El Atleti, Gil Marín y Simeone: un ridículo voluntario y cantado

El Atleti, Gil Marín y Simeone: un ridículo voluntario y cantado

El Atleti se estrenó en el Mundial de clubes ante el mejor equipo del momento con una banda izquierda formada por Javi Galán y Samu Lino. No es una errata: Galán y Lino. Para sorpresa de absolutamente nadie, no salió bien. Tres pérdidas seguidas del brasileño espabilaron a un PSG aún con leve resaca y el resto fue un paseo. Si necesita meter ocho, los mete. O nueve.

El sector groupie del cholismo lleva sacando pecho desde noviembre por una victoria en Champions en París que fue un milagro: 22 tiros cayeron ante cuatro remates y una genialidad, otra más, de Correa. Creer que esos triunfos accidentales dicen algo del nivel real del Atleti ha sido un mal crónico en esta época mustia de la era Simeone, pero lo grave al comparar ambos duelos es ver la evolución de unos y de otros desde entonces.

En estos meses, Luis Enrique trabajó su modelo, pulió a Doué y el PSG ficho a Kvaratskhelia. Miguel Ángel Gil Marín decidió no reforzar las obvias carencias en invierno, cuando aún podía ganar tres títulos, ni hacer un esfuerzo previo a este Mundial. Baena y Cardoso llegarán, pero el club prefiere ahorrarse un par de millones por cabeza y traerlos en agosto que mostrar un mínimo de dignidad y ambición para un torneo que, tal vez, no vuelva a jugar en mucho tiempo. Eso es este Atleti.

Si usted fuera Julián Álvarez, ¿se quedaría?

Simeone hace tiempo que decidió ser buen soldado y tragar con la mediocridad de su directiva (que cada cual decida si es víctima o cómplice), pero lo que nadie le ordena desde el palco es sacar de titular y dar 90 minutos a Griezmann, que lleva 17 partidos sin marcar, y dejar sentado a un Sorloth que, con sus limitaciones, lleva 12 goles desde el último de Antoine. En el descanso, 2-0 abajo y con Gallagher en el banquillo, apostó por Koke como revulsivo. En 2025. El inglés y el noruego llegaron el verano pasado por 40 millones cada uno como miembros clave del plan renove, pero el técnico prioriza a dos iconos en declive. ¿Recuerdan cuando aplicaba la meritocracia?

Si usted fuera Baena, ¿ficharía?

Y así el Atleti va a lograr un hito: masacrar la innegociable ilusión de sus aficionados antes incluso de empezar la temporada. Nuevo récord mundial de mala gestión.

Si usted fuera abonado, ¿renovaría?

Bueno, esto sí porque el club ya se ha encargado de cobrar el carnet antes de mandar al equipo a América a hacer el ridículo. Mediocres sí, pero tontos ni un pelo.

La ‘pequeña Valdebebas’ del Madrid en Miami para “hacer equipo”: un búnker en el que construyó un gimnasio gigante, puso césped para los campos…

Actualizado Lunes, 16 junio 2025 - 03:00

El Real Madrid completó este domingo su primera sesión de entrenamiento en Florida y decenas de aficionados se amontonaron en la rotonda de entrada a The Gardens North County District Park, el cuartel general del conjunto blanco en Palm Beach, a 100 kilómetros al norte del centro de Miami. Un parque público con siete campos multiusos, dos zonas de juegos acuáticos, seis pabellones, dos parques infantiles y nueve hectáreas de reserva natural. En este Mundial de clubes, parte de ese terreno ha sido elegido por el cuadro de Xabi Alonso para construir su pequeño búnker en el sur de Florida.

Los blancos aterrizaron el sábado por la tarde en el aeropuerto internacional de Miami, durmieron en su hotel de concentración, el Four Seasons de Palm Beach, y el domingo sintieron por primera vez el césped de The Gardens después de media hora en autobús. Una planificación en la que el departamento de logística del club lleva trabajando durante el último año, porque a pesar de que The Gardens es una instalación ofrecida por la FIFA y ya contó con la presencia de la selección de Uruguay en la última Copa América, el Madrid ha tenido que invertir dinero y recursos en adecentar el lugar para el Mundial.

«Lo hemos hecho todo nosotros. Aquí no había casi nada», cuentan voces desde dentro de la concentración del cuadro español. Entrar en la zona madridista de The Gardens implica pasar tres controles de seguridad, donde se mezcla la policía local con miembros de seguridad del parque y del Madrid. A la entrada, un primer campo que no está siendo utilizado por los blancos, con un pequeño lago a la derecha y una comisaría de Policía improvisada para la ocasión. La seguridad es clave en este torneo, tanto para la FIFA como para los clubes y para las autoridades locales. Nadie quiere repetir los incidentes de la Copa América, donde se vivieron escenas dramáticas en la final, con avalanchas y disturbios, y tanto en la concentración del Madrid como en la del resto de clubes hay policía y seguridad privada.

Al superar los controles avanzamos por un camino pegado a un pequeño lago y llegamos a un nuevo punto de seguridad y a la 'pequeña Valdebebas' del Madrid en Miami, como la llaman algunos miembros del club entre risas: dos campos de fútbol pegados para las sesiones de entrenamiento, una grada para la prensa y para los trabajadores del club, otra carpa para miembros de la expedición, como el departamento de protocolo o la dirección, y al otro lado de los campos de fútbol una carpa gigante con un gimnasio, también construido para la ocasión, que dentro tiene sauna, piscinas de frío y calor, salas de fisioterapia y vestuarios. Todo a cuenta del Madrid, que ha preferido invertir en la comodidad de sus futbolistas.

De hecho, los blancos, según fuentes del club, han tenido que invertir también en el césped de los campos de entrenamiento, comprado a una empresa de Estados Unidos para sustituir el anterior, que no estaba en el estado adecuado. Un detalle curioso teniendo en cuenta que el recinto será sede de entrenamientos de la selección designada durante el próximo Mundial 2026.

A media hora, el hotel. Un resort de lujo pegado al mar donde el Madrid, si es primero de grupo y debe jugar los octavos en Miami, podría estar más de 20 días. El Four Seasons de Palm Beach tiene suites a 8.000 dólares la noche y todas las comodidades: playa privada, spa, restaurantes, salas de juego y hasta tiendas de lujo. Un recinto deseado también para bodas, como pudo comprobar el sábado por la noche Rodrygo desde su habitación en un vídeo que compartió en sus redes.

Ahí pasará Xabi Alonso el primer mes de convivencia con su plantilla, un pequeño campamento de verano que servirá para «hacer equipo», como reconoció el técnico en Miami. «Se tiene que acelerar todo porque tenemos poco tiempo para conocernos y entrenar. Empezaremos a hacer equipo. Venimos con ganas e ilusión», dijo.

Demasiado PSG para un pobre Atlético

Demasiado PSG para un pobre Atlético

Quedaba la duda de cómo se tomaría este PSG de Luis Enrique este torneo tras ganar todos los títulos esta temporada. Lo resolvió rápido el equipo francés con una intensidad parecida a la final de Champions. Monopolizaron el juego y las ocasiones ante un disminuido Atlético de Madrid. Cuatro fogonazos, cuatro goles y a contener energías en este torneo veraniego que aún no tiene la importancia que la FIFA pretende. [Narración y estadísticas, 4-0]

Tras un partido inaugural descafeinado, entramos de lleno en este Mundial de claroscuros. Un campeonato en el que ves al Bayern apalizar a una banda de muchachos de Nueva Zelanda y luego dos históricos europeos se juegan tres puntos a 28 grados y casi 80% de humedad en el césped sequísimo del Rose Bowl de Los Ángeles.

Salía Luis Enrique con los campeones de Europa menos Dembélé, lesionado, por el que entraba el irregular Gonçalo Ramos y Simeone sorprendía a propios y extraños devolviendo a Griezmann a la titularidad. Un caramelo para la leyenda rojiblanca en un país que podría ser su siguiente destino.

El juego empezó a su ritmo, pausado y sin riesgo. Pases cómodos y papeles previstos: un PSG muy dominador con balón y el Atlético bien pertrechado atrás, con dos filas de cuatro bien juntas y Griezmann y Julián intentando incomodar el inicio de juego francés. Sin embargo, fueron dos malas salidas de Lino las que generaron la primera ocasión, si no contamos una falta lejana de Julián, y el primer gol. Hakimi la puso en las botas de Kvaratskhelia, que aguantó bien de espaldas hasta que vio a Fabián en el borde del área y no perdonó el español con un disparo con la izquierda.

El gol del PSG no cambió el guion del encuentro, falta saber si por planificación o incapacidad. Griezmann y Julián estaban desconectados del juego y Lenglet y Le Normand se vieron muy superados por el veloz ataque francés. Y eso que pasada la primera media hora, el MVP de la Champions, Désiré Doué, no había aparecido. En el primer tiempo la posesión estaba 77% a 16% y con un 7% en disputa y 12 llegadas a ninguna, todo a favor de los franceses.

Y cuando quiso salir el Atlético, y cuando los rojiblancos consiguieron robar arriba y llevar el balón al área de Donnarumma, Griezmann disparó tímidamente a las manos del italiano, que lanzó la contra hacia Fabián. Éste condujo para ceder a Vitinha, que corrió casi 20 metros sin oposición y, cuando pisó área, con los centrales rojiblancos a años luz, sólo tuvo que colocar el disparo lejos de las manos de Oblak. Se iban los rojiblancos a los vestuarios con cara de susto, pero pudo ser peor.

De hecho, les dio uno bueno Kvaratskhelia a la salida de la caseta con la típica diagonal suya hacia dentro y disparo con rosca a la escuadra. Apareció una mano dura de Oblak para desviar el balón a la cruceta, respuesta proporcionada, la de la parada, al eslalon del georgiano. El Atlético tenía que cambiar algo y la respuesta de Simeone fue sacar a Koke en lugar de Lino, más contención para un equipo que necesitaba vértigo.

Error de Oblak

Se pudo acercar el Atlético en el encuentro si el capitán no hubiera hecho una falta a Doué para recuperar un balón que terminó en el gol de Julián Álvarez. El árbitro revisó en el VAR y comunicó su decisión al respetable. Parece que los rojiblancos se agarraron a esa acción y a los cambios del Cholo, las salidas de Gallagher, Reinildo y Correa, el héroe de la Champions, para dar un paso adelante, pero fue inane.

De hecho, el peligro lo generó un sainete de Oblak al sacar rápido con Mayulu encima. Recuperó el balón el PSG y se terminó durmiendo el joven futbolista y falló el tercero. Los rojiblancos reclamaron falta del francés y Lenglet se pasó de revoluciones y terminó expulsado. Lo increíble es que ya con 10, Sorloth falló la más clara de los colchoneros. Luego ya fue acoso y derribo, si es que quedaba algún rojiblanco en pie, hasta que anotaron Mayulu, tras una cesión involuntaria de Griezmann y Lee, de penalti. ¡Ojo!, los goles cuentan.

Crisis institucional y división total en Boca Juniors tras una temporada de fracasos antes del Mundial: “Están los que aman a Riquelme y los que no”

Actualizado Domingo, 15 junio 2025 - 22:58

«Boca siempre estuvo dividido, pero ahora la grieta se ha profundizado más porque no hay resultados deportivos. Están los que aman a Riquelme y los que no lo aman, por la política y la oposición del club». Tato Aguilera, periodista de TyC Sports, resume así en una conversación con este periódico la situación de uno de los clubes más grandes de Argentina, de América y del mundo. Boca Juniors debuta hoy ante el Benfica en el Mundial de clubes y lo hace con una profunda crisis institucional pero con miles de aficionados en las calles de Miami. Porque el 'bostero' es así: «Están locos por su club».

La temporada de Boca Juniors es dramática, como lo son sus últimos años. El conjunto de Buenos Aires no gana la Libertadores desde 2007, cayendo en la final en 2012, 2018 y 2023, y no levanta una competición nacional desde la liga ganada en 2022. Todo lo que pudo salir mal salió mal, y los últimos seis meses han sido de caída constante sobre el precipicio de la Bombonera, con Juan Román Riquelme, ídolo máximo de la historia del club y presidente del mismo, cada vez más cuestionado por una afición que le amará eternamente pero que quiere ganar.

Boca cayó en la fase preliminar de la Libertadores ante Alianza de Lima y perdió en los cuartos de final del torneo Apertura ante Independiente para confirmar la crisis deportiva e institucional que terminó con el despido de Fernando Gago, que estaba en el banquillo: «Que se vayan todos», cantó la grada de la Bombonera ese día.

Y ahora, el Mundial de clubes aparece como bálsamo para todos sus problemas, pero también con la presión de hacer algo interesante para compensar los últimos resultados. Al mando del equipo llega Miguel Ángel Russo, el técnico que le hizo campeón de América en 2007.

«Boca llega renovado con la firma de Russo, pero en lo futbolístico es un misterio», explica Gastón Garnica, de Direct TV. «Quedar fuera de la Libertadores de esa manera es impensable para un club como Boca, es un fracaso deportivo muy importante», añade Aguilera.

«Riquelme es el máximo ídolo del club y tuvo críticas, pero la gente está con él», asegura Garnica, aunque Aguilera no lo tiene tan claro: «La oposición genera un movimiento en redes muy grande que también salta a lo público. En la Bombonera una parte cantó 'que la Comisión se vaya', apuntando a Riquelme».

Eso sí, en las calles de Miami los aficionados de Boca ganan a cualquiera. «Tienen un amor incondicional por el club, así es el hincha de Boca. Está loco de amor por el club», dice Aguilera.

Y todo mientras River Plate sonríe con apariciones como la de Mastantuono, recientemente fichado por el Real Madrid a cambio de 63 millones que seguro ayudan a recomponer al equipo tras su marcha después del Mundial de clubes. Junto a él, nombres como los de Julián Álvarez o Enzo Fernández, jóvenes que han salido de River y que han dejado mucho dinero para seguir compitiendo. Boca, mientras, busca lo mismo, aunque las cláusulas que ha recibido por sus jóvenes son más baratas.

Festival histórico del Bayern ante el amateur Auckland City (10-0) en el Mundial de clubes

Actualizado Domingo, 15 junio 2025 - 20:11

Ya tenemos el primer resultado histórico del Mundial de clubes. El Bayern Múnich se ha estrenado en esta edición con un festival goleador sobre el débil Auckland City de Nueva Zelanda, un equipo amateur que ganó la Champions de Oceanía pero que no pudo casi tirar a puerta ante los alemanes. Musiala anotó tres goles desde el banquillo, Coman, Olise y Müller dos y Boey uno para sumar un desnivelado 10-0.

A los 20 minutos el encuentro ya iba 4-0, tras los goles de Coman (dos), Boey y Olise. Reflejo de la superioridad alemana sobre el conjunto de Nueva Zelanda, que apenas tocó balón. El Auckland City es el dominador de los últimos años de la Liga de Campeones de Oceanía, por eso está en el Mundial, pero ante el Bayern quedó demostrado que su nivel es mucho más bajo que el de este torneo. De hecho, según datos de Opta está en el puesto 5074 del ranking mundial, justo debajo del Castilleja, de División de Honor de Andalucía, sexta categoría del fútbol español.

La realidad ha golpeado de manera durísima al Auckland City y emborrona un poco un palmarés envidiable en su continente. Ha ganado doce veces la Champions de su confederación y ha disputado en diez ocasiones el antiguo Mundialito (2006, 2009, 2011, 2012, 2013, 2014, 2015, 2016, 2017 y 2022, quedando en tercer lugar en la edición de 2014.

Pero contra el Bayern no pudieron hacer nada. Müller y Olise marcaron el quinto y el sexto gol antes del descanso y el resultado ya era devastador para un equipo que no es profesional. Sus futbolistas no se dedican sólo al fútbol, sino que tienen otros trabajos en los que ganan más que con el balón. Estar en Estados Unidos para este torneo ya es un premio, aunque el debut haya sido tan duro.

Tras el intermedio, la entrada al campo de Musiala activó a un Bayern que parecía haberse relajado. El mediapunta alemán anotó un hattrick desde el banquillo y Müller completó el 10-0 en el tramo final, justo cuando los neozelandeses consiguieron su único disparo del encuentro.

Ahora el Auckland City deberá competir contra Boca Juniors y Benfica para tratar de lograr lo imposible: un empate que le reporte un millón de dólares que sumar a los 3,5 que recibe de la FIFA, la cifra más baja de todos los equipos del torneo.

El movimiento continuo

El movimiento continuo

El movimiento continuo existe. Lo escenifican dos esferas: el planeta Tierra y un balón de fútbol. La Tierra lleva así, girando y desplazándose, 4.500 millones de años. El balón, que fascina a 4.500 millones de personas, la mitad de la población mundial, bastante menos. Pero rueda en tal cantidad de competiciones de clubes y de selecciones, algunas de nuevo cuño y otras de viejo pero ampliadas, que parece imposible que existan fechas disponibles para ubicarlas y futbolistas bastantes para servirlas.

Pero el dinero, como el Diablo, hace prodigios. No puede comprar el tiempo. No puede desfigurarlo por prolongación, ampliación o ensanchamiento. Pero, redistribuyéndolo, ahormándolo, lo flexibiliza. Y con él a cuantos se mueven dentro de sus estrictos márgenes.

Este mastodóntico Mundial de clubes, creado contra toda lógica en un calendario saturado, es por encima de todo el del dinero. Argumento contante y sonante, persuasivo hasta lo incontestable, seductor hasta lo irresistible, que convence a equipos descontentos y jugadores cansados para que se embarquen en una aventura incierta dentro de un país desinteresado. Incluso el último mono de la competición sacará tajada de los 1.000 millones que se derramarán sobre los participantes, atraídos al certamen como las mariposas a la luz. O, más prosaicamente, como las moscas a la miel.

La fiebre del oro mundialista sumió a los clubes en la agitación, el desasosiego y la impaciencia. Desatascó operaciones calmosas, adelantó urgencias aplazadas y aceleró el mercado de fichajes, muchos de los cuales debutarán de golpe y porrazo en la competición. Suprimió las pausas, acortó los plazos, alteró los ritmos y precipitó los acontecimientos.

El torneo flaquea en la universalidad que justifica geográficamente el nombre de Mundial. Sobran equipos marginales en el mapa del gran fútbol internacional, que penarían en las primeras fases de la Champions o incluso de la Libertadores. Y, víctimas del mejorable sistema de invitaciones, faltan algunos de los mejores del orbe, con sus correspondientes estrellas individuales. Para empezar, los recientes campeones de las Ligas española, inglesa e italiana.

Nervioso, inquieto, apremiado, el Madrid acude al Mundial en un estado de necesidad deportiva y avidez económica. Las dos caras de la misma moneda. O la sola cara de la única moneda. Supeditado más que ningún otro club a la simultánea exigencia de los títulos y los balances, precisa de los títulos para ganar más dinero, y del dinero para fichar a más y mejores jugadores que le proporcionen títulos. Eso también remite al movimiento continuo.

Xabi Alonso, recién aterrizado, no quería empezar sometido, sin calentar antes, a semejante presión en un evento metido con calzador en la programación anual e incorporado brusca y preferencialmente a los objetivos blancos. Pero se ha plegado a Florentino, a quien le pueden las prisas por restañar heridas y pasar página. En la autocracia madridista, que se inmiscuye hasta apropiársela en la parcela técnica, impera también un decente sentido de la responsabilidad que la redime de sus excesos. Valdebebas, por suerte para el Madrid, no es Moncloa.

Messi y el Inter Miami se llevan un golpe de realidad en el inicio del Mundial de Clubes

Actualizado Domingo, 15 junio 2025 - 04:16

El tiempo pasa. Eso es inevitable. Y en el fútbol se nota como en la vida. Las piernas pesan más y la cabeza no resuelve con la misma agilidad. Lo saben Sergio Busquets, Luis Suárez y Leo Messi, a los que la edad no perdona. Su Inter Miami, que crece sobre ellos, especialmente sobre el argentino, se llevó un golpe de realidad ante el Al Ahly en el inicio del Mundial de clubes. Un empate a cero que, a la espera de los encuentros contra Palmeiras y Porto, les pone la clasificación para octavos en terreno peligroso. Los egipcios fallaron un penalti y Ustari salvó a un Inter que reaccionó en el tramo final pero no pudo con El Shenawy, guardameta africano. Messi se estrelló tímidamente contra los palos en una falta lejana y un centro chut, pero a sus 37 años el balón no vive igual en él. Lógico.

El Hard Rock Stadium tardó en llenarse pero finalmente rozó casi el aforo completo (60.927 según la FIFA), una gran cifra teniendo en cuenta los rumores previos sobre el pánico en Miami ante la presencia de la policía fronteriza de Donald Trump en los aledaños del estadio. Los aficionados egipcios se acumularon en la grada y compitieron de tú a tú con los latinos, que apoyaban al Inter y, por encima de todo, a Messi.

El argentino fue el más ovacionado en la curiosa presentación de los onces iniciales. Los jugadores caminaron uno a uno por el lateral del campo hasta formar un pasillo sobre una alfombra negra que terminaba en el círculo central. "Messi, Messi", cantó la gente mientras el '10', último en saltar al césped, corría hacia el Mundial de clubes.

El partido, sin embargo, situó al Inter Miami en su verdadero nivel. Ya en la previa, Mascherano, técnico de los de Florida, había reconocido que no tenían nivel para llegar lejos en el torneo, y la hierba del Hard Rock lo confirmó.

El Al Ahly fue superior en físico, en técnica y en calidad colectiva durante el primer tiempo, y sólo Óscar Ustari, el exportero del Getafe que tiene ya 38 años, evitó la contundente victoria egipcia al descanso. Busquets sufrió en el centro del campo y Suárez y Messi no aparecieron hasta el segundo tiempo.

Los africanos, con el gallego José Riveiro en el banquillo, perdonaron. Abou Ali, delantero estrella, se chocó contra Ustari una y otra vez, el portero salvó un cabezazo de Ibrahim y Trezeguet, el mejor del equipo africano, falló un penalti en el 41 que evitó Ustari volando hacia el costado derecho.

El empate del descanso despertó al Inter, que salió con otra cara de los vestuarios. Después de que Kaká, Del Piero, Agüero, Djorkaeff y Pepe jugaran con el youtuber Speed a ver quién daba al larguero durante el intermedio, Messi lideró la reacción estadounidense.

Allende falló a bocajarro ante El Shenawy tras un rechace y Messi tuvo su primera ocasión clara en el 56, cuando probó su clásica rosca desde la frontal y obligó a estirarse al guardameta egipcio. Los de Mascherano crecían en el partido con el argentino asumiendo todo el balón posible.

Leo volvió a rozar el tanto en el 63, con una falta exquisita que hizo la rosca por el exterior de la barrera y tocó en el palo del Al Ahly para delirio momentáneo de la grada local, que se desesperó en los últimos minutos con las intervenciones de El Shenawy, evitando el gol de Picault, Falcon y de Messi tras un centro chut que terminó dando en el larguero.

Un Atlético sin refuerzos ante el 'ogro' francés: "No sabemos por qué no ha venido nadie"

Un Atlético sin refuerzos ante el ‘ogro’ francés: “No sabemos por qué no ha venido nadie”

Jonathan Tah ha llegado para reforzar la zaga del Bayern; Cherki, la delantera del City, Jobe Bellingham, hermano de Jude, la media del Borussia y el vecino, el Real Madrid, ha incorporado a Dean Huijsen y Trent Alexander-Arnold. Estos son algunos de los fichajes que los clubes que disputan el Mundial de clubes han realizado para reforzarse y sumar más papeletas para llevarse la primera edición de este torneo.

Muchos son los nombres que han sonado para el Atlético de Madrid. El más sonado es el de Álex Baena, pero también se han escuchado el de Johnny Cardoso, mediocentro del Betis, Darwin Núñez, delantero del Liverpool, y Theo Hernández, lateral del Milan, entre otros. En este último caso, sin embargo, ha sido el club el que ha declinado el ofrecimiento del defensa para volver al equipo del que fue canterano y buscarán otras opciones para el perfil izquierdo si Reinildo, como parece, no continúa tras el torneo.

Así, Simeone para el partido que enfrentará a los rojiblancos ante el reciente campeón de la Champions, el PSG de Luis Enrique, no tendrá ningún nombre nuevo en su plantilla. Desde las oficinas del Metropolitano explican que "nunca se tuvo la intención de incorporar a nadie para este campeonato ya que entra dentro de la planificación de esta temporada". Además, recuerdan también que el equipo no ha sufrido ninguna lesión de larga duración y que la plantilla está "intacta". "No nos vamos a gastar 10 millones por un jugador para un mes, nosotros planificamos las plantillas a años vista", cuentan fuentes rojiblancas.

"un desafío mayor"

A los seguidores les habría gustado tener fichajes, pero entienden la postura del Atlético. "Como cualquier aficionado queremos que vengan los mejores, no sabemos por qué no ha llegado nadie, pero el argumento del club es tan válido como otro", explica a EL MUNDO Eduardo Fernández, presidente de la Unión Internacional de Peñas. No obstante, confían en que los que están puedan hacer un buen papel en "el grupo más difícil del torneo".

El club ha incorporado dos jugadores hasta 2028, sí. Clement Lenglet, que firma libre tras desvincularse del FC Barcelona, y Juan Musso, por el que se han pagado tres millones de euros al Atalanta. Ambos jugadores ya llevan un año de rodaje en la disciplina rojiblanca como cedidos, con lo que el Cholo no tendrá savia nueva para aspirar a este trofeo. "Para nosotros es un desafío mayor y vamos a ir a ganar el Mundial de Clubes, ese es el objetivo", apuntó el argentino. Desde el club no se ponen en la obligación de ganar este primer Mundial de clubes organizado por la FIFA, al menos con este formato más similar al de selecciones, pero sí se exigen "competir". Es cierto que la piedra de toque inicial, el reciente campeón de la Champions no es precisamente el rival más fácil a la hora de comenzar esta andadura. No obstante, el hambre rojiblanca tras una temporada que se torció tras aquel presunto doble toque o "ultraje" como lo calificó el Cholo en el penalti de Julián Álvarez puede ser un factor a tener en cuenta ante un equipo que viene de ganar todos los trofeos de la temporada.

Luis Enrique ha declarado en una entrevista con la FIFA que su equipo quiere estar "en disposición de ganar esta competición". Habla el asturiano de un campeonato "muy atractivo", pero en el que se debe encontrar el "equilibrio entre ese desgaste físico y mental que hay a final de temporada con la motivación por jugar esta competición". El PSG, por cierto, tampoco se ha reforzado para este Mundial de clubes.

Ausencias en el PSG

El técnico parisino llega con una duda y una baja muy importantes para este primer duelo. La duda es Barcolá, que arrastra problemas en la rodilla, y la baja es Ousmane Dembele, candidato al Balón de Oro y mejor jugador del equipo parisino esta temporada con 33 tantos y 15 asistencias.

En el Atlético están todos disponibles y el Cholo confía en volver a derrotar al PSG como ya hicieran en noviembre en la fase de grupos de la Champions con un gol de Correa en el descuento. Simeone es uno de los entrenadores que más veces ha ganado a Luis Enrique en menos duelos, cuatro en 15 partidos. La estadística en Champions, eso sí, es demoledora para el argentino dos victorias en tres encuentros. "Soy optimista, estas competiciones vienen bien al Atleti y el Cholo sabe competir muy bien", apunta Fernández.

En estos términos, parece que el mérito del que consiga los tres primeros puntos del grupo B del Mundial se lo llevarán los técnicos ante unas plantillas que juegan a imagen y semejanza de su entrenador. El escenario será el Rose Bowl Arena en una Los Ángeles que ha saltado estos últimos días a las portadas de los periódicos mundiales por los disturbios provocados por los arrestos y las deportaciones masivas del Gobierno de Donald Trump. Parece que la situación se ha calmado en la ciudad californiana desde el toque de queda, en la víspera de este torneo que inauguró el conjunto de Leo Messi esta pasada madrugada.

Morales, Karanka, Mista… Los primeros españoles en la MLS: “Me ficharon por un ‘highlight’ con el Madrid”

Actualizado Domingo, 15 junio 2025 - 00:28

Hoy se cumplen 50 años del debut de Pelé con el New York Cosmos, momento inspirador para el soccer en Estados Unidos. El partido se televisó a nivel nacional y dio inicio a una época dorada para la antigua NASL (North America Soccer League), con nombres como Beckenbauer, Cruyff, Best o Eusebio firmando por algunos de sus equipos. Otro día 15, pero de julio de 2000, debutaba con los New England RevolutionJosé Luis Morales, canterano del Real Madrid y primer español en jugar en la Major League Soccer (MLS), creada en 1993 al amparo de la FIFA tras la concesión del Mundial de 1994.

Morales venía de pasar por varios equipos en España tras salir del Madrid y buscaba relanzar su carrera. «Debuté contra el New York MetroStar de Lothar Matthaus y en esa liga también estaban Stoichkov o el pibe Valderrama. Sé que soy el primer español y el primero que metió un gol. Ya no andaba como antes, mi cabeza me decía una cosa pero mi rodilla otra, pero de vez en cuando levantamos el estadio», recuerda en una conversación con EL MUNDO.

Ese estadio era Foxboro, hogar de los New England Patriots de la NFL y de Tom Brady, que curiosamente llegó a la histórica franquicia ese mismo verano de 2000. «Nuestro preparador físico era un quarterback de los Patriots. Todo era correr y pesas, todo físico, no había visto nada igual en mi vida. Eran unas máquinas de correr y yo decía '¿Cuándo tocamos balón?'», bromea Morales. La diferencia de calidad era evidente: «Físicamente estaban preparados y tenían algo de calidad individual, pero les faltaba calidad colectiva. Cuando competían eran más individualistas. Tenía que venir alguien de fuera a enseñarles».

A pesar de las estrellas de la liga y de que el equipo de vez en cuando metía a 20.000 personas en Foxboro, seguía lejos del interés de los ciudadanos de Boston por otros deportes: «Allí estaban los Patriots, los Celtics de la NBA y los Red Sox de béisbol. El fútbol masculino no tenía tirón, se llenaban más los estadios con la selección femenina. Y seguirá así hasta que el equipo masculino tenga un gran resultado en un Mundial».

De Salamanca a Nueva Inglaterra

Pero, ¿cómo pasa Morales de jugar en el Salamanca a hacerlo en Nueva Inglaterra?. «Me firmaron porque les envié un vídeo de un par de jugadas que tenía en el Madrid. Puse los highlights y ya sirvió, no tuve que hacer ni prueba. Me firmaron por un highlight (risas). Los que sabían de fútbol preguntaban mucho por el Madrid, pero en general nada, el fútbol no tenía la potencia que tiene ahora», explica. Ni siquiera Stoichkov, Balón de Oro en el año del Mundial de Estados Unidos, tenía que firmar autógrafos por la calle. «Una noche salí con Hristo por Chicago, que coincidimos cuando fui a jugar allí, y nadie le conocía. Comenzaba el boom del fútbol para ellos, pero aún no conocían a nadie».

El primer y único gol de Morales llegó el 30 de agosto de 2000 contra el DC United, pero después de disputar diez partidos con New England decidió volver a España: «Tenía un año más de contrato, pero me volví a España porque pensaba que todavía podría rendir. Me arrepiento de irme del Madrid en su momento y de no haberme quedado más años en Estados Unidos. Hubiera abierto algo más de mundo». Los viajes, eso sí, eran «una paliza».

25 años después, Estados Unidos sigue siendo uno de los destinos preferidos de los veteranos que buscan una experiencia diferente tras terminar su carrera en Europa, aunque el dinero de Qatar, Arabia o Emiratos ahora le hace competencia. «Yo entiendo a los que se van a Qatar o Arabia, es lógico, pero el nivel de vida y la cultura no tiene nada que ver con vivir en Estados Unidos. Yo lo recomiendo mucho y me arrepiento».

"Casi se entrenaba en parques"

Morales abrió la puerta y más tarde llegaron otros como Aitor Karanka, que en 2006 firmó por los Colorado Rapids, o Mista, que llegó a Toronto en 2010. «Casi ninguna franquicia tenía estadio propio ni instalaciones y se entrenaba casi en un parque. Ahora tienen estadios espectaculares», rememora Karanka en conversación con este periódico. «Antes íbamos a jugar los últimos años de nuestras carreras y económicamente tampoco estaba como está ahora. Dos años después de que estuviera yo llegó Beckham y cambió todo. Empezaron a hacer muchas academias de niños, que yo hice un campus allí, y el jugador americano lo tiene desde pequeño como un deporte a seguir. Los niños quieren jugar al soccer», explica.

Mista, que llegó en 2010, coincidió en la liga con Henry: «Estuve un año y el nivel era mucho más alto de lo que yo pensaba. Ya estaban Henry o Rafa Márquez. Era un fútbol que estaba despegando, tenían interés en aprender y estaban invirtiendo mucho para ser lo que son ahora. Será una liga referente en el mundo en los próximos años».

El Mundial de los 1.000 millones: Madrid y City gastando 126 millones para el bote de 157, avances tecnológicos…

Actualizado Sábado, 14 junio 2025 - 00:48

Inter Miami y Al Ahly inician esta próxima madrugada (02.00 hora española) el Mundial de Clubes, el torneo de los 1.000 millones en premios, dinero salvador para los bolsillos y las sensaciones de la temporada de algunos grandes de Europa como el Real Madrid, el Atlético o el Manchester City, obligados a realizar fichajes para aspirar al trofeo final, 150 millones por levantar el título. Pero es también el torneo de los ligeros avances tecnológicos en la realización de los partidos, de la penúltima trinchera de la guerra del fútbol entre la FIFA, la UEFA y las distintas organizaciones del balón y que aterriza en un país convulso por las leyes de inmigración, con 14 millones de ciudadanos no documentados, la mayoría repartidos entre Miami, Los Ángeles y Nueva York, sedes principales del torneo, amantes muchos del fútbol y con entradas para los partidos, atemorizados por la policía fronteriza de Trump.

El dinero, no nos vamos a engañar, es el motor de este Mundial de clubes. El motor de Gianni Infantino, presidente de la FIFA en la búsqueda de rascar protagonismo a la Champions League de su antagónico Aleksander Ceferin, máximo mandatario de la UEFA. Y para ello ha encontrado el último hueco disponible en el exprimido calendario del fútbol y así arañar 1.000 millones en los derechos de televisión del torneo. Infantino ha cambiado la poco interesante Copa Confederaciones para cuadrar dos años consecutivos de show veraniego con cartel FIFA: Mundial de clubes ahora y de selecciones el próximo. En 2029 y 2030 repetirá doblete de millones y emociones. El de 2030, seguro, en España. El otro, se verá.

Los huecos restantes son del COI, con los Juegos de 2028, y de la UEFA y la Conmebol con la Eurocopa y la Copa América de 2028. Si antes los futbolistas de los grandes clubes tenían dos veranos libres cada cuatro años, ahora sólo tienen uno. Y de momento. Alguien se inventará algo para el vacío junio de 2027.

Dos millones por victoria

Al otro lado de la trinchera, los clubes, que clamaron durante meses por la existencia de un torneo nuevo en el verano entre la Eurocopa y el Mundial de selecciones y ahora observan este evento como un bálsamo económico y de salud mental. Ahí está el Real Madrid, con entrenador nuevo, tres inversiones por las que ha pagado mucho más de 100 millones de euros y el deseo de empezar ya el torneo para aliviar las sensaciones de una temporada en la que no ha logrado ni la Liga, ni la Champions ni la Copa del Rey. El Mundial le llega, además, sin la presencia del Barcelona, equipo que le ha martirizado durante este curso en Arabia, La Cartuja, el Bernabéu y Montjuic.

Los 58 millones de Dean Huijsen y los 5 de Trent Alexander-Arnold suman 63, a los que añadir los 63 de Franco Mastantuono, que no llegará hasta agosto pero es una inversión de este verano pensando también en los ingresos del Mundial. 126 millones que igualan la cifra que se ha dejado el City de Guardiola, que arrastra la misma losa que el Madrid tras un curso sin títulos. Cherki, Reijnders, Ait-Nouri y Bettinelli acumulan cantidades de más de tres cifras en gasto veraniego. Si se suma el invernal, con 75 millones por Marmoush, 60 por Nico, 40 por Khusanov y 37 por Reis son 338 millones.

La apuesta, desorbitada en el caso 'citizen' (80 se ha dejado el Chelsea, 46 el Inter, 30 el Dortmund y 28 el Porto) merece la pena viendo lo que la FIFA ha estipulado que pueden ganar los clubes que lleguen lejos en el Mundial. Los europeos recibirán entre 20 y 35 millones, dependiendo del ranking de los últimos años, sólo por presentarse, a lo que añadirán dos millones por victoria y uno por empate en la fase de grupos, siete por alcanzar los octavos, 13 por cuartos, 21 por las semifinales, 30 por caer en la final y 40 por levantar el título. Es decir, si el Madrid gana los tres partidos de su grupo y se lleva el trofeo, aspira a embolsarse 157 millones y un empujón anímico. Eso busca también el Atlético de Madrid, sin fichajes pero con la ilusión de darle la vuelta a una temporada muy irregular.

Cámaras corporales

El Mundial estrena también varios avances tecnológicos, unos importantes y otros más anecdóticos. La sala VAR dispondrá de una versión más automatizada de la detección semiautomática del fuera de juego gracias al sensor que habrá en el balón y que avisará del momento en el que el futbolista deja de golpearlo. Además, los árbitros tendrán unas cámaras corporales situadas en el pecho que saldrán en la retransmisión para «mejorar la experiencia de los espectadores» y el público del estadio podrá ver las revisiones del VAR en las pantallas, algo que en las competiciones FIFA todavía no estaba disponible hasta este torneo.

Por último, y más anecdótico, las sustituciones se comunicarán a través de una tablet y no a viva voz o con un papelito como hasta ahora. Todo por 1.000 millones en este nuevo, y súper, Mundial de clubes.