Directivos, técnicos y agentes analizan al conjunto catalán, gran revelación de LaLiga que forma parte del City Football Group. “Míchel va de cara y se ha ganado a todos”, admite Porcel, preparador físcio del equipo.
El City domina la Premier League, el Bayern la Bundesliga y el Inter de Milán la Serie A. Tres equipos históricos para tres de las grandes ligas de Europa. La cuarta, eso sí, pertenece de momento al pequeño Girona, principal revelación de la temporada en el fútbol continental. El líder de LaLiga recibe esta tarde al Real Madrid con el foco mediático sobre su espalda. Míchel es su guía, Pere Guardiola y Kike Cárcel son sus arquitectos y el City Football Group de Abu Dhabi, el mismo que ganó la Champions desde Manchester, su colchón económico.
Para entender el éxito actual del Girona hay que viajar hasta octubre del año pasado, a la jornada 10 del campeonato. El equipo, que acababa de ascender a Primera, estaba en puestos de descenso y vivía una pequeña crisis. Destituir al entrenador parecía la solución más fácil. Habían perdido de forma consecutiva contra Betis, Real Sociedad, Atléticoy Almería, empataron contra Cádiz y Osasuna y tocaba visitar el Bernabéu. Casi jaque mate. Los de Míchel, sin embargo, sacaron un 1-1 que espoleó su ánimo hasta acariciar Europa al final de la temporada.
«Ni se me pasa por la cabeza», cuentan que decía aquel octubre Kike Cárcel por los pasillos de Montílivi cuando le preguntaban sobre la destitución de Míchel. Hoy ese directivo, ese entrenador y ese equipo son líderes de Primera. «La clave es la conexión entre el director deportivo y el entrenador. No se encuentra en todos los clubes», resume un agente que tiene trato con la dirección.
“Hemos encontrado el equilibrio”
Desde el cuerpo técnico se asume la sorpresa por el liderato, pero también se reconoce el trabajo que llevan haciendo más de dos temporadas. «Es el tercer año con nosotros para muchos jugadores, el núcleo se mantiene, tienen asumida la idea de juego y los que han llegado son inteligentes», admite David Porcel, preparador físico del Girona, que reconoce que este verano no han hecho «nada diferente». «A nivel táctico nuestros mejores momentos siempre son en las segundas vueltas, pero este año eso ya lo teníamos ganado porque nos conocían. Hemos encontrado un equilibrio entre juventud y experiencia», añade.
«Hacemos lo mismo de siempre. Nos gusta ser cercano al jugador, ser gente normal y que el futbolista esté a gusto. Y creo que la dinámica que creamos en el día a día es muy buena. La clave es que en el vestuario se exigen mucho, pero entrenan muy bien y hay un gran ambiente. A veces no hay esa unión en los equipos y aquí sí. En la dirección deportiva también se mira mucho eso, que sea un jugador diferencial pero que también sume dentro y fuera, que sean buenas personas», explica Porcel.
Savinho, desde el Troyes vía Abu Dhabi
Este verano el Girona vendió a Santiago Bueno y a Oriol Romeu, además de perder a piezas clave que estaban cedidas como el Taty Castellanos, que marcó 4 goles al Madrid, Riquelme o Terrats. Pero en su lugar, la secretaría técnica se ha sacado de la manga a Savinho, revelación del curso, el ucraniano Dovbyk, Blind, Gazzaniga, Eric García o Pablo Torre. «El venir a un equipo más humilde les puede hacer pensar que van a jugar hagan lo que hagan, pero no, ven que cuesta y que hay que currar», declara Porcel.
La relación con el Barça es buena, pero la llave la tiene, lógicamente, el City Group. Savinho fue el fichaje más caro en la historia del Troyes, club que también forma parte del conglomerado de los jeques, y este verano ha aterrizado como cedido. Y desde Manchester, organización principal del City Group, han llegado en los últimos meses Yangel Herrera (fichado en propiedad) y Yan Couto en préstamo. Todos indiscutibles para Míchel.
Fuentes cercanas al club insisten en que hay «una conexión permanente con Abu Dhabi», pero que las decisiones recaen en Kike Cárcel. «Es el director deportivo con más talento de LaLiga», asegura un agente. «A Kike nadie le impone un jugador. Tiene autonomía. Si no le gusta, no lo ficha», advierte. Por encima de él están Delfí Geli, presidente, y Pere Guardiola, hermano de Pep y presidente del Consejo de Administración.
El cóctel deportivo y económico ha resultado en el equipo más atractivo del fútbol español. «Nuestra gran virtud es que podemos jugar a lo que pida el partido por la variedad de jugadores que tenemos», admite Porcel, que elogia el mando de Míchel. «Va de cara y se los gana con eso. Ha conseguido que tengamos una identidad». Una identidad… Y el liderato.
