El inglés “ha caído de pie en el vestuario y en Madrid”, le elogia Lucas Vázquez. “Creo que me ficharon para momentos así”, admite Jude.
Cuando Melero López pitó el final del partido y los futbolistas del Real Madrid y el Getafe comenzaron a andar hacia el túnel de vestuarios, Jude Bellingham se separó un poco del grupo y se dirigió hacia el fondo norte del estadio. Empezó a aplaudir a la grada y se quedó un poco en ‘shock’ cuando todo el estadio, al unísono, gritó “¡Jude! ¡Jude! ¡Jude! ¡Jude!“. Detuvo sus pasos y se plantó en el césped, quieto, escuchando a su nueva afición. No había un broche mejor para su primera tarde en el nuevo Santiago Bernabéu. Un coliseo que ahora es suyo.
“Cuando cantaron mi nombre quise parar y escucharles. Me temblaban las piernas. Me ficharon para momentos así”, dijo más tarde en zona mixta. Antes, Bellingham había dado el triunfo al Madrid en el minuto 95, un clásico de Chamartín. Aprovechó un rechace de David Soria a disparo de Lucas Vázquez y anotó su quinto gol en esta Liga. Cinco en cuatro partidos. Números de delantero centro histórico.
Es el pichichi del campeonato y ha participado en seis goles en este arranque. Nadie ha producido tanto en las cinco grandes ligas de Europa este verano y junto con Pepillo (1960-61) y Cristiano Ronaldo (2009-10), es el único jugador en haber visto puerta en sus cuatro primeros partidos ligueros de blanco.
“Jude está con la flechita para arriba. Ha caído de pie en el vestuario, en el campo, en Madrid. Es fantástico y lo aprovecharemos durante muchos años”, le elogió Lucas Vázquez.
“Puede llegar a 15 goles fácilmente”
Más tarde, Carlo Ancelotti reflexionaba sobre la adaptación del inglés, tanto en el vestuario como en el campo, y avisó que “puede llegar a 15 goles fácilmente“. “Es un profesional muy serio y tiene muchos ejemplos dentro de la plantilla porque es un vestuario muy profesional. Se ha adaptado muy bien, hasta se ha ido de vacaciones un par de días con los otros jóvenes del equipo. Me parece todo bien. Estaba muy tranquilo, muy centrado. Tenía muchas ganas de jugar aquí”, aseguró el italiano.
Centrado en lo futbolístico, Carletto deslizó las virtudes de la nueva estrella del Bernabéu: “Es un jugador que aprende muy rápido. No es necesario decirle las cosas muchas veces. Le hemos mostrado videos de los que nos gustaba de él cuando jugaba en el Dortmund y creo que lo que ha cambiado aquí es que se mueve mucho sin balón hacia el área rival. Siempre va hacia adelante, nunca hacia atrás”, explicó.
“Lo más ruidoso que he escuchado nunca”
El gol de Bellingham desató la locura en el nuevo Bernabéu, donde la cubierta retráctil funcionó por primera vez. Falta completar el proceso de montaje de los videomarcadores, pero el estadio se acerca cada día más a lo que se proyectó en su planificación. Dentro, la Grada Fans se expandió por fin por todo el Fondo Sur y se retiró la famosa lona que gobernó esa zona del estadio durante los últimos meses. Y se notó.
“El momento del gol es lo más ruidoso que he escuchado nunca“, admitió Bellingham. En la celebración de su tanto, el inglés se abrazó con los servicios médicos del estadio y Rüdiger puso la nota cómica abalanzándose sobre sus compañeros y cayendo sobre una de las sillas anexas al césped. “Cuando dominamos, somos imparables. Con estos compañeros… Me dan una energía positiva y hacen que juegue mejor”, reconoció el ex del Dortmund, que valoró el “trabajo mental” que ha realizado para estar más atento sobre el césped, aprovecharse de las segundas jugadas y anotar más goles: “Intuí bien dónde podía caer la pelota”.
Bellingham, a pesar de todo, mantiene “los pies en el suelo“. “Es difícil explicar con palabras todo esto. No sé qué he hecho para merecer el cariño de la afición, espero marcar más. Es un sueño hecho realidad”.