Iñaki Peña, un clon de Víctor Valdés: las claves de su ascenso en el Barça

Iñaki Peña, un clon de Víctor Valdés: las claves de su ascenso en el Barça

Barcelona – Girona (21:00 h.)

Actualizado

El portero, de 24 años, completó actuaciones muy convincentes ante Oporto y Atlético. “No es una opción fichar”, asegura Xavi.

Iñaki Peña, durante el último entrenamiento del Barça.EFE

Desde que Iñaki Peña (Alicante, 1999) comenzó a mirarse en el espejo de Víctor Valdés hasta que ha logrado hacerse con la titularidad en la portería del Barça han pasado ya unos cuantos años. El canterano, quien deberá encargarse de defender la meta mientras dure la baja de Marc-André ter Stegen, operado de sus problemas en las lumbares esta misma semana, se fijó mucho en el de L’Hospitalet cuando empezó a ponerse bajo los palos. Y hoy, la confianza de Xavi Hernández en sus posibilidades es máxima. «No es una opción fichar a otro portero», sentenció el técnico en la rueda de prensa previa al partido frente al sorprendente Girona en Montjuïc.

Su estilo de juego, extremadamente cómodo al desenvolverse con los pies, con grandes reflejos, agilidad explosiva y capaz de aguantar perfectamente al delantero en el uno contra uno, desde luego, recuerda, y mucho, al de aquel arquero que fue determinante tanto bajo las órdenes de Frank Rijkaard como de Pep Guardiola para que el club viviera unos años de ensueño.

Ambos, incluso, tienen una complexión muy parecida. Alrededor del 1,85 de estatura, algo que algunos consideran «bajito» para ser portero. Las paradas de Valdés, en su momento, como las de Peña se encargan de desmentirlo. Y ahí también se sumaría otra suerte de clon del de L’Hospitalet forjado a su vez en La Masia: un Arnau Tenas que aprovechó la expulsión de Gianluigi Donnarumma para dejar claro que no se marchó al PSG a calentar banquillo.

En La Masia desde 2012

A pesar de que Peña dio sus primeros pasos en la cantera del Villarreal, conjunto al que llegó procedente del Alicante, en cuanto llegó la propuesta del Barça no tuvo dudas. De nada le sirvió a la entidad castellonense comprometerse a hacer todo un esfuerzo económico para retenerlo. La decisión estaba tomada: nada ni nadie le apartaría de perseguir su sueño de hacerse con un nombre y ganar títulos en el Barça. En 2012 llegó a La Masia, donde siempre hizo gala de un carácter tranquilo y discreto que le permitió llevarse bien con todo el mundo, tanto con sus compañeros como con los responsables de su formación.

Paso a paso, fue escalando puestos en la cantera barcelonista. Hasta que, por supuesto, acabaron por abrírsele de par en par las puertas del primer equipo. Un auténtico caramelo, aunque quizás un poco envenenado. Desbancar a Ter Stegen, uno de los mejores porteros del mundo cuando el físico le acompaña, tal y como demostró el curso pasado, iba a ser una labor titánica. Por eso, en cuanto tuvo la oportunidad, aceptó marcharse cedido a un Galatasaray en el que Domènec Torrent le esperaba con los brazos abiertos.

Su tan deseado debut en el Camp Nou, aunque fuera enfundado en la elástica del equipo turco en la ida de los octavos de la Europa League 2021-22, fue sencillamente espectacular. Una y otra vez se encargó de frustrar los acercamientos de los que, hasta no hacía tanto, habían sido sus compañeros y dejó su portería a cero. En Estambul, no obstante, los de Xavi serían finalmente capaces de sellar su pase de ronda con un trabajado triunfo (1-2).

Ampliación de contrato

Peña siempre ha soñado con ser el portero titular del Barça. Y carácter, desde luego, no le falta. A principios de este año, con su renovación prácticamente cerrada, estuvo a punto de no firmarla tras verse desbancado por Ter Stegen con vistas al duelo con la Real Sociedad en la Copa del Rey. Finalmente, tras hablar con Xavi sobre su situación, rubricó la ampliación de su contrato.

Y ahora, con las grandes actuaciones firmadas tanto frente al Oporto en la Champions (2-1) como ante el Atlético en la Liga (1-1), tras marcharse de Vallecas con sensaciones agridulces por el empate cedido ante el Rayo (1-1), está por fin viendo cumplido su sueño. Un sueño que se prolongará, por lo menos, mientras dure la baja de Ter Stegen, cuyo regreso, en principio, podría retrasarse, en el mejor de los casos, hasta la vuelta de los octavos de la máxima competición europea.

kpd