“¿El descenso? No, no, ni hablar de ello”. A un lado del teléfono, un directivo de uno de los clubes de Primera implicados en la lucha por la permanencia rechaza mencionar ni un sólo segundo la posibilidad de jugar el año que viene en Segunda División. Unos minutos después, un miembro de otro de los equipos que sufren estos días para mantener la categoría ‘pasa’ del hipotético dinero que recibirían de LaLiga en caso de bajar. “El dinero da igual, importan los puntos de este fin de semana”. “Desc
enso” es una palabra prohibida en cualquier conversación.
Superstición, gafe
y, por encima de todo,
miedo
se unen en un combo que aleja a cualquiera. Nadie quiere hablar públicamente sobre lo que en privado más les atormenta. Pero en el fondo, aunque sea en un despacho aislado de sus ciudades deportivas o estadios, sí hay un pensamiento sobre las consecuencias económicas de lo que suceda este domingo en el fútbol español. Y el resultado es dramático: entre 40 y 50 millones de euros que se dejan de ganar por la diferencia en los ingresos televisivos, un coste de plantilla que en la mayoría de los casos no aguantará la realidad de Segunda y una ayuda de LaLiga que compensa un poco, aunque no demasiado, el golpe de efecto del descenso.
Cádiz, Getafe, Valencia, Almería, Celta y Valladolid
se juegan esta noche mucho más que un partido de fútbol. Se disputan su propia existencia. El
Elche
y el
Espanyol
ya tienen sus dos pies puestos en la
Liga Smartbank
, con todo lo que eso implica, y entre los seis clubes mencionados se decidirá el
tercer sacrificado
hacia el pozo de Segunda. Cualquier combinación se anula
si el Getafe le gana al Valladolid
, que es el que peor lo tiene para salvarse. Necesita ganar sí o sí. Si el Pucela puntúa, el Celta necesitará sumar ante el
Barça
; y si los de
Pezzolano
ganan, los vigueses, el Almería, el Valencia y el Cádiz estarán obligados a alcanzar como mínimo los 42 puntos para sobrevivir.
A partir de ahí, el infierno deportivo y económico. Descender a Segunda es un mazazo emocional para todos, pero hay contextos monetarios que no lo sufren tanto. El
Valladolid
, el
Elche
, el
Almería
e incluso el
Cádiz
, que tienen los presupuestos más bajos de la Liga, no deberían notar tanto el golpe, aunque lo harán, pero para
Celta, Getafe
y especialmente
Valencia
, la caída sería terrorífica.
A la espera de cifras oficiales, de los
1.600 millones
,
aproximados
, que la Liga ha repartido por
derechos de televisión
en el curso 2022-2023, una cantidad similar a la de la próxima temporada, la Primera División se lleva el 90% (1.440) y la
Segunda el 10%
(160), según el Real Decreto Ley 5/2015. De esos 160 de Segunda, se dará una
cantidad fija
para cada uno de los 22 equipos (
5 millones
) que disputen el curso 23-24 y otra
variable
por la
clasificación
de la última temporada, otorgando
7,4
al antepenúltimo de LaLiga 22-23 (el 15,45% del montante total),
6,5
al penúltimo (el 13,64%) y
5,6
al colista (11,82%).
El Valencia, K.O.
La diferencia es abismal. Tanto que el
Valencia
, por ejemplo,
pasaría de ganar 69 a 12,4
, según fuentes y estadísticas consultadas y calculadas por este periódico, en caso de descenso. Lo mismo que el
Celta
, que en Primera recibe
53 millones
, y el
Getafe
, que cobra
54
. El Cádiz, el Valladolid y el Almería, que están en 47 y 45 ‘kilos’ en ingresos, pasarían a
11,5
. Todos verían disminuidos sus cobros en
30 o casi 50 millones
.
Entraría en juego, entonces, la
ayuda al descenso que aporta LaLiga
, fruto del dinero acumulado en el
Fondo de Compensación
, una bolsa a la que cada club aporta el 3,5% de los ingresos televisivos anuales. ¿Pero cómo se reparte y se calcula esa ayuda? Se valora lo siguiente: una cantidad fija correspondiente al
0,35% de los ingresos audiovisuales
del total de LaLiga, el
20% de la media de los ingresos audiovisuales
de dicho equipo en las últimas cinco temporadas, el
5% de los ingresos de cada club
en los últimos cinco cursos y una
compensación del 0,034%
de los importes audiovisuales de Primera por cada una de las campañas consecutivas que el club haya estado en la máxima categoría. Es decir,
Valencia, Celta y Getafe tendrían ayudas más grandes que Almería, Cádiz y Valladolid
(y que Espanyol y Elche) en caso de descenso al haber estado más años seguidos en LaLiga.
Los de Mestalla recibirían una cifra que rondaría los
33 millones
, que unidos a los 12,4 de los derechos audiovisuales sólo les haría perder
24
con respecto a los ingresos televisivos recibidos en Primera. LaLiga ‘
ayudaría’ al Celta con 20
y al
Getafe con 17
, mientras que el Cádiz y el Valladolid se quedarían en 8 y el Almería en 6. El Espanyol, por su parte, sabe que tendrá algo cercano a los 13, por los 7 del Elche.
En total, y contando con esa ayuda,
el Valencia dejaría de ganar por el acuerdo televisivo 24 millones
, siempre hablando de cantidades aproximadas a la espera de las oficiales;
el Celta 21
, el Getafe 25, el Cádiz 17, el Valladolid 15, el Almería 27, el Espanyol 30 y el Elche 28.
Los pericos, por ejemplo,
recibieron 30 millones de ‘ayuda’
en su último descenso en 2020, mientras que el
Valladolid cobró 14
en 2021. Un dinero muy necesario para aguantar la primera temporada en el infierno, pero que llegaría en tres pagos durante la temporada: 30 de octubre, 30 de noviembre y 30 de enero. Esos millones, además,
se convierten en cero si no se consigue el ascenso
al mes de junio siguiente. Sin ayuda de LaLiga, los clubes quedan dependientes únicamente de unos derechos televisivos que distan mucho de los acumulados en Primera. Para cualquiera, ascender en unos meses es vital, por eso lo que suceda este domingo dará un giro de 180 grados al destino que varias ciudades.
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