De la solidez de Ter Stegen a las dudas con Courtois

De la solidez de Ter Stegen a las dudas con Courtois

El Clásico

Actualizado

El del Barça firma su mejor arranque liguero mientras el Real Madrid juega al despiste con el portero belga, casi descartado al no haber entrenado este sábado.

Marc-Andre ter Stegen en el calentamiento del partido ante el Inter.JOSEP LAGOAFP

La portería siempre es una posición muy delicada. Una máxima que, en el caso de los grandes, se multiplica hasta límites insospechados. En este sentido, el Barça y el Real Madrid llegan con sensaciones encontradas al clásico. Mientras los azulgrana lo hacen en manos de un Marc-André ter Stegen que ha recuperado este curso su mejor versión, el conjunto que entrena Carlo Ancelotti, por su parte, lo hace jugando al escondite con la más que probable ausencia de Thibaut Courtois, que tampoco ha entrenado con sus compañeros este sábado. Aunque ha estado trabajando a marchas forzadas para superar sus molestias en el nervio ciático, y a la espera de lo que anuncie el técnico italiano en rueda de prensa, los riesgos de forzarle parecen pesar más que su importancia, enorme, para el equipo.

Ter Stegen ha sido clave para que el Barça encadene siete victorias consecutivas en la Liga. Sólo la Real Sociedad, a domicilio, ha sido capaz de marcarle el único gol encajado que luce en su casillero. Fue en la segunda jornada, después de dejar también su portería a cero contra el Rayo. Ante los donostiarras, el Mallorca y el Celta, además, firmó alguna de esas acciones casi milagrosas que protagonizó a lo largo de sus primeros años como azulgrana. De hecho, una de ellas incluso fue elegida como la mejor de la Champions de la temporada 2014-15. En la acción, a la práctica un dos para uno frente a su ahora compañeros Robert Lewandowski, combinó una primera parada a disparo del polaco con una exhibición de velocidad y agilidad para sacar el balón cuando casi atravesaba la línea de gol.

Thibaut Courtois durante un entrenamiento en Valdebebas.Chema MoyaEFE

Esa temporada, con todo, no jugó ni un solo partido de Liga. Claudio Bravo los disputó todos. También estuvo casi inédito en la 2015-16: sólo jugó siete partidos, cuatro de ellos en las primeras jornadas, por lesión del chileno, en los que encajó siete goles (con un 4-1 frente al Celta en Balaídos) y los tres últimos, en los que permaneció imbatido. Los arranques del campeonato, de hecho, no se le habían dado muy bien desde que se hizo al fin con la titularidad en la campaña 2016-17. El mejor, hasta ahora, lo firmó en el curso 2017-18, con tres goles encajados en los ocho primeros partidos. Esa temporada, de hecho, dejó su portería invicta en 19 ocasiones y sólo encajó 28 tantos en 37 partidos, pero el trofeo Zamora acabó por tercera vez consecutiva en manos de un Jan Oblak que llegó a sumar cuatro galardones seguidos y que se hizo con el quinto en 2021.

Conquistar el Zamora, precisamente, es la gran asignatura pendiente del alemán. En su primera temporada como azulgrana, de hecho, vio cómo se hacía con él su entonces compañero Claudio Bravo, con 19 goles encajados en 37 partidos, y quedó segundo en los años 2017, 2018 y 2019. Sus números se resintieron en las dos últimas campañas, pero ahora parece volver a estar en plena forma. Por ahora, ya ha batido su récord de imbatibilidad como azulgrana, con 624 minutos sin encajar ni un gol, y tiene cerca la marca del chileno en el Barça, quien permaneció 755 minutos imbatido en la temporada 2014-15. Tras dejar su portería a cero en los ocho primeros partidos de Liga, con todo, acabó por ver cómo el Real Madrid le marcaba tres tantos en el noveno, con el Bernabéu como escenario. Una historia, seguro, que Ter Stegen tratará de que no se repita este domingo.

El Real Madrid, mientras, salvo sorpresa de última hora, estará casi con toda seguridad en manos del ucraniano Andriy Lunin. En la Liga, el joven arquero sólo ha encajado un gol en los dos partidos que ha jugado, aunque ese tanto le costó finalmente el empate al conjunto madridista ante Osasuna en su estadio, y ha firmado un total de tres intervenciones. Sus sensaciones, tras protagonizar buenas acciones ante el Shakhtar en la Champions, no obstante, son inmejorables. A Ter Stegen, en cambio, pese a que fue determinante para que el Inter no eliminara definitivamente al Barça de la máxima competición europea, le tocará sobreponerse a un nuevo mazazo europeo.

kpd