Ancelotti, de la lesión de Alaba a la denuncia del Madrid contra los árbitros: "Si no dan explicaciones, hay un problema..."

Ancelotti, de la lesión de Alaba a la denuncia del Madrid contra los árbitros: “Si no dan explicaciones, hay un problema…”

A Carlo Ancelotti no se le va el dolor de cabeza. El técnico italiano se levantó en la mañana del martes con una nueva mala noticia: David Alaba, que veía la luz al final del túnel de su larga rehabilitación tras la lesión del ligamento cruzado de su pierna izquierda, ha vuelto a caer lesionado. El central austriaco sufre una lesión en el aductor de su pierna izquierda, esa misma en la que tuvo el grave percance, y estará de baja entre dos y tres semanas.

Se trata de un problema de máxima urgencia para Ancelotti y para el Madrid, que ahora mismo sólo dispone de un único central sano entre los habituales: Raúl Asencio. También aparece en el mapa Tchouaméni, reconvertido a la defensa y transformado ya en central de pleno derecho tras la lesión de Militao, y Jacobo Ramón, zaguero del Castilla que debutó hace unos días en Liga.

Alaba, como Rüdiger, se perderá el duelo de Copa contra el Leganés, el derbi liguero contra el Atlético y, salvo milagro, ambos partidos de la eliminatoria del playoff de Champions League contra el Manchester City. El alemán también tiene una lesión muscular y estará de baja entre dos y tres semanas.

Ancelotti valora ahora qué hacer. En la segunda parte del duelo contra el Espanyol jugaron juntos Tchouaméni y Asencio, y así parece que será, salvo nueva lesión, en los próximos compromisos. Las dudas con el galo crecen en cada partido, pero el técnico está convencido con él y las alternativas no le convencen. Ferland Mendy podría ser una opción, pero para el italiano Tchouaméni y Asencio son ahora mismo los titulares.

Eso sí, Tchouaméni llegará a la ida contra el City apercibido de sanción. Si ve una amarilla, la situación será todavía más extrema para el Madrid.

En el entrenamiento de este martes tampoco entrenaron Vinicius y Bellingham, a los que el cuerpo técnico dio descanso. El brasileño sí estará en Butarque, pero ni Bellingham ni Mbappé, todavía con molestias por varios golpes, disputarán el duelo.

Ya en rueda de prensa, Ancelotti reconoció el "momento de emergencia" que vive su equipo y admitió que "tenemos que aguantar". "Hemos perdido en dos días dos jugadores importantes. Alaba iba a jugar mañana, tenía buenas sensaciones, es algo que no podíamos contemplar. Tampoco la lesión de Rüdiger. Aguantaremos con lo que tenemos", manifestó.

Cuestionado por el comunicado del club contra los árbitros, el italiano insistió en que apoya lo expuesto por el Madrid, que "ha pasado algo inexplicable" y que "pedimos una explicación".

"Si no dan explicaciones, significa que hay un problema... Y cuando hay un problema, algo tiene que cambiar", comentó.

Ancelotti descartó que vaya a utilizar a Valverde como central y nombró varias veces a Jacobo Ramón, joven central del Castilla. "Los jóvenes tienen una gran oportunidad. El año pasado lo sacamos adelante y este año tenemos que hacer lo mismo".

Un invierno de racionamiento en el mercado de fichajes español: ¿Por qué LaLiga gasta menos que Qatar, Arabia o México?

Un invierno de racionamiento en el mercado de fichajes español: ¿Por qué LaLiga gasta menos que Qatar, Arabia o México?

Los clubes de LaLiga se han dejado apenas 13,13 millones de euros en fichajes en este mercado de invierno, forman la 16ª competición del mundo con mayor gasto y la llegada más cara ha sido la de Akor Adams, delantero nigeriano del Montpellier que ha firmado con el Sevilla a cambio de cinco millones. La Premier League, por su parte, lidera de nuevo el ranking invernal con 367 millones salidos del bolsillo de los equipos ingleses y con el Manchester City dejándose 150 millones entre el delantero Omar Marmoush (75) y los defensas Abdukodir Khusanov (40) y Vitor Reis (37), y eso sin contar con operaciones como la llegada de Asensio al Aston Villa pues es una cesión. Más de 300 millones de diferencia entre una liga y otra. Esos son los datos. Vayamos con las causas y las reflexiones.

Se trata de un mercado aburrido para el fútbol español, condicionado por la crisis económica de algunos de sus principales equipos, como el Barcelona, por las dudas y la pausa de otros, como el Madrid, que esperan al verano, por la comodidad del Atlético, donde Simeone tiene la plantilla que desea... Y por la poca capacidad adquisitiva de una clase media que en otras épocas saltaba la banca.

Ha habido cinco traspasos en este invierno en LaLiga. Nada más. El comentado de Akor Adams, el fichaje del extremo danés Jones El-Abdellaoui para el filial del Celta por 4,20 millones, la llegada del delantero Maroan Sannadi al Athletic (3 millones), la de Rubén Vargas al Sevilla (2,50) y la de Tamás Nikitscher (un millón) al Valladolid.

Más cesiones que traspasos

El resto han sido cesiones, con el Betis muy activo en este tipo de operación: ha conseguido el préstamo de Antony desde el Manchester United y ha dejado a Juanmi al Getafe y a Iker Losada al Celta. Bajcetic, del Liverpool a Las Palmas; Pablo Ramón, del Castilla al Espanyol; Sadiq, de la Real al Valencia o Juan Bernat, del PSG al Villarreal, son los grandes nombres de dichas cesiones.

Los aterrizajes caen a cuentagotas. Atlético, Barça, Real Madrid, Real Sociedad, Leganés, Mallorca, Osasuna y Rayo no han añadido a ningún futbolista.

Por delante de LaLiga en gasto aparecen todos los grandes campeonatos de Europa, liderados por la Premier (367 millones), la liga italiana (195), francesa (189) y la Bundesliga alemana (169), pero también torneos más exóticos como el Brasileirao (174), la liga saudí (166), la MLS de Estados Unidos (131), la liga argentina (109), la mexicana (67) y la de Qatar (21). Incluso la Liga de la República Checa (14).

Pocas salidas

Y no sólo es interesante el dato de gasto, también el de ingreso, porque éste explica a la perfección qué está pasando en el fútbol europeo y mundial. Los clubes de LaLiga, en otro tiempo vendedores, apenas han dejado salir a sus futbolistas a cambio de sumas económicas. Assane Diao, del Betis al Como por 12 millones, ha sido la venta más cara de las que ha tenido el invierno español, que ha juntado poco más de 20 millones entre todas sus ventas.

Mientras, el resto de ligas tienen saldos de más de 100 millones en gastos e ingresos. ¿Por qué? Fuentes de LaLiga admiten a EL MUNDO que el campeonato español es "el más eficiente" del planeta porque ha mantenido, cuentan, "el equilibrio financiero". Desde los despachos de los clubes se reconoce que ya se depende menos que antes de las ventas de los jugadores porque no hay tanta necesidad para ajustar las cuentas. Pero eso sí, tampoco existe la libertad económica que hay en otras ligas.

Ese, y no otro, es el gran punto de debate ahora mismo en el fútbol español. En cuatro años, el volumen de mercado por ventas de jugadores ha disminuido un 50% desde el máximo de la temporada 2019-2020: de 1.307 millones a los 655 del pasado curso. ¿Esto qué quiere decir? En España hay menos traspasos, menos salidas y menos entradas, pero mayor capacidad de retención de talento.

Una dura regulación

El problema, y la razón principal de las grandes diferencias, como en este mercado de invierno, está en las regulaciones de las ligas. La española se rige por un duro Control Económico y la presión fiscal de nuestro país, muy superior a la de los vecinos continentales, no ayuda a pelear en la batalla del mercado.

La Premier, por ejemplo, tiene un modelo "a pérdidas" que genera "una burbuja con precios irreales", como ha denunciado en numerosas ocasiones Javier Tebas, crítico también con el modelo francés (650 millones en pérdidas en las últimas tres temporadas) e italiano (800 millones de deuda). En las últimas asambleas de LaLiga, los clubes, especialmente los de la clase media, han pedido presionar a la UEFA para que regule mejor el Fair Play Financiero del continente, pero no parece tarea sencilla.

Mientras, el fútbol español trata de competir como puede. Ahí está el Madrid, último campeón de Europa, el Barça, segundo en la liguilla de la Champions, o el Atlético, miembro del 'Top 8'. Y ahí está el Athletic, segundo en la liguilla de la Europa League y favorito a ganar el título. Sin fichajes, pero con victorias.

El Madrid estalla contra el arbitraje de Cornellá: "Es inexplicable que no haya sacado tarjeta roja"

El Madrid estalla contra el arbitraje de Cornellá: “Es inexplicable que no haya sacado tarjeta roja”

El Real Madrid perdió ante el Espanyol su tercer encuentro de esta Liga y tanto el entrenador como el propio club estallaron contra el arbitraje tras el partido. "Derrota en Barcelona, con polémica arbitral y del VAR", tituló la web del conjunto blanco su crónica del duelo. Los blancos se quejan de que Carlos Romero, autor del único tanto de la noche, debió ser expulsado minutos antes de anotar por una fea entrada sobre Kylian Mbappé. "Es inexplicable", criticó Carlo Ancelotti en rueda de prensa.

"Es inexplicable la decisión que ha tomado el árbitro y el VAR en esa falta. Todo el mundo lo ha visto. Lo más importante es proteger al jugador y es una falta clara, una entrada muy fea, de riesgo. Afortunadamente no ha pasado nada... El VAR está para esto. A nosotros nos parece inexplicable que no haya sacado la tarjeta roja", desarrolló el técnico italiano, visiblemente enfadado, ante los medios.

Según se puede apreciar en las diferentes repeticiones de la televisión, Romero alcanza con la plancha de su bota el gemelo de Mbappé, que iba en carrera hacia la portería rival. Muñiz Ruiz dio la ley de la ventaja porque el balón terminó en Vinicius, y cuando la jugada se detuvo castigó con amarilla la acción del lateral del Espanyol.

En el banquillo, mientras, Ancelotti se quejaba al cuarto árbitro y pedía la entrada del VAR, pero el duelo continuó. "No quiero hablar del tema", dijo después el técnico, preguntado sobre una posible guerra entre el Madrid y el Comité Técnico de Árbitros. "Yo me refiero a lo que ha pasado hoy en el partido, me ha parecido inexplicable, lo ha visto todo el mundo".

En la web del Madrid, se describe el partido como "un encuentro marcado por la actuación del árbitro Muñiz Ruiz y de Iglesias Villanueva en el VAR". "Ni uno ni otro sancionaron con tarjeta roja una entrada por detrás de Carlos Romero a la rodilla izquierda de Mbappé. El árbitro Muñiz Ruiz mostró tarjeta amarilla e Iglesias Villanueva, que estaba en el VAR, no le llamó para que revisara la acción, que debió castigarse con tarjeta roja. Era el minuto 62 y en el 85' un gol del citado Carlos Romero dio los tres puntos al conjunto local", explican, sobre la polémica de la segunda parte.

Antes, el Madrid también protestó el gol anulado a Vinicius por falta de Mbappé sobre Pol Lozano. "Lozano tenía agarrado por el cuello al delantero madridista al entrar en el área", critica el conjunto blanco en su web.

Al otro lado de los banquillos, Manolo González reconoció la dureza de la entrada, pero no le pareció roja. "Es una entrada dura, pero es de amarilla. Si lo veis, realmente ni lo toca. Si lo engancha, quizá sí sería roja", explicó el técnico del Espanyol en los micrófonos de DAZN.

Ya en zona mixta, ningún jugador del Madrid quiso hacer declaraciones. Y Mbappé, protagonista de la acción, sólo hizo un gesto cuando se le preguntó por la entrada: se llevó la mano a la boca para dar a entender que no iba a decir nada sobre el tema.

Preocupación por Rüdiger

Más allá de la derrota, la noche de Cornellá dejó otra noticia mala para el Madrid: la lesión de Antonio Rüdiger. El central alemán, que es el futbolista más utilizado por Ancelotti durante esta temporada, se retiró en el minuto 13 del duelo por unas molestias en el isquio de la pierna derecha. Ancelotti confirmó en rueda de prensa que esperarán a este domingo para valorar con los médicos el alcance de sus problemas. "Es una lesión muscular, ahora a valorar".

La baja del alemán podría ser dramática para el conjunto blanco, que en siete días recibe al Atlético de Madrid en Liga y en 10 viaja a Manchester para disputar contra el City la ida del playoff de la Champions League.

El Madrid se apaga en Cornellá y abre de nuevo la lucha por la Liga

El Madrid se apaga en Cornellá y abre de nuevo la lucha por la Liga

Al Madrid se le hizo de noche en Cornellá. Por las horas y por las sensaciones. El conjunto blanco cayó derrotado ante un heroico Espanyol, infatigable en el esfuerzo y extenuante en su única arrancada hacia el gol inesperado de Carlos Romero. Los blancos, de menos a más, se estrellaron una y otra vez contra Joan García y pecaron, erráticos al final, de una primera parte muy espesa. [Narración y estadísticas (1-0)]

En la agonía del calendario, el cuadro de Carlo Ancelotti encontró en Cornellá una pausa en su camino. Acelerado en enero por las cinco victorias consecutivas después del drama en el clásico de Arabia Saudí, dio un pequeño paso atrás ante el Espanyol.

Celebrando el regreso liguero de Vinicius, el técnico italiano juntó de nuevo a su cuarteto de estrellas en ataque. Pero Bellingham, Rodrygo y Mbappé, a más durante las últimas semanas, estuvieron tibios en Barcelona. Unidos los cuatro en la delantera, el equipo volvió a sufrir en su sala de máquinas, dominada por Valverde y Ceballos, pero sin ideas en tres cuartos de campo, chocando continuamente contra el doble muro construido por Manolo González.

Rüdiger, lesionado

Los blancos buscaron demasiado el juego entre líneas, deseando más la virtud del talento individual que la creación de una jugada colectiva para superar la defensa rival. Y apenas tiró a puerta. Su único disparo entre los tres palos durante el primer tiempo lo realizó Bellingham en el minuto 38. Un dato que explica la noche madridista.

Antes, Vinicius batió a Joan García con un buen disparo al lado izquierdo del meta, pero Muñiz Ruiz anuló el tanto por falta de Mbappé sobre Lozano. El galo, a un par de metros del brasileño, forcejeó con el blanquiazul y terminó soltando el brazo ante su rival. Sin dudas para el colegiado.

Sin goles, la noticia dramática para el Madrid fue la lesión de Rüdiger, una situación que se prometía desde hacía semanas teniendo en cuenta la excesiva acumulación de minutos del central. A sus 31 años, es el futbolista más usado por Ancelotti y sólo había descansado en Copa del Rey. En el minuto 13 no pudo más, se echó la mano a la parte posterior del muslo derecho y pidió el cambio. Alarma absoluta en el cuerpo técnico a sólo 10 días de la ida contra el Manchester City.

Mbappé dispara anet Joan García, el sábado en Cornellá.

Mbappé dispara anet Joan García, el sábado en Cornellá.AFP

En su lugar saltó Asencio, y no Alaba, para formar pareja con un Tchouaméni que repitió como central y que dejó las mismas sensaciones extrañas de otros días. En un Madrid que domina pero que también pierde muchos balones en área rival, el galo es quizás demasiado lento para jugar a campo abierto, sufre ante los delanteros. Por contra, Asencio brilla en esas situaciones. Veremos qué elige Ancelotti para Manchester.

Tras el descanso, el Madrid hundió todavía más al Espanyol sobre su portería y acarició el área en más ocasiones. A los locales les empezaron a faltar las piernas y el oxígeno, tanto en defensa como en los tímidos intentos de contraatacar, pero consiguieron mantenerse vivos hasta el tramo final. Ancelotti inclinó su ataque sobre el lado derecho, dando protagonismo al buen momento de Rodrygo. El brasileño, una vez más, fue el mejor de los blancos. Volvió loco a Romero, zigzagueó en diferentes ocasiones y fue la única chispa que notó el Madrid en el segundo tiempo.

Romero, al filo de la roja

Desde ese lado derecho llegaron las mejores oportunidades de los blancos, aunque siempre se encontraron con Joan García. Bellingham, con la zurda desde el pico derecho, hizo esforzarse al portero, que salvó también el disparo de Mbappé tras el rechace. Atrás, Tchouaméni seguía sufriendo. Erró varios cruces a campo abierto y casi le da algún susto a sus compañeros y algún regalo a sus rivales, pero tampoco estuvieron acertados.

En los últimos 20 minutos, el Madrid acumuló toda su energía y todas sus ganas posibles ante la portería de Joan García. Pidió la expulsión de Romero por una entrada a Mbappé y lo intentaron de nuevo Bellingham, Rodrygo y el francés, también Vinicius, más centrado en el asedio final. Pero de nuevo, el guardameta voló.

Y como el fútbol es así, en el único gramo de fuerza que les quedaba, con el último aliento de oxígeno de sus pulmones, el Espanyol se inventó un gol que les eleva por el momento, lejos del descenso. Los catalanes arrancaron una contra tras una falta lateral de Modric, los de Ancelotti se durmieron en la transición, El Hilali llegó a línea de fondo y su centro lo remató de primeras Carlos Romero para enloquecer Cornellá.

Y ahora, derbi madrileño con un punto de distancia.

Claudia Fernández, la nueva estrella española del pádel: "Un chico que sólo juega previa o dieciseisavos puede cobrar más que yo"

Claudia Fernández, la nueva estrella española del pádel: “Un chico que sólo juega previa o dieciseisavos puede cobrar más que yo”

Claudia Fernández (Madrid, 2006) cumplirá 19 años a finales de mes y ya es la número 3 del ranking mundial de pádel. Una estrella que lleva poco más de una temporada en la elite y que ya aspira a ganarlo absolutamente todo. Estos días está disputando en su ciudad la Hexagon Cup, el torneo por equipos con propietarios famosos que se celebra en el Madrid Arena, y atiende a EL MUNDO justo antes de jugar, todavía analizando lo que le ha cambiado la vida.

«Me ha cambiado muchísimo y en muy poco tiempo. Ha sido increíble. He vivido experiencias que jamás imaginaría», reflexiona, con un discurso más avanzado de lo que pone en su DNI y admitiendo que a nivel mental el circuito del pádel, con tantos torneos por todo el mundo, se le hizo un poco duro. «Es complicado. El año pasado tuve que llevarme a mi madre a los viajes porque pasábamos mucho tiempo solos y mentalmente se hace muy duro. Creo que eso me hizo rendir mejor, me ayudó a estar más tranquila sabiendo que tenía al lado a alguien de confianza», desarrolla.

Para saber más

La temporada pasada jugaba con la veterana Gemma Triay, con la que venció en varios torneos, y este año Fernández hará pareja con Bea González, otra de las estrellas de este deporte. Un cambio de pareja que es normal en el pádel, donde se cambia de compañero cada dos por tres. «En un año pueden cambiar hasta cuatro veces y es bastante normal. Se hace con respeto, pero es nuestro trabajo, no vas a hacer amigos. Si te llevas bien, mejor, pero vienes a trabajar y de aquí sale tu dinero», asegura.

Diferencias entre hombres y mujeres

En el mundo del pádel, como en la mayoría de deportes, las mujeres siguen reclamando una igualdad en los premios y en los patrocinios que todavía no llega del todo. En el caso del pádel, Premier ha decidido dar el mismo bote en los torneos masculinos y femeninos, pero la gran diferencia sigue estando en las marcas, que ven mayor oportunidad de visibilidad en los hombres, algo «normal» para Fernández. «Al final los chicos tienen un juego más espectacular. Es una lástima, porque nos esforzamos igual y gastamos lo mismo, pero ellos tienen un juego y nosotros otro y a la gente parece que le gusta más el nivel de los chicos. Creo que nosotras somos más técnicas, que nuestros partidos son más bonitos, por decirlo así, y el suyo más espectacular. Es muy diferente».

Más allá del gusto de los espectadores, la clave está en las marcas que patrocinan a los deportistas: «Creo que sólo hay dos torneos en los que ellos cobran más que nosotras y estamos contentas. La gran diferencia son los patrocinadores, es una diferencia brutal. A lo mejor un chico que solo juega previa o dieciseisavos puede cobrar más que yo», reconoce Fernández, que la temporada pasada ganó seis títulos, entre ellos el Major de México, junto a Gemma Triay.

Las diferencias económicas se notan todavía más en los viajes. La evolución del pádel y la expansión del circuito, con torneos en Europa, Asia y América, ha obligado a muchos deportistas que no están en el Top 10 a apretarse el cinturón. Fernández, desde el número 3 del ranking, vive ahora más desahogada con ese tema gracias a sus acuerdos con Alpine y Bullpadel, pero lo ha sufrido.

«Los torneos cubren casi todo. El hotel, el transporte del aeropuerto al hotel, la comida... Pero no cubren el avión o tren hasta el torneo, sea donde sea», razona, y reconoce que «es un sacrificio». «Yo llevo jugando desde los ocho años y hasta los 16 me han tenido que pagar todo mis padres. Si no estás muy arriba, diría que poder dedicarte al pádel es difícil. No sé si cunde tanto ser profesional. Los premios han subido, sí, pero antes se viajaba mucho por España, era más barato que viajar a Sudamérica. Yo me puedo dedicar sólo a esto, pero hay gente que no puede».

Del delirio del Bernabéu y el muro de Lunin al bombardeo del 4-0: las historias del Madrid-City, un clásico moderno en horas bajas

Del delirio del Bernabéu y el muro de Lunin al bombardeo del 4-0: las historias del Madrid-City, un clásico moderno en horas bajas

La cara de Pep Guardiola en la sala de prensa de Manchester lo decía todo. «Bueno, esto ya parece un derbi. Cuatro años seguidos contra el Madrid...», declaró el técnico de Santpedor con una sonrisa irónica. Su reacción al sorteo del playoff de la Champions League y al nuevo cruce entre británicos y españoles relataba el sentir de ambos equipos. «No nos gusta jugar contra el City», admitió Ancelotti, honesto, en Brest. Los dos entrenadores son conscientes de que la eliminatoria llega en momentos incómodos para sus plantillas, lejos del nivel mostrado en las últimas ediciones continentales. Será un clásico moderno, pero en sus horas más bajas.

El Madrid aterrizará en Manchester después de un invierno extraño, en el que ganó la Intercontinental, recuperó el liderato en Liga y descubrió la mejor versión de Mbappé con la camiseta blanca, pero también un invierno en el que cayó con contundencia contra el Barça en Arabia Saudí. Una derrota que removió los cimientos del cuerpo técnico y del vestuario, que dolió más que cualquier otra y que, junto a su irregular actuación en la liguilla de la Champions, sembró muchas dudas sobre la capacidad de la plantilla en los partidos de máximo nivel.

El Madrid, que jugará la vuelta del playoff en el Bernabéu, perdió en casa contra el Milán (1-3), en Anfield Road ante el Liverpool (2-0) y en tierras francesas frente al Lille (1-0). Tres clubes que siguen vivos en la competición, dos de ellos, ingleses y galos, como parte del Top 8, y que mostraron las debilidades del Madrid en tres de sus peores noches de la temporada. Por eso el mensaje de Ancelotti ha sido tan directo en estos últimos días: «No queremos al City».

2022, 2023, 2024...

En Valdebebas saben que es su gran rival en la competición. El equipo que más les ha hecho sufrir a pesar de que consiguieron salir victoriosos contra ellos en las eliminatorias de 2022 y 2024, ambas con una tensión extrema. La primera con una remontada esquizofrénica en el tiempo de descuento de las semifinales, con aquellos dos goles de Rodrygo sobre la bocina para provocar la prórroga y el tanto de Benzema de penalti para decidir el duelo ante un Bernabéu en continuo delirio. Todo después del 3-2 del Etihad, con el panenka del francés y la cabalgada de Vinicius para salvar los muebles.

La segunda, en los cuartos de final del año pasado, con el divertido 3-3 de la ida en Chamartín y los penaltis de la vuelta en Manchester. El Madrid, en acto de supervivencia extrema, evitó el triunfo local y ganó desde los once metros a los hombros de un Lunin colosal. Otro triunfo agónico sobre Guardiola.

El entrenador catalán ha sonreído en dos ocasiones contra el Madrid. En los octavos de final de 2020, en los que su plantilla fue superior a un conjunto blanco en horas bajas, dirigido por Zidane y todavía echando de menos a Cristiano Ronaldo, y en las semifinales de 2023. Ahí Guardiola tocó techo. El City sometió al Madrid en un extraordinario 4-0 y terminó levantando la Champions contra el Inter. Fue una temporada histórica para el conjunto británico, que levantó la Premier, la Copa de Europa y la FA Cup.

El City, en su peor momento

En esta ocasión, Guardiola y el City aparecen en la trinchera contraria al Madrid en su peor momento desde que el entrenador aterrizara en Manchester. Algo de lo que no se fían en Valdebebas, asumiendo que el vestuario citizen tiene nombres de sobra para poner en apuros a los blancos, pero que es una realidad estadística. El City ha sufrido para meterse entre los 24 mejores de la liguilla continental y lo ha terminado haciendo venciendo únicamente al Slovan de Bratislava, al Sparta de Praga y al Brujas. Nueve puntos que, junto a los empates contra Inter y Feyenoord, les han dado los 11 puntos necesarios para pasar como 22º.

En la Premier la situación es todavía peor. El City, que ha mejorado en las últimas jornadas, es cuarto, empatado con el Newcastle, con uno más que el Chelsea, seis por debajo del Arsenal y lejos, muy lejos, del Liverpool. Los reds se han disparado a 12 puntos de los de Guardiola, incapaces de reducir distancias y conscientes de que pueden perder la liga local por primera vez desde 2020.

De hecho, esa intensa pelea por la Premier, igual que la pelea por LaLiga, será clave en el ritmo de City y Madrid en la eliminatoria. Los británicos llegaron como líderes de la competición nacional a sus cruces con el Madrid en 2022 y 2023, pero el año pasado hincaron la rodilla ante los de Ancelotti mientras recuperaban terreno al Arsenal en Inglaterra. Los blancos, sin embargo, vivieron con calma el cruce del curso pasado, ya con la Liga asegurada.

Sin Rodri ni Kroos, cerebros de su juego, Guardiola y Ancelotti dependen más que nunca del talento individual de sus estrellas y miran con recelo los problemas en la defensa. El City se acaba de gastar 40 millones en el central uzbeko Khusanov, mientras que el Madrid ha descartado refuerzos invernales y afrontará la eliminatoria con Lucas y Valverde. El nuevo clásico de la Copa de Europa llega en sus horas más bajas, pero con máxima tensión.

El Real Madrid se enfrentará al Manchester City en el playoff de la Champions League

El Real Madrid se enfrentará al Manchester City en el playoff de la Champions League

El Real Madrid se enfrentará al Manchester City en el playoff previo a los octavos de final de la Champions, según el sorteo que tuvo lugar este viernes en la sede de la UEFA de Nyon. Si supera la eliminatoria, el equipo blanco, que podía haberse medido al Celtic, su otro posible rival, sabrá posteriormente en el sorteo del 21 de febrero su rival en octavos, que pueden ser el Atlético de Madrid o el Bayer Leverkusen.

Esa ronda de playoff se celebrará entre el martes 11 y el miércoles 12 de febrero y la vuelta, en el Bernabéu, se disputará justo la semana siguiente, entre el martes 18 y el miércoles 19. Los horarios se conocerán durante esta tarde. Los partidos de ida de octavos de final se juegan el 4 y 5 de marzo y la vuelta será el 11 y 12 de marzo.

El Real Madrid llega a las eliminatorias después de una liga en la que estuvo irregular y sólo pudo acabar en undécima posición, a un punto del Top 8 que se clasificó directamente para octavos. En las tres últimas jornadas ante Brest, Salzburgo y Atalanta sumó tres victorias que le permitieron clasificarse sin apuros, pero anteriormente había caído ante Lille, Milan y Liverpool.

El sorteo también emparejó al PSG con el Brest en un duelo enteramente francés; al Benfica con el Mónaco; a la Juventus con el PSV; al Feyenoord con el Milan; al Atalanta con el Brujas y al Borussia Dortmund con el Sporting de Portugal.

"Tenemos los recursos para superar el playoff"

Antes del sorteo, Carlo Ancelotti salió a rueda de prensa en la previa del duelo liguero contra el Espanyol. Todavía sin saber si el Madrid jugaría ante el City o el Celtic, el italiano insistió en que "tenemos los recursos para superar el playoff". "En un mundo perfecto, no jugaríamos el playoff, pero fallamos y no pudimos entrar en el Top 8. Será una eliminatoria entretenida", explicó.

Sobre el calendario, que no se detendrá hasta el parón de selecciones de marzo, Ancelotti admitió que "no hay tiempo de preparación, es recuperación, vídeo y partido para los próximos 40 días. Nuestro trabajo es tener listo y preparado al equipo".

Arturo Coello, número 1 del pádel mundial: "La vida separa a las personas en dos caminos, los que salen de fiesta y los que nos dedicamos al deporte"

Arturo Coello, número 1 del pádel mundial: “La vida separa a las personas en dos caminos, los que salen de fiesta y los que nos dedicamos al deporte”

Arturo Coello es el techo del pádel mundial. Por su estatura, 190 centímetros que asustan a sus rivales, y por su posición en el ránking de la Federación Internacional de pádel. Este vallisoletano de 22 años comparte número uno del mundo con su pareja en la pista, el argentino Agustín Tapia. Ganaron 14 títulos la temporada pasada y parten en este inicio de curso como grandes favoritos al trono anual. La campaña arranca el próximo 8 de febrero en Arabia Saudí, pero antes, las grandes estrellas del pádel mundial se citan esta semana en el Madrid Arena para la Hexagon Cup, un torneo en el que compiten equipos presididos por famosos del mundo del deporte, que van eligiendo para sus plantillas a los mejores jugadores de pádel en busca de un premio que este año supera el millón de euros.

«Va a ser una semana bonita. Tendré a Agus enfrente y tenemos claro que es una competición por equipos, pero siempre nos lo pasamos bien», cuenta Coello en los pasillos del Madrid Arena.

El español representa al Team Bella, mientras que Tapia, su pareja en el circuito, forma parte del 'RL9', con Lewandowski como presidente. Junto a ellos estarán el equipo de la Rafa Nadal Academy, el equipo 'Advantage', propiedad del extenista Andy Murray y el boxeador Anthony Joshua; 'Krü Pádel', del Kun Agüero; 'Eleven Eleven', de Eva Longoria; y 'X10', del piloto de Fórmula 1 Pierre Gasly.

El torneo, que cuenta con el patrocinio de la escudería Alpine, entra en su segunda edición y ha ampliado los equipos mientras estudia dar entrada a más presidentes, dado el alto interés que despierta el pádel y el torneo. Coello tiene claro quién sería un gran fichaje: «Me gustaría ver aquí a Cristiano Ronaldo, además ya he jugado con él. Le estoy intentando convencer para que se meta en el mundo del pádel y el año que viene entre en el torneo con un equipo», admite el deportista.

"Hasta los 15 años esto era un hobby"

En una charla con EL MUNDO, Coello reflexiona sobre lo que le ha cambiado la vida en los últimos años, coincidiendo la explosión mediática del mundo del pádel con su llegada al circuito profesional. «El pádel ha evolucionado muchísimo, pero yo sigo siendo la misma persona y sigo haciendo la misma vida. Es verdad que me conocen más personas y la repercusión que tengo es distinta. Tengo que tener más cuidado con las cosas que hago porque obviamente soy más visible para los niños y es una responsabilidad bonita. Te hace tener más respeto por las cosas que te van pasando», explica el joven jugador.

Coello forma parte de esta nueva generación de estrellas del pádel que se instalaron en la elite en una época de bonanza económica, lejos de las penurias que pasaron otras leyendas como Fernando Belasteguín o Paquito Navarro. Eso le hace tener un discurso todavía más profesional. Creció entre palas hasta que con 15 años decidió que el pádel iba a ser su vida.

Mudanza a Miami

«Hasta los 15 años para mí era como un hobby, nada más. Pero a partir de esa edad decidí que no. Ahí la vida separa a las personas en dos caminos, los que empiezan a salir de fiesta y empiezan a estudiar y los que nos dedicamos al deporte. En mi caso tuve muy claro que lo mío iba a ser el deporte, dejé muchas cosas de lado que son duras de pasar, pero también estoy viviendo otras que el resto de personas no pueden vivir. Me despierto, hago deporte y tengo suerte de poder dedicarme a lo que me gusta», desarrolla.

A pesar de su juventud, ha notado de primera mano la evolución del pádel y ha terminado mudándose a Miami para tener ahí su centro de operaciones: «La exigencia por el número uno es altísima y cada detalle cuenta. Estamos muy centrados diariamente en esa exigencia. Vamos a Miami por tener unas instalaciones mejores que las que tenía en Madrid, pero mi equipo no cambia, tendré los mismos entrenadores y preparadores y veré a Agus en las semanas de torneo, como siempre».

La oportunidad única de Ceballos, "un obseso del fútbol": de la salida de Kroos a la necesidad de Ancelotti

La oportunidad única de Ceballos, “un obseso del fútbol”: de la salida de Kroos a la necesidad de Ancelotti

El público del Santiago Bernabéu despidió a Toni Kroos el pasado 25 de mayo. Disputó 87 minutos ante el Betis, ya con la Liga ganada y unos días antes de levantar la Champions, y se fue ovacionado. En su lugar, simple casualidad o como un mensaje del destino, saltó al césped Dani Ceballos, convertido ahora en nueva brújula de este Madrid que tanto ha sufrido sin el centrocampista alemán. Una brújula inesperada, porque el plan del conjunto blanco era otro. El fútbol, eso sí, tiene estas cosas, y hay pocos más obsesionados con el balón que el de Utrera.

A sus 28 años, que serán 29 en el mes de agosto, Ceballos cumple su octava temporada en la nómina del Madrid. Llegó en 2017,con 20 primaveras, procedente del Betis, y sólo se ha alejado de Chamartín para disputar dos cursos como cedido en el Arsenal. Y se puede decir que nunca ha estado tan bien como ahora. Acumula ya más de 1.000 minutos (1.072), una cifra que supera ya la alcanzada la pasada campaña, y lo que es más importante, se ha convertido en clave del sistema de juego de Carlo Ancelotti.

La ideal del club

La salida de Kroos fue entendida por la directiva del Madrid como el momento en el que Tchouaméni, Camavinga, Valverde y Bellingham debían asumir el centro del campo madridista, reflexión que todavía está presente en los despachos de Valdebebas. Pero de nuevo, el césped juzga las cosas de otra forma. Las lesiones han lastrado el puzle que habían construido las cabezas pensantes del club, primero las de la defensa, obligando a Ancelotti a contar con Tchouaméni en el centro de la zaga y con Valverde a ratos en el lateral derecho. Y después la de Camavinga, actualmente en la enfermería por un problema muscular.

Esa situación ha regalado a Ceballos la oportunidad de su vida. No sólo por los minutos, sino también por su rol. Hasta ahora, el andaluz había sido un complemento de emergencia en la sala de máquinas del Madrid, siempre a la sombra de Kroos y Modric. Alemán y croata eran la calma y el cerebro en un centro del campo de potencia, músculo y verticalidad. Pero ahora, con Kroos retirado y Modric observando el final, Ceballos ha dado un paso adelante.

Ha superado la lesión de tobillo que le alejó del grupo en septiembre y desde diciembre es titular indiscutible, ayudando a una racha del Madrid que sólo ha encontrado dos derrotas: la de San Mamés y la del Barça. Suya es la culpa de la última mejoría del conjunto blanco, concretada en cuatro victorias consecutivas ante Celta, Las Palmas, Salzburgo y Valladolid, todas con él como titular.

Un enfermo del fútbol

El andaluz ha entendido que debía jugar más rápido que en sus primeras temporadas, que era obligatorio mejorar en la parcela defensiva y que tenía que aprovechar la falta de mando y de ideas en el centro del campo, cogiendo el timón del equipo sin dudarlo. Tiene visión, carácter y entendimiento del juego, algo que valorar en Valdebebas. «Es un obseso del fútbol, un entrenador. Te desgrana los sistemas tácticos de todos los equipos europeos, sus jugadores y sus características. Entiende mucho», aseguran desde la ciudad deportiva, donde le sitúan como uno de los líderes del vestuario.

Esa obsesión trasciende el propio fútbol y va más allá, acariciando varios deportes como la NBA o la NFL, donde también está interesado en la táctica. «Va a ser entrenador, seguro», admiten en el vestuario: «Es de los más escuchados».

Su mejoría en sensaciones y en tiempo de juego con el Madrid le han vuelto a poner en la lista de futuribles de la selección. Luis de la Fuente dejó de contar con él tras la polémica con Gavi en 2023 y parecía que su caso estaba cerrado del todo, pero si sigue a este nivel el técnico nacional, que le tenía como un fijo en las inferiores, podría repescarle.

Los primeros seis meses de Mbappé, mejor que Cristiano y Ronaldo Nazario: la noche de Bilbao y una versión actual con gol cada 74 minutos

Los primeros seis meses de Mbappé, mejor que Cristiano y Ronaldo Nazario: la noche de Bilbao y una versión actual con gol cada 74 minutos

Ronaldo Nazario, Cristiano Ronaldo y Kylian Mbappé son los grandes delanteros fichados por el Real Madrid en el Siglo XXI. Los que levantaron mayor ilusión y los que asumieron sobre sus hombros la presión de ser el nuevo faro del ataque de Chamartín. El brasileño aterrizó en la capital después de levantar el Mundial 2002, el portugués tras ganar el Balón de Oro de 2008 y el francés firmó como agente libre al terminar unas negociaciones que duraron, entre unas cosas y otras, siete años, en los que disputó dos finales de la Copa del Mundo y venció en una. Llegaron como dioses y como tales fueron juzgados durante su adaptación. Ahora, seis meses después de su fichaje y a la espera de lo que dicte la temporada, podemos decir que Mbappé está cumpliendo las expectativas.

El delantero francés ha sufrido por el camino, pero ya está aquí, asentado en el vestuario, en los roles de la plantilla, en el estilo de juego de Ancelotti, en el ritmo de la Liga española y en su buen nivel físico y mental. Ha alcanzado velocidad de crucero y vuela, habiendo anotado un gol cada 74 minutos desde aquella noche de Bilbao en la que tocó fondo, como reconoció él mismo.

En ese partido contra el Athletic, el francés falló un penalti, otro más sumado a su error en Anfield Road, el Madrid perdió y unos días más tarde Ancelotti anunció que «su adaptación ha terminado». Era el momento de dar un paso al frente.

Mbappé, a sus 25 años, se había estrenado con gol en su debut en la Supercopa de Europa, pero había tardado tres jornadas de Liga en marcar en la competición nacional. Había disputado 1.682 minutos y había marcado 10 goles, dos de ellos de penalti. Es decir, un gol cada 168 minutos. Poco bagaje para un futbolista llamado a dominar el ataque del Madrid.

Mismos disparos, más efectivo

Desde entonces, es otro jugador. Más dinámico más ágil, más involucrado en el juego y, especialmente, más efectivo hacia portería. Es el futbolista que más disparos realiza por partido (4,5) superando a Boniface (Leverkusen, 4,1)), Haaland (City, 4) y Salah (Liverpool (3,9), un dato que no ha variado a lo largo de la temporada. Antes de Bilbao lanzaba 4,6 tiros por jornada y ahora mantiene el promedio, pero es más efectivo.

Desde el encuentro de San Mamés, el 4 de diciembre, lleva 12 goles en 12 partidos, siete de ellos en sólo cinco partidos de Liga, dos en Champions y uno en la Intercontinental, en Copa y en la Supercopa de España. 12 goles en 895 minutos, uno cada 74 minutos.

En total y con su primer hat-trick, son 22 goles en 2.577 minutos, uno cada 117. 15 en Liga y tres en Champions. Una estadística que irá mejorando si mantiene el nivel del último mes y medio de competición. A su temporada le quedan unos 25 partidos, dependiendo del éxito del Madrid. 17 de Liga, tres (mínimo) de Champions, tres (mínimo) del Mundial de Clubes, otro de Copa del Rey... Si sigue a este nivel de efectividad las cuentas son otros 2.000 minutos... Y otros 15-20 goles, situándose casi en los 40 en su primera temporada.

Sus números, 22 goles a 27 de enero en su primera temporada, están al alcance de pocos delanteros en LaLiga. Sólo Lewandowski le iguala, con sus 22 tantos a estas alturas en el curso de su aterrizaje en el Barcelona. El polaco terminó la campaña con 33 goles en 3.954 minutos. Uno gol cada 119, cifras de Mbappé, aunque peores que la versión del galo en el último mes.

Cristiano llevaba 15 goles y terminó con 33

Cristiano Ronaldo, ídolo del galo y gran referente para valorar las actuaciones de Mbappé, sufrió una lesión de tobillo que le hizo perderse ocho partidos en el inicio de su primer curso, además de dos expulsiones, aunque llegó a finales de enero con 15 goles, uno cada 80 minutos. Terminó su primer año con 33 tantos, uno cada 88 minutos.

En el caso de Ronaldo Nazario, su adaptación fue algo más complicada. Tuvo una lesión muscular que le impidió debutar hasta la jornada 4 de Liga, con aquellos famosos dos goles al Alavés, y en sus primeros seis meses sólo anotó ocho goles, todos en Liga. Uno cada 165 minutos. Despertó en la segunda parte de la temporada y acabó su curso de estreno con 29 goles, anotando cada 112 minutos.

Luis Suárez y David Villa, otros de los grandes atacantes de nuestro siglo, marcaron un gol cada 141 y cada 177 minutos en su primer curso en el Barça, 25 y 23 goles cada uno. Mbappé superará a ambos con relativa facilidad, y queda esperar si podrá mejorar la extraordinaria primera temporada de Falcao, otro de los grandes de este siglo, en el Atlético. El colombiano, que en sus primeros seis meses llevaba 16 tantos, finalizó el curso con unos contundentes 36, anotando un gol cada 115 minutos.

Después de cinco meses de adaptación y uno de explosión, Mbappé camina hacia una temporada excepcional a la altura de las expectativas.