La RFEF podrá tener nuevo presidente entre febrero y marzo de 2024

La RFEF podrá tener nuevo presidente entre febrero y marzo de 2024

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El Consejo Superior de Deportes, que presentaba la nueva orden ministerial para las elecciones federativas, ha confirmado que este miercoles se firma la autorización para que pueda haber elecciones en este primer trimestre

El presidente del CSD, Víctor Francos, en una reciente visita al País Vasco.David GonzalezAraba

El presidente del Consejo Superior de Deportes (CSD), Víctor Francos, ha confirmado que este miercoles ha firmado la autorización para que se produzcan las elecciones para la Real Federación Española de Fútbol (RFEF). El representante del máximo organismo deportivo, en una reunión con periodistas, ha expresado que el proceso electoral podrá producirse entre mediados de febrero y principios de marzo de 2024.

Habría una posibilidad de que se celebraran antes, según se ha informado en esa reunión, y es que el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAD) así lo decida. El CSD ha elevado este miércoles a este organismo la denuncia que le presentó Miguel Ángel Galán, presidente de la escuela de entrenadores CENAFE, en la que acusaba a Pedro Rocha, presidente interino de la RFEF de “infracciones muy graves”.

A su juicio Rocha debía convocar elecciones de manera inminente tras la dimisión de Luis Rubiales según el artículo 31.8 de los estatutos de la RFEF. No obstante, el CSD cree que no hay ninguna normativa que establezca un plazo para convocar elecciones o que estas deban ser inmediatas.

El anuncio se ha realizado en un encuentro con periodistas para la presentación del Proyecto de Orden por el que se regulan los procesos electorales en las Federaciones Deportivas Españolas. Un proyecto que, según sus plazos de tramitación, será vinculante para todas los comicios que se realicen en 2024.

Este proyecto, que se basa en cinco ejes: democratización, buen gobierno, igualdad, inclusión y transparencia, se gestó en agosto de 2023, poco antes de la polémica del beso no consentido de Luis Rubiales a Jenni Hermoso, pero ha ido evolucionando con las circunstancias que ha generado el caso Rubiales.

Antirubiales

Respecto al buen gobierno, por ejemplo, se impide que puedan ser candidatos a la Asamblea General personas que incurran en causas de incapacidad, incompatibilidad, ineligibilidad o hayan sido condenados por sentencia firme por los órganos disciplinarios de federaciones nacionales o internacionales o por tribunales deportivos nacionales o internacionales.

También se intenta limitar el clientelismo en los puestos federativos eliminando los cargos natos de las Asambleas de manera que todos sus miembros deberán ser electos. Además, se reducen los requisitos para ser un miembro elegible o elector para facilitar el acceso a cargos representativos. Ahora basta que sean federados mayores de edad que haya participado en alguna competición o actividad de su federación.

Igualdad

Una de las partes sustanaciales de esta nueva orden, que sustituye a otra de 2015, es la promoción de la igualdad. En este borrador, que ya se ha enviado a todos los interesados (federaciones, clubes, estamentos, deportistas…) se promociona la presencia de mujeres en las asambleas federativas.

Se garantizará una mayor presencia de mujeres en las federaciones de acuerdo al rango más alto del porcentaje de licencias femeninas de cada deporte. Es decir, en estamentos con un número de licencias femeninas entre el 0 y el 10%, deberán ser elegidas un 10% de mujeres; si son entre un 10% y un 25%, un 25% y superior al 25%, este porcentaje debe ser del 40%.

Por último, este proyecto, que si sigue los plazos normales deberá ser aprobado a finales de noviembre, recoge que los sufragios deberán ser iguales, libres, directos y secretos. Esos votos tendrán que ser ratificados con un documento nacional de identidad o pasaporte.

Para el CSD esta orden quiere democratizar y hacer más transparentes los procesos electorales federativos y poner a los deportistas en el centro de los mismos otorgándoles más peso. Sin olvidar, claro, la necesidad de poner coto a casos como el de Rubiales.

kpd