Pogacar avasalla a unos enemigos que ya sólo pelean por las migajas. ''Está en otro nivel, es absurdo seguirle''

Pogacar avasalla a unos enemigos que ya sólo pelean por las migajas. ”Está en otro nivel, es absurdo seguirle”

Cruza la meta mostrando cuatro dedos de la mano derecha tras imponerse en el sprint de clausura de la Volta a Catalunya. Un póquer de victorias para un devorador insaciable. Tadej Pogacar, el escalador soberbio y autor de escapadas épicas, también avasalla a velocistas. En la ronda catalana ha vuelto a humillar a sus enemigos, con cuatro triunfos de etapa, la clasificación general y los premios de la Montaña y Puntos. Una bestia con cara de ángel que sólo deja las migajas.

El esloveno ya abruma con un inicio de temporada espléndido y un palmarés envidiable. Ha ganado la Volta y la Strade Bianche. En la Milán-San Remo fue tercero. A su 25 años ya acumula 69 victorias. Con sus exhibiciones encandila al público y frustra a sus adversarios, que ya han aprendido a pelear por botines secundarios. «Pogacar está a otro nivel, cuando salta es absurdo intentar irse con él», decía el colombiano Egan Bernal el pasado sábado, cuando el esloveno se fugó a falta de 30 kilómetros para imponerse en el cima del puerto de Queralt.

El escalador del Ineos, que esta semana ha exhibido la mejor versión de los últimos años, se tuvo que conformar por pugnar con Mikel Landa por acceder al podio. Ser el escolta de Pogacar ya es un privilegio. Sólo Jonas Vingegaard es capaz de retarle en las cumbres del Tour de Francia. Van der Poel y Wout Van Aert también osan desafiarle en los Monumentos.

Landa, que ahora ejerce como lugarteniente de Remco Evenepoel y que en la Volta ha estado espléndido, se rinde ante la superioridad de Pogacar. «Está muy fuerte y es muy difícil plantarle cara. Todos esperamos a que en algún momento muestre debilidad», explicaba el alavés.

Los rivales de Pogacar aprenden a competir en un plano inferior. «Es una pena que esté Pogacar, porque entonces la victoria es más difícil», confesó Landa tras terminar segundo en la etapa de la Volta con meta en Port Ainé, en la que puso a prueba al esloveno con un ataque a falta de 7,4 kilómetros para el final. «Sabía que Pogacar, con mi ataque se iba a calentar. Tenía la esperanza de irme con él y aguantar hasta el final, pero desde un principio he visto que no podía. Estoy contento con la segunda plaza. Mi objetivo era sacar un poco más de ventaja al tercero», dijo tras llegar a la meta 48 segundos después que el doble vencedor del Tour de Francia.

«La baza de Pogacar nunca falla», recalcaba Marc Soler, gregario del esloveno y que este domingo buscó sin éxito el triunfo de etapa.

Joxean Fernández Matxin, mánager del UAE, se mostraba orgulloso de su pupilo: «Siento que estamos viviendo una época especial para el ciclismo y queremos formar parte de ella. Somos personas normales disfrutando como niños mientras trabajamos duro».

Geraint Thomas, ganador del Tour de 2018, tampoco esconde su admiración por Pogi :«En los años venideros dejará un legado enorme, como uno de los mejores ciclistas de la historia».

«No sólo es el más fuerte, también es el más inteligente», comenta el danés Mattias Skjelmose.

Pogacar recoge los elogios con agrado y afirma que está atravesando por un ciclo espléndido. «Nunca he estado más en forma ni me he sentido tan cómodo en la bicicleta. He dado un paso más para disfrutar e ir cada día con una sonrisa. Me siento bien en los entrenamientos. Estoy muy contento y esto, a veces, es más importante que los números», aseguró al termino de la etapa de este domingo en Barcelona, en la que superó con holgura a los franceses Dorian Godon y Guillaume Martin.

«Esta semana ha significado mucho para mí. En la temporada pasada tuve un medio año duro y empezar este curso con estos triunfos es fantástico. Esta victoria me da mucha confianza. Estoy en muy buena forma y en buen camino para afrontar el Giro y el Tour», añadió.

El insaciable Pogacar se anota la tercera victoria en la Volta con otra sensacional escapada y sentencia la carrera

El insaciable Pogacar se anota la tercera victoria en la Volta con otra sensacional escapada y sentencia la carrera

Etapa reina para el monarca intocable. Tadej Pogacar se adjudicó este sábado la jornada más exigente de la Volta a Catalunya, con final en el alto de Queralt. Nueva exhibición del esloveno, que atacó a falta de 40 kilómetros para la meta y con dos puertos por delante. Tercera victoria en esta edición de la ronda catalana (las anteriores fueron en las cimas de Valter 2000 y Port Ainé), que concluye hoy en Barcelona, con seis ascensos a Montjuïc

Pogacar rubricó otra entrega antológica de ciclismo puro, del que huye de la cicatería y de la administración milimétrica de esfuerzos. El doble campeón del Tour de Francia tenía asegurado el liderato de la prueba, con 2.27 minutos de ventaja sobre Mikel Landa, pero a pesar de ello aceleró en las rampas más empinadas del penúltimo puerto (Sant Isidre) y descolgó a sus impotentes enemigos.

Atacar por placer siendo primero en la general, arriesgando en los descensos, es un gusto impagable para esos aficionados que disfrutan con las hazañas individuales. Lecciones magistrales de superdotados, de gente que huye de la vulgaridad, que disfruta con retos mayúsculos, como hizo Van der Poel el pasado viernes en la clásica de Harelbeke, culminando una escapada de más 40 kilómetros por zonas de adoquines. La nueva generación de chavales inconformistas se desafía desde larga distancia para el deleite de los fans.

Pogacar, tras comandar el pelotón en el puerto de Pradell, un especial con tramos de cemento del 20% de desnivel, se cansó de pedalear en compañía y con esa facilidad tremenda que nos tiene acostumbrado se marchó en solitario. Se fue sin apenas oposición de Landa. El vasco, junto al resto de perseguidores, comenzó a disputar su propia carrera y a pelear por las migajas que dejaba el jefe del UAE. Fue alcanzado por Egan Bernal y ambos colaboraron para distanciar a un grupo en el que viajaban Enric Mas, Vlasov y Kuss y para asegurarse en el podio. En último puerto, Queralt, cada uno escalaba a su propio ritmo, sin la cadencia alegre de Pogacar, que ascendía aclamado por el público.

Bernal ofreció una buena versión, se pegó a Landa y terminó segundo, a 57 segundos de Pogacar. El vasco cedió la segunda plaza al colombiano. Enric Mas fue cuarto, a 214. El escalador de Ineos es tercero en la general, una plaza de podio que espera mantener en la clausura de este domingo en Barcelona.

Pogacar, que salvo desgracia se anotará este domingo la Volta a Catalunya, ya suma 67 victorias. Esta temporada ya venció en la Strade Bianche y fue tercero en la Milán-San Remo. Un fenómeno.

Van der Poel desencadena su furia en Harelbeke con otra escapada formidable

Van der Poel desencadena su furia en Harelbeke con otra escapada formidable

La Bestia desató su furia tras un ataque de Oier Lazkano y una caída de Wout van Aert. Mathieu van der Poel, en estado puro, fulminó a todos sus enemigos con una de esas cabalgadas formidables que sólo los privilegiados pueden culminar. El neerlandés se adjudicó este jueves la E3 Saxo Classic, la cita tradicionalmente conocida como Harelbeke, en la zona de Flandes, y que supone el gran aperitivo de las clásicas de los adoquines de primavera, con sus 207 kilómetros de recorrido y sus 17 cotas de pavés.

El campeón del mundo de fondo en carretera volvió a encandilar al público con una ofensiva de larga distancia. Al falta de 43 kilómetros para meta, en la entrada del emblemático tramo adoquinado de Paterberg, soltó a sus compañeros del grupo cabecero y se marchó ante la mirada impotente de sus adversarios.

Un ataque que se generó tras una maniobra valiente de Lazkano. El chaval del Movistar estuvo otra vez entre los mejores y a falta de 47 kilómetros intentó fugarse. Un desafío frustrado por la ambición del líder del Alpecin. La respuesta de MVDP coincidió con una acción desgraciada de Van Aert, que se cayó en el inicio de la rampa del Paterberg. El belga, con un leve raspón en el codo derecho, se levantó y, tras quedar descolgado, se lanzó a la caza.

Van Aert, enrabietado, aceleró en una persecución formidable, que le permitió acercase a 400 metros del maillot arcoíris. Pero su ejercicio se desinfló a falta de 10 kilómetros, cuando Van der Poel volvió a volar en los adoquines para imponerse en el primer duelo del año a Van Aert, su eterno rival desde la niñez en la carretera y en el barro del cliclocross. Desfondado, el belga terminó tercero, por detrás de su compatriota Jasper Stuyven.

VdP, que entró en la meta haciendo un saludo militar, se anotó el primer gran examen antes de afrontar el Tour de Flandes (31 de maro) y la París-Roubaix (7 de abril).

Van der Poel le brinda un 'Monumento' a Philipsen, que devuelve la Milán-San Remo a los velocistas

Van der Poel le brinda un ‘Monumento’ a Philipsen, que devuelve la Milán-San Remo a los velocistas

Jasper 'Desastre' le llamaban al que hora todos se rinden, el tipo más rápido del mundo. Al velocista que domina, ganador de cuatro etapas y el maillot verde del último Tour, un belga asombroso. El mismo que siempre daba al palo, que en un Tour anterior se había quedado seis veces entre los tres primeros y también en una etapa con final en Dunkerke alzó los brazos al frente del pelotón sin darse cuenta de que Van Aert había ganado un rato antes. Todo eso tan atrás ya. Porque Philipsen cabalga tan seguro de sí mismo que hasta se apunta Monumentos. Se impuso en la San Remo en un sprint ante 12 fuoriclasse para colar su nombre en la batalla entre Van der Poel y Pogacar y para devolver a los velocistas al trono de la Classicissima.

Desde 2016 (Arnaud Démare), ningún sprinter puro se imponía en la meta de la Vía Roma de San Remo. Siempre el Poggio, para arriba o para abajo, como juez. Pero el del Alpecin se aprovechó de las circunstancias. De la nula selección en la Cipressa y del trabajo impagable de su compañero Van der Poel, quien incluso sacrificó sus propias opciones de hacer historia -repetir victoria en el primer Monumento por segundo año consecutivo (algo que no se logra desde Erik Zabel en 2001)-, para atajar los zarpazos de Pogacar (incluso el de Mohoric en los últimos kilómetros) para poner en bandeja la victoria a Philipsen.

Y aún así, apenas un tubular le separó de Michael Matthews, con Pogacar tercero. Toda la electricidad para los últimos 20 minutos, seis horas donde aparentemente nada sucede, así es la magia de la Classicissima, donde siete veces reinó Eddy Merckx, donde Óscar Freire lo hizo tres (y nueve veces estuvo en el Top 10).

La clave fue que no hubo tiroteo en la Cipressa, donde apuntaba la estrategia del UAE, la esperanza de Pogacar de otro 'solo' (como en la Strade Bianche hace unas semanas), tan utópicos en la Milán-San Remo. Puso ritmo mortal el debutante Isaac del Toro, pero no hubo continuidad por ninguno de sus compañeros, un grupo demasiado compacto que ni agarrar a los valientes del día -entre ellos Sergio Samitier, que se cayó poco después en una curva- pudieron antes de coronar. Acercarse a los nueve minutos y dejar el pelotón tiritando era el objetivo sobre el papel (el récord seguirá siendo de Colombo y Gontchenkov, desde 1996, 9:19). Pero no hubo forma, para desesperación de Tadej, tan ansioso y tan contenido a la vez.

El podio final de la Milán-San Remo, con Philipsen en el centro.

El podio final de la Milán-San Remo, con Philipsen en el centro.MARCO BERTORELLOAFP

Así que a falta de 15 kilómetros y más de seis horas de esfuerzo, vuelta a empezar, con el grupo enorme entrando por detrás, entre ellos los velocistas, con tan solo ya el Poggio como obstáculo. Y ahí la timidez, el acelerón inútil de Wellens (la impresión es que a Pogacar le faltó equipo), el alarde de Gonzalo Serrano (26º en meta a 35 segundos, el mejor español) y los dos ataques sin premio para Pogacar. El primero, contrarrestado por Van der Poel, Bettiol y Ganna. El segundo, en el que sorprendió justo antes de coronar, no lo pudo rematar en el descenso, donde el propio Van der Poel, Pidcock y el resto pronto le dieron caza. "Estuvo cerca, tenía unas piernas increíbles", confesó después el esloveno.

Así que los 12 elegidos se plantaron en Vía Roma, donde Philipsen escribió su nombre para la eternidad, con un gracias enorme a un compañero de los que no tienen precio. La grandeza del nieto de Poulidor.

Juan Ayuso, acaparador de podios y el mejor de los mortales en el reino de Pogacar, Vingegaard y Evenepoel

Juan Ayuso, acaparador de podios y el mejor de los mortales en el reino de Pogacar, Vingegaard y Evenepoel

«JuanAyuso tiene los huevos bien colocados. Es ambicioso, ganador, muy completo y tiene carácter». A un veterano técnico de UAE no le sorprende el estupendo arranque de curso del español. El discípulo de Joxean Fernández Matxin ha subido al estrado de los sobresalientes y de ahí nadie le desplaza. En el último mes ha sumado ocho podios en cinco carreras. A sus 21 años es el mejor mortal en esta nueva temporada dominada por Vingegaard, Pogacar y Evenepoel.

«Ayuso está muy centrado, siempre está atento a las mejoras técnicas y a la nutrición. En muchos aspectos me recuerda a Alberto Contador», señalan desde el UAE. «Es un killer», insiste Matxin.

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«Que me comparen con Contador es muy gratificante, él es uno mis ídolos. Pero todavía tengo mucho por hacer y aprender», ha dicho Ayuso, que acaba de comprobar en posición de privilegio el poderío de Vingegaard en la Tirreno-Adriático. El español finalizó segundo, venció en la contrarreloj inaugural (derrotó a Filippo Ganna, el mejor especialista del mundo) y sumó dos segundos puestos en sendas etapas ganadas por el Jinete pálido danés. «Todo el equipo me ha ayudado mucho. Ha sido agradable compararme con algunos de los mejores escaladores del mundo. Soy realista y sé que ahora mismo no puedo desbancar a Vingegaard con un ataque, pero estoy satisfecho con lo conseguido. Sé que voy en la dirección correcta», advertía el pasado sábado, en la víspera de la conclusión de la ronda italiana.

Antes de acudir a la cita de los dos mares sumó una victoria en la clásica Faun-Ardèche, un segundo puesto en la Faun Drôme (no peleó la victoria a su compañero Marc Hirschi), un tercero en el trofeo Laigueglia y un segundo en la contrarreloj mutilada de la Vuelta a Andalucía. En el estreno de la temporada, en el sterrato de la Clásica de Jaén, fue vigésimo. Su formidable rendimiento ha generado una gran ascenso en el escalafón del UAE y ahora pugna con Almeida, Adam Yates, McNulty y Hirschi por ser el lugarteniente más cualificado de Pogacar.

País-Vasco, Amstel...

Ayuso atesora carisma y nunca pasa desapercibido. En su primera participación en la Vuelta, en 2022, terminó tercero. El pasado año, tras cinco meses en blanco por una lesión en el tendón de Aquiles, conquistó dos etapas en la Vuelta a Suiza (acabó segundo) y una en el Tour de Romandía. Logró la medalla de plata en el campeonato de España de ruta. «Ese tiempo que estuve parado fue muy duro, pero aprendí mucho en el aspecto mental. La ayuda del rehabilitador Víctor Moreno y de toda mi familia fueron fundamentales», confesó tras superar su experiencia más ingrata.

Ayuso ha convertido el podio en su estancia habitual y ahora pretende prolongar sus exhibiciones en un mes de abril muy intenso, con exigentes visitas a las clásicas de las Ardenas. Y es que el chico de Jávea también es candidato a las pruebas de una día debido a su notable punta de velocidad en subida. Alumno aplicado de Alejandro Valverde. Desde el 1 al 6 competirá en la Vuelta al País Vasco, donde volverá a enfrentarse a Vingegaard. El 14 acudirá a la Amstel Gold Race, el 17 irá a la Flecha Valona y el 21, a la Lieja-Bastoña-Lieja. En La Decana, su clásica favorita junto al Giro de Lombardía, será la única ocasión en la que coincidirá con Pogacar. En el Monumento belga tendrá que colaborar con el esloveno en su objetivo de resarcirse de aquella maldita caída del pasado año que lastró su rendimiento en el Tour.

Ayuso cerrará su temporada de primavera en el Tour de Romandía: 23-28 de abril. Luego descansará y se concentrará en altura para preparar su debut en el Tour de Francia, la carrera por la que se hizo ciclista. «Participar en el Tour es cumplir mi sueño. En el equipo todos trabajaremos para Tadej, si me dan un poco de rienda suelta lo aprovecharé», señala. Sus objetivos después del Tour serán los Juegos Olímpicos, el Mundial, Quebec, Montreal y el Giro de Lombardía. La Vuelta a España queda excluida en la planificación del mejor de los mortales.

Evenepoel se une a la fiesta de los mejores y se adjudica la etapa de clausura de la París-Niza

Evenepoel se une a la fiesta de los mejores y se adjudica la etapa de clausura de la París-Niza

Tres zarpazos consecutivos abrieron una herida profunda en una presa sin capacidad de respuesta. El depredador Remco Evenepoel se adjudicó la etapa de clausura de la París-Niza tras un ataque contundente a falta 43 kilómetros para conclusión de la meta. El belga se une a la fiesta de los grandes en este inicio de la temporada tras las exhibiciones de Tadej Pogacar en la Strade Bianche y de Jonas Vingegaard en la Tirreno-Adriático. Los tres se desafiarán en julio en un Tour de Francia apasionante.

El triunfo en la general de la París-Niza fue para el estadounidense Matteo Jorgenson, ex del Movistar y ahora compañero de Vingegaard en el equipo Visma. El mejor resultado de la historia del corredor de 24 años que destacó en las categorías inferiores de Estados Unidos y que en 2020 fue fichado por Eusebio Unzué. En la escuadra telefónica estuvo hasta el pasado año..

Evenepoel atesora esa ambición que distingue a los mejores. ''Es un pequeño bastado. Él y los corredores de su generación son perros que come carne de perro. No respeta nada'', aseguraba recientemente Geraint Thomas, ganador del Tour de 2018.

Evenepoel arriesga con osadía, sin temor a las consecuencias imprevistas. Ayer atacó en la subida en el col de Peille y descolgó con facilidad al líder Brandon McNulty, que le aventajaba en la general en 26 segundos. A la ofensiva del belga sólo se unieron Jorgenson (líder virtual en el último tramo de la última etapa) y el ruso Aleksandr Vlasov, vencedor en la jornada del sábado. Antes se había quedado cortado Egan Bernal.En la subida a puerto de Eze, la ventaja superaba el minuto y medio. La carrera estaba perdida para McNulty, que ascendía junto a Primoz Roglic.

En el ascenso a Quatre Chemins, a nueve kilómetros de la meta, cedió Vlasov y la ventaja con el grupito de perseguidores superaba los dos minutos. Jorgenson ya tenía asegurado el triunfo en la general. Ambos colaboraron en el descenso hacia Niza. En el sprint, el belga impuso su fortaleza y el estadounidense se adjudicó su primera gran carrera. Una victoria de calidad que le otorga un peso relevante en el Visma, la escuadra dominadora en el inicio de temporada.

En el podio, el norteamericano compartió protagonismo con un Evenepoel que el pasado febrero se anotó la general y una etapa de el Algarve. El belga, con sólo 25 años, ya suma 54 triunfos. Casi nada.

Vingegaard asusta en su mejor arranque de temporada y sentencia la Tirreno-Adriático

Vingegaard asusta en su mejor arranque de temporada y sentencia la Tirreno-Adriático

Los fenómenos se desafían en la distancia. Mientras que Tadej Pogacar rubricó la pasada semana una fuga antológica en la Strade Bianche, ahora Jonas Vingegaard exhibe su jerarquía en la ronda de los dos mares. El danés encadenó su segundo triunfo consecutivo en la Tirreno-Adriático, otra vez volvió a fugarse en las rampas más exigentes del último puerto, como hizo el viernes en Valle de Castellana. La prueba finaliza este domingo con una etapa de 154 kilómetros, sin apenas dificultades orográficas, con salida y llegada en San Benedetto del Tronto. Juan Ayuso, el mejor de los mortales, opta a un valioso podio. El español volvió a ser segundo, tras superar en la llegada al australiano Jai Hindley. Historia repetida por segunda jornada consecutiva.

El danés está firmando su mejor inicio de temporada. Ya suma seis victorias después de conquistar tres triunfos de etapa y la clasificación general en O Gran Camino. En anteriores cursos, el mejor registro antes de abril eran cuatro victorias. Entre los corredores del World Tour, sólo Mads Pedersen acumula un botín similar.

Vingegaard lanza un mensaje contundente y ya asusta a sus enemigos. Pogacar, tras ganar hace una semana en la clásica del sterrato, insistió en que su rival más complicado para conquistar el Tour es el danés. ''Es mejor escalador que yo. Él planifica la temporada como hacían Indurain y Armstrong, centrando todos los esfuerzos en llegar al Tour en la mejor forma posible. Yo no hago eso, porque busco victorias en otras carreras'', señaló en esloveno.

El líder del Visma, que ha estrenado palmarés en la ronda italiana, muestra un poderío insultante en la montaña. ''Sabíamos que lo iba a hacer, pero no hemos podido evitarlo Jonas es el más fuerte'', dijo Juan Ayuso tras contemplar la fuga del danés el pasado viernes. El español, que este sábado sufrió, sin consecuencias, una avería mecánica a falta de 27 kilómetros para la meta, persigue su primer podio de la general de la prueba del tridente de oro.

El joven corredor del UAE está presenciando en primera línea una master class de Vingeggard. El danés se adjudicó en una jornada en la que Carapaz y Leknessund, García Cortina, Kiatkowski y Alaphilippe, entre otros, retaron al pelotón con una escapada que finalizó en las primeras dificultades del Monte Petrano, en cuya cúspide estaba situada la meta. Carapaz fue el último superviviente de la fuga. El ecuatoriano aguantó hasta seis kilómetros de la llegada, cuando saltó Vingegaard. Ayuso y Hindley soportaron el primer asalto, pero en el segundo arreón se quedaron clavados. Otra vez, ascenso glorioso para el doble ganador del Tour de Francia, que superó al español y al australiano en 26 segundos. Ahora, Vingeggard aventaja a Ayuso en 1.24 minutos y en 1.54 al Hindley.

El danés se encuentra satisfecho con los réditos conseguidos: "Sabía lo que hacía antes de la Tirreno-Adriático y que mi estado de forma era bueno. Siempreconfié en mí mismo y en mi equipo'', dijo antes de tomar la salida de la etapa de este sábado.

Por otra parte, en la París-Niza, que concluye este domingo, el triunfo de etapa fue para el ruso Aleksandr Vlasov, que escapó en el último tramo de la etapa. La segunda plaza fue para Remco Evenepoel y la tercera para Primoz Roglic. El líder es el estadounidense Brandon McNulty, con sólo cuatro segundos de ventaja, sobre su compatriota Matteo Jorgenson.

Valencia acogerá la salida de la Vuelta a España femenina más ambiciosa, con primera visita a los Pirineos

Valencia acogerá la salida de la Vuelta a España femenina más ambiciosa, con primera visita a los Pirineos

Actualizado Viernes, 8 marzo 2024 - 12:38

En el Día Internacional de la Mujer, el Palacio de las Comunicaciones de Valencia ha acogido la presentación del recorrido de La Vuelta Femenina 24 by Carrefour.es. La ronda española, que contará con una etapa más que en 2024, comenzará el domingo de 28 de abril en Valencia y finalizará el 5 de mayo en Valdesquí. A lo largo de sus ocho etapas, la carrera visitará ocho provincias de cinco comunidades autónomas diferentes. Las ciclistas afrontarán una contrarreloj por equipos, una etapa llana, dos etapas onduladas, una etapa de media montaña y tres etapas de montaña.

Valencia, que ya cuenta con la experiencia de ser salida oficial de La Vuelta en 1996 y 2002, acogerá la contrarreloj por equipos inaugural que tendrá como epicentro la Ciudad de las Artes y las Ciencias y el Oceanogràfic. La segunda jornada, con salida en Buñol, recorrerá el interior de la provincia valenciana antes de adentrarse en territorio castellonense para terminar en Moncófar. También desde la provincia de Castellón partirá la tercera etapa, desde Lucena, antes de poner rumbo a Teruel en una jornada de media montaña. En la siguiente jornada, la carrera hará su primera incursión en la provincia de Guadalajara para salir de Molina de Aragón, antes de volver a la comunidad aragonesa en un terreno principalmente llano y vivir un final de etapa en su capital, Zaragoza.

La primera jornada montañosa de la carrera llegará con el estreno de los Pirineos en la ronda femenina. Tras salir de Huesca capital, el pelotón afrontará la subida al Alto del Monasterio de San Juan de la Peña, de segunda categoría, y la ascensión final al Fuerte de Rapitán, en Jaca. El segundo final en alto de la carrera llegará en la siguiente etapa, que unirá Tarazona, en Zaragoza, y La Laguna Negra de Vinuesa, en Soria. Una cima que con dos presencias en La Vuelta ya ha escrito las primeras páginas de su historia ciclista.

En el último fin de semana de carrera, el pelotón abandonará el territorio soriano, con salida en San Esteban de Gormaz, para volver a la provincia de Guadalajara y finalizar en Sigüenza, con unos metros finales ascendentes que pondrán a prueba la explosividad de las ciclistas.

El fin de fiesta de esta segunda edición de La Vuelta Femenina by Carrefour.es se vivirá en la Comunidad de Madrid. Primero, la salida desde el Distrito Telefónica servirá para participar en la celebración del centenario de la compañía, como hará también La Vuelta 24 en su etapa final. El pelotón pondrá rumbo a la Sierra de Guadarrama atravesando territorio ciclista, con la subida al Puerto de la Morcuera, de primera categoría, y la ascensión final a Valdesquí, también de primera categoría, que coronará a la vencedora final de La Vuelta Femenina 24 by Carrefour.es. La última ganadora fuera la neerlandesa Annemiek Van Vleuten (Movistar), que ya está retirada.

"Valencia es una provincia que conocemos bien ya que a menudo nos ha acogido en La Vuelta. Estamos emocionados con esta salida en Valencia, una ciudad que comparte con nosotros la ilusión por ver consolidarse y crecer a un evento como La Vuelta Femenina by Carrefour.es", aseguró Fernando Escartín, director de la carrera.

128 abandonos en una carrera ciclista popular en Alicante tras anunciarse un control antidopaje

128 abandonos en una carrera ciclista popular en Alicante tras anunciarse un control antidopaje

Actualizado Viernes, 8 marzo 2024 - 10:22

La sexta etapa del Torneo Interclubs del Vinalopó, una prueba ciclista popular disputada este pasado sábado en el municipio alicantino de Villena y sus alrededores, dejó 128 abandonos de un total de 180 participantes, algo que coincidió con el anuncio de un control antidopaje que se iba a realizar en la línea de meta.

La prueba contaba con un recorrido de 91 kilómetros y 1.273 metros de desnivel, pero después de que se expandiera el rumor entre el pelotón de que había un control antidopaje en la línea de meta a todos aquellos que terminaran la prueba hubo varios pinchazos y caídas que provocaron algunos abandonos, hasta 128 en una carrera que sólo terminaron 52 ciclistas.

Tal y como adelantó la revista Ciclo21, el segundo clasificado de la carrera, Álvaro Marzà, deslizó en una publicación en redes sociales que "el control antidoping es igual a pinchazos y retiradas" y afirmó que "no es una fórmula matemática, pero sí la pura realidad", por lo que pidió tomar medidas ante "este chiste".

Tras ello, el propio Torneo Interclubs Vinalopó se enorgulleció en un comunicado de ser un evento "que defiende el ciclismo limpio y justo" y señaló que están "comprometidos con la lucha contra el dopaje", porque es "esencial para mantener la integridad del deporte y proteger la salud de los ciclistas".

"El dopaje es una trampa que da a los ciclistas que lo utilizan una ventaja injusta sobre aquellos que compiten de forma limpia. No solo es una falta de respeto hacia el deporte y sus valores, sino que también puede tener graves consecuencias para la salud de los ciclistas que se dopan", destacó el texto.

Así, la competición dijo "adherirse a las estrictas normas antidopaje de la Unión Ciclista Internacional (UCI)" y subrayó que "todos los participantes en el evento están sujetos a controles antidopaje aleatorios, tanto antes como después de la carrera", organizados y controlados por la Comisión Española para la Lucha Antidopaje en el Deporte (CELAD).

Por ello, agregaron que el dopaje no tiene cabida en el ciclismo y apoyaron a aquellos que compiten "de forma limpia y honesta" para "proteger la integridad del ciclismo".

La UCI anuncia "una revisión" de sus reglas tras el estreno por Vingegaard de un nuevo casco aerodinámico

La UCI anuncia “una revisión” de sus reglas tras el estreno por Vingegaard de un nuevo casco aerodinámico

Actualizado Martes, 5 marzo 2024 - 20:01

Tan espectacular como controvertido, el nuevo casco aerodinámico estrenado esta semana por el equipo Visma-Lease a bike de Jonas Vingegaard plantea un "problema notable", según la Unión Ciclista Internacional (UCI), que anunció este martes una "una revisión de sus reglas".

El martes en la París-Niza los corredores de la formación neerlandesa portaron por segunda vez ese casco de contrarreloj aerodinámico que había causado sensación la víspera durante el prólogo de la Tirreno-Adriático.

La imágenes de Jonas Vingegaard, dos veces ganador del Tour de Francia, luciendo en la cabeza ese complemento que se asemeja, según algunos, a un avión Jumbo, o a la cabeza de un extraterrestre, dieron la vuelta al mundo en las redes sociales. El australiano Sam Welsford, poco seducido por su estética, declaró irónicamente: "Yo dimito".

"Es un excelente casco de contrarreloj, más confortable que otros que he probado en el pasado", defendió Vingegaard este martes en la salida de la segunda etapa de la Tirreno-Adriático. "Es diferente, por supuesto, y yo también sonreí cuando lo descubrí este invierno. Pero uno se ríe menos cuando vemos hasta qué punto es rápido".

Pero el caso no hizo reír a la UCI, que publicó este martes un comunicado en el que anuncia "una revisión de sus reglas en materia de concepción y de utilización de cascos en competición".

Percibiendo una evolución hacia "diseños aún más radicales", la instancia estima que el nuevo casco Visma, pero también los de otros equipos como el Bahrain Victorious, "plantean un problema notable en relación a la tendencia actual que aspira más al rendimiento que a la función primaria de un casco, la seguridad de su portador en caso de caída".

La UCI indicó asimismo que un casco de la marca Specialized que incluye una especie de pasamontañas no podrá ser utilizado en competiciones oficiales a partir del próximo 2 de abril, al considerar que ese pasamontañas se trata de un elemento "no esencial".

El equipo Bora-Hansgrohe de Primoz Roglic y el Soudal-Quick Step de Remco Evenepoel lucían este martes ese casco con pasamontañas durante la tercera etapa, una contrarreloj por equipos en torno a Auxerre.