Los detenidos por supuestamente colgar un muñeco en un puente con la camiseta de Vinicius durante la madrugada del pasado 26 de enero han sido imputados por delitos de odio y contra la integridad moral , según informan fuentes jurídicas.
Los arrestados han sido puestos en libertad provisional y se les prohíbe acercarse y comunicarse con el jugador como medida cautelar. Además, no pueden aproximarse a menos de 1.000 metros de la ciudad deportiva del Real Madrid, donde ocurrieron los hechos, ni a ningún estadio de Primera División durnate la celebración de los partidos.
Los cuatro, de los que tres de ellos son ultras del atlético de Madrid, se han acogido a su derecho a no declarar tras ser detenidos por la Policía a partir del rastreo de la fotografía del muñeco colgando de un puente que uno de ellos compartió en redes sociales.
Estas detenciones tuvieron lugar en medio del escándalo por los insultos racistas que Vinicius recibió durante su último partido ante el Valencia en Mestalla. La Fiscalía valenciana abrió diligencias y tres jóvenes de entre 18 y 21 años fueron detenidos e investigados por un presunto delito contra los derechos fundamentales y las libertades públicas. Además, Competición sancionó al Valencia con el cierre de su grada de animación durante los próximos cinco partidos.
«Hace un año nadie daba un duro por nosotras». Esa es la reflexión con la que la capitana, Irene Paredes, verbalizaba el cambio en España, capaz de ganar un Mundial y la primera Nations League en apenas seis meses. El 15 de septiembre nadie lo daba por Montse Tomé, pero ahora la asturiana se ha ganado una vida extra. La selección ha crecido pese a arrastrar las heridas del caso Rubiales, es más fuerte mentalmente y mejor en todas las facetas del juego, algo que no ha pasado desapercibido para el director deportivo, Markel Zubizarreta.
Para saber más
Su llegada a la RFEF se dio dos meses después de que el presidente interino, Pedro Rocha, señalara a Tomé como la sucesora de Jorge Vilda. Luis Rubiales la había puesto en el disparadero al nombrala in voce directora deportiva en un polémico discurso aplaudido y, aunque ella renunció, su contratación para el banquillo se vio con recelo. La convocatoria del 15 de septiembre, sus explicaciones de la ausenciade Jenni Hermoso, - «para protegerla»-, y la madrugada en Oliva le auguraban un futuro muy breve. Sin embargo, desde un perfil discreto, ha ido trabajando todo lo que no eran sus conocimientos. Apoyada por el psicológo hasta en las entrevistas personales, ha ido dominando la escena pública, relajando una actitud defensiva y aprendiendo a sortear el ruido que la ha acompañado. La primera carcajada en público la mostró antes de la semifinal ante Países Bajos.
Cuando la colegiada sueca pitó el final ante Francia, a Tomé la engulló en un abrazo su cuerpo técnico, unos estrechos colaboradores que han ido creciendo al ritmo que la Federación ha ido aumentado la profesionalizando que rodea a las campeonas. «Mucha gente opinó de mí sin conocerme», decía la asturiana con la medalla al cuello y la camiseta de campeonas. Admite ese desconocimiento su jefe, Markel Zubizarreta, que tendrá que decidir sobre su futuro cuando acaben los Juegos de París, que es hasta cuando tiene contrato, si las elecciones en la RFEF no se lo impiden. El director deportivo llegó al cargo con una idea que ahora está madurando. «Estamos en la RFEF en un momento que no nos permite planificar más allá de las elecciones, pero refuerza a todas las personas que han formado parte, a las jugadoras y al cuerpo técnico», dijo.
Tomé, junto a Jenni Hermoso, en la recepción en Moncloa.EFE
A Zubizarreta hay un aspecto que le ha sorprendido especialmente de Tomé y su staff. «No la concocía, sólo como segunda cuando venía a ver partidos, pero a un cuerpo técnico hasta que no lo ves trabajar... Hemos tenido dos días para preparar esta final y en este contexto, este cuerpo técnico es élite», admitió.
El 22 de diciembre se puso Tomé a trabajar en esta fase final, cuando la derrota ante Italia había sembrado las primeras dudas. Una polémica con Aitana Bonmatí y un error que hizo a España jugar en inferioridad unos minutos puso otra vez el foco en el lío más que en el fútbol. Sin embargo, la desconfianza se fue diluyendo. «El vestuario ahora está feliz», reconocía la seleccionadora en una entrevista este diario. El crecimiento del grupo, procur¡ando la entrenadora guardar un perfil bajísimo para dar todo el protagonismo a sus jugadoras, ha sorprendido al director deportivo tanto como que el equipo ejecute con precisión los planes de Tomé. «Habla muy bien de la capacidad que tienen estas futbolistas para asimilarlos y de la del staff para transmitirlo. Recuerdo aquella noche en Oliva y que este grupo humano, jugadoras y cuerpo técnico, haya pasado de aquello a esto es una bestialidad».
PROCESO ELECTORAL
Tomé tiene contrato hasta después de los Juegos, y tendrá que centrarse en la clasificación para la próxima Eurocopa de Suiza, que arrancará a finales de marzo, pero no parece que, al contrario que con De la Fuente, haya planes de ampliar su contrato. Zubizarreta advierte de que debe esperar. Y es que la RFEF parece abocada a un doble proceso electoral.
Lo quiso evitar Rocha en septiembre, cuando algunos presidentes territoriales le avisaron de que los estatutos obligaban a elegir en asamblea al sustituto de Rubiales. No las convocó con la esperanza de que el CSD adelantara las elecciones de mandato, pero ahora puede verse forzado para provocar una impugnación. Eso puede obligar a la RFEF a dos procesos: el primero, antes de junio, para que los actuales asambleístas ratifique a Rocha, u otro de los miembros, en la presidencia. El segundo, en el cuarto trimestre, para renovar toda la asamblea y siendo ya un proceso abierto a nuevos candidatos.
GP de Gran Bretaña
JAVIER SÁNCHEZ
Enviado especial
@javisanchez
Silverstone
Actualizado Viernes,
7
julio
2023
-
22:51El avance de los simuladores revoluciona la preparación. Expertos...
A última hora de la noche en Jeddah, poco después de caer la bandera a cuadros, la humedad aún rondaba el 72% y la temperatura se mantenía en torno a los 28ºC. Fernando Alonso recorría el paddock visiblemente fatigado, sin ocultar su decepción tras otro domingo demasiado lejos de las expectativas. Por quinta carrera consecutiva, el ovetense terminaba fuera de los puntos, igualando su arranque del Mundial 2017 con McLaren-Honda.
"De algún modo es la peor posición en la que puedes quedar porque estás a nada, pero igual ahora descalifican a alguien y cogemos unos puntos", ironizó Alonso tras su undécimo puesto en la meta, justo por detrás de Isack Hadjar (Racing Bulls). Este sarcasmo sólo podía interpretarse a la luz de su hartazgo por la situación de Aston Martin.
Como ya se vislumbraba desde el viernes, el AMR25 fue el coche más lento en el último sector del Corniche Circuit. En las largas rectas, su falta de velocidad punta echaba por tierra cualquier opción de batalla ante Oliver Bearman (Haas) o Liam Lawson (Racing Bulls). Sólo una sanción de 10 segundos al neozelandés, por ganar ventaja por fuera de los límites de pista, dio un pequeño respiro a Alonso en el tramo final de la carrera.
"El nivel de riesgo es increíble"
"Hacer 50 vueltas de clasificación te consume por dentro, pero no sé correr de otra manera", manifestó el doble ganador en Le Mans, muy preocupado por lo que aguarda en las 19 carreras restantes. "Será complicado sumar algún punto, pero lo intentaremos", presagió. Tras 21 temporadas en el Gran Circo, el peor registro de Alonso sigue siendo el de 2015 con McLaren-Honda. Entonces sumó sólo 11 puntos (10 en el GP de Hungría y uno en el GP de Gran Bretaña).
Alonso dejó registro de sus pésimas sensaciones a través de la radio. "No puedo seguir este ritmo. Es una locura. El nivel de riesgo es increíble", admitió durante el primer tramo de la carrera. Unas vueltas después se ratificó con otro mensaje: "En el momento en que pierdo el DRS estoy muerto". Y su cierre también resultó desalentador: "Creo que no volveré a hacer una carrera como la de hoy, nunca, 25 años".
De nada había servido su fantástica reacción en la salida, cuando fue el más rápido en alcanzar los 100 km/h (2,8 segundos) e incluso pudo trepar hasta la décima plaza, tras ganar la posición a Alex Albon y tras los abandonos de Pierre Gasly y Yuki Tsunoda. El continuo subviraje le obligaba a un tremendo esfuerzo, por lo que volvió a reiterar sus quejas ante los ingenieros: "¿Está bien el coche? No ahora, sino desde el principio de la carrera. El agarre no es normal".
Alonso, por delante de Ocon, el domingo en Jeddah.ASTON MARTIN
Todo empeoró aún al entrar a renovar los neumáticos, después de 19 vueltas con el compuesto medio. Un fallo de los mecánicos, que no sincronizaron correctamente el momento de colocar las ruedas delanteras retrasó el pit-stop durante algo más de cuatro segundos. La tercera peor parada del domingo, sólo por detrás de las dos de Williams.
Y aún le quedaba por vivir su momento más peligroso del fin de semana, frente a Gabriel Bortoleto. "Escogí ir por fuera, que era un poco arriesgado, y él no me vio. Luego tuve que atajar por la primera curva y devolverle la primera posición para evitar sanciones. Son cosas que pasan, pero es culpa nuestra por tener que pelear contra los Sauber", analizó Fernando. "Ahora volaremos juntos a casa, así que igual se queda sin cenar", bromeó sobre el rookie brasileño, que pertenece a A14 Management, la agencia de representación de Alonso.
El récord de Stroll
La pugna entre Aston Martin frente a Sauber vivió otro capítulo gracias a Nico Hulkenberg y Lance Stroll, separados en la meta por menos de un segundo de diferencia. Otro golpe en la moral del canadiense, que este fin de semana se convirtió en el piloto más veces eliminado en la Q1 (75), superando el anterior registro de Kevin Magnussen. "Esto depende del coche. Coloca a los pilotos de McLaren durante 10 años en un Sauber y serán ellos quienes tengan ese récord", comentó el sábado. La peor noticia para el hijo del dueño de la escudería de Silverston es que en Jeddah fue él quien volvió a perder su batalla frente al peor equipo del Mundial.
Pese a un panorama tan desolador, los máximos responsables de Aston Martin optaron por el enésimo mensaje de calma. "Ha sido una carrera muy bien gestionada, pero al final nos hemos quedado sin puntuar", dijo Andy Cowell, CEO de la escudería. "Ahora debemos entender cómo mejorar en todas las áreas y sacar más rendimiento al coche", añadió el británico sobre sus previsiones para el GP de Miami, donde no se esperan actualizaciones en el AMR25.