Un gol de García Pascual atenúa la grave crisis del Sevilla y le deja cerca de la permanencia

Un gol de García Pascual atenúa la grave crisis del Sevilla y le deja cerca de la permanencia

Actualizado Martes, 13 mayo 2025 - 23:35

En el descanso se habían revitalizado en la grada los gritos contra el presidente y el director deportivo. Al regreso de Vigo, donde el Sevilla perdió 3-2 ante el Celta, los jugadores durmieron en la ciudad deportiva debido a la amenaza de los ultras. La atmósfera en el Sánchez Pizjuán era de extraordinaria tensión después de que la amenaza de perder la categoría se hubiese hecho real. La llegada de Joaquín Caparrós no había frenado la caída: dos puntos de 12 posibles antes de la visita de la Unión Deportiva Las Palmas en la noche de este martes.

Los nervios dominaron a ambos conjuntos en la primera parte. Los canarios llegaban a Sevilla en una situación dramática, obligados a todo para no quedar casi sentenciados. Tras la derrota, si el Alavés vence al Valencia este miércoles, serán equipo de segunda división. El tanto salvador de los locales lo marcó de cabeza García Pascual en el minuto 58, tras un golpe franco lanzado por Suso que prolongó Agoumé de cabeza para que el goleador se elevase por encima de la defensa y enviase el balón a la red.

En el minuto 77 el árbitro anuló un gol a McBurnie por falta previa de Cardona sobre el guardameta Nyland, una decisión muy protestada por los jugadores de Las Palmas y su técnico, Diego Martínez.

Desenlace angustioso

El tramo final del encuentro se vivió con angustia entre los aficionados, que olvidaron por unos instantes la reprobación a la directiva por un fervoroso apoyo a su equipo. Los visitantes atacaban de manera desesperada. El Sevilla esperaba terminar de resolver el partido al contragolpe. Caparrós transitaba por la banda, con la lógica inquietud.

Fueron 12 minutos de prolongación. Sandro tuvo oportunidad de lograr la igualada con un lanzamiento de falta. Supo sufrir el Sevilla, que si el Villarreal gana al Leganés se asegurará continuar en primera después de una temporada muy convulsa que acabará dejando cicatrices. Tras la celebración, resurgieron los gritos de "¡Junior vete ya!", pidiendo la renuncia del presidente.

Carlos Corberán, el devoto de la Virgen que resucita al Valencia con precisión de cirujano: “Está muy responsabilizado”

Actualizado Viernes, 4 abril 2025 - 23:08

La tarde del 29 de mayo de 2022 se jugaba en Wembley la final de los playoffs de ascenso a la Premier League entre el Nottingham Forest y el modesto Huddersfield Town, que entrenaba un técnico valenciano de 39 años: Carlos Corberán. En la grada se sentaba Miguel Ángel Corona, director deportivo del Valencia, que quería ver con sus propios ojos cómo se comportaba un entrenador del que ya se hablaba mucho en Inglaterra. Por entonces, el Valencia tenía hilvanada la llegada de Gennaro Gattuso y a Corberán se le escapó aquel ascenso con un gol en propia puerta, pero entró en la lista de candidatos al banquillo de Mestalla. Una nómina que siempre debe ser amplia, porque desde la llegada de Peter Lim, el puesto es una trituradora.

No fue hasta mitad del pasado mes de diciembre cuando las puertas del Valencia se le abrieron de par en par. No era fácil tomar las riendas de un Valencia hundido y en una dinámica que le conducía a Segunda. Corberán, que jugó de portero en la cantera y al que su abuelo llevaba a Mestalla, no huyó. Tenía experiencia suficiente y fe, tanta como en la Virgen de los Desamparados, de la que es devoto. 101 días han pasado desde la madrugada del 25 de diciembre, cuando el club anunció su fichaje, con el equipo colista, con sólo 12 puntos. En los siguientes 12 partidos de Liga ha sumado 19, repartidos en cinco victorias -todas en un Mestalla a rebosar- cuatro empates y sólo tres derrotas ante Real Madrid, Atlético y el humillante 7-1 frente al Barça, casi repetido después en Copa (0-5).

Para salvarse, el Valencia necesitaba una segunda vuelta impecable, para remontar los siete puntos que se habían abierto con la salvación. Y lleva camino de ello. Con los resultados del segundo tramo de la competición, el equipo sería cuarto y estaría en puestos Champions, sólo por detrás de Barça, Betis y Madrid.

El 51% de los puntos

El dato más significativo lo aporta su rendimiento frente a los rivales directos. En estas 12 jornadas, ha sumado 15 puntos más que el Valladolid y Las Palmas, 10 más que el Leganés, nueve más que el Alavés y cinco más que el Espanyol.

El valenciano, además, es el técnico que más ha mejorado a su equipo de los que llegaron con el campeonato empezado. Ha sumado el 51% de los puntos, cifra que no alcanzan Diego Martínez, Eduardo Coudet, Diego Cocca ni Álvaro Rubio. Por eso es uno de los técnicos revelación.

Metódico, reflexivo y siempre dispuesto a mejorar, supo hace un año que era el momento de dar el salto a LaLiga. Como hace con los jugadores, detectó sus puntos débiles y los trabajó. Desde la comunicación, porque nunca había dado una rueda de prensa en castellano, a la necesidad de hacer sonar su nombre en España, algo que años en la Championship no le habían garantizado pese a su buen trabajo.

«¿Cuánto cuesta un descenso?»

El pasado verano fue Las Palmas quien tuvo su nombre sobre la mesa y el Valencia lo supo, pero la opción era darle a Rubén Baraja la renovación que se había ganado. El mal arranque de curso lo cambió todo. En noviembre, el club ya pensaba en buscar un relevo o la permanencia sería imposible. Negoció con Quique Sánchez Flores, pero viró hacia Corberán. De hecho, su nombre fue el único que se transmitió a Singapur con una coletilla que nadie sabía si se aceptaría: había que pagar casi tres millones de cláusula para liberarle. «¿Cuánto cuesta un descenso?» fue la respuesta que se recibió, casi retórica, porque se dio luz verde a la operación.

De Corberán convencieron dos frases que escucharon los dirigentes del Valencia en la primera conversación. «Vengo a trabajar con lo que tenga», les dijo. Eso suponía un alivio para un club que nunca sabe si puede acudir o no al mercado. Se movían entonces, pero sin garantías de acceder a cesiones como la de Umar Sadiq.

La segunda frase se ha demostrado aún más cargada de sentido: «La mejora en el campo siempre viene de la mejora individual». Es un mantra que repite y que ha traducido en charlas individuales para potenciar a Javi Guerra, Barrenechea o Diego López, a quien mandó al banquillo una tarde y marcó las cuatro siguientes. «Va tieso y lleva a todo el mundo tieso», aseguran. Para rescatar al Valencia ha actuado con precisión de cirujano y quienes le rodean lo definen como «minucioso» y «exageradamente responsabilizado», tanto que pasó la noche tras las derrota ante el Barça en su despacho en Paterna. Pese a las bajas y los 17 años que lleva el Valencia sin ganar en el Bernabéu, no quiere humillaciones. Para los creyentes como Corberán, las virtudes cardinales son prudencia, justicia, fortaleza y templanza. Él las exhibe todas.