Miguel Gutiérrez, el estilete irrenunciable de Míchel

Miguel Gutiérrez, el estilete irrenunciable de Míchel

Actualizado Viernes, 6 diciembre 2024 - 21:29

Aunque su puesto sobre el papel es el de lateral izquierdo, Miguel Gutiérrez es todo un estilete. El defensa, formado en las categorías inferiores del Getafe y del Real Madrid, club que vendió al Girona el 50% de sus derechos en verano de 2022, es una pieza imprescindible para un Míchel que aprecia muchísimo su capacidad para lanzarse al ataque, algo que puede ser crucial para intentar imponerse a los blancos este sábado por la noche en Montilivi.

Tanta es su confianza en el jugador, que en la Champions ha disputado todos los minutos posibles y en la Liga únicamente tuvo descanso en una de las 15 jornadas que se han jugado hasta el momento. Frente al Valencia, ni siquiera saltó al terreno de juego de Mestalla.

Además de ese duelo, también tuvo algunos (pocos, a decir verdad) minutos de resuello en la última goleada del conjunto gerundense en casa ante el Espanyol (4-1). En la Copa del Rey, mientras, solo jugó 45 minutos ante el Extremadura y se perdió el duelo ante el Logroñés en el que otro lateral, Pol Arnau, hijo del tristemente fallecido Francesc Arnau, fue el improvisado y heroico portero que propició el pase de ronda de los locales.

Miguel Gutiérrez tiene fama de incansable y vive por y para el fútbol. Gran parte de su día a día lo pasa en las instalaciones del club. Allí, además de entrenarse, desayuna e, incluso, come. Una actitud con la que ha potenciado unas cualidades que ya hicieron que Jose Mourinho tratara de llevárselo al Manchester United en julio de 2017, con apenas 16 años.

En la temporada 2021-22, los astros parecieron alinearse para favorecer sus deseos de triunfar como madridista. Pese a un arranque de curso prometedor, finalmente no tuvo muchas apariciones en el primer equipo y su buena progresión en el filial se vería cortada por una lesión de menisco que, a la vista está, no le ha dejado ningún tipo de secuela grave. En verano 2022, al considerar que no se le podía garantizar continuidad, la entidad optó por traspasarlo al Girona. Conservando, eso sí, un as en la manga al que podría recurrir en 2024.

A pesar de que el gran objetivo del Real Madrid para reforzar la banda izquierda de la zaga parece ser el de Alphonso Davies, del Bayern, el nombre de Miguel Gutiérrez no conviene descartarlo de buenas a primeras. El escaso rendimiento de Mendy y la voluntad de ponerle al canadiense, si llega, una competencia realmente seria hacen que el defensa del Girona vuelva a sonar con fuerza.

Refuerzo de invierno

Incluso, también está en el aire la posibilidad de que el club lo incorpore en el próximo mercado de invierno ante las grandes dudas que está dejando el francés. Un movimiento que, desde luego, provocaría que Míchel se llevara las manos a la cabeza.

Para él, es un jugador prácticamente irrenunciable, y está seguro de que está más que capacitado para aguantar todo lo que le echen. "Es cierto que lo está jugando prácticamente todo, pero recupera muy bien", aseguró el entrenador en la previa de un duelo ante el Villarreal en el que la remontada para el 2-2 final pudo ser muy cara. El defensa se llevó un fuerte golpe de Albiol que hizo que todos temieran por una seria lesión de tobillo. Todo, al final, se quedó solo en un susto.

Ancelotti: "Mbappé tiene que aguantar el momento, pelear, sacrificarse, porque antes o después va a terminar"

Ancelotti: “Mbappé tiene que aguantar el momento, pelear, sacrificarse, porque antes o después va a terminar”

Actualizado Viernes, 6 diciembre 2024 - 13:54

El técnico del Real Madrid, Carlo Ancelotti, ha comparecido en la rueda de prensa previa al encuentro contra el Girona con la conciencia tranquila pese a las críticas que está recibiendo tras los últimos resultados en Liga y Champions. "Me están dando demasiados palos, puede querer decir que están cansados de mí, pero yo no estoy cansado. Sigo siendo feliz y entiendo la crítica, a veces la crítica es gasolina para intentar hacerlo mejor", ha declarado.

El entrenador blanco no es ajeno tampoco al runrún que hay en torno a la figura de Kylian Mbappé, especialmente tras sus últimas actuaciones y los dos penaltis fallados ante el Liverpool y el Athletic de Bilbao. "Los penaltis es un tema, de momento, a veces estás motivado y otras no. Él tiene que aguantar el momento, pelear, sacrificarse, porque antes o después va a terminar. Lo que me da una buena sensación es que en los dos últimos partidos ha mejorado su intensidad", ha comentado sobre su pupilo.

Muchas de las cuestiones previas al encuentro ante el conjunto de Míchel fueron en torno al francés como si necesita descanso, que el italiano ha manifestado que "en cuestiones de intensidad y velocidad ha mejorado" pero que eso no significa que tenga que jugar todos los partidos "a veces les puede venir bien descanso".

Quien volverá no tras un descanso sino tras una lesión será Vinicius Jr. El brasileño no podrá estar ante el Girona, pero sí que podrá disputar el crucial encuentro de Champions ante el Atalanta. Y Alaba ha asegurado el italiano que podrá tener minutos de nuevo ya en enero.

El técnico italiano ha querido quitar hierro a la situación del equipo en estos últimos encuentros. "No es un funeral, estamos en la pelea en todas las competiciones y hay que ser optimistas teniendo en cuenta los problemas que tenemos. Hay una plantilla de calidad y estamos convencidos de que vamos a sacar lo mejor. El nivel de preocupación es medio", ha apuntado.

Respecto a las competiciones, también ha valorado el grupo que le ha tocado al Real Madrid en el Mundialito de clubes. Los blancos disputarán el grupo H con el Salzburgo, Al Hilal y Pachuca. "Ha sido bonita la presentación, con mi amigo Del Piero", ha bromeado el técnico, "creo que va a ser una competición", ha concluido.

El defensa Pol Arnau, hijo del fallecido Francesc, héroe de la UD Logroñés como portero improvisado: "un ángel" le ayudó "desde el cielo"

El defensa Pol Arnau, hijo del fallecido Francesc, héroe de la UD Logroñés como portero improvisado: “un ángel” le ayudó “desde el cielo”

Actualizado Jueves, 5 diciembre 2024 - 08:03

El lateral de la UD Logroñés Pol Arnau se convirtió en el gran protagonista de la victoria de su equipo frente al Girona en la segunda ronda de la Copa del Rey. Arnau, hijo del fallecido ex guardameta Francesc Arnau, se puso los guantes de portero tras la lesión de su compañero Kike Royo y con los cambios agotados para dar la clasificación a su equipo, que milita en Segunda RFEF.

Arnau demostró haber aprendido de su padre, solventó con acierto el poco peligro que le llegó y en los penaltis paró un lanzamiento, a Abel Ruiz, que, unido a un error Stuani, llevó el éxtasis a la grada y la decepción a un Girona que no se adaptó al partido en ningún momento y al final lo pagó.

El joven, de 19 años, ha asegurado tras el partido que "un ángel" le ha ayudado "desde el cielo", en alusión a su padre. Pol es lateral, pero tiene un hermano que juega de portero, con lo que "quizás lo llevo en los genes", ha dicho, y "cuando he visto que alguien se tenía que poner de portero, no he dudado".

El entrenador de la UD Logroñés, Sergio Rodríguez, ya había consumido los cambios y según el reglamento de Copa -que no es como el de la Liga- no podía hacer más. El técnico confesó que había pensado en otro jugador "pero le he visto tan seguro que le he dado los guantes".

"Lo primero que quiero decir es que le dedico esto a Kike Royo", ha afirmado Arnau, en alusión al portero de su equipo, que se ha retirado conmocionado y ha sido trasladado a un centro hospitalario.

Pol  Arnau para un penalti en la tanda ante el Girona.

Pol Arnau para un penalti en la tanda ante el Girona.Raquel ManzanaresEFE

"Me he visto con confianza, me he puesto, sabía que podía hacerlo bien y ha salido, aunque si mis compañeros no hubieran metido los penaltis no estaríamos hablando de esto" ha subrayado Arnau, que ha destacado "el gran trabajo de todos".

Para él "poder competir con el Girona ya es un gran trabajo" y "luego, en el campo, con actitud todo fluye" ha concluido Arnau, que ahora se centra en el próximo encuentro con el filial de la UD Logroñés "y en estar a disposición de este club en lo que me necesiten".

"Lo más surrealista que he visto"

Por su parte, Sergio Rodríguez ha asegurado que la victoria de su equipo "es de las cosas más surrealistas" que ha visto en un campo de fútbol y "será para recordarlo a lo largo del tiempo" ya que "hemos pasado a penaltis contra un gran equipo, con uno menos en el campo y con un portero que no es portero".

Rodríguez, que acabó expulsado por protestar, ha iniciado su comparecencia reconociendo que ha pedido perdón al colegiado "por una reacción que no ha estado bien".

Ha destacado el trabajo de sus jugadores "para equilibrar un partido muy difícil" y también "a la afición por empujar" algo que "nos ha ayudado a creer que lo podíamos conseguir".

El Sturm Graz coloca al Girona al filo de lo imposible

El Sturm Graz coloca al Girona al filo de lo imposible

Actualizado Miércoles, 27 noviembre 2024 - 20:51

La Champions, lo que podía ser la prolongación del sueño vivido el curso pasado con su gran trayectoria en la Liga, sigue siendo toda una pesadilla para el Girona. Los de Míchel volvieron a caer, ante un rival en principio asequible, un Sturm Graz que contaba sus cuatro primeros partidos por derrotas y que acabó por imponer su solidez para llevarse el triunfo con un único tanto marcado por Mika Biereth. [Narración y estadísticas (1-0)]

La derrota es demoledora para el Girona. Le restan las visitas del Liverpool y el Arsenal y el viaje a Italia para medirse al Milan como últimas balas para buscar el milagro. Todo invita ahora mismo a pensar que sus opciones de meterse en la eliminatoria previa a los octavos de final son poco menos que una quimera. Por la que lucharan, eso sí, mientras haya la más tímida opción.

El Girona saltó al terreno de juego absolutamente fiel a las consignas de un Míchel que insistó por activa y por pasiva en la trascendencia del choque. Los visitantes, con un Bryan Gil capaz de volver loca a la zaga rival fuera cual fuera el flanco elegido para atacar, llegaron una y otra vez a las inmediaciones del área de Khuriakov, un joven portero ruso que se estrenaba en Champions tras pasarse muchisimo tiempo viendo los toros desde la barrera.

La pifia de Iván Martín

Lejos de poner a prueba los reflejos del joven arquero, el conjunto gerundense, a decir verdad, no logró enviar ningún balón con serio peligro entre palos. El más sangrante, quizás, fue un remate de Iván Martín, relevo a última hora de un Van de Beek aquejado de problemas gastrointestinales, que, a prácticamente un metro de la línea de gol, acabó por perderse por encima del travesaño. El Sturm Graz, en cambio, le dio algo más de trabajo, poco exigente, eso sí, a un Gazzaniga que dejó también su portería incólume a lo largo de la primera parte.

El Sturm Graz, ordenado en defensa y convencido de sus posibilidades en ataque, sería al final el que abriría el marcador tras el descanso, por mucho que el Girona amenazara de nuevo con insistencia con lograrlo. Mika Biereth, tras recoger un rechace forzado de Gazzaniga por un disparo de Jatta, se encargó de marcar el primer gol de los austríacos en el torneo. El único que constaba hasta ese momento en sus estadísticas, de hecho, se lo marcó el Brest en propia puerta.

Los de Míchel, tras el mazazo, redoblaron sus esfuerzos. No en vano, aún tenían minutos para tratar, por lo menos, de pescar un empate que les sirviera para lamerse un poco las heridas. Un punto, sobre el papel, seguía sirviendo de muy poco con vistas a tratar de meterse en la ronda previa a los octavos de final. No pudieron conseguirlo. Liverpool, Milan y Arsenal acechan en el horizonte.

Durísimo castigo para el Girona ante el PSV

Durísimo castigo para el Girona ante el PSV

Actualizado Martes, 5 noviembre 2024 - 20:49

El PSV no tuvo piedad de un Girona que llegaba a Eindhoven tremendamente mermado de efectivos. El equipo holandés, que se plantaba en el partido sin conocer la victoria, acabó pasando por encima del conjunto gerundense, por mucho que los visitantes trataran inicialmente de meterle el miedo en el cuerpo en los primeros instantes del encuentro.

Flamingo y Tillman marcaron los dos primeros tantos para los locales en la primera mitad del duelo, dejando las cosas prácticamente vistas para sentencia. Después, Bakayoko y Krejci, en propia puerta, acabarían por dictarla materializando un doloroso 4-0 que le echa un poco más de sal a la herida en que se está convirtiendo la primera participación en la Champions de un equipo que ilusionó a propios y extraños el curso pasado. [Narración y estadísticas (4-0)]

El equipo de Michel se marchó al descanso con las cosas tremendamente cuesta arriba. A pesar de que los visitantes avisaron primero en todo un toma y daca inicial con el PSV, fue el conjunto holandés el que mostró mayor contundencia en el área contraria. Mientras el argentino Walter Benítez fue capaz de desbaratar de forma consecutiva dos grandísimas opciones del Girona, Paulo Gazzanigga, pese a firmar también grandes intervenciones a lo largo de los primeros 45 minutos, vio cómo el balón se estrellaba en dos ocasiones en el fondo de la red.

La primera, tras un saque de banda en largo de Tillman que Flamingo remató con la tímida oposición de un David López que alteró levemente la trayectoria del esférico. La segunda, después de que el propio Tillman se plantara solo ante el meta y le batiera por el palo corto con un remate casi sin ángulo.

La sentencia del PSV

Tras el descanso, el PSV tuvo pronto la opción para dejarlo todo sentenciado. El remate de Luuk de Jong, con todo, se estrelló en el marco de la portería gerundense. Las cosas, además, se le pondrían ya casi imposibles con la expulsión de un Arnau que vio la segunda amarilla por un encontronazo con Lang tras haber sido previamente amonestado por protestar en la primera parte del duelo. Con uno más en el césped, la llegada del 3-0 parecía ya del todo inevitable. Ni De Jong, de nuevo, ni Till lograron encontrar el camino para lograrlo.

Sí lo hizo Saibari, si bien su acción sería finalmente invalidada por falta a instancias del VAR. No habría objeción alguna, en cambio, para el duro disparo desde fuera del área de Bakayoko, al que le seguiría cuando el partido terminaba la desgracia del gol en propia puerta de Krejci con el que se selló el definitivo 4-0.

Danjuma y Juanpe dan al Girona su primera victoria de Champions

Danjuma y Juanpe dan al Girona su primera victoria de Champions

Actualizado Martes, 22 octubre 2024 - 23:37

La electricidad de Danjuma, su jugador más desequilibrante, con una jugada personal perfectamente finalizada por MiguelGutiérrez, y una falta transformada por Juanpe ya en la recta final de la segunda parte fueron los grandes argumentos que le permitieron al Girona sumar, por fin, su primera victoria en la Champions.

Los de Míchel, que venían de sendas derrotas ante PSG y Feyenoord, se impusieron por 2-0 a un Slovan de Bratislava muy mermado por las lesiones en Montilivi. Pese a sus esfuerzos por rascar algo gracias a un trabajo incansable en tareas defensivas, el cuadro eslovaco no tuvo más remedio que hincar la rodilla.

El sueño local, eso sí, se vio levemente ensombrencido por una nueva lesión, en este caso de un Iván Martín que cuenta con la plena confianza del técnico madrileño y cuya baja supone otro quebranto para un equipo incapaz de reencontrarse con las sensaciones del curso pasado.

El Girona, a lo largo de los primeros 45 minutos, sí ofreció síntomas de recuperación y frescura, con ese fútbol que convirtió su estadio en la envidia de la elite. El conjunto de Míchel dominó el juego y llegó cada vez con más insistencia al área de un Slovan de Bratislava que, mientras trataban de sorprender a la contra, se las veía canutas para alejar el peligro de sus dominios.

Los locales se estrellaban una y otra vez contra un ordenadísimo muro rival, capaz de repeler todo balón que amenazara con acabar en el fondo de su portería. Hasta que Danjuma, al límite del tiempo reglamentario para el descanso, protagonizó una brillante cabalgada hasta la línea de fondo, como en sus mejores días en el Villarreal. El holandés colocó un centro perfecto a Miguel, que el zaguero se encargó de convertir en el 1-0 y desatar así la euforia en la grada de Montilivi, volcada con su equipo.

Libre directo

En la reanudación, el Girona bajó un poco el ritmo, ante un adversario que trataba de seguir metido en el partido evitando nuevos sustos. No obstante, fueron los locales los que tuvieron inicialmente claras opciones para aumentar la brecha en el marcador, siempre perfectamente respondidas por Takac.

El Slovan, con ese panorama, desperdició algunas oportunidades, malogradas siempre por su falta de puntería. Hasta que Juanpe, con un libre directo levemente desviado por la barrera, puso el 2-0 en una recta final que se vería también a su vez marcada por las molestias de un Van de Beek que, tras consultar con los fisios, fue sustituido por David López. El otro punto negativo de la noche fue el penalti errado por Stuani. Un triste epílogo para el ídolo de Montilivi.

Un Girona perseguido por el infortunio vuelve a caer ante el Feyenoord

Un Girona perseguido por el infortunio vuelve a caer ante el Feyenoord

Actualizado Miércoles, 2 octubre 2024 - 21:01

El infortunio persigue al Girona en la Champions. El equipo de Míchel, pese a adelantarse en el marcador y soñar con la remontada después de que Van de Beek igualara el momentáneo 1-2 del Feyenoord, acabó por hincar de nuevo la rodilla frente a un rival que llegaba a Montilivi tremendamente necesitado tras su 0-4 frente al Leverkusen en la primera jornada. Dos tantos en propia puerta, de Yangel Herrera y Krejci, esté último cuando moría el partido, acabaron por ser una losa demasiado pesada para los locales. [Narración y estadísticas (2-3)]

El Girona, en apenas unos minutos, pasó de la alegría a la zozobra en el primer tiempo. Se las prometieron muy felices con el 1-0 de David López, el primero de su historia en la Champions, pero la tan manida crueldad del fútbol volvió a jugarle una mala pasada. Yangel Herrera, cuando aún resonaban los ecos del tanto del central, envió el balón al fondo de su portería para poner otra vez la igualada.

La lesión de Tsygankov, hasta ese momento el más destacado de los locales, prácticamente acto seguido, desató los malos presagios. Unas sensaciones que no tardarían en hacerse terriblemente reales cuando Milambo, tras una mala salida de balón del propio David López, puso el 1-2. Y aún podrían haberse puesto peor las cosas a raíz de un penalti de Iván Martín sobre Timber tras un mal pase de Gazzaniga un par de minutos después.

Gol anulado a Van de Beek

El argentino, que se marchó de París apesadumbrado por el error que propició el pírrico triunfo del PSG, borró de un plumazo el mal sabor de boca que aún podría quedarle por aquella acción firmando una parada decisiva ante el penalti de Ueda. Gazzaniga, asi, les permitió a los suyos marcharse a los vestuarios con un hilo de esperanza. Una esperanza que reforzaría con un afortunado tanto de Van de Beek, nada más volver del descanso, que no subiría al marcador por fuera de juego.

El Feyenoord, cómo no, buscó la réplica, pero se encontró con un rival mejor asentado en defensa. Los holandeses, mientras, tiraron en demasiadas ocasiones de un juego al límite para evitar que los locales pudieran progresar. Tuvieron pese a todo los de Míchel una opción clarísima para lograr la igualada, por medio de un penalti de Wellenreuther sobre Miovski del que el propio arquero se resarció parando el lanzamiento del macedonio. Pero tanto trabajó el Girona por la igualada que acabó por encontrarla. En este caso, gracias a una acción personal de Danjuma perfectamente finalizada por Van de Beek.

Wellenreuther detiene el penalti de Miovski.

Wellenreuther detiene el penalti de Miovski.AFP

El Girona con el 2-2, empezó a soñar con la victoria. El sueño, no obstante, se convertiría en pesadilla cuando Krejci desvió al fondo de su portería un centro rival para volver a poner por delante a un Feyenoord que, esta vez, no volvería a dejar que se le escapara la ventaja para firmar su primer triunfo de este curso en la Champions y condenar al conjunto gerundense a encajar su segunda derrota consecutiva en Europa.

Luis Enrique, años II en París: sin la mochila de Mbappé, ''formando estrellas'' y hasta con palabrotas

Luis Enrique, años II en París: sin la mochila de Mbappé, ”formando estrellas” y hasta con palabrotas

«No tenéis ni puta idea». No puede haber mejor título para el documental de Movistar sobre la aventura de Luis Enrique en el PSG. En esa frase queda reflejada la arrogancia del entrenador y su estudiada distancia con la prensa, a la que soporta por servidumbres contractuales. En el programa, que se estrena el próximo día 30, se muestra la actividad diaria del asturiano en las instalaciones del poderoso club controlado por el emirato de Qatar. También se hace una emotiva incursión en el ámbito familiar.

La serie de tres capítulos profundiza en la volcánica personalidad de un técnico que abronca a sus jugadores en el vestuario por su falta de compromiso, que golpea con violencia las botellas de agua que hay encima de la mesa, que se encara con Kylian Mbappé, a quien llama Kiki, por el juego «desastroso» o «catastrófico» del equipo.

«Cuanto más mierda y más barro hay, me encuentro mejor», exclama, haciendo honor a ese talante provocador tan característico. También hay tiempo para presentar su perfil más cercano, recordando a su pequeña hija fallecida. «Xanita era increíble, competitiva, muy valiente, muy graciosa, como su padre», dice con una sonrisa.

Luis Enrique es un apasionado de la preparación física y del ciclismo. Ha participado en carreras amateurs de alto nivel y le gusta ir a trabajar en bicicleta. Hace años que practica el earthing- grounding, un método de relajación que consiste en andar descalzo sobre el campo para sentir la «conexión con la naturaleza». En el programa de Movistar aparece en un día lluvioso en París caminando sin calzado por el campo de entrenamiento del equipo y explicando los beneficios que le ha aportado esta terapia: «Tenía alergias, moquillo, tenía que dejar de ir en bici... Desde que lo hago, todo eso desapareció».

El ex seleccionador se siente a gusto con su trabajo en el PSG, a pesar de la enorme carga que recae sobre él, por esa insistencia de Qatar en conquistar la Champions. En su segunda etapa en la entidad parisina parece menos tensionado por la marcha de Mbappé. Ya no tiene que lidiar con aquellas permanentes preguntas sobre el futuro y el estado de forma del ídolo en las conferencias de prensa de la temporada pasada. Convivió sin excesivos problemas con el goleador e incluso, aseguran, ayudó al delantero en su enfrentamiento con la dirección del club, que veía ofensiva su fuga al Real Madrid.

La marcha del francés fue como soltar un lastre. En esta nueva temporada ya ha comenzado a diseñar una plantilla a su manera. En el mercado de verano, el PSG se gastó 180 millones en fichajes, sólo le superó el Atlético, con 185. Contrató al centrocampista portugués Joao Neves (60 millones pagó al Benfica), al delantero francés Desire Doué (60 millones al Rennes), al portero ruso Matvey Safonov (20 al Krasnodar) y al central ecuatoriano William Pacho (40 al Eintracht).

Ahora su margen de maniobra es mayor, como reconoció ayer: «En el Barça viví una etapa maravillosa, pero llegué a un equipo hecho. Todos los entrenadores queremos tener influencia en donde estemos. Aquí tenemos que crear nuestras propias estrellas. Tenemos que adaptarnos, convencer a los jugadores de la forma de jugar. Es un proyecto más maleable. Tengo más influencia con el presidente y con Luis Campos para construir esta estructura y generar algo».

En la víspera del partido contra el Girona, el asturiano valoró positivamente al debutante conjunto español: «Soy fan del Girona. El año pasado vi todos sus partidos y era uno de los equipos más divertidos. Juega muy bien. Es uno de los pocos equipos que nos puede disputar el balón. Me gustan los entrenadores jóvenes como Michel, que tienen la valentía de jugar al ataque». Lucho, en estado puro, tan arisco y, al mismo tiempo, tan cariñoso.

El Barça de Flick no baja el ritmo

El Barça de Flick no baja el ritmo

Actualizado Domingo, 15 septiembre 2024 - 18:28

El Barça de Hansi Flick no baja el ritmo. El conjunto azulgrana, con dos tantos de Lamine Yamal, uno de Dani Olmo y otro de Pedri, se impuso a un Girona que le pasó por encima tanto en Montilivi como en casa la pasada temporada y que sólo pudo recortar distancias, por medio de Stuani, cuando el 0-4 ya se había encaramado al luminoso. [Narración y Estadísticas, 1-4]

La expulsión de Ferran Torres en el ocaso, una circunstancia que antaño podría haber puesto algo de suspense, no tuvo en esta ocasión influencia en un marcador que, con el 1-4 final, da algo más de lustre al grandísimo arranque de Liga barcelonista. Todo, en puertas de un primer partido en la Champions en la que los visitantes se medirán al Mónaco y los locales, al siempre temible PSG.

La presión asfixiante, uno de los sellos marca de la casa de Hansi Flick, le permitió a su Barça acosar muy seriamente la salida de balón de un Girona que trata siempre de salir jugando desde atrás. Pase lo que pase. Una apuesta arriesgada que, al final, le permitió a Lamine Yamal abrir el marcador cuando el duelo llegaba a la media hora de juego.

El joven crack azulgrana acosó a un David López que salía desde su propia área con el esférico en los pies tras saque de puerta de Gazzaniga, acabó por arrebatárselo y se plantó completamente solo ante el guardameta rival para abrir el marcador con el 0-1. Siete minutos después, sería el mismo Lamine Yamal quien metería más tierra de por medio. En esta ocasión, tras recoger una pelota rechazada por la defensa tras saque de falta de Raphinha y enviarla al fondo de la red tras superar como tal cosa todo un bosque de piernas.

Los azulgrana, además de mostrarse implacables en vanguardia, estuvieron también muy atentos en la zaga para cortar los intentos de los locales por buscarles la espalda. Tanto Pau Cubarsí como Íñigo Martínez se multiplicaron para cortar los intentos de sorprenderlos por parte de un Girona que pudo marcharse al descanso recortando en parte las distancias.

La primera opción para lograrlo fue un remate de Bryan Gil, completamente solo, que acabó por estrellarse en el cuerpo de Ter Stegen. La segunda, una acción que, en primera instancia, Muñiz Ruiz, muy criticado por los seguidores desde la grada, entendió como penalti por mano de Íñigo Martínez, pero que acabó siendo invalidada a instancias del VAR, dado que el esférico había sido impulsado justo antes por un intento de despeje de cabeza de Balde. Uno de los supuestos en que, de acuerdo con las directrices del Comité Técnico de Árbitros hechas públicas el pasado mes de agosto, el impacto en la mano no se considera infracción.

Si el Girona podía albergar alguna tímida esperanza de meterse en el partido tras el descanso, Dani Olmo se encargó de borrarla prácticamente de un plumazo muy pronto. El gran fichaje de los azulgrana con vistas a esta temporada le sacó un partido tremendo a un pase de Koundé a la espalda de la zaga local para, tras acercarse a la portería rival quizás un tanto escorado, culminar la jugada con un tremendo derechazo ante el que nada pudo hacer Gazzaniga.

Un gol que, además de llevar el 0-3 al marcador, prolongó el arranque dulce que está viviendo el jugador en su tan deseado estreno con el primer equipo barcelonista. Unas molestias físicas, no obstante, acabaron por provocar que dejara el terreno cumplido el primer cuarto de hora de la segunda parte, aunque sus comentarios con Flick invitan a pensar que prefirió tirar de precaución para evitar males mayores.

Pedri remata el trabajo

Con el de Terrassa ya en el banquillo, fue Pedri quien adelantó su posición para situarse como media punta mientras Marc Casadó y Eric actuaban como pivotes. Y será precisamente un pase diagonal del primero, buscando otra vez la espalda de la defensa contraria, la jugada que le permitiría al canario poner una distancia ya prácticamente insalvable. Con tranquilidad , aguantó la salida de Gazzaniga y envió irremisiblemente el balón al fondo de la portería gerundense a poco más de 26 minutos para el final del tiempo reglamentario.

Con el 0-4, el Girona, lejos de tirar la toalla, redobló sus esfuerzos para reducir distancias. Y acabó por lograrlo, con un remate de Stuani que, tras centro de un Portu que se deshizo como si tal cosa del intento de Ter Stegen por arrebatarle el esférico, supuso el 1-4. Un gol que, unido a la expulsión de Ferran con roja directa por una entrada peligrosa sobre Asprilla, contribuyó a darle algo de suspense a un final de partido en el que, a la postre, el marcador no ya volvería a moverse.

Ansu Fati inicia su enésimo retorno

Ansu Fati inicia su enésimo retorno

Actualizado Miércoles, 11 septiembre 2024 - 19:15

El 7 de noviembre se cumplirán ya cuatro años de una lesión que cortó de raíz la progresión de un jugador que se atrevió a heredar el 10 de Leo Messi. Desde entonces, el camino de Ansu Fati, llamado hasta entonces a convertirse en el nuevo gran ídolo de la afición azulgrana, mucho antes de que Lamine Yamal irrumpiera en escena, ha estado plagado de baches. En el arranque de la pretemporada, sus ganas e ilusión por hacerse con un puesto en el nuevo Barça de Hansi Flick provocaron que el técnico valorara muy positivamente sus opciones.

No obstante, una lesión en la planta del pie derecho, cuando mejor parecían irle otra vez las cosas, le recordó el lado más amargo del fútbol. Esta misma semana, por fin, ya ha podido entrenarse con el grupo y, si todo va bien, incluso podría tener minutos contra el Girona este domingo en Montilivi.

En sus comienzos con el primer equipo, de la mano de Ernesto Valverde, parecía estar tocado por una varita mágica. Fue todo un soplo de aire fresco y, además, también logró marcar goles decisivos para los suyos. Por eso, no es nada raro que el actual técnico del Athletic propiciara su estreno con el primer equipo cuando aún tenía 16 años.

7 de noviembre de 2020

El 26 de septiembre de 2021, en su primer regreso desde los infiernos, ya con Ronald Koeman como entrenador azulgrana, volvió a evidenciar esa suerte de toque especial. Después de haber pasado por hasta cuatro operaciones de rodilla para olvidar de una vez por todas ese 7 de noviembre de 2020, vivió un retorno al césped de ensueño.

Saltó al terreno de juego como relevo de Luuk de Jong a falta de nueve minutos para que se cumpliera el tiempo reglamentario y, tras firmar varias acciones de mérito, culminó su reestreno con un gol que sellaba el definitivo 3-0 ante el Levante. A su padre, Boti Fati, incluso se le escaparon algunas lágrimas de emoción cuando el joven atacante subió a la grada para fundirse en un abrazo con el doctor Lluís Til, a quien consideraba como el gran artífice de su retorno.

La alegría, a pesar de todo, volvió a serle esquiva. Un mes después, se resintió otra vez de molestias en la rodilla. Y, posteriormente, encadenaría una serie de problemas musculares que, unidos a otros condicionantes físicos, le llevarían a permanecer en el dique seco 162 días más.

Cláusula de 1.000 millones

En la temporada 2022-23, con Xavi Hernández como máximo responsable del banquillo, las lesiones parecieron darle tregua: únicamente se perdió dos partidos por este motivo, con un total de seis días de baja por una contusión en la rodilla. Su papel en el equipo, pese a ello, no fue aquel que parecía llamado a tener en sus primeros días. El de Terrassa contó mucho con él y llegó a alinearlo en 51 partidos de una campaña en la que los azulgrana se hicieron con la Liga y con la Supercopa de España, pero partiendo casi siempre desde el banquillo. Únicamente formó parte del once titular en 13 ocasiones. Y su rendimiento, cómo no, también se resintió. En total, marcó 10 goles, siete de ellos en la Liga, dos en la Copa del Rey y uno en la Supercopa de España, y repartió cuatro asistencias, todas en el torneo de la regularidad.

El curso pasado, el club decidió buscarle una salida en forma de cesión a un jugador que, en octubre de 2021, el día en que se hizo oficial la última ampliación de su contrato como azulgrana y su decisión por lucir el 10 de Messi, había visto cómo su cláusula de rescisión se catapultaba hasta los 1.000 millones de euros. Entonces, parecía llamado a ser el relevo del gran ídolo, quien había vivido una traumática salida de la entidad ese mismo verano. Su paso por el Brighton no fue todo lo bien que habría desado. Con el equipo inglés jugó 27 partidos, 19 de ellos en la Premier, seis en la Europa League, uno en la Copa y uno en la Copa de la Liga, casi siempre saliendo desde el banquillo, y anotó un total de cuatro goles.

Una lesión en el gemelo derecho, en este caso, provocó que se perdiera un total de 14 encuentros y removió viejos fantasmas que, ahora, quiere exorcizar de una vez por todas en el Barça.