Ancelotti le regaló un punto al Betis. Un pinchazo al puro estilo del técnico italiano, con un equipo que juega andando, que no renueva nunca con la cantera y que tiene una dependencia excesiva de Bellingham.
El momento crucial del partido fue cuando
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ORFEO SUÁREZ
@OrfeoSuarez
Madrid
Actualizado Viernes,
23
junio
2023
-
22:09Desde Di Stéfano a Benzema, Santillana, Hugo Sánchez y Cristiano, aunque sólo un...
«Cada derrota es una victoria en sí misma», dijo Maturana, a mediados de los 90, y toda Colombia pensó que algo le habían echado en el café. Hubo tantas risas, tantas insidias, que el seleccionador tuvo que eludir responsabilidades: «La frase no es mía. Ya la usaron Confucio y William Shakespeare». Sin embargo, lo que ni siquiera pudo imaginar el Pacho, uno de los grandes retóricos del fútbol, fue un caso tan extremo como el de San Marino, la selección que iba a enlazar 20 años sin una victoria. Hasta que el pasado 6 de septiembre un gol de Nicko Sensoli obró el milagro ante Liechtenstein. Hoy, cuatro semanas después, la peor selección del ránking FIFA se presenta en Gibraltar como líder de su grupo en la Nations League. Otra victoria dejaría el ascenso casi en la mano y haría enloquecer a los 23 aficionados, en su mayoría extranjeros, que han viajado hasta el peñón para alentar desde las gradas. Es un sabor tan nuevo, tan adictivo, que podría confundirse con la euforia.
«Aún no vivimos en ese clima, probablemente por falta de costumbre», bromea Luca Pelliccioni, miembro la Federación de San Marino (FSGC). «Queremos mantener los pies en el suelo. Ganamos un partido de los últimos 141, así que no estamos en posición de mirar a nadie por encima del hombro. Al mismo tiempo somos muy conscientes de nuestra gran oportunidad», desarrolla Pelliccioni en su charla con EL MUNDO. Y para justificar este optimismo cita lo sucedido en el otoño de 2020, cuando ya arrancaron sendos empates ante Liechtenstein y Gibraltar. «En Vaduz merecimos ganar y ante Gibraltar aguantamos el resultado pese a jugar toda la segunda parte con 10. Fue una muestra de crecimiento, porque los jugadores ni siquiera lo celebraron». Hace ahora un año, durante la clasificación para la Eurocopa, también pusieron en problemas a Dinamarca (1-2), Kazajistán (1-3) y Finlandia (1-2).
Estos logros, por supuesto, deben analizarse en el peculiar contexto de San Marino, un país del tamaño de la isla de Manhattan, con 33.600 habitantes y 200 nacimientos al año. Desde 1243, la república más antigua del planeta mantiene la figura de los Capitanes Regentes, sus dos jefes de Estado, cuyo cargo se renueva hoy cada seis meses. Así que esa tradición, casi milenaria, termina alcanzando al fútbol. «En primer lugar porque representar a una nación tan rica en historia llena a nuestros jugadores de un inmenso orgullo. Y esto se traduce en la estricta normativa con la que regimos las concesiones de nacionalidad. A diferencia de otros, aquí no hay naturalizaciones por motivos deportivos», explica a este diario Michele Della Valle, mánager de La Fiorita, el club que conquistó cuatro de las últimas 10 ligas del país.
Un solo profesional
La temporada pasada, con la ayuda de la FIFA y la UEFA, la Federación de San Marino invirtió 10 millones de euros tanto en el fútbol base, con la creación de una academia sub-22, como en las reformas de su estadio, el Olímpico de Serravalle. Esos planes repercuten ya en la selección absoluta: 11 de los 26 convocados hoy ante Gibraltar son menores de 24 años. «Trabajamos la cantera y nuestros jóvenes crecen en entornos cada vez más profesionales», detalla Della Valle. Pese a todo, esta selección cuenta con un solo profesional en sus filas. Nicola Nanni acaba de firmar con el Torres, de la Serie C italiana. El resto alterna el fútbol con los estudios o el trabajo.
Asimismo, Roberto Cevoli puede alardear de cierta experiencia en la elite. En 1995 jugó a las órdenes de Ancelotti en la Reggiana, donde ejercía como defensa central. «Carlo ha sido mi maestro», sostiene el hoy máximo responsable técnico de San Marino, cuya fama ya compite con la de Giampaolo Mazza. «Fue uno de los seleccionadores más longevos (1998-2013) de la historia reciente en Europa. Su compromiso nos debe servir de ejemplo», cuenta Pelliccioni sobre el hombre que guio a Los Titanes a su primera victoria. Un 28 de abril de 2004, resuelto con 1-0 frente a Liechtenstein y con Michel Platini, presidente de la UEFA, de testigo directo en Serravalle.
Los jugadores festejan el reciente triunfo en Serravalle.INSTAGRAM
Aquella pequeña gesta se ganó cierta fama por las carreteras secundarias del fútbol. Hasta que en 2012, un grupo de aficionados apátridas vino a fundar la Brigata Mai 1 Gioia (Brigada Nunca Una Alegría). La mayoría ni siquiera había visitado jamás San Marino, pero su fidelidad a los colores pesó más que los pésimos resultados. Hoy, 23 de ellos lo vivirán desde el Europa Point Stadium. «Nunca habíamos tenido a tanta gente apoyándonos fuera de casa. Algunos viajarán en nuestro chárter y la otra mitad llegará por sus propios medios. Hay muchas historias increíbles en torno a ellos, aunque me quedo con la de un chico británico al que no le gusta demasiado volar. En septiembre se hizo un viaje de una semana en tren hasta Chisinau, sede del amistoso ante Moldavia», concluye Pelliccioni.
Hoy, San Marino sigue detrás en el ránking FIFA de Islas Vírgenes Británicas y Anguila, beneficiadas por el nivel más bajo de la la CONCACAF, la confederación que reúne a Norteamérica, Centroamérica y el Caribe. Sin embargo ya se ha despojado de ese nivel atroz que le hizo encajar 52 goles en ocho partidos ante Inglaterra o el que le llevó a un 0-13 ante Alemania, cuando hubo que disuadir a Jens Lehmann, que pretendía ridiculizarles aún más transformando un penalti en el último minuto. El trabajo de Cevoli, con tantos kilómetros de vuelo en la Serie C, puede haber calado, quizá para siempre. Su mensaje cabe en aquella frase de Jimmy Connors. "Odio perder más de lo que amo ganar". La distancia que media entre la elucubración filosófica y la cruda realidad.
Carlo Ancelotti mantiene la elegancia en la sala de prensa de Valdebebas. El técnico italiano, que camina hacia sus últimos días como entrenador del Real Madrid, compareció en la previa del clásico de Montjuic, decisivo en la pelea por la Liga entre el Barcelona y el Real Madrid. No anunció nada sobre su futuro, pero deslizó algunas reflexiones hacia su final en el banquillo del conjunto blanco.
"La luna de miel con el Real Madrid no se acaba, sigue y seguirá para siempre hasta el último día de mi vida. Es como en las relaciones, al principio hay mucha pasión, y luego otras cosas. Y nada más que añadir. El Real Madrid, como el Milán, son equipos que se quedan en el corazón más que otros", declaró el entrenador, cuestionado sobre las últimas semanas. "El Madrid es un club especial que merece una actitud especial, no sólo por el entrenador, por jugadores, asistentes... Es lo que siempre he intentado hacer cada día".
En esas frases se explican los pasos del club y del técnico estos días, anunciada la salida de Xabi Alonso del Bayer Leverkusen y a la espera del clásico contra el Barça para anunciar de forma oficial su adiós al banquillo del Madrid. Ambos, club y entrenador, querían esperar al partido decisivo de Montjuic para hacerlo público, mientras Alonso espera ya su oportunidad. "He leído que Xabi se va del Bayer Leverkusen, ha hecho un trabajo fantástico. Tiene todas las puertas abiertas, ha demostrado ser uno de los mejores entrenadores del mundo", elogió el transalpino.
Sobre el encuentro, al que el Madrid llega con cuatro puntos de desventaja sobre el Barcelona, Ancelotti declaró que "Rodrygo y Güler tienen opciones" de ser titulares en Montjuic y que "lo que pasa alrededor no nos ha afectado".
"No es tan complicado preparar este tipo de partidos, no hay necesidad de motivar. Hay que darles la idea más clara posible de cómo jugar y lo que pasa alrededor esta semana no nos ha afectado para nada, cero problemas. Estamos bien y con mucha confianza", explicó sobre el partido, que recordó que es "el último clásico de la temporada porque el Barcelona no estará en el Mundial de Clubes".