Las razones por las que Mateu Alemany deja el Barça: injerencias, penurias económicas y el peso de los asesores del presidente

Las razones por las que Mateu Alemany deja el Barça: injerencias, penurias económicas y el peso de los asesores del presidente

Actualizado

El ejecutivo mantiene una “muy buena” relación con Laporta, de ahí que le prometiera ayudar este verano. En cambio, han tomado relevancia agentes y asesores del presidente que restaban valor al trabajo del director de fútbol

Joan Laporta y Mateu Alemany.NURPHOTO

La noche en la que el Barcelona bien pudo haber comenzado a celebrar el título de Liga después de ganar a Osasuna y ver cómo el Real Madrid perdía en Anoeta, tuvo que notificar la renuncia de Mateu Alemany como director de fútbol, que no único responsable de la política deportiva de una entidad estrangulada por las deudas y donde son muchos quienes intentan intervenir. Son varias las razones por las que Alemany prefiere iniciar una aventura junto al técnico Unai Emery en el Aston Villa, séptimo clasificado de la Premier League. Aunque, según las fuentes recopiladas por este diario, la necesidad de libertad para tomar decisiones ejecutivas planificadas en un Barça malacostumbrado a las injerencias, y la oferta del club inglés de ofrecerle plenos poderes ejecutivos -pretende que tenga una autoridad similar a la de Ferran Soriano en la estructura del Manchester City- han inclinado la balanza.

Fue el pasado noviembre cuando el Aston Villa inició sus contactos con Mateu Alemany, poco después de que Unai Emery abandonara el Villarreal para asumir el banquillo de los villanos. Damià Vidagany, quien fuera alto ejecutivo del Valencia CF, es ahora mano derecha del técnico vasco en el Aston Villa. Éste compartió vivencias con Alemany en el club valencianista, y fue también el hilo de unión con Emery, quien en los últimos años había labrado una relación personal con el mallorquín.

Alemany, que ha acelerado las conversaciones en las últimas semanas con el club propiedad del magnate egipcio Nassef Sawiris, reparó en que no solo Laporta, sino algunas personas próximas al presidente, comenzaban a estar al tanto de su salida. De ahí que todo se avanzara mediante un comunicado a deshoras, sin filtraciones de por medio.

Las fuentes consultadas mantienen que la relación entre Mateu Alemany y Joan Laporta es «muy buena». Y de ahí que el director de fútbol se comprometiera a cerrar cuantas operaciones pudiera antes del 30 de junio, e incluso mantener su ayuda durante todo el verano. Algo que, según admiten en los despachos del Camp Nou, tiene más que ver con la cordialidad que con la realidad. Alemany, eso sí, se comprometió a dejar al Barcelona dentro de los límites del fair play financiero mediante el plan de viabilidad -basado en profundos recortes salariales y ventas- que LaLiga tiene bajo estudio.

Recortes

Es éste el verano en que el Barcelona debe reducir, al menos, 200 millones de euros de su masa salarial si pretende, no solo acometer nuevas incorporaciones, sino asegurar la continuidad de todos esos jugadores que se mantienen en el limbo. Y en esa lista está Gavi, que podrá negociar con quien quiera a partir del 30 de junio si el club azulgrana no logra inscribirlo como futbolista del primer equipo. Pero también otros con las renovaciones por validar, como Ronald Araujo, Sergi Roberto o Marcos Alonso; o aún por firmar, como Alejandro Balde o Iñaki Peña.

Aunque nada condiciona tanto como la obsesión de Joan Laporta por conseguir el regreso de Leo Messi. La contratación del delantero argentino, del que ya reniegan en Qatar y el PSG por su publicitado cortejo con Arabia Saudí, más allá de que la Liga lo aprobara o de que el Barcelona pudiera sostener su salario por muchos patrocinadores e inversores que lograra, entraría en contradicción con la política de recortes defendida por Mateu Alemany. Un plan en el que se ven afectadas las diferentes secciones del club, que se exponen a perder capacidad competitiva. La directiva azulgrana, además, ya decidió la pasada semana deshacerse de Barça TV y de sus 120 empleados.

Si bien la estima de Laporta con Alemany era compartida, el ejecutivo era también consciente de la creciente incidencia en el club de los asesores presidenciales: internos, pero sobre todo externos, hasta el punto de que hay quien habla ya de una «presidencia en la sombra». Desde esos sectores se restaba trascendencia al valor de Alemany, pese a ser éste la correa de transmisión con LaLiga de Javier Tebas. El peso de los agentes que mantienen estrechos lazos con el presidente, como Jorge Mendes y Pini Zahavi, se ha hecho también cada vez más evidente.

Otro de ellos, en este caso el ex futbolista Deco, campeón de Europa con el Barcelona en 2006, es quien mejor se ha posicionado para ocupar el puesto de Mateu Alemany al frente de la dirección deportiva, según avanzó RAC1. Deco, que fue quien convenció a Laporta de la conveniencia de la contratación del brasileño Raphinha -pese a que Dembélé ya estaba renovado- y cuyas comisiones nunca fueron hechas públicas, se ocupa oficialmente del mercado brasileño para el club azulgrana.

Con todo, el actual secretario técnico del Barcelona, Jordi Cruyff, se ha tomado un periodo de reflexión. Concluye su contrató el próximo 30 de junio, y pese a que la entidad azulgrana pretende que continúe, él prefiere aguardar acontecimientos y que concluya la temporada para tomar una decisión definitiva.

kpd