El delantero del Barcelona Ferran Torres ha sido intervenido quirúrgicamente de urgencia este miércoles por una cuadro de apendicitis de forma satisfactoria, según ha informado la entidad azulgrana.
La operación ha sido realizada por los doctores Coroleu y Borras en el Hospital de Barcelona bajo la supervisión de los servicios médicos del club.
Así pues, el delantero barcelonista, que se había consolidado en la punta de ataque en las últimas semanas por los problemas físicos del titular habitual, Robert Lewandowski, causará baja en el derbi de este jueves frente al Espanyol en el RCDE Stadium en la antepenúltima jornada de LaLiga EA Sports. La victoria significaría el título liguero para el cub azulgrana.
«Su hambre es de un jugador de 18 años». Esta frase de Roberto Martínez, seleccionador de Portugal, encierra parte de la explicación de por qué Cristiano Ronaldo sigue siendo una estrella que brillará en la Eurocopa con 39 años y un sinfín de récords a sus espaldas. Mientras emerge una nueva generación liderada por Kylian Mbappé o Jude Bellingham, el portugués, pese a su desaparición de las grandes ligas y el escaparate de la Champions con la marcha a Arabia Saudí, sigue dejando huella en la historia del fútbol. Sin la responsabilidad de ser el único jugador que debe tirar de Portugal, se presenta en el que quizá sea su último gran torneo internacional dispuesto agrandar aún más su enorme leyenda.
Llega a esta Eurocopa, la sexta de su carrera, con 35 goles en el Al-Nassr, un nuevo registro histórico en Arabia Saudí que le da la Bota de Oro del campeonato, y con la amargura de haber enviado al poste el penalti que le privó de ganar también la Copa y firmar un doblete. Es ese gen competitivo que hace llorar al cinco veces Balón de Oro lo que le mantiene vivo en su selección. «Nunca he trabajado con un jugador que muestre tanto sacrificio en su día a día. Tiene el deseo de ser el mejor en cada entrenamiento», dijo el seleccionador luso a los pocos días de convivir con él en las primeras concentraciones.
Ésa es la clave que ha llevado a Cristiano a sumar 207 partidos con la camiseta nacional, algo que nadie nunca había hecho. 196 había logrado el kuwaití Al Mutawa y se quedará lejos. Sólo con la fase de grupos, la cifra aumentará. De momento ya es el único jugador que ha disputado seis fases finales desde que Luiz Felipe Scolari le hizo de debutar en 2003.
Esperan los portugueses que también fulmine su registro anotador, que ya va por 130 goles. Con 14 tantos es el máximo goleador histórico en los campeonatos de Europa, el único que ha logrado un hat trick en tres ediciones consecutivas del torneo (2012, 2016 y 2020). Su último gol en una fase final se lo marcó a Francia con 36 años y 138 días. Cada vez que Cristiano huele el momento decisivo de una gran competición, se va con goles. Lo ha hecho en las diez que ha participado, fueran Mundiales o Eurocopas. Estos registros podrán caer con más facilidad ahora de Roberto Martínez le asentará en el área, aprovechando la inteligencia de sus movimientos, su definición y hasta juego aéreo.
Será uno de los tres estiletes con los que Portugal pretende, después de una clasificación impecable, creer en el torneo y acercarse a la Copa que sólo ha levantado una vez en su historia, en 2016 ante Francia en París. Aquello supuso sacarse la espina que Grecia les clavó en 2004 arrebatándole el título en Lisboa, en un partido donde un jovencísimo Ronaldo no pudo evitarlo.
Modric, Kross y Lewandowski
No es la única estrella que apura los destellos con su selección. En Croacia lo hará Luka Modric. No quiere ponerle fecha a su adiós, pero camino de los 39 años, el capitán sabe que se acerca. Subcampeón del Mundo en Rusia en 2018 y semifinalista en Qatar, donde necesitó una repesca para clasificarse, España le arrebató la posibilidad de alzar la Nations League el pasado mes de junio y ahora quiere jugar sus cartas en esta Euro, otra vez con España de por medio.
Su liderazgo, en el campo y fuera, es indiscutible y el relevo generacional, imposible. Modric tenía en la cabeza esta competición, a la que ha tratado de llegar listo pese a su menor protagonismo en el Real Madrid y buscará salir del equipo nacional con el mayor éxito posible.
Más inesperado ha sido para Toni Kloss ponerse de nuevo la camiseta de Alemania. El centrocampista, en uno de los momentos más dulces de su carrera a 34 años, aceptó la propuesta del seleccionador Julian Nagelsmann para unirse de nuevo a la Mannschaft como broche final a su carrera. Colgará las botas después de este torneo en el sueñan en llegar muy lejos después de varapalo que supuso la eliminación en Qatar en la fase de grupos. «Si no pensara que es posible ganar esta Eurocopa no habría vuelto. Tengo hambre y, aunque terminar mi carrera con una Champions y una Eurocopa podría ser casi cursi, ganar este torneo es lo que pretendo», confesaba el alemán horas antes del partido inaugural frente a Escocia.
Kross no estuvo en Qatar, pero sí Robert Lewandowski liderando a una Polonia que necesitó una repesca para clasificarse y cayó en octavos ante Francia. Nadie le discute el brazalete al delantero del Barça porque, con 35 años, es el futbolista con más internacionalidades (148) y con más goles (82), pero arrancará la competición con molestias musculares.
Nadie puede cuestionar tampoco a Antoine Griezmman en Francia. Pese a que los focos están siempre sobre en Mbappé, el atlético quiere no sólo volver a ser campeón con 33 años sino brillar como lo hizo en Rusia o en Qatar y Deschamps está dispuesto a empujarle para ello.
Tan cerca del adiós nacional como el galo podría estar Kevin De Bruyne. El capitán de los diablos rojos busca un protagonismo para Bélgica que, pese a partir como favorita en varios torneos, no ha conseguido dar el salto definitivo. Ahora lo hace, además, sin Courtois, fuera de lista por disputas con el seleccionador. A sus 32 años, y aunque sólo queden dos para el Mundial de EEUU, México y Canadá, afronta el final de su etapa en el City y se abre a la puerta al exotismo, y el poder de los petrodólares, de Arabia.
Estos jugadores son las banderas de sus selecciones. En algunos casos se prepara su sucesión, en otros el vacío será inmenso.
No había terminado de dejar la maleta en casa tras un mes ayudando como buzo de rescate en las inundaciones de Dajla (Marruecos) cuando Eduardo Blasco recibió una llamada de un compañero del equipo del Club Natación Aldaia: "Todo está destruido". Era 30 de octubre de 2024 y la dana había sumergido varias zonas de la provincia de Valencia. "Yo me dije: 'Tengo que ir, son amigos y es mi club'", cuenta a EL MUNDO.
Así, en unas horas y sin esperar un mandato público, desde su residencia en Canarias se dirige a Valencia, primero vía Madrid y luego, ante el colapso de las líneas ferroviarias, en coche desde Barcelona. "Cuando llego, la primera sensación es que estaba viendo lo mismo del desierto, como si volviera a estar en Dajla. Me encuentro la peor situación que podía imaginar", apunta. Tardan tres días en localizar a su entrenador, Hugo Sáez, uno de los fundadores del club, y a varios de sus compañeros, por las dificultades que entrañan las comunicaciones en la zona afectada.
Afortunadamente, no hay daños personales que lamentar, pero son muchos los desperfectos materiales que sufren los miembros del equipo: coches, negocios, casas... El polideportivo en el que se sitúa la piscina de sus entrenamientos termina arrasado, pero el vaso y los vestuarios, de manera milagrosa, se salvan de la catástrofe. "Nuestras instalaciones las usaron los voluntarios para ducharse, dormir, comer... aunque teníamos piscina no podíamos entrenar", explica Sáez sobre un club que cuenta con 110 deportistas federados, de los que 96 fueron directamente afectados por las inundaciones.
"salir del barro"
Blasco pasó 41 días trabajando y ayudando en Valencia cuando su plan vital pasaba por entrenar para el Campeonato de España Master que se celebraba en Valladolid en febrero de este año. Después de haber estado en Siria, Gaza y Marruecos, las consecuencias psicológicas le llevaron al límite. "Me planteé abandonar la temporada", revela. Y a eso se sumó Valencia. "La conversación más difícil fue cuando nos tuvimos que poner a entrenar, a todo el mundo le daba igual, 41 días en la dana y nadie tenía ganas", añade.
Voluntarios del club, en las calles inundadas.E.M.
Así que el Club de Natación de Aldaia retoma los entrenamientos en la piscina de la población limítrofe de Alacuás. Apenas dos días a la semana, cuando una preparación para un campeonato requiere seis como mínimo, y en horas intempestivas. "Lo hacíamos en apenas dos calles, con 17 deportistas en cada una", apunta Sáez. Pero la gente comienza a agradecer volver a la rutina, a la normalidad, a "salir del barro". "Al haber estado limpiando y desescombrando, se había trabajado involuntariamente la fuerza durante el periodo de inactividad", cuenta Sáez, además de fundador, entrenador en el Aldaia.
Mientras, Blasco vuelve a Canarias y comienza a entrenar por su cuenta, sin presión. "Inicié la temporada como si fuera septiembre. Suave, sin aspiraciones", admitiendo que poco a poco se empezó a "sentir mejor" y los tiempos empezaron a llegar. "El entrenamiento me sirvió de alivio, descargué toda mi frustración en él", añade.
Llega la primera competición en diciembre, el campeonato de España absoluto de Salvamento y Socorrismo. El Club de Natación Aldaia se presentó gracias a un autobús que les proporcionó la Federación Valenciana de Salvamento y Socorrismo, porque la gran mayoría de los participantes habían perdido sus coches en la dana. "Aunque apenas entrenamos, fuimos a competir para desconectar, por quitarnos el barro de la cabeza", desvela Sáez.
Récords de España
En esos campeonatos, Carlos Coronado consiguió dos medallas en categoría absoluta en las pruebas de 100 y 200 metros combinadas. En los siguientes, también de España pero de categoría Máster (a partir de 30 años) celebrados en febrero, el Club de Natación Aldaia se llevó seis preseas. Eduardo Blasco consiguió el oro en 50 metros remolque y, además, batió el récord de España. "No sé cómo lo hicieron. Le he estado dando mucho al coco con todo esto y le doy mucho peso a la preparación psicológica. Una explicación razonable no hay, la mente es un arma importante para competir", intenta explicar Sáez.
Carlos Coronado, con su medalla de oro.E.M.
Blasco, con su oro y récord de España habla de la resiliencia, de la importancia de mantenerse centrado para "superar situaciones complicadas". "Siempre hay que intentarlo porque uno nunca sabe qué puede salir si lo intenta", concluye el deportista y buzo de rescate. Nunca un club se había levantado del barro con esta fuerza. Ahora, Coronado, uno de los mejores nadadores del Aldaia, nadará en los próximos World Games en China (una especie de Juegos Olímpicos de deportes no olímpicos). "Nosotros, que somos de salvamento, nos ha ayudado a mejorar como personas", apunta Hugo y más después de, como dice, "estar con la sensación de tenerlo todo controlado a no tener nada".