Es la primera vez que el técnico alicantino se enfrenta al único equipo que ha dirigido en Primera junto al Getafe. Baraja defiende su estilo: “Es lícito porque les da resultados”
Empatados a 19 puntos, con 17 goles a favor y los mismos 20 en contra, alejados de la zona baja que rondaron pero sin capacidad para confiarse en que no sufrirán. Getafe y Valencia se verán las caras en el Coliseum con muchas cuentas pendientes, aunque prefieren guiarse por el respeto.
Es lo que siente José Bordalás por el único equipo, junto al madrileño, al que ha entrenado en Primera, el que más cerca le dejó de un título, la Copa del Rey de 2022 que se le escapó por penaltis, y del que se fue con el amargo sabor de boca de ser el primer proyecto que estranguló económicamente Peter Lim. En casi nada se parece su Valencia al actual, salvo en el que aquel delantero que no jugaba en el Getafe y que se quiso llevar a Mestalla, Hugo Duro, es hoy uno de los imprescindible junto a un puñado de talentosos canteranos. Aún así, Bordalás pide respeto. «Le tengo gran cariño al Valencia por todo lo que viví y hay jugadores que aún siguen allí. Pero del recuerdo no se vive y es un partido muy importante para el Getafe y la afición azulona», advierte el técnico alicantino.
Hubo en el pasado duelos tensos en Liga y en Copa, pero desde el paso de Bordalás por el banquillo de Mestalla, su estilo se ve de otra manera. No se sube Rubén Baraja al carro de los entrenadores críticos con la propuesta. «No seré yo quien lo haga. Es un equipo intenso en los duelos, presionante, que no te deja que tengas el control del juego porque presiona siempre sobre la pelota. Tienes que estar mentalizado con el partido que te vas a encontrar. Pero me parece absolutamente lícito, muy valorable porque les da resultados», destacó el preparador valencianista, que no se olvida de que nadie ha ganado aún en el Coliseum.
«Va a ser un partido para estar concentrados y sentirlo. No podemos tener la ligereza de no ver que cada partido es fundamental para el club. El jugador del Valencia debe ir motivado a todos los campos», recordó. Por eso le quiere dar valor a los 80 minutos en que tuvo al Girona contra las cuerdas en Montilivi: «Dos acciones puntuales y el cansancio nos llevaron a perder, pero no tiro el resto a la basura. La diferencia de mirar hacia arriba en la clasificación y dar un paso adelante es sumar fuera de casa».
Getafe va ser una prueba de fuego antes de la visita del Barça a Mestalla Si bien Bordalás tendrá que remendar la defensa por las bajas de Alderete, Damián Suárez y Diego Rico y arrastra la duda de Carmona, Baraja no ha recuperado a José Luis Gayà ni a Almeida, tiene con algunas molestias a Pepelu y Diego López. En su once estará Hugo Duro, que nunca ha sido bien recibido en su casa. Hasta Bordalás ha pedido comprensión para el delantero: «Creo que es injusto. En el tiempo que estuvo en el Getafe lo dio todos en el club nos alegramos, de que las cosas le vayan francamente bien».
Necesita el Valencia sus goles para sostenerse en esa mitad de la tabla porque, pese a la activación del ucraniano Yaremchuk con su gol en Copa y la recuperación del joven Alberto Marí, el Valencia tiene muy difícil hacer incorporaciones en el mercado de enero. La plantilla es corta y plagada de canteranos, pero Peter Lim no da el visto bueno para buscar refuerzos.
Fue en el Coliseum donde el 20 de febrero Baraja cogía un equipo que coqueteó con el descenso. A esta jornada llega exactamente con las mismas cifras que tenía Gattuso. «Será muy diferente la cara que tenía antes de aquel partido a la que tengo ahora. La sensación es de que se ha dado un paso adelante, pero hay que mantener esta idea y tendremos una buena base para el futuro y hacer crecer al club». La idea no es otra que sumar todo lo posible para asegurar la salvación cuanto antes.