Sanción, paliza y lesión, la pesadilla vuelve a Lisboa 10 años después: “No hay nada que llorar”

Sanción, paliza y lesión, la pesadilla vuelve a Lisboa 10 años después: "No hay nada que llorar"

“Hay dias que se juega mal”. Lo más obvio suele ser la explicación más sencilla para las cosas y ante el Benfica no hubo otro motivo para que el Atlético de Madrid sufriera su primera derrota de la temporada, no por ello menos dolorosa y así lo explicó Diego Simeone en la rueda de prensa posterior al encuentro.

El técnico argentino no puso paños calientes y, además de recordar que el partido fue malo por parte de todos los jugadores, también se puso a sí mismo como principal culpable de lo ocurrido en Da Luz. “No busquemos excusas, el responsable es el entrenador”, afirmó.

Fueron cuatro goles, como aquella noche hace 10 años. No hizo falta minuto 93. El partido se liquidó antes. Mucho antes. Definitivamente, Lisboa no es una ciudad amable con un Atlético de Madrid que en unas horas salía sancionado y derrotado de la capital portuguesa.

Tres partidos estará sin el fondo sur en liga y tendrá que pagar una sanción de 45.000 euros. Así valoraba el técnico argentino el dictamen del Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol que se hacía público apenas una hora y media antes del encuentro. “Aceptar lo que han dictado, es una gran oportunidad para el club para crecer como entidad”, contó en la entrevista postpartido.

Todo eran malas noticias en el conjunto rojiblanco sin nada bueno que llevarse de Portugal. Marcos Llorente, en una carrera en la primera parte, cayó lesionado llevándose la mano al muslo de la pierna derecha. Pendiente de evolución. El único consuelo es que, sancionado con roja directa en el derbi madrileño, ya no iba a poder disputar el duelo ante la Real Sociedad y, con el parón de por medio, tendrá más tiempo para recuperarse.

La penúltima de las malas noticias es lo abultado del resultado. Parecía que Simeone había vuelto a encontrar la solidez defensiva de otras épocas, había recibido sólo cinco goles en nueve partidos, pero en el décimo llegó la sangría. Cuatro goles en 90 minutos.

Miradas al futuro

Sorprendió que Simeone hubiera hecho debutar esta temporada a Javi Serrano. El canterano solo había jugado en Primera RFEF y de repente se vio sustituyendo a su ídolo y capitán en el centro del campo. No fue él, el problema del Atlético, pero es verdad que cuesta ver a cateranos en encuntros cuesta arriba.

Había dos jugadores que volvían a enfrentarse a un equipo al que llegaron a defender su camiseta, pero con una participación completamente dispar. Mientras que Oblak es una de las leyendas del Benfica, Reinildo apenas disputó un amistoso con las águilas.

Ambos jugadores fueron igual de críticos que su entrenador. “Es fácil la explicación a nuestro partido, parece que no hemos estado aquí”, explicó el esloveno. Por su parte el defensa mozambiqueño comentaba que “había sido un mal día” pero insistía en que el equipo “no tenía tiempo para llorar y había que seguir trabajando”.

kpd