Nico Williams fue uno de los protagonistas del partido entre el Barça y el Athletic. Tanto dentro como fuera del terreno de juego. Los infructuosos avances del club azulgrana por hacerse con su fichaje este verano, en un intento de que pudiera reeditar la gran sintonía que ha mostrado con Lamine Yamal en la Roja, han sentado mal en el seno del conjunto bilbaíno.
Unos intentos que, desde el punto de vista del presidente de Athletic, Jon Uriarte, llegaron a rozar la falta de respeto. «Han sucedido cosas que no nos han gustado, ha habido faltas de respeto en el caso Nico. Incluso minusvalorando al Athletic Club. Todos fichamos jugadores, pero hay que hacerlo con cierto respeto», aseguró el máximo dirigente rojiblanco en declaraciones a los micrófonos de DAZN.
No hubo comida con la directiva azulgrana, algo justificado sobre el papel por la apretada agenda a raíz de la celebración de la Semana Grande de Bilbao. En cambio, sí estuvo presente en el palco de Montjuïc.
El menor de los hermanos Williams, cómo no, fue recibido inicialmente con pitos por unos seguidores azulgrana que se ilusionaron mucho con la posibilidad de verlo como uno más de los suyos. Pero, con el paso de los minutos, esos pitos fueron paulatinamente desplazados por la más absoluta indiferencia.
Así lo constató, por ejemplo, Ernesto Valverde. «A Nico le he visto muy bien, encarando, haciendo que el rival tuviera que ir hasta su área, haciendo bien su trabajo, el uno contra uno y esperamos que esté incluso mejor a medida que vayan pasando los partidos. Sí es cierto que hubo pitos al principio, ya lo hemos visto, pero al final fue todo más llevadero. El público ha venido sobre todo a animar a su equipo», aseguró el técnico del Athletic, quien tuvo palabras para una nueva hornada de La Masia que cuenta ya con titulares indiscutibles como Cubarsí o Lamine Yamal. «Son jugadores jóvenes, pero con muchísimo talento. Es difícil tapar todas las lineas de pase que puede encontrar Cubarsí, por ejemplo. Y lo de Lamine Yamal ya es otra cuestión. Son jugadores con gran calidad, con un gran futuro, muy fuertes. Tenemos cantera y hay que cuidarla», aseguró. En cuanto al nuevo estilo azulgrana, explicó que, para él, no fue ninguna sorpresa.
«No me ha sorprendido, su planteamiento fue como el que mostró en Valencia. Es como hablar de Lamine Yamal, o, de Messi, y que me preguntéis si me ha sorprendido. La respuesta es 'no, es muy bueno y se va de cualquiera'», sentenció el técnico del Athletic.
Lamine Yamal, precisamente, fue al final determinante para que el Barça abriera el marcador. Incluso, superando previamente a su buen amigo Nico Williams, tal y como confesó el propio crack azulgrana ante los micrófonos de DAZN nada más acabar el partido. «He visto un poco de espacio, he visto que venía Nico, que no es muy intenso en la defensa, y cuando he encontrado espacio, he chutado», resumió, feliz, por supuesto, por haber encadenado la segunda victoria de la temporada y haber ganada ante los suyos.
En los prolegómenos del encuentro, según admitió, sí habló con el menos de los Williams. «Somos muy amigos», admitió, señalando algo que no es un secreto para nadie. Pero, sobre el césped, mientras defiendan colores diferentes, esa amistad se queda en el vestuario. El Barça de Flick, sobre todo, quiere ser implacable. «Lo que intentamos es pensar siempre en el gol. Cuando recuperamos el balón, vamos como flechas a la contra y somos muy peligrosos», zanjó.
El técnico alemán, por su parte, se mostró resignado por no haber podido contar aún con Dani Olmo, pero se mostró esperanzado con vistas al partido ante el Rayo en Vallecas. «No lo sé. Espero que sí. Son cosas que tenemos que aceptar, no podemos cambiarlas, lo sabíamos de antemano. Prefiero no pensar en esto, sino centrarme en lo que puedo hacer», apuntó el alemán, quien considera que su equipo aún puede ir a más. «Creo que siempre es bueno mejorar, es lo que le digo al equipo. Cada partido es un paso adelante para que estemos mejor, es lo que estamos haciendo. Analizaremos el partido y veremos qué podemos hacer mejor para el próximo, tomando las decisiones correctas», sentenció, sin olvidarse, cómo no, de elogiar la aportación de Lewandowski: «Es un profesional y siempre está pendiente de su preparación. La edad no importa. Cuando está en forma y es positivo, puede marcar muchos goles y ayudar en la presión. Necesitábamos ese segundo gol, presionó y lo marcó. Es un jugador top, así lo ha demostrado a lo largo de estos años».