Arthur Melo, la odisea del ‘Xavi’ brasileño

Arthur Melo, la odisea del 'Xavi' brasileño

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La historia de Arthur Melo en el fútbol europeo no está escribiendo páginas tan brillantes como las que se le auguraban cuando destacaba en las filas del Gremio de Porto Alegre. El centrocampista, cuyo juego comparaban desde Brasil con el de Xavi e incluso con el de Iniesta, por su capacidad para organizar al equipo alrededor del balón, aterrizó en el Camp Nou en verano de 2018. El hecho de que se perdiera la oportunidad de medirse al Real Madrid en la final del Mundial de Clubes de 2017 por lesión, quizás, fue una premonición de lo que le iba a suceder en su etapa barcelonista. Los problemas físicos, unidos a una serie de episodios en los que se llegó a cuestionar su madurez como profesional, marcaron un tiempo que acabó al llegar la temporada 2020-21, con un traspaso por 72 millones de euros a los que podían sumarse hasta 10 más en variables a las filas de una Juventus donde tampoco no ha podido reencontrarse con su mejor versión.

Tras dos primeras temporadas en las que Arthur no estuvo todo lo brillante que habría deseado, el conjunto bianconero apostó por cederlo. Así, en el curso 2022-23 formó parte del Liverpool, pero Jürgen Klopp apenas tuvo opción de tratar de recuperar su gran talento. En esa campaña, tuvo que pasar por el quirófano para solventar una grave lesión muscular, estuvo 146 días de baja y se perdió un total de 26 partidos. Cuando se recuperó, ya no entraba en los planes de un entrenador que, a lo sumo, lo incluyó en alguna de sus convocatorias, pero que no le dio ni un solo minuto de juego con el equipo red. Todo lo que pudo hacer tras recibir el alta fue jugar con el Liverpool sub’21 frente al Leicester sub’21. Nada más. Después de esa experiencia tan tremendamente desoladora, la Vecchia Signora decidió que una nueva cesión era lo que necesitaba el futbolista para reverdecer viejos laureles. La Fiorentina, en este caso, fue su nuevo destino.

En el conjunto viola, a pesar de que los problemas físicos no acabaron de darle del todo la espalda, tuvo mucho más protagonismo que en su etapa en la Premier. En total, jugó 48 partidos, en los que anotó dos goles y repartió cuatro asistencias. Con esas credenciales en el bolsillo, tal vez, pensó que, por fin, podría tener la oportunidad de demostrar su auténtica valía en la Juventus. Su compatriota Thiago Motta, actual técnico bianconero y ex futbolista del Barça, el Atlético, el Inter, el Genoa y el PSG, con todo, le dejó muy claro desde el primer momento que no iba a entrar en sus planes. De hecho, desde su regreso al club, ni siquiera fue convocado para disputar algún partido oficial. Con ese panorama, no le quedaba otra salida que volver a hacer las maletas y buscarse la vida en otro sitio. Durante un tiempo, se especuló con la posibilidad de que el Santos donde Neymar pelea también ahora para volver a ser aquel jugador desequilibrante que sorprendía a propios y extraños fuera su nuevo destino. No obstante, el que acabó por hacerse con sus servicios fue el Girona de Míchel. Por el estilo de juego, por el hecho de haber jugado ya en la Liga en las filas del Barça y porque cree que puede darle el espaldarazo que necesita para volver a su selección.

En los dos primeros partidos, no entró en la convocatoria. En cambio, sí tuvo la oportunidad de debutar con su nueva camiseta en Montilivi frente al Getafe, en un duelo que acabó cayendo del lado que entrena José Bordalás por 1-2. «Hemos visto sus datos de esta semana y está cerca de poder jugar los 90 minutos muy pronto. No sé si jugará de inicio en el Bernabéu, pero está listo para hacerlo», aseguró el técnico del Girona el pasado viernes en rueda de prensa. El entrenador, apenas una semana antes, ya dejaba muy claro todo lo que puede aportar el brasileño. «Con la pelota en los pies, es muy difícil quitársela. Juega hacia delante, tiene movilidad… Es un tipo de jugador que necesitamos mucho, por sus características. Espero su mejor versión pronto. A partir de ahí será, muy importante para nosotros», aseguró.

kpd