El Mundial de clubes siempre recordará este 30 de junio y estos octavos de final. Unas horas después de que el Fluminense venciera al Inter de Milán y firmara una de las grandes sorpresas del torneo, el Al Hilal ha obrado el milagro y ha derrotado en una prórroga imprevisible al Manchester City (3-4). El conjunto de Pep Guardiola se adelantó en el marcador, pero los árabes remontaron, obligaron a los británicos a empatar antes del 90 y vencieron en la prórroga con goles de Koulibaly y Marcos Leonardo, culminando otra decepción más en la temporada de los ‘citizens’.
Y eso que el partido empezó de cara para el City. En el minuto nueve, Bernardo Silva completó una buena combinación entre Reijnders y Ait-Nouri para adelantar a su equipo. El Al Hilal pidió mano del lateral izquierdo en la jugada, pero el colegiado, tras una larga revisión de VAR, dio el tanto por válido.
Los ingleses fueron superiores y sólo Bono evitó que ampliaran distancias con una mano colosal ante el regate de Savinho. Doku, que hizo sufrir a Cancelo, provocó las mejores opciones.. Gündogan y Ruben Dias tuvieron sendas ocasiones que hicieron estirarse al portero y los de Inzaghi llegaron vivos al descanso pidiendo la hora.
Pero tras el intermedio todo cambió, tanto en el Al Hilal como en el City. Los ingleses bajaron una marcha y los saudíes quisieron comerse el mundo en los pies de Marcos Leonardo, que marcó el empate en el primer tiro a puerta de su equipo, justo después del descanso.
El gol noqueó al City, que no supo contener la intención saudí. Cancelo estuvo a punto de poner el 1-2 y Malcom, aprovechando una contra tras un córner de los ingleses, corrió casi todo el campo para batir a Ederson de disparo cruzado.
Los de Guardiola, eso sí, no tardaron en reaccionar y Haaland, tras un rechace a la salida de un córner, volvió a empatar el duelo y puso al City de nuevo en el partido. El técnico dio entrada a Rodri para controlar el partido de balonmano que empezaban a jugar contra los saudíes y el City dominó, aunque sin ocasiones extremadamente claras.
Sólo Doku, incansable, propuso algo diferente a sus compañeros, demostrando que el City está lejos de ser ese equipo con ritmo y ejecución que fue hace un par de años. En el 84, los defensas del Al Hilal sacaron un balón de Haaland debajo de los palos y el partido se encaminó a la prórroga, donde reinó la locura.
Guardiola sentó al delantero noruego y dio entrada a Cherki para ganar talento en el último pase, pero el primero que pegó a su rival fue el Al Hilal. Koulibaly puso el 2-3 cabeceando de forma impecable un saque de esquina lanzado por Neves.
Más drama para un City en el que Guardiola siguió moviendo piezas. Retiró a Rodri, que había entrado en el 53, y sacó a Foden, talismán para conseguir el 3-3 tras un centro medido, milimétrico, de Cherki desde la frontal del área. Era el minuto 103 y todavía quedaba mucha noche.
El City dominaba la posesión en campo rival, pero cada contra del Al Hilal creaba muchísimo peligro en la portería de Ederson por la escasa transición defensiva de los británicos. Así llegó el tanto definitivo. Lodi, ex del Atlético, puso un centro perfecto con su zurda, Milinkovic-Savic cabeceó sobre Aké, Ederson salvó en primera instancia pero Marcos Leonardo aprovechó el rechace para sentenciar al conjunto de Manchester.
En la lona por verse derrotado, el cuadro de Guardiola no pudo ni acercarse al empate y repitió decepción esta temporada, en la que ha quedado lejos del Liverpool en la Premier y perdió ante el Madrid en el playoff de la Champions League.
Una noticia inesperada para el torneo de Infantino, igual que la del Inter, pero un premio al esfuerzo y el talento del Fluminense y el Al Hilal. El Mundial es imprevisible.