diseñado por Florentino Pérez.

Su esperado fichaje por el Real Madrid constituye, para Mbappé, "un sueño hecho realídad". Así lo ha descrito en un mensaje emitido desde sus perfiles en redes sociales minutos después del anuncio difundido por el club. El delantero orgulloso asegura que está "feliz y orgulloso".

"Emocionado" e "impaciente por veros" son otros de los sentimientos que expresa Kylian Mbappé en ese mensaje, compartido en inglés, francés y castellano, y que concluye con un simbólico "¡Hala Madrid!".

La bienvenida del Real Madrid a su fichaje estelar más reciente se completa con un vídeo de casi cuatro minutos. Comienza con una frase -"¿Estás mirando atentamente?" y encadena a continuación los goles más destacados de las estrella francesa.

Mbappé ha anotado 166 tantos en las últimas cuatro temporadas, a más de 40 por año. 256 en 308 partidos desde que es jugador del PSG. Es un anotador insaciable, un regateador eléctrico y huracán al espacio. Puro Real Madrid. Por virtudes, se trata del mejor jugador del mundo, aunque lo tiene que demostrar a nivel de clubes una vez ha decidido abandonar París. Aterriza en el terreno de Vinicius, elevado a la pelea del Balón de Oro.

De Mbappé es el Mundial de 2018, donde se destapó, y el subcampeonato de la Copa del Mundo de Qatar, perdida ante Argentina en los penaltis dejando un hat-trick para la historia. Tercero en el último Balón de Oro por detrás de Messi y Haaland, aspira a ganar varios en Chamartín.

El silencio del vestuario

El fichaje de Mbappé ha sido un tema tabú para el vestuario del Madrid durante el último mes. Nadie podía decir una palabra más alta que la otra sobre el galo porque estaba prohibido distraer la atención de la final de la Champions contra el Dortmund. Por eso desde el club la respuesta siempre era la misma: todo se sabrá a partir del 1 de junio. El protagonismo era para los futbolistas que iban a jugar en Wembley. Para nadie más.

Una vez superada esa fecha, vía libre, con el inicio de la Eurocopa como límite lógico para realizar cualquier anuncio. El delantero termina contrato con el PSG el próximo 30 de junio, así que todavía es futbolista del cuadro del Parque de los Príncipes, pero las conversaciones entre el entorno del jugador y el club del Sena han servido para permitir anunciar el fichaje antes del torneo. De esta manera, Francia afrontará su reválida continental con cuatro futbolistas del Madrid: Mendy, Tchouaméni, Camavinga y Mbappé.

Anunció que se iba y esperó

El propio Mbappé se ha mantenido también fiel a los deseos del Madrid. Tras anunciar su salida del PSG el pasado 10 de mayo, ha hablado de su alegría por sus "próximos objetivos", pero nunca ha mencionado al Madrid, consciente de que eso podría molestar a un vestuario que estaba concentrado en ganar la Champions. Su silencio, de hecho, ha gustado dentro de Valdebebas y se ha tomado como una primera toma de contacto muy positiva. Y hasta algunas estrellas del equipo, como Vinicius y Camavinga, han tenido conversaciones constantes con el delantero. El ambiente en la plantilla es excepcional y nadie quiere romperlo.

Lo que el fichaje tampoco romperá es la escala salarial del grupo. Si en 2021 y 2022 el Madrid planeaba tirar la casa por la ventana por Mbappé, ahora la situación es diferente. Este grupo ha ganado dos Champions en tres años, un detalle que no escapa a la plantilla, al club y al propio Mbappé, que sabe que llega con la necesidad de demostrar muchas cosas. Será el mejor pagado de la plantilla, pero su sueldo no será excesivamente superior al de Vinicius y Bellingham, candidatos al Balón de Oro, grandes estrellas del Madrid y salarios más altos del vestuario junto a Alaba. Mbappé no superará los 20 millones netos por curso.

La prima de fichaje, además, también será inferior a la que la directiva le ofrecía en años anteriores, que se situaba por encima de los 100 millones. Ahora serán menos, pero el futbolista considera que es el momento de dar el paso definitivo.

Este lunes, celebradas la Liga y la Champions en Cibeles y con los jugadores tomándose unos días de descanso antes de la Eurocopa y la Copa América, era el momento perfecto para anunciar el fichaje. La presentación en el Bernabéu, eso sí, tendrá que esperar a después del torneo continental. Entre los compromisos del propio estadio, que celebrará varios conciertos esta semana, y los partidos amistosos de Mbappé con Francia, no hay tiempo. Será a mediados de julio, tras la Euro y antes de que el futbolista se vaya de vacaciones. Después, se sumará a la pretemporada del Madrid (llegará a la gira si Francia cae antes de semifinales) y no irá a los Juegos Olímpicos con su país a pesar de las presiones de Macron.

El fichaje de la estrella de Bondy por el Madrid ha sido eterno. En 2017, el Madrid llegó a un principio de acuerdo con el Mónaco para firmarle por 180 millones, pero el jugador decidió fichar por el PSG para triunfar en Francia antes de saltar a España. En el verano de2021 el Madrid puso 200 millones sobre la mesa, pero el PSG rechazó la oferta. Parecía que tenían el 'sí' del jugador en 2022, cuando era libre para negociar, pero a última hora, un poco antes de la Decimocuarta Champions del Madrid ganada en París, dijo que seguía en su ciudad.

Varios 'no' que calentaron al madridismo, pero que siempre encontraron el punto tranquilo de Florentino. El futbolista insistía en su sueño de jugar en el Madrid y siete años después del primer intento, lo cumplirá.

Mbappé es del Madrid, siete años de promesas, traiciones, dinero y gloria: "El Real me esperará"

Mbappé es del Madrid, siete años de promesas, traiciones, dinero y gloria: “El Real me esperará”

Kylian Mbappé (París, 1998) ya es jugador del Real Madrid. Un final de época a una historia de película. Una novela de siete temporadas con traiciones, promesas, indirectas, enfados, disculpas, dinero y gloria. Todos los ingredientes del caos. Esta es la historia de Mbappé y del Madrid, con el futbolista y su madre (y representante) Fayza Lamari en el centro de la diana, con Florentino Pérez y José Ángel Sánchez a un lado y con Nasser Al-Khelaifi

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Mbappé, dos renovaciones y dos dudas hacia la Decimosexta: "Sin Kroos jugaremos distinto"

Mbappé, dos renovaciones y dos dudas hacia la Decimosexta: “Sin Kroos jugaremos distinto”

El sábado por la noche, en los pasillos del Estadio de Wembley se repitieron sin parar dos palabras: «Decimoquinta» y «decimosexta». Con dos variantes: «Quince» y «dieciséis», más fáciles de aprender y de pronunciar para aquellos futbolistas y miembros del cuerpo técnico que no dominan al 100% el español. Fuera la que fuera, la idea estaba clara. Celebrar la nueva Copa de Europa y observar en el horizonte el siguiente objetivo. Así de sencilla es la forma de ser del Real Madrid. Y para esa decimosexta hay una pieza que el Bernabéu espera desde hace seis años: Kylian Mbappé, primera piedra de la nueva reconstrucción del conjunto blanco tras la anunciada salida de Kroos.

«Me siento como si tuviera una Champions más que ayer», admitía Florentino Pérez en la zona mixta londinense. Tranquilo, relajado y algo irónico -«no quiero hacer ruido, pero creo que hemos hecho una buena temporada»-, el presidente del Real Madrid se atrevía a anunciar varias noticias: «Con Nacho haremos lo que él quiera y Luka Modric seguro que seguirá un año con nosotros».

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Modric, Lucas, Nacho, Joselu...

Y es que estos días previos al inicio de la Eurocopa, que comenzará el viernes 14 de junio, la directiva del conjunto blanco debe hacer frente a las conversaciones para renovar o no los contratos que terminan el 30 de junio. Anunciada ya la retidada de Kroos, los futbolistas que tienen esa charla pendiente son Modric, Lucas Vázquez y Nacho. El croata y el gallego continuarán, si nada se tuerce en los últimos papeles. «Tiene pinta de que voy a seguir», dijo el lateral en los pasillos de Wembley.

El caso del capitán es diferente. Después de más de una década en el primer equipo, Nacho se ve más fuera que dentro. «Haremos lo que él quiera», aseguró Florentino después de la final. «De verdad que no quiero hablar ahora de eso. Tengo que hablar con el club y con mi familia», admitió el central, visiblemente emocionado en cada declaración. «Tengo decidido qué voy a hacer, pero no es el momento», explicó en el media day. Unos mensajes que suenan a despedida.

Los otros dos que terminan contrato son Kepa y Joselu, que finalizan su cesión y deben volver al Chelsea y al Espanyol. El portero no tiene opción de regresar al Bernabéu, consciente de que con Courtois y Lunin el club tiene la portería cubierta, pero el delantero esperará noticia desde Chamartín, donde ven con buenos ojos ejecutar la opción de compra de 1,5 millones para quedarse con él. «No sé dónde estaré la próxima temporada», declaró el atacante.

Mbappé, esta semana

Pero el plato fuerte será, obviamente, el fichaje de Kylian Mbappé, cuyo anuncio oficial se espera esta misma semana. La presentación en el Bernabéu, eso sí, quedará para después de la Eurocopa. El galo se unirá a Vinicius en un ataque letal, con Bellingham, Rodrygo, Valverde, Camavinga, Tchouaméni y Modric rotando en las cuatro posiciones restantes del ataque. «Jugar con Mbappé sería increíble», se animó Bellingham.

«Perdemos a un jugador muy importante para nosotros, pero le sustituiremos de diferente manera. Ya pensaremos cómo. Si no tenemos a Kroos, jugaremos de forma distinta», admitió Ancelotti en Wembley, con la presión de la 16º ya sobre sus hombros: «Es así. Todos esperan que ganemos la novena final de Champions seguida». Le toca a Mbappé.

Los dos gritos del "cabrón" Courtois, héroe 296 días después: "Nunca había escuchado un grito así"

Los dos gritos del “cabrón” Courtois, héroe 296 días después: “Nunca había escuchado un grito así”

Según la RAE, la palabra «grito» tiene tres definiciones principales: «Voz muy esforzada y levantada», «expresión que se profiere levantando mucho la voz» y «manifestación vehemente de un sentimiento». En esta última encontramos la temporada de Thibaut Courtois, dos gritos diferentes para el principio y el final de un curso que nunca olvidará. Dos manifestaciones gigantes de sus sentimientos. El primero en Valdebebas, cuando su rodilla hizo crac; el último en Wembley, coronado de nuevo como muro de Europa y campeón de la Champions League.

10 de agosto de 2023. Durante un partido de entrenamiento, Nico Paz dispara a puerta, a la altura de la cabeza de Courtois, y el belga, con reflejos, despeja el balón pero no lo atrapa. La pelota queda suelta y tanto el portero como Rodrygo van a por ella. Llega antes el brasileño, así que el gigante de Bree se para en seco, clavando su pierna izquierda en el césped. Crac. Rotura del ligamento cruzado anterior de su rodilla izquierda.

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«Nunca había escuchado un grito así en un entrenamiento», dijo Alaba semanas más tarde. El grito silenció Valdebebas. Un grito de desesperación, de desgarro emocional. El primero en acudir a ayudar a Courtois fue Rüdiger, que levantó los brazos sin saber muy bien qué hacer y sólo pudo poner las manos sobre la espalda del belga mientras éste no paraba de llorar desconsolado. Fue su Día Cero.

La colchoneta de esa sala de Valdebebas...

Anoche, 1 de junio de 2024, en Wembley, fue su Día 296. Nueve meses y 20 días después de aquel grito de dolor y tristeza, Courtois elevó la Copa de Europa al cielo de Londres y le devolvió a su destino un grito de felicidad y rabia. En la grada, su familia, su mujer Mishel Gerzig, sus hijos y su bebé Ellie, nacida el 30 de marzo de este año con el trono continental bajo el brazo. La pareja anunció el embarazo en mitad de la rehabilitación de la lesión del belga y supuso «un punto de inflexión y de motivación extra», según explican en el club.

Valdebebas fue su segunda casa, o incluso su primera, durante la rehabilitación. Y en concreto, la sala de recuperación de lesiones de larga duración. Ahí, sentado en una colchoneta gigante, con la rodilla izquierda todavía cubierta por una aparatosa rodillera articulada, realizó sus primeras paradas tras la lesión. A su lado, Davide Violati, fisio del conjunto blanco que no se separó de él durante todo el proceso, y Luis Llopis, entrenador de porteros que, con algo más de distancia, atendía a algunos ejercicios para ir descubriendo su mejoría.

El Bernabéu festeja la decimoquinta

Las primeras paradas fueron con balones oficiales, para no perder el tacto. Y luego los ejercicios variaron a pelotas de tenis, pero siempre sentado. Con el balón grande 'volaba' hacia un lado en la colchoneta, y las pequeñas simplemente las rechazaba hacia un lado. Ejercicios simples para mantener la forma y los reflejos.

Realidad virtual y "calma mental"

Cuando ya pudo estar de pie sin dolor ni instrumentos extra, Courtois probó una aplicación que mediante unas gafas y dos mandos, uno en cada mano, sirve para potenciar los reflejos y el tiempo de reacción en la portería. Como si fuera la vida real, como si no hubiera cruzado que recuperar. De ahí al césped, con ligeros ejercicios de salto y movilidad, poco a poco y con «calma mental y física», algo en lo que el Madrid insistió durante todo el proceso. No era «necesario» volver este curso e incluso el propio Courtois rechazó acudir a la Euro con Bélgica para centrarse en su recuperación. No quería presiones. El 19 de marzo se rompió el menisco de la rodilla derecha y el tiempo se volvió a detener para él, aunque menos. Ocho semanas.

El día que supo que había vuelto

Acortó plazos y contra el Cádiz, el 4 de mayo, ya fue titular, dejando en el ambiente la sensación de que podría ser titular en Wembley. El 14, ante el Alavés, realizó diez paradas. «Soy el mismo, incluso mejor», declaró esa noche, poniendo su nombre en la alineación del Madrid en la final. Ancelotti ya tenía claro que no le iba a sentar en el banquillo de Londres. Es su segunda Liga de Campeones. Perdió en Lisboa como rojiblanco y después admitió cambiarse al «lado bueno de la historia» para ponerse la capa de héroe en el Madrid. En la final de París contra el Liverpool fue el «cabrón» que evitó que los reds se llevaran el título y así le definió, como elogio y no como insulto, Klopp: «El cabrón de Courtois parecía que tenía doce manos». El belga firmó una actuación histórica. Ningún portero había realizado nueve paradas en una final.

Ahora verá desde la televisión la participación de Bélgica en la Eurocopa. Sería su sexta presencia en un gran torneo con su país, pero su relación con Tedesco, el entrenador, no ayuda y la puesta a punto para la próxima temporada madridista pesa más, mucho más. Después de la polémica con el seleccionador en junio de 2023, cuando Courtois dejó la concentración por lesión y el técnico le acusó de egoísta, su feeling está roto. Pero es campeón de Europa otra vez, qué más da.